Después de esta, entrega tan esperada para ambos, Yami y Yugi, quedaron dormidos disfrutando del calor que desprendía el cuerpo del contrario.
El sol se estaba ocultando cuando Yami, abrió los ojos, sintió el calor y un cosquilleo sobre su pecho, al mirar observo a Yugi recostado sobre él, jugó un poco con los hilos dorados de Yugi, provocando que el se despertara poco a poco.
-ummm Yami, déjame dormir- Decía aun con los ojos cerrados
-Lo haría, mi sol pero por mi culpa no fuiste a hacer tu trabajo- dijo con todo divertido pero también con mucha preocupación
-No te preocupes, le diré que me dormí o algo así- Respondió con una sonrisa para calmar a Yami
- Yami, Yugi!! … por Dios que bueno que los encontré- dijo Bakura llegando
-Que sucede Bakura?- Pregunto Yami, incorporándose
-Dios, está enojado por que Bakura no fue a dejar las almas de los humanos y te culpa a ti Yami -Dijo Mirando a ambos- Además Yami…-
-no continúes, lo sé, es mejor que tu y Bakura de adelanten- Dijo Yami mirando a Yugi
-Pero…Yami…- Pero antes de que continuara fue interrumpido
-Vamos Yugi, Yami sabe por qué lo hace-Dijo Bakura, mientras miraba a Yami y movía sus labios diciéndole algo que solo Yami sabia interpretar- vamos Yugi- Y ambos salieron volando hasta donde Dios se encontraba
Después de volar por unos minutos Yugi y Bakura llegaron hasta los aposentos del señor
-Señor, aquí esta Yugi…-dijo Bakura haciendo una reverencia y también con miedo
-YUGI!! POR QUE NO HICISTE TU TRABAJO?, QUE TE HIZO EL ANGEL DE LA MUERTE!!?- Pregunto con voz dura
-El…no…- Pero fue cayado por el ruido de la puerta siendo abierta
-Señor, yo retuve a Yugi, en contra de su voluntad para tomar de su energía y recuperar la que perdí en la tierra, deteniendo a Bakura- Hablo Yami mientras entraba al lugar
-SABES QUE NO PUEDES ACERCARTE A YUGI Y MENOS TORMAR SU ENERGIA!!-Grito dios a Yami y con su mano apareció una esfera de color gris la cual apretó e hizo que Yami diera un grito de dolor
Yugi, quería correr hasta donde estaba Yami y detener a Dios pero una mano lo detuvo, Bakura, quien lo veía con ojos tristes le movió la cabeza en forma negativa, tuvo que reprimir sus sentimientos e impulsos de ir tras Yami y oír los gritos que este daba.
-Espero que aprendieras la lección Yami, no vuelvas a hacerle eso a mi hijo- Dijo con voz más calma Dios – Y ahora es tu turno Bakura, interviniste en la muerte de un niño, dándole de tu energía y vida, por tu osadía serás castigado, no debes intervenir en cosas que le corresponden a Yugi- Dijo Dios molesto
-Señor!!, Ellos no…-
-Calla, Yugi no tienes por qué decir nada ellos acaban de confesar su falta, Yami, acaba con Bakura, así jamás volverá a desobedecerme-Dijo Dios, mirando fríamente a Yami
-Si…señor- dicho esto Yami apareció su daga, la misma daga que había usado con Tristan y camino lentamente hasta el lugar de Bakura- perdona…- y atravesó el pecho de Bakura con su mano para sacar la luz de su vida
-NO!! –Grito Yugi pero Yami no le hizo caso, Corto el hilo dorado de la vida de Bakura y después destruyo su luz, poco después el cuerpo de este desapareció
-Buen trabajo Yami, ahora vete y no vuelvas a tocar a Yugi- Yami hizo una reverencia y salió del lugar, ocultando su mirada de Yugi- Y Yugi, recuerda que tu eres la vida y la vida, es un don. La vida es una de las mejores lecciones, la vida es esperada por muchos y por eso no puedes dejar tu trabajo por nada en este universo, entendiste hijo mío?-
-Si…señor, puedo retirarme?- Dijo con un susurro
-Sí, ahora descansa y recupera la energía que te quito, el angel de la muerte, mañana llevas todas las almas que te correspondían hoy y las de mañana-
-Como, ordenes, padre…- Y salió del lugar dispuesto a buscar a Yami
Voló por un largo rato, hasta que a lo lejos vio a Yami sentado debajo de un árbol, miro que en su rostro había lagrimas, así que bajo rápidamente hasta donde estaba, quería consolarlo, quería preguntarle por que lo habían hecho.
-NO TE ACERQUES YUGI!!- Grito Yami, sin levantar su vista
-Por qué?...Yami?- Yugi quería acercarse, quiera estar a su lado abrazarlo y decirle que todo estaba bien
-Por que, no puedo ensuciarte Yugi, tu eres pureza, yo no, cabo de matar a mi único amigo!!- Decía, con lágrimas bajando por su rostro.
-NO ME IMPORTA NADA DE ESO!! TE AMO!! ES LO UNICO QUE IMPORTA!!- decía Yugi mientras, se dejaba caer abrazando a Yami
-NO!! SUELTAME!!- Intentaba inútilmente alejarse del abrazo de Yugi pero al final cedió- No debiste enamorarte de mi…de el angel de la perdición, el angel maldito…-
-No puedo obligar a mi corazón de quien enamorarse…- dijo abrazando a Yami un poco mas fuerte- Por qué…hicieron eso?-Pregunto
-Teníamos que salvarte…Bakura, sabía que te amo, y sabe que sin ti… mi existencia no sería nada ya- Dijo besando los labios de Yugi
-Yami…lo siento…- dijo entre besos- vuelve….a hacerme tuyo, Yami- Dijo sonrojado y con ansias en su voz
-Pero…no puedo otra vez manchar tu cuerpo…no puedes caer en pecado…- Recargo su frente con la de Yugi
-Cometí, el pecado de enamórame de ti…- Dicho esto Yami, recostó a Yugi y volvieron a unir sus cuerpos, pero no se dieron cuenta que una sombra los miraba