Después de besarlo por un largo rato el Mandamás se detuvo, le fue difícil porque esos labis eran su adicción, pero aún tenía asuntos que resolver.
Tomó al chico de los hombros, viendo como soltaba un suspiro por aquellos hermosos labios. Su mirada se posó fugazmente en la soga que todavía colgaba de la lámpara y la inquietud lo inundó. temía dejarlo solo y que intentara ahorcarse de nuevo, para prevenirlo se asomo al pasillo y llamó a un reo que estaba alejado, fumando un cigarrillo.
-¡JongDae!
Este se sobresaltó -Diga, mi Mandamás
-Busca a ZiTao
El hombre asintió y fue a cumplir con lo que le ordenaban
Baek frunció el ceño extrañado
El Mandamás volvió junto a él -Debes tener cuidado con ZiTao, no es agresivo pero no está muy cuerdo.
Alzó la cara para mirarlo -De eso ya me dí cuenta
ChanYeol sonrió y le acarició la mejilla poniéndolo nervioso cuando de pronto entró ZiTao, venía agitado y con la cara enrojecida por el esfuerzo
-¡Ya Llegué! -Gritó como un desesperado
-Tránquilo -Rió divertido el Mandamás -Has llegado rápido
-Venía subiendo cuando JongDae me dijo -Explicó entre jadeos
-Bien, nos vemos en la noche -Dijo besando a Baek como despedida
Este se sonrojó, le daba le verguenza con ZiTao, pero este ni se imnutó
-Cuídalo -Le dijo el Mandamás a ZiTao antes de irse, más que una petición, era advertencia
-Sí, lo cuido, lo cuido -Exclamó con miedo
Baek rodó los ojos y trató de desviar la atención a otros asunto -Oye ¿Qué me habías a enseñar hace rato?
Los ojos de panda se clavaron en los del pequeño -¿Hace rato? ... Ah! sí ven conmigo
BaekHyun iba a asentir pero de pronto recordó la advertencia del Mandamás "Debo sabes donde andas, siempre" y salio de prisa hasta llegar a la baranda del pasillo -ChanYeol -Gritó
Este, que iba por el descanso de la escalera lo miró con asombro, era la primera vez que lo llamaba por su nombre
Baek se sonrojó violentamente, pues no solo el Mandamás lo había mirado, sino los presos que andaban por ahí -Es que ... quiero ir con ZiTao a ... -Notó entonces que no sabía a donde irían y volteó a ver a su compañero
-Al patio lateral -Le informó este
-Al pato lateral -Volvió a repertir mirando al Mandamás con sus mejillas teñidas de rojo
ChanYeol sonrió "es tán tierno" pensó -Está bien, cachorro -Contestó guiñándole un ojo y siguió su camino
-¿Cachorro? -Pensó indignado -Nah, que importa
-¿Te dio permiso? -Preguntó ZiTao detrás de él
Baek lo miró lo enojo, aún estaba abochornado -Vamos
En otro lugar de aquella penitenciaría, JunMyeon revisaba revisaba algunos documento mientras Lay estaba apoyado en su hombro tarareando, estaban sentados frente a un escritorio del que no se conseguía ver la superficie por la cantidad de papeles, cuando el Mandamás llegó
-¿Aceptó el chico? -Le preguntó al verlo sonriente JunMyeon
-No -Contestó con simpleza
El otro lo miró extrañado -¿No? ... y entonces que vas a hacer
-Nada -Respondió el Mandamás encogiéndose de hombros para restarle importancia -Si a él no le gusta no lo obligaré
SuHo ensanchó sus ojos impactado de sobremanera, tantos años había escuchado al Mandamás sobre aquel loco fetiche, encaprichado con la idea y ahora que lo tenía al alcance de la mano renunciaba así nada más, sólo porque el chico no quería; le dio una calada al cigarrillo que Lay le había pasado, tratando de adivinar los pensamientos de su amigo ¿Sería posible que el gusto por ese niño se le estuviera saliendo de control? ¿Podría llegar a enamorarse del chico, o mejor dicho, ya estaría enamorado del pequeño?
-Y bien ¿Cómo la cosa? -Preguntó el Mandamás despreocupadamente tomando un documento de entre tantos esparcidos por el escritorio, para echarle una mirada.
-Más o menos -Respondió JunMyeon aun anonadado, sí era verdad que su amigo se había enamorado él debía alegrarse por al dicha,pero ... ¿Qué tan conveniente sería eso para el negocio?. Dando una segunda calada al cigarrillo y pasándoselo nuevamente a su esposo sin quitar la vista del semblante alegre del Mandamás, comenzó a preocuparse.
Mientras, Baek y Tao transitaban el mismo pasillo por segunda vez y de nuevo había alguien en él, un hombre de unos veinticinco años, o eso parecía; metro setenta y ocho y muy buen cuerpo. Recargado en las pared los había mirado fijo desde que pisaron el pasillo. Baek frunció el ceño pues no más al verlo Tao se puso nervioso y se había ocultado tras él, soltando un suspiro decidió pasar ignorando al extraño, mientras Tao le retorcía la camisa muy alterado. Cuando ya habían pasado al hombre éste habló:
-Tú eres BaekHyun ¿Verdad?
-Qué te importa -Respondió todo hosco sin parar de caminar
El joven apuró el paso hasta su alcance, Baek se detuvo, no quería que aquel desconocido lo siguiera
-Tranquilo -Dijo el joven sonriendo -Tranquilo solo quiero conocer al colega
ZiTao se apartó poniéndose de cuclillas y tapándose el rostro con las manoscomo si así pudiera protegerse de cualquier otra cosa o protegerse.
Los ojos de Baek lucían enojados
-Me llamo EunHyuk -Se presentó mirándolo descaradamente de arriba abajo -Yo era la mascota del Mandamás
Baek se asombró por la forma en la que el chicos se refería a él mismo -¿Mascota?
-No te preocupes, me desechó hacer mucho, antes de que tú aparecieras. No hay bronca entre nosotros
-Y eso que tiene que ver conmigo -Preguntó Baek descolocado -¿Porqué habría bronca?
El otro sonrió con malicia
-Mierda, yo podría pensar que tú me lo quitaste, por eso
Frunció el ceño enojado, odiaba que le hablaran como si el fuese un homosexual -Me importa una mierda el Mandamás, si quieres te lo puedes quedar y hacer lo que quieras con él -Escupió molesto y con asco -¡Yo no soy gay!
EunHyuk se sorpendió -¿No eres gay? -Exclamó para luego soltar una carcajada -Amigo, entonces tú sí estás bien jodido
Apretó los puños con fuerza para luego girarse pero EunHyuk se interpuso en su camino
-No te enojes -Comentó divertido -Pero ¡Mierda!, con ese culo no puedes ser hetero es un pecado
Para Baek eso fue demasiado, el comentario fue la gota que derramó el vaso, sin contener más su ira le pripinó al muchacho parado frente suyo un puñetazo mándandolo al suelo -¡Cállate, hijo de puta!
EunHyuk se reincorporó sobandose la parte golpeada pero manteniendo su sonrisa -Pegas fuerte, mocoso, pero no se pro que te enojas si te estoy echando flores, tienes un culo de dios griego, como para comerselo -Provocó deliberadamente
Baek se abalanzó sobre él para golpearlo de nuevo, pero éste ya prevenido lo esquivó y le hizo una llave situándose detrás de él -Me gustaría hacertelo bien duro para oirte gritar de placer -Dijo moviendo su pelvis contra su trasero como si estuviera penetrádolo
Iracundo, Baek logró meter su pierna tras al de EunHyuk, enganchándola e hizo palanca logrando que este perdiera el equilobrio y cayera. Una vez libre logró asestarle otro golpe e iba a continuar pero sintió que alguien lo alzaba en peso y lo separaba de su adversario, era ZiTao que intervenía
-¡Basta! -Dijo con su inusual tono serio -No peleen
-¡Qué asco! -Exclamó EunHyuk -Como dejas que te toque este tipo, da asco, siempre hediondo, puro hueso, ¡Agh asco! -Dijo dramáticamente para luego marcharse
Tao recuperó su semblante distraído y comenzó a llorar
Baek, quien aún jadeaba por el esfuerzo y coraje, no pudo evitar sentir compasión "Así que de este tipo saca que da asco", pensó. Respiró para calmarse y le aplmeó la espalda - No me digas que te importa lo que diga ese cabrón
ZiTao no respondió, seguía cabizbajo, llorando
-¿Y entonces?, tengo un amigo tarado -Bromeó dándole un leve golpe en el pecho -Cómo vas a creele a un tipo como él, con pura mieda en el cerebro
Tao abrió los ojos con asombro - ¿Amigo? -Preguntó ilusionado, hacía muchso años que no era más que una sombra para los demás, de allí su sobrenombre, Con su corazón latiendo esperanzado se lanzó hacía Baek abrazándolo con fuerza
Los ojos del pequeño parpadearon sorprendidos, no esperaba esa reacción y sin poder evitarlo se sonrojó
-Gracias -Susurró Tao en su oído
Conmovido Baek correspondió a su abrazo y cerró los ojos pensando que tal vez ese hombre tenía algo en común con él, la soledad
Un poco apartado, unos ojos negros estaban fijos en BaekHyun, era DongHae que esclavo de su cuerpo no podía evitar la tremenda lascividad que lo invadía cada vez que veía al lindo chico de ojos marrones.
Sabía perfectamente que el Mandamás lo mataría si lo tocaba, pero que tal si el Mandamás no podía identificar al hombre que se follara a su posesión.
Las ideas danzaban en su cabeza, podría utilizar algo como drogas ... o atarlo y vendarle los ojos, muchas ideas tenía para que Baek no lo reconociera, pero aún tenía la certeza de que lo haría, pero de lo que sí estaba seguro era de que estaba obsesionado con aquel muchacho.
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español