Al salir de clases, Tobirama y Tobi se dirigieron a su hogar, estaban decididos a saber que le pasaba tanto a Izuna como al pequeño Riku, el cual estaba sentado en su corral jugando. Aunque escucho la puerta abrirse y el efusivo saludo de su hermano, no les hizo caso.
- Hola hermanito -Riku lo ignoraba- ¿Qué pasa?
- Creo que lo sé -hablo Tobirama- Riku, ¿sabes que le pasa a papi?
El pequeño volteo levemente su cabecita pero luego volvió su atención a sus juguetes, el peli gris suspiro
- Escucha hijo, perdón por ignorarte pero si sabes algo…
- Vamos hermanito, di o balbucea algo
Riku les lanzo unos cubos de tela que tenía, luego estiro sus brazos para que su padre lo cargara, una vez que Tobirama lo cargo
- Ba… -señalando la escalera
- De acuerdo, por cierto, ¿e Izuna?
- Aquí estoy, estaba lavando la ropa -viendo al azabache- Tobi, te he dicho que siempre la pongas en el cesto de ropa
- Je, lo siento
- ¿A mí no me saludas?
- ¿Cómo te fue? -un poco tímido
- Bien, Izuna
- Preparare la comida -yendo a la cocina
- Ba…
- Está bien
Tobirama subió las escaleras seguido de Tobi, luego, el pequeño señalo el cuarto de sus padres al cual entraron, el peli gris lo dejo en la cama
- Bueno, ¿ahora en dónde?
Riku miro la cajonera y a Tobirama le extraño
- ¿Guardas algo ahí? -pregunto Tobi
- Solo algunas de mis corbatas y…
Entonces el peli gris hizo memoria, de inmediato abrió los cajones y confirmo lo que sospechaba, era donde había guardado los libros de Kakashi. Tobi se acercó curioso y al reconocer el libro
- Oto-san, ¿también lees eso?
- Claro que no, se los quite a Kakashi por… un asunto
- ¿Seguro que no los lees? -viéndolo pícaramente- según escuche esos libros son bastante eróticos pero muy buenos y no adivinas quien es el autor
- ¿Tu si?
- Si, el suegro de Madara-ojisan, Namikaze Jiraiya
- ¿Qué?
Tobirama no lo podía creer, así que conoció al autor desde el principio, luego miro a su bebé
- Riku, ¿tu sabias esto desde el principio?, pero no te puse atención, lo siento- el bebé sonrió y estiro sus brazos para que lo cargara
- ¿Y qué piensas hacer? -hablo Tobi- si oto-chan los vio… bueno, puede pensar que tú quieres
- Lo sé, debo aclarar esto primero y necesitare tu ayuda
- Cuenta conmigo -sonrió el azabache
- Ba
- No me he olvidado de ti -sonrió el peligris- gracias
Abajo, Izuna seguía pensando si debía o no decirle a Tobirama que había encontrado esos libros, no es que lo juzgara mal, había escuchado muy buenas críticas de Icha Icha Paradise, pero también que algunas parejas ponían en práctica algunas de sus escenas. El azabache suspiro, aun no estaba del todo seguro, si bien ya permitía que Tobirama lo tocara más hacer ese tipo de cosas lo ponía nervioso. En eso sonó el teléfono.
- ¿Hola?
- ¿Izuna?
- Madara, ¿Qué pasa?
- Eso es lo que quiero saber, ¿sucedió algo con el idiota de tu marido?
- ¿Por… porque lo dices?
- Esta mañana estaba peor de insoportable que de costumbre, ¿paso algo entre ustedes?
Izuna sabia el riesgo que corría si le decía a su hermano, pero aun así le conto lo pasaba, ya que Madara nunca recibía un no por respuesta, una vez que termino el relato
- ¿Hermano?
- ¡A ese lo mato, junto al idiota de Kakashi!
- Madara, cálmate, debe haber una explicación
- Izuna, espérame ahí
La llamada termino, Izuna se preocupó, sabía lo que venía pues Madara conocía el contenido de ese libro, cuando
- Oto-chan, Riku y yo iremos por un helado, ¿quieres uno?
- No, gracias pero aún no han comido
- Sí, pero de repente tengo antojo y Riku necesita salir
- De acuerdo, no se tarden
Izuna escucho como la puerta se cerró, poco después, Tobirama entro a la cocina
- Izuna, necesitamos hablar
- ¿De qué?
- Esto -mostrándole el libro
- Ah, bueno… si quieres leerlo adelante
- No es eso -acercándosele pero el azabache retrocedía- pensé que ya
- Discúlpame pero, se lo que trata, incluso leí un poco y…
- ¿Crees que quiero hacer lo que viene ahí? -Izuna no respondió -mírame -tomándolo de la barbilla- yo nunca te obligaría hacer algo que no quieres y esta cosa no es mía sino de Kakashi
- ¿Por qué lo tienes tú? -viéndolo extrañado
- Se los quite porque Iruka desea ser padre
- Sí, pero dijo que… -pensando- entonces
- Exacto, Kakashi se la pasa pegado a estas cosas así que le dije que no se los devolvería hasta que
- Entiendo -bajando su mirada- y lo siento -el peli gris sonrió
- Está bien, ¿puedo?
Izuna sonrió y abrazo a Tobirama, estaban a punto de darse un beso cuando
- ¡Aléjate de mi hermano!
- ¡Madara!
El azabache mayor derribo al peligris de un golpe lo hubiera pateado de no ser porque Minato lo detuvo e Izuna se puso delante de su esposo
- Minato, Izuna
- Hermano cálmate, fue un malentendido -viendo a su esposo- ¿estás bien?
- Si -sobándose la quijada- ¿Qué haces aquí Madara?, esto no te concierne
- Te dije que las cosas de mi hermano me conciernen, ¿Qué le hiciste?
- No le hice nada, por lo que veo -levantándose- ya sabes lo que paso. ¿Y sabes también quien escribió esos libros?
- Si, el pervertido de mi suegro
- ¿Lo sabias? - Minato lo miro extrañado
- Si, el mismo me lo dijo el día de mi “despedida” pero me dejo claro que solo lo escribe por diversión, según el obvio que no le creí a la vez que entendía porque Naru lo llama Ero-senin
- Si, ese apodo se lo dio cuando Naru tenía 10 años
- Eso no importa, Izuna
- Hermano -hablo el azabache menor- ya todo quedo aclarado, Tobirama me explico porque tiene esos libros
- ¿Tú también lo sabes? -pregunto el rubio
- ¿Saber qué Minato?
- Se los quite a Kakashi para que el e Iruka, bueno… tu sabes -respondió el peli gris
- Ya veo, ahora entiendo porque esta tan desganado, aun así, ¿Cuándo se los devolverás?, no quiero esas cosas y más cuando hay un bebé aquí, no quiero que…
- Ja, dilo por ti que tienes dos
Al ver que iban a empezar una discusión, Minato se llevó a Izuna fuera de la casa
- ¿No deberíamos estar ahí?
- Ya sabes cómo es tu hermano y tu esposo -sonriendo- ¿Y Riku y Tobi?
- Fueron por un helado, pero creo que Tobi quería dejarnos a solas para hablar
- Es un buen chico, Dei y Naru hacen lo mismo con Indra y Ashura cuando -sonrojándose
- Lo sé -sonrió Izuna- pero, me siento como tonto al pensar que Tobirama -suspiro- aunque hay veces que tal vez si quiere hacer cosas como las del libro de tu padre
- No lo creo, desde que lo aceptaste como tu novio y esposo y le diste a Riku, Tobirama está más que satisfecho. Él te ama como eres, un doncel amable y dulce
- Gracias, mi hermano esta igual al tener a un hombre maravilloso y comprensivo a su lado -en eso escucharon un jarrón romperse
- Volvamos antes de que destruyan la casa
- Si