Narra Jonghyun
Esta noche estaba de locos, el ambiente era genial, las luces iban de aquí para allá con movimientos rápidos, Kai y yo sacábamos a bailar a cualquier chica que se nos pusiera en frente, eso sí, Kai sólo bailaba pues ya estaba casado, yo, yo si me permitía besos robados con ellas. Era una noche genial así que bebimos hasta casi perder la conciencia, pues traíamos carro y no queríamos causar un accidente, así que de los dos, yo fui el que bebió menos. Seguimos la fiesta hasta casi las cuatro de la mañana. Para ese entonces varias personas habían comenzado a irse, o a seguirle a la casa de alguien, o a curarse la borrachera de su vida. Kai se había ido pues Kyungsoo vino por él y sin siquiera decir adiós se fue…ya me imagino como le ha de ver ido al pobre ligón de Kai. Yo estaba comenzando a tener dolor de cabeza por el alcohol así que me acerque a la barra y pedí un Whiskey con miel a las rocas (se vierte sólo, con hielos en un vaso).
Me lo comencé a tomar, era deliciosa la manera en la que te quema la garganta y sobre todo cuando traes unas copitas de más.
-No sé qué hare con ese hombre.
De repente me dijo el barman
-¿Cuál hombre?
-Aquel, ha estado bebiendo desde las diez de la noche, fácil, ya lleva 6 botellas él sólo y no deja de pedir. No sé cómo lo voy a sacar de aquí.
-yo te ayudo.
-gracias, bro, te debo una.
El barman y yo éramos amigos, por tanto no me molestaba en lo más mínimo ayudarlo con aquel hombre que seguía bebiendo a pesar de que ya casi salía el sol. Me acerque hasta él, el chico, (sí, me di cuenta que tenía aproximadamente mi edad, no era tan grande como aparentaba), tenía una chamarra la cual le cubría la cara y estaba lleno de lágrimas, al parecer había estado llorando toda la noche.
-amigo, creo que es momento de que regreses a casa…
-No. Quiero se….seguir bebiendo hasta morir.
Sus palabras me impactaron. ¿Tan mal se sentía?
-Es que, soy un maldito hijo de puta que no merece vivir.
Terminando de decir esto volvió a llorar. ¿Qué podía hacer?
-¿Por qué no me cuentas que te tiene tan mal? A lo mejor desahogarte te servirá.
Volviendo a servirse otra copa de alcohol la cual se bebió de golpe y me dijo:
-Te voy a contar una historia, la razón por la cual no merezco vivir. Yo…le destroce la vida a la única persona que he amado en mi vida.
Tome asiento enfrente de él, la oscuridad nos envolvía a los dos, por lo cual, sólo lo podía oír hablar y tenía que esforzarme mucho pues por el alcohol la lengua se le trababa y me costaba trabajo poder entenderle. Comenzó a relatar:
Hace cuatro años, me enamore. Fue algo tan repentino que no sé decir cuando ocurrió, simplemente ya estaba ahí viéndolo desde lejos, y cuando podía aunque sea cruzar una palabra con él, era suficiente para mí; hasta que un día, mientras él trabajaba en el taller de su universidad, alguien le grito por la ventana, él se enojó, y le cerro la ventana en la cara, y después de eso, cuando volteo, estaba rojo, y sonreía. No lo quería creer, pero en un instante, la persona que amaba fue flechado por alguien más. Trabajaron juntos en una obra escolar, y al término de esta ya eran novios. La persona que me gustaba me fue arrebatada de repente. Quise esperar a que terminaran pero la manera en la que se veían…ellos no iban a terminar jamás. Y justo cuando estaba a punto de darme por vencido, una chica, una chica que jamás imagine pudiera manipular a las personas así, que era exnovia del que ahora estaba con el amor de mi vida, me propuso hacer un plan para sepáralos. En ese momento acepte, pues nada podía perder, al contrario, ganaría a mi amor de nuevo.
Esa historia la había escuchado en algún lado, lo sabía, ¿quién era este hombre? Volvió a dar otro trago, esta vez, directo de la botella y siguió relatando:
Así que un día, ella lo citó a él en su departamento, le invito una bebida, y lo que él no sabía era que esa bebida estaba alterada. Al instante cayó inconsciente. Entre ella y yo enviamos fotos comprometedoras de él, imágenes donde él salía en la cama con ella, besándola, y todo era una mentira, pues él estaba inconsciente, claro que no podía pasar, ese imbécil estaba demasiado enamorado de Kibum…
Mis ojos se abrieron de sobremanera, y una lágrima se deslizo por mi mejilla, jalé de inmediato la caucha que cubría aquella cabeza y al ver quién era, no me lo podía creer. Lo tome de la playera y lo alce dejándolo a mi altura:
-¡QUE MIERDA HICIERON CON ESAS FOTOS!!!
Woohyun estaba totalmente impactado, me atrevo a decir que hasta lo ebrio se le quitó al ver lo enojado que estaba.
-¡TE PREGUNTE QUE HICISTE, NO, QUE HICIERON CON ESAS FOTOS!!!
-Yo...!se las mandamos a Key, para que creyera que le habías sido infiel con Kristal! ¿Feliz? Entiéndelo Jonghyun, si no era mío, ¡NO IBA A SER TUYO!
Ni siquiera me lo pensé y le solté un puñetazo en la cara a Woohyun, quien se estrelló contra la mesa y las botellas que estaban sobre ella.
-jajaja ¿¡De qué te sirve golpearme ahora Jong?! De todas formas, Key jamás será tuyo.
Decía poniéndose de pie y en frente de mí.
-Él a estas horas está empacando para irse a París Jong, la historia se va a repetir…
Y volví a propinarle otro puñetazo en la cara.
-¡No si puedo evitarlo!
Y Salí disparado de ahí, no podía ser, ¡no! Ahora lo entiendo todo, por qué me dejó así de repente, su extraño comportamiento esa noche hace cuatro años y claro que tengo mucho que hablar con él y explicarle qué diablos fue lo que pasó. Piso el acelerador de mi carro lo más rápido que puedo, y si puedo saltarme semáforos, lo hago, no se puede volver a ir así de mi vida, y juro que si se va, soy capaz de recorrer Paris por lo que me quede de vida para dar con él, sólo espero que no sea tarde.