MISSING
By Angie
Capítulo Nº 2…
A Kyungsoo no le gustaba los días de lluvia… claro… tenía sus razones para ello.
Es que las veces que había llovido de aquella copiosa manera, él había recibido las peores noticias. Hace ya varios años fueron sus padres; hace unos meses su hermano pequeño y su cuñada.
No, en verdad a él no le agradaba nada ese clima, de hecho odiaba los días así, es que casi no se podía ver nada a su alrededor, volviendo todo tan complicado, entre la impaciencia de la gente y la falta de coherencia de otros, él tenía que estar más atento que de costumbre y eso era mucho decir.
Cuando recibió la llamada informándole de la reunión, estuvo muy tentado de rechazarla y quedarse en su casa, pero se recordó que trabajo era trabajo.
D.O no era alguien con problemas económicos, todo lo contrario, él contaba con una buena suma en el banco, ganado con sus esfuerzos ya que su trabajo era bien pagado. Era por esa razón que había acudido a la reunión con aquellos sujetos.
A él le gustaba trabajar en casa, si, pero sabía que tenía que asistir a estas reuniones para poder entender el concepto y necesidades de sus clientes. Por fortuna la junta fue exitosa y ahora se dirigía de regreso a su casa, donde podría dedicarse a hacer la parte, según él, más divertida de todo eso.
Detuvo su auto en un semáforo y esperó el cambio con mucha paciencia dado la cantidad de autos. Tal vez tendría que esperar más de la cuenta, en ese momento sonó el celular, conecto el bluetooh.
-Hola- dijo tranquilo siempre mirando al frente.
-¿D.O como salió todo? – escuchó que preguntaban.
-Como siempre Wu Yi Fan - dijo simplemente.
-¿Aun sigues enfadado?- consultó el rubio- Ya te pedimos perdón.
-…-
-Hay no!!! ¿Porque DoDo no nos quiere?- oyó chillar a ChanYeol
-Quieres cerrar el pico - regañó Luhan
-Tranquilo chicos - pidió Suho - Pequeño D.O
-Si - respondió por fin.
-Realmente lamentamos lo que pasó – se disculpó el mayor.
-Está bien – suspiró el pelinegro – Pero la próxima vez no me pongas de excusa para ir al sitio sólo vayan y róbense el corazón de esos chicos – largo de sopetón, rio entre dientes mientras cortaba, es que Yeol y Luhan habían comenzado a tartamudear.
La bocina de un claxon lo volvió a poner alerta, la gente no entiende que debe tener paciencia, resignado vio cambiar el semáforo. Pisó con suavidad el acelerador aflojando el embriague, sabía que con esa lluvia aumentando de aquella forma, provocaba que se viera cada vez menos. El auto avanzó sin problemas, casi había terminado de cruzar la intersección, no había terminado de regañarse a sí mismo por ser tan paranoico cuando de reojo notó algo.
Distinguió a alguien corriendo, se acercaba a la esquina a gran velocidad y se dio cuenta que no tenía las intenciones de detenerse, Kyungsoo pisó el freno…
Quizás en un día soleado, tal vez simplemente en otro momento su auto hubiera respondido como era debido, porque a pesar de no ir muy rápido el agua le impido detenerse. Vio pasmado como el cuerpo de aquella persona recibía el impacto para luego volar por sobre el capo del auto. Tan alto que en verdad le dio miedo pensar en el estado de aquella persona.
De inmediato bajó del auto, caminó presuroso hacia el cuerpo inerte, poco lo importo mojarse en aquel momento. Marcó a emergencia mientras revisaba si el chico tenía pulso, sintió un gran alivio al darse cuenta de que lo había encontrado.
Kyungsoo le informó al chico de emergencia que lo había pasado y donde estaban. Mientras hablaba elevó su vista para ver de quien huía el joven tirado en el piso. Desde la vereda varias personas los observaban y hablaban entre ellos, pero luego como si nada pasara se retiraron a paso lento.
La ambulancia tardo más de lo que la paciencia de D.O pudo soportar, mientras esperaba llegó la policía y tuvo que explicar lo que sucedió, varios peatones se ofrecieron como testigos, a su favor, ese hecho lo liberó de cargos pero no así de ir a la comisaria.
Antes de irse le pidió le informaran dónde llevarían al chico, ya que él se sentía responsable aunque no había hecho nada malo. Resolvió todo lo antes posible, ya que su prioridad en ese momento era averiguar cómo estaba el muchacho.
Arribó a la cruz Roja, sabía que estaba allí, el doctor de emergencia le había hecho el favor de decirle antes de que se fuera la ambulancia. Llegó a informes y pidió le informaran sobre el paciente, después de hacer unos trámites, ya que él se haría cargo de los gastos, le indicaron a donde podía encontrar al muchacho.
Caminó presuroso hasta la sala de emergencias, vio una enfermera y preguntó por el joven, ella lo guio hacia donde estaba esa persona, junto a él había un doctor revisándolo, se identificó y pidió le explicaran la situación del jovencito que él había atropellado.
Observó al pobre chico sobre la cama, aunque a simple vista se veía bastante maltratado, lo vio dormido y tranquilo, tenía la cara llena de moretones, la boca hinchada, vendas en el brazo, alrededor de las costillas, también tenía cubierta ambas manos, oh si y además llevaba una bota de yeso en el pie derecho.
Suspiró frustrado pensando en el lio, en el que se había metido, aun se preguntó cómo fue que el chico recibió tanto golpe si el vehículo no llevaba tanta velocidad.
-No se preocupe - dijo el doctor - el joven Kim estará bien – aseguró el hombre de bata.
-¿De verdad?
-Si- afirmó el galeno – antes de sedarlo el señor Kim nos explicó a nosotros y a la policía de esas personas que lo seguían y su previa pelea la mayoría de las heridas que usted ve son a causa de esa riña, además de que esa fue la razón por la que cruzó sin mirar - le explicó mientras terminaba de escribir en una hoja – asimismo agregó que lo que paso fue sólo culpa suya – comentó el doctor sonriendo.
Kyungsoo asintió y tomó asiento junto a la cama luego que el hombre se retirara. Le mandó un mensaje a su vecina explicándole lo sucedido. Luego... esperó y esperó…
Llevaba una hora y media allí esperando y no pasaba nada, antes de empezar a dormirse decidió tomar un poco de café, se puso de pie y corrió las cortinas para darle algo de privacidad al chico. Apenas había dado un paso cuando vio entrar a la sala un par de chicos con cara de preocupados, extrañamente se acercaron a él sin dudarlo.
-Señor D.O – oyó que lo llamaban, el mencionado frunció el ceño al no recordar aquellos jóvenes rostros – ¿No nos recuerda? - Cuestionó el más bajo de los recién llegados.
-Disculpen, soy muy malo para recordar rostros - se excusó.
-No se disculpe – intervino el rubio alto – Yo soy Hwang ZiTao y el es mi pareja Chen, somos los amigos de Kai.
-Kai- el mayor pensó un momento – Oh! Si, el anfitrión ¿cómo esta él?
-Eso venimos a averiguar – dijo el chico llamado Chen -¿usted no lo ha visto?
-Pues… no, yo no lo he visto – murmuró Kyungsoo, pero luego giró su cabeza hacia la cortina y pensó en el rostro del dormido Kim por alguna razón le había parecido familiar pero su preocupación pudo más que ese detalle y olvidó aquel antecedente – No creo que fuera cierto – murmuró para sí, aun así preguntó para aclarar sus dudas – Disculpen ¿cuál es el nombre verdadero de Kai?
-Kim JongIn…
-Oh!... – sus ojos expresaron sorpresa y luego volvieron a esa normalidad extraña - entonces si lo he visto – anunció sin más.
-¿Él… él está bien?
-Tan bien como se puede estar después de que lo atropellaron – los muchachos contuvieron el aliento ante aquella noticia – tranquilos él estará bien, a pesar de todo.
-Quiero verlo – Murmuró JongDae, fue entonces que Kyungsoo se giró y corrió la cortina, allí estaba el muchacho aun dormido – ¿de verdad está bien?
-Sí, sólo está durmiendo producto de los calmantes que usaron – aclaró el pelinegro – hablé con el doctor hace un rato, me aseguró que todo estaba bien – afirmó.
-¿Pero cómo es que usted está aquí con él? – Cuestionó ZiTao
-Yo lo atropellé – aclaró D.O – llovía mucho, estaba cruzando la intersección principal cuando de la nada salió él, intenté frenar pero no funcionó al parecer no fui muy rápido – pasó un segundo y agregó - Aunque creo que él venía escapando de alguien…
-Ellos lo golpearon ¿verdad? – Cuestionó un serio rubio, el mayor asintió - esos malditos desgraciados – gruñó apretando los puños.
-¿De quién hablan? – se interesó el pelinegro.
-JongIn tiene una deuda con un prestamista – confesó Chen – en realidad esa deuda es de su padre, como el murió la deuda pasó a ser de Kai.
-Pero esas personas lo golpearon demasiado – magulló el mayor de los tres.
-Es que él no pudo pagar los intereses de la deuda – comentó el castaño – cuando él enfermo el jefe le impidió que volviera a “Whisper” hasta que estuviera recuperado, el problema es que JongIn sin empleo… no tiene…
-Cariño creo que estás hablando de mas – Intervino el más alto.
-Pues sería conveniente que descansara en un lugar seguro que no conozcan estas personas – comentó Soo pensativo.
-Eso sería ideal, pero a nosotros ya nos conocen y saben nuestras rutinas de trabajos y estudio – murmuró el rubio - tendremos que buscar otro lugar para ocultarlo hasta que se mejore.
-No se hagan problema yo me hare cargo- anunció sin más Kyungsoo.
-¿Qué?- ambos chicos estaban muy asombrados.
-Eso lo que escucharon es mi responsabilidad cuidarlo hasta que se mejore - dijo el pelinegro sin inmutarse.
-Pero…
-Es mi deber yo lo choque - razono D.O- Ustedes no disponen de tiempo y yo si – argumentó
-No creo que le guste la idea – comentó Chen pensativo.
-Pues será mejor que se aguante, no suelo molestarme, pero en verdad odio que me contradigan – señaló serio – ¿iré por un poco de café ustedes desean una taza? – ambos chicos negaron, el mayor salió de la sala con paso seguro.
-Tiene cara linda pero da miedo – murmuró el menor pegándose a su novio.
-Si es cierto – secundó Tao abrazando a su pareja. Un quejido los obligó a girar, al parecer su amigo acababa de despertase.
JongIn abrió sus ojos, lo primero que llegó a él fue el olor a antiséptico, pestaño confundido hasta que intento moverse, un fuerte dolor lo inmovilizó por un par de segundos.
Intentó mover sus manos, mismo dolor diferente zona, se preguntó luego de un rato si había alguna parte de su cuerpo que no doliera. Y allí recordó a esos tipos, la pelea, su huida, la lluvia y aquel auto…
Simplemente pensó cuando se vio volando en el aire, que al fin descansaría, que buda, Kami-sama o como quiera que se llamara seria piadoso y lo dejaría morir.
Pero qué va! Él dolor que sentía en los labios, al intentar sonreír con ironía por sus pensamientos le demostraba que estaba vivo.
Además de esos, escuchó claramente el llanto de Chen y la vos pausada de su novio intentando calmarlos. Abrió los ojos otra vez, ladeó el rostro en el momento en que Tao besaba la mejilla de JongDae.
-Ni estando enfermo se dejan de presumir – murmuró con una vos pastosa y extraña.
-JongIn!- exclamó su amigo separándose de los protectores brazos de su pareja - mira ¿como estas?- sus ojos se llenaron de lagrimas - ¿porque no te quedaste en casa? – protestó luego de controlarse.
-Dae te lo dije… tenía que intentar que me diera tiempo – musitó - tenía que hablar con él.
-Veo que no sirvió de nada – comentó el rubio.
-No… ese pervertido - magulló Kai - él quería…
Las palabras murieron en su boca al ver al hombre que estaba parado allí mirándolo, en sus manos sostenía una humeante taza de café.
¿Qué demonios hacia el señor Kyungsoo allí? ¿Por qué demonios lo miraba con el ceño fruncido? Y ¿cuánto de su patética historia había escuchado?