4 horas antes, Izuna se encontraba aseando la casa, cuando sonó el teléfono y de inmediato contesto
- ¿Sí?
- Izuna
- Madara, ¿sucedió algo?
- Dime, ¿en el sillón deje un portafolio negro?
- Si, aquí está todavía
- Menos mal, escucha iré enseguida por el, así que tenlo listo
- De acuerdo
1 hora antes, un elegante vehículo conducía a una velocidad moderada
- No tuvimos suerte, pero espero que Yamato si
- Yo también lo espero
Tiempo actual: Izuna se encontraba secando los trastos, cuando escucho nuevamente el teléfono
- ¿Sí?
- Izuna, deja el portafolios en la entrada de la casa
- ¿eh?, ¿no vendrás por el?
- No, ira el idiota de tu novio, pero como estas solo, no quiero que ese pervertido entre
- Oye - se oyó Hashirama
- Hermano, sabes que Tobirama no hará nada impropio, así que no te preocupes
- Aun así, no lo dejes entrar
- De acuerdo, nos vemos -colgó
Izuna sonrió para sí, le parecía exagerada esa sobreprotección de Madara, en cuanto a Tobirama se refería, pero era comprensible, ya que sin querer recordó su incidente con su primo. En eso oyó el timbre
- Ya voy -al abrir la puerta trato de cerrarla
- Izuna-sama, espere
- Saben que no son bienvenidos, así que Yamato-san, retírate
- Es que - volteo al ver otro auto estacionarse- su abuela ya está aquí
Al oírlo, Izuna se sorprendió y termino de abrir la puerta y ver el vehículo negro que había llegado; del descendió un hombre con un paliacate en la cabeza, el cual ayudo a bajar a una dama de kimono color blanco misma que se dirigió a la entrada de la casa y al ver al joven
- ¿de verdad eres Izuna?
- Si -viéndola serio- ¿Qué se le ofrece?
- ¿podrías invitarme a entrar?
Izuna suspiro y se hizo a un lado, viendo como la mujer se entró seguida de Yamato e Ibiki, el azabache se sentó frente a ella en otro sofá
- ¿a qué se debe su visita?
- La verdad, esperaba hablar con Madara, pero me dijeron que estaba ocupado
El azabache iba a decir algo, cuando escucho un timbre proveniente de su laptop
- Si me disculpa
El joven abrió la laptop y era una video llamada, sin muchas ganas, el azabache la tomo
- Fugaku
- Hola Izuna -al ver el rostro serio de su hermano- ¿Qué pasa?, ¿no te da gusto verme?
- Si solo que, menor mira por ti mismo
Izuna enfoco la cámara hacia sus visitantes, Fugaku al ver a la mujer se puso serio
- Kaguya- obaasan
- Cuanto tiempo sin verte, Fugaku, ¿Cómo está tu familia?
- Estamos bien, ¿Qué hace aquí?
- Veo que aún siguen resentidos
- ¿Cómo querías que estuviéramos?, nos diste la espalda cuando más te necesitábamos - respondió Fugaku
- Lo sé y lo siento, por ese motivo es que estoy aquí y aprovechando que hablo contigo, quiero que ustedes y su familia vengan a la siguiente reunión del clan
- ¿Qué?, ¿es una mala broma?
- Solo piénsalo Fugaku y hablen tratando de convencer a Madara. Si me disculpan, debo irme, espero que puedan ir
Sin más, Kaguya se puso de pie y se fue junto con sus guardaespaldas
- Izuna
- ¿sí?
- Esta noche tratara de llamar de nuevo, mientras tanto, no le digas nada a Madara hasta que yo les llame
- Bien, cuídate
- Tú también, salúdame a todos
Dicho eso, Fugaku colgó, cuando Izuna iba a reanudar sus labores, oyó el timbre
- ¿ahora que quiere? -abriendo la puerta- ¿Tobirama?
- ¿así es como recibes a tu novio?
- No, es solo que mm… -recibiendo un beso
- ¿sabes a que vine?
- Si, el portafolio esta en ese sillón
- ¿paso algo?
- No quiero hablar de eso y perdón si fui grosero
- Está bien, esto es para ti
Izuna tomo la crepa que le había llevado el peliblanco, el dulce aroma inundo su nariz
- Gracias, ¿no quieres tomar algo?
- No, debo irme, tenemos una reunión entre maestros, pero al idiota de tu hermano se le olvido esto
- Ya veo
Tobirama vio como Izuna agachaba su cabeza un poco triste, por lo que le dio un suave abrazo, el azabache al sentirlo respondió al abrazo
- ¿Seguro que estas bien?
- No, tuve una visita inesperada y eso me trajo malos recuerdos
- Ya veo
El peliblanco lo abrazo aún más, pero tenía que irse
- Izuna…
- Lo sé -separándose- que te vaya bien
- Suenas como un esposo
- To-Tobirama -sonrojándose
Tobirama sonrió y beso la frente de Izuna, luego tomo el portafolio.
- Tobirama, espera
- ¿Sí?
El azabache se acercó al peliblanco, para darle un beso rápido
- ¿quieres venir a comer?
- ¿No será molestia?
- No
- De acuerdo… aunque sé que a una persona no le gustara
Tobirama e Izuna se sonrieron, para luego quedar de verse una vez que terminaran las clases, pero antes de irse, el peliblanco le dio un beso suave, que poco a poco se volvió algo apasionado, aunque Izuna se puso algo nervioso, decidió responder al beso de la misma manera y antes de que pasara a mas
- Tobirama -entre besos- tienes que irte… no quiero que te retrases
- Lo sé y no me importa
- No seas perezoso - separándose- además, nos veremos esta tarde
- De acuerdo, cuídate
- También tú, toma -dándole un pedazo de la crepa
- Gracias, te amo
- Yo… yo…
- No te esfuerces, también quiero que me los digas desde el fondo de tu corazón
- Lo sé, te quiero
Ambos se separaron, sin darse cuenta de eran observados