Me deje caer en la cama mas en cuanto recordé el lugar en el que estaba me senté rápidamente acomodándome decentemente, mi papá me miro algo molesto y yo solo le soporte la mirada un poco para luego girar hacia otra parte que no fueran sus penetrantes ojos esmeralda... y mi mente divagó por unos momentos a la duda que aun hoy en día me preguntaba, cómo había sido que yo tuviera ojos rojos cuando ninguno de mis padres tienen ojos rojos...
-¿tienes hambre?- escuche su pregunta mientras caminaba hacia otra habitación, al verlo yo asentí algo emocionado, ya llevaba yo algo de rato con hambre pero no quería hacerlo enfadar más de lo que ya estaba, así que me había contenido de decir algo, mi padre solo asiente y se va a la que supongo seria su cocina, espero unos minutos para poder moverme y entonces me levanto para observar el departamento de mi padre
-valla, comparado con nuestra casa esto realmente es pequeño- susurro mientras recorrió la habitación con cuidado de no tocar nada, mis padres me educaron que mientras que estuviera en un casa ajena debía de mantenerme tranquilo y no moverme de donde me dejaron hasta que se me dijera lo contrario pues podía molestar a la gente... el problema era que sabía que estaba con mi padre y no sabía cómo reaccionar ante el...
-ya esta lista la cena Tasuku- escuche la voz de mi padre, gire a verlo y asentí, sin tardare fui a sentar y me quede viendo el plato, di gracias por la comida y comencé a comer... con algo de desagrado me di cuenta que la comida de mi padre sabia igual que siempre pero había ese "algo" faltante, esa pizca de cariño que siempre le daba y que ahora se mostraba ausente... si, esto sin duda es el pasado... aquí mis padres no me conocen, yo no existo y por lo tanto… el no me quiere...
*estaño a mis padres* pensé con amargura pues ahora era una comida para alguien que él no conocía... mire el plato con tristeza y continúe comiendo mientras pensaba que deseaba volver al lado de mi verdadero padre y probar su comida cálida y llena de verdadero cariño...
-¿por qué pones esa cara? ¿la cómoda no esta buena?- escuche de nuevo su voz mientras notaba por fin que el también estaba sentado frente a mi
-ha... no, esta bueno, es solo que... ... ... estoy algo cansado por la batalla y aparecer aquí... esto fue demasiado rápido... eso es todo- dije bajando a cabeza para ver a mi plato, el se quedo callado y continuamos cenando en silencio mientras yo recreaba en mi cabeza aquellos momentos en los que cenábamos los 3 juntos hablando de lo que hacíamos durante el día y contando cosas divertidas haciendo amena la comida, incluso a veces venía la tía Emi o el tío Miwa y una vez al mes íbamos a la casa de alguien a cenar todo juntos para hablar de lo que hacíamos durante todo el tiempo fuera… si, aquello era bueno
Por lo regular y mayormente era papá quien siempre cocinaba pues en secreto y a veces a modo de burla solía decir que mamá no sabía cocinar, y aunque no estaba del todo alejado de la realidad ambos terminaban cocinando juntos y siempre divertidos mientras se decían palabras de amor, de un tiempo para acá yo también había comenzado a ayudar más en la cocina y gracias a las enseñanzas de mi padre yo también podía cocinar, eso era bueno, me gustaba pasar todo ese tiempo con mis padres, eran tiempos que sin lugar a dudas atesoraba con cariño...
-gracias por la comida - dije decaído terminando por fin de comer, me levante y fui a la cocina a lavar mis utensilios pero mi padre me los quitó de las manos, lo vi sin comprender y el señalo su habitación
-ve a dormir, necesitas descansar- nos quedamos mirándonos por unos momentos y yo asentí mientras iba a su habitación, mas me detuve de inmediato
-¿dónde voy a dormir yo?- pregunte mientras volteaba a verlo, de nuevo una pequeña lucha de miradas se hizo presente y luego desvío la vista en dirección a la cocina
-solo tengo una cama, así que dormiremos juntos, duerme pegado a la pared, yo iré más tarde- asentí a su orden mientras iba todavía más desanimado a donde me dijeron... sin lugar a dudas mi madre me hubiera tratado diferente si hubiera ido con ella... pero no tenía forma de ir hacia donde estaba ella... no sabía donde vivía y no quería preocupar a mi padre...
*aunque él no es mi padre... aun...* deduje mientras me acomodaba en la cama viendo al techo, el sueño comenzó a ganarme y comencé a cerrar los ojos, realmente me se tía cansado
*pero lo sigue siendo... es mi... papá... * dije cayendo por fin en el sueño
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Una vez que termine de lavar los trastes me dirigí a mi habitación, supuse que ese niño aun seguiría despierto y lo más seguro, jugando, pero me lleve una ligera sorpresa cuando realmente lo vi dormido, suspire un tanto cansado, luego de separarnos de Aichi, Tasuku se había mantenido callado, no niego que era alguien obediente a las órdenes que se le daba, pero el camino a casa había sido demasiado callado hasta para alguien como el que en cuanto vi se mostraba animado y ligeramente parlante como Aichi...
Las cosas se pusieron aun más tensas cuando llegamos a casa, si bien lo deje por unos momentos solo, en cuanto le dije que era hora de cenar aquella mirada llena de ilusión volvió a su rostro, eso me relajo un poco, mas cuando probó la comida aquel brillo desapareció y fue reemplazado por una triste mirada
Se mantuvo callado mientras su mente vacilaba en quien sabe qué, pero sus ojos eran igual de expresivos que los de Aichi, a leguas se le veía que pensaba en su pasado, pues de cuando en cuando sonreía sin darse cuenta o luego reía suavemente tratando de no ser notado... aun así, cuando acabo se le veía igual de deprimido
Sin tiempo que perder se levanto y dirigió a lavar los trastes, eso me pareció bien, pero aquella mirada triste era algo que no soportaba ver en él, así que lo mande a dormir ocupando su misma excusa, en cuanto me preguntó por donde dormiría mi mente pensó en darle el futon que tenia extra para cuando Miwa venía a dormir, pero mi boca actuó más rápido que mi cabeza y ya le había dicho que se durmiera en mi cama alegando que solo tenía eso
Una hora más tarde entre a la habitación viendo como el pequeño estaba ya profundamente dormido, por mero instinto retire un mechón de su rostro y Tasuku tomo mi mano poniéndola en su mejilla, esto me asombro un poco, supuse que me estaba tomando el pelo y que realmente estaba despierto, pero rápidamente note que no era ese el caso
-te quiero papá- dijo entre sueños mientras una pequeña y diminuta lágrima caía por su mejilla hacia si tabique y se perdía en la almohada, limpie el rastro de lo que quedó y él se removió un poco más para finalmente regresar a su posición original...
Tal vez debería de averiguar si Aichi habla entre sueños o tratar de saber si yo lo hago pues aquello me pareció extraño, una vez olvidado aquello me recosté yo también en la cama y casi por instinto aquel niño se ha cerco a mi abrazándome un poco, por unos momentos tuve las claras intenciones de apartarlo de mi con fuerza pero al ver aquel rostro tranquilo no pude hacer nada más que suspirar y acostarme de lado mientras yo también lo abrazaba de forma algo protectora
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-¡Gao-kun corre!- gritó un joven de cabellos azules claros como el cielo mientras volteaba a sus espaldas nervioso notando como a aquel que le llamaba ya estaba siendo tragado por una extraña bruma negra que casi lo desaparece de su propia visión, sin embargo, aquel joven de cabellos azules no era alguien que se dejaba derrotar así como así, razón por la cual en cuanto notó al otro chico de cabellos negros y boina roja siendo tragado corrió en su dirección y logró tomar su mano jalándolo con todas sus fuerzas consiguiendo sacarlo de aquella extraña bruma que otro poco y lo desaparecía para siempre de su vida
-T-Tasuku…- susurró apenas y consciente aquel joven de cabellos negros que respondía por Gao y que ahora se encontraba siendo cargado por un hombro y brazo por el otro, ambos, igual de lastimados y cansado, pero aun peleando por seguir adelante, tratando de ver al frente y no perder el poco conocimiento que aun mantenía en ese momento
-¿estás bien Gao-kun?- preguntó Tasuku mientras lo jalaba con más insistencia tratando de correr con tanta velocidad pudiera adquirir puesto que era consciente de que aquella bruma tan aterradora no solo tenía consciencia propia, sino que también los perseguía por alguna extraña razón que no alcanzaba a comprender y de la cual no estaba muy seguro si quería llegar a comprender
-s…si…- respondió apenas y con esfuerzo, en cuanto Tasuku noto aquello se alivio bastante y continuó con su camino deseando poder correr con el otro en brazos o en la espalda, pero estaba en igualdad de condiciones y sabía que su cuerpo no soportaría el peso del de cabellos negros aunque se sobre esforzara en intentarlo… giro entonces su mirada hacia atrás encontrándose con aquella bruma que, él había creído ciegamente que ya había dejado atrás… más grande fue su sorpresa al darse cuenta que aquella bruma les estaba pisando los talones literalmente…
-¡Ataca Blaster Blade!- escuchó un grito que conocía a la perfección, al ver hacia atrás no pudo ver al frente a la persona que lo había salvado, solo logró ver un ataque de luz colindar contra aquella bruma cegándolo por unos momentos debido a la estridente luz que impacto todo el lugar
Cuando por fin abrió sus ojos logrando acostumbrarlos a la ahora nueva luz que tenía, se encontró en los brazos de su madre quien le llamaba con insistencia y preocupación por su nombre, pero que mostró alivio al ver que comenzaba a reaccionar
-G-Gao… kun…- susurró con trabajo, su madre sonrió enternecido mientras lo sentaba con cuidado y le daba un suave beso en la frente como acostumbraba hacer desde siempre
-está a salvo con tu padre- le dijo mientras señalaba a unos pasos de distancia a su padre con su amigo en brazos ahora inconsciente, su padre al verlo sonrió para su hijo y luego se levanto con el chico en brazos acercándose a su madre y a el mismo
-tenemos que sacarlos de aquí cuanto antes o esa cosa volverá de nuevo- habló su padre mientras su madre asentía cargando a Tasuku con cuidado entre sus brazos puesto que sabía bien que el ya no podría sostenerse en pie, por lo menos en un buen rato, aunque todos los presentes sabían que no era el momento para descansar tomando en cuenta que aquella bruma negra lo envolvía todo y desaparecía todo en las tinieblas
-¿A dónde iremos?- escuchó la pregunta de su madre ligeramente preocupada pero aun con ese tono serio que denotaba que no se iba a rendir, sintió de nuevo deseos de cerrar sus ojos, estaba más que agotado con todas las batallas que había tenido, mas el sentir el incesante movimiento de su cuerpo le hizo volver momentáneamente en si para darse cuenta que su madre y padre estaban corriendo con ellos aun en brazos junto con Gao
-primero tenemos que ponerlos a salvo, luego veremos cómo detener a esa cosa- habló de nuevo su padre mientras los guiaba a todos por varias calles y callejuelas entrando por fin a lo que alguna vez debió de ser una fábrica de imprenta ahora destruida y arruinada por aquella cosa monstruosa
Ambos padres entraron a diversas habitaciones y dejaron a los más chicos ocultos en una pequeña oficina mientras ellos mismo salían de nuevo hacia el exterior para corroborar que todo estuviera seguro y que no volvieran a salir con otro ataque sorpresa como el que habían experimentado Tasuku y Gao hace cosa de nada…
Estando unos minutos en aquel lugar en silencio, pareció que Gao comenzó a despertar pues sus movimientos suaves y lentos eran cada vez más notorios, esto alivió a Tasuku mientras el también trataba como podía de ponerse de nuevo en pie al tiempo que escuchaba a lo lejos las pisadas de sus padres junto a murmullos de una conversación que no comprendía del todo, pero, por el tono de su padre, posiblemente no fuera nada bueno
-Tasuku… ¿estás bien?- preguntó Gao mientras se sentaba por fin aun tomándose la cabeza con dolor, notando un ligero hilo de sangre mesclado con lodo y suciedad de la calle, Tasuku quien por fin se había logrado poner en pie camino hasta su amigo y se sentó a su lado suspirando tranquilo
-si, por suerte, fue un milagro que mis padres lograran llegar y nos salvaran antes de ser tragados por esa cosa- dijo aliviado mientras se recargaba en su amigo en señal de que se despreocupara, así como hacía de cuando en cuando con el… hubo un momento de silencio mientras ambos jóvenes se trataban de recuperar… hasta que escucharon un ataque estridente a lo lejos, esto los alarmó bastante al grado de que Tasuku se levantara de su lugar casi en un brinco mientras daba algunos pasos en la dirección de la única puerta que los separaba con el resto de la fabrica y donde hace unos minutos sus padres habían desaparecido para plantar guardia…
Escucharon varias explosiones mas junto a gritos de sus padres y de monstruosidades que brotaban de la misma bruma negra… aun así, pese a que todo lo que se escuchaba era desesperación, así, de primeras a segundas los gritos fueron callados por un terrible silencio sepulcral que por unos momentos calmó los nervios de ambos jóvenes pero casi al minuto los hizo sentir unos nervios tan pesados que era difícil el poder soportarlos en verdad…
De nuevo, el silencio que reinaba en el lugar era tan pesado… lleno de ese mal presentimiento y sensación de muerte que acompaña a la destrucción de todo cuando aun no comienza… por primera vez Tasuku deseo escuchar los terribles gritos que sonaban desde hace mucho y no escuchar ese silencio que era insoportable y delirante… aquel terrible silencio se prolongó por varios minutos siendo sus respiraciones entrecortadas por el miedo lo único que se escuchase por todo el lugar… al menos hasta que escucharon con alivio los presurosos pasos de alguien hacia ellos, pero… por desgracia…
La puerta que los mantenía ocultos fue abierta de golpe, era el padre de Tasuku quien llegaba y se le veía más herido que cuando partió fuera; una gran mancha de sangre en uno de sus costados ensuciaba su camisa blanca rasgada y sucia, la herida estaba en su costado izquierdo mientras era presionada la zona por su mano derecha, su padre miro a ambos niños jadeante por la posible batalla que recién tuviera, mirando a ambos les dio una señal con la cara y habló mientras les daba la espalda
-andando, tenemos que irnos de aquí- soltó frío mientras hacía ligeras y casi imperceptibles muecas de dolor tratando de no asustar mas a los niños, sin embargo aquello había asustado demasiado a Tasuku
-¿qué va a pasar con mamá? ¿d-donde esta?- preguntó asustado de no ver a su madre a su lado, mas el mayor de todos solo camino alejándose de los otros que de inmediato le siguieron el paso tan rápido como sus adoloridos cuerpos se lo permitían
Al no ver respuesta de ninguna de sus preguntas anteriores y luego de algunos minutos en aquel silencio tan aterrador, Tasuku volvió con sus preguntas de antes, solo que esta vez su padre le respondió con la misma orden de marcharse rápido del lugar, mas rápido, más frío, más molesto… mas dolido… eso… no podía significar nada bueno… y temió que si preguntaba la razón, la respuesta que recibiera fuera una que no pudiera soportar…
Sin más deseos de hablar, siguieron al único adulto por varios lugares más, ahora los 3 iban a un paso lo mas presuroso que podían tomando en cuenta que todos estaban lastimados por las batallas que habían librado alrededor de lo que ahora serían 3 días sin descanso con sus respectivas noches… esta sería por fin la tercera noche y aun estaban agotados, no podían detenerse a descansar pues aquella bruma actuaba cada vez más rápido, cada vez tragándolo todo a una gran velocidad que incrementaba constantemente
Ahora la ciudad estaba actualmente destruida al 90%; lo que sería poco más de la mitad de la ciudad estaba ahora invadida por aquella bruma negra y eran pocos los que aun seguían de pie, los únicos que para esas alturas podían seguir en pie eran los peleadores que aun quedaban dispersos por todo el lugar, por aquella ciudad en penumbras, peleando todo el mundo por detener aquella bruma y salvar al mundo o sino… por su propia supervivencia…
-¿A dónde vamos papá?- preguntó Tasuku luego de un rato ya sintiendo de nuevo que no podría mas, sin embargo su padre no respondía del todo, solo seguía su camino como si no importara lo demás… ya llevaban unas cuantas horas caminando, la herida de su padre demostraba que la sangre no se detenía pues la mancha era ahora más grande, su padre jadeaba mas y se veía que le costaba respirar, mas eso no le impedía el seguir adelante cuidando de los otros 2 que ahora eran su responsabilidad…
-aguanten, ya casi llegamos- dijo su padre después de mucho tiempo, ambos jóvenes se miraron entre si y asintieron a las palabras del adulto mientras iban cada uno a su lado checando de cuando en cuando como se ponía cada vez mas pálido, Tasuku temía que su padre se fuera a desmayar, aunque sabía bien que su padre era alguien difícil “por no decir casi imposible” de vencer, aun tenía miedo de que en algún momento callera inconsciente o peor aun… muerto
-es aquí- soltó por fin su padre mientras los 3 entraban a un museo ahora en ruinas y que aun no era tragado por la oscuridad, entraron todos mientras asustados por la noche se acercaban al adulto y lo seguían de cercas para no perderse en ese pequeño mundo de tinieblas, siguieron caminando por varios pasillos hasta que dieron de algún modo con el sótano de aquel lugar, una vez bajando las ultimas escaleras el padre de Tasuku movió un gran mueble con ayuda de los otros descubriendo una puerta mas, al pasar por aquella puerta escucharon un grito desgarrador de lo que debieron de ser miles de voces diferentes
Su padre giro la mirada y empujando a ambos jóvenes logró ser él quien recibiera todo el ataque de aquella bruma, siendo estampado contra un muro, Tasuku gritó su nombre con miedo mientras de nuevo tanto Gao como el iban de nuevo hacia aquella bruma y mostraban sus decks al tiempo que estos se iluminaban alejando un poco a la oscuridad, de inmediato corrieron hacia el padre de Tasuku quien aún seguía en el suelo
-¡Papá! ¡¿estás bien?!- pregunto con algo de miedo Tasuku, mas solo vio como su padre le sonreía tranquilamente a modo de calmarlo, al girar hacia atrás de nuevo aquella bruma esta vez fue su padre quien mostrando su deck logró dispersar aquella bruma, Tasuku se permitió suspirar tranquilo mas sin embargo al girar sus miradas no encontraron a Gao
-¿Gao-kun? Gao-kun… ¡Gao-kun!- grito por fin desesperado Tasuku al darse cuenta que aquella bruma se había llevado a su amigo, de nuevo camino por toda la habitación pero no lo pudo encontrar, Tasuku en un arranque iba a salir de nuevo en busca de su amigo, pero fue su padre quien lo detuvo tomándolo por el hombro
-por ahora no puedes hacer nada por ellos Tasuku, tienes que calmarte- le dijo serio, mas el por fin se soltó de su agarre de un modo brusco
-¡¿Cómo puedo estar calmado cuando mi amigo desapareció?! ¡me necesita!- grito nervioso, mas su padre solo lo abrazo para calmarlo, Tasuku abrió sus ojos con sorpresa y correspondió su abrazo con fuerza, duraron así varios minutos y cuando su padre creyó que ya se había contralo lo soltó de su agarre con suavidad, acarició su cabeza y beso del mismo modo su frente
-yo también estoy preocupado por tu madre y por tu amigo, pero ahora tu eres el único que puede detener esto Tasuku- le dijo tan serio mientras le miraba con aquellos ojos tan penetrantes que su padre poseía, Tasuku se le quedo viendo extrañado, tenía muchas dudas, desde que aquella bruma había aparecido cuando toda su escuela estaba a mitad de carretera hacia un campamento que apenas iba a comenzar… desde ahí hasta que consiguió volver junto a su amigo Gao, sin saber que era aquello que los atacaba y como era que sus padre lo conocían, pero aquello había sido la gota que derramó el vaso…
-¿a qué te refieres padre? ¿Qué es lo que nos está atacando? ¿Qué es lo que se llevó a Gao y a mi madre?- pregunto aunque no sabía realmente si quería escuchar las respuestas, su padre lo volvió a tomar por sus mejillas manchando una de estas con su propia sangre, aun así, obligando a los ojos carmesí a colindar con los esmeralda
-lo que nos está atacando ahora es algo que tu madre y yo ya habíamos derrotado hace mucho tiempo atrás, a como estamos ahora no podemos hacer nada, ahora tu eres nuestra única esperanza Tasuku- le dijo su padre, esta vez Tasuku se quedo quieto escuchando la palabra de su padre, asintiendo aun sin comprender del todo sus palabras y creando más dudas en su cabeza
- al lugar donde iras es al pasado, tendrás que detenerlo, descuida, a donde iras esto aun no tiene este poder, con tu nivel y habilidad podrás derrotarlo sin tantos problemas… ve al pasado y detén este poder llamado Void...- le dijo mientras le entregaba una carta en sus manos junto a 2 cartas de Vanguard, una de ellas era Dragonic Overlord the end y la otra era el Blaster Blade de su madre, Tasuku observo aquello con asombro y su padre a sintió
-ellos te ayudaran en tu misión, cuando cruces el portal perderás parte de la memoria, en la carta yace tu misión y una breve explicación de lo que es esta cosa, debes irte ahora que aun puedes Tasuku- le dijo su padre mientras hacia nuecas de dolor y se sujetaba con más fuerza su costado herido
-¿no vendrás conmigo padre?- pregunto con un ligero resquicio de temor en su voz pues no era nada tonto, Tasuku sabía bien que las heridas de su padre no eran simples rasguños y que debían de atenderse de inmediato, sin embargo su padre negó con tranquilidad
-tengo que ir a buscar a tu madre y a tu amigo, además, debo mantener el portal abierto, por ahora tu eres nuestra única esperanza de evitar que esto pase Tasuku- le dijo mientras se arrodillaba para quedar a su nivel y luego pesar su frente con cariño, Tasuku no pudo más y pequeñas lágrimas comenzaron a correr por sus mejillas perdiéndose algunas en su cuello y otras calle do al suelo
-no llores mi pequeño, tu madre y yo te amamos, no iras solo, mientras tengas a nuestros avatares no iras solo- le dijo tranquilo mientras tomaba con cuidado la mano donde Tasuku tenía ambas cartas, el más chico asintió y sonrió suave y débilmente, se miraron por unos momentos y en el preciso momento en que su padre se levantaba la bruma volvió mientras los gritos de agonía y dolor se escuchaban mas fuertes taladrando la cabeza de quien los escuchara por mucho tiempo
Sin tiempo que perder su padre se levantó por completo y sin tardar se puso frente a su hijo, no les dio tiempo a nada, su padre empujo a Tasuku dentro del portal mientras este gritaba
-¡¡¡Papa!!!- grito mientras caía por fin dentro de aquel portal y con terror observaba como aquella bruma negra se lo tragaba aunque este le regalara una pequeña sonrisa de consuelo...
Su padre solo pudo verlo por arriba del hombro mientras inútilmente ponía sus brazos frente suyo como un escudo y con alivio notaba como su hijo desaparecía de su vista quedando a salvo
*ahora todo depende de ti Tasuku... contamos contigo hijo mío* pensó mientras cerraba sus ojos al tiempo que era absorbido por aquel poder que él conocía bien como Link Joker
-por fin... esta es mi venganza...- logro escuchar a lo lejos aquella voz que reconocía a la perfección, sonrió superior pese a estar ya en las entrañas de aquel poder y hablo con tono prepotente pero seguro de sí mismo y de lo que decía
-te equívocas Void, nosotros te volveremos a derrotar...- fue lo último que pudo decir a antes de escuchar un potente rígido sumado a gritos de dolor y finalmente perder el conocimiento dentro de aquello rogando por que su hijo estuviese bien...
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-¡¡¡waa!!!- grito suavemente Tasuku mientras se sentaba en la cama que compartía con su padre Kai, miro a todas partes notando donde estaba, suspiro tratando de calmarse y secar en sudor que tenía en la frente mientras asustado se decía que aquello había sido una pesadilla... y para su desgracia los recuerdos que había perdido al momento de caer por aquel portal
-¿qué sucede, te encuentras bien Tasuku?- escuchó a su costado una voz, al girar se encontró de nuevo con su padre sólo que más joven y sin saber que era realmente su padre, lo miro por unos segundos y lágrimas comenzaron a asomar por sus ojos carmesí, aquello extraño a Kai haciendo que se sentara en la cama y prendiera la luz de la lámpara del buró
-¿qué ocurre?- pregunto mientras instintivamente apegaba a Tasuku a su pecho y este se afianzaba con fuerza tratando de no llorar
-una pesadilla terrible... solo una pesadilla... ¿puedo dormir abrazado a ti papá?- pregunto suave y con miedo, Kai se hubiese negado pero el verle temblar de ese modo no le dejo de otra, se acostaron esta vez abrazados, Kai tuvo que esperar hasta que Tasuku se calmara y volviera a dormir para el también volver a dormir mientras se preguntaba que habría sido lo que asustara tanto a alguien como el... bueno, sería algo que le preguntaría mañana por la mañana...