-hum- fue lo único que contestó el azabache, regresó la mirada al asiento del conductor.
Nadie en la parte trasera del auto habló durante todo el trayecto, Naruto se encontraba algo tenso ya que el otro estaba en silencio, mientras que en la parte de adelante los novios se contaban todo lo que habían hecho en la semana.
-y dime Naruto, ¿cómo se comporta Kiba ahí?- dijo Neji molestando a su novio.
-de hecho es tan estirado que no me sorprendería que fuera parte del profesorado jajaja-
Todos en el auto rieron menos Sasuke, el seguía en sus pensamientos igual que siempre. Finalmente llegaron a un hermoso muelle donde habían diferentes puestos para comer al igual que un restaurant al final de este, se podía observar como si fuera una isla en el enorme océano azul.
Neji abrió la puerta de Kiba, Sasuke se bajó sin hacer caso de Naruto, el cual, tampoco había pedido que le abriera la puerta, este bajó solo. Los cuatro caminaron por el muelle observando a las gaviotas y a los niños jugar.
-amor, ¿qué te parece si vamos a la feria?- dijo Kiba mientras se agarraba del brazo de Neji como un pequeño pidiendo un dulce.
-de acuerdo- se volteó y le robó un beso haciendo que el castaño se sonrojara. Naruto observó esto, algo en su interior se removió, le gustaría tener a alguien que gustara de el, que se preocupara por hacerle la vida feliz...
-Naruto, ¡ven!- Kiba lo tomó del brazo y se fueron corriendo dejando a Neji y Sasuke pagando las entradas, el rubio no había reparado en la enorme feria que se elevaba a un lado del muelle. Ahora ambos estaban parados en medio de la fila para entrar a la montaña rusa.
-y dime Naruto, ¿qué te parece Sasuke?-
-... callado-
-mmm... bueno sí, pero aparte de eso, ¿no te gusta?-
-ah, eso, sí, está guapo, pero no creo gustarle-
-¿seguro?, porque parece muy interesado en tí-
-¿tu crees?-
-oh si, está loco por tí... ahí vienen, actúa normal-
-Kiba, yo siempre actúo nor...-
-¡Neji!- saltó sobre su novio, este casi se cae al suelo, Sasuke los ignoró olímpicamente y Naruto reía un poco por el comportamiento de su amigo.
Todo el día pasó así, Neji y Kiba jugando y besándose, Sasuke no hablaba y Naruto se sentía fuera de lugar, el estar con el azabache era como no estar con nadie. Al final del día llevaron a los donceles a cenar al pequeño restaurant del muelle.
-Kiba, ¿me concederías este baile?- dijo Neji mientras se levantaba de la silla y estiraba su mano a su novio. El azabache había pedido su tercer copa de la hora, y eso que llevaban en ese lugar veinte minutos.
-¡Si!- el castaño saltó y arrastró a su novio a la pista de baile. Naruto y Sasuke quedaron solos por enésima vez en el día. Naruto decidió romper el hielo.
-mi nombre es Naruto Uzumaki, ¿el tuyo?-
-no te importa-
-... que lindo- comentó sarcástico -¿por qué te comportas así conmigo?-
-es más que obvio que no quería venir, esta estúpida cita que tu y ellos dos planearon no va a funcionar-
-¿cita?- el rubio se mostró confundido.
-sí, no puedo creer que me dejara engatuzar por ellos y por tí-
-wow, espera un momento amigo, ¿piensas que quiero conquistarte?-
-eso es obvio, eres un doncel de 18 años sin una pareja estable, eso quiere decir que pronto serás un quedado y nadie querrá estar contigo-
En ese momento Kiba y Neji iban regresando.
-¡muy bien chicos! ¿qué quieren ordenar?- dijo Kiba sonriendo mientras se sentaba en la mesa junto con Neji.
-¡¿perdona, pero a caso naciste con retraso mental o solo eres estúpido?!- gritó Naruto a Sasuke. Kiba borró su sonrisa de la cara en ese momento, Neji se puso serio y volteó a ver a Sasuke que solo tenía una sonrisa de burla en la cara.
-es la verdad, aparte, en esa escuela te están entrenando para conquistar hombres, ¿no es eso para lo que los enseñan?-
Naruto tomó su bebida y la aventó sobre el azabache, este se levantó sobresaltado observando su camisa. El rubio se levantó igual de la mesa y se alejó de ahí a paso rápido. Sasuke comenzó a reír mientras señalaba a Neji, Kiba observó a su novio enojado mientras que este buscaba donde esconderse se la ira de su pequeño doncel.
Naruto llegó a la escuela en taxi, ahí ya estaba esperándolo Kiba sentado a un lado de la reja evitando que la cerraran los guardias. Cuando su amigo llegó trató de hablar con el.
-Naruto-
-no quiero hablar Kiba, será mejor que no molestes- Entró sin siquiera ver a su amigo, este no dijo nada y caminó detrás de el. El ambiente se había vuelto tenso, el rubio llevaba el cabello despeinado de las puntas, los tennis algo sucios por haber caminado en tierra para esperar al taxi.
Llegaron al cuarto, Naruto caminó al baño y se encerró para darse una larga y relajante ducha, mientras tanto Kiba estaba sentado en su cama deshaciéndose de la ropa y colocándose su pijama. Cuando se colocaba los tubos en el cabello salió Naruto, este tenía cara de pocos amigos.
-Naruto... en verdad lo lamento, no pensé que se fuera a comportar así-
-no importa, me voy a dormir Kiba, mañana iré con mis padres-
Se acostó en su cama y apagó la pequeña luz de noche, el castaño no dijo mas, se acostó en la suya e hizo lo mismo que Naruto.
El fin de semana pasó rápido, mientras la mamá de Naruto esperaba conocer a su futuro yerno, su padre le daba diferentes tips para entender a los "semes". Volvió a la escuela.
Kiba lo esperaba en la habitación, ya estaba toda arreglada, las ventanas abiertas y las camas tendidas. El castaño tenía el cabello peinado listo para salir a su primera clase del día, Naruto aventó su maleta a la cama y saludó a Kiba, no le permitió decir nada de lo sucedido aquel viernes así que se dirigieron a la clase.
-muy bien chicos, quiero que tomen sus libretas y me sigan a el salón contiguo-
Todos siguieron a la maestra. Entraron a una enorme habitación con una mesa gigantesca en ella, tenía puestos mínimo cinco floreros en todo lo largo, y alrededor tenía platos y manteles al igual que cubiertos, vasos y copas.
-chicos y chicas, esta es su primer examen práctico, la semana pasada nos enfocamos en la primera regla, quiero que cada quien ponga un lugar en la mesa como lo pondrían en su casa en menos de 5 minutos-
Todos corrieron a tomar diferentes cosas a excepción de Naruto y Kiba, el castaño ya tenía planeada una estrategia, el rubio tenía planeado no hacer nada.
-¿qué esperan?-
-muy sencillo maestra, mis compañeros están tan apurados que no prestarán atención a los detalles de las cosas por lo que colocarán algo sin clase ni estilo, espero unos segundos que compensaré después con el buen gusto que tengo- dijo Kiba mientras sonreía, cuando terminó de hablar caminó hacia las cosas, sus compañeros y compañeras se volvían locos por ver donde iba cada cosa.
-¿y usted señorito Uzumaki?-
-yo... prefiero reprobar-
-verá señor Uzumaki, no le conviene reprobar mi materia ya que es la más importante que le ayudará en su vida diaria, al igual que si reprueba la tendrá que recursar-
Naruto abrió los ojos desmesuradamente, no quería volver a tener a esa maestra, aunque solo llevaran una semana, ya la odiaba con todo su corazón.
-¡yo termino antes!- salió corriendo. El y Kiba terminaron al mismo tiempo, y ambos sacaron las más altas calificaciones por la elección de cosas buenas y el acomodo de estas.