Mientras caminaban por los pasillos Santiago trataba de recordar el camino para no volverse a perder como lo había hecho anteriormente, se avergonzaba al recordar cómo se había perdido a no más entrar por la parte equivocada a la escuela, era más que obvio que esa no era la entrada, sin embargo el siguió hasta que llego a un patio con hermosos rosales que hacían un perfecto camino hacia un invernadero, y en su curiosidad no hizo más que dirigirse al invernadero en donde encontró un hermoso piano de media cola, en medio de hermosas rosas y flores de unos colores fríos, le daban una imagen al piano muy misteriosa y no pudo evitar dirigirse a este y ceder ante la tentación de tocarlo, al tocar ese piano se sintió en perfecta armonía con todo lo que le rodeaba, y se sumergió en la notas que sus manos interpretaban, en esa melodía que el mismo había creado en el mismo momento en que empezó a mover sus manos en ese piano, se rio ante el hecho de que la melodía lo tenía tan absorto que ni siquiera se dio cuenta que alguien se había parado a escucharlo, y de pronto cayo en que la cara de afligida que tenía su profesora fue porque seguramente descubrió algo en la melodía una parte de él, se preocupó ante ese hecho pero sonrió ante el pensamiento de que aunque una melodía podía mostrar hasta el más profundo ser dentro de uno mismo, los demás difícilmente logran descifrarla y eso es lo que les atrae , así que no había nada de qué preocuparse e incluso se alegró un poco de haber tocado el corazón de su profesora aunque después lo regañara indirectamente, y terminando su recorrido de pensamientos al fin habían llegado a la gran puerta de la oficina del director.
La profesora Elizabeth toco la puerta tres veces y espero la respuesta, al oírla abrió la puesta lentamente y entro, se voltio a ver al joven estudiante dándole a entender que podía entrar y este cerró la puerta al pasar, se enderezo y espero indicaciones.
-Vaya así que la señorita Elizabeth se ha encontrado con el señor Jack, es un alivio, sus padres me informaron que es increíblemente despistado y talvez se perdería de camino al edificio- el Director se rio y después de examinarlo a los ojos por unos segundos prosiguió – Es un verdadero placer tenerlo en nuestra hermosa institución señor Jack, nosotros ya tenemos todo el procedimiento de su transferencia hecha así que por eso no se preocupe, esperamos grandes cosas de usted. _después de que el joven asintiera ante lo que dijo, el director prosiguió a presentarse –Yo señor Jack, soy el director de la escuela, Gabriel Alejandro White Dévore espero ser de ayuda cuando lo requiera señor Jack – Y con eso Santiago ya sabía más o menos con quien trataba, el director era un hombre alto, con pelo café oscuro largo atado a una cola de lado, delgado pero no exagerado, con una mirada altiva pero a la ves picara en sus ojos miel, era un hombre que se movía con gracia, y que el solo hecho de verlo te deja más que claro quién es el que manda, su voz, dulce pero potente, nada brusca, pero con un tono de sarcasmo y ironía que te dice que lo más probable es que de esa boca, con esa sonrisa gatuna, salgan las palabras más acertadas e hirientes si te atreves a hacerlo enojar ciertamente la imagen del director desde su punto de vista era de alguien a quien le encantaba humillar a quien le desafiara pero también noto que era un hombre sensato e increíblemente inteligente, le agrado de sobremanera el director tenía una gran personalidad desde su punto de vista.
El director en ese momento noto como el niño lo examinaba sonrió ante los posibles pensamientos perspicaces e intuitivos del niño, ciertamente el niño era bien parecido con su pelo rizado pero no exagerado, ondulado seria la descripción más acertada, aseguro este, los ojos y sonrisa del joven reflejaban una máscara perfectamente elaborada, en donde supuso, era el tipo de joven que nunca reflejaban su verdadero ser a nadie, más que con sus creaciones, lo cual le dio una pequeña curiosidad de saber la manera de tocar del señor Jack , voltio a ver a la profesora y la alabo mentalmente por quedarse en la misma posición con la misma expresión desde que entro, viendo la hora y redirigiendo la mirada al señor Jack opto por darle las ultimas indicaciones.
–Bueno señor Jack le informo que aunque haya estado en último año en su anterior escuela el mecanismo de enseñanza es diferente acá así que va estar aquí por uno 3 años más, dejare que la profesora Elizabeth le diga todo sobre la escuela, y sobre su clase si tiene alguna duda entiéndase con la profesora Elizabeth o con algún otro profesor –Con eso el director hiso un ademan con la mano que la profesora entendió y nuevamente le señalo el camino al joven.
Mientras caminaban la profesora aprovecho para explicarle lo principal al joven Santiago –Bueno para empezar en esta escuela hay un mecanismo diferente que las otras, aquí hay cuatro clases a las que puedes ingresar y dentro de estas clase grupos a los cuales serás asignado según una prueba que te harán al escoger tu clase, entre estas clases están danza, instrumental, actuación y artístico. En el artístico puedes incluir todo lo de pintura escultura entre otras cosas aunque para no hacer mucho alboroto estos de subdividen en pintura, escultura y diseño. En danza se subdivide al igual que en el artístico solo que en este caso sería desde baile de salón, hip hop, danza popular de distintas regiones, entre otras y por ultimo esta la instrumental en esta hay solo tres subdivisiones, entre estas canto y instrumental, pero tampoco significa que tengas que aprender a utilizar todos los instrumentos, tu escoges a tu instrumento y si quieres aprender a tocar otro están las clases especiales impartidas por el profesor Jone. Pero aunque no escojas danza es obligatorio que todos en esta escuela aprendan el baile de salón cuya clase la imparte la profesora Clara.
– ¿Entonces, nada más nos impartirán las lecciones de acuerdo a la clase que elijamos? –La profesora sonrió ante la pregunta y le respondió – Por supuesto que no, señor Diamond además de las lecciones de la clase que elija también recibirá otras lecciones que compartirá con otros grupos en su horario tendrá la clase de historia del arte y música conmigo, la clase de interpretación dinámica con el profesor Bartolo, la clase de ciencias ambientales con la profesora Lilian, la clase de ritmos con la profesora Gloria entre otras, en nuestra escuela recibirás un poco de todo desde la actuación hasta la danza moderna, pero puede escoger sus horarios como mejor le convengan así que no se preocupe mucho por eso señor Diamond. –dicho eso la profesora se dedicó a mostrarle el edificio. Al llegar a un punto del edificio donde se distinguían un poco lejos del lugar cuatro diferentes edificios la profesora Elizabeth le dijo con su usual cara severa.
– Los cuatro pequeños castillos que ve ahí señor Diamons es el lugar donde reposan las casas –Santiago se acercó a la ventana y se fijó en cuatros castillos pequeños comparados con en el que estaban ellos ahora pensó, pero al verlos mejor hubo algo que le llamo la atención –profesora, ¿que son eso símbolos que apenas se ven en ellas? –volteo a mirar a la profesora para que le respondiese y esta asi lo hiso –Esos son los símbolos que distinguen a los grupo, como le he explicado anteriormente al escoger una clase se le hará una prueba para ver en qué grupo queda, en el símbolo del ojo de águila se encuentra la casa de Aquila, analíticos, prudentes y serenos e inteligentes. En el que tiene el símbolo del mar está el grupo Cetus tranquilos, y espontáneos además desde, mi punto de vista también son encantadores. Agrego la profesora con una sonrisa. Los del símbolo de la luna son el grupo Lupus sigilosos, prudentes, un poco cerrados con otros grupos, pero muy activos hay que mencionar. Y finalmente el del signo del ala son el grupo de Cygnus, son elegantes, inteligente, con gracia, y prepotentes son un grupo muy orgulloso más por el hecho de ese grupo está conformado en su mayoría por hijos de personas importantes. Dicho esto último con una mueca siguió avanzando hasta llegar enfrente de otra puerta donde arriba tenía el rotulo de historia AyM , Santiago supuso que habían llegado al salón de clase donde la profesora Elizabeth impartía su clase de historia, la profesora entro a la clase con su postura recta y a paso decidido, diciéndoles a todos que se sentasen, al parecer estaban sorprendido porque aún no había tocado el timbre pero, al entrar Santiago este sonó.
–Bien clase les presentare a un nuevo compañero, que estará con ustedes en el transcurso de los próximos años. –dicho eso la profesora Elizabeth volteo a mirar a Santiago como indicación de que podía entrar y este no se hiso esperar entro tranquilo a paso lento y se volteo a mirar hacia sus nuevos compañeros , raro pensó estaba dentro de un salón de clase pero tanto los alumnos como la clase lucían tan distinguidos que fácilmente podría confundirse esta escena con alguna reunión en especial, sonrió ante ese pensamiento y se enfocó en las miradas de sus nuevos compañeros, muchos los miraron interesados, otros con emoción y muy pocos con indiferencia, espero a que la profesora lo presentara.
–Bueno les presento a Santiago Jack Diamond espero que lo ayuden a guiarlo desde ahora, señor Diamond, por favor siéntese en al asiento vacío junto a la ventana. – Santiago procedió a caminar hacia su asiento, en el transcurso de la clase todo transcurrió con normalidad, al terminar la clase, vio que todos habían empezado a movilizarse y se dirigió a la profesora Elizabeth para preguntarle sobre el horario.
–profesora, sobre mi horario. –antes de decir algo más la profesora Elizabeth le dio las siguientes indicaciones. –Señor Diamond, venga conmigo a la sala de pruebas por favor. –Santiago sorprendido por la palabra prueba volvió a preguntar. – ¿Sala de pruebas? –La profesora lo miro con una ceja arqueada como si lo que le acabase de decir fuese de lo más obvio hasta que se decidió por despejarle la duda al muchacho. –Si Señor Diamond, necesitamos hacerle las pruebas para ver a que grupo pertenece, ya se lo había explicado, me sorprende la facilidad con la que se le olvidan las cosas señor Diamond. –Santiago se avergonzó, desvió la mirada de su profesora un segundo para luego verla con una sonrisa apenado, la profesora Elizabeth camino hacia la puesta y nuevamente le indico que la siguiera, caminaron por varios pasillos hasta que se encontraron con una puerta blanca con un rotulo a la par en los que Santiago vio unos símbolos los cuales identifico como los símbolos de los grupos.
La profesora abrió la puerta y Santiago vio a un hombre sentado en una silla con las piernas cruzadas leyendo un libro muy tranquilamente al lado de la ventana, el hombre castaño con ojos cafés lo miraron indiferente, y un poco molesto por el hecho de haber interrumpido su lectura. La profesora Elizabeth entro y le dirigió una mirada molesta con sus ojos azul profundo que hiso que el hombre se parara y presentase.
–Supongo…que vienes a hacer la prueba de selección del grupo. –Santiago asintió. –mmm Bueno y ¿dime a que clase quieres entrar? –Santiago se extrañó un poco por la pregunta pero igual respondió. –A la clase instrumental. –dicho eso noto que la profesora Elizabeth ya se había ido por la puerta, y se dedicó un corto tiempo a examinar la habitación, se sorprendió un poco al ver que ahí habían desde el instrumento más raro, hasta el más simple, además de que también hayo que ahí había todo el equipo desde pintura hasta equipos de actuación. –bien y ¿qué instrumento tocas? –Santiago volvió a dirigirle la mirada al hombre y le respondió con una sonrisa. –El Piano –el hombre lo analizo unos segundos y le volvió a preguntar. –tocarías para mí una pieza por favor cualquiera está bien.
Santiago se dirigió al piano y lo contemplo por unos segundos, después se sentó y empezó pensar que pieza tocar hasta que dio con una que él había compuesto y empezó. El hombre se quedó sentado prestándole toda su atención a Santiago, al escucharlo no pudo evitar cerrar sus ojos y dejarse llevar por la melodía, era una melodía que se enterraba en lo más profundo de tu ser llevándote a otro lugar lejos de la realidad, misteriosa había algo indescifrable en la melodía que atraía a quien la oyese, el pensamiento del hombre era como si vieses un bosque y aunque no sabes que es, sientes que el bosque tiene algo que te tienta a averiguar que es, pero que a la vez te lo niega y te prohíbe el paso.
Al terminar la melodía el hombre miro al joven y se dio cuenta que ese muchacho oculta muchas cosas dentro suyo, y realmente no tenía que preguntar para saber que la melodía la había compuesto el mismo, ya que la melodía gritaba a horrores que el joven la había hecho, el hombre tenía la habilidad de ver una autentica creación y ser, de un artista. En los actores el hombre veía con que magnitud los jóvenes trataban de adentrarse, él siempre les daba a escoger ya sea su interpretación, personaje, escena, pintura, paso o estilo de baile, así hacia que el talento de los jóvenes se desenvolvieran más en su propio territorio y poder examinarlos más a fondo para ponerlos en un grupo, y ya tenía más que claro en donde iba a entrar Santiago.
–hermosa pieza,¿ tú la hiciste? –pregunto a pesar de que ya sabía la respuesta. –Si, se llama cuna de otoño. –respondió Santiago, mirando con interés la pluma que estaba utilizando el hombre para hacer algunas anotaciones. El hombre al voltear a verlo se acordó de algo esencial que había olvidado. – ¡OH! vaya pero que descortés de mi parte, disculpe mi falta de educación joven estudiante mi nombre es Víctor Alexander Della Rose un placer imparto la clase de psicología artística y a la ves soy guía del grupo Cytus, sin mencionar que me hago cargo de la elección de grupos. –Santiago se impresiono un poco al escucharlo decir clase de psicología artística puesto que no se imaginaba el hecho de tener una clase así, pero sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando la profesora Elizabeth entro a la clase.
–¿entonces Víctor ya terminaste de seleccionarlo? –pregunto la profesora Elizabeth que parecía que entraba en una etapa de irritación cada vez que le dirigía la mirada al profesor de psicología, el cual solo reía ante el efecto que causaba en esta y respondía. - ¡AH! Pero si es la profesora de historia no tuve el honor de saludarla al principio ya que se fue precipitadamente antes de siquiera dirigirle la mirada tiene miedo de algo su increíble alteza? –dijo con un tono de voz burlesco y exagerados gestos y ademanes con las manos. –bien sabrás, que no me gusta que me provoques así que apresúrate y dame los resultado para llevar al señor Diamond a su respectiva casa. –respondió la profesora Elizabeth casi escupiendo fuego por la boca con tono y mirada realmente amenazadores. –Esa mirada tuya más de hielo no podría ser, si las miradas mataran ya me tendrías encerrado en un iceberg pero como no quiero tentar contra mi suerte. –hiso una pausa y dirigió la mirada a Santiago que veía con disimulada diversión en su rostro la escena frente a él, pero que no paso desapercibido por el profesor que afirmaba cada vez más el hecho de adonde iba a mandar al chico y con una sonrisa le dijo al joven. –Joven Santiago, déjeme informarle que desde hoy es uno de los lupus, las características de todo un lobo ni más ni menos. –dicho esto la profesora procedió a respirar profundamente y mirar a los ojos a Santiago para decirle.
–puesto que ya tenemos a tu grupo será mejor que no nos retrasemos y te mandemos con ellos una vez ahí te dejare a cargo del líder de los lupus, de paso que te den el uniforme respectivo a tu grupo, dicho eso en marcha. –la profesora trato de salir de la clase lo más rápido y normal que pudo pero cuando abrió la puerta alcanzo a escuchar. –Elizabeth, espero que estés lista para este fin de semana después de todo te toca turno conmigo. –dijo el profesor Víctor con el usual tono burlesco hacia la profesora Elizabeth, esta solo se voltio, miro sobre su hombre y le dirigió una mirada inexpresiva pero sin dejar de ser amenazante voltio hacia Santiago hiso un elegante ademan con la mano indicándole que le siguiera y sin más salió del salón con Santiago, dejando a un divertido profesor en la silla de la ventana.