El joven Black se había pasado toda la noche tratando de escribir una carta decente con sus sentimientos, sin embargo lo hizo y gracias a eso tenía unas terribles ojeras, cuando su hermano lo miro lo único que pudo hacer fue suspirar.
-terminaste la carta?-dijo mirándolo para luego ver como asentía con la cabeza de forma perezosa- muéstramela y luego la enviamos- Sirius miro a su hermano extrañado.
-… tenía que mostrártela primero?-dijo con sueño mientras caminaba al comedor, comería un gran desayuno para luego ir a su cama y dormir profundamente.
-…que escribiste en la carta?-dijo algo alarmado al pensar que su hermano hubiera escrito bobadas para enviársela a Severus, este bostezo e ignoro a su hermano, el pelinegro fue tras él y lo agarró del brazo mirándolo preocupado- sabes que con esa carta pudiste echar a perder el plan!?... también pudiste haber hecho que él te odiara para toda la vida!-dijo ya desesperado.
-no molestes, déjame descansar un poco y dormir me siento muy cansado tanto que ni recuerdo lo que escribí-dijo mientras se soltaba del agarre y se iba hacia el comedor, el joven comió todo lo que pudo hasta que estuvo satisfecho para luego fue a su cuarto, se lavó los dientes y se hecho a dormir.
*~*~*~*MANSION SNAPE*~*~*~*
El joven de cabellos negros y ojos ónix estaba durmiendo profundamente hasta que escucho a una lechuza golpear en la ventana, se removió un poco para luego mirar hacia esta la ventana, noto la lechuza y se levantó hacia esta para luego abrir la ventana sintiendo el frio viento del invierno mientras acariciaba la lechuza blanca con algunos puntos negros, extrañándose siendo la primera vez en ver una lechuza que jamás había visto, suspiro para luego tomar la carta y darle algo de comer, empezó a leer la carta quedando completamente sonrojado.
“Carta: para mi querido Severus.
Desde el primer momento que en que te vi entrando al tren para cursar tu primer año en Hogwarts no pude quitar mis ojos de tu cabello, que cuando el viento sopla y se mueve puedo apreciar el suave aroma a lavanda que desprende, amo tus ojos que a pesar de ser negros como la noche brillan tan hermosamente cuando hablas con aquella chica llamada Lily Evans, me gusta mucho ese brillo que se notan en tus ojos pero me pone celoso al pensar que no me lo dedicas, pero no hago nada porque no quiero que me odies más, también me gustan tus delgadas manos, que al hacer una poción se mueven tan ágilmente que no puedo evitar pensar cómo sería tener esas manos acariciándome, lo que me lleva a querer acariciar esa blanca piel que me tienta a dejar una gran marca roja para que todos sepan que es mía, pero no te tengo y me da miedo que con lo poco que pueda acercarme a ti ahora pueda perderte. Sé que soy un imbécil al no ser capaz de hablarte normal, pero aun así no puedo soportar todos los sentimientos que me provocas solo con pasar a mi lado, por eso te escribo esta carta porque no soy capaz de enfrentarte para decirte mis sentimientos, por eso no creas que es una broma, porque de verdad te amo Severus”
El joven azabache no podía creer que le escribieran una carta de amor, siendo su primera carta de amor, aun con el fuerte sonrojo en sus mejillas empezó a buscar el remitente sin encontrarlo, suspiro un poco dejando la carta en la mesa, no se dejaría engañar tan fácilmente, no quería que le jugaran una broma pesada, sin embargo las ultimas frases le dejaban un pequeño remordimiento al no responderla, suspiro y se levantó para luego tomar tinta y un pergamino.
*~*~*~*UNAS HORAS DESPUES (mansión Black)*~*~*~*
-hermano!... tienes que levantarte llegó una respuesta a tu carta-decía molesto mientras tiraba de las cobijas a su hermano, el cual se removía buscando sus cobijas estando perezoso.
-nooooo~~-dijo en un bostezo para luego entre abrir sus ojos para mirar a su hermano el cual le mostraba la carta, al verla rápidamente se levantó y la tomo algo ahitado- respondió!?-dijo nervioso sin querer abrirla, luego cerro sus ojos suspirando profundamente.
-sí, es la misma lechuza que te dije que podías enviar para que no se diera cuenta de que eras tú… ahora espero que sea una respuesta positiva-dijo mientras se sentaba en el sofá mirando a su hermano con algo ansioso, con las manos temblorosas abrió el sobre viendo la hermosa letra para luego sonreír ligeramente al leer lo que le decía.
“Carta: para autor desconocido.
Quién eres?, no perdonare que estés jugando conmigo de esta forma porque si lo haces buscare quien eres y te matare.”
-qué dice?-dijo el joven de cabellos negros mientras se acercaba, al leer la carta suspiro profundo- bueno quizá no escribiste algo estúpido…-dijo frotándose la frente para luego sentarse en la cama con su hermano.
-pero es algo bueno?... él está enojado?… le digo mi nombre!? Que le respondo!?-dijo mientras dejaba la carta a un lado y tomaba las sabanas- naaahh~ voy a dormir más!!-dijo metiéndose otra vez en las cobijas para luego cerrar sus ojos.
-eres un tonto, solo necesito que me digas que le escribiste para poder responder- dijo levantándose de la cama algo molesto.
-solo le escribí lo que ciento-dijo murmurando para luego quedarse dormido.
-lo que sientes… espera que!? Le escribiste lo…-se froto la cara mientras gruñía, pensando que solo le había escrito algo sobre que quería tener sexo con el otro, suspiro mientras se recostaba en el sofá, no le podría preguntar de esa forma su hermano solo le diría cosas muy por encima. Lo dejo dormir para luego irse a su habitación y descansar también, sin embargo su hermano no se despertó sino hasta el día siguiente.
*~*~*~*EN HOGWARTS (campo de Quidditch día siguiente)*~*~*~*
-bien sabe lo que tenemos que hacer es simple Hufflepuff no podrá hacer nada en contra de nosotros!-dijo el capitán mientras hacía cara de triunfo seguida por los demás jugadores, James suspiro mientras asentía, luego salieron de la carpa para montar su escoba y empezar el juego.
El joven de expresivos ojos café se alejó un poco del capo queriendo simplemente disfrutar del aire que sentía al estar en una gran altura, bajo su mirada notando a los estudiantes que estaban en el público, sin embargo de un momento a otro sintió que su cuerpo no se movía, gracias a eso empezó a perder el equilibrio lentamente cayendo de lado, trato de aferrarse a su escoba o hacer algo para no caer y morir en el intento, pero al estar completamente inmóvil no pudo hacer más que dejarse caer mientras cerraba sus ojos con fuerza.
Escucho como muchas personas gritaban al ver como su cuerpo caía sin poder hacer nada, sin embargo sintió que de un momento a otro su cuerpo fue descendiendo con menos velocidad, para luego caer acomodado en el centro del campo, abrió sus ojos mientras varios profesores y luego los estudiantes corrían para ayudarlo.
Paso unos minutos en la enfermería para luego ir su casa, al entrar noto la casa vacía sin embargo un siseo lo estremeció, vio una pequeña cola de un reptil que se escondía detrás del sofá, trago duro y saco su varita para luego acercarse lentamente hasta ver a la serpiente la cual estaba profundamente dormida, suspiro profundo, no supo cuando tiempo estuvo reteniendo el aire, se froto la cara y se sentó en el sofá guardando su varita, se quitó su túnica y se froto la cara, alguien lo había hechizado y casi lo mata, gruño un poco molesto para luego suspirar profundamente.
Cerró sus ojos recostándose en este quedándose dormido casi al instante por estar tan estresado por los acontecimientos recientes. Despertó ahitado al sentir como una escamosa piel se frotaba por su brazo, se levantó tomando su mano para luego mirar a la serpiente la cual estaba frotándose contra la mano, le sonrió para luego acariciarla lentamente sintiendo como esta se acercaba felizmente al contacto, alzo su mirada notando lo tarde que era, podría calcular que eran las 5 o 6 de la tarde.
-… tu eres la serpiente de la otra vez?... dudo que me entiendas-dijo divertido para luego sentarse en el piso y acariciarlas escamas suavemente, escucho como alguien entraba a la cabaña y rápidamente giro su rostro viendo a la persona, sonrió ampliamente al verlo-Peter!!... que haces aquí?... pensé que te habías ido a tu casa con tus padres-dijo alegre para luego levantarse e ir a saludar a su amigo.
-…ahh… emm no… mis padres fueron de viaje a último momento así que me quede-dijo notablemente nervioso para luego mirar a su amigo, sin embargo al ir a acercarse la serpiente se puso en medio mientras siseaba sacando su lengua mientras se levantaba mostrando lo poderosa que era retando al joven a acercarse para luego mostrar sus colmillos.
-no!! Que haces!?... no le vayas a atacar!-dijo alarmado mientras trataba de calmar a la serpiente.
-u-u-u-una… s-s-s-serpiente-dijo el joven temeroso mientras retrocedía un poco, la serpiente empezó a avanzar hacia el joven de cabellos rubios, el cual se sentía cada vez más amenazado, sin embargo al notar una presencia al frente suyo que lo protegía se calmó un poco.
-es amigo mío!, no le hagas nada-dijo mientras tomaba el brazo de Womtail para luego ir al sofá, ahí ambos empezar a hablar, siendo vigilados atentamente por una serpiente que no se quería apartar del joven de cabellos revoltosos, hasta que Tom entro a la casa, este al ver a Peter frunció el entre cejo, pero su enojo se esfumo al ver a su serpiente, saludo al joven Potter y luego fue directo a su cuarto, tenía unos asuntos en que pensar.
-oy... oye… Prongs como te caíste de la escoba o porque?-dijo algo preocupado mientras lo miraba nervioso.
-… no se… creo que me hechizaron, no me podía mover… pero alguien me salvo-suspiro mientras se ponía a pensar en su salvado- tu sabes quién es?-
-fue Lily obvio-dijo mientras hacia una extraña mueca mientras el joven lo miraba entre sorprendido y preocupado.
-Lily?... pero… ella estaba… con sus padres-murmuro bajando su mirada y luego suspiro profundo.
-… pero ella… estaba conmigo y te salvo-dijo recordando cuando ella lanzo el hechizo para moverle al centro del campo.
-ya…-murmuro mientras apretaba con fuerza su ropa- bueno yo voy a dormir, me duele la cabeza con solo recordar lo que paso-dijo suspirando para luego levantarse- que bueno verte Peter, nos vemos mañana-dijo alegre para luego acompañar a su amigo a la puerta.
-… Prongs!?... oye… estarás bien?... solo con esas serpientes?-pregunto bajo para luego mirar a la serpiente que aún seguía vigilando todos los movimientos.
-si no te preocupes-dijo sonriente para luego despedirse (echar) a su amigo, regreso a su cuarto notando que Tom ya hacia dormido en su cama, suspiro profundo para luego hacer lo mismo.
-James-murmuro girándose para verle a la cara al otro, el cual entre abrió los ojos para ver los del joven de cabellos negros.
-si?-dijo algo deprimido.
-…ten cuidado con Pettigrew- dijo mientras notaba como los ojos chocolate que no tenían sus gafas las cuales estaban en la mesita de noche se volvían unos ojos furiosos.
-porque?... él es uno de mis mejores amigos no me hará daño-dijo molesto para luego darle la espalda, suspiro para luego envolverse en su cobija- no hables de lo que no sepas-gruño mientras se acurrucaba en su cama.
-te digo porque lo sé!... ese tipo…-se mordió la lengua molesto para luego girarse y darle la espalda, para no volver a hablar más con el menor.
*~*~*~*DESPUES DE 2 MES*~*~*~*
Muchos de los jóvenes ya estaban de regreso a Hogwarts para empezar un nuevo año, el cual iba a determinar muchas cosas para ciertos jóvenes.
Esos dos meses para James habían sido insoportables, cuando creyó que su relación con Tom iba bien, todo se echó a perder cada vez que se encontraba con su amigo Peter, aparte de eso muchas ocasiones había estado a punto de la muerte, si no fuera por algunos profesores que al verlo lo ayudaron de inmediato o por la serpiente que desde el día en que Peter fue de visita a la casa no se había separado de él, algo que le ponía de malas.
En cambio para Remus y Lucius habían sido solo de citas y reuniones con sus padres, aunque ninguno de los dos se quejaba pues habian al final aceptado el compromiso, sin embargo Lucius seguía dando pelea en ser cortante y frio, pero luego era lindo y quizá hasta tierno para Remus, el cual trataba de todas las meras en tratar de que el joven de cabellos platinados dejara de ser tan molesto cuando se le daba la gana.
Pero para el joven Black habían sido los mejores meses de su vida, pues se la había pasado mandándose cartas de “amor” hacia Severus, el cual poco a poco se había sentido atraído hacia su admirador secreto, sin embargo aún trataba de ser lo más cortante hacia este, pues no quería tener una ilusión amorosa por una estúpida broma, sin embargo no podía evitar emocionarse al ver la hermosa lechuza blanca golpear en su ventana, ahora tendría que ver como se desenvolvían las cosas mientras estaban en su nuevo año de estudio.
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