Al siguiente día, Tsuna despertó temprano(el cielo se cae O_o) por dos razones, uno, no recibir patadas o martillazos por parte de reborn y dos, no hacer esperar a sus compañeros y correr como alma que le chupa el diablo, se cambió y luego se fue a desayunar con todos.
-buenos días
-buenos días Tsuna-nii/Tsuna-kun/Tsuna –saludaron todos de diferente forma.
-oye Tsuna, mañana nos iremos a entrenar
-NANI, por qué?
-debes de volverte más fuerte y dejar de ser dame-Tsuna para convertirte en el Décimo Vongola
-ya te dije que yo no me quiero ser jefe de la mafia
-de todas maneras lo serás
Tsuna iba a contestarle pero vio la hora que era y decidió irse antes de que se le hiciera tarde.
-adiós, me tengo que ir
-adiós Tsuna-kun/Tsuna-nii/Tsuna
Después de partir, Tsuna espero a que todos llegaran al sitio donde siempre se encuentran cuando van a la escuela; uno por uno van llegando y se saludan, cuando ya están todos empiezan a caminar hacia la escuela, platicando, discutiendo y haciendo de todo que ni cuenta se dieron cuando ya habían llegado, entraron a la escuela y se fueron a sus respectivos salones, Tsuna y los demás al llegar al salón 2¨A¨ sonó la campana y se sentaron en los mismos sitios de siempre, ese día iba a ser corto ya que algunos maestros no habían venido.
A la hora del almuerzo Tsuna, Gokudera y Yamamoto se fueron a la azotea para poder ver como siempre el bello paisaje, al llegar sacaron sus almuerzos, Tsuna traía bolas de arroz con carne por dentro, Yamamoto traía Sashimi (ustedes mismo búsquenlo porfa XD) y Gokudera traía ensalada, de ahí se pusieron a almorzar y a platicar.
-Décimo, le sucede algo –pregunto Gokudera cuando veía a Tsuna algo pensativo
-No, no sucede nada, es solo que Reborn dijo que nos iríamos a entrenar de nuevo por que dice que debo ser muy fuerte para poder ser el Décimo Vongola *suspiro* parece que nunca va a entender que no quiero involucrarme con la mafia –decía con aire de derrota y cansancio
-Oh, aún siguen jugando a eso, parece que nunca se cansaran –dijo Yamamoto con su típica sonrisa, por otro lado a Gokudera le estaba pasando algo cuando estaba cerca de Yamamoto y para que no se le notara se ponía a discutir aunque al que no estuviera ciego se daría cuenta de que sus discusiones exageraban un poco.
-Podrías dejar de pensar que esto es un juego –grito Gokudera
-ma, ma tranquilo Gokudera –dijo Yamamoto tratando de tranquilizar a Gokudera provocando que este se enoje y le da un golpe en la cabeza y se va de ahí despidiéndose de Tsuna, Yamamoto no sabía que a la fiera no le puedes decir que se tranquilice porque solo provoca un mayor enojo.
Estas bien, Yamamoto? –pregunto Tsuna mirando como Yamamoto se sobaba la cabeza
Si, que le pasa a Gokudera, últimamente ha estado más enojado que nunca –dijo aun sobándose la cabeza, al parecer Gokudera se nos ha pasado, terminaron de almorzar y de conversar y sonó la campana de devuelta a clases, ambos se pararon y se fueron a su salón, al llegar vieron que Gokudera estaba pensativo pero no le tomaron importancia y se fueron a sentar, Tsuna estaba un poco preocupado por la actitud de Gokudera ya que este estaba exagerando con su enojo, las demás clases pasaron rápido y salieron temprano ya que la última clase la tenían libre, Gokudera y Tsuna se fueron solos ya que Yamamoto tenía practica ese día, Tsuna no desaprovecho la oportunidad para hablar con Gokudera.
Gokudera-kun –llamo Tsuna a Gokudera
Que sucede Décimo –dijo mirándole y prestándole atención
Es que quería preguntarte que si… te ésta pasando algo?
Por qué lo pregunta Décimo?
Es que… como decirlo, etto… te eh visto más violento que otras veces y más hoy que le pegaste a Yamamoto y te fuiste –dijo todo nervioso, Gokudera no sabía tampoco porque le sucedía, pero sabía que le pasaba cuando estaba con Yamamoto.
No es nada, es solo que me enfada estar tanto tiempo cerca del Friki ese –le respondió sin importancia alguna.
mmm… ésta bien, espero que puedas tranquilizarte por ahora –dijo dedicándole una sonrisa a lo que Gokudera le dedico una también; al llegar a la casa de Tsuna se despidieron y Gokudera se fue a su casa.
Tsuna entro a su casa y se dirigía a la cocina, al llegar a la entrada al comedor/cocina recibió un patada de Lambo en la cara, quien estaba siendo seguido por I-pin y recibió otra patada cayendo al suelo.
Hola Tsu-kun
Hola Tsun nii
Hola Tsuna -Saludaron Nana, Futta y Bianchi.
Hola –saludo Tsuna incorporándose y cuando se incorporó cayendo al suelo por una patada de Reborn- itai, itai, Reborn ¿por qué hiciste eso?
Debes tener reflejos, Tsuna, o si no podrías morir en la mafia –explico Reborn y Tsuna suspiro con aire cansado, se levantó y se fue a cenar con su familia.
Después de cenar Tsuna se fue a cambiar y luego fue a un mandado que le encargo su madre, salió de la casa y fue a comprar lo que se le fue encargado.
Después de comprar lo encargado se dirigió a su casa, iba caminando pasando por el parque tranquilamente, hasta que…
AAHH, ayuda –se escuchó un grito cerca, Tsuna corrió en dirección del chico que grito, llego a un callejón y pudo ver que en este estaba su nuevo compañero de clases y uno de los brabucones de su escuela tomando al chico de los brazos y poniéndoselos por encima de la cabeza, Tsuna no lo pensó dos veces y se puso sus guantes y se tomó dos de sus píldoras (¬¬ como le llamen) y la llama de híper última voluntad apareció y ayudo a Minoru y este reconoció al castaño y corrió hasta donde estaba el, refugiándose detrás de Tsuna
Estas bien? –pregunto Tsuna recibiendo un asentimiento de Minoru- tu, vete de aquí antes de que te de una paliza –dijo Tsuna queriéndolo asustar aunque lo digiera de broma,
el brabucón sabía que Tsuna puede ser fuerte cuando se lo propone y ese era uno de esos momentos así que decidió marcharse de ahí.
Gracias por ayudarme Tsuna-kun –agradeció Minoru.
No fue nada, pero deberías de tener más cuidado –Minoru asintió y se despidió de Tsuna para poder irse a su casa. Tsuna llego a su casa y guardo el mandado en el refrigerador, luego se fue a acostar.