Después de un buen par de horas Yesung comenzó a despertar, se enderezo y logro ver a Ryeowook que lo miraba sonriente.
-¿dormiste bien?-pregunto al mayor que se frotaba el ojo con una mano.
-si…-susurro con voz grave, tosió un poco y su tono de voz volvió a la normalidad, miro a Ryeowook y al comprender que había dormido sobre él, sus mejillas se tornaron rojas.
-¡oh!-recordó lo que había traído y tendió a Yesung sus zapatillas-me fije que saliste descalzo, ponte zapatos o te podrías enfermar.
-gracias Ryeowook-tomo el par de zapatillas y comenzó a colocárselas.
-te golpeaste la frente contra la mesa mientras bajabas a gatas del sillón ¿verdad?-pregunto y Yesung asintió, también había sentido el golpe pero lo ignoro, su prioridad en ese momento era salir del departamento.
-no fue nada grave-con su mano tanteo el lugar donde se había golpeado, tenía un pequeña marquita.
-de seguro te golpeaste con la orilla-tomo la bendita que había traído y la puso sobre la frente de Yesung, acariciándola con su dedo para que se pegara bien.
-gracias-dijo, sin dejar de mirar el rostro de Ryeowook.
-de nada-bajo la mirada, encontrando sus ojos con los profundos ojos de Yesung, esos ojos oscuros, su rostro empezó a acalorarse, esa mirada era tan penetrante…y cálida.
“Cuando vez los ojos de esa persona puedes sentir una gran calidez”
De la nada recordó esas palabras de su hyung, la mirada de Yesung… ¿era cálida?
-¿Qué hacemos?-consulto al menor, sacándolo de sus pensamientos.
-¿quieres salir?-pregunto Ryeowook apuntando la salida con su dedo.
-nos pueden reconocer las fans-se excuso, lamentando rechazar la petición del más bajo.
-lo dudo mucho, ya van a ser las 1 am-respondió, comprobando la hora en su móvil.
-vamos entonces-tomo la mano de Ryeowook y lo arrastro con cuidado hacia el departamento, entraron sigilosamente y tomaron algunas cosas, Ryeowook tomo una chaqueta y Yesung tomo un bolso.
-¿Qué traes ahí dentro?-pregunto Ryeowook apuntando el bolso del mayor cuando ya estuvieron fuera del departamento.
-sorpresa-sonrió al más bajo y lo tomo de la mano para obligarlo a bajar más rápido.
El corazón de Ryeowook dio un brinco al sentir la firme mano de Yesung tomar la suya.
“al tomar su mano tu corazón involuntariamente da un brinco”
No, claro que no, de seguro su corazón dio una salto por la sorpresa, si eso debía ser, su corazón dio un brinco por que el agarre del mayor lo sorprendió.
Corrieron escaleras abajo tomados de la mano, cuando llegaron a la entrada se dieron cuenta de que todo estaba desolado, el parque que Ryeowook observo en la tarde estaba completamente vacío y solo unos faroles le daban iluminación.
-esto es más hermoso de lo que podía ver a través de la ventana-comento Ryeowook, jalando de la mano de Yesung para que avanzara hacia el interior del parque.
Yesung se limito a observar sus manos que aun estaba unidas.
-¡oh! Mira Yesung hyung, el súper mercado está abierto-apunto con su dedo la tienda desde la cual aun se veía luz.
-¿tienes hambre?-pregunto al menor y este asintió apenado.
-ya que fui tu almohada por toda la tarde me salte la cena-comento con un pucherito que enterneció a Yesung.
-comamos algo entonces-soltó el agarre de la mano de Ryeowook para buscar dinero en sus bolsillo-no traje mi billetera.
-pero yo si traje la mía-el menor alzo su billetera y Yesung sonrió.