La cabaña por Olw_Camel

James Potter tenía su corazón a mil por minuto, no sabía cómo como sus amigos habían llegado a la extraña e imposible conclusión sobre lo sucedido con Riddle, llegaron al patio de la torre del reloj, James suspiro y miro a sus amigos.

-como demonios llegaron a esa conclusión!? Nunca lo haría con Riddle, primero muerto antes de eso… además tengo novia nunca la engañaría con nadie!-dijo mirándolos, casi examinándolos con la mirada mientras se cruzaba de brazos, la carcajada de Pady no se hizo esperar, esta hacía eco por todo el pasillo.

-jajajaj… tu… jajajajajajaj debiste haberte jajajajajajaj… escuchado!-finalizo mientras se sostenía con fuerza su barriga, Prongs iba a regañar a su amigo por malpensado, pero al ver que algo blanco sobresalía del cabello negro azabache de su amigo del alma, decidió acercarse y tomar aquel pétalo de lirio que antes hacía en la cabeza de su amigo.

-un lirio?-dijo suave pero lo suficientemente claro como para que el joven que antes reía a carcajadas se detuviera en seco y miraba nerviosamente ese pétalo.

-… jajaj si… es de un lirio-dijo tragando duro y riendo nerviosamente, mientras alzaba inconscientemente una mano y la frotaba lentamente en forma de caricia, el más bajo de los jóvenes Gry se acercó y tomo el pétalo mirándolo curioso.

-no son los que crecen cerca al invernadero 3?- cuestiono el raton mientras miraba a su amigo extrañado- no tenías clase de Estudios Moggles?-

-emmm… fue cancelada-dijo rápidamente mientras tomaba el pétalo de las manos de Peter y lo tiraba muy a su pesar lejos- solo quería respirar aire fresco-dijo girándose y empezando a caminar por el pasillo.

-Sirius!!-el joven de cabellos alborotados corrió hasta su amigo, sabía que el chico de cabellos negros ocultaba algo, siempre que se excusaba de esa manera y luego se iba era porque algo lo estaba atormentando o lo tenía algo en que pensar, detuvo su andar al notar que este prefería no hablar de eso, suspiro suave mirando como su amigo seguía su camino, se froto la frente, no lo obligaría a que le contara lo que le sucedía, solo tendría la paciencia de esperarlo.

El joven Black siguió su camino mientras suspiraba profundamente recordando lo que había pasado.

*~*~*~*~*~* FLASH BLACK*~*~*~*~*~*

-qué bueno que me escape-murmuro mientras se estiraba caminado lo más lejos posible de los salones, aunque él iba a ir al baile pues su familia lo odiaba (a excepción de su hermano Regulus), no quería practicar esos vergonzosos pasos, así que agradecía con todo su corazón que su clase de Estudios Muggles fuera precisamente en esa hora, pero para su desgracia el profesor tenia inicios de Spattergroit* y por esa causa no había podido asistir y quizá no asistiría por mucho tiempo.

Escucho como alguien se quejaba un poco al abrir una ventana, busco con su mirada a la persona que se quejaba, notando a un joven de baja estatura, cabello negro bien peinado, con su túnica verde con negro de Slytherin- Quejicus-murmuro mientras se escondía en uno de los arbustos planeando una forma de asustarlo.

-maldición!-murmuro mientras se estiraba todo lo que podía tratando de tomar una flor azul llamada acónito, sus manos tenían unos guantes especiales para no lastimarse, pues la planta era más conocida por ser muy venenosa, escucho como se movían unos arbustos y se detuvo mirando hacia los lados, si alguien lo viera haciendo eso sería un una des fortuna para su vida, escucho un gruñido desde el invernadero y se giró hacia este sorprendiéndose tanto que sus piernas en un intento de retroceder le fallaron y cayó al piso sobre sus redondas nalgas, trago duro al ver un lobo en el salón.

-... qu… que haces en el salón?-dijo inconsciente, sin embargo se levantó tratando de aparentar tranquilidad y se acercó al lobo- podrías abrir la puerta?... o pasarme la planta que está debajo de ti?- dijo ignorando que su racionalidad le decía que se fuera y dejara de hablar con un animal que ni le entendía, pero un gruñido, más bien un gemido de dolor se hizo presente cuando el lobo tiraba la planta y se lamia con dolor su boca, lo miro asombrado y rápidamente busco entre sus cosas sacando una botella con Dictamo*, arranco una hoja y se la dio rápidamente.

-come eso y luego escúpelo, ardera un poco pero curara esas heridas…-dijo algo afanado, noto como el lobo negro de potentes ojos de igual color salía por la ventana y tomaba la planta con su hocico masticándola soltando suaves sollozos, luego escupió la planta volviéndose a lamer la boca, Severus se agachó para quedar a la misma altura y empezó a acariciarle la cabeza suavemente- disculpa, no pensé que lo fueras a hacer… me alegro que no te envenenaras-un gruñido par parte del lobo hizo que el joven soltara una pequeña risita-… pero gracias por recogerla-dijo aun acariciándolo, su rostro que siempre parecía inexpresivo, en ese momento se podía percibir entre preocupación y algo de tranquilidad-… pero… aunque seas una criatura mágica es extraño que me entiendas…-lo miro examinándolo- eres un animago?-cuestiono mientras se separaba un poco.

Pady se encontraba en su mundo, no podía creer que el joven mago había estado preocupado, relajado después de ayudarlo, aparte de eso se reía, eso sí lo dejaba en una gran sorpresa viniendo de Quejicus, jamás pensó que el joven pudiera tener sentimiento como cualquier ser humano normal… bueno era un ser humano normal, pero siempre lo había visto serio y enojado y queriendo matarlos así que nunca pensó que pudiera verse tan lindo riendo o que tuviera ganas de abrazarlo cuando estaba preocupado, negó mentalmente pues no eran unos buenos pensamientos, ambos se odiaban y punto, cuando dejo de sentir la caricia y notar como el joven pelinegro se alejaba, rápidamente se acercó más y empezó a lamerle la mejilla, haciendo que el joven pelinegro soltara una suave risita.

-no!-dijo mientras lo apartaba, sin poder quitar una diminuta sonrisa en su rostro- me haces cosquillas, tienes que volver a tu forma humana antes de que alguien venga, lo acaricio suavemente y se levantó caminado, se detuvo y miro unos arbustos con unos lirios, se acercó a estos y sonrió recordando a su amada Lily, tomo uno y lo acaricio suavemente, miro al lobo y se despidió moviendo su mano para luego girarse y empezar a caminar queriendo ir con su quería amiga.

Cuando el mago estuvo lejos de Sirius, este volvió a transformarse en humano, suspiro suave mientras se tocaba el cabello suavemente queriendo que el calor que recordaba de la mano del menor se quedara en su cabeza, miro el pequeño arbusto con los lirios, se acercó tomando uno para lo olfatearlo y acariciarlo suavemente cerro sus ojos sintiendo una suave briza que lo hizo despertar de su mundo.

-que rayos me pasa!?-se gritó mientras se frotaba con fuerza la cara y se despeinaba el cabello, suspiro y luego camino en busca de su James, para hacer bromas y distraerse.

*~*~*~* END FLASH BLACK *~*~*~*~*

-maldición!-gruño caminado a la cabaña en la cual tenía que convivir con su tormento.

*~*~*~* EN LA CABAÑA*~*~*~*~*

-presta atención a lo que te digo-la fría voz del Sly hizo que el otro joven suspirara y mirara sus libros de pociones.

-aunque explicas mejor que cualquier profesor me estoy muriendo del aburrimiento Seve-un golpe en la cabeza con un libro lo hizo callar, el otro joven hizo un puchero y volvió a seguir leyendo un libro de pociones, sonriendo divertido.

-bien… hay plantas que te ayudan a que la poción sea afectiva, como por ejemplo el acónito… esta planta está en dos pociones, la Poción de Ojos Abiertos* y la Poción Matalobos –la última frase la dijo mirando directamente a los ojos de Remus.

-si ya lo… había escuchado sobre la Poción Matalobos-dijo dejando el contacto visual con el azabache, temiendo que supiera su secreto, miro el libro estando nervioso- me habían dicho que la tomaban los hombres lobo para mantener su pensamiento humano y no actuar como bestia-rio nervioso mientras pasaba la hoja del libro- que horrible no?-

-mucho… en especial la preparación, el acónito puede ser una planta muy venenosa si no la sabes tratar-dijo siguiendo todos los movimientos del otro joven- además… deja residuos en la alcantarilla de color azul… ah y si mal no recuerdo los hombres lobo toman esta poción una semana antes de la luna llena-

-... que pretendes Snape?-murmuro mirándolo serio mientras se tragaba sus nervios, no podía creer que llevaran apenas 24 horas de convivir juntos y ya supiera de su secreto.

-no pretendo nada… solo temo por la vida de mi amigo el cual duerme en el mismo cuarto que tu… un hombre lobo que puede despertar en cualquier momento y matarlo-dijo serio mientras dejaba el libro que tenía en la mano sobre la mesa.

Gruño molesto mirando para otro lado- estoy tomando la poción, sé que la otra semana es luna llena, tranquilo-dijo dejando el libro y levantándose.

-está mal preparada… pero tienes suerte, la acónito fue neutralizada por eso no estas envenenado, pero tampoco será efectiva-dijo serio mientras le mostraba dos frascos con un líquido azul claro, a excepción de uno que se veía más oscuro- mira esto- dejo los frascos en la mesa y los destapo, a uno de los frascos le salía un poco de humo en cambio al otro no* - cuando está terminada la poción esta tiende a sacar un humo azul, después de eso seguirá saliendo humo pero muy débil… la poción que estas utilizando podrá serte efectiva por 2 o 3 días-

-sacaste eso de mis cosas!?-pregunto molesto mientras se levantaba de la silla, nunca pensó que Quejicus fuera a hacer algo así- estuviste mirando mis cosas!?-dijo ya perdiendo su paciencia.

-no lo hice, Lucius me pidió que buscara en el baño de este una poción revitalizadora que el tenia y cuando la busque en los estantes encontré esta poción, la analice y saque la conclusión que estaba mal preparada, también me tome el atrevimiento de preparar con mucho esfuerzo la poción de forma correcta… entendería si no la quieres tomar-dijo volviendo a tapar los frascos y dejándole el frasco de color azul oscuro.

-… t… te preocupas por mí?-murmuro aun sorprendido el joven lobo, notando un ligero sonrojo en las pálidas mejillas del más bajo.

-claro que no!... es por el bien de Lucius- se excusó mirando hacia otro lado queriendo recomponerse- … así que si quieres… podría prepararla cuando la necesites- murmuro lo último dándole la espalda, sabía que si se preocupaba por el león mejor dicho lobo, pero no lo admitiría tan fácilmente, después de que el joven de cabellos ceniza saliera de ese pequeño shock, este camino rápidamente hacia el joven azabache y lo abrazo, en un abrazo de oso mientras sonreía ampliamente.

-gracias Severus!... claro que podrías prepararla, sé que eres muy bueno con las pociones!-dijo extremadamente feliz, mientras empezaba a ejercer más fuerza en el delgado cuerpo del chico de ojos ónix.

-y… ya suéltame me asfixias!-dijo tratando de empujarlo muy sonrojado y nervioso, no quería que los encontraran en ese tipo de escena, pero siempre pasa algo por hablar.

El sonido de la puerta se abriéndose, hizo que los jóvenes dejaran de forcejear aun “abrazados”, o bueno Severus siendo abrazado, la escena que encontró en la pequeña sala el joven Sirius hizo que su sangre se calentara, estuvo a punto de lanzarse a su amigo y molerlo a golpes por tocar a “SU” Quejicus, sin embargo el shock más grande fue en sentir los celos hacía de sus mejores amigos, ese joven que llevaba molestando desde el primer momento en que lo vio, Remus al notar la enojada mirada de Pady, rápidamente soltó a Severus y estando nervioso, el joven rompecorazones paso de largo después de haber recuperado algo de su cordura y controlar su enojo, estaba seguro que si hubiera encontrado esa escena con otra persona, seguro que habría terminado golpeando al tipo, fue hasta su cuarto y se en cerro en ese.

-y a este que le pasa?-dijo Severus mirando algo extrañado hacia su cuarto, rodo los ojos y miro a él joven- bueno no más descanso sigue estudiando!-le dijo volviendo a tomar el libro, recordando inconscientemente la mirada celosa de Sirius.