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Por siempre Hiro-san por conejo_san

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Notas del capitulo:

 

Las palabras se las lleva el viento distorsionadas a placer por las personas, las cuales van perdiendo su verdadero significado.

Agradeceré a aquellas personas  que a lo largo del tiempo se han tomado memos de cinco minutos para escribirme sus comentarios.

Neko Misaki.

Havi.

Melyoan

Matty-chan

Espero que disfruten este capitulo 

 

Capitulo 12: amar en tres segundos

 

¿Alguna vez te has arremetido de tus acciones?

Has roto un corazón en miles de  pedazos, que te es casi imposible volver a unir los fragmentos.

Te has dado cuenta que con el arrepentimiento  no basta.

Una simple palabra la cual en antaño sacaba sonrisas hoy solo es recuerdo del amor *** o solo era cariño ***  que una vez tuviste por una persona.

El humano es cruel por naturaleza, lastimamos aquellos a quienes decimos amar, causamos dolor, Los humanos lléganos hacer tan crueles  con la única persona que una vez nos mostro amor verdadero.

Arrepentimiento, su vida se podía resumir en esa simple palabra, viviendo en la mentira de una familia feliz, la cual solo le recordaba a cada momento que no era completamente feliz.

Pero acaso uno es culpable de amar a una persona,  el amor no es eterno, no claro que no eso solo pasaba en los cuentos de hadas y como si estuviera en uno  su vida se convirtió en fantasía después en una completa mentira

Cuando se caso con su esposa pensó que el amor que sentía por ella no cambiaria a un mas cuando le dio la noticia que pronto en sus brazos tendría un pedazo de ellos la amo mas pero todo cambio cuando conoció a su pequeño tormento de esa manera lo sentía en aquel tiempo.

Shinobu llego a su vida para ponerla pies arriba en ese entonces el era un niño podía recordarlo bien cuando se la pasa sobre sus piernas sentado por horas viendo la televisión o llevándolo a parques para entretenerlo nunca paso por su mente que los cuidados que le brindaba con el pasar del tiempo el pequeño mal interpretaría su actuar para con él.

A un recordaba la primera vez cuando llego de manera estrepitosa a su oficina y lo beso, pero en ese momento lo que pareció algo excitante se convirtió en su razón de vida pues a lo largo del tiempo comprendió que no amaba a su esposa, la conocía de la infancia eran amigos  se caso con ella pues pensó que eso era lo correcto y lo que todos esperaban de ellos  *** no era amor, tal vez costumbre ***  en aquel tiempo pensaba que la amaba y con eso le bastaba.

— Profesor Miyagi  — menciono el castaño el cuan se encontraba sentado en la pequeña mesa de la sala de maestros.

— Si que sucede Kamijou— se levanto de sillón que se encontraba en la misma sala.

— Llevo un rato llamando y no responde.

—  Oh  perdón  solo pensaba que mi hijo cumpliría años la semana entrante— menciono mientras masajeaba su nuca.

—  ¿En verdad tiene un hijo?

—Si es un niño muy tierno a pesar de que esta en la tan llamada pubertad mira este es él— saco su cartera mostrando una fotografía donde se encontraban su hijo posando enfrente de un árbol.

Cuando sus ojos  miraron la foto del joven no pudo evitar poner una mirada de tristeza, su hija tendría la edad del hijo de Miyagi tal vez unos días más que el.

— ¿Qué sucede Kamijou?

— Nada profesor —le regreso la fotografía.

—Mira mi hijo cumplirá catorce la próxima semana  Risako le está organizando una fiesta para que vayas, también lleva a tu pareja y no digas que no, pues he visto a ese joven el cual casi a diario viene a buscarte  y si quieres lleva a un amigo.

—Lo pensare profesor.

—Sabes Hiroki deberías de tenerme mas confianza llevas casi medio año aquí pero bueno tus razones tendrás.

No le dio tiempo de responde pues el profesor Miyagi salió de la sala de maestros el castaño se dirigió a una de las ventana del salón contemplando a los jóvenes que se encontraban en la hora de descanso, su mirada de desplazaba mirando a las chicas que tuvieran algún parecido con él o incluso a su difunto amor, *** a un te puedo ver en las demás niñas, pero cundo te veré a ti ***

Una vez terminada las clases se dirigió a la oficina del investigador que como siempre no le dio buenas noticias después se dispuso a ir a su departamento en donde se dispuso a preparar la cena algo sencillo.

Cuando Nowaki llego tenía una cara de total cansancio ya que este se dejo caer en el sillón pasando sus manos por sus ojos. 

— ¿Cansado Nowaki? — pregunto el castaño sentándose a su lado.

—Si un  día pesado ¿Cómo estuvo tu día Hiro-san? — lo atrajo hacia su cuerpo dándole un abrazo quedando el castaño recargado en su pecho.

—Estuvo bien el profesor Miyagi nos invito al cumpleaños de su hijo ¿quieres ir?

—Si claro.

—De una vez voy a llamar a Akihiko para al menos llevar aun niño y no lo digo por él, debió de haber llegado de su gira hoy.

—  Mientras hace eso voy a darme una ducha para cenar.

El peli azul entro a su habitación mientras el tomo asiento en el sillón llamando a su amigo el cual no le respondió, así continuo insistiendo unas cuatro veces hasta que le contesto.

-.-.-.-. -  ¿Quién diablos es?

—Akihiko soy yo­— dio un suspiro— Hiroki.

-.-.-.-.-  Hiroki ¿Qué quieres? estoy durmiendo.

—Tan temprano no son ni las nueve.

-.-.-.-.-  Y que con eso, acabo de llegar  además todo el día Aikawa no dejaba de fastidiar, no acabo de terminar un libro y ya quiere otro. 

—Aikawa tu editora eso debe de ser gracioso.

-.-.-.-.-  Sabes  deja de fastidiar dime que quieres y déjame dormir.

— ¿Cuánto tiempo te quedaras en Tokio esta vez?

-.-.-.-.-  No se unos días por.

—Me invitaron a una  fiesta.

-.-.-.-.-  Para eso me llamas, eres un imbécil.

—Lo sé —menciono después de una corta risa—es una fiesta para niños puedes llevar al mocoso.

-.-.-.-.-  Te he dicho que no le digas así se llama Takahiro.

—Bueno ¿iras?

-.-.-.-.-  Si mándame la dirección oh y cuentos cumple para llevarle un regalo.

—Cumple catorce ahora ya duerme, señor gruñón.

Termino la llamada siempre era divertido hacer enojar a su amigo, la cena paso en calma después ambos se dispusieron a dormir.

La semana poso con calma revisando algunos trabajos de los alumnos los cuales eran aceptables pero no demasiado por lo cual casi a la mayoría le dio el mínimo para aprobar el trabajo pero había otros que daban lastima el solo leer aunque también excepciones los cuales alcanzaban una nota más alta.

Esa misma semana Le confirmo al profesor Miyagi  que asistiría al cumpleaños de su hijo además de que llevaría a un amigo de igual manera aun niño de diez años. El fin de semana llego su amigo paso por el y Nowaki a su casa para si llegar todos a la casa del profesor Miyagi.

Cuando llegaron pudieron notar la casa de dos pisos amplia perfecta para una familia de tres. Tocaron la puerta de la cual el hijo del director abrió la puerta mostrándoles donde debían de dejar los regalos que tenían en sus manos.

Después de eso  entraron sentándose en la sala no había muchas personas de la que podía reconocer estaba el director de la universidad y su esposa también podía ver a uno que otro joven a los cuales les da la misma edad la cual Miyagi menciono que cumplía  su hijo.

Por una puerta entro Miyagi con su esposa a un lado de el los cuales se acercaron a la sala, el castaño y sus acompañantes se levantaron acercándose a ellos.

—Kamijou hola — ambos se estrecharon las manos.

—Miyagi deja de presento él es… — no pudo terminar su frase ya que fue interrumpido.

—Es Usami Akihiko, soy tu fan—menciono la castaña con sus ojos brillantes.

—Risako  por favor comportante—menciono su esposo al momento de colocarse detrás de ella tomándola de los hombros.

—You—menciono con la cara llena de vergüenza.

—Como iba diciendo  es el Nowaki y el pequeño es…  ¿Cómo dices que se llama Akihiko?

—Serás tonto el es Takahiro— presento el de cabellos plateados  al pequeño de lentes, cabello y ojos negros.

—Hola— saludo tímido el pequeño de unos diez años.

—y ¿Dónde está el del cumpleaños? — volvió a preguntar el de cabellos plateados.

—No debe tardar en bajar— menciono la castaña con una sonrisa en sus labios.

Justo en esos momentos se escucharon los pasos de una persona bajando las escaleras y al igual que los demás Akihiko dio la vuelta encontrándose con el percibió con un ser *** perfecto ***  lo miro bajar las escales a paso calmado.

Uno.

Mirar esos ojos donde solo podía  ver reflejada la inocencia y  pureza de un alma que no ha conocido la maldad de este mundo.

Dos.

Su sonrisa una sincera que había visto en tan pocas personas a su alrededor tan sincera y real,  la cual desprendía solo alegría.

Termino de bajar   las escaleras deteniéndose en frente de todos dando una reverencia — Hola justo en conocerlos—

Tres.

Su voz una tan dulce que deseaba seguir escuchando el resto de su vida tan melodiosa la cual era mejor que el canto de cualquier sirena.

Sin duda él no creía en el amor a primera vista pero justo en ese momento estaba dispuesto a creer en cualquier cosa por que todo su ser le decía que solo deseaba amar a ese joven de cabellos castaños y ojos verdes.

Estaba dispuesto a darle un cálido abrazo cuando alguien se le adelanto, fue cuando miro con sus ojos violetas a su amigo dándole un abrazo al hijo de Miyagi, sin duda eso lo desconcertó tanto a él como a los presentes  que miraban esa escena. Solo uno de ellos miraba con una expresión triste en sus ojos azules pues comprendía el comportamiento de su acompañante en esos momentos.

No sabía cómo había paso todo, simplemente su cuerpo se movió por sí solo,  sus pies caminaron acortando la distancia que lo separaban del joven que sonreía y sus brazos se aferraron al pequeño cuerpo que tenía enfrente y una calidez le inundo el alma, sentía que las lagrimas pronto saldrían de sus ojos cuando el pequeño correspondió su abrazo.

Se obligo a sí mismo a separarse  del pequeño cuando sintió las miradas de todos a sus espaldas. No sabía cuánto tiempo había paso pero supuso que fue bastante.

— ¿Se encuentra bien?—

—Yo en verdad lo siento, no sé que me paso— menciono con  las lagrimas a punto de salir de sus ojos.

—Hiro-san será mejor ir a fuera para que tomes un poco de aire fresco— Nowaki se acerco a él para tomarlo de los hombros  y guio a la puerta delantera.

—Eso fue extraño— menciono Misaki al ver salir a la pareja de la casa.

Risako se acerco a su hijo para conducirlo al jardín trasero donde se encontraban sus amigos seguidos de unos ojos violetas que no le quitaban la miraba al castaño de ojos verdes.

Mientras tanto  Nowaki miraba como Hiroki trataba que las lágrimas no salieran de sus ojos, apoyado en la pared de la entrada.

—Que pasó Hiro-san—

—No lo sé Nowaki, ni yo mismo comprendo que me paso, simplemente no lo comprendo.

—Todo está bien ahora solo tranquilízate si— le dio un abrazo tratando de trasmitirle un poco de paz.

Una vez más tranquilo regresaron a la sala en donde los demás los esperaban, cuando detuvieron los demás los miraban con miradas extrañas.

—Se que desean explicaciones de mi comportamiento pero este no es el momento para ello— menciono el castaño

Nadie menciona nada simplemente continuaron con su plática sin prestar atención realmente al castaño que se dirigió  a una de las ventanas de la habitación la cual daba al jardín, pudo ver al pequeño que hacia caras extrañas a su amigo el cual le hablaba mientras se acercaba a el de una manera nada apropiada para un pequeño de su edad.

Desvió la no quería ver al joven y sin sentir lo que le provocaba,  no había una razón o un porque simplemente…

—Que mira Hiroki— pregunto Risako mirando hacia la misma dirección— pero que.

No  le dio tiempo de responde cuando la miro salir del la casa en dirección de su amigo separándolo de su pequeño hijo, mirándolo con enojo y gritándole unas cuantas verdades al mayor mientras abrazaba al castaño como una madre protectora con los amigos del castaño como espectadores.

Ya no quería ver lo que ella tenía y el solo podía anhelar que algún día llegara a su vida, camino a una pequeña vitrina la cual tenía fotografías de la familia  Miyagi pasando su  mirada una por una, abrió grandes los ojos al darse cuanta que en dichas fotos se encontraba la pareja sola en una parte de ellas, después aparecía Misaki junto a ellos  con lo menos cinco años de edad

*** No puede ser será acaso que Misaki no es hijo de Miyagi y si él es adoptado***

De repente la luz se fue dejando en completo silencio la casa, al igual que la música dejo de sonar afuera. Hiroki se acerco a los demás.

Será mejor que vaya a ver qué sucedió debió de ser un fusible— dejo el dueño de la casa mientras se ponía de pie

—Te acompaño you—

—Eres un chico irrespetuoso Shinobu—

—No estoy en la escuela así que puede llamarte como quiera— siguió al mayor a lo que parecía ser el sótano de la casa.

Cinco minutos después regreso la energía y la música continuo por la puerta Risako entro tomando de la mano a su hijo seguidos de cerca por el de cabellos plateados saliendo varios minutos después con una charola con bebidas y algunos refrigerios dirigiéndose una vez más a la salida.

Misaki salió después acompañado del hombre de  ojos violetas acercándose a los demás mirando al castaño el cual parecía mirarlo con un poco de ansiedad.

—Misaki podrías ir a buscar a tu padre se fue hace casi veinte minutos —

—Si abuelo— respondió con una sonrisa.

Hiroki los miro caminar y una idea paso por su mente *** ¿Reconocería a la persona más importante de mi vida a un sin haberla conocido?***

El castaño se dirijo hacia la misma dirección que tomara el rubio y el  de cabellos negros seguido por Akihiko *** ya me está empezando a cansar que me siga como un perrito faldero o mejor dicho un conejo***

Hacía tiempo que sus cuerpos se habían quedado sin ropa, era excitante el tener sexo en medio de la fiesta de cumpleaños de su sobrino  con el mayor en medio de sus piernas penetrándolo de una manera que le hacía llegar a ver estrellas.

—Miyagi así deme mas— jadeaba en medio de su excitación el rubio.

El mayor permitió que hablara fuerte pues con la música de afuera dudaba que alguna persona los escuchara y continúo con sus penetraciones al cuerpo del mas joven,

—Papá estas ahí — el llamado del pequeño les hizo detenerse.

Las luces se encendieron, estaban escondidos en la parte trasera de las escales sabían que si el pequeño terminaba de bajarlas serian fácilmente visibles para él y los descubrirían en medio del su acto de lujuria.

*** Si  te digo la verdad algún día podrás perdonarme, no hay noche que lo ultimo que susurren mis labios sea su nombre ni mañana que lo primero que digan en secreto mis labios sea su nombre, perdóname  cuando te diga la verdad solo eso pido ***

¿Te arrepientes de tus actos?

Grita una y otra vez Pidiendo perdón hasta que tu garganta se desgarre.

Arrástrate por el suelo hasta que tus rodillas y manos te sangren.

Llora como nunca lo has en tu vida hasta que tus ojos se queden complemente secos de lagrimas.

Pide perdón aun sabiendo que nunca serás perdonado.

En ese momento el gran secreto que por años había guardado estaba a punto de salir a la luz, solo lamentaba que la persona que lo  iba a descubrir era su amado hijo.

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Tocaron a la puerta, cuando dio el pase por ella entro su hombre de confianza

—Señor ya quedo todo lo que dispuso mañana comienza todo.

—Perfecto pronto mi hermosa flor estarás en mis brazos el como lo hagas dependerá de ti— menciono con una sonrisa en sus labios.

El otro hombre salió dejando a Betenea solo en su oficina el cual se paro entrando a una puerta continua encendió la luz  en donde se podía ver las paredes tapizadas de fotografías del castaños tomadas en diferentes  lugares al lo largo de los meses.

No comprendía el cómo podía estar enamorado de una persona la cual solo había visto e interactuado tan pocas veces, pero como dicen en el amor nadie mando al igual que en la guerra y esa era una que él no estaba dispuesto a perder.

Pensaba que amaba al castaño pero a veces la obsesión es confundida con el amor y eso destruye vidas.

 

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Tres mese después

Ese día no había sido lo que esperaba los chicos en la escuela la continuaban molestando no entendía el porque, tal vez las hormonas los tenían alborotados

Llego a casa llamo a su padre el cual no contesto sabia que esos días el tampoco lo había pasado bien hace algunos meses,  la situación se agravo mas cuando perdió  su empleo y no consiguió uno nuevo las deudas se iban acumulando y el termino en la bebida, ***  ya no es el hombre de antes, extraño verlo sonreír solo para mi ***

—  Papa ya estoy en casa

No encontró contestación sus pies la guiaron a la habitación de su padre lo que miro al entrar  la dejo totalmente horrorizada  su padre se encontraba en medio de un gran charco de sangre con una pistola en su mano sus cabellos negros manchados con el mismo liquido vital

Sus ojos se llenaron de lágrimas, las piernas apenas le respondieron yendo en donde estaba el cadáver del hombre que la había llenado de amor se encontraba pálido, se arrodillo ante el comando su cabeza entre sus manos

— ¡papá, papá no, no  ¿qué hiciste? papá, no me hagas esto por favor! — lagrimas comenzaron a salir de sus ojos junto con los gritos llamando al cuerpo inerte entre sus manos.

Coloco su frente junto con la de él dejando que las lagrimas mancharan la cabeza del hombre, momentos después solo se recostó a un lado del cuerpo sin vida.

*** Papá por favor vuelve si, no me dejes sola ***

Se quedo en esa posición hasta entrada la tarde hasta que alguien llamo a su puerta eran dos de sus compañeras  de la escuela las cuales se preocuparon pues tenían que hacer un trabajo en equipo y ella no se había presentado.

Cuando llegaron estaban las luces apagadas pero como apenas estaba anocheciendo todavía había un poco de luz, la puerta estaba abierta por lo que se tomaron el atrevimiento de entrar, revisaron la planta baja al no encontrar a nadie subieron las escaleras  encontrando una escena un poco escalofriante donde miraron a la pequeña con los ojos  abiertos con su cabeza en el pecho del cuerpo sin vida.

El grito que dieron se escucho mas haya de esas cuatro paredes, salieron corriendo aun gritando algunos vecinos  que se encontraban por ahí las detuvieron las cuales les dijeron lo que se encontraba adentro de la casa, ellos llamaron a  la policía.

Cuando esta llego entro a la casa encontrando la misma escena  encendieron las luces se acercaron para asegurarse si la pequeña aun tenia vida pues no había realizado algún movimiento pero todo cambio cuando la tocaron, pues perdió de inmediato el control gritando que no la tocaran y que le dejaran sola con su padre, los policías solo atinaron a tomarla entre sus brazos para llevarla a una de las ambulancias que se encontraba afuera.

— ¡No, déjeme papá, papá, no suélteme, no papá reacciona, por favor  diles que me dejen papá, papá¡ — lloraba extendiendo sus manos hacia  el cuerpo que perdía de vista mientras salía de la habitación en brazos de un oficial.

Cuando llegaron a la ambulancia le tuvieron que poner un sedante ya  que se entraba  en un estado de crisis, los oficiales que se quedaron en el lugar después de tomar fotos para el registro todos llegaron a la misma conclusión el hombre se había suicidado  dejando  su pequeña hija Mel  sola.

 

Notas finales:

 

Gacias por leer 


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