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Lost Memory. por aurora_la_maga

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Notas del capitulo:

Primero que nada hola!!!


Y un enorme agradecimiento a mi amiga Abigail la Fey que me ayudo a corregir y a mejorar el capítulo gracias!!!!


Saludos a mi queridas amigas y compañeros n_n


Hiro Daizuky.


Himeko-can


Inuichi Fuyu.


Kise Ryota.


Malkita Avila.


Carma Mariana Ryt.


Koiki Tsuki.


Afrodita Casiopea.


Lizeth Fuyoshi.


Robert Joaquin Davalos.


Naomi Soto.


Kary Map.


Less Gamp.


Daniela Ca.


Yosseline Dessire.


Carol House.


Karla Veliz


Akiomi Musume.


Isabel Garcia perez.


Danny Tsukino.


Akiomi Yuko.


ENTRE MUCHAS PERSONITAS MAS!!! Gracias por leer y comentar cuando puede n_n


 


QUE LO DISFRUTEN o.o!!!

Lost Memory

By:

Aurora la Maga

6: Días felices, que se volvieron negros. ! No lo hagas!

 

Los acontecimientos estaban sucediendo de manea rápida y audaz. Una semana había transcurrido luego de aquella extraña fiesta de gala. La situación entre Morinaga Tetsuhiro y Souichi Tatsumi estaba avanzando demasiado bien, incluso ese día habían quedado de verse en un restaurant.

El pelos largos caminaba por las avenidas, admirando todo a su alrededor mientras lo hacía pensaba en tantas situaciones y acontecimientos que habían suscitado en todos esos 27 años de su corta vida. Mientras el Tatsumi se dirigía de camino al restaurant varios pensamientos asaltaban su traficada cabeza ya que Souichi no era de esas personas que aceptaba citas.

No era que no quisiera ir a esos lugares pero vamos, él se estaba convirtiendo en alguien demasiado complaciente, ¿Acaso esto lo habría hecho, si Morinaga hubiese seguido el mismo de siempre? Se lo preguntaba muchas veces,  ¿cómo era que ahora se comportaba de esa manera? Mas sin embargo, no le dio mucha importancia a aquellos enormes cambios solo deseaba estar con él aunque el hecho de que él ahora fuera un hombre casado lo perturbara con demasía. Quería, definitivamente, deseaba acabar con esa situación, puesto que ya habían reavivado recuerdos y recuperado el tiempo perdido, pero parecía que Morinaga tenía otros planes,  ¡maldito Morinaga!

Fingiendo desgana, entró a un restaurant. Era de noche, apenas había salido de la universidad y había recorrido toda la ciudad simplemente para llegar hasta ese lugar. Había dejado muy claro a Tetsuhiro que no deseaba que le anduvieran llevando de un lado a otro en auto, carajo, no era una princesa, las cejas se le arrugaron en muestra de enfado. Recordó cómo Yuriko fue por él a la universidad y la vergüenza que pasó.  Apretó sus puños y deseó golpear algo, pero su corazón latía demasiado deprisa y no era por su estado de ánimo. Buscó con sus ojos color miel al peli azul, quien estaba en la barra del bar solo. Notó como los colores se presentaban en su rostro y el calor subían a su rostro y cómo, dentro de su pantalón, algo empezaba a despertar.

Morinaga miraba fijamente la copa que tenía frente a él, realmente sabía, uno de los muchos problemas que tenía el haber perdido la memoria es que no recordaba nada acerca de sus gustos y preferencias, Resultaba realmente divertido probar las cosas, había algunas que sabían a rayos y otras que eran deliciosas, era toda una aventura. Perdido estaba en sus pensamientos, cuando notó una mano en su hombro, se giró lentamente:

-Souichi- Le llamó de forma animada, pero un poco apagada.

-Mm, Hola, Morinaga….

Sempai había saludado con cautela, algo no andaba bien pudo notarlo a leguas, desde hacía una semana que había notado al peli azul muy extraño y distraído

-Dime, homobaka, ¿Qué hacemos aquí?- Souichi se impresiono, a veces actuaba raro al lado de este sujeto, pero es que había sido demasiados años a su lado como para no soltarse y llevarse mejor. Aunque su personalidad Homofa no se lo permitiera haría el intento por que él lo merecía.

-Ja, ja, ja, ja, ja, ja.- Ahí estaba esa sonrisa que lo mandaba directo a la cama, ese Maldito Morinaga tenía algo tan preciado que él no podía dejar ignorado, noto como el ojo verde se relajaba un poco y susurraba respondiendo.-quería que vinieras para cenar juntos.

Mientras se acomodaba mejor en el banquito, Souichi admiró aquella especial forma de vestir de su ex asistente, traía un saco blanco y por dentro una camisa negra, sus jeans y zapatos de diseñador. Simplemente no era el mismo chico de antes, aún faltaba mucho para que lo fuera, dirigió sus ojos miel a otro lugar y susurró:

-Sabes, creo que debemos de dejar de vernos de esta manera.

-¿A QUE TE REFIERES Souichi?-Cuestionó angustiado y bastante preocupado.

-Me refiero a que tú tienes una esposa… y será mejor que la atiendas.

-Yo no tengo una esposa, ella me engañó, ¿Lo recuerdas?

-Sea como sea, es tu mujer y debes ir con ella.

Souichi se movió en dirección de la puerta, dejando a Morinaga casi de piedra, aquello le había taladrado la cabeza se preguntaba internamente ¿Por qué ese sujeto era tan voluble? En un momento bromeaba y ahora decía esto. Se puso de pie y dejó una cantidad de dinero para pagar la cuenta de lo que había estado tomando, Salió del restaurante corriendo y  divisó al pelos largos en una esquina, en la avenida, tratando de cruzar la calle. Yuriko llegó al lado del peli azul y cuestionó:

-¿Nos retiramos ya Tetsuhiro-sama?

-No…- Susurró- Es decir, tú, sí.

-¿Qué dice?

-Déjeme solo, en unas horas te llamaré.

 Comenzó a correr, ya que Souichi estaba cruzando la calle. Con prisa logró posarse a su lado y susurró:

-¿Por qué estas enfadado? ¿Acaso hice algo malo?

El platinado no decía nada, no iba a decir nada, él no era así. Continuaron caminando hasta que llegaron al barrio cercano que les llevaría a casa de Matsuda. Souichi caminaba observando al piso, pues ese hecho de que le seguía su amado Tetsuhiro le hizo recordar cuando hacía lo mismo en el pasado, se perdieron del bullicio y cuando por fin estuvieron solos, con la única compañía en los enormes callejones, Souichi susurró:

- No deberías andar en estos lugares, es muy peligroso para alguien que luce como tú.

-Espera.

Dijo ahora sujetándolo del brazo y llevándolo a la pared de cemento de una casa. Quedaron al lado de un poste de luz, Souichi admiró aquel rostro, un tanto molesto, del Morinaga quien le observaba de manera profunda y seria. Notó como éste posaba su mano en la pared, al lado de su cabeza, y juntaba su cuerpo, poco a poco.

- ¿Por qué ahora estás molesto?

-¿De qué hablas, estúpido? Yo no estoy molesto.

Intentó empujarle un poco, pero sin poder hacer mucho, Morinaga sujetó  rápidamente con su mano libre la de su peli largo, la cual beso por unos segundos y susurró:

-Souichi… me estás mintiendo de nuevo.

-¡TKS!- Chasqueó su lengua.

Realmente estaba irritado, si había un mentiroso era ese estúpido que le miraba tan fijamente, maldito Morinaga, maldito, maldito…

-¿Tú quién eres para decir cuando miento o no? No sabes nada, aquí el único que me oculta cosas eres tú.

Morinaga notó cómo se deslizaba por un lado y salía de su agarre. Souichi caminaba enfadado, pronto él se giró a ver como se desaparecía y sintió que el alma se le encogía de pena, dejó que se alejara. Lo que Souichi había dicho, era cierto, él  guardaba un secreto horrendo, pero no podía decírselo, sí lo hacía, lo perdería para siempre. Contempló como su amado se iba perdiendo de su vista. Metió las manos en los bolsillos del pantalón y comenzó a caminar sin rumbo. Sin saber cómo, había llegado a un parque y se quedó ahí, sentado, pensando en una sola maldita cosa que recorría su cabeza…

 

*Recuerdo.*

 

Despertaba de a pocos, la cabeza le iba a estallar, aún se sentía mareado, después de esa fatídica noche…

Acomodaba sus ojos a la luz en su habitación, con calma se removía, tentando su frente la cual palpitaba al igual que la parte trasera de sus ojos, era como si un martillo golpeara una y otra vez su cabeza. ¿Qué lo puso así? No entendía nada, él no había bebido mucho, ¿entonces?

Restregó nuevamente sus ojos y noto algo a su lado. Se destensó y dedicó una suave sonrisa a su acompañante y susurró:

-¿Souichi, que haces aquí, Meilin se va a…?- Se quedó de piedra al ver a la mencionada a su lado y rápidamente admiró su cuerpo desnudo y prácticamente sobre su pecho.

-Buenos días, amado esposo-Dijo Meilin melosamente.

¿Q-Qué es esto?- Cuestionó con voz suave, se puso de pie rápido y grito-¡MEILIN!...

La  mencionada terminaba de despertarse con lentitud, se rascaba los ojos elevando su torso y dejando ver su delgada figura, todo sus senos y su sexo, Morinaga tragó grueso ¿qué hacía ella en su cama y desnuda?

-Tetsuhiro, cariño… ¿Qué está pasando, por qué me miras así?

Morinaga se apartó bruscamente, no quería que sus cuerpos se tocaran, era nauseabundo.

-Lo mismo pregunto yo  ¿qué carajos está pasando? y por favor… no me llames cariño.

 Meilin se puso de pie y con movimientos sutiles llego a él, se abrazó a su pecho y susurró sobre éste haciendo círculos en uno de sus pectorales.

-Pues bueno, tú y yo pasamos la noche juntos ayer, tuvimos nuestra perfecta luna de miel…jijijijiji.

 Morinaga la apartó colocando sus manos sobre sus hombros y gritó.

-¡ESO ES IMPOSIBLE!- Meilin sonrió y susurró.

-Claro que sí, estuviste realmente increíble ayer, eres un amante maravilloso- Dijo mostrando un pequeño mordisco en su cuello y tomando su mano para llevarla lentamente a su sexo en donde ella notó el asombro en el rostro del Morinaga.- Gracias mi amor… Me has hecho muy feliz.

-No, no, no, esto no puede estar pasando, ¡jamás!- Gritó con rabia para empujarla y hacerla salir de la pieza gritando- SAL DE AQUÍ.

-¡¡¡Tetsuhiro!!! Pero ¿qué haces?

-¡¡¡No!!!- Gritó azotando la puerta y llevando sus manos a su cabeza.- ¡¡Es imposible, imposible!! No puede ser verdad yo… no pude haberme acostado con ella… eso jamás…¡¡NO, NO, NOOOOOOO!!

Morinaga  caminaba de un lado a otro, estaba completamente desesperado, fue directo al baño y se sometió a la ducha, posó sus manos sobre la pared de azulejos y dejó que el agua acariciara su cuerpo. Observaba con desgano la pared y susurraba:

- Sempai… no puede ser, yo…-Tragó grueso…mientras comenzaba a llorar desconsoladamente.

 

                                                                                *FIN DEL RECUERDO*

 

Aún seguía en el parque, la banqueta fue la única que escucho sus lamentos y susurros en los que se disculpaba por lo que había hecho.

Morinaga arrugó las cejas y llevó una mano a su cabeza, jaloneó un poco sus cabellos y susurró:

- Mierda,  mierda,

Estaba desesperado, le ocultaba algo verdaderamente importante a Souichi y sumado a eso, la preocupación de la que era presa, pues sí Meilin, antes no estaba embarazada, ahora era posible que sí lo estuviese. Se ponía de pie y suspiraba hondo. No era momento para ceder, tenía que ir con él y así fue.

 

Unconditionally By Katty Perry.

Oh no, did I get too close?
Oh, did I almost see what's really on the inside?
All your insecurities
All the dirty laundry
Never made me blink one time…

Oh no, ¿tan cerca llegué?
Oh, ¿Casi lo logro ver?
Lo que realmente está dentro
Todas tus inseguridades
toda la ropa sucia
En ningún momento dudé…

 

Recordando vagamente el camino, pudo acordarse de varios detalles en los callejones, hasta que llegó a un terreno solitario, una parcela bastante grande, en donde en lugar de una casa había pasto, enseguida susurró:

-A-Aquí, ¿qué… paso?...sé que pasó algo, conozco este lugar…

Rápidamente los gritos de Kanako se enjugaron en su cabeza, al igual que los de Souichi y el dolor fantasma de una cortada y sangre. Se llevó la mano al brazo, algo le ardía, le dolía a más no poder, ¿qué tenía? Se quitó la chaqueta y remangó la camisa casi con desesperación…y allí la vio, sus dedos tocaron la cicatriz, y como si de magia se tratase, los recuerdos empezaron a aparecer en su cabeza. Ese fatídico día, de repente, se hizo nítido, cerró los ojos y pudo ver al otaku, a Kanako, a Sempai, el explosivo…

- La casa de Sempai estaba aquí…¡¡¡ESTABA AQUÍ!!! Fuego y desesperación ¿qué es todo esto?....

-¿Morinaga?- Se escuchó la voz reconocida del Ojo miel.

Muy despacio se dio la vuelta, las imágenes del pasado y del presente se juntaban en su interior. Los gritos, las sirenas, la desesperación, el miedo y la enorme alegría que sintió al ver a Sempai entre las llamas… ¿Sempai? ¿Sempai? Sí, ahí estaba él, observándole con los ojos abiertos e impresionados.

-¿Sempai, a-aquí esta… aquí estaba su casa antes, verdad? ¿Es así?

 El pelo largo asintió y susurró:

-Sí… Un estúpido le prendió fuego.

-¿Cómo, fue?

-Eso no tiene importancia.- Dijo con voz calma.- Vamos…

 Morinaga se detuvo y cuestionó:

-¿Por qué regreso por mí?

-Por qué me acorde que no conoces el lugar y posiblemente te podías perder.

 El ojo verde agachó su mirada y susurró:

-Sempai…-La voz de Morinaga sonó extrañamente deprimida.

Souichi se erizó al ver ese rostro lleno de tristeza y de culpabilidad. Se lastimó a sí mismo al no quererse acercar a él para darle su apoyo. Hubo un momento de lucha interna y su orgullo salió derrotado, pausadamente se acercó al otro:

-Vamos…déjalo ya, no soporto verte así…

 Enseguida emprendieron camino, mientras lo hacían, Morinaga susurraba:

-Quería que cenáramos algo.

-Es verdad, tú no has comido nada.

-No…

-Bueno, Matsuda está haciendo la cena y… ¡AH!.....

 Fue sujetado por el Morinaga quien le abrazó por detrás y susurró en su oreja.

-No, quiero a Senpai.- Dijo con voz grave y sincera, pero poderosamente sensual.- Quiero que mi memoria se llene de todas sus expresiones, sus gemidos todo, lo quiero Sempai, todo, por favor.

Souichi se sintió derretir por dentro, por más que quisiera, no podía negarse, era demasiado intenso, lo amaba con tanta intensidad que era imposible negarlo. Se giró lentamente y buscó, con su boca, esos labios que le recibieron con intensidad. Rozaba su lengua contra los labios del Morinaga quien, mordisqueaba con calma la boca de su Senpai, el cual susurró, con voz baja:

-No puedo contenerme, no sé lo que me has hecho, pero no puedo dejar de hacer esto contigo, maldito seas, Morinaga…

-Souichi…

-Me has vuelto raro y te odio por eso…

-Por favor, hazme recordar, Souichi, devuélveme todos esos recuerdos.

-No, eso sería lastimarnos.- Susurró cabizbajo.- No era una buena persona contigo.

-¿No eras tan intenso como ahora?

 Souichi negó y trató de esconder su rostro.

-Pero, entonces, ¿Has cambiado? ¿Cómo eras antes?- Morinaga tomaba sus manos.- Dime por favor.

-No, he cambiado solo estoy haciendo algo por ti y por mi… pero…

Souichi se sentía avergonzado, quería decirle que no podía seguir así, que le lastimaba el hecho de que alguna vez lo tildarían de homo y aunado a eso, le dirían que era el amante de un hombre rico. Sin mediar palabra, tomó camino, siendo seguido por Morinaga quien cuestionaba a donde iban, pero al ver a lo lejos los departamentos pudo entender completamente. Llegaron con prisa a ese lugar y en éste, Souichi planteó sincero:

-Ésta debe ser la última noche.

-¿Qué, pero por qué?

-No podemos seguir así, yo no puedo seguir así.- Explicó con desgano y voz severa.- No es algo que soporte, entiéndelo.

Morinaga se aferró a su cuerpo y susurró:

- No podría dejar de verte o de amarte Souichi entiéndelo, te necesito.

-Ya basta idiota.- Dijo empujándolo y mirando a un costado.

 Morinaga tragó grueso:

-¿Dime qué pasa?

-Tú dímelo, te has portado raro últimamente, actúas como si ocultaras algo horrible…- Sentencio con enorme voz fuerte.

 Intentó hacer salir su carácter tirano y creyó que lo estaba consiguiendo hasta que fue silenciado por los labios del ojo verde quien se clavó a su boca y susurró:

-Me pasa que no sé… ¿Cómo hacer para que entiendas que te amo?

-Idio…-No pudo continuar, aquellos besos lo estaban rodeando.

 

Unconditional, unconditionally
I will love you unconditionally
There is no fear now
Let go and just be free
I will love you unconditionally…

Incondicional, incondicionalmente
Te amaré incondicionalmente
ya no hay miedo
dejen ir y sólo sean libre                                                                                                                                                                      Te amare incondicionalmente….

 

-“¿Por qué, por qué no puedo pasar de largo, por qué no puedo ser el mismo de antes y golpearte y detenerte?”

 Lentamente era llevado hacia adentro en las habitaciones, mientras lo hacían, Morinaga sentía los gemidos y un jadeo que golpeó su realidad, se detuvo justo antes de llegar a las habitaciones y cuestionó susurrando en su cuello.

-¿En dónde quieres hacerlo, Sempai?

Ahora el golpeado por los recuerdos era el de cabello largo, quien frescamente logró volver a sentir esa sensación de temblor en su cuerpo excitado, aquella pregunta tan fresca en su memoria, no lo haría retrasar más. Lo tomó de la mano y lo llevó a la habitación del Morinaga. Dentro, los besos se volvieron más desesperados, más necesitados, solo la necesidad de la respiración acortaba dichos labios en aquel acto sensacional.

Varios hilitos de saliva se colaban en ambas bocas, siendo los principales detonadores de la hermosa realidad que estaban a punto de realizar. Sobre la cama, Morinaga juntaba su pelvis contra la de su Senpai quien se estremeció al percibir aquel erecto miembro, mientras los labios del Morinaga vagaban por su cuello, el cual temblaba, siempre que lo hacían, era como si fuera la primera vez para ambos, no podía entender el por qué siempre pasaba eso.

El ojo miel fue sintiendo cómo, lentamente, su camisa iba siendo desabotonada y mientras lo hacía Morinaga, lamía su piel con total pasión y delicados besos. Pronto fue el turno del Pelo largo, quien le detuvo y ayudó a quitarse el saco, para con rapidez y un acelerado deseo quitarle la camiseta  mostrando a evidencia ese masculino cuerpo. Souichi tragó grueso, no podía más, tenía que aceptar la realidad, que desde que conoció a ese tonto sujeto, cayó enamorado…

 

Come just as you are to me
Don't need apologies
Know that you are all worthy
I'll take your bad days with your good
Walk through the storm I would
I do it all because I love you
I love you

Ven justo como eres a mí,
no necesito excusas
sepa que usted es  valioso,
Tomaré tus días malos como los buenos
Caminaría a través de la tormenta
lo hago todo porque te amo
Te amo…

 

Morinaga estaba de rodillas entre las piernas del Tatsumi, quien se había sentado en la cama y se dejaba acariciar sin remilgos. A su vez, Souichi  acariciaba los bordes de los hombros del peli azul negro. Morinaga le observaba curioso y confuso, intentó hablar, pero una mano fue puesta en su boca y escuchó:

-No pienso volver a lo que éramos antes.

-¿Sempai?

-Si lo recuerdas algún día, espero que no me odies.

-Eso no pasará, voy a amarte pase lo que pase, pero tú… ¿Lo harás?

 Su rostro fue confuso, pero ante el acercamiento del cuerpo de Souichi al suyo no pudo más que continuar. Se acariciaban y sentía el sabor de su Sempai, cómo adoraba ese sentimiento, el poder tenerle entre sus brazos, oler su esencia y sentir su deseo, pero en su cabeza la desesperación ganaba terreno:

-“No puedo, no puedo decírselo, no puedo hacerlo cuando él esta así de entregado,”- Se decía una y otra vez…Sabía que estaba cometiendo  una enorme equivocación, debía decírselo tenía que hacerlo, pero no quería perderle.

Con calma deslizó la camisa de los hombros del ojo miel a quien besaba sin poder contenerse, mordía esos labios con entera pasión, causando un estremecimiento pavoroso en el peli largo, que lo hacía temblar más y más. Ahora, llegó la parte que más tensaba su cuerpo y era el hecho de que Morinaga abriese su pantalón, ya no era el hecho de que le desvistiera, era el notar sus dedos cerca de su miembro y notar como éste, se ponía duro cual piedra. Ambos de despojaron de su ropa y se abrazaron en la cama de costado, sintiendo la tibieza de sus cuerpos, el pálpito de sus corazones y las respiraciones fuertes que morían en la nuca de Souichi quien susurraba:

-¿Piensas quedarte así, para siempre?

-Si pudiese, lo haría Sempai.- Confeso él.

 Morinaga comenzó a acariciar su figura con la punta de sus dedos, pasó desde su brazo encogido hacia adelante, hasta caer en sus costillas, luego pasar por ese hueco en la cintura y luego en su cadera, para volver a subir hasta el punto de inicio.

-E-Eso hace cosquillas.-Jadeó Souichi.

-Eres tan lindo…

-Y tú estás raro.

-Sempai…- Susurró envolviéndolo en un abrazo.- Sabe, recordé algunas cosas.

-Olvídalo, déjalo en el pasado…

 

Unconditional, unconditionally
I will love you unconditionally
There is no fear now
Let go and just be free
I will love you unconditionally…

Incondicional, incondicionalmente
Te amaré incondicionalmente
ya no hay miedo
dejen ir y sólo sean libre
Te amaré incondicionalmente…

 

El pelo largo se giró para quedar de frente, nunca se vio hacer eso pero lo necesitaba, era extraño, estaba admirando su rostro, admirando su cuerpo desnudo masculino, sintiendo ese aroma a colonia y él se sintió avergonzado. Moringa le abrazó susurrando.

-No hay por qué avergonzarse…

Morinaga bajo suavemente por el torso de Sempai, sus manos estaban calientes y el deseo traspasó la piel de ambos. Mientras ahogaba a Souichi en un beso realmente húmedo y lascivo, unió los miembros erectos de ambos y comenzó a masturbarlos.

Souichi gimió como un loco, el roce del pene de Morinaga en el suyo era desquiciante, y su mano, su mano le volvía loco:

-Ahg, Mori-naga, mmmm…

-¿Lo siente, siente mi calor Sempai?

-Baka, claro que lo siento es demasiado vergonzoso…mmmmm…

-Sempai, ¿quiere correrse así conmigo?...ahg…- Dijo masajeando con más fuerza y empeño-Hum… se ha vuelto muy grande, la de Sempai también es grande como la mía….mmmm…

-Deja de decir esas cosas, pa-parece que has regresado a ser el mismo.- Dijo severo y sujetándose de sus hombros para apartarlo.- BASTA- Expuso mirándole agitado.

Sempai se alejó y se sentó en la cama. Ese calor en ambos miembros eran intensos, su cuerpo estaba deseoso de más, la indignación momentánea dejó paso a su lascivia. Miró el cuerpo desnudo de Morinaga, era imposible no querer ser poseído por él, los pezones se le iban endureciendo y su pene exigía la atención que había tenido momentos antes. Respiró hondo y fue directo a por su presa, se posó sobre Morinaga, con las piernas a los costados de su cuerpo, y comenzó a besar al otro mientras le susurraba:

-Eres un pervertido, siempre lo fuiste.

-Al menos, eso no quiero que lo olvides Sempai.

-Estás loco.- Susurró entre sus labios.

Las manos de Morinaga  no perdieron la oportunidad y comenzaron rodear y acariciar sus nalgas.

-Souichi… quiero… deseo entrar dentro tuyo.- Presionaba su glande en su recto.

-Ba-Bastardo, no hagas eso… ahg-Sempai cerró los ojos al sentir como apretaba ese lugar y mientras decía.- No estoy listo a, ¡AHH!...

 No pudo hablar más, aquel miembro se introdujo violento, cosa que hizo apretar su cuerpo, mientras Morinaga sentía el calor solo en unos cuantos centímetros de su grueso miembro, pues no había entrado por completo.

-¿E-Estas bien?

-…AG…Duele.

-Gomen, no pude contenerme….ahg

Morinaga  movió su mano hacia el orificio y comenzar a masajearlo, esculcando entre su miembro y el recto de su pelo largo, quien agrando la mirada y tembló diciendo:

-¡QUÉ ESTÁS HACIENDO!

-Debo ayudarte a ensancharlo Sempai…

-ENTONCES SÁCALA.

-No… es tan cálido y palpitante…

-PALPITA POR QUE DUMMMMGGG….

Souichi no pudo terminar de hablar,  sintió como lo giraban en la cama y quedaba boca arriba, jadeaba con fuerzas pero al menos aquel enorme y grueso miembro ya no estaba en su entrada. Ahora, Morinaga comía su cuerpo, besaba, succionaba y mordisqueaba todo, mientras con su mano derecha masturbaba el miembro de Souichi y ayudado con el pre semen de éste, lubricaba sus dedos para someter uno al menos con cuidado, causando en el Tatsumi tensión y deseo. Morinaga sabía en dónde ponerlo.

El sonido de aquellos besos y los jadeos propios provenientes de su garganta lo hicieron por poco correrse, pues tenía que soportarlo, no le daría el gusto a ese sujeto de verlo de nuevo correrse solo por sus manos, temblaba, y sudaba con locura, pronto vendría la mejor parte. Souichi fue tomado por las piernas y notando como una mano de Morinaga bajaba a su miembro, el cual dirigió a su entrada confesó.

-Te amo…

 Entro despacio y con facilidad a aquel lugar que ya estaba dilatado por sus expertas manos, cosa que hizo que Souichi cerrara con fuerza sus ojos.

-Morinaga.- Le llamó, apretando las sábanas con sus manos y sintiendo como aquel miembro acariciaba su próstata en el transcurso y acto, soltó una mano y cubrió su rostro susurrando.- No, No lo hagas despacio.- Pidió.

-¿Por qué no, acaso no te gustaba así?

-I-Idiota.- Susurró, con calma sintiendo como él se quedaba quieto y temblaba diciendo.

-Souichi… Souichi…- Lágrimas bajaron de sus ojos y se acercó a su rostro para besarle y llorar como un niño mientras el pelos largos cuestionaba…

 

So open up your heart and just let it begin
Open up your heart and just let it begin (x2)
Open up your heart
acceptance is the key to be
To be truly free
Will you do the same for me?

Unconditional, unconditionally
I will love you unconditionally
And there is no fear now
Let go and just be free
'Cause I will love you unconditionally (oh yeah)

I will love you
I will love you
I will love you unconditionally

Entonces, abre tu corazón y deja que empiece
Abre tu corazón y deja que empiece (x2)
Abre tu corazón
La aceptación es la clave para ser
realmente libre
¿Harías lo mismo por mí?


Incondicional, incondicionalmente
Te amaré incondicionalmente
ya no hay miedo
déjalo ir y sólo se libre
Porque te amaré incondicionalmente (oh, yeah)

Te amaré
te amaré
Te amaré incondicionalmente.

 

-Siento que por años, te he amado intensamente… ¿Tú lo haces también?

Se elevó un poco y recibiendo sus lágrimas en sus mejías el Tatsumi, susurró

-¿Por qué haces esas preguntas ahora?

-Porque quiero saber si lo que estoy sintiendo en este momento es real, o una mentira.

Souichi observaba a otro lugar y susurraba.

- Ya te lo dije ¿no?… En la iglesia.

-Souichi.- Dijo con lágrimas aún en sus ojos.

 Esa expresión hizo entristecer al Tatsumi quien susurró:

-Claro que te amo idiota.- Dijo para colocar sus manos en su rostro y expresar.- Ahora deja de llorar y… ahh…

-No tienes que pedírmelo…mmmmm

Morinaga comenzó a moverse, sujetando una pierna de su Senpai y entrando más profundamente dentro de él, quien tembló y grito:

-¡AHH, ES-ESPERA ESO!....

Sus labios fueron sellados por los del Morinaga quien envestía con movimientos constantes y profundos, deslizándose libremente en su interior. Souichi solo podía jadear y gemir elevado, hubo un momento en que cambiaron de posición, Souichi quedó a cuatro en la cama, siendo sometido por Morinaga, quien se agachó y sujetó una de las manos del pelo largo quien, en cada envestida jadeaba y gemía más fuerte.

El agarre en aquella mano fue severo y Souichi solo pensaba:

-“No puedo más, este sujeto, ya ha hecho que me vuelva loco, Morinaga… ahg.”

 Sempai elevaba su rostro al sentir el orgasmo venirse, pero no podía, no quería se controló quería llevar a niveles jamás sentidos ese  sexo, no quería que terminara y el pondría su empeño en ello, Sintió la mano despegarse de la suya y agarrar con fuerza una de sus tetillas, las cuales apretó el Morinaga y acarició haciendo gritar a Souichi:

-Ahhg, No hagas e-ajah….

-Souichi…Sou…ahg- Murmuró con esa voz grave y profunda haciendo temblar su cuerpo.

El pelo largo sentía que iba a morir de placer,  tanto así que un fuego intenso se formó en su vientre y en su miembro, le quemaba, le quemaba por completo, quería venirse, pero las caricias que ahora se daban en su espalda lo distrajeron, Morinaga admiraba su cuerpo como queriendo grabarse todo, todo minúsculo detalle de aquel delgado cuerpo pálido. Se agachó y apartando su cabello y besando con calma su nuca y parte de su oreja, causando en el Tatsumi un extenso escalofrió que aumentó sus ganas de querer venirse, pero ante aquel suceso, Morinaga jadeaba dulcemente:

-Puedo sentir como me succionas, ¿Te hice sentir así antes Souichi?...

-¿Qué está pasando, porque me hablas así?...

-Quiero saber si algo en mi cambio, sí te gusta cómo te lo hago ahora…ahg

-No, has… cam-cambiado nada, sigues igual de pervertido.- Dijo costosamente, sintiendo como el ahora sujetaba un costado de su cuerpo para girarlo y hacerlo caer de costado en la cama, sujetar su pierna y posarla en su hombro para penetrarlo más profundo.-¡AHH, AHHH… NO…NO, ESTA DEMASIADO ADENTRO!

-Sempai…

Morinaga no penetrar  y Souichi se volvía más y más loco. Ahora, estaba siendo besado con descaro en la pantorrilla. Tanto placer era inhumano, notaba como su miembro chorreaba y deseaba correrse una y mil veces, comenzaba a ver nublado, no podía más:

-“Esto es molesto, porque tienes que ser tú el que me haga todo esto, ¿Por qué nunca puedo ser yo el que pueda hacerte caer como lo haces conmigo?”- Pensaba mientras su garganta se cargaba de enormes gemidos, apretaba sus labios tratando de controlarse, pero ese sentimiento esa sensación que rodeó su abdomen y esa electricidad que recorría su miembro le hizo correrse, manchando de prisa la cama con su blanca semilla. Sentía las palpitaciones de su miembro al correrse y también sintió como los movimientos de Morinaga se hicieron más rápidos y como su cuerpo se tensaba, sabía que iba a correrse, lo sabía. Miró su cara, deseoso de ver ese instante, y no tardó en llegar. Los ojos de Tetsuhiro se pusieron en blanco y notó, como su interior se llenaba de un calor especial, un calor desbocado que le hizo sentirse pleno. Volver a sentir ese líquido caliente, concentrarse en ese lugar, era una sensación extraña que lo perturbaba pero que ahora ya no le importaba:

Si eres tú…- Susurró con voz apagada y cansada.- No me importa ya…

Morinaga tranquilizó su respiración y observaba, entre sus flequillos azul negros, a Souichi quien, aún temblaba.  Bajó despacio su pierna y con calma se fue apartando de su entrada, para cerciorarse de que aquello salía despacio por entre los pliegues de su piel, Tetsuhiro llevó una mano a su cabeza y recordó:

-“CUANTAS VECES TE HE DICHO QUE NO LO HAGAS DENTRO, CARAJO!”

 El dolor de cabeza le secundó, a lo que Souichi se preocupó, se acercó a él y sujetó una de sus manos cuestionando:

-¿Qué sucede?

-…- el golpe de recuerdos era tan fuerte y lúcido que lo podían tumbar de un momento a otro. Cayó sin chiste sobre el colchón y haciendo que Sempai se asustase:

-¡MORINAGA!

Se acercó corriendo a él, tratando de despertarlo, pero no le fue posible. Se cercioró de que su corazón palpitara y de que estuviera respirando y enseguida lo acomodo en la cama. Se puso en pie, a costa de los temblores en su cuerpo, y fue por su móvil, pero antes de siquiera hacerlo se sorprendió al escuchar:

-Souichi…

 La voz de Morinaga era suave y bastante adolorida, se acercó rápidamente y gritó angustiado:

-Llamé a esa chica como era que se llamaba.- Expuso sin recordar el nombre de Yuriko, Souichi estaba asustado por aquello que ocurrió en el Morinaga.

-No… tranquilo no pasa nada.

Morinaga quitó el celular de las manos y jalando esta misma para acercarlo, Souichi sintió su cuerpo ser estrujado en aquel abrazo tembloroso.

-Perdóname, me corrí dentro de ti…

-E-Eso, no importa.- Susurró con voz suave y grave.- ¿Cómo estás?

-Me duele la cabeza…

-Descansa, iré por algo para el dolor.

-E-Está bien.- Susurro cerrando los ojos, algo era seguro, ese dolor fue demasiado severo…

 

***

 

Mientras Souichi iba por unos medicamentos, alguien afuera, que les había seguido, tomaba fotos. En un carro negro, a su lado, una mujer con maquillaje y rostro cubierto por unos lentes oscuros susurró:

-¿Así que es aquí donde se encuentran?

-¿Señora, Morinaga, No lo entiendo, si tanto quería las fotos porque no ha publicado nada aún?

-Porque primero debo estar segura de algo.- Sonrió maléfica y apartando sus lentes con esas unas pintadas de rojo sangre y su cabello castaño atado en un moño elegante, un abrigo grueso de color blanco era lo único que se podía ver de sus vestimentas, parecía una real mujer de mundo, hermosa y joven, pero podrida y vacía por dentro.

-¿Qué quiere que haga entonces?

-Escribiremos la noticia, en cuanto sepa que sucedió con mis exámenes de laboratorio, te daré la orden para que las publiques.

-Muy bien.- Susurró.

-Y te daré el resto del dinero entonces, asegúrate que la Universidad  M tenga esos periódicos primero. Quiero que sufra, que sean crueles con él, que le destrocen y prefiera estar muerto...- Gruñó, para enseguida ordenarle a su chófer irse rápido del lugar…

 

***

 

Aquel día quedo en el pasado, Souichi aún estaba preocupado por esos dolores de cabeza que padecía Morinaga, mas sin embargo no podía hacer mucho si el no se dejaba consentir o por lo menos aceptaba ir al médico.

Esa mañana el pelo largo a pesar de sus preocupaciones ya estaba alistándose para ir a la universidad, era evidente que el día estaba hermoso, el sol era poderosamente ardiente y la vida parecía ir con tranquilidad. Observaba todo a su alrededor mientras caminaba, todo podría parecerle lindo; tenía todo lo que quería o al menos eso parecía. Morinaga estaba a su lado aunque las circunstancias no eran precisas para hacerlo.

Los días transcurrían despacio, exactamente fueron unos 10 días más, en los que su vida daba vueltas a una velocidad de 60 millas por hora. Se había convertido en el amante de un hombre casado, pero ese hombre antes ya había sido suyo, esa tonta se había metido entre ambos y él estaría listo para enfrentarlo. Mas sin embargo, lo que pasaría en esos días sería la mayor prueba. Ya que lo peor estaba por venir, algo que ninguno de los dos espero, un golpe enorme que solo el futuro sabría si el Tatsumi podría o no superarlo.

Llegaba a la universidad, y todos prácticamente, todos parecían mirarlo de pies a cabeza, en los pasillos de la universidad solo podía escuchar que hablaban bajito y decían:

-¿Quién iba a saberlo?

-Que ridículo, todo este tiempo se presentó como un hombre intachable y serio y miren nada más.

-Que asqueroso.

Souichi caminaba mirando a todos con ojos severos y serios, hasta que por fin se cansó y se dirigió a todos gritando:

-¿Podrían decirme por qué mierdas me ven tanto?

-Vaya, al fin se da vuelta y nos habla.- Un círculo enorme le rodeó.

-¡QUIÉN IBA A PENSARLO, EL TIRANO SOUICHI RESULTÓ SER GAY Y ES AMANTE DE UN HOMBRE!

Souichi agrando la mirada, se acercó al que le había dicho eso y lo tomó por el cuello de la camisa.

-¡QUÉ ACABAS DE DECIR ESTÚPIDO!

-Lo que escuchaste, idiota, ¿necesitas audífonos o algo?

-¡MEJOR VETE DE AQUÍ, LÁRGATE DE LA UNIVERSIDAD! Y PENSAR QUE POR TU CULPA CORRIERON AL PROFESOR HACE UNOS AÑOS ATRÁS, Y FUISTE TÚ EL QUE LO SEDUJO.

-¡LARGO, FUERAAAAAAA!- Comenzaron a gritar bastante furiosos, parecían fariseos.

-¿Qué es lo que les pasa?, son alumnos respeten a un profesor-Murmuraba Yamaguchi, notando el horrendo alboroto.

-¿Profesor? Este sujeto no debería de estar en la universidad, es un enfermo asqueroso.

-¡SÍ, QUE SE VAYA!

-De que están hablando.- Gruñó Yamaguchi, notando un periódico en el piso y susurrando.

-¿Pero qué?- Souichi observó su rostro en la primera plana del diario, estaba al centro de una pareja muy famosa en ese momento, Souichi no pudo creer los que sus ojos leían.

“Empresario millonario seducido por un homosexual, que quiere romper un honorable matrimonio.”

Pasaba las hojas y estaban las fotos suyas y las del Morinaga besándose, comenzó a temblar, no sabía si de furia o de comenzar a sentirse enfermo por aquello.

-¿Así que eso era, por eso Morinaga se fue de la escuela? Eso del accidente fue una mentira enorme, quería escapar de un sujeto como tú- Gritó una de las chicas.

-¡Qué asqueroso!

 Souichi arrojó el papel al piso y se abrió camino empujándolos a todos. Caminaba de regreso a casa, pero comenzó a sentir que le seguían, de inmediato se giró y notó a un grupo extraño de autos con marcas televisivas.

-Maldición.- Dijo iniciando a correr y llegando a casa, en donde, ya la bola de periodistas estaba reunida.

-POR UNA MIERDA, LARGÜENSE DE MI CASA.- Gritaba con fuerza empujándolos y sacando del centro a Matsuda, quien había sido sujetada para dar declaraciones, Souichi y la mayor entraron con prisa y ésta gritó:

-¿Souichi que pasa?

-No, se, no sé qué está pasando.

-¿Por qué dice esto en el periódico?- Dijo mostrándole el elemento de nuevo.

-Nii-san.- Decía Kanako mirando por la ventana.

La pequeña parecía tener miedo, Souichi sujetó con sus manos ambos costados de su cabeza y gruñó:

-¡Ese imbécil!- Gritó, poniéndose de pie y tomando el teléfono para marcar apresurado.

 

***

 

En casa de los Morinaga, aquella mujer reía con ganas admirando los noticieros. Había marcado una victoria en su lucha tremenda por Morinaga, había creado el fuego en la vida de cierto pelo largo. Pronto escuchó el celular de su esposo sonar en la recamara de éste,  él se estaba bañando por lo que ella se aventuró a llegar a ver de quien se trataba. La cara se le iluminó, parecía una broma del destino, en la pantalla del teléfono decía: Sempai. Con una gran sonrisa en su estúpida cara respondió la llamada:

-¿Diga?

-…

No dijo nada, a punto estaba de cortar cuando escuchó de Meilin:

-Oye, oye, no vayas a  colgarme, mal educado- Susurró con voz un poco divertida-¿Te gustaron las fotos? Ja, ja, ja, ja, ja, ja.

-Fuiste tú.

-No, para nada, un periodista, las tomó en la fiesta esa, ¿La recuerdas?

-Maldita piruja.

-Oye, no seas tan grosero…

-Estúpida.

-Tranquilo, cielito debo decirte que veas las noticias de las seis, estarán interesantes para ti, jajajajaja.

-TKS.- Cortó la llamada.

-Ups, se enojó ¿Por qué sería? Jajajajajjajajajajaja.

 Se miró coqueta en el espejo de la pared y sonrió con calma, ¡qué buen gusto tenía la victoria!. Se tiró un beso a sí misma y corrió a  alistarse y salir pomposa y arreglada,

Mientras Morinaga se acomodaba en su pieza, para buscar alegremente su ropa cuando de pronto aparece, Yuriko corriendo y gritando:

-¡Morinaga-san!

El mencionado observó con impacto a su fiel amiga, que ahora ya no le trataba como sama, pronto una llamada llegó a su móvil y dijo.

-Espera Yuriko-san- Tomó el aparato y cuestionó-¿Diga?

-Tetsuhiro…

-¿Nii-san, que ocurre?

-Prende la tele.

-¿La tele, etto para qué? voy de salida debo ir a ver a Souichi y…

-Enciende la maldita tele, en el canal de noticias locales.

Morinaga se dirigió al mando rápidamente, y pudo admirar las escenas en la fiesta de gala, de hacía quince días.

-¡Escándalo invade a la familia multimillonaria proveniente de Fukuoka, tal parece que hay un lio amoroso entre el esposo de la señora Morinaga y un universitario, su nombre es Tatsumi Souichi!

Morinaga sintió un golpe en el estómago, se dejó caer en la cama y susurró:

-No…

-¿Tetsuhiro, cómo pasó esto?

-No lo sé…- Susurró- No, no puedo hablarte tengo que irme.

-Tetsuhiro espera….pi, pi, pi, pi…

Yuriko se apresuró a bajar sin recibir la orden que ya sabía a donde irían. Tetsuhiro apenas y pudo ponerse algo serio, solo se fue con un pantalón y la camisa blanca de fuera. Era increíble lo que estaba pasando, era demasiado, se dijo en su cabeza la cual trabajaba a milésimas de segundo, ¿Quién habría dado esas fotografías y para colmo, cómo es que supieron lo suyo y Souichi?

-Esta no fue más que Meilin.- Gruñó- Yuriko date prisa.

-¡Hai¡

 

***

 

En el bar Gay Adam Site…

 

Hiroto limpiaba las copas mientras observaba las noticias y gritaba:

-¡ANGELITO!- Dejó caer una copa rápidamente y gritó a un joven que trabajaba a su lado-¡SUBE EL VOLUMEN, DATE PRISA.

Incrédulo totalmente incrédulo, Hiroto ni siquiera sabía que Morinaga se había casado y mucho menos, que tenía una relación hetero.

-Eso es una mentira.- Gritó severo, para ir directo a su casillero y buscar con prisa entre ese montón de papeles el número telefónico de ese ángel, con prisa lo tecleó, esperó unos tonos y por fin logró contactarse con él

-¿Ángel-kun, eres tú?

-¿Quién habla?

-¿! Cómo que quien habla ¡? soy yo, Hiroto, Hiroto-kun.

-¿Hi-Hiroto, kun?- Se preguntó el escuchando un gruñido y susurró-Yo no te conozco no sé quién eres.

-PERO DE QUE RAYOS VAS, ANGELITO MIO, ¿ACASO YA SE TE OLVIDO QUE VENIAS SEGUIDO A CONTARME DE TI Y TU AMADISIMO TIRANO?

 Un silencio rodeó la línea y escuchó un quejido.

-Hi-Hiroto.

-¿Te sucede algo?- Escuchó como se pasaba el aparato a otra persona y se escuchaba un pequeño grito.

-¡TETSUHIRO-SAMA SE ENCUENTRA BIEN?

-¿Hola?

-Hola, ¿quién es?

-Soy Hiroto, un viejo amigo de Tetsuhiro, ¿Podrías explicarme que está pasando?

-El señor Tetsuhiro tuvo un accidente hace unos meses atrás, ha bloqueado su memoria y ahora tiene un ataque de dolor de cabeza, ¿Acaso usted, le dijo algo?

-Solo le dije que éramos amigos y que él me confiaba siempre sus experiencias con su Sempai.

-Entonces usted podría ayudarnos.

-¿Ayudar a qué?

-Escuche, mi amo debe recordar todo, incluso usted puede ser una gran ayuda, ¿Cuál es su dirección?

-Se la envió por mensaje.

-No… La grabaré.- Hiroto le facilité la dirección y enseguida susurré la chica:

-¿Es un bar?

-Hai.

-Podría por favor cerrarlo solo para Tetsuhiro-sama, necesitaba privacidad.

-Ok, ¿cuándo llegan?

-En la tarde, a las 5.

-Perfecto aquí les espero.- Dijo cortando la llamada y susurrando.- Dios mío que tantas cosas han sucedido y yo no estoy enterado.

Claramente alterado, apresuró a sus empleados para que dejaran todo listo a cierta hora, mientras eso sucedía en el bar…

 

***

El auto llegaba a la cercanía de la casa de Matsuda, sorprendido observaba la muralla de periodistas que invadía la propiedad, se habían hasta subido a tomar fotos a la segunda planta tras la ventana. Tetsuhiro estaba realmente enfurecido, pidió a Yuriko el distraerles, pero ella no accedió, prefería sacar de ahí a él pelos largos por sus propios medios a que él se enfrentara con esa cruel bola de amarillistas. Morinaga asintió a costa de un tremendo dolor de cabeza en su lado izquierdo, estaba estresado y totalmente cansado de todo eso. Pronto vio irse a la chica de coleta alta, mientras él llamaba a Souichi notando una llamada de unos 10 segundos.

-¿A qué hora yo?- Enseguida se dio un golpe severo en la frente y gritó-Esa loca.- Marcó el número el cual parecía desconectado, entonces decidió esperar ahí, sentado, sufriendo de un enorme dolor en su cabeza, le taladraba, se sentía punzante y palpitante en su cráneo-Uhg, du-duele- Susurró poniéndose pálido y sudando frio, comenzó a temblar.

 

***

 

Dentro de la casa, Yuriko había logrado pasar la barrera de locos aplicando sus famosas llaves para con prisa gritar al protón del jardín:

-¡Souichi-san soy Yuriko!

En tanto, adentro entre las ventanas, Kanako susurraba:

-¿Quién es ella?

-No es nadie cierra la cortina.-Susurró él con voz sumamente apagada.

-Souichi, debes salir y aclarar este error.-Expresaba Matsuda con un nerviosismo en toda su expresión.

-No…

-Pero Nii-san, tienes que decirles la verdad, decirles que tú ya antes estabas saliendo con él y que esa loca te lo quito es…

-No digas esas estupideces KANAKO.- gritó severo a la chica.

Souichi se dio cuenta tarde, esa había sido la primera vez que le levantaba la voz a su hermana, tanto así que la joven chica se fue llorando a su cuarto:

- ¡Kanako, espera, gomen!

Las palabras no hicieron efecto, la joven corría escaleras arriba y cuando iba a seguirla, Matsuda susurró:

-Souichi-san, escúchame, si no arreglas esto será peor para ti y para él.

-Es que…

-¿Dime una cosa, esto es verdad?

-Yo… escucha todo no es lo que parece yo…- No podía aceptar la realidad.- Yo no soy gay- Susurró aún lleno de orgullo.

-Pues explícales, aunque por las fotos no creo que te crean.

-Matsuda-san, perdóname, soy una ofensa, nunca debí involucrarme con ese idiota.

-Souichi, no estás reaccionando como debes.

-NO QUIERO HACERLO.- Gritó tomando su chaqueta de color café y salir de ahí, corriendo, Kanako bajo las gradas y susurró:

-Nii-san…

-Kanako-chan, por favor ve arriba.

-No…- Susurró- Nii-san necesita de mi ayuda.

-Pero ¿qué puede hacer una niña?

Lo mismo se preguntaba ella, qué podía hacer ella en cuestiones de adultos.

Afuera Yuriko se juntó a Souichi, quien era acechado por la prensa, gritándole:

-¡ES CIERTO QUE TIENE UN AMORCILLO CON TETSUHIRO MORINAGA, DE LA HONORABLE FAMILIA MORINAGA!

-¡CUÁNDO SE CONOCIERON!

-¡DESDE CUÁNDO ES GAY, POR FAVOR, DÍGANOS CÓMO FUE!

-Ya lárguense.- Gritaba irritado el peli largo.- ESE IMBÉCIL Y YO NO TENEMOS NADA, ENTIÉNDANLO.

-¡PERO LAS FOTOS NO MIENTEN, SEÑOR, NO ES NINGÚN MONTAJE, ES USTED, SEA HONESTO Y ADMÍTALO.

-¡Déjenme en paz!- Gritó con fuerza y saliendo de ahí siendo fotografiado, para ser cegado por las cámaras causando que éste se enojara y tomara una de esas para lanzarla al piso con violencia y gruñendo.-¡APARTENSE DE MI CAMINO!

-¡Es un animal!

Yuriko le seguía con paso acelerado y susurraba:

-¡Tatsumi-san!

-VETE, LÁRGATE, NO QUIERO ESCUCHAR NADA.

-Pero Tatsumi-san.- Dijo tomando con fuerza su brazo y sentir el arrebatador movimiento que hizo Souichi al soltarse.

-NO ME TOQUES O JURO POR LO MÁS SAGRADO QUE ME OLVIDARÉ QUE ERES MUJER.

-Por dios usted no podrá contra mí,.- Dijo la chica seria.- Ahora por favor, venga conmigo.- Notó como el auto llegaba a lado de ambos Yuriko observó impactada a Morinaga quien aparcó el vehículo y salió de éste diciendo.

-¡Souichi!

-A LA MIERDA.- Gritó golpeándole con fuerza.- VISTE LO QUE HAS HECHO ESTÚPIDO.

-Souichi.- Susurró con la cabeza agachada y con el rostro rojo por el golpe.

-¡TETSUHIRO-SAMA!

 El mencionado elevó una mano para hacer detener el impulso de la peli negra de protegerlo.

-Desquítate todo lo que quieras conmigo, pero no aquí, vamos a otro lugar.

-Jamás, nunca.

-Souichi por favor, ven conmigo…

 Aceptó solamente por esa mirada llena de tristeza y zozobra que el Morinaga sabe poner, se sometió rápidamente antes de ser seguidos por la enorme bola de reporteros.

Adentro el silencio se hizo severo, Morinaga no podía decir mucho pues aquel dolor iba cada vez más en aumento. Yuriko admiraba los ojos llenos de furia del Tatsumi, la tarde caía y finalmente llagaron al bar en donde él entró con prisa y comenzó a caminar en círculos como león enjaulado. Hiroto enseguida corrió hacia su amigo y gritó completamente animado:

-¡ANGEL-KUN, POR FIN, DESPUÉS DE TANTO TIEMPO.

El mencionado sintió un suave y tenue golpe en su pecho, ese chico le hacía recordar muchas cosas a lo que él dijo:

- Tú eres, quien me dio esa droga.

-¿Eh?- Cuestionó Souichi furioso y acercándose.

-¿Así que este es el culpable de que todo esto haya comenzado?

-Vamos a calmarnos todos.- Gritó un hombre de cabellos castaños y gafas.

Tanto Tetsuhiro como Souichi admiraron a su hermano y a Masaki quien enseguida susurró:

-Estamos aquí no para pelear, estamos aquí para solucionar lo que está pasando.

 El silencio rodeó a los dos involucrados, Souichi se dejó caer en la barra con pesadez y susurró:

-Esto se fue a la mierda, tenía que ser tan idiota y dejarme llevar por este estúpido.

Souichi se culpaba a sí mismo, mientras el Morinaga miraba al piso y susurraba.

-Si en primer lugar no me hubieses buscado y me hubieses dejado con mis nuevos y falsos recuerdos, esto no te hubiera pasado.

 Souichi se estremeció y enseguida se puso en pie.

-¿Qué estás diciendo?

-¿Por qué lo hiciste, por que fuiste tras de mí sí sabías que tarde o temprano esto iba a pasar?

-Yo…

-A mí no se me olvida la declaración en la iglesia, se sentía tan convincente, pero son acciones como estas que me hacen pensar lo contrario.

Souichi miraba al piso.

-En realidad te doy asco, te doy lastima, ¿No es así?

 Kunihiro y Masaki no podían meterse en esa discusión, Souichi respiró hondo y llevó su mano a su rostro para presionar ese pequeño espacio entre su frente y sus gafas, le daba todo vueltas, ¿Por qué hasta ahora reaccionaba de sus actos?

El silencio volvió a sentirse, enseguida escuchaban al fondo el ruido de la televisión, que estaba colgada a la pared en el bar. Pronto resonó la voz de una mujer, los cinco hombres observaron la televisión, Hiroto subió el volumen y enseguida ellos escucharon.

-“Es una pena que estoy pasando… actualmente me encuentro destrozada, jamás pensé que ese hombre vendría a meterse en mi matrimonio, vengo saliendo del doctor y realmente estoy feliz porque su cometido no funciono.“

-¿Cometido, de que habla?- Cuestionó Souichi.

-“¿Quiere decir que está usted esperando un bebé?”

-Si, efectivamente y aquí está la ecografía.- Susurró mostrando la imagen a la prensa.- Aseguro que mi esposo fue seducido por ese sujeto Tatsumi Souichi, quien quiere exterminar nuestro matrimonio...

-¿Qué le diría si la estuviera viendo?

-Bueno.- Decía mirando a  la cámara con sus ojos rasgados y lágrimas falsas.- Que debería de revisar el celular de mi esposo para que pueda ver lo feliz que somos y que fuimos y aunque le duela o trate de separarnos no podrá hacerlo porque en mi vientre está creciendo el fruto de nuestro amor eterno.-

-Ya lo escucharon, el escandalo sigue dando de qué hablar en sociales, incluso hasta en las enromes familias pasa, regreso al estudio…-

Morinaga estaba asombrado, pero también agachó su rostro y escucho de parte de Kunihiro quien se acercó de prisa a él:

 -¿Qué está diciendo ella?

-¿Qué, eso es verdad?

-¿Ángel-kun?

-Si no dice nada es porque es cierto.- Susurró Souichi  poniéndose en pie y sonriendo bastante indignado.- Tal parece que ella lo planificó muy bien.- Susurró acercándose.- Hoy ella me dijo que viera las noticias y nunca pensé que diría eso.- Giró de un golpe al Morinaga a quien gritó.-¡DAME TU TELEFONO!

-No…- Dijo serio.

-Pues aunque tenga que arrancártelo de la piel lo haré.

-Souichi… yo…- Sus lágrimas se agolparon en sus ojos y susurró- Yo no recuerdo nada.

-¿Se te está haciendo moda, no acordarte de nada?- Susurró ahora registrándolo para sacarlo de su bolsa en el pantalón, y comenzar a incursionar en él, notando la carpeta muy bien guardada con un corazón, pasaba las fotos de ella desnuda y el con él, lo hacía rápidamente, se estaba enfermando, llevó a su boca una mano y gritó con fuerza.

-¡NO ME DIGAS QUE NO TE ACUERDAS SE VE QUE LO ESTABAS DISFRUTANDO!

 Una a una llegaban las oleadas de gritos y rechazos, todo se había roto en mil pedazos, Morinaga se dejó caer al piso y llevo sus manos a su cabeza.

-Te juro que no lo recuerdo, no sé cómo hizo ella para quedar embarazada, te lo juro SOUICHI.-Se agachó y susurró.

-Ya deja de mentirme.- Dijo totalmente severo.- Las pruebas están aquí, y ahora que sigue ¿Vas a seguir evadiendo tus responsabilidades?

-Bueno creo que ya es suficiente.- Gruño Kunihiro llegando a su hermano para ponerlo en pie.-Ya no te ensañes en él.

-¿Qué no me ensañe dices?- Cuestionó con voz grave y bastante molesta.- ¿Y cómo carajos le hago yo para salir de esta pesadilla?-

-Ya es suficiente.- Gritó Masaki.- Tú, escúchame.- Dijo jalando al pelo largo.- Tu sabias que esto iba a pasar, ¿Si no por que fuiste a la boda en primer lugar?

-Es lo que siempre me he preguntado, desde hace mucho tiempo me lo sigo preguntando, ¿Por qué, POR QUE TENIA QUE QUEDARME ESA NOCHE EN EL APARTAMENTO DE ESTE IMBÉCIL?- Gritó violento, ahora sintiendo como la garganta se le escocia por las poderosas ganas de llorar.-Día tras día año tras año, tuve que soportar tus estupideces, lo entregue todo por ti y con esto me pagas.

-Souichi no sabes lo que dices, Tetsuhiro debe tener una razón del por qué no recuerda nada.

-Eso es mentira, él no pudo perder la memoria acostándose con ella.- Gruñó-Esto me está dando asco, me largo.- Susurró dando la vuelta y escuchando de parte de Kunihiro.

-¿Realimente te quieres ir sin antes escuchar lo que tiene que decirte él.

-No hay nada que pueda hacerme cambiar de parecer.- Dijo con un mugido que congeló a todos ahí… Souichi tomó su chaqueta y se fue deprisa del lugar, Kunihiro intentó seguirle con Masaki pero su hermano susurró.

-No… ustedes no, soy yo quien tiene que seguirle.- Dijo poniéndose en pie y notando como apenas y caminaba.

-¡ESTAS MAL, NO TE VES NADA BIEN!

-Suéltame.- Gritó molesto y corriendo con prisa, para perderse rápidamente de la vista de sus amigos.

-¡Dios mío!

-Esto es un desastre y tú, Yuriko, no sabes nada.

-No… Yo no vi nada de eso, a lo mejor ella, lo hizo cuando dormían.

 

***

 

El frio azotaba su cuerpo con demencia, ahora si todo estaba tirado a la calle, no había vuelta atrás, no había retorno de ese oscuro camino, todo se había volteado y lo peor, le había gritado de la peor manera, comenzó a sentirse desesperado, tanto así que algo realmente loco se formó en su cabeza. Llegó a un enorme edificio y en este rebuscó la entrada a la azotea, pues en sus pensamientos solo había algo y eso era.

-“Si no puede ser mío para que seguir viviendo, si no puedo ser la persona que el tanto desea por que seguir luchando… ¿por qué ha pasado todo esto? ¿Por qué le dije todo eso?”

 Al abrirse la puerta percibía el viento chocar con su cara, era tan frio que hería su cara, se quitó las gafas y las dejó caer en el piso, caminaba con calma hasta la orilla de aquel enorme edificio de 20 pisos.

-“¿Cómo llegue a ser tan terco, como pude llegar a ser alguien así, alguien que no puede aceptar lo que siente por alguien que vale la pena? Y lastimarle una y otra vez con mis palabras violentas.”

 

Don’t Jump ~ Tokio Hotel.

On top of the roof
The air is so cold and so calm
I say your name in silence
You don't want to hear it right now…

Sobre el techo
El aire está tranquilo y frío.
Digo tu nombre en silencio,
Tú no quieres oírlo ahora.

 

Con temblores se acercaba a lo orilla, su melena se azotaba con fuerza y deslizaba el hilo rojo que ataba esos cabellos.

-“Ella ganó… no hay nada más aquí… ahora ellos van a ser felices los tres… Morinaga…”-

Observaba con entero interés hacia el enorme paisaje a lo lejos, jamás pensó que algo lo tumbara de esa manera, pero… ¿Ya era suficiente verdad? Quizás su tosco carácter hacía creer que él nunca decidiría hacer eso, pero por dentro, aunque el fuera un frio calculador y tiránico sujeto, poseía un corazón inmenso  que solo necesitaba ser feliz y amado. Apretaba los puños mientras daba el primer paso. Al subir al muro de la orilla, su chaqueta se movió violentamente y sus ojos  se apretaron por la fuerte caricia del viento impetuoso que quizás era el único que no deseaba que lo hiciera y que lo empujaba hacia la seguridad de la azotea, pero él ya estaba decidido…

 

***

 

Morinaga caminaba o más bien corría por la calle, respiraba agitado y sentía un dolor extremo en su cabeza algo le dictaba que estaba a punto de hacer algo verdaderamente malo, pues con enorme dolor,  él conocía que si algo podía derrotar a Souichi es que su familia su integridad sea afectada o la de otra persona y ahora el hecho del embarazo de Meilin dictaba el fin de ellos. Giró rápidamente en una esquina chocando con una pequeña que también corría perdida en las calles, la reconoció de inmediato y cuestionó:

-¿Kanako?

-Morinaga-san.-Susurró angustiada  llorando.

-¿Qué te pasa?

-Tengo un mal presentimiento uno como cuando mi madre murió.

-¿De qué, estás hablando, la mamá de Sempai está muerta?

-Si…- Dijo ahora soltándose de su agarre para, admirar como cerca de ahí la gente comenzaba a correr en dirección del edificio de 20 pisos, increíblemente habían podido ubicarlo, la Tatsumi corrió y tras de ella el culpable de los padecimientos de Souichi.

Ya la gente se estaba reuniendo, admirando lo que el arriba haría, impotentes, completamente impotentes.

 

The eyes of the city
Are counting the tears falling down
Each one a promise
Of everything you never found…

Los ojos de la ciudad
Cuentan las lágrimas que caen.
Cada una
Es una promesa incumplida.

 

Lagrimas caían, ellos creían que esas gotas demostraban una tormenta próxima a suscitarse, pero lo que no sabían es que él, derramaba sus lágrimas, admirando el piso que sería su último lugar de descanso. No podía más, estaba harto de lo que pasaba, se había convertido en algo que no era él, el amor le hizo perder el camino y su integridad, su corazón estaba hecho pedazos y ya no había nada que hacer, todo estaba dicho, ya no había razón de vivir.

Pues la situación en la universidad y a todo lugar que vaya le seguiría el fantasma del… que fue, el amor de su vida.

En las gradas del edificio, Kanako con Morinaga corrían con prisa, debían apurarse o quizás él se lanzaría, la castaña lloraba con fuerza y gritaba:

-¡NO LO HAGAS!

-No lo hará.- Dijo el ojo verde para apurar el paso y llegar de prisa a la última puerta de emergencias, al instante en que lo hizo gritó:

 

I scream in to the night for you
Don't make it true
Don't jump.

The lights will not guide you through
They're deceiving you
Don't jump.

Grito en la oscura noche por ti
No lo hagas realidad,
No saltes.

Las luces no te guiarán,
Ellas te engañan.
No saltes.

-¡Sempai! ¡SEMPAI!

Él estuvo a punto de hacer realidad su cometido, pero al escuchar su voz se quedó tieso, tragó grueso y se avergonzó primero, pero luego de cerrar con fuerza sus ojos y escuchar sus pasos acercándose gritó aún con lágrimas en sus mejías:

-¡NO TE ACERQUES!

-Sempai, por favor, no lo haga….

-¿Dame una razón por la que no deba hacerlo?

-Sempai, escúcheme, no necesita hacerlo, este no es usted, usted es más valiente, por favor…

 

Don't let memories go
of me and you
The world is down there
Out of view.
Please don't jump

No te olvides
de ti y de mí,
El mundo de ahí abajo
Ya no importa.
Por favor, no saltes.

 

-¡Cierra la boca!- Gritó en llantos y aún con los ojos cerrados-¡¿Tu que sabes de mí?!- Cuestionó con un nudo tremendo en su garganta.- No sabes nada, no me conoces, nunca acabaste de hacerlo, siempre una y otra vez iba siendo alguien que nunca fui contigo.

-Sempai, se quién eres, sé que no eres así de cobarde, por favor…

-NO, ME JODAS, YA BASTA QUIERES…- Dijo con enormes llantos.- No quiero seguir más, ya no puedo, no puedo luchar contra esa gente ni contra el hecho de que tendrás una familia, esto es suficiente déjame ir.- Dijo, ahora sí, disponiéndose a caer.

-SOUICHI, TE AMO, LO VENGO HACIENDO DESDE HACE AÑOS, DESDE ESA VEZ EN QUE TE ME CONFESÉ, SÉ QUE FUISTE MUY MALO CONMIGO QUE NUNCA ME DIJISTE QUE ME AMABAS, POR MIEDO A QUE TODOS DIJERAN QUE ERAS UN HOMO.- Lloraba con la garganta apretada y ese dolor que le partía la cabeza.- ¡PERO AL CARAJO TODOS!

Souichi temblaba, no quería abrir los ojos, aún escuchaba:

-OLVIDATE DE TODOS, ESTA HISTORIA ES SOLO TUYA Y MIA, NADIE MÁS.

-¿Se te olvida que serás padre, acaso se te olvida que te acostaste con ella?

-Sempai, yo no recuerdo nada, quería decírtelo desde hace 15 días, yo desperté y ella estaba a mi lado.

 

You open your eyes
But you can't remember what for
The snow falls quietly
You just can't feel it no more.

Tú abres tus ojos
Pero no puedes recordar porque
La nieve cae en silencio
Pero no la puedes sentir.

 

Muy despacio entreabrió sus ojos ¿Acaso eso era suficiente para detener su decisión? No.

-Mientes, todo este tiempo mentiste… ya es suficiente.- Dijo dándose la vuelta despacio y siendo cubierto por su cabello y azotado por el viento, demostró una pequeña expresión llena de alivio y susurró- Ya no queda nada, entre tú y yo… No pude, hacer que seas solo mío ella ganó- Dijo.

-¡SEMPAI!

-¡NII-SA!- Un grito más fuerte que el de Morinaga se extendió, en el lugar haciendo eco, Souichi se detuvo al instante.

-¡Kanako!

-Baja de ahí, no lo hagas.- Susurró tirándose al piso y llorando con ganas.- ¿Por qué estás haciendo esto? ¿Piensas dejarme sola?

-Kanako…- Miraba con pena el piso a su frente y susurraba.- Yo, ya no puedo ser tu Nii-san.

-¿PERO POR QUÉ?

-Por qué no valgo la pena, ya no soy la persona que admirabas, soy un chiste de adulto.

-NII-SAN.

 

Somewhere up there
You lost yourself in your pain
You dream of the end
To start all over again.

I scream in to the night for you
Don't make it true
Don't jump.

The lights will not guide you through
They're deceiving you
Don't jump.

Don't let memories go
Of me and you
The world is down there
Out of view.
Please don't jump…

En algún momento allá arriba
Te perdiste en tu propio dolor.
Sueñas con un final
Que te haga comenzar de nuevo.

Grito en la oscura noche por ti
No lo hagas realidad,
No saltes.

Las luces no te guiarán,
Ellas te engañan.
No saltes.

No te olvides
de ti y de mí,
El mundo de ahí abajo
Ya no importa.
Por favor, no saltes.

 

Se giró despacio de nuevo y susurró:

- Ya no soy quien debería cuidar de ti si no puedo ni siquiera conmigo mismo.

Elevaba sus ojos para observar las luces hermosas de la ciudad, tan atractivas para hacerlo, el dolor se había apoderado todo su corazón, no había nada más que hacer, deseaba terminar con todo. Morinaga anticipó lo que haría y antes de poder si quiera hacer un movimiento ya estaba cerca de él, mientras Kanako gritaba su nombre, Souichi solo había dado un paso…

Abajo las cosas estaban horribles, los gritos de la gente anticiparon que aquel había saltado y los policías ya reunidos cerraban los ojos en señal de no querer ver lo que ocurriría en el pavimento.

El suspenso agotaba los corazones haciéndolos palpitar acelerados, ya esperaban la mancha del aquel cuerpo en el piso, pero nada ocurrió, en más los gritos de asombro se hicieron audibles. Por el lugar caminaban Masaki y Kunihiro los cuales fueron intrigados por toda la gente reunida entonces observaron hacia arriba enseguida el rubio gritó:

-¡Kunihiro! Mira.- Señaló hacia arriba sintiendo como el corazón le palpitaba con fuerza, con prisa se metieron al edificio y comenzaron la carrera contra el tiempo.

 

I don't know how long
I can hold you so strong
I don't know how long.

Just take my hand
Give it a chance
Don't jump.

I scream into the night for you
Don't make it true
Don't jump…

No sé por cuánto tiempo
Yo Podré detenerte,
No sé por cuánto tiempo.

Solo toma mi mano
Dame una oportunidad,
No saltes.

Grito en la oscura noche por ti
No lo hagas realidad,
No saltes.

 

Pendían de la orilla, él apenas y podía sostenerlo de su mano, la cual se resbalaba despacio por el sudor y la adrenalina. Souichi, quien había cerrado fuertemente los ojos, los abrió de prisa y observó hacia arriba en donde Morinaga lo sostenía, él costosamente se aferraba al muro susurrando:

-¡Sempai, ahg, no sé por cuanto tiempo lo voy a poder sostener por favor, deme su otra mano!

-Suéltame.

-No, ¡No lo hare!- Gritó ahora soltando sus lágrimas y dejándolas caer sobre el rostro impactado de Souichi quien había agrandado sus ojos y los cuales le observaban completamente asustado e impotente, su cuerpo se movía con el viento sin poder encontrar algo con que sostenerse.-Sempai, por favor no se rinda… deme su otra mano, aún no está perdida la batalla, usted es fuerte.

-SUÉLTAME.- Dijo jalando su mano.- Déjame hacerlo, quiero morir…

-No, por favor, deme otra oportunidad, ¡danos otra oportunidad, SOUICHI!- Expuso con fuerza y voz cortada.- Onegai, Onegai, no lo hagas, por favor, no podría seguir con mi vida si sé que fui el culpable de tu muerte.

Agachó la mirada, en su pecho su corazón estaba a punto de salirse, comenzó a temblar, observando hacia abajo, trago grueso y pensó:

-“¿Qué demonios estoy haciendo?”

 

The lights will not guide you through
They're deceiving you
Don't jump.

Don't let memories go
Of me and you
The world is down there
Out of view.

Please don't jump
Don't jump.
And if all that can't
hold you back
I'll jump for you.

Las luces no te guiarán,
Ellas te engañan,
No saltes.

No te olvides
de ti y de mí,
El mundo de ahí abajo
Ya no importa.

Por favor, no saltes.
No saltes.
Y si todo esto no puede detenerte,
Yo salto por ti.

 

Su mano se deslizaba y de un momento a otro él caería, pero entonces lo que escuchó fue tremendo, tanto así, que le hizo reflexionar:

-Lamento haberte hecho tanto daño, todo este tiempo yo, no debí haber ido a Hamamatsu, si hay un culpable soy yo…- Lloraba severo, sintiendo como su mano ya no podía sostenerlo.-SOUICHI POR FAVOR DAME TU OTRA MANO.

-Morinaga…- Susurró.

-El único que debe morir en este momento soy yo, tu eres el único que ha salido lastimado en toda esta relación, perdóname.

-¡Morinaga…!- Volvió a llamarle con la voz rota.- Lo siento.- Se soltó su mano.

¡SEMPAI!- Pero con fuerza, su otra mano se aferró a su brazo y con prisa él lo sujeto fuertemente, mientras el peso de ambos los estaba enviando al vacío.

-Morinaga,  perdóname…

-No hable Sempai, agárrese bien.

-No debí ser tan débil.

-Hablaremos después.- Dijo jalándolo, pero era imposible, sin ayuda de alguien.

-“No puedo, no podré, yo… Sempai.”

Morinaga apretaba los ojos y mostraba un rostro rojo por la fuerza que aplicaba en su intento,  Souichi entendió aquello y susurró:

-No podrás…

-CLARO QUE PUEDO.

-Solo déjalo y ya… fue mi error no el tuyo.

-NO DIGA ESO.- Gritó con todas sus fuerzas y haciendo crujir toda su espalda tiró de él…, ambos cayeron al suelo de la azotea. Souichi aterrizó sobre el ojo verde quien respiraba agitado y trabajosamente, mientras él le observaba con entero asombro, ¿DE DÓNDE HABÍA SACADO TODA ESA FUERZA? Pensó, cuando de pronto su hermana se tiró sobre el golpeándolo y gritándole.

-¡ERES UN TONTO, COMO ME HACES ESTO!

-Kanako…

-Idiota, nii-san estúpido.

-¡TETSUHIRO!- Se escuchaban las voces angustiadas de Masaki y de Kunihiro llegando al lugar, barriéndose al instante y posándose al lado de ambos.

-¿Qué idiotez querías hacer tonto?- Gritó severo el de gafas.

-¡NO TE CREÍA TAN COBARDE.- Gritó Masaki.

-No me hables de esa forma que tú no tienes un buen récord.- Susurró Souichi ya en el piso sentado.- Tú mejor que nadie sabes cómo me siento.

Masaki agachó su rostro y susurró

- Tienes razón… Lo lamento.

-Tetsuhiro, oye, ¿Qué sucede?-

La situación no había cambiado había sido peor, notaron cómo los ojos del mencionado se tornaban blancos y comenzaba a moverse violentamente.

-¡¿Qué está pasándole?!

-Nii-san.- Llamó Kanako con miedo.

-¡Está convulsionando, mierda¡- Gritó Souichi.- Dame tu bufanda date prisa.- Gritó a Masaki y éste moviéndose rápido, para colocársela en la boca y evitar que se mordiera la lengua.

-Hay que llamar a una ambulancia.

-¡¡¡Hazlo, date prisa!!!- Gritó Souichi a Kunihiro, mientras este apretaba su mano en la del Morinaga menor y susurraba.-Morinaga…

Kanako lloraba horriblemente y Masaki la abrazaba diciéndole:

- Tranquilícese, él va a estar bien…

 

***

 

El episodio por lo menos finalizó, ya entraban al hospital con prisa, llevaban la camilla por el pasillo de emergencias y tras de él se apuraban, Kunihiro, Masaki,  Souichi y hermana. Los facultativos lo trataban audazmente, parecía que algo no estaba bien, pues el conocimiento en el Morinaga no era para nada alentador.

Habían pasado horas y horas en la sala de espera, Kunihiro al ser el familiar más cercano fue el único que pudo ir con él a todos los exámenes que le hicieron. Souchi, no dejaba de revolverse nerviosamente el cabello y observaba el piso que ya estaba empapado de lágrimas. A su lado, su hermana estaba vencida por el sueño. A  la 1 de la mañana, cuando por fin salía el castaño de entre las puertas de cuidados intensivos,  Souichi se puso de pie con calma, pues dejaba a su hermana en el sofá de tres puestos y cuestionaba.

-¿Cómo esta, qué pasó?

Masaki también se unió a ellos en cuando a Kunihiro suspiró hondamente:

-Tal parece que un coágulo en su cerebro estalló.

-¿Qué, un coagulo?

-Sí… por eso tuvo esa convulsión.

-Dios, ¿Y ya está mejor?

-No… los médicos están tratando la hemorragia de la vena que fue afectada, además de limpiar en su organismo algo extraño.

-¿De qué hablas?

-No entendí muy bien el doctor nos explicará en unos minutos.

-KUNIHIRO.- Gritaba Meilin corriendo por el pasillo y gritando.- ¡¿Qué le paso a mi Tetsuhiro?!

-¿Quién te avisó?

-Eso no importa.- Dijo severa la mujer para ahora observar al pelos largos a quién gritó-¡QUÉ HACE ÉSTE AQUÍ!

-Mira Meilin, si vas a estar aquí será mejor que te calmes.-Farfulló severo el mayor de los Morinaga.- No sé cómo le hiciste para enterarte, pero aquí vas a respetar a Souichi mientras esté en mi presencia.

-JAMÁS, VOY A RESPETAR A ESE IMBÉCIL ROMPE MATRIMONIOS.

Souichi estaba perdiendo los estribos cuando escuchó:

- Mi Nii-san no es nada de eso, vieja loca.- Gritó Kanako, siendo vista con horror por la mujer de cabellera castaña.- Aquí la única bruja rompe parejas felices eres tú, mi Nii-san y Morinaga-san ya se conocían desde antes que tú llegaras, ellos se aman desde años.

-Vaya quien lo diría una niña te pondría en tu lugar.- Susurraba a un costado Masaki.

-Maldita mocosa.- Se intentó acercar para golpearla

 Souichi sujetó su brazo severo, la observó con ojos asesinos y murmuro con voz grave:

-A mi hermana ni te atrevas, maldita hija de perra…

-Suéltame asqueroso.- Intentó zafarse.

 El Tatsumi deseaba estrangularla, matarla y si fuese necesario hasta descuartizar su miserable cuerpo, la miró con más asco del necesario y volvió a gruñir:

-No creas que por que estás embarazada ganaste, miserable… tengo lástima por ti, no puedo ni siquiera sentir rabia, sino más bien lástima.- La liberó- Pero juro que vas a vértelas conmigo cuando todo esto acabe.

-¿Me estás amenazando? ¿Escucharon, me amenazó?...

-Ya, cálmate bruja.- Expuso Kanako.- Mi Nii-san sería incapaz de hacerle daño a una flor, aunque contigo no sé, porque pareces sapo, horrenda horrible, mujer loca y vieja.

-AHHHGRRRR.-Gruñó con fuerza sintiéndose mareada Kunihiro la sostuvo y susurró:

-¿MEILIN?

-Me siento muy mal.

Rápidamente llamaron a una enfermera y la internaron, Kunihiro susurraba:

- Lamento esto, pero deberás calmarte un poco ella está embarazada.

-No me lo recuerdes.- Susurró Souichi bastante indignado.

-Bueno, al menos podremos escuchar lo que el doctor dirá sin la presencia de esa mujer- Expuso Masaki notando al médico entrar por la puerta de la sala de espera.

-¿Señores, ustedes son familiares del Joven Morinaga Tetsuhiro?

-Sí, soy su hermano, ellos son amigos cercanos estaban con él en el momento del suceso- Explicó con calma Kunihiro.

-Bien, estas son preguntas personales, como su hermano no está consciente, debo hacérselas.

-Lo que sea.

-Dígame, ¿Su hermano consume drogas?

-Drogas, ¿de qué habla?

-Encontramos un compuesto   químico que aceleró el proceso de coágulo, además de restos de una droga llamada comúnmente como éxtasis. ¿Podrían decirme si el consume esto?

-Bueno que yo sepa no, él nunca ha consumido nada de eso, no lo necesita.

-Entonces deben investigar como llegó eso a su sistema, porque el consumo de ese tipo de productos, causa un efecto secundario si se usa en grandes cantidades. Por el momento, él está estable y pudimos congelar el flujo de la arteria, el neurólogo está trabajando arduamente en controlarlo todo, por ahora no creo que despierte a unas dos semanas y permanecerá en observación.

-Doctor, en Osaka lo trataron de una operación y el doctor dijo que tenía un bloqueo, que tanto afectará su memoria esta vez?- Cuestionaba inquieto Souichi.

-La verdad no sabemos, el médico que lo está atendiendo, logró drenar el flujo de la arteria sin necesidad de hacer una perforación al cráneo, pues la que se le hizo antes, está apenas curando.

-Dios…- Susurró Masaki con voz impresionada.- Todo este tiempo él, a lo mejor no se sentía bien y seguía siendo el mismo de siempre sonriendo y ocultando su dolor.

 Souichi entristeció:

-¿Va a estar bien?

-Sí, solo hay que darle tiempo y dejar que el reaccione.

-¿Podemos verlo?

-Sí, pero lamento decirles que por muy poco tiempo.

-Doctor.- Llamó una enfermera.

-Ya está en su habitación, ¿Quién ir a verlo?

-Ve tú.- Susurraron Kunihiro y Masaki.

-Nii-san, te esperare aquí.

-Hai…

Souichi siguió a le enfermera que susurraba:

-Tendrá que ponerse esto.- Dijo dándole una bata verde y una mascarilla al mismo tiempo que guantes.

Por fin Souichi entraba a la habitación, notaba de nuevo las enormes maquinas, ya se había acostumbrado a ellas pero no podía hacerlo con él en esa cama, entubado y con la cabeza vendada, creía que esa pesadilla se había terminado.

-…- Se acercó a tomar su mano y susurró- Eres más fuerte que yo- Suspiro hondo y conexo- Creo que ya es suficiente, ¿No lo crees?- Susurraba.- Ya hemos sufrido demasiado….

 El ruido del respirador era su única compañía, cuando de pronto notó como su mano se movía lentamente entre sus dedos:

-Aun inconsciente me escuchas, soy un estúpido.- Dijo al borde del llanto.- Ya, no vas a sufrir te lo prometo, esta vez no voy a ceder a perderte lo juro.- Se puso en pie y susurro.- Lucha, porque cuando salgas de esta, vamos a enfrentar a todos y te vas a divorciar de esa demente.- Dijo seguro.

-Lo lamento pero debe irse ya.- Dijeron las enfermeras notando que el pulso cardíaco estaba elevándose.

 Souichi abandonó la habitación mientras pasaba el lumbral de aquel tosco y oscuro pasillo, pensaba intensamente:

-“Esta es la guerra, maldita loca, no te saldrás con la tuya. Así que, así fue como te embarazaste, eres peor de lo que pensaba.”

Se liberaba de las vestimentas y los guantes para seguir su camino.

Mientras cruzaba el pasillo, vio salir de una habitación a la castaña ambos estaban de pie mirándose uno al otro con severos ojos asesinos, Souichi intentó irse, pero ella le sujetó del brazo diciendo:

-Finalmente me quedaré con él, quieras o no.

-Eso está por verse.

-¿De qué hablas?

-Se lo que hiciste y si corres con suerte, puede que él no te demande, por loca.

-¿De-De que hablas?- Cuestionó nerviosa.

-Cuida mucho a ese niño, porque aunque sea hijo de una peste roñosa y una piruja como tú, es el hijo del hombre que más amo en este mundo.- Susurró con voz grave.

Se soltó de ese agarre, para perderse y dejarla pensando en infinitas posibilidades. En cuanto a él, la realidad y la vida le dieron un buen golpe en pleno rostro, mandaría a volar a todos esos malditos estúpidos que se atrevían a mirarle como basura, todo por ser alguien que ellos no lograban comprender.

Lucharía contra las inseguridades, contra los rumores contra los insultos en la calle, lo haría por él y por ese futuro juntos. Morinaga era su hombre y no iba a permitir que se alejara de su vida, esa era la gran lección que había aprendido.

 

Notas finales:

Bueno espero les haya gustado lamento la tardanza, y el drama n_n espero les haya agradado para mi será un honor leer sus comentarios sé que estarán lindos o quizás otros sean de mensajes de muerte o,o!!! jajaja en fin un saludo a mis amigas del Wazapp, a la secta, al grupo de koi suru bpukun~ y a el pequeño grupo de Pandoras autor fanfiction!!!


 


A los que comentan en fanfiction sin logarse también els agradezco gracias!!! Nos vemos en otra actualización cuidaos mucho!!!


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