Los días pasaban y poco a poco estas se convertían en semanas y estas en meses, los seis chicos ahora eran más fuertes, más unidos, ahora ellos eran una verdadera familia. El pelinegro seguía mirando ocasionalmente al pequeño castaño, y cada vez que lo miraba su corazón daba un vuelco al ver como compartía y se divertía con su Hyung Luhan, pero este no se daba cuenta que aquel pequeño castaño comenzaba a mirarlo recurrentemente y lo que tampoco sabía es que a este le hervía la sangre cuando lo veía abrazado de Lay, aunque la razón de ese abrazó fuera él, pero como todo, ambos se querían pero ninguno de los dos lo sabía.
Por otra parte el pelirrojo no dejaba de tener esos sueños que cada vez hacían que este se deprimiera, aunque comúnmente ocultaba sus pensamientos tras una gran sonrisa, su castaño compañero de cuarto y ahora mejor amigo se daba cuenta de lo que realmente le pasaba.
-¡Luhan!-el castaño entro a la habitación y cerrando la puerta tras de sí miro seriamente al pelirrojo que seguía sonriendo
-¿Qué ocurre Wommine Hyung?-el pelirrojo miraba inocente al castaño, este molesto se retiró de la puerta en la cual estaba recargado y se aventó a Luhan, cayendo, así, uno enzima del otro.
-¡Deja de sonreír Luhan!-el castaño, aun enzima del pelirrojo, le gritaba molesto
Ambos se miraron un par de minutos y poco a poco el pelirrojo borraba su sonrisa y el brillo de sus ojos se perdía haciéndolos cada vez más obscuros
-no lo entiendes Hyung… trato de no pensar en eso pero cada vez que lo intento mi corazón duele y esa voz regresa a mi cabeza… y esa mirada… simplemente me siento vacío Hyung… y… ¿sabes que es lo peor?-el pelirrojo miro al castaño y este solo se mantuvo en silencio para así poder escuchar lo que el pelirrojo tenía que decir.
-Lo peor es que, sin conocerlo, sin saber si realmente existe, sin saber si algún día seré capaz de verlo-los ojos del pelirrojo comenzaban a cristalizarse y pronto una silenciosa lagrima rodo por su mejilla sorprendiendo así al mayor-yo… me he enamorado de él… me he enamorado de una ilusión-y sin más el pelirrojo comenzó a llorar y a lamentarse por la mala suerte que tenía.
El castaño lo miro llorar, estaba totalmente sorprendido, se sentía mal por su amigo y sin pensarlo dos veces se lanzó nuevamente a él, pero esta vez lo abrazó con fuerza mientras ocultaba el rostro del menor entre su pecho y sus brazos. Ambos aún recostados en el suelo se abrazaban con fuerza, el mayor, que seguía enzima del menor, bajo de él y se recostó a un lado y nuevamente lo abrazo, este comenzó a acariciar la espalda del menor mientras seguía ocultando el rostro lloroso del menor entre sus brazos, el pelirrojo seguía llorando y se dejaba consolar por el mayor. Pasaron varios minutos abrazados en el suelo mientras que el pelirrojo dejaba de llorar, y poco a poco este se comenzaba a calmar y comenzaba a quedarse dormido por la carisias que le hacia el mayor, el pelirrojo se sentía en paz.
Pero toda esa paz se esfumo cuando por la puerta encontraron una sonrisa que comenzaba a desvanecerse.
-Narra Jongdae-
Eran las nueve treinta cuando me levante, talle mis ojos y me estire, guíe mi vista hacia donde Lay Hyung seguía durmiendo, sonreí ante el recuerdo de lo sucedido ayer entre él y yo, Lay es un gran chico y estoy en total deuda con él.
-flash back-
Me encontraba en el patio llorando como últimamente había sucedido, estaba bajo aquel gran árbol donde meses antes había probado los labios de Xiumin, faltaban quince minutos para que dieran las once de la noche, el día de hoy había estado nublado y lleno de neblina, pero eso no impidió que entrenáramos hasta más no poder, pero esa no es la razón del por qué me encuentro ahora llorando, este último mes trate de ser fuerte ante las constantes caricias y jueguitos que había entre Xiumin y Luhan Hyung.
Mientras la noche enfriaba yo seguía llorando, mi vista estaba totalmente nublada por las lágrimas, pero de pronto una chamarra cayó en mis hombros y unas cálidas manos limpiaron mis ojos con delicadeza, alcé mi mirada encontrándome con esos ojos cafés que últimamente me miraban preocupados y hoy no era la excepción, talle mis ojos y trate de ocultar mi rostro de la mirada de Lay, pero él ya sabía lo que sentía, sabía lo que había estado pasando, sabía perfectamente mi amor por Xiumin.
-deja de llorar Chen-susurraba mientras me abrazaba-no vale la pena que llores por algo así-
Pronto deje de llorar, bueno no del todo, las lágrimas aún caían, pero ya no eran fluidas, me talle los ojos limpiando los rastros de la lagrimas que habían quedado en mis ojos, mire a Lay y le dedique una gran sonrisa, realmente lo apreció, él estuvo todo el tiempo a mi lado, sosteniéndome cuando creía que caería, dándome ánimos cuando estaba a punto de rendirme, apoyándome en los momentos en los cuales más lo necesitaba.
Nos quedamos un rato bajo aquel árbol, contemplando las estrellas en aquel obscuro cielo, sentí como Lay comúnmente volteaba en dirección a la casa, cada que lo hacía se acercaba más a mí, este se paró y me dijo que cantara, que quería oírme, al principio me quede un poco confundido de como sabía que cantaba, por lo que Lay me dio una amplia sonrisa dejándome ver sus hoyuelos y me decidí por cantar, el comenzó a bailar al ritmo de la canción que cantaba a todo pulmón, que estaba un tanto desafinada y fuera de tiempo por los bailes ridículos que hacía Lay provocando que riera. Estaba terminando la canción y Lay hizo un giro rápido, pero al estar en el pasto este resbalo y cayó a mí lado y volvimos a reír, pronto este se reincorporo y miro nuevamente en dirección a la casa y de un momento a otro sentí sus suaves labios sobre los míos.
-Narra Minseok-
Salí de la casa en busca de Lay y de Chen ya que habían estado a fuera mucho tiempo y la noche era muy fría, en lo personal a mí no me molestaba, de hecho era refrescante, pero pues claro, mi poder es el del hielo, sería una ironía que sea friolento. Camine un buen rato por el gran patio que tenía la propiedad, después de todo estaba en medio de un bosque, muy apartado de la sociedad, mientras caminaba a lo lejos pude escuchar esa hermosa voz que últimamente me encantaba. Me fui acercando al lugar del cual provenía su hermoso canto y pude notar aquel árbol que fue testigo de aquella gran hazaña. Pronto pude divisar a aquel chico que constantemente se colaba entre mis pensamientos, inconscientemente una sonrisa se asomó por mis labios, esta crecía cada vez más con cada paso que daba, cuando estuve los suficientemente cerca mi sonrisa desapareció de mis labios cuando logre ver lo que sucedía, Chen se encontraba cantando a Lay mientras este bailaba a un ritmo invisible que marcaba los tonos bajos o altos de Chen y unos que otros desafinados o cortados por la risa que provocaba Lay al hacer algún paso totalmente ridículo, pronto el ridículo de Lay giro y cayó a lado de mi Chen, ambos comenzaron a reír y pronto Lay se reincorporo y miro hacia mi dirección y puedo jurar que me vio porque me lanzo una gran sonrisa, pronto este se giró y se comenzó a acercar peligrosamente a Chen, me quede parado mirando a lo lejos como ambos compartían la noche bajo ese gran árbol, nuestro árbol. No pude ver más esas amplias sonrisas que solo podía lograr Lay y menos quería ver como ambos compartían la noche con un gran beso, regrese a casa diciendo que no los había encontrado y que tenía frio como para seguir buscando, aunque viniendo de mí sonara absurdo.
-Narra Jongdae-
Pronto salí del shock en el que me encontraba por aquel beso que me estaba dando Lay, lo empuje lejos de mí un tanto brusco haciendo que este callera de espaldas contra el frio pasto, pronto él se levantó y comenzó a reír fuertemente, me quede mirándolo confundido, pronto él se levantó y tendió su mano, la tome un poco desconfiado y entonces hablo.
-No creas que lo que hice es por algo malo-comenzó a reír nuevamente
-Lay, yo…-Lay me sonrió y no me dejo terminar mi oración.
-Xiumin venia hacia nosotros, y pues te bese para ver su reacción-sonrió victorioso
-¿Xiumin… nos vio?-lo mire atónito
-sí, y parece ser que se molestó por lo que he hecho… parece ser que te quiere más de lo que crees.
Inconscientemente sonreí ante las palabras de Lay, me hacía feliz saber que Xiumin sentía algo por mí. Después de un rato en el que Lay se desesperaba y moría de risa al mismo tiempo mientras intentaba fallidamente enseñarme a bailar, la noche, que había estado un poco fría, enfrío aún más haciendo que ambos tembláramos y regresáramos a casa.
-Fin flashback-
Después de un rato en el que Lay se despertaba rodando por su cama y enredándose de una forma casi imposible entre las cobijas me termine de arreglar y salí del cuarto, esta vez no me quedaría en la obscuridad mirando a Xiumin, termine de arreglarme defectos en mi pelo y ropa que realmente no estaban mientras caminaba hacía la habitación de Xiumin y Luhan ya que había visto que ambos entraron hace unos minutos, me arme de valor y abrí la puerta con la mejor sonrisa, pero lo que vi hizo que esta desapareciera y me quedara en Shock.
-narrador-
El pelinegro abrió la puerta con una gran sonrisa dispuesto a hacer su mejor esfuerzo esta vez., pero aquella amplia sonrisa que adornaba su cara se borró y las esperanzas que tenía se desvanecieron, y por el gran silencio que los envolvía era casi posible escuchar el sonido de su corazón al romperse en mil pedazos.
-Eh… yo… lo-lo siento… mmm… este… dice Kris que no ta-tarden mucho en bajar, bueno… yo… los de-dejo solos-el pelinegro miraba sorprendido y aún en shock, pero este fue capaz de cerrar la puerta para evitar seguir viendo lo que ocurría entre sus Hyung’s, una vez cerrada la puerta el pelinegro dio un gran suspiro y no pudo evitarlo, simplemente se rompió.
El castaño estaba totalmente sorprendido puesto que noto como la mirada del menor perdió su brillo y como esa hermosa sonrisa de pato que se le formaba comenzaba a desaparecer, rápidamente soltó a Luhan y se quedó mirando al menor, el corazón del castaño se comprimió al notar como la voz del menor comenzaba a quebrarse y que amenazaba con romperse en cualquier momento, el mayor se quedó congelado mirando como el menor desaparecía tras la gran puerta blanca de su habitación.
-Xiu… ¿Xiumin Hyung?-el pelirrojo miraba totalmente preocupado al mayor
-mierda-susurro el mayor mientras apretaba su mano en un puño haciendo que sus nudillos perdieran color y que las uñas quedaran clavadas en sus palmas-primero lo de ayer y ahora esto-sentía dolor, mucho dolor, pero ese dolor tenía nombre y era Chen.
-Xiumin Hyung ¿Qué haces?-pregunto preocupado el pelirrojo-¡ve tras él!
-creo que es mejor dejar las cosas así ¿No crees? Después de todo era imposible desde el principio-el castaño miraba sus manos mientras silenciosas gotas saladas hacían su camino entre su rostro hasta caer y chocar en sus manos-“era imposible que Chen me amara”-pensó el castaño mientras trataba de sonreír para decir que estaba bien, aunque las silenciosas lágrimas y sus expresivos ojos dijeran todo lo contrario.
El pelirrojo miro el estado en el que se encontraba su amigo y ahora era él el que lo apoyaría, le dio un rápido y fuerte abrazó, se levantó y se acercó corriendo a la puerta de su habitación para ir tras de Chen y arreglar aquel mal entendido, pero antes de que abriera la puerta Xiumin se levantó y lo tomo del brazo aún con las lágrimas recorriéndole el rostro, el pelirrojo le dio una mirada arrepentida y triste, a lo que el castaño se limpió rápidamente las lágrimas de los ojos y miro a Luhan.
-¿A dónde vas?-pregunto confundido al pelirrojo
-voy a arreglar las cosas con Chen-le regalo una amplia sonrisa y pronto desapareció tras la puerta
El pelinegro se encontraba bajo aquel árbol, simplemente se mantenía recargado en el tronco de aquel árbol y le regalaba al cielo grandes y largos suspiros mientras su mirada se perdía en la nada, mientras este seguía perdido en sus pensamientos por su mente no podía dejar de repetir la escena entre Xiumin y Luhan que se encontraban abrasados. A lo lejos podia escuchar una voz que lo llamaba, para el pelinegro esta era como un eco, hasta que dejo de ser un simple susurro y logro sacarlo de sus pensamientos que lo seguían torturando y consumiendo.
-¡Chen!-gritaba el pelirrojo que se acercaba velozmente al gran árbol donde el pelinegro se encontraba-¡Chen! El pelirrojo susurro para sí mismo cuando se dio cuenta que el pelinegro lo había visto y se había levantado rápidamente y comenzaba a correr en dirección contraria.
-¡Déjame en paz!... ¡No te acerques!-gritaba molesto el pelinegro sin apartar su, ya borrosa vista por culpa de las lágrimas, del camino que tenía enfrente.
-Narra Yixing-
Cuando me desperté estaba atrapado entre mis cobijas, me encontraba enredado de una forma que creí que era imposible, después de quince minutos luchando por desenredarme, salí de la cama, pensaba despertar a Chen, pero parece ser que él se levantó mucho más temprano que yo, ya que su cama y sus cosas estaban arregladas, incluso las maletas que llevaría esta tarde cuando nos adentráramos en el bosque para practicar esta semana.
Me levante de la cama y me encamine al baño, tome una larga ducha en lo que meditaba algunas cosas, ya que la noche anterior había tenido un sueño realmente extraño, por alguna razón me encontraba en una habitación que solo tenía dos sillas, una mesa y sobre esta un espejo, en el sueño me encontraba con Xiumin Hyung, el cual pronto comenzó a congelar toda la habitación, cuando esta comenzaba a congelarse y cada rincón se volvía blanco yo me encontraba admirando un gran cuadro de un unicornio que pronto era alcanzado por el hielo que congelaba la habitación, después de unos minutos el blanco de la nieve nos rodeaba y Xiumin Hyung y yo nos encontrábamos sentados uno frente a otro, después de un rato guíe mi vista hacía el espejo que yacía frente a mí, mientras lo miraba un gran y brillante resplandor casi segador salió de aquel espejo, pronto pude distinguir a un chico, su cabello era de un color rojizo obscuro, su piel clara y sus ojos perfectamente delineados, después de mirarnos unos segundos desperté.
Salí de la ducha y me adentre en la habitación para comenzar a arreglarme, después de unos minutos ya había terminado de arreglarme y de acomodar mi parte de la habitación y mis cosas para esta tarde, salí de la habitación y me percaté de que Chen se encontraba a medio camino mirándose en el espejo mientras se arreglaba imperfecciones invisibles de su cabello y su ropa, sonreí ante la tierna e inocente forma en la que actuaba Chen. Seguí mi camino dejando a Chen atrás, cuando me encontraba en la planta baja me adentre en la cocina donde esta vez se encontraba el Taoris, nombre que se les había quedado desde la secundaría, ya que a ambos les tocaba preparar la comida.
-¿Quieren ayuda?-pregunte con una gran sonrisa mientras me acercaba a Kris
-No te preocupes Lay… Tao me está ayudando, toma asiento, Chen y los chicos bajaran en un momento, ya que le pedí a Chen que les hablara-Sonrió y se volvió a acercar a Tao y lo envolvió en un fuerte abrazó por la espalda y continuaron cocinando.
Me quede un rato mirando la agradable escena y contemplando la buena aura que desprendían esos dos, yo ya me había rendido con el tema del amor, pero verlos juntos, aún ahora, era un poco doloroso. No quería seguir mirando, así que desvíe mi mirada y la guíe hacia el pasillo cuando pronto vi pasar a Chen que se dirigía a toda prisa a la puerta que daba hacia el patío, unos pocos minutos después, tras de él, Luhan llego corriendo a la cocina algo preocupado.
-¿Dónde está Chen?-pregunto exaltado y preocupado, todos lo miramos confundidos-¿Dónde?- pregunto nuevamente
-Salió corriendo-contesto Tao mientras se recargaba de Kris y señalaba el camino que el mencionado había tomado
-gracias-Luhan hizo una pequeña reverencia y salió corriendo tras Chen por el camino que le indico Tao
Cuando Luhan cerró la puerta tras de sí al salir, no podía con mis nervios y mucho menos podía quedarme sentado sin hacer nada, me levante de un salto de mi lugar y salí tras ellos, mientras corría no me preocupaba por buscar a Chen ya que sabía perfectamente donde se encontraba, bajo ese gran árbol que fue testigo tanto de su valentía como de su debilidad.
-narrador-
El castaño seguía corriendo en dirección al gran árbol, pronto pudo divisar al pelinegro que, como en muchas ocasiones, se encontraba recargado en el tronco de este. El castaño comenzó a acercarse lentamente, cuando pudo divisar que el pelirrojo se acercaba más rápido a su amigo, hasta que estuvieron a escasos metros de distancia.
-Chen… escúchame-suplicaba el pelirrojo
-¡Déjame en paz!... ¡no te acerques!-gritaba molesto el pelinegro mientras se alejaba del pelirrojo
-vamos Chen… deja que te explique, no es lo que parece-el pelirrojo se acercó lo suficiente al pelinegro y lo tomo del brazo para evitar que escapara.
Ambos chicos comenzaron a forcejear, en un momento de desesperación y urgencia por escapar el pelinegro le envió una descarga al pelirrojo para que lo soltara, y efectivamente así sucedió, pero lo que no contaba el pelinegro es que aquella descarga lastimara con algo de gravedad las manos del pelirrojo, el castaño al notar lo ocurrido corrió más rápido hacia sus compañeros.
-¡Chen!-grito desesperado y preocupado el castaño
El pelinegro pudo divisar al castaño aproximarse, pero estaba tan asustado, triste y confundido que entro en pánico se adentró al bosque.
-Luhan déjame ver-el castaño que se encontraba parado junto al pelirrojo tomo sus manos totalmente preocupado y arrepentido por la acción de su amigo.
-vamos por Chen-sentenció mientras apartaba sus manos rápidamente y corría de nuevo tras el pelinegro
Los tres chicos seguían corriendo y adentrándose cada vez más en el bosque, después de unos minutos de haber corrido con todas sus fuerzas el pelirrojo alcanzo al pelinegro haciéndolo parar en seco, logrando que el castaño quien corría tras de ellos no alcanzara a parar a tiempo, logrando que los tres chicos cayeran al suelo y todo su alrededor fuera consumido por la obscuridad.
Después de unos minutos uno a uno fue despertándose, pronto se dieron cuenta de que ya no se encontraban en su patio puesto que el clima y lo que se encontraba a su alrededor había cambiado.
-¿Dónde estamos?-pregunto confundido el castaño
-el pelirrojo se estremeció-¿También lo sienten verdad?-el castaño y el pelinegro lo miraron y asintieron
-L-Luhan…-el pelinegro miraba sorprendido a algo que se encontraba tras del pelirrojo, pronto el pelinegro poco a poco señalo detrás de Luhan y ambos chicos que se encontraba de espalada a lo que sea que estaba viendo el pelinegro, voltearon lentamente.
**********
-Narrador-
El castaño miro salir al pelirrojo, después de quedarse unos minutos mirando totalmente embobado hacia la puerta por la cual habían salido, se levantó y se acercó a la ventana donde vio al pelirrojo que se acercaba al pelinegro y como el pelinegro no le prestaba atención, hasta que el pelinegro le grito y este se levantó de un salto dispuesto a correr hacia dentro del bosque, el castaño totalmente preocupado salió de su habitación y bajo corriendo llegando en un tiempo record a la cocina donde se encontraban Kris y Tao preparando la mesa para comenzar a comer.
Los dos chicos miraron extrañados al mayor puesto que este había entrado corriendo a la cocina y se encontraba muy agitado y con los ojos llorosos, los dos chicos se miraron unos segundos y volvieron la mirada al mayor que tiritaba de miedo y se consumía poco a poco en el pánico.
-¿Qué ocurre Xiumin Hyung?-pregunto extrañado y con total preocupación el pelirrubio por la condición del mayor, mientras se acercaba al más bajo-¿Por qué lloras?
-Lu… Luhan y Chen-el castaño tartamudeaba.
-¿Qué ocurre con ellos?-el castaño más alto le acercó al mayor y lo miro preocupado
-¡se han adentrado al bosque!-grito preocupado el mayor mientras las lágrimas amenazaban con salir nuevamente
-¿Qué hicieron qué?-pregunto alterado el castaño
-explícanos en el camino-sugirió el pelirrubio mientras tomaba por los hombros al mayor
El castaño asintió levemente ante la propuesta del menor y los tres chicos salieron de la casa tratando de llegar lo más pronto posible donde el resto de los chicos se encontraban.
Cuando llegaron el castaño sintió su corazón dar un vuelco al ver a los tres chicos bajo ese gran árbol, pero su corazón se rompió cuando vio que Chen peleaba con Luhan y termino lastimándolo escuchando poco después a Lay.
-Luhan déjame ver-el castaño tomo sus manos pero este las aparto rápidamente
-vamos por Chen-
Los tres chicos corrieron más rápido adentrándose en el bosque, cuando llegaron se dieron cuenta que el pelirrojo había logrado alcanzar al pelinegro, pero al parar en seco lograron que aquel distraído castaño chocara contra ellos y los tres cayeran desapareciendo ante los ojos de sus compañeros. Los tres chicos totalmente confundidos y sorprendidos por lo que acababan de presenciar, se acercaron a donde sus compañeros estaban parados instantes atrás.
-¿Qué rayos acaba de ocurrir?-el pelirrubio miraba preocupado a donde los chicos habían desaparecido.
-¿no pueden desaparecer así como así verdad Kris?-el pelirrubio miraba al más alto con los ojos como platos, sumido en la preocupación
-Xiumin Hyung ¿Qué es lo que paso?-el castaño más alto mantuvo su compostura y lo miro seriamente
El castaño lo miro y luego lanzo un gran suspiro y comenzó a narrar
-Hace un tiempo bajo aquel gran árbol, Chen y yo nos encontramos y nos quedamos juntos por un largo tiempo, ese día… Chen…-el castaño guardo silencio y desvió la mirada del más alto y la dirigió al pasto húmedo que tenía bajo sus pies-Chen… Chen me… Chen me beso-susurro el mayor
-¿Qué Chen hizo qué?-pregunto exaltado el castaño más alto
-Kris-reprendió el pelirrubio a su pareja dándole un golpe en el brazo del mayor-continua Hyung
-pues… me gusto el beso y con el tiempo me di cuenta de que me gustaba, pero hoy…-el mayor guardo silencio y tras una gran respiración continuo hablando-cuando Chen fue a avisarnos sobre que ya estaba listo el desayuno… nos vio a Luhan y a mi abrazados en el piso de la habitación-el castaño seguía sin mirar a los más altos mientras jugaba con sus manos nerviosamente.
El pelirrubio al escuchar los que el castaño acababa de contar no lo podía creer-¡¿Qué?!-interrumpió al mayor-ah… lo… lo siento
-fue un malentendido-se apuró a contestar el mayor mientras agitaba las manos rápidamente en forma de negación y miraba al más alto con ojos arrepentidos-lo que paso es que Luhan estaba nuevamente triste y preocupado, me moleste por el hecho de que fingiera estar bien y entonces lo comencé a regañar cuando el rompió en llanto…-el más bajo miro a los dos chicos con una sonrisa triste-saben que es imposible regañar a Luhan cuando pone su mirada triste… pues me sentí mal por él y por todo lo que le estaba pasando así que comencé a consolarlo
-y en ese momento entro Chen y malentendió la situación-confirmo el pelirrubio y el castaño solo asintió
-entonces eso fue lo que paso-reflexiono el más alto de los tres
-es mi culpa, y si le hubiera explicado yo a Chen… Lay y Luhan no estarían quien sabe dónde, y si no hubiera pasado esto Chen nunca hubiera lastimado a Luhan-los ojos del castaño comenzaban a cristalizarse, este se sentía culpable por cómo es que había terminado aquella situación.
-no puedes vivir con el “Y SI” de las cosas Hyung-susurro el pelirrubio que miraba triste al mayor
-por el momento será mejor que regresemos y pensemos en una forma de encontrarlos-el castaño más alto tomo por los hombros al mayor-vamos Tao-el nombrado asintió y se colocó al otro lado del mayor que lloraba desconsoladamente y entre ambos llevaron al mayor a la casa.
Los tres chicos se adentraron a la sala dejando al mayor sentado en el sillón más grande, de un momento a otro este se desplomo abarcando toda la extensión del mismo, este ya no lloraba, en cambio se encontraba en un estado de shock donde solo miraba a un punto en la nada. Los dos chicos más altos se miraron, sus rostros reflejaban preocupación y lastima por su Hyung.
-Tao-el castaño le susurro al pelirrubio-acompáñame a la cocina por favor-el menor asintió tímidamente y siguió a su pareja hacia la cocina.
Ambos chicos dejaron solo al castaño que seguía perdido en sus pensamientos, y estos podían apostar que en lo que pensaba era en que él tenía la culpa de lo que había pasado.
-¿Qué ocurre gege?-pregunto preocupado el pelirrubio
-temo por Luhan Hyung, Chen y Lay-susurro nervioso el castaño
-¿Por qué temes por ellos gege?-pregunto aún más preocupado el pelirrubio mientras intentaba con todas sus fuerzas no perder la compostura y comenzar a llorar como su Hyung
-Yo sé dónde están-susurro el mayor-y el saberlo me preocupa-el castaño miraba preocupado a su pareja
-¿S-sabes d-donde e-están?-pregunto el castaño sorprendiendo a los más altos-¿D-donde… donde están Kris?... ¡¿Dónde?!-grito el mayor rompiendo nuevamente en llanto y desplomándose contra el suelo de la cocina.
Los más altos se acercaron rápidamente al mayor para levantarlo y llevarlo a su habitación para que se recostara y descansara, cuando lo metieron entre las cobijas este inmediatamente se sumió en un profundo sueño mientras silenciosas lágrimas salían de sus ojos haciendo que los más altos se preocuparan aún más por él.
*************
-narra Luhan-
Me encontraba en plena obscuridad, no había nada a mi lado, solo era yo, poco a poco la obscuridad que me rodeaba me iba consumiendo y aquel brillo que solo salía de mi cuerpo se iba apagando, en poco tiempo me iba a consumir y desparecería. Tome nuevamente aquella bola de metal, esta flotaba frente a mí y a su lado otras más pequeñas, en la más grande se veían once personas en una línea bajo un tipo de eclipse solar, pronto esa imagen cambio y aparece aquel rostro que simplemente me enamora, mis ojos comienzan a cristalizarse, sabía que nuevamente rompería en llanto, pero intente con todas mis fuerzas que eso no pasara, limpie mis ojos con las palmas de mis manos y luego guíe mi vista de nuevo a esa mirada y esos labios que me encantaban-annyo Sehun-susurre ante aquella bola de metal y sin poder evitarlo más una silenciosa lagrima rodo por mi meguilla hasta chocar contra mis pies.
Cuando creí que todo estaba acabado y que pronto sería consumido por la obscuridad frente a mi apareció un gran brillo y un intenso aire, que a pesar de ser algo frio, era realmente cálido y reconfortante. Comencé a caminar hacia donde se encontraba aquel brillo, cada paso que daba hacia revolotear mi corazón hasta que por fin atravesé aquel brillo. Cuando desperté aquella obscuridad desapareció y me di cuenta de que ya no estábamos en nuestro patio, puesto que me di cuenta que donde ahora nos encontrábamos estaban en otoño y nosotros ya estábamos en invierno, saque mi celular para checar cuanto tiempo estuvimos inconscientes cuando lo desbloquee me sorprendí mucho puesto que tenía un poco de señal de teléfono, algo raro puesto que estábamos en un lugar completamente distinto, estaba a punto de llamar a Xiumin para decirle que nos encontrábamos bien y que no se preocupara pero en ese momento Chen y Lay comenzaron a despertarse, deslice mi celular dentro de mi bolcillo trasero y los ayude a levantar.
Comenzamos a discutir de cosas sin sentido y de las razones por las cuales llegamos a este lugar, pronto Lay y yo comenzamos a hablar entre nosotros de como regresaríamos hasta que Chen nos miró un poco preocupado y nos señaló a algo que se encontraba a lo lejos a nuestras espaladas, ambos nos giramos para así poder ver lo que Chen nos estaba señalando.
-¿Qué rayos es eso?-pregunte sorprendido
-¿Están….?-comento Lay mientras miraba sorprendido la escena
-¿Entrenando?-concluyo Chen la oración que Lay había comenzado
Los tres nos acercamos lo más que podíamos, para sí poder ver más claramente lo que ocurría, ocultándonos detrás de unos arbustos que delimitaban aquella parcela donde dos chicos peleaban con lo que parecían copias de ellos mismos.
Era realmente sorprendente ver lo fuerte que podían llegar a atacarse unos a otros, después de varios minutos de verlos pelearse entre sí, un hombre no más alto que ellos los llamo.
-Bien Chanyeol y Suho ya pueden descansar-sonrió aquel hombre mientras los nombrados hacían una pequeña reverencia y tomaban unas botellas de agua-ahora…-aquel hombre miro en su bitácora, como la que solía usar Kris cuando entrenábamos-mmm… Baek y Sehun
-¡No es justo… ¿Cuándo voy a poder vencer a Sehun-ah?!-replico aquel chico de cabello rojo
Sehun… al escuchar ese nombre guié mi vista hacia donde se encontraban los dos chicos, no podía creerlo, era él…
-Sehun-ah… no seas malo con tu Hyung-sonrió tímidamente aquel chico que era más bajo que Sehun
-No te preocupes Hyung-sonrió Sehun-solo hare que no te puedas parar en una semana… y que quedes tan adolorido como cuando “ayudas” a Chanyeol Hyung por las noches
-¡¡Sehun-ah!!-grito aquel chico que estaba más rojo que podía confundirse con su cabello
Sehun soltó una sonora risa y se alejó de aquel chico para colocarse en su lugar, me quede mirando embobado a donde estaba aquel chico que se colaba entre mis pensamientos… ¿Podrá ser verdad? Estaba viendo a mi Sehun, ¿era real?, sí, era real y lo estaba viendo justo ahora.
-¿Luhan que sucede?-susurro Lay que estaba a mi lado-¡oh por dios Luhan! ¡Estás sangrando!-grito desesperado ocasionando que los chicos que estaban ahí se acercaran confundidos y curiosos hacia donde nos encontrábamos
-eishh… Lay Hyung eres un idiota-dijo Chen entre dientes mientras le daba un golpe no muy fuerte en su cabeza
-cállate que fue tu culpa que Luhan Hyung sangrara-regaño a Chen mientras se quitaba su paliacate que usaba como pulsera y vendaba mi mano con ella, podría haberme curado ahí mismo pero supongo que sintió miedo de que esos chicos vieran nuestros poderes, puesto que no sabíamos dónde nos encontrábamos.
-lo lamento Hyung-susurro Chen que me miraba arrepentido
-no te preocupes Chen-le sonreí mientras nos poníamos de píe-fue un accidente
Cuando estábamos a punto de irnos los seis chicos que estábamos espiando estaban a nuestra espalda y nos miraban confundidos y un tanto molestos por interrumpirlos, ya que supongo no se dieron cuenta que los espiábamos.
-¿Quiénes son ustedes?-pregunto un chico no tan alto como yo, de piel clara y cabello negro mientras nos miraba un tanto molesto
-¿Ahora qué hacemos? ¿Qué les decimos?-le pregunte a Lay en chino, hace un tiempo me había enterado de que tanto él cómo Tao y Kris eran Chinos, yo a pesar de vivir la mayor parte de mi vida en Corea había nacido en China y mi madre me había obligado a hablar en Chino en casa.
-no lo sé… ¿improvisar?-me contesto Lay, mientras tanto Chen nos miraba confundido puesto que no hablaba Chino, bueno hablaba, pero muy poco, ya que solo le habíamos enseñado a él y a Xiumin Hyung algunas cosas
-este… hola, perdón si los hemos interrumpido, mi hermano-señale a Lay quien le susurraba algunas cosas a Chen-y yo venimos de visita con nuestro amigo ya que él nos había contado mucho de su ciudad natal, pero el muy tonto no nos dijo que no tenía ya su departamento y que tendríamos que acampar en el bosque ya que no tenemos dinero porque perdimos nuestras cosas ya que no conocemos, y por accidente me lastime la mano con una rama y mi hermano exagero las cosas como siempre-hice una reverencia indicando a Chen y a Lay que hicieran lo mismo… definitivamente nos encontrábamos en muchos problemas.