Kyoya estaba aturdido, si no fuera porque la profesora Kirishima lo había sacado del trance que estaba al llamar a Tatsu el…
- ¡Ah!, Su nombre es Tatsuya- seguiría botando baba todavía; simplemente todo parecía encajar cuando vio los ojos grises como acero, se rio como quien se acuerda de sus maldades
– Parece amor a primera vista
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Por primera vez desde que llego a Paris hace un mes, Tatsuya encendió su celular, sentía nostalgia de estar lejos de su madre y su amado, porque no lo podía negar, lo seguía amando.
Al revisar tenía muchas llamadas de su madre y mensajes pidiendo que regresara
“Tatsu por favor regresa”
“Mi niño podemos arreglarlo”
“Sabes que Papa y yo te amamos, ¿verdad?”
De pronto el celular sonó, era su mama. No sabía si debía contestar o no.
-¡Mama!
-Tatsuya- Se escuchaban sollozos al otro lado de la línea- Tatsu mi niño, ¿estás bien?, ¿estas comiendo?, ¿cómo está él bebe? ¿Fuiste al médico?
Tatsuya al escuchar la palabra bebe comenzó a llorar
- Estoy bien mama; él bebe y yo estamos bien – paso la mano por la leve curva de su vientre
-Tatsu. ¿Porque no contestaste las llamadas?- pregunto con tristeza
-Mama, yo… lo siento, pero creí que me odiabas
-Nunca. Óyeme bien, nunca podría odiarte y sé que lo dices por lo que paso con Hiyo, pero no es que la odie solo es difícil cuando sé que falle como padre y no quería hacerlo contigo, así que perdóname tu a mi hijo y ten seguro que siempre, siempre te amare a ti y a Hiyo, sin olvidar claro a mi nieto- Tatsuya lloraba a mares
- Gracias mama, también te amo
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Kirishima estaba en el marco de la puerta, había escuchado toda la conversación de su esposo e hijo, sabía que Takafumi amaba a Tatsuya con su vida igual que a Hiyori; él sabía que su amado solo sentía culpa, mucha culpa de lo que había pasado con sus hijos y él no se sentía diferente, ese sentimiento latente de impotencia al no poder proteger a tus hijos.
-¿Te sientes mejor?- le pregunto, entrando a la habitación
-¿Tienes rato ahí?, ¿qué tanto escuchaste?- dijo el pelinegro
-Sí, pero dime ¿como esta?- sentándose al lado del más pequeño, mientras posaba un beso en la frente de este
- Parece que en 7 meses seremos abuelos.
Kirishima veía divertido la declaración de su esposo, a pesar de los años Takafumi seguía siendo tan hermoso desde el día en que lo vio por primera vez
- Creo que si mi amor- dijo, besando los suaves labios del pelinegro.
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Tatsuya se había quedado dormido después de la conversación con su mama, él bebe lograba agotarlo, y después de la plática que tuvo con el pelinegro se había sentido un poco en paz, tanto que no recordó volver a apagar su teléfono.
-Halo- respondió soñoliento Tatsuya
-Mi gatito, no pensé que contestaras- Esa voz… era el
“Yusuke”
- Yusuke- dijo por inercia
-Si Tatsu- respondió
-¿Porque me llamas?.... yo – estaba nervioso
-Por favor……. Solo no cuelgues- dijo el mayor
-Yo… está bien, pero no veo de que podemos hablar- dijo serio Tatsuya
-Claro que si gatito- hablo seductoramente
-¡No me llames así!- no sabía porque ahora estaba molesto
-Calma no llamo para molestarte- hablo serio el de ojos verdes- Yo solo- suspiro- quiero saber cómo estas, y aunque no quieras hablar en algún momento debemos hacerlo, ¿no crees?
Claro que deberían de hablar Tatsuya, lo sabía, al final iban a tener un hijo en común
- Yo creo que eso sería lo correcto, pero antes debo decirte que no pienso pedirte nada, no quiero perjudicar tu matrimonio- respondió lo más serio que pudo
Yusuke no sabía porque tenía que pasar esto, toda su vida se volvió una desgracia, se suponía que esto del matrimonio solo sería temporal y jamás pensó que Tatsu iría contra su plan.
-No quiero que digas eso, Tatsu, es mi hijo, llevara mi apellido además cuando me divorcie tienes que regresar conmigo.
Tatsu estaba molesto
- No soy un juguete Yusuke, te amo y por eso estuve todo este tiempo junto a ti, pero ahora debo cuidar de este bebe y no pienso dejar que juegues con el también-contesto llorando- Yo, no sabes lo difícil que es, maldición, tengo dos meses y sabes lo único que deseo todo el tiempo es estar en tus brazos, sintiéndome protegido de todo.
Yusuke nunca había sentido latir así su corazón, porque el también había deseado lo mismo esos dos meses de separación
- Tatsu, mi gatito- hablo con tristeza- Yo jamás he pensado en ti como un juguete; y por favor créeme cuando te digo que te amo a ti y a nuestro hijo; solo dame tiempo por favor lo entenderos pronto.
-¡Yusu!...........
-Te amo Tatsuya
Como lucero que camina en el cielo
Llenos de hermosos destellos
En el infinito deslumbre de un corazón brillante
Eso es un te amo, en un instante
Al perderme en tus ojos; cual llegar Nirvana
Cuan simple palabra de amor, es un te amo
Con el corazón
Tatsuya lloro, el conocía ese verso era el mismo que Akihiko-sensei había escrito para Misaki-san el día de su boda; lo sabía de la boca de Yusuke – “Esas palabras solo son para alguien que robe un corazón de amor.”
Llorando
-También te amo