Depresión
Habían pasado tres meses desde que Minato y Kushina se divorciaron, Kushina ya había empezado a trabajar como dijo, todo el día, mientras Minato se iba a bares para ahogar su tristeza en alcohol, porque a pesar de todo lo que le había dicho la amaba más que a nadie y se sentía culpable, arrepentido e impotente.
De lo que Deidara y Naruto no se habían dado cuenta, es que Kushina sufría de depresión y grave, estaba todo el tiempo tomando Anti-depresivos y pastillas para el sueño ya que al principio no podía dormir nada e igualmente que Minato algunas veces ahogaba sus penas en alcohol. Y un día como era de esperarse, colapso.
Al principio de todo a Naruto parecía que no le mostraba demasiada importancia al asunto del divorcio de sus padres, pero después comenzó a afectarle poco a poco el ya no ver a su padre, pues en efecto lo extrañaba y mucho. Naruto se encontraba acostado en su cama tapado con la cobija cuando su Tío entro.
-Vamos Naruto, tienes que comer algo -Le decía Deidara preocupado.
-No tengo hambre -dijo Naruto con la voz entrecortada.
-Vamos, no es bueno que preocupes a tu madre ahora, además no es bueno que te decaigas así, no sabes lo preocupado que esta Sasuke- dijo Deidara tratando de persuadir a su sobrino.
-¿Qué quieres decir con eso? -Pregunto Naruto algo exaltado, no sabía que Sasuke supiera sobre mí.
-Naruto de verdad crees que Sasuke te abandonaría. El aunque no te vea sabe todo lo que haces y le preocupas mucho, de hecho apenas supo que tus padres se divorciaron le dijo a Fugaku que de ser necesario se viene ahora mismo aquí- dijo divertido.
Naruto sonrió- está bien voy a comer- su tío sonrió satisfecho y le dio la bandeja con comida.
-Ah y oye cuando termines de comer alístate que vamos a dar un paseo- dijo Deidara saliendo de la habitación, él había visto el comportamiento de su sobrino los últimos días y no le gustaba en lo más mínimo verlo así, decaído así que decidió salir un rato con él para animarlo.
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Naruto daba un paseo con Deidara cuando a este le llamaron para informarle sobre lo de Kushina.
-Disculpe hablo con el Señor Namikaze Deidara-
-Eh si... ¿Qué pasa?- Pregunto Deidara ante la atenta mirada de Naruto.
-Habla la Doctora Tsunade, La Señora Uzumaki Kushina ha sido trasladada al hospital Konoha -Deidara abrió los ojos tanto como pudo- al parecer sufrió un colapso... y bueno ella se encuentra en coma... y se duda de que pueda despertar... al parecer la paciente sufría de depresión y según los informes de su médico ella tomaba Anti-depresivos y pastillas para dormir, y tantas pastillas mezcladas cambien con alcohol según muestra el informe y lo poco que comía al parecer la afectaron gravemente –Deidara entonces recordó, Kushina cada vez estaba más pálida y se la pasaba trabajando, además de que siempre llevaba unas pastillas en su bolso.
-Gracias... y ¿está completamente segura de que no podrá despertar del coma?- Pregunto inseguro ante la aun atenta y confundida mirada de su rubio sobrino.
-Pues la verdad me gustaría que viniera hacia acá para poder hablar de eso-
-Ya veo... bien estaré haya en treinta minutos- dijo pensando en cómo se lo diría a Naruto.
-Está bien- colgó
-Naruto... tengo que hablar contigo- dijo Deidara inseguro, Naruto solo asintió- Kushina ha colapsado... y cayó en estado de coma-
Naruto aún no asimilaba la información que le ababa de dar Deidara-¿Qué... pero...cómo?- decía mientras lagrimas empezaban a caer por sus mejillas, Deidara se apresuró a abrazarlo para consolarlo, después de que el rubio se tranquilizara un poco decidió llevarlo a la casa para que descansara, Naruto apenas llego simplemente fue a su habitación, Deidara solo suspiro y se apresuró a llamar a Mikoto para avisarle de lo que había pasado, para luego ir al hospital.
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Mikoto había recibido la llamada de Deidara que le indicaba lo que le había pasado a Kushina.
-¡Sasuke!-Llamaba a su hijo preocupada-¡Sasuke!-seguía llamándolo
-¿Qué pasa madre?- Pregunto Sasuke bajando las escaleras de la casa.
-Kushina... Kushina ha caído en coma- decía preocupada
-¡¿Qué?! ¡¿Cómo?!-Pregunto alterado el azabache
-Si... Deidara llamo hace un momento, dijo que Kushina colapso y cayó en coma- decía casi llorando Mikoto ya que ella consideraba una gran amiga a Kushina.
-¿Y Naruto? ¿Cómo está el?- Pregunto el ojinegro esperando respuesta de su madre.
-Dijo que se él solo está en su habitación-
-Voy a hablar con mi padre- al darse vuelta vio a la última persona que esperaba ver en este mundo, Karin.
-Hola, Sasuke-Kun- decía la pelirroja sonriente.
-Aléjate, no tengo tiempo que perder contigo- decía aburrido el azabache
-Lo dices por el rubio ¿Verdad? Me acabo de enterar por unos contactos que su madre entro en coma, jaja pobre- Sasuke la fulmino con la mirada y a la chica se le erizaron los pelos.
-¿Qué carajos quieres? No ves que estoy ocupado- decía molesto Sasuke.
-No seas grosero conmigo, además no me interesa si estas ocupado o no, hay que hablar sobre nuestro compromiso-dijo tratando de agarrarle la mano, pero antes de que lo hiciera recibió un manotazo por parte de la madre de Sasuke.
-¿Disculpa? Cual compromiso, que yo sepa no eh aceptado que Sasuke se case contigo- dijo Mikoto mirándola enojada, pues ella sabía que su hijo sentía cierta atracción a Naruto.
-Oh, no le has dicho, Sasuke-Kun - Sonriente se dirigió a Sasuke.
-Oye Sasuke no has visto donde está mi... ¿y esta quién es?- Pregunto Sai.
-Tsk, nadie que te importe-dijo Sasuke ignorando la pregunta.
-Hola, mi nombre es Uzumaki Karin ¿y tú eres?- dijo Karin mirándolo de forma seductora de arriba hacia abajo.
-Ya sabía yo que te conocía de algún lado, tú estudiaste conmigo a primaria- dijo Sai con su típica sonrisa falsa.
-Ah sí, te recuerdo tu eres el primo de Sasuke- dijo ignorando completamente lo que le había dicho Sai.
-Pues al parecer tienes a otra Uzumaki- dijo mirando a Karin, la recordaba muy poco, a decir verdad le daba un poco de miedo esa chica era una histérica y recordaba muy bien como la veía acosando a Sasuke todos los días antes de mudarse, había cambiado un poco, ahora usaba lentes y estaba un poco más alta, pero tenía su típico y raro peinado.
-Cállate- decía el azabache pasándole al lado para irse a su recamara.
-Que humor- dijo Sai- y oye Karin ¿sigues obsesionada, digo, enamorada de Sasuke? - pregunto Sai, la verdad le daba un poco de risa como haría su primo para zafarse de ella esta vez.
-Por supuesto que sí, que me haya ido no significa que me rendí con el- dijo acomodándose los lentes- en fin me voy-dijo dándose la vuelta para dirigirse a la salida.
-Adiós... hum pobre Sasuke- dijo yéndose a su habitación.
-Dios, que niña- decía Mikoto viendo como Karin se iba del lugar- me pregunto si Fugaku todavía pensara en hacer que se case con ella- dijo para sí misma para luego dirigirse a la cocina.
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Deidara después de avisarle a Mikoto lo que había sucedido con Kushina se dirigió al hospital.
Se acercó a la recepcionista-Disculpe señora ¿Podría hablar con la Doctora Tsunade?-Pregunto pensando en que le querría decir.
-Usted de seguro debe ser Deidara familiar de Uzumaki Kushina- Deidara solo asintió impaciente- Claro, espere un momento- se acercó al teléfono- Tsunade ya llego el joven Deidara... bien, está en el tercer piso, pasillo izquierdo, puerta cinco.
-Bien, gracias- dijo alejándose para subir las escaleras, llego rápido gracias a las instrucciones de la chica, cuando llego, antes de entrar toco la puerta.
-Pase- dijo una mujer rubia con un hermoso zafiro colgando del cuello.
-Bien y ¿Para qué era que necesitaba hablar conmigo?- acercándose a Tsunade.
-Tome asiento- y a si hizo Deidara al frente del escritorio-Pues para empezar, como usted sabe la paciente Kushina está muy delicada-Deidara asintió- ella puede tardar días, semanas, meses, incluso años para despertar del coma-Deidara se sorprendió pues sabía que era grave pero no tanto- y también puede que no despierte, como le dije por teléfono la razón de que Kushina colapsara fue por no descansar, ni comer, mas todas esas pastillas por día, además de que tomara alcohol- dijo mientras revisaba los registros que tenía a un lado.
-Ya veo... y ¿No hay ninguna posibilidad de hacer que el tiempo se reduzca?- Pregunto mientras pensaba que esta debía ser una cruel broma del destino.
-Pues... no lo la hay, lo único que pueden hacer por ahora es esperar a que despierte- decía mientras buscaba unos papeles en el cajón izquierdo- aquí tiene el informe de la paciente por si lo necesita- le entrego los papeles, Deidara los acepto y se preguntaba qué hacer para mejorar el ánimo de su sobrino.
-Ya llegue- decía mientras entraba, subió las escaleras para ver en donde se encontraba Naruto y hay estaba durmiendo en su cama, Deidara se acercó sentándose al borde de la cama, suspiro- Lo mejor sera dejarlo solo para que termine de asimilar todo... lo mejor ahora será hablar con mi hermano (Minato)-
Cuando Deidara termino de preparar la cena solo bajo y comió para volver a su recamara, después de limpiar los trastes se dispuso a llamar a Minato, pero este no contesto, así que decidió ir al lugar donde seguro se encontraría, pero lo haría mañana necesitaba descansar, este día había sido muy... agotador.
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El día siguiente era lunes, por lo que Naruto tendría que ir a la secundaria. Después de arreglarse se dispuso a buscar sus audífonos, ese día no tenía ganas de escuchar a nadie, cuando los encontró y los conecto a su teléfono se dispuso a ahogar cualquier sonido con Break de Three Days Grace, cuando estuvo listo bajo las escaleras para encontrarse a su tío leyendo un tipo de registro pero a penas lo vio lo puso a un lado y le entrego el desayuno a Naruto, el susodicho solo se limitó a tomarlo e irse a sus clases.
Cuando llego como era de esperarse no había nadie, se sentó en su respectivo asiento aun escuchando la canción, una chica pelirrosa le irrumpió el camino.
-Naruto, explícame porque Sasuke-Kun no ha venido últimamente a clases- dijo la pelichicle pero Naruto solo se limitó a quitarse un audífono y mirarle, pero era diferente al rubio alegre de siempre, en esos hermosos ojos zafiros solo había ¿tristeza? Sakura se sorprendió, pero al instante lo ignoro- ¿Qué te pasa? Explícame de una vez-
-¿El teme? Con lo acosadora que eres ya deberías saber que se fue de viaje a Canadá por seis años- dijo para volverse a poner el audífono y retomar lo que hacía antes de que la chica le interrumpiera, Sakura estaba que lloraba ¿Se había ido? ¿A si sin más? Y lo peor de todo era que se había enterado por parte de Naruto y de él, pero antes de poder decirle algo empezó a llegar gente a su salón.
Ese día Naruto no había hablado con nadie a excepción de Sakura y solo porque la chica le irrumpió, Shikamaru, Lee y Kiba se extrañaron, pero shikamaru fue el único en darse cuenta de lo mismo que Sakura, en sus ojos solo había tristeza, cuando se acabaron las clases se dispuso a hablar con el rubio ya que era problemático pero no lo encontró en ningún lado a sí que se fue al lugar de “reunión” de él y unos chicos.
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Naruto se había ido lo más rápido posible del salón, no quería hablar con nadie, pero justo como cuando llego, le irrumpieron el camino solo que esta vez era un pelirrojo con ojeras profundas, Gaara No Subaku.
-¿Qué pasa?- pregunto el rubio impaciente.
-Vi que no te encuentras muy bien- el rubio bufó- vamos por que no intentamos ser amigos y ¿te desahogas un rato?- pregunto el pelirrojo.
-No, gracias no creo que sea conveniente- dijo tratando de hacerse paso, pero el pelirrojo no le dejo.
-Vamos, no es como si te fuera a hacer algo o que ¿Me tienes miedo?-dijo tratando de persuadir al rubio.
-Suspiro- está bien solo espera un momento- se alejó un momento para llamar a Deidara-Hola ¿Deidara?... veras voy a salir con un amigo un rato... bien-Colgó y se acercó a Gaara- bien Gaara ¿que se supone que vamos a hacer?- pregunto aburrido.
-¿Qué te parece si vamos a mi casa? Ahí están Neji y Shikamaru- Naruto solo asintió, recordaba que había escuchado algo sobre un grupo de “delincuentes” en el que estaban esos tres y a pesar de que era amigo del Nara no sabía mucho del tema.
-Bien –dijo para encaminarse mientras el rubio lo seguía desde atrás.
Continuara...