Missing (Perdido)
By Angie
Capitulo 6
Jongin suspiró por enésima vez en una hora. El día había sido normal, luego de llevar a la señorita Sol a su colegio decidió poner algo de orden en la casa, porque de algún modo intentaba entretener su mente y no dejarla volar demasiado alto. Volvió a suspirar, no quería pensar pero aquí estaba él a mitad de la limpieza pensando en ese beso que se habían dado con Kyungsoo.
Se llevó la mano a la boca, aún no tenía una forma correcta de describir lo que sintió, no fue su primer beso, ya que al ser tan popular en Whisper, tuvo libre acceso a las damas disponibles y dispuestas, para experimentar; simplemente era algo que le ofertaban y él aceptaba. Las veces que lo había hecho no fueron nada más que una demostración de lujuria, siempre terminaba odiando el sabor de esos besos, mezclado con tabaco y alcohol.
Pero los labios de Kyungsoo fueron distintos, su beso tuvo un sabor a menta… fue algo así como fresco y nuevo. En un principio, su pulso se detuvo al sentir el primer inesperado contacto, luego sintió un deseo de que no terminara sólo en eso, quería seguir disfrutando; tomando ese impulso abrió los labios y suspiró, dejando que el beso se profundizará un poco más. Pero antes de que pudiera llegar a saborear aquella intima caricia, ésta se terminó.
El más joven de los hombres no abrió los ojos, se sentía bastante apenado, por su proceder tan audaz, el calor del aliento del mayor asociado al suave contacto de su frente, representó como un momento perfecto y la verdad no quería arruinarlo, pero más allá de aquellas sensaciones la mente de Kai se llenó de preguntas.
¿Por qué Kyungsoo lo había besado? ¿Qué significaba él ahora? ¿Sólo fue una simple muestra de afecto para darle ánimo?
Kai quería preguntar, necesitaba saber pero sólo pudo pronunciar su nombre en un susurró. Cuando Yonguk empezó a moverse, D.O se alejó, tal vez pudo pedirle que no lo hiciera pero las preguntas se arremolinaron en su cabeza, entonces prefirió callar y esperar siguiendo la sugerencia del mayor antes de irse.
Después de ese episodio, sólo fue al cuarto de la niña y la recostó, al salir de la habitación no quiso hacer nada solo fue al estudio y se recostó en un rato, cuando la alarma del celular sonó dos horas después dudó en llevar a Yonguk al colegio pero no podía fallar en su primer día a cargo.
La señorita Sol no colaboró mucho con el plan de cumplir con los objetivos predispuestos, aun así, estuvo a tiempo en la puerta del establecimiento. Después de dejar a la pequeña Jongin volvió al departamento que tan sólo cruzar la puerta, le pareció mucho más grande y solitario.
Volvió a suspirar regañándose a sí mismo, por extrañar a una persona que apenas se había ido hace tan poco tiempo…
Las horas siguientes intentó reprimir su estado de ánimo, porque no era bueno que la niña lo viera así de decaído. Después de que la amable señora Park trajera lo del almuerzo y cena, fue a buscar a la señorita Yonguk, el ánimo de la pequeña era similar al del más alto y para complicar el asunto el clima no ayudaba. Se fue tornando cada vez más oscuro. Jongin sabía que a ella no le gustaba nada ese tipo de clima, fue por eso que no se negó cuando ella le pidió que le leyera un cuento para dormir, le llevó algo de tiempo que se durmiera pero al final lo consiguió.
Se duchó y puso uno de esos pijamas que Kyungsoo le había dado, los pantalones le quedaban algo cortos pero no le importaba. Revisó todas las ventanas e incluso volvió a ver a la pequeña, que por suerte seguía dormida. Decidió irse a la cama de una buena vez, tal vez fuera el clima o simplemente se sentía solo porque de pronto sintió un escalofrió.
Tal vez sólo extrañaba estar con la niña ya que ella siempre estaba a su alrededor fastidiando y metiéndose en medio de él y su amado tío. Se sentó en la cama, observó el escritorio que siempre ocupaba Soo, en muchas ocasiones se había dormido viendo su espalda y escuchando el incesante tipiar del teclado. Ahora todo estaba tan silencioso, no le gustaba eso. Suspirando murmuró – recién te fuiste y ya te extrañó Kyungsoo… vuelve pronto – proclamó volviendo a recostarse.
En ese instante un fuerte estruendo rugió en los cielos nocturnos, las luces tintinearon, haciendo que el joven moreno brincara del susto sin poder evitarlo, de repente volvió a incorporarse pensado que tal vez debería ir a ver cómo estaba la pequeña Yonguk, no terminó de decidirse cuando otro ruidoso trueno surcó el cielo iluminando el cuarto en el proceso.
Bajó los pies de la cama, buscando sus pantuflas, cuando al fin las encontró elevó la vista, encontrándose con una figura observándolo desde la puerta, decir que se asusto fue decir poco, es que la criatura estaba parada tan quieta tan sólo abrazando su peluche llamado Byeol justo cuando otro estruendo resonó en el cuarto.
-¿Yonguk qué sucede? – preguntó algo encrespado por la espeluznante sensación. La niña no contestó sólo apretó su peluche- ¿Tienes miedo? – la niña negó con la cabeza- Pues la verdad que yo si tengo - se abrazó a sí mismo- iba a ir a buscarte ahora mismo – anunció el más alto- ven a cuidarme como le prometiste a tu tío – dijo abriendo los bazos, en ese instante un terrible sonido resonó, casi al instante la pequeña corrió hacia donde Kai estaba, él la abrazó y se sentó en la cama.
-Jongin…- murmuró ella.
-¿Qué pasa? – los ojos café la observaron intentando enfocar – ¿Te duele algo?- Yonguk negó – ¿entonces?
-¿Podemos llamar a tío Soo ahora? – preguntó de repente.
Kai tragó grueso, no sabía que responder en aquel momento, se acomodó mejor en la cama mientras que intentaba arreglar sus pensamientos, adema de hacer un cálculo aproximado por el cambio de horario y lo diferencia de Seúl a New York. ¿Cuántas horas habían pasado desde que se fue?
-¿Jongin podemos?
-Creo que sí, no estoy seguro de la diferencia horaria – comentó apenado.
-¿Y si le enviamos sólo un mensaje?
-Bueno, creo que eso sería mejor - aseguró el más alto, sentando a la pequeña entre sus piernas, para poder tomar el celular de la mesa de noche- ¿Qué le ponemos?- cuestionó con el celular en mano.
-No sé…
-Tú quieres saludar ¿no es así?
-Si… pero ¿qué más le digo?
-Qué tal si comenzamos con “Hola, ¿qué tal estuvo el viaje?”
-Oh! Si… eso sería genial – exclamó la niña observando cómo era escrito el mensaje- ponle mi nombre y el tuyo para que sepa que somos los dos- pidió.
-Bien…- murmuró Jongin, pensando que era una suerte que estuviera oscuro y su piel fuera tostada. Porque de esa forma se ocultaría mejor el hecho que estaba todo rojo hasta las orejas.
No había hecho más que enviar el mensaje cuando el celular sonó entre sus manos haciendo que ambos brincaran, la niña tomó el celular y contestó.
-Hola tío!- chilló
-Hola señorita Sol, ¿me puede decir que hace despierta a esta hora?
-¡Hay una tormenta muy fea!- comentó la niña
-¡Ho!.. ¿Estás bien?
-Estoy con Jongin
-¿Él está bien?
-Sí, yo lo cuido bien ¿Verdad?- desvió al mirada al moreno, vio que Kai asentía - él dice que si
-Eso es bueno
-¿Nee... tío? Puedo pedirte un favor- la niña rio un poco por la respuesta que el dieron del otro lado de la línea- ¿Sip puedo? - Escuchó un poco más - Si, está bien que descanses, ¡¡¡te quiero tío!!! - le pasó el celular a Jongin- quiere hablar contigo – anunció.
-Yo…- la niña ya le puso el celular en el oído.
-Jongin…
-Si… ¿cómo estuvo su vuelo?
-Bastante bien - respondió Soo - lamento no haber llamado antes – dijo con una vos suave, según Kai, como una caricia – ¿Jongin?
-Si aquí estoy- contestó con torpeza.
-Hazme un favor
-Si claro
-¿Puedes dormir en mi cama con Yonguk?- cuestionó de pronto - ella siempre duerme conmigo durante las tormentas pero estando yo aquí… ¿podrías hacerlo por mi?
-Pero ella podría dormir aquí, en mi cama, conmigo – argumentó.
-Sería incómodo para ambos - refuto D.O - anda por favor – susurró- ¿harías eso por mi?
Jongin sabía que no podía negarse, era estúpido hacerlo, sin importar sus alocados palpitares, no podía negarle nada si él le hablaba así…
-Jongin…
-Bueno… si lo hare…- respondió.
-¡Perfecto! Descansen que en unas horas tiene que ir a clases - puntualizó el mayor.
-¡Oh! Eso - recordó de repente el moreno.
-¿Qué cosa?
-Es que me dijeron que el establecimiento estaría cerrado por unos problemas en el suministro de agua potable y de energía.
-Eso es una contrariedad…
-La maestra dijo que le enviaría un mail explicándole las razones y tiempo así que debe revisar su correo.
-De acuerdo te avisaré apenas sepa algo.
-Perfecto
-Jongin
-Si…
-No dudes en llamarme si necesitas algo o si la pequeña quiere hablar- puntualizó- no te fijes en la hora sólo envíame un mensaje para poder atenderte como es debido.
-Está bien
-Jongin…
-Dígame…
-Es qué… te extraño…- dijo de pronto
-Yo… bueno…yo…
-No te preocupes hablaremos a mi regreso - hubo un pequeño silencio que fue roto por Kyungsoo - lo que dije… no te alteres ni te compliques… buenas noches…
Cortó la llamada dejando al menor con el pulso acelerado, y sin saber porqué rayos no le había dicho que el también lo había extrañado. Kai se pateó mentalmente por ser tan tonto.
-Jongin… ¿me escuchas?
-….
-¡¡¡KAI BABO!!!
-¿Qué pasa?
-Tengo sueño, vamos a dormir - proclamó bajándose de la cama.
-¿He?... bueno…- balbuceó el más alto al ser jalado por la chiquilla al cuarto del mayor. Al llegar ella trepo en la gran cama matrimonial y se acostó del lado derecho.
-Yo duermo aquí- señaló - éste es mi lugar – anunció – tu duerme del lado en el que duerme el tío.
Kai asintió, se remojó los labios mientras entraba en la cama, fue recibido por ese aroma tan particular que sólo había sentido al estar cerca de Kyungsoo. Kai cerró los ojos disfrutando de la sensación, si bien esa no era la primera vez en aquella cama, ya que la vez anterior que hubo tormenta también había dormido allí.
Pero en esta ocasión Jongin sintió la necesidad de estar allí, agradecía a la pequeña Sol por darle una excusa para estar allí sintiendo aquella calidez.
-¿Kai te dormiste?- ella tocó su mano.
-No- respondió sin abrir los ojos.
-Gracias por esta aquí conmigo- murmuró la niña. Las palabras hicieron que el moreno abriera los ojos sólo para ver a la niña dormida sujetando su mano.
Jongin otra vez sonrió con ese palpitar tan particular, estando allí con ella esperando a Kyungsoo… Tal vez había encontrado su lugar perfecto… un hogar... la idea le hizo sonreír. Se acercó y besó la frente de la niña.
-Gracias a ti señorita Sol por cuidar de mí - murmuró mientas volvía a su lugar para dejase llevar por Morfeo. Confiando que al despertar todo siguiera en su lugar y que todo no fuera un sueño producto de su imaginación.
La mañana llego gris, pero Kai se sentía relajado. El timbre de la puerta sonó fuerte, así que saltó de la cama y fue a ver quién era. Al abrir se encontró con una muy preocupada vecina, ella se disculpaba porque había surgido una emergencia familiar y no podía darles una fecha exacta para su regreso, por eso no podría cocinarles. Jongin le aseguró que él se haría cargo de la cocina que no se preocupara. La señora Park se lo agradeció y se fue presurosa.
-¿Y ahora? – se preguntó el moreno, rascándose la nuca, si bien recordaba algo que su mamá solía cocinarle de pequeño - Omurice – murmuró con nostalgia, pero para eso debía seguir una receta y no estaba seguro de poder hacerlo bien.
Volvió al cuarto, tomó el celular y buscó el modo más fácil de hacerla. Leyó atentamente, sencillamente creyó poder hacerla, entonces revisó los ingredientes tal vez sí tenía todo podría intentar, en eso estaba cuando la niña se removió un poco junto a él.
-¿Qué haces Jongin babo?- preguntó adormilada.
-Buenos días señorita Sol- saludó
-Buenos días…- miró la mano del mayor sentándose y volvió a preguntar- ¿Qué haces?
-Busco una receta para el desayuno- comentó enseñándole la foto de la delicia que había elegido.
-¡¡¡Quiero cereal de colores!!!- exclamó la niña.
-Pero…
-¡¡¡Por favor siii!!!- chilló la pelinegra - prometo pórtame bien – el mayor no decía nada sólo la miraba- y no te volveré a decir babo - proclamó saltando en la cama - por favor si, si, si?
-De acuerdo
-Siiii!- gritó para luego tirarse encima del moreno para abrazarlo. El impacto y la sorpresa hizo que Kai perdiera el equilibrio y al irse para atrás golpeara su cabeza- ¡¡¡ahhh perdón!!!
-No te preocupes - rio el más alto - arréglate, tenemos que ir al mercado y no creo que tengamos nada de eso que quieres aquí – argumentó, la chiquilla asintió y corrió afuera del cuarto, seguida de cerca por el moreno.
La salida al mercado fue bastante entretenida, tardaron más de la cuenta porque Yonguk no podía decidirse en qué tipo o marca de cereal era la mejor.
Ya que estaban allí, compraron comida pre-cocida, también algo de carne, para sólo tener que hacer arroz. Además llevaron otras cosas que la niña quería comer o probar.
Ambos cargaban las bolsas con cuidado, mientras charlaban, la niña lo hacía. Parloteaba sobre lo rico que sería probar el cereal con leche o tal vez con yogur, aseguraba que quería experimentar con varias cosas.
Kai no estaba seguro de si todo eso era buena idea, ni tampoco que fuera bueno para la salud de la niña, estaba pensando seriamente si sería correcto dejarla experimentar como ella quería. Tal vez le preguntaría a Chen y a Tao, ya que ellos tenían más experiencia en niños, pues, porque tenían sobrinos pequeños que cuidaban de cuando en cuando.
Ya con una idea más clara y segura, subió al ascensor que los llevaría al piso. Cuando bajaron del cubículo se encontraron con cuatro personas frente a la puerta del departamento, ellos parecían discutir entre sí.
La niña se ocultó tras la pierna del más alto, en el momento que ellos no parecieron notar la presencia de los recién llegados, tal vez sería porque estaban teniendo una acalorada discusión.
-Ya déjense de idioteces - regañó el más alto.
-Tú…- señaló al rubio alto con un dedo acusador - Kriscaso, tartamudo, quien te dijo que tenías autoridad aquí?- chilló un alto pelirrojo.
-Chicos tranquilos - intervino uno de los hombres, el más bajo de los cuatro, que parecía algo más calmado
– podemos solucionar esto sin escándalo por favor- sugirió.
-Déjalos – solicitó en un suspiró frustrado el otro hombre bajo pero con un peinado algo extravagante – sabes que no hay quién los detenga cuando esos dos empiezan…
-¡¡¡¡Lo dice el ciervo esponjoso!!!! -argumentó el rubio mirándolo desafiante.
-¿Oye tú, gigante lelo, por qué me dices eso? – Gritó el castaño – ya les dije que estoy probando nuevos estilos – argumentó en su defensa.
-Pues dile a tu estilista que se pegue un tiro – señaló con malicia el pelirrojo – te vez horrible!
El más bajo volvió a intervenir separando a los otros tres atolondrados hombres que lo acompañaban, pero en algún momento quedó atrapado en medio de los cuerpos de los más altos al igual que el castaño.
-Disculpen…- escucharon decir, los cuatro miraron a un chico cargado con bolsas, al bajar la mirada notaron a la niña pegada a su pierna derecha.
-¡Oh!… si discúlpanos – dijo el mayor de los cuatro.
-Está bien sólo queremos pasar y entrar a casa - el joven señaló al puerta que estaba tras ellos.
-¡Oh! …- los cuatro hombres exclamaron a la vez mirándose entre sí.
-¿Tú eres Jongin?- interrogó el más alto con un tono amenazante. Aún a pesar del sobresaltó que tenía, el moreno asintió.
-¡Qué bien!- suspiró el que había estado atrapado entre los cuerpos al intentar calmarlos.
-¿Qué Quieren…?- kai miró a ambos lados – Yo no los conozco – afirmó mientras que hablaba el moreno parecía más alerta que antes.
-Tranquilo, nosotros vinimos a visitarlos – comenzó a decir el chico de pelo esponjado – a ti y a ella- señaló.
-¿Por qué? – fue la rápida replica.
-No sabes quienes somos – volvió a cuestionar el más bajito. El de ojos pardos negó con la cabeza haciendo que los demás hombres superarán con frustración – porqué no me extraña – resopló el mayor de los cuatro.
-Ese Dodo Nerd nos odia!- murmuró uno de los más altos y el único pelirrojo del grupo.
-Realmente esto es frustrante- resopló uno de los más bajos – Después de tantos años aún nos hace esto- magulló el castaño encrespado.
-Mira esta foto de nosotros con D.O – Dijo el rubio de repente acercándose un poco, no demasiado ya que había notado las intenciones del chico, parecía que estaba a punto de salir de allí casi corriendo. Entonces extendió el celular y en la pantalla podía verse una foto de los cinco tomada el día del cumpleaños de Kyungsoo antes de ir al club “Whisper”
El Moreno se acercó un poco y entonces le ofreció el celular para que lo viera la niña también. Kai lo aceptó y le mostró la foto a la niña, ella sonrió al ver la imagen de su tío.
-Nuestro Kyungsoo es muy malo – se quejó el pelinegro. -Sí, ahora tenemos que presentarnos como es debido – secundó el castaño.
-Bueno – dijo el pelirrojo dando un pasó al frente - yo me llamo Park ChanYeol- anunció y luego señaló al castaño- él es sólo Luhan- señaló al rubio – Este señor es Wu YiFan pero le decimos Kris y luego tenemos a nuestro mayor Kim JunMyeon, pero todos le decimos Suho – explicó el que se hacía llamar Chanyeol.
-Gracias por esa graciosa presentación – gruñó Luhan.
-Pero pensé que lo había hecho bien – replicó el de orejas grandes con una sonrisota.
-Mi nombre es Kim Jongin, es un placer conocerlos – el moreno hizo una venia – ella es la sobrina del señor Kyungsoo, su nombre es D.O Yonguk – comentó Kai después de devolverle el celular al más alto – salude señorita Sol- pidió dulcemente.
-Hola, mi nombre es Do Yonguk, encantada de conocerlos - dijo la niña imitando al moreno.
-Waaa!!! Que linda – chilló Yeol.
-La asustaras – regañó Luhan.
-No más que tu peinado- refutó el otro.
-Ashhh
-Bueno veo que traes muchas cosas- señaló el mayor de todos – ¿quieres ayuda con eso?
-¿Eh? … bueno yo…
-Sabes que D.O estaba preocupado por ustedes- señaló Junmyeon.
-¿Preocupado?
-Sí, él dijo que no le agradaba la idea que se sintieran solos – señaló Kris tomando las bolsas que llevaba la niña- anda, abre para que podamos entrar – indicó.
Aún algo dudoso, Jongin abrió la puerta, el ruido de la pancita de la niña irrumpió en el silencioso comedor, todos se quedaron viéndola, la pobrecilla se puso roja como un tomate maduro.
Automáticamente Chanyeol y Suho se pusieron en acción, antes de que Jongin intentara protestar, la cocina se llenó de ricos olores abriendo el apetito de los dos menos.
La pequeña Jonguk simplemente se negaba a bajarse de los brazos de Kai, por lo que él terminó quedándose allí sin hacer nada. Hasta que la chiquilla sugirió algo en su oído, la acomodó mejor y sacó el celular del bolsillo escribió rápido y envió el mensaje a Kyungsoo consultándole si podía llamarlo.
Jongin mentalmente estaba calculando la hora, estaba seguro que Soo estaría durmiendo, pero esto estaba en la categoría de importante o emergencia ya que no sabía si fue lo correcto en dejar a entrar a estas personas a la casa, el celular sonó fuerte asustándolos a ambos.
-Hola- contestó mirando a los “invitados” todos en la cocina. Aunque sólo dos trabajaban, pero al escuchar su saludo, lo quedaron viendo.
-¿Jongin qué pasa?
-Lo siento yo…
-Dime ¿le pasó algo a la pequeña?
-No
-¿Entonces?? ¿Qué tienes? ¿Te están molestando aquellos tipos?- la mente de D.O parecía trabajar muy rápido.
-No, No es nada de eso, yo estoy bien – contestó apresurado.
-¿Entonces qué pasó? -Sus amigos están aquí y no sé si hice bien al dejarlos entrar – logró decir el moreno.
-Diles a esos que se larguen de mi casa - Gruñó Soo pero las palabras se escucharon por el departamento ya que Yeol le había pedido el celular al moreno y lo había puesto en el alta voz – ¡Jong in me escuchaste!- gruñó otra vez.
-Dodo nerd, ¿porqué no nos quieres?- chilló Yeol
-Soo, eres malo por eso te quedaras enano – chilló Luhan
-… -
-Soo, aquí Kris, no te enfades – el más alto intentaba tranquilizarlo.
-Si pequeño sólo vinimos para cumplir con nuestra promesa- argumentó Suho.
-Vuelvan a trabajar- gruñó enfadado- háganme el favor de apagar el alta vos y pasarme a Jongin – ordenó.
-Les dije, nos odia – lloriqueó el pelirrojo.
-¡Ah! Que malo eres enano- resoplo Lu.
-Si D.O, nosotros queríamos ver si la niña estaba bien – suspiró el rubio alto.
-No te enfades Kyungsoo – suplicó Suho -Está bien sólo espero que se comporten y no hayan asustado a Jongin – magulló resignado – Si lo hicieron es mejor que se despidan de lo que más quieren porque no lo tendrán…. – sentenció.
-Te pasamos con Jongin ahora – dijo Kris apagando el alta voz para luego pasarle el celular a su dueño.
-Jongin…
-Si
-¿Estás bien?
-Sí, no se preocupe sólo no quería que pensara que abuso de su confianza, no quiero cometer errores- dijo el menor.
-Tranquilo, ellos son algo alborotados pero no te preocupes, siempre estarán si los necesitas, así que puedes dar éste número por cualquier cosa que necesites- sugirió con más calma.
-Está bien, perdón por llamarlo a esta hora -No te preocupes, ahora pásame a la pequeña- pidió.
-Tu tío quiere hablarte- Dijo a yonguk y le pasó el celular, la niña habló con él unos cinco minutos luego cortó- ¿todo bien?
-Sipì Jongin tengo hambre
-Ho! Si claro
-¡Por Dios! ¡¿Cómo se nos olvido de darle de comer?!- exclamó Chanyeol
-Eso lo arreglamos enseguida- aseguró el mayor miró a kris y a Luhan – ¿ustedes que hacen ahí? vengan a ayudar- ordenó, los dos se pusieron en marcha hacia la cocina.
-Debemos ayudar- comentó Kai alentando a la niña a bajarse – ellos no saben dónde están las cosas.
-Está bien.- dijo la pequeña al llegar al piso
Los dos fueron a ayudar a los mayores a poner la mesa…
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