∞ Titulo: "Distrito rojo"
∞ Autor:YUKI-NII.
∞ Género: Friendship
∞RantingNC17
∞ Pareja: SasuNaru
∞ N/ANaruto no me pertenece. Todo es de su gran autor, Kishimoto-Sensei
∞ Resumen: Sasuke va ahí, entre esas casas escondidas y personas recluidas. Sasuke va ahí, para encontrarse con un rayo de sol, para que le besen las heridas y le cuiden el corazón. Sasuke va ahí, porque es Naruto quien le espera, tras biombos casi trasparentes y kimonos resbalándole por la piel.
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Kiss me hard before you go
Summertime sadness
I just wanted you to know
That, baby, you're the best
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Al principio fue una obligación, algo que ambos debían de hacer si no querían fallar su objetivo principal. Su unión simplemente no se trataba de fusiones de clanes poderosos y aseguramientos de riquezas y castas. Casarse significaba entregar a todo a un futuro con grandes ojos y sonrisa tierna. Estar juntos era la fachada para traer al mundo al bebe que se convertiría en el hombre al que pasarle la batuta para continuar en un ciclo repetitivo, para no perder jamás el camino trazado antes que ellos y que seguiría dibujándose cuando ya no existieran mas.
Y lo lograron, tras tres años de intentos que eran prueba, error y fallo, por fin en febrero de 1900 el vientre de Hinata se convirtió en un depósito fértil en donde la semilla se encubaría. Fueron 8 meses y medio de mantener a la chica en cama bajo los cuidados más estrictos y un continuo monitoreo. Fue la victoria con olor a sangre, toallas perfumadas y ojos claros. Fue Kenshi siendo arropado por los brazos de su padre.
Dentro de la gran mansión, muy apartada de la parte en donde están todos los dormitorios y muy cerca de la entrada sur se encuentra un cuarto condicionado, con dos futones, velas, sake y una pequeña bañare. Tiene un biombo de donde cuelgas 3 kimonos y dos yukatas. La ha bautizado como la recamara azul, por el reflejo de la luz de la luna contra el lago que baña el techo de la misma. Se encuentra la mayoría del tiempo cerrada y solo la doncella que suele acompañar a Hinata tiene permiso para asearla.
Ella es avisada durante el atardecer si la habitación será ocupada, para que le dé el tiempo suficiente en dejar sabanas nuevas, piso lustrado e incienso de sándalo. Dos botellas de aceite para las lámparas y velas encendidas que iluminen el camino para llegar ahí. Ten- Ten, sabe el patrón que Hinata adopta, cuando la habitación azul va a ser utilizada.
Primero, come menos de la mitad de sus alimentos y se recluye por horas enteras en su jardín. Se pasa la tarde en la bañera y se toma un té como cena. Peina sus cabellos en una coleta alta y usa el kimono más bonito, se muerde las uñas y se esconde de Neji, como si le avergonzara que le viera. A las ocho en punto, sale por el largo corredor y camina directo hasta la última puerta.
Cuando ella la abre, Sasuke ya está ahí, recostado sobre uno de los Futones, con un brazo sobre los ojos y con sus hebras largas enredadas en la almohada. Ambos se ven, haciéndose una reverencia. Y todo comienza. Como un juego de roles, donde se dicen las palabras necesarias y se omiten los nombres. Hay pocos besos, nunca en la boca, eso sobre pasa los limites que ambos mantienen.
Hinata necesita de mucha fantasía y de mantener los ojos cerrados, Sasuke se llena de recuerdos y de olores lejanos. Y entra. La joven mujer enreda sus piernas sobre su cintura y se cubre la boca con una de las manos. Todo es caliente, rápido, le hierve el vientre y le colorea las mejillas.
El sudor comienza a caer de la punta de la nariz de Sasuke y de su barbilla, Hinata alza una mano hasta su rostro y lo limpia. Se sonríen apenas, como si ignoraran lo que están haciendo y pretendieran que solo se miran a través de la oscuridad, buscando a alguien que no está ahí, pero que se encuentra cerca, a solo unos metros.
Hinata a veces piensa, la forma en la que Neji se vería, ondeando las caderas, pegando su torso a sus abultados pechos, con el cabello castaño revuelto y con su voz pronunciando su nombre. Y lo imagina, sus labios, su olor, su sabor, su mirada, el sonido de su acelerado corazón. Y se viene, con el nombre de Neji retumbándole en la garganta y apretando los labios para que no se le escape.
Para Sasuke, que se apoya sobre sus brazos a los costados de la de ojos perla, es un ritual más difícil, tiene que cambiar el cuarto entero por una habitación de Shinjuku. Con pocas velas y el calor sofocante, que el shoji este entre abierto y que el tatami deje tatuajes sobre una piel canela. Tiene que implantarle a Hinata un miembro que no está entre sus piernas y acariciarlo solo en su cabeza. Cortarle el cabello y ponerle tinta azul a los ojos. Continua moviéndose entre las paredes resbalosas que compite contra la entrada al paraíso que Naruto siempre estrecha para resguardarle adentro.
Cuando Hinata llega al final, Sasuke se apresura en hacer lo mismo. Saliendo junto a tiempo para tomarse la polla entre las manos y dejar a su semen empaparle las palmas y los dedos.
La respiración agitada de ambos es el único sonido que se escucha. Sasuke jala una manta y cubre el cuerpo desnudo de Hinata, se mueve a un lado y descansa, sentado sobre sus piernas, para así recuperar fuerzas e irse al baño personal que se haya adjunto. Las ondas del agua en el lago forman figuras en el techo, las sombras de los peces complementa el espectáculo.
Sasuke, a veces se pregunta porque continúan haciendo algo con lo que ya cumplieron. Luego recuerda que están solos y que únicamente se tienen a ellos dos. El uno para el otro, como un sostén programado, nunca amado. Ambos se respetan, son compañeros de penas y se tratan con amabilidad. Viejos amigos con vidas aparte y al mismo tiempo compartidas.
Cuando el sol sale, llevándose a la habitación azul, Sasuke se pone un yukata y camina de forma pausada por el corredor que pasa las cocinas. Unos metros más allá se encuentra la habitación de Naruto. Sasuke sabe que tiene el sueño pesado, que es bueno en desvelarse pero un desastre para despertar temprano. Se desliza con cuidado, en la pequeña abertura que ha dejado para el shoji y le observa.
Naruto suele adoptar una posición fetal abrazada de la manta y la almohada, una costumbre que se instalo cuando dormían juntos y el de ojos azules depositaba su cabeza sobre su pecho y soñaba arrullado por el latido de su corazón.
Sasuke, se hinca sobre el suelo y gatea hasta llegar al rubio. Le despeja el cabello del rostro y le delinea los labios, hay rastros de saliva por las comisuras y un olor dulzón a duraznos. Sasuke mira los huesos de la fruta sobre un plato. Sonríe levemente y deja caer su mano sobre las costillas de Naruto.
r13;Hoy lo he hecho con Hinata. He dejado que me tocara antes de venirme y le besado esos lugares que a ti tanto te gustan r13; murmura Sasuke, Naruto suspira, revolviéndose un poco, y él espera sin retirar la mano. El rubio no despierta r13;Pero a ti parece no importarte. Me has estado evitando esta semana, sabes que no puedo perseguirte, que Itachi es un halcón sobre nuestras cabezas y aún así, continuas mirándome de esa forma.
Sasuke se yergue sobre sus rodillas, mirándole un poco más. Hay un gusto retorcido en hablar con honestidad justo sobre el rostro de Naruto y que este parezca estar ahí, como una muñeca plantada a su caprichos y condiciones. Esperando paciente el momento en que la muñeca tome vida propia y se rebele contra él, que le exija su poco cuidado y su poco amor, que le marque con besos y se lo lleve lejos, en lugar donde solo estén ellos dos.
Se levanta y se desliza por el mismo hueco. Naruto sigue durmiendo y Sasuke camina hacia su propia recamara con una erección entre sus piernas que se aliviara con agua fría, no soportaría ni un sueño mas en donde el verdadero Naruto no está.
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Estación. 7
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Lee ha ido ha recoger leña en el bosque, hoy es un día muy especial; es el cumpleaños del pequeño Kenshi. Y la mansión entera revoletea en actividades desde muy temprano. Neji se ha llevado al niño al pueblo para que no se entere de la sorpresa. Hinata ha tomado las cocinas para cocinar Natto* y Wagashis, tiene a mas de 10 mujeres lista para preparar el resto del banquete de la tarde y ayudarle con los dulces.
Naruto ha sido enviado a acompañar a Itachi para recoger el regalo del niño a los puertos. Ha amanecido con un gran sol, y los vientos de ese noviembre no son tan fríos, lo que le permite al de cabellos negros pasear por la ladera de la colina con libertad, sorteando conejos y uno que otro zorro que a veces intenta colarse al área de la mansión donde se encuentran las gallinas. Lee ríe con una ardilla que levanta las orejas y colas a cada paso que da y se acerca a ella.
Estira su mano, la que no tienen las ramas secas, para poder tomarla. Lee, se pregunta qué tan buena idea es capturar al pequeño animal para mostrárselo de cerca a Kenshi. Pero antes de que pueda siquiera lograrlo el ruido del follaje le obliga soltar su carga y la ardilla sale corriendo, asustada.
De entre el arbusto sale un confundido Gaara, con cara de fastidio y un rasguño sobre el brazo. Camina directo hasta él, con el ceño fruncido y los pantalones arremangados sobre los tobillos. Se ve que a estado caminando durante un buen tiempo, su ropa esta sucia y el sudor se le acumulan bajo la nuca.
Lee siente el pánico apoderarse de sus extremidades cuando el británico se para frente él y le mira fijamente.
r13;Necesito que me lleves de vuelta a la mansión, no sé como regresar
Gaara sabe, que su pedido ha sido un fracaso, cuando ve cómo es que el de cabellos oscuros se lleva una mano tras la cabeza y le hace una reverencia.
r13;Como jodidos se supone que se dice casa en este idioma de mierda. r13;El tono en la voz de Gaara solo hace que Lee, se encoja mas, tratando de hacerse pequeño y no aumentar la furia del invitado de clan Uchiha. r13;. Bien, bien, no importa. Debe de haber una manera para que tú me entiendas y podamos volver. Necesito un baño r13;. El pelirrojo mira a su alrededor, no sabe qué tan adentro del bosque se encuentran, ni como su caminata matinal sin Naruto le ha llevado hasta ese punto. Mira a Lee, que parece mas compungido que de costumbre. Es totalmente la imagen contraria que tiene de él, cada vez que le observa de lejos y parece tener ese sonrisa idiota todo el tiempo.
Lee, es mucho más alto que él, lo cual aunque suele ser normal en Londres, donde la mayoría le supera el 1.73 que él mide, en Japón en un suceso por demás extraño, Sasuke e Itachi apenas le sacan una cabeza, y la mayoría de las personas que trabajan en la mansión rondan su misma altura. Por eso alguien como Lee destaca con facilidad. Fue sencillo verle desde la distancia levantando ramas. Gaara de pronto siente un golpe mental sobre su frente. Las jodidas ramas. Mira hacia sus pies y recoge una. Se inclina a un lado y comienza a dibujar una muy mala versión de una casa y dos monitos de bolitas y palitos que los representan tanto al de cabellos negros como a él.
El japonés está atento a las líneas que Gaara traza en la tierra y como se detiene para mirarlo, como si le preguntara “¿entiendes?” y Lee asiente, lo que hace que el pelirrojo sonría con satisfacción.
r13; ¿Quieres regresar a la mansión? r13;Mientras su voz llega como sonidos inconexos a la voz del británico, Lee ha tomado otra rama para señalar la casa dibujada. Gaara nota el gesto y asiente.
r13;Si, eso. Volver a la mansión
r13; ¡Ossu! Yo te llevare de vuelta. Sígueme. r13;Lee le hace señales con las manos. No cree que sea correcto tocarle para guiarlo, mucho menos tomarle de la muñeca. Así que camina y se detiene para asegurarse que Gaara ha comenzado a perseguirle. Aprovecha para juntar la leña que ha dejado caer. El pelirrojo observa cada uno de sus movimientos.
Lee comienza a descender por la colina, a meterse entre los robles y cantar una canción. Gaara trata de grabar señales de su alrededor, el tamaño de las piedras, la forma del terreno, hacia qué lado está el musgo, en qué posición se ve el sol. No quiere volver a perderse. No quiere sentir esa sensación de terror y vacio por estar en un lugar extraño y no tener a nadie a quien acudir por ayuda. Cuando se acercan a la orilla del riachuelo y el paisaje se vuelve más familiar para el pelirrojo. Gaara se detiene frente a este.
r13;Arigato.
Y dicho esto, se inclina, haciendo una reverencia que hace que Lee suelte de nuevo todas las ramitas secas que ha ido a buscar como leña de reserva. Gaara alza una ceja, sin entender la reacción. Sin embrago no la cuestionar y sigue el camino que ya conoce hacia la mansión. Esa hora ha sido especialmente traumática. Gaara no tiene ni idea que le ha provocado algo muy parecido a Lee.
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Se baja del coche, siguiendo dos pasos por detrás a Itachi. Ir hasta el pueblo ha sido de gran ayuda ya que ha podido hacer una escala hasta el hostal de Ino mientras el Uchiha mayor arreglaba algo en un embarque que traía cosas de Alemania. Naruto se ha presentado frente a una rubia con lágrimas en los ojos y puños en alto, que lo ha estado golpeando mientras le decía lo imbécil que era por desaparecer por días y luego solo mandar un mensaje de que estaba bien.
r13; ¿Dónde te has metido todo este tiempo? Tu equipaje sigue aquí y pagaste una reservación de un mes. Si tu quieres puedo cancelarla y regresarte la diferencia por tu estadía. r13;Ino le ha tomado del brazo, conduciéndolo hasta el comedor principal. r13; ¡Shikamaru, hazte cargo de la recepción un momento!
r13;Vale, que ya te he oído, estoy cerca de ti, no tienes que gritar r13;. El castaño termina de bajar los dos escalones que separan el corredor principal con el comedor. Le da una mirada cansina a la rubia que gira su rostro como si no le hubiese escuchado y el chasquea la lengua. r13;Que problemática.
r13; ¿Acaso has dicho algo?
Ino, se detiene. Naruto siente de pronto la tensión densa en el aire. Así que ahora es él quien toma el brazo de la rubia para llevarle al comedor. Shikamaru vuelve a chasquear la lengua y lleva las manos a los bolsillos de su pantalón. Como si el enojo repentino de la dueña y su jefa no fuera nada que tenga que ver con él.
La rubia, hace un gesto con la mano y murmura cosas con la frente arrugada. Se alza el Kimono al pasar la puerta y toma asiento sobre un cojín. Hace un ademan con la cabeza para que Naruto le imite. Este cierra la puerta y se deja caer pesadamente sobre el tatami. Con la cabeza hacia ataras y los ojos cerrados. Ino, sonríe traviesa ante sus expresiones, de pronto Naruto siente que ha venido meterse a la boca de un lobo peligroso.
r13;Y ¿Qué es lo que ha pasado?
r13;Estoy viviendo en la casa del clan Uchiha. r13;Naruto, lleva sus brazos hacia atrás, para apoyarse y estirar un poco la rigidez de su espalda. Viajar con Itachi le ha tensado los músculos. Ino, se ha cercado un poco más, sacando una pipa de un escondite en su kimono y la prende. El olor de opio hace al rubio recordar a Tsunade r13;. Me han dado el trabajo de intérprete para Gaara.
r13;Me lo imaginaba. r13;Murmura la rubia, sacudiendo las cenizas de la pipa r13; ¿Es el extranjero, ese chico pelirrojo que ha llegado a la mansión? r13;Naruto asiente, Ino sonríe r13;. Es famoso. Una lástima que no pueda hablar bien el idioma de aquí. Deberías traerlo, me gustaría conocerle r13; la voz de Ino se ha vuelto aletargada, da una calada a la pipa y suelta el aire despacio entre sus labios que forma un circulo r13;Cuando ese hombre, Lee ha traído tu mensaje me pensé lo peor, ya habían pasado dos días sin saber nada. Que sepas que me debes como 3 años de vida por el susto que me has hecho pasar Naruto.
r13;No era mi intención, tebayo. Es solo que las cosas se fueron acumulando muy rápido.
r13; ¿Entre esas cosas esta el líder del clan? r13;. La sonrisa de Ino se pronuncia mas, Naruto le ve confundido.
r13;No sé qué tiene que ver Itachi en esta conversación. Además, he sido contratado casi bajo amenaza, no podía reusarme y regresar, no ileso al menos.
r13; ¿Itachi, amenaza? ¿De qué diablos hablas?
r13;De tu insinuación de las cosa que me mantuvieron ocupado. Obviamente
r13;Eres un poco lento ¿te lo han dicho? r13;Ino deja la pipa sobre la mesa, Naruto continúa sin mirarle, más cómodo en contar las secciones en el techo. Ino ha comenzado a irritarse r13;. El líder del clan es Sasuke, la persona que al parecer viniste a buscar ¿o me equivoco?
r13;Un poco, tal vez. r13;Susurra, con las orejas coloreadas de rojo.
r13;Mientes. En fin, el caso es que no deberías involucrarte con los Uchiha, son una de las familias más ricas de este poblado. r13;el tono de voz de Ino ha bajado, casi siseando las últimas palabras. Naruto gira su rostro hacia ella, que ha levantado una mano y enumera con sus dedos a las grandes familias de la región r13; De ahí le siguen los Hyuga, los Inuzuka, los Aburames, y el raro de Sai.
r13; ¿Sai? ¿No tiene apellido?
r13;Claro que lo tiene, pero simplemente no se sabe, se dice que también pertenece al clan Uchiha, pero aún no se ha aclarado nada. Solo llegó un día, tomo posesión de una de las mansiones que le reconocía como legitimo dueño y se instalo. Como tú, pero sin la mansión por supuesto.
r13;Extraño.
r13;Pienso lo mismo. Sospechoso, justo como un rubio extranjero que esta con cara de tonto frente a mí. r13;Ino nota como Naruto ha cuadrado los hombros r13; ¿Qué es lo que realmente viniste hacer a Nagasaki, Naruto? Todo esto es… Desconcertante por llamarle de alguna forma. Apareces buscando a alguien, cuando encuentras su casa resulta ser el líder de medio pueblo y me dijiste que no tenias ningún tipo de relación con él ni su familia. ¿Entonces para que buscar a alguien que no te interesa?
r13;Yo nunca dije eso r13;. Naruto se mueve sobre el lugar adoptando una nueva posición con las piernas cruzadas, y las manos en el hueco que están formas, tiene los labios fruncidos y muy poco tiempo. Ino parece ser la única persona que puede escuchar la locura de sus decisiones sin juzgarle mucho. Naruto mira el aspecto opaco del sol y después a la rubia r13;. No me estas poniendo las cosas fáciles si me atacas a preguntas y regaños.
r13;Te mereces eso y más. Desapareciste, así que tengo todo el derecho de regañarte y ser mala contigo, tengo que rellenar el papel de tu madre, y créeme, si yo lo fuera ya te hubiera golpeado en esa cabeza dura que tienes.
r13;Eso no pasara. Oka-chan
r13;Demasiado joven para tener un hijo de tu edad y además idiota.
r13;De verada que estas molesta tebayo r13;Naruto sonríen ante el puchero de Ino que le amenaza en echarlo si sigue burlándose de ella y sus sentimientos. r13;Debes prometer que guardaras el secreto. Así que estira tu dedo meñique y haz el juramento.
Ino le mira por un momento, como si quisiera a resistirse y no hacer esas cosas de niños. Pero su curiosidad es más grande aún, así que entrelaza su dedo con el del rubio y canta la canción que ha oído de los pequeños de las cercanías. Nauro se da por satisfecho y comienza a relatarle, como es que conoció a Sasuke, omitiendo la parte del distrito rojo y dejándolo solo como un amigo que le salvo de un gran problema.
La rubia entonces llega a la conclusión de que tienen la típica amistad, niño rico, niño pobre. Que por el bien de Sasuke ese lazo fue roto. Si las cosas son así, entonces ¿por que volverá buscarle?
r13;Si todo lo que has dicho es cierto, ¿Por qué viniste a Nagasaki? Si lo quieras proteger, déjame decirte que no vas por buen camino, esto de las castas y clanes es más complicado de lo que piensas.
r13;Eso ya lo sé tebayo r13;Masculla, sintiendo el temblor sobre sus hombros, de la rabia, la furia y la injustica vomitándole en el estomago r13;. Pero era para asegurarme de algo. Tenía que irme en cuanto lo viera pero todo se volvió más difícil y termine siendo el intérprete de Gaara, lo haré hasta que él tenga que marcharse de nuevo a Londres.
r13;Creo que es normal, si fueron amigos. El ayudar a Sasuke-Kun fue algo que simplemente surgió. No podías negarte. Pero lo que sigo sin entender es ¿Qué es lo que querías ver en Sasuke- Kun?
r13;Yo solo quería asegurarme de que él, realmente fuera feliz con esta vida, Tebayo.
Naruto esta sonriendo, con un brillo en los ojos que nunca le ha visto. Ino siente como los sentidos se le encandilan. Puede jurar que de pronto la habitación se ha iluminado y de que su rostro está más caliente. El yukata domestico que el rubio trae le resbala por un hombro, Ino puede adivinar las marcas de los pectorales que el duro trabajo le ha dejado. Ino piensa, que es media mañana pero los rayos solares colándose entre los cabellos de Naruto le redibujan el aura.
Ino no sabe si el rubio se ha sentado en ese sitio intencionalmente para estar en un lugar cálido y con buena luz o es el sol el que ha salido a buscar a Naruto.
Y este, que es ajeno a ese pensamiento. Se levanta, y le dice que es hora de retirarse. Ino solo asiente, dejándole marchar más tranquila.
Cuando el rubio llega al muelle del embarque, Itachi ya tiene un gran paquete de color caramelo y cordeles. Así que se montan al auto, él manejando, el Uchiha disfrutando de la sombra de los arboles a un lado de la carretera rural. Llegan a la mansión antes del medio día. Naruto se encarga de guardar el coche, Itachi desaparece por el corredor.
Cuando abre las grandes puertas de madera del cobertizo distingue la figura de Neji, se encuentra dándole la espalda a Hinata que parece a punto de llorar, el rubio es despistado, necesita rectificar varias veces las cosas y no entiende de insinuaciones solo de palabras directas pero Naruto puede reconocer, cuando algo importante es escondido por dos personas. Cuando un secreto se sale entre las manos porque es demasiado, el amor es demasiado y se desborda por las curvas del corazón.
Hinata, con la mirada baja pasa por su lado.
r13;No diré nada
Es lo que único que alcanza a decirle antes de que esta se cuele por el espacio entre el auto estacionado y las puertas. Neji, sin embargo no se ha movido, sigue en la esquina oscura del cobertizo. Naruto no sabe si es por haber sido descubierto por él, una persona que parece odiar, o por el shock de haber llegado en el momento más importante para ellos dos y ha acabado por arruinarlo.
Naruto, se traga el nudo que se forma en su garganta y se recarga sobre el cofre del auto. Esperando paciente a que el castaño reacciones. No sucede.
r13;Lo siento r13;. Dice Naruto tan alto como su voz se lo permite, en ese lugar encerrado. Neji estrecha los ojos y le mira. El rubio no se intimida r13;Lo siento mucho tebayo. Que tu amor no vaya hacia ningún lado. De que te enamoraste de la persona incorrecta y de que no sea fácil seguir cuando esta tan cerca. Pero lo que no lamento r13;Naruto ha empezado a caminar, parándose justo frente al castaño, que tiene los labios fruncidos r13;Es esto.
Y el puño se alza, rebasa los 90 mph/s. Es un golpe seco que va contra la mejilla de Neji, que le hace tronar los nudillos a Naruto. Que hace que respira como un toro a punto de embestir. Neji se sacude la cabeza aturdido y se lanza sobre él, Naruto siente el peso de la impotencia cuando experimenta el dolor en su cuello al ser estrujado y recibe un golpe muy cerca de su hígado. Ambos caen, Naruto al doblarse del dolor, Neji por que el rubio le sujeto para sostenerse.
r13; ¡Que sabe un pueblerino como tú! ¿Quién te crees que eres para mostrarme compasión? No la necesito. No la necesito ¡NO LA NECESITO! r13;Neji boquea, busca aire como un pez fuera del agua, y continúa golpeando al rubio. Como si él fuese el responsable de todo. Del dolor, del rechazo, de esa vida que solo puede soñar porque ambos nacieron en la época equivocada, en la familia indebida. Porque el destino es así, un ángel de alas negras y sonrisa retorcida. Porque nadie puede luchar contra él. r13;Eres un idiota, extranjero bueno para nada, que solo ha hecho algo bien en su vida, algo de que respetarse.
Naruto esquiva un golpe hacia su cara, moviéndose a un lado, toma impulso con los talones de su pies, Neji se ha instalado ha hojarcas sobre él, inmovilizándole los brazos y gritándole a solo centímetros de su rostro. Naruto flexiona sus piernas y calva las rodillas sobre la espalda del castaño, que grita al tronido de sus vertebras. Sus brazos son liberados y aprovecha ahora para alzar las caderas y derribar a Neji de encima. El cuerpo del castaño cae pesadamente y Naruto retrocede, gateando, alejándose de él. Cuando llega a la pared más cercana se apoya en ella, para incorporarse y tener la defensa lo más alto posible contra el otro.
r13;Ya te lo dije, no soy un pueblerino. r13;vocifera Naruto a la vez que se talla la mejilla izquierda. Se toma un costado de su estomago, arde, arde como mil demonios r13;. Ni siquiera puedo llegar a eso. ¿Y sabes por qué? Porque soy del distrito rojo. Te enteras, las Geishas por lo menos no tienen que vender sus cuerpos, ellas son artistas pero yo. Yo soy el depósito de viejos hombres amargados que engañan a sus esposas. Así que no siento compasión de alguien como tú, que solo juega con los sentimiento de los demás pero que es un jodido cobarde.
Naruto escupe un poco de sangre y saliva espesa. Neji, está sentado sobre el suelo. No le mira pero si le escucha.
r13;Entiendo cómo se siente ver a alguien desde lejos, con su vida ya hecha. Pero también sé que puedes cambiarlo todo, si esos es lo que ambos quieren, deberían poder ser felices, ¿Qué no es acaso eso una regla de vida tebayo? Poder ser feliz…poder…Neji por un carajo tienes que hacer algo, llévatela, fúguense, que se yo. Pero deja de ser tan patético.
r13;Tú no entiendes nada Naruto.
r13;Entonces explícamelo. Qué es eso que no entiendo.
r13;Eso es algo que no te incumbe.
r13;Pero lo hace.
r13;Tú y yo no somos nada. r13;Neji ha terminado sentado en el suelo, mirándolo no hay rabia ni frialdad en sus ojos, tan solo el escudo que el castaño levanta para que nadie traspase en su interior. Naruto está acostumbrado a derrumbar fortalezas y colarse hasta el último rincón.
r13;Tienes razón, no somos nada, pero eso es porque eres insoportable, estricto, y gruñón. r13;Naruto recarga su espalda a la pared r13; aunque no debe de ser tan malo si quieres a alguien como Hinata y esta a ti.
r13;Eres un idiota.
r13; ¿Ah? Tu también lo eres, además de mandón, y que te crees mejor. Nunca seria tu amigo, que lo sepas tebayo. r13;Naruto infla un poco las mejillas y se cruza de brazos r13; ¿Qué harás? Dime Neji, ¿Qué es lo que quieres?
r13;Ya te lo dije eso no es…
r13;No es de mi incumbencia y no somos nada. Eso ya lo has dicho, pero quiero saber que pasara contigo y Hinata
r13;Nada. No tiene que pasar nada, deja de ser un entrometido.
r13;No diré nada, lo prometí a Hinata. Así que r13;Naruto se incorpora con rigidez r13;Es mejor que tomen una decisión rápido o Itachi lo sabrá. Él es peligroso.
Neji no contesta nada, Naruto sale del cobertizo, con un auto a medio meter, con demasiados golpes y una fiesta de cumpleaños por empezar. Y sonríe, porque el amor de dos personas que solo están juntas por conveniencia han traído a una personita a este mundo. Kenshi no es responsable sobre los pecados de sus padres así como Naruto tiene en sus manos la única oportunidad para ser feliz.
Y se pregunta ¿Por qué continua, al igual que Neji, siendo miserable y patético? Simplemente debería irse, lejos. Naruto ve las puertas de la mansión abiertas y camina hacia la salida.
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