Missing (Perdido)
By Angie
Capitulo 5
El clima no era muy bueno, en ese momento, aún así el hombre del tiempo aseguraba que el día siguiente no habría ni una nube en el cielo. Eso tranquilizaba un poco al joven llamado Kai, es que al día siguiente Kyungsoo partiría a EE.UU.
Un extraño sentimiento de pérdida amenazaba con tomar control de su sistema nervioso, meneó la cabeza alejando todas aquellas emociones. Kyungsoo había salido temprano y él se quedó a cargo de su sobrina, eso incluía ir por ella al colegio y cuidar que nada malo le pasara. Por eso se encontraba allí, diez minutos antes de lo que debía.
Nunca fue responsable de nada más que su propia persona, digamos que esta nueva responsabilidad lo tenía algo preocupado. No sabía por qué aquel hombre le tenía confianza, lo único que él era consciente, era que en este momento su corazón se encontraba demasiado emocionado por esta oportunidad que le estaban dando. Si bien la pequeña era un dolor de cabeza, podía hacer su mayor esfuerzo para que todo saliera bien, de esa manera no sería una carga para Kyungsoo.
La Lluvia comenzó a caer, varios adultos se acercaron al establecimiento, cargados de sombrillas e impermeables, él había sido precavido también.
-Buenos días –saludó
-¿Qué necesita joven?- quiso saber la maestra.
-Venía por DO Yonguk – dijo con seguridad - su tío me dijo que presentará esta nota - le pasó el papel.
-Kim Jongin - el joven asintió, luego de un momento de verificar los datos de la nota y la firma, la señora asintió - perfecto se la traeré en un momento - al poco rato apareció la chiquilla latosa – Aquí esta – anunció con una sonrisa.
-Muchas gracias señorita - dijo el moreno, hizo una venia y miró a la niña - vamos – dijo extendiendo la mano para que la tomara, por un segundo pensó que no la sujetaría pero al final lo hizo. Al llegar al exterior y antes de salir a la calle, el más alto se acuclilló para acomodarle su piloto - bien, parece que estás lista para un diluvio – anunció pero ella guardó silencio- ¿pasa algo? – la niña meneó la cabeza- ¿entonces?
-No me gusta la lluvia - anunció
-¿Y por qué?
-Porque no me gusta - gritó la chiquilla y comenzó a caminar.
-¡Oye espera!- Jongin notó algo raro, entonces apresuró el paso, la tomó de la mano y ella simplemente lo mordió y salió corriendo - ¡Con un demonio!- gruñó el moreno acelerando el paso, ya no le importaba mojarse, primero porque la niña corría rápido y segundo temía por ese algo que le pasaba y no sabía, tercero esa no era la forma en la que pensó, sería estar bajo esta nueva responsabilidad.
Estaba completamente seguro que Kyungsoo no se iría si algo malo le pasaba a su sobrina, eso lo hizo correr más rápido. La alcanzó casi en la esquina, quiso gritarle un par de verdades a esa mocosa atrevida, pero se detuvo al ver que la niña lloraba.
-Ven - le dijo simplemente – te invito a tomar un chocolate – la sujetó de la muñeca y la llevo a un bar cercano, pidió un chocolate caliente, luego de intentar secarlos, tanto a él y a ella, al final desistió: era una misión imposible; tomó asiento frente a ella y dijo - ¿me dirás que te pasa? – antes que la niña contestara la mesera llegó con la taza de humeante choco latada y otra más de humeante té –yo no ordené nada para mí – advirtió, pero la chica solo sonrió y se fue.
-Jongin- babo…- murmuró la niña.
-¿Que quieres enana? – contestó sin pensar, ella lo miró seria, Kai pensó que la pequeña se veía demasiado seria para su edad, suspiró e intentó controlar sus palabras adecuadas para llegar a un dialogo razonable con ella – ¿Dime que sucede? No puedo ayudarte si no me dices que te está poniendo de mal humor.
-Tengo miedo - Confesó la chiquilla con los ojos aguados, el más alto fue a sentarse junto a ella y la sentó sobre su regazo.
-¿De qué? – cuestionó con una vos suave mientras enjugaba las lagrimas que humedecían las sonrosadas mejillas.
-Mis papis… ellos dijeron que volverían en unos días… pero…pero ellos – tragó grueso y se estremeció un poco – ellos se fueron al cielo – lloró sin poder controlarse- el moreno la abrazó mientras decía.
-Pero ahora tienes a tu tío – consoló.
-Pero él dijo que se va a ir – gimoteó la menor.
-Pero prometió volver – le recordó el más alto.
-¿Y si no vuelve?- cuestionó aferrándose a la chaqueta con sus crispadas manitos.
Kai entendía muy bien los temores que acosaban a la niña, volvió a limpiarle el húmedo rostro, y sonriendo intentó calmarla diciéndole.
-Bueno es normal que tengas miedo, pero tienes que confirmar y creerme cuando te digo que tu tío volverá sano y salvo- aseveró.
-¿Tú cómo sabes?
-Él es un hombre en el que confío - aseguró con sinceridad - además, dime una cosa - la pequeña lo quedó mirando esperando la pregunta - ¿Tu tío alguna vez te faltó a una promesa?- la niña negó con la cabeza con vehemencia – ¿Ves?, es como te digo, él volverá después de trabajar, así que debes sonreírle y desearle un buen viaje - acarició la mejilla infantil – ¿de acuerdo? – La respuesta fue una sonrisa sincera por parte de la pequeña Yonguk - a veces eres linda enana - bromeó.
-Kai babo no lo arruines!- chilló la chiquilla haciendo un mohín.
-Ok, perdón - rio entre dientes sin poder evitarlo - ¿dime tomaras tu chocolate?
-Sipi!
Aún con ella su regazo, la ayudó a beber y cuando terminaron sus bebidas, que aún no sabía quién fue tan gentil pero se lo agradecía, fueron hacia la salida. Fue entonces que se encontraron con Kyungsoo, quien estaba sentado en una de las mesas cercanas a la puerta, él les sonrió y sin otra palabra los guio al auto.
-¿Señor Kyungsoo que hace aquí?- se atrevió a preguntar el moreno una vez que estaban en el auto.
-Bueno – el mayor rio un poco y agregó - la verdad es que pasé por el colegio y los vi salir.
-Tío me vio ser mala!- exclamó la acalorada niña, luego se ocultó en la espalda de Jongin.
-Oh! Ya veo… ¿porqué no se acercó a nosotros?- cuestionó Kai.
-Creí que era mejor que hablaran tranquilos, me pareció que necesitaban arreglar cosas - miró por el espejo retrovisor – Gracias por cuidar de Yonguk.
-No es nada – murmuró apenado Jongin. Después de un corto silencio el menor se dio cuenta de algo –Oh! Acaso… ¿Usted me envió el té? – lo vio asentir, sin quitar la vista del camino había comenzado a llover otra vez.
-No hay mucho que explicar – murmuró D.O en un semáforo- noté que estabas empapado y no pediste nada para ti, me pareció lo más correcto – mencionó el mayor- por cierto... ¿Dónde está mi pequeña Valiente Sol*? ¿Yonguk estás ahí? – Insistió en llamar- Tengo un regalo con tu nombre en él- anunció sin más.
-¿Me darás un regalo aunque fui mala con Jongin? – quiso saber asombrada, saliendo apenas de su escondite.
-Si te disculpas como es debido, no veo porqué no he de dártelo - comentó Soo.
-Jongin – llamó tomando una de sus manos .
-Si- el mencionado bajo la mirada hacia la pequeña pelinegra.
-¿Te duele?- preguntó la niña.
-¿El qué?- cuestionó confundido, más sintió la pequeña mano, acariciar la roja marca en su diestra, tal vez dolía un poco pero no era más que una de esas heridas superficiales que había aprendido a ignorar – no me duele, tranquila – aseguró.
-Yo... lo siento – Susurró la pequeña pelinegra, para luego sorprender al moreno, dándole un beso en la herida.
Kai se sonrojó bastante, no pudo evitarlo, al parecer había hecho las paces con la sobrina de Kyungsoo eso le hacía creer que podría hacerlo bien. Ese hecho hacia que algo en su interior burbujeara…
-No te rías de mí y responde - dijo la niña volviéndolo a la realidad.
-¿Disculpa, que preguntaste? – cuestionó confuso, la risa de D.O se escuchó en el vehículo.
-Yonguk pregunto si la disculpabas – agregó.
-OH! – Sonrió avergonzado - Claro que si la disculpo señorita Sol… puedo llamarla así ¿verdad?
-No!!... aun no puedes, sólo mi tío Soo me puede decir así - se quejó la niña.
-¿Porqué? – reclamó el moreno inflando sus mejillas.
-Porque sí - dijo simplemente inflando sus mejillas cual pez globo más gordo que el del más alto.
Bueno no todo estaba bien, pero al menos mejoraba. Eso era bueno ¿no es así?
oxoxoxoxoxoxoxox
Era temprano, tenía todo listo, una sensación algo extraña en su cuerpo desde hacía horas lo estaba alterando. Kyungsoo podía decir que aquella necesidad o sentimiento no surgió de la nada, se había descubierto prestando demasiada atención o detalles de su joven invitado.
Si bien el chico en estos meses se había convertido en alguien presente en su vida diaria, verlo interactuar con su sobrina, el día anterior, había confirmado que él no se había equivocado al confiar en Kai. Además de que su corazón se enterneció al verlo sonrojarse ante las muestras de afecto por parte de la pequeña Yonguk.
Jongin era un chico demasiado llamativo, había notado las reacciones de las personas a su alrededor, dejándole cierto grado de fastidio ante aquella atención, pero lo misterioso de todo esto era que a D.O le agradaba más el chico lindo y consentido que sólo él y su sobrina habían visto.
Tal vez por eso sintió la necesidad de cuidarlo…
Disfrutó mucho percibir los gestos que le regalaba con cada atención que recibió y eso incluía esa linda cara que puso cuando le proporcionó el celular. Se veía tan adorable!!!
Por supuesto la pequeña Sol se tomó la libertad de secuestrarle e investigar el aparato, al descubrir cómo funcionaba la cámara, tomó varias fotos y siguió investigando las otras aplicaciones que tenía, en el proceso por supuesto fastidió a Kai.
Después de cenar Kyungsoo se disponía a preparar el equipaje, en esa tarea estaba cuando fue solicitado por la traviesa señorita de la casa, aún no terminaba de salir del cuarto cuando el bólido de ojos grandes apareció en la puerta suplicándole que se tomara unas fotos con ella, alegando que era para no extrañarlo.
Al mayor no le pareció mala idea, e incluso creyó que sería divertido así que accedió al pedido, pero se divirtió más cuando le pidió a Kai que se uniera a la famosa sesión de fotos, al principio el chico se negó alegando que él podía tomar la foto, la chiquilla se las arregló para jalarlo y sentarlo junto a su tío, para luego decirle que los adultos no sabían de las famosas Selfie, indicándole que tenían que estar los tres bien pegados y que el de brazos más largos sacaría la foto.
kyungsoo simplemente aguantó la risa y posó para la famosa “selfie de la familia D.O” como lo catalogó Yonguk. Realmente fue algo divertido porque una vez pasado el pudor inicial pues sólo fueron foto tras foto de caras graciosas, la pequeña reía mucho durante el proceso contagiando a sus mayores.
La cara apenada de Jongin, provocó que la traviesa niña redoblara sus esfuerzos para fastidiarlo, bueno era de suponer que no ayudo mucho el hecho que en las últimas fotos el mayor lo abrazó pegándolo a su cuerpo, el calor del juvenil cuerpo lo envolvió dejando que sus sentidos y razonamiento quedaran en la nada, sólo fue un segundo cuando sus miradas se cruzaron, Kyungsoo casi se olvidó que no estaban solos.
La voz de Yonguk les anunció que todo estaba listo, así fue como para romper el silencio que se formó entre ellos dos, el pelinegro se levantó del sillón justo cuando puso su diestra en la cabeza del menor y despeinó sus hebras color chocolate.
Se alejó del comedor antes de desaparecer y les ordenó que descasaran y se encerró en su cuarto, en realidad el diseñador tenía un montón de cosas en la cabeza, no había podido dormir nada, las ideas se instalaron en su mente y no pudo quitársela.
Suspirando salió de la cama y fue a preparar el desayuno, valla sorpresa se llevó al ver a Jongin y Yonguk preparándolo todo, en realidad intentaban hacerlo.
-Buenos días- saludó, ellos brincaron del susto, al parecer no esperaban que el mayor apareciera aun allí.
-TÍO! Arruinaras te la sorpresa!!!- se quejó Sol.
-Yo creo que no - aseguró el mayor tomando asiento en el banco y observó sobre la pequeña barra – Buenos días Jongin – saludó.
-Bue…Buenos días – contestó el menor concentrado en lo que supuestamente hacia – ¿descansó?... yo si... lo hice…- balbuceó algo acalorado.
-¿Jongin? – llamó Kyungsoo sonriendo.
-Si…- mirándolo por fin.
-Nada, sólo ten cuidado de no quemarte – señaló la mano derecha demasiado cerca de la hornalla.
-Oh!.. Gracias!
-Tío Soo - dijo Yonguk – ¿quieres café?
-Claro - miró a la niña - ¿quieres ayuda con eso?
-Nop – sonriendo agregó – estuve practicando – aseguró.
Los tres desayunaron juntos, aunque era tempano para los dos menores, se notaba que Yonguk se moría de sueño, D.O la tomó en brazos y le pidió que se durmiera.
-No te preocupes, volveré antes de que te des cuentas - le aseguró. Al poco rato se durmió en los brazos del mayor.
-Creo que en verdad no durmió nada - aseguró Kai mientras la tomaba en brazos, es que ya se había hecho la hora para que D.O se fuera al aeropuerto.
-Me di cuenta que tu tampoco lo has hecho - comentó el pelinegro mientras acariciaba la mejilla del menor, después se separo para ir a tomar su cosas y caminaba hacia la puerta, seguido de cerca por Jongin, quien apretaba a la niña en sus brazos.
Kyungsoo había notado el modo en que su invitado se sonrojaba hasta las orejas, no fue su intención alterarlo, es que sintió la necesidad de tocarlo, ahora su corazón se agitaba por otras sensaciones mucho más complejas.
-Estoy bien - anunció el más alto con una vos no muy segura.
Internamente D.O sabía que no debía mirarlo otra vez, pero en verdad no pudo detener ese impulso. Se detuvo cerca de la puerta, el más joven casi choca por aquella abrupta acción; se giró y lo enfrentó. Ambos se quedaron viendo por un momento demasiado largo, el mayor se dejo guiar por ese extraño placentero sentimiento que le había quedado cuando toco su acalorada mejilla.
Dejó caer la maleta que tenía en su diestra, casi en el mismo instante en que sujetó el rostro con ambas manos, sin poder ni querer contenerse se acercó un poco más.
-Debes cuidarte - comentó en un tono bajo – Eres la persona que a partir de ahora estará a cargo de todo - anunció.
-Yo…
-Lo harás bien – aseguró Soo, notó entonces aquellas dudas, impulsado por esa emoción extraña e ininteligible, posó sus labios en los del más joven.
El primer contacto fue suave e inexplicablemente sintió que no le alcanzaba con aquel simple roce, el sabor a café y miel parecían adictivos en aquel momento. Instintivamente pasó su lengua por aquellos carnosos labios, Jongin suspiró y sus alientos se mezclaron, de aquel modo casi instintivo la boca se abrió para darle acceso a probar un poco más de aquel sabor.
Sólo pudo besarlo un segundo más. Tuvo que detenerse porque el sonido del timbre de la puerta le anunció que “su Taxi” había llegado y lo esperaban. Se separó de él lentamente, pero como no quería que el contacto se terminara, apoyó su frente en la ajena, mordiéndose el labio infirió, Soo, reprimió cualquier sonido, estaba seguro que si volvía a decir o hacer otra cosa lo besaría de nuevo y no podría irse a ningún lado.
-Kyungsoo… - lo escuché decir, definitivamente no podía volver a besarlo, se separó por completo al notar como Yonguk se removía en sus brazos.
-Hablaremos a mi regreso – le dijo Kyungsoo, el menor asintió.
-Tío Soo buen viaje – murmuró la pequeña.
-Duerme tranquila, regresare pronto – susurró el mayor, ella obedeció acurrucándose en el pecho de Kai, Kyungsoo acarició la cabecita, sin dejar de ver aquellos tentadores labios que parecían incitarlo un poco más. El celular sonó en el bolsillo de su chaqueta rompiendo aquel mágico momento – hola
-¿Pequeño te dormiste? – escuchó que decía Suho.
-No, ya bajo
-Bien te esperamos- colgó la llamada
-Jongin…- llamó D.O intentando decirle algo que tenía en su garganta, ese extraño sentimiento que ya había identificado, abrió al boca para decírselo pero él negó con la cabeza deteniéndolo.
-Buen viaje - expresó Kai, el mayor asintió. Tomó la maleta y salió del departamento.
Kyungsoo dejó el edificio y caminó hasta la calle dónde vio que lo esperaban. Al llegar al auto de Kris, fue asaltado por sus amigos de la universidad.
Sus escandalosos amigos de la universidad. En ocasiones se preguntaba ¿Qué rayos hacia en medio de aquellas personas? Siendo todos ellos uno o dos años mayores que él.
En sus tiempos de universitarios, el pequeño pelinegro consiguió entrar antes que cualquiera de sus contemporáneos, dado su alto coeficiente intelectual, a sus diecisiete años y habiendo rendido libre la mayoría de las materias del primer año le permitieron ingresar al segundo año de carrera.
D.O era demasiado estudioso como para congeniar con esos cuatro chicos que eran demasiado populares, para pensar que se mezclarían en una relación amistosa con un ratón de biblioteca como Kyungsoo, demasiado joven e inteligente para interactuar con ellos.
Todo había iniciado gracias a uno de sus maniáticos profesores que literalmente les obligo a trabajar juntos. Fue bastante difícil en un principio dado que Soo era bastante trabajador y los otros no tanto, pero al final del proyecto todo parecía marchar sobre ruedas, tan bien estuvo el proyecto que su profesor les sugirió que intentaran hacerlo realidad, en un futuro.
Fue como una revelación para esos cinco jóvenes y planificar aquella empresa ficticia había dado a la idea de iniciar su negocio actual. Así fue que al recibir sus diplomas, ya tenían una pequeña empresa en marcha que con mucha voluntad e ingenio levantaron. El esfuerzo valió la pena ya que “Two Moon” había llegado hasta los más altos estándares del mercado del diseño grafico.
Por supuesto Suho, Kris, Luhan y Chanyeol sabían que DO odiaba trabajar en una oficina, él prefería el trabajo en su casa de forma independiente, por eso lo dejaban en su hogar, mientras ellos manejaban el resto de las cosas en las oficinas centrales. Kyungsoo sonrió al pensar que ya había pasado más de siete años de aquel primer encuentro.
-¿Qué tienes Soo?- escuchó que preguntaba Chanyeol, sentado a su derecha,
-Nada – respondió el ojinegro.
-No es cierto sonríes de una manera extraña – comentó Luhan a mi izquierda.
-Sólo recordaba el día en que nos conocimos - terminó de responder Soo.
-Uhhh!! ¿Eso hace cuanto fue? – cuestionó Suho desde su puesto de copiloto.
-Demasiado tiempo ¿no les parece?- Comentó Kris sin dejar de ver el camino.
-¡Yo no soy tan viejo!- se quejó Chanyeol.
-¿Ósea que yo si lo soy?- cuestionó Luhan usando ese tono tenebroso, y allí comenzó una de esas discusiones tontas donde los cuatro mayores del grupo intentaban tener razón, y se gritaban mutuamente cada vez más alto.
Suspirando D.O se resignó, ellos siempre eran así y no pensaba que cambiarían, sólo se dedicó a hacer lo de siempre, ignorarlos. Buscó entonces algo en su mente, un pensamiento más agradable dónde perderse, lo encontró en unos labios cálidos y dulces que simplemente le fascinaron.
-Uh… - escuchó a su lado, pestañó al darse cuenta del silencio a su alrededor, es más, el auto estaba quieto.
-¿Por qué nos detuvimos? – miró a su alrededor- ¿ya llegamos? – intentó moverse para salir del auto pero nadie se movió.
-Ah! No señorito usted nos cuenta que está pasando - comentó Chanyeol, en un tono raro.
-¿Yo? – Cuestionó el más bajo.
-Si tu pequeño - secundó Suho – hace mucho tiempo que no te vemos sonreír así - señaló.
-¿Así cómo? – cuestionó el pelinegro frunciendo un poco el ceño.
-¡Con mucho brillo!- exclamó Yeol.
-De verdad Soo ¿qué pasa? O mejor dicho ¿quién es? – cuestionó Luhan.
-Sera mejor que hables – advirtió Kris - sabes que no te dejaran en paz hasta que lo hagas - le recordó.
Resoplando, D.O, se dio cuenta que su rubio amigo tenía razón, no saldría vivo si no hablaba; Así pues les contó más o menos del accidente y cómo terminó Jongin en su casa también les dijo que el cuidaba de la pequeña Yonguk.
-¿Eso es todo?- intervino el mayor de los cuatro amigos, que lo miraba medio raro.
-Yo… no sé… creo que hay algo más ahí – secundó Yeol.
-Pues si he de ser sincero creo que él me gusta – confesó por fin, Soo hizo una mueca. Sabía que debía hablar aunque a veces era demasiado directo, sólo bastaba mirarles las caras a sus mayores quienes se veían el uno al otro bastante sorprendidos.
Para ser sinceros, los cuatro hombres estaban atónitos, es que desde que conocían al pequeño y cerebral DO Kyungsoo, nunca había dicho algo así, y los cuatro sabían que no mentía. Chanyeol fue el primero en reaccionar.
-WoW! Yo… este… no sé qué decir - murmuró el pelirrojo.
-WAAAA!!! Dejaste mudo al perico Yoda eso es asombroso – bromeó Luhan.
-Cállate tu Ciervo esponjado!- chilló Yeol como respuesta.
-¿Qué puedes hablar tú de mi estilo?- cuestionó un muy enfadado Luhan - ¡si ni peinarte sabes!
-Estilo!... Ja! mis pelos de la nariz tienen más estilo - gruñó el más alto – mi novio si tiene estilo – afirmó.
El castaño estaba dispuesto a contra atacar pero sintió que el pequeño D.O se removía en su asiento.
-Creo que llegaré tarde – afirmó el pelinegro mirándolos con ese par de ojos oscuros casi sin pestañar.
-¡Lo sentimos!- dijeron los dos apresurados.
-Tranquilos - suspiró el menor – creo que me sorprendí a mi mismo diciendo lo que siento en vos alta – aseguró D.O.
-Lo más importante es que hables con el chico y le digas lo que sientes - remarcó Kris en un tono serio.
-Si… ¿cómo tu cuando le hablaste a Lay?- preguntó Chanyeol e hizo una imitación de un tartamudo.
Todos rieron, ante aquella ocurrencia, provocando que el mismo Kris se pusiera colorado. Kyungsoo pensó que todos sus amigos estaban bien acompañados, eso le daba un aliciente para buscar su propia felicidad, además que debía arreglar algunas cosas aun pero buscaría ese sentimiento y lo sujetaría con fuerza.
-Bueno pequeño DO, espero que todo salga bien – dijo el mayor del grupo- pero creo que es hora de ir a embarcarte.
-Gracias a todos- dijo luego de bajar del auto, los mayores lo ayudaron con sus maletas y juntos caminaron hacia la sala dónde debía hacer los trámites. Fue allí donde Kyungsoo volvió a hablar- Kris me olvidé de preguntarte sobre ese asunto que te pedí averiguaras - señaló el más bajo.
-Si... claro ya tengo la dirección – afirmó el rubio- ¿qué quieres hacer?
-Habla con el hombre, dale lo que pida y que firme los papeles - señaló Soo en un tono serio, Kris asintió.
-¿Ósea que todo esto es por ese chico?- preguntó Luhan – ¿Te vas a New York por eso?
-Aun tengo que solucionar varias cosas y además lograr ese contrato, no creas que esto es por algo personal – señaló D.O
-¡Lo sabemos!- dijeron en corro.
-De verdad nos da gusto que estés creciendo tanto - remarcó Suho - pero aún no lo conocemos… - hizo una mueca - Eso no es bueno.
-Tengo un favor que pedirles- comentó de repente el de ojos grandes.
-¡Dinos!- pidieron todos a la vez.
-A decir verdad no me gusta mucho la idea que Jongin y Yonguk se sientan solos, no digo que vallan a verlos pero sí podrían llamarlos regularmente para que ellos no se sientan tan solos, ayudaría a que esté tranquilo- comentó.
-WAAA! Que tierno eres!!!- chillaron Chanyeol, Suho y Luhan.
-Tks… - se escuchó el siseó molesto – de verdad debería advertirles a sus novios para que se alejen de ustedes lo más pronto posible – comentó DO con un brillo extraño en la mirada, que provocó que sus tres mayores se paralizaran.
El parlante anunció la próxima partida del vuelo a New York. D.O tomó sus maletas y papeles, sonriendo se despidió de todos. Los mayores lo vieron desaparecer en las escaleras, suspiraron aliviados.
-El pequeño Dodo nerd da mucho miedo- chilló Chanyeol abrazándose a sí mismo.
-Si da miedo el enano- remarcó Suho.
-Habló la persona súper alta- remarcó Luhan.
-Por eso Kyungsoo los amenaza, no saben cuándo callarse- remarcó Kris iniciando la retirada.
Los demás los siguieron, hablando de todo lo que había cambiado Kyungsoo desde que ese chico llamado Jongin llegó a su vida.
Oxoxoxoxox