XXXIV. Un Dia de Trabajo.
- ¿Entonces se divirtieron? – He dicho.
- Si! La piscina era enorme y el agua estaba templada… - Haru no ha parado de hablar sobre su día en la piscina con Gou, creo que es la primera vez que mueve tanto la boca en un día.
- Ja ja ja… Que bien. Por fin encontraste algo productivo en esos cursos.– Le he dicho en tono de broma a Gou.
- Oye! Yo siempre hago cosas productivas.
- Además siempre me ha echado una mano desde que llegue a Iwatobi Rin… - Ha completado Haru.
- Gracias Haru! TU si eres AMABLE! – Me ha dado una mirada sarcástica.
- Me gustaron mucho esos cursos, tal vez vaya de nuevo otro día. – Ha dicho Haru.
- AH! Ahora que lo recuerdo… ¿Tú no ibas a dar un curso de “Seguridad Vial” en el jardín de niños donde trabaja Nagisa? – Rayos! Lo había olvidado por completo.
- ¿En serio? – Haru me ha mirado con ojos de admiración. - ¿Puedo ir a verte?
- E..Etto no es p…para tanto… - Las manos me ha comenzado a sudar mientras un ligero sonrojo me recorre la cara.
- ¿Alguna vez has visto una clase de “Educación y Seguridad Vial” Haru? – Gou le ha preguntado.
- Ummm… - Ha intentado rememorar. – No… Creo que no. Por mi “hogar” no suele haber tantos vehículos. De hecho no hay ninguno.
- Entonces ve con Rin! ¿Seguro que no es molestia, verdad? – Me ha vuelto a echar una mirada violenta, como si estuviera vengándose por la frase de hace rato.
-N…No Por supuesto que no. – De nuevo Gou me ha volteado la jugada.
- ¿Tu no vienes Gou? – Ha dicho Haru.
- No creo, es dia de escuela, así que no creo poder faltar… pero si vas tu ¿Me lo contaras todo, cierto?
- Ja ja ja De acuerdo. – Ha dado una risilla, como si se rieran de algo que solo ellos saben. Me siento algo excluido de su broma.
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- OYE TU! ¿Qué haces aquí, todavía? - He escuchado una molesta voz detrás de mí, mientras me dirigía hacia mi oficina.
- Tora… - He mascullado ese nombre entre mis dientes, como si se tratara de la peor de las pestes. He dirigido mi vista hacia donde se encontraba el. – Tora, no sé si lo has olvidado pero soy tu superior ¿Desde cuándo nos hablamos de “Tu”?- He dicho tratando de controlar mi enojo.
- Vale, Vale! Pero es que decir “Comandante Yamazaki” todo el tiempo es monótono, largo y aburridoo~ - Lo ha dicho con naturalidad.
- Recuerda que estas de servicio no de vacaciones… - Le he lanzado una mirada de advertencia, la cual parece que ha captado. – Bien… - He suspirado.- ¿Qué necesitas?
- Nada en especial, solo quería saber porque el “Jefe” trabaja horas extras….
- No se llaman horas extras se llama “comprobar que todo esté en orden”.
- ¿Y lo está?
- No es necesario que tú lo sepas… Que te hayan aceptado como “Aprendiz” * no te hace necesariamente mi compañero o subordinado…
- OH! Incluso para dar una respuesta eres áspero… -Ha puesto los brazo detrás de la cabeza. – No puedo creer que Matsuoka te haya soportado tanto tiempo. – Me ha sorprendido su contra jugada, pero solo he soltado un chasquido de dientes en forma de burla, después de todo no soy “áspero” con todo el mundo. – Pero… - Ha desviado la vista. – No eres el único que no me ve como un compañero… En este lugar yo soy más como un perro de caza…
- Vaya! Me sorprende! – Me ha visto con una mirada interrogativa. – Incluso un idiota como tu tiene sentimientos de soledad je je je.
- No soy el único… - Ha dirigido su mirada a mí. - ¿Verdad?
- No tengo idea de que hablas…
- El solo hecho de ser el “Jefe” ya te hace una persona bastante solitaria. – Ha habido un silencio momentáneo. – A demás de Matsuoka y el Jefe Zhen, no te relacionas con nadie más, por eso cuando ninguno de los dos está presente, tu ni siquiera te molestas en mirarnos ¿Cierto?.
- Puede que en parte sea verdad lo que dices, pero no es la verdad absoluta.
- ¿Y cuál es la verdad absoluta, según tú?
- “No es necesario que tú lo sepas”… Perro… - Si él fuera Rin sabría que acabo de jugarle una broma, desgraciadamente él no es Rin y probablemente mi broma le ha parecido más un ataque. Aun así la risa me ha invadido internamente.
- BIEN! Pues este perro sabe cuándo debe irse… - Se ha puesto colérico.
- Ja Ja Ja! Está bien, podrás ir a corretear tu cola tanto como quieras después de que me respondas algo. – Ha hecho una rabieta interna, pues sabe que no pude negarse a responder. - ¿Trabajaste en el pasado con el jefe Zhen? ¿O lo conoces de algún lado?
- ¿Eh? – Se ha sorprendido. – No lo sé…
- ¿No lo sabes?
- Quiero decir… siempre “trabaje” para tipos sin rostro, quien asegura que alguno de MIS jefes no fue UNO tuyo.
- …. – No he querido responder, pues no tengo nada más que decir. Pero es algo raro que “No sepa” pues en uno de los oficios que me entregaron al inicio estaba escrito explícitamente que él era un desertor de los subordinados del jefe Zhen.** Algo no encaja en esta historia.
- Bueno, si es todo me voy… “necesito ir a corretear mi cola” – Se ha ido sin más interrupciones, de verdad que no sabe sobrellevar una broma ese niño. Me he dirigido a mi oficina para reflexionar pero aun así no he encontrado una coherencia en esta loca novela.
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La noche ha pasado realmente tranquila, Haru casi no se ha movido, incluso llegue a pensar que estaba muerto, pero al sentir la respiración de su pecho me tranquilizaba. De verdad se agotó con esos talleres.
A la mañana siguiente; después del desayuno; nos hemos preparado para ir al jardín de niños donde trabaja Nagisa. Me he tenido que arreglar “Extra” este día, pues cuando se trata de “asuntos oficiales” donde agentes de la policía deben acudir, es obligatorio vestir el uniforme policial. Algo que es incómodo para mí, dado que yo no soy “policia”y yo no uso uniforme. *
Aun así, con cierto recelo me he puesto el uniforme y alistado para irme.
- ¿Estás listo Haru? – Gou ha prácticamente gritado desde la planta baja al primer piso.
- Si!... – Ha bajado entusiasmadamente las escaleras, vistiendo un lindo conjunto de tonalidades pastel. - ¿Nos vamos? – Se ha acercado tiernamente a mí, pero; aunque lo veo siempre; me he quedado embobado con su aspecto.
-¿Rin?
- Ah! S…Si! Vámonos ya!. – He intentado concentrarme en algo más, pero inevitablemente termino enfocándome en Haru siempre.
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Hemos llegado después de un rato al jardín de niños; Gou nos ha dejado a mitad de camino; no sin antes murmurarse montonales de cosas con Haru.
- Bien llegamos Haru… - He señalado la escuela con un gesto formal.
- WOW!! – Haru se ha “maravillado” con la pequeña escuelita. - ¿Aquí es?
- Si, Jejeje ¿Jamás habías visto algo así? ¿En el mar no educan a sus críos?
- Si… pero las escuelas son más… ¿“Privadas”?
- ¿Privadas?
- Quiero decir que no hay tantos niños, solo tienen el personal necesario y aunque hay mucho espacio… todo luce igual.
- ¿Azul?
- ¿Azul? - Ha puesto una cara de duda.
- Ja ja ja … - Al parecer no ha captado la pequeña broma haciendo referencia al “color azul” del mar. – No importa, apresurémonos; tengo que hallar a Nagisa.
Hemos entrado y educadamente saludado al personal del plantel, no he tardado mucho en encontrar a Nagisa; me he ahorrado la presentación pues Haru y él ya se conocían.
- Buenos días Haruka! Hace tiempo que no te veía. – Nagisa ha saludado.
- Igualmente. – Lo ha dicho con su típico tono sereno.
- Je Je tu nunca cambias Haru! Vengan es por aquí. – Nos ha guiado a un salón bastante amplio. – Esta es el “aula de usos múltiples” aquí se suelen reunir padres de familia y alumnos.
- P…Pa..Padres?! – Un escalofrió me ha recorrido la espalda. – Nagisa! Tu no mencionaste nunca que habría PADRES!!.
- Es que sabía que si te lo decía, te echarías para atrás o mandarían a alguien más cuando yo quería que fueras tú.
- Nagisa… - He tocado mi entrecejo para evitar fruncir el ceño. – Yo me volví detective justamente para evitar este tipo de cosas, yo…
- ¿Te da miedo hablar en público? - Haru ha preguntado inesperadamente. Hubo un momento de silencio entre los tres, hasta que Nagisa lo rompió con una carcajada.
- ¿¡De que te ríes Nagisa!?
- De tu expresión ante la pregunta de Haru.
- N…No es que tenga miedo a hablar en público…. Es solo que… no estoy acostumbrado. – He desviado la vista. – Hace mucho que no hablo con “civiles”. El único lenguaje que he estado ocupando en todos estos años es el que uso en mi trabajo y el que utilizo con ustedes. El primero es formal, rígido y duro, mientras que el segundo es demasiado informal y vulgar. No tengo un punto medio.
- Ummm… ya veo. – Ha dicho Nagisa. – Pero no te preocupes! No estarás solo, yo y otra maestra estaremos apoyándote además, no creo los padres de todos los niños venga. Solo algunos tienen tiempo a esta hora.
- Además sería una pena no poderte ver en acción ya que estamos aquí. – Haru ha completado con una voz inocente.
- Verdad que si Haru? – Nagisa ha tomado sus manos en forma de consuelo. – Pero que se le va a hacer, es una lástima tendré que ir a decirle a los otros que…
- Espera! – He actuado por pura inercia. – Esta bien… lo hare. – Nagisa y Haru estaban a punto de festejar cuando los he interrumpido. – PERO… tu tendrás que ayudarme!. –Lo he señalado.
- CLARO!! Ya te lo había dicho. – Ha puesto una sonrisa radiante. – Ven!! De daré unas pautas para hacer más fácil tu trabajo y relajar tu nervios. – Me ha guiado al salón de los maestros.
- ¿Haru? – Parece un poco distraído. – Nagisa y yo tardaremos un poco preparando esto, porque no te das una vuelta por el colegio. ¿Estás de acuerdo? – He visto a Nagisa.
- Por supuesto Haru! Deberías ir ahora que no han llegado los padres y los pasillos están libres. Estoy seguro de que te encantara. – Haru se quedó pensando un momento, dudando. – Además~~ - Nagisa ha puesto una sonrisa pícara. – Porque no examinas el colegio de SUS futuros retoños!
- ¿¿F…Futuros “que”?? – Es una de las pocas veces que he visto sonrojarse a Haru en público, en cambio yo, la palabra vergüenza no es suficiente para expresar mi expresión.
- Es que como llevan bastante tiempo juntos… Yo pensé que ustedes… - Nagisa no se ha limitado a reír y hacer gestos traviesamente; para hacer referencia a que nosotros teníamos algo.
- B…Bueno, yo me adelantare…! – Haru ha salido hecho un bólido.
- Ja Ja Ja entonces Haru-chan también siente vergüenza. – Ha seguido riendo un rato mientras preparaba los materiales. – Aunque deberías irlo pensarlo Rin.
- ¿P…Pensar qué? – No quiero que Nagisa me avergüence más con sus bromillas.
- En ser padre obviamente! – He sentido como si me hubieran tirado un balde de agua fría. – Sé que eres joven y aun tienes tiempo para pensarlo, pero el tiempo pasa más rápido de lo que crees. Además, si ya has encontrado a la persona indicada ¿Por qué no hacer una familia con ella? No dejes pasar la oportunidad tan fácilmente; que el destino solo toca una vez a la puerta.
- Voy a pensarlo. – Me he dirigido a otro salón para dejar las cosas que habíamos hecho. –No es tan fácil Nagisa… - He susurrado para mis adentros.
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He salido apresuradamente de donde se encontraban Nagisa y Rin, sé que lo que lo que dijo no iba con mala intención, pero dado que ellos no conocen “mi estado”, me ha dado un impacto más fuerte.
He intentado tranquilizar mi mente y calmar el sonrojo de mi rostro; mientras caminaba por los pasillos de la “Pequeña” escuela; según Rin. Caminando y observando por las ventanas de los salones, al ver todas esas pequeñas cabecitas corriendo de lado a lado en los salones, riendo y exhalando felicidad a su alrededor, no pude evitar sonreír ante tal ambiente, todo era tan inocente y puro.
- ¿Me pregunto si él será igual de alegre en este lugar? – Me he tapado la boca rápidamente esperando que nadie me hubiera escuchado, el sonrojo regreso. Ver tantos pequeños reunidos me hace pensar inconscientemente en el mío, cada día que pasa es un día más cerca de él, y también para decírselo a Rin. Me he quedado un rato más viendo embobadamente a los niños.
- Haru!... – Alguien ha dicho mi nombre. – Parece que te gustan bastante los niños.
- Mnnnn… - No he querido responder inmediatamente.
- Ven los padres y alumnos están por llegar, vine a buscarte. – Ha tomado mi mano un poco nervioso, pude sentir los pequeños temblores.
- ¿Sigues nervioso?
- Ehh! Je Je.. No..No… Yo solo… - He apretado su mano y sonreído al mismo tiempo. – Ah! Creo que estoy más nervioso por el hecho de que tú me estarás viendo que por los padres. – Lo ha dicho sin mirarme a la cara.
- ¿Eh?
- No me hagas repetirlo! Vamos, perdemos tiempo! – Me ha “jalado” hacia el salón rápidamente, no he podido evitar sentir cierta alegría ante su comentario, aunque también he sentido algo de culpa.
Poco después de que terminaran de arreglar todo, los padres y alumnos comenzaron a llegar, Rin se acomodó el uniforme y junto con Nagisa y otra maestra han dado la clase de seguridad vial. Yo me he quedado en el fondo del salón observando todo.
Ha ido de maravilla la clase, todo el mundo se divirtió e inesperadamente Rin resulto ser muy bueno con los niños, tanto; que al finalizar el evento muchos de ellos querían seguir junto a él, incluso hubo uno que otro que se colgó de su pierna, por suerte los padres y los docentes le han ayudado. Ha sido muy gracioso observar su expresión en el proceso.
- ¿Te divertiste? – Se ha acercado a mí.
- Je je bastante…
- Si! Como no te vas a divertir viéndome sufrir!.
- Ja Ja Ja no seas dramático…. Solo eran niños después de todo.
- Mira! – Ha puesto mi mano en su frente. – Estoy sudando frio! Eso no es gracioso… - Le he dado un beso en la frente.
- Esta bien… no me burlare más… - Hemos regresado a casa después de un breve descanso y el día ha terminado.
Aunque he pasado un buen rato pensando en el futuro, todas las cosas están corriendo a una velocidad increíble y yo no puedo detenerlas, así que lo mejor es que deje de prolongar lo inevitable.