Squalo se retorcía entre las grandes manos, un toque y se sentía apunto de derretirse con solo ese toque, que desde que se habían enterado del embarazo se había vuelto grácil y amoroso, no tenia otra forma de describirlo, porque el cambio era irreconocible, bueno claro esta que solo con el, al resto de las personas seguía tratándolas de escoria y palabras aun mas soeces, pero raramente la gente se acostumbraba a la forma que el hombre actuaba. Parecía loco pensarlo pero Xanxus era un líder nato, ahora entendía por que a pesar de su mal trato y su arrebatada ira tenia un fuerza armada fiel a el, aun cuando fue desterrado de Vongola.
- Que tanto piensas – pregunto el moreno
- Nada – apartando la cara Squalo –
Xanxus se molesto y tomo con fuerza pero sin lastimar el rostro del menor – Dime en que demonios piensas –
- Yo creo que has sido bueno para todos – nervioso
El pelinegro solo alzo una ceja y sonrió sarcástico acercándose al blanco y delicado cuello del peli blanco, mordisqueando un poco, dejando las marcas de sus dientes – Bueno para quien –
Ahhhh – gimió el menor – Para, ahh para mí
Sonrió al reconocer lo mucho que le gustaba este niño, bajo su mano y se dirigió al duro pene que comenzaba a derramar pre semen, tomándolo entre sus manos, lo acaricio suavemente, apretando para que no se siguiera escurriendo – dime mas
Para Varia – silencio – Yo escucho lo que dicen por los pasillos, están felices, a pesar de tu carácter de mierda, trajiste esperanza a nuestro pueblo –
Xanxus sintió su corazón palpitar, el sabia que los que sentía por Squalo era algo que no había sentido nunca por nadie, y que mataría a quien lo tocara, y cree en pensar que el chico siente lo mismo por el aunque nunca lo hayan vociferado entre ellos.
Xanxus, Xanxus – decía Squalo mientras trababa del que mayor respondiera, se había quedado estático
El moreno parpadeo y presiono rápidamente su boca con la contraria, si eso calmaría su palpitante corazón acelerado, el creía que había matado sus emociones hace mucho tiempo, pero este estúpido niñato, le demostraba todos los días que no era asi.
Te amo – ahora quien se había quedado paralizado, era Squalo, no pensó escuchar nunca esas palabras de ese hombre, sus ojos comenzaron a llenarse de lagrimas, eran tan vergonzoso – Estúpido, por que haces llorar a un embarazado – hipando – yo también te amo
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Eso no puede ser cierto – dijo Hayato – Tantas borracheras ya te dejaron estúpido
Ah mi lindura – burlesco Shamal – Yo no me equivoco, además es completamente normal que un doncel joven, con una vida sexual activa, ocurran este tipo de cosas
Yo no estoy joven – suspiro – y estuve casado más de diez años… entonces porque ahora, yo si Takeshi se entera – abrazando la parte media de su cuerpo
Shamal, miraba con ternura al hombre mas joven – Niño desde que me acuerdo, ese idiota te culpo a ti por no poder dale hijos, tu, te culpaste también, pero como puedes ver ahora, el problema era el, siempre a sido el – serio
¿Tendré un bebe? - dijo analizando todo lo que el mayor le había dicho
Tendrás un bebe – sonriendo – Felicidades estas embarazado
Suspiro - ¿Gamma lo aceptara?
¿Ni siquiera pienses lo contrario? – dijo el rubio entrando a la habitación.
Escuchaste
Que estas esperando a mi hijo – dijo el más alto – por supuesto que si y no podrías hacerme el hombre más feliz del mundo
Si ese instante era perfecto