Minato
Ese dia era como cualquier otro o eso se pensaba, ese dia, Ellen, B, Felly, Kary, Haydee, Mariy, Shami, Wendy, Sofu, 1827, estaban de arriba a abajo decorarando la vivienda. Tsunade no escatimo en gastos para festejar a Jiraiya, aunque no se le mereciera.
- No, Ellen, las flores blancas mas al centro; Felly, pon los manteles nuevos, Haydee no olvides preparar los diferentes tipos de té que traje
Como podían, los chicos de los ingeniaban para no confuindirse entra tanta orden de parte de su patrona, por otro lado, Jiraiya se encontraba en casa de su yerno con sus nietos
- ¿Dónde esta Indra? –descubriendose las manos- aquí esta, ahora, ¿Dónde esta Ashura?
Los bebés reian sin parar con su abuelo, Minato solo los observaba con una sonrisa
- ¿Y donde esta tu marido?
- En el centro, por un pastel que mamá encargo
- Tu madre si que no tiene remedio –suspiro- si quería darme un regalo, hubiera aceptado otra cosa
- ¿Y que cosa es?
- Bueno, hijo tu ya debes saberlo –moviendo sus manos*- algo como esto, una madura sabrosa con curvas asi, ¿entiendes? Y unos grandes no muy grandes, ya sabes de lo que hablo…
En eso Jiraiya yacia en el suelo con un chichon en la cabeza conrtesia de un muy sonrojado Minato, mientras Indra y Ashura lo miraban atento
- Hijo… pensé que me entenderías…
- Papá, hay niños enfrente de ti y agradece que fui yo y no Madara. No se como las chicas están a salvo de ti
- Si te contara, puede describirte a cada… -otro golpe
- ¡Ya basta papá!
Los bebés solo parpadeaban tratando de entender, cuando Indra imito el movimiento de manos que hizo su abuelo, mientras Ashura lo miraba atento para luego asentir. Mientras Minato regañaba a su padre, los bebés salieron al jardín. Cuando
- Ya volvimos, oto-chan, Indra, Ashura -entro Naruto- ¿Qué le paso al viejo pervertivo?
- Creo que lo se -aparecio Deidara
Ambos tenían una gota en la cabeza al ver a su abuelo golpeado, mientras Minato se sacudia las manos, en eso entro Madara
- ¿Qué paso aquí?
- Ma-Madara… recuerda esto… no hagas enojar a Minato nunca
El azabache no pudo evitar sentirse nervioso, al ver como quedo su suegro. Cuando
- Papi, ¿y mis hermanitos?
La voz de Naruto los hizo reaccionar al ver que todo estaba en silencio, cuando vieron la manta vacia
- ¡Mis bebés!
- ¡Indra, Ashura, ¿Dónde están?! -grito Madara
- ¡Bebés! -Naruto y Deidara
Buscaron dentro y fuera de la casa, pero los pequeños no estaban, Minato no pudo evitar sentirse culpable y para empeorar
- Chicos, ya esta todo -al ver al rubio llorar- mi bebé, ¿que paso? –viendo a Madara- ¿Qué fue lo que le hiciste?
- Abuela este no es el momento -intervino Deidara- Indra y Ashura desaparecieron
- ¿Qué?, ¿pero como? -en eso Minato les conto
- ¡¿Asi que todo es por su culpa?!, ¡digame, ¿Qué tiene que decir a su favor?!
Pero Jiraiya no podía hablar, debido a que Madara lo estrangulaba con fuerza, pero Tsunade
- Si no lo sueltas menos hablara
- Jum -soltando al peli gris
- Gracias querida
- De nada -su rostro sonriente cambia a uno terrorífico- ¿CÓMO SE TE OCURRIO DECIR ESO DELANTE DE TUS NIETOS- sarandeandolo de la ropa- DEBERIA MATARTE
Naruto y Deidara se colocaron detrás de Madara, los tres mostraban temor, al ver a la rubia tan furica, por otro lado, en un jardín; Ellen caminaba por casualidad en compañía de Haydee cuando vio a una anciana con dos pequeño
- Ellen
- ¿Si?
- ¿Qué no son?
Las chicas miraban a los bebés que vigilaban a una mujer algo mayor, quien parecía cortar algo, las chicas se acercaron
- Indra-chan, Ashura-kun –los llamo Ellen
Los pequeños al verlas sonrieron, al reconocerlas, las chicas se acercaron cuando la mujer se reincorporo
- Buenos días señora
- Buenos días, ¿estos bebés son suyos?
- No -respondio Haydee- son los nietos de nuestros patrones, ¿pero que hacen aquí?
- Eso mismo me pregunto yo, sali a cortar unas flores, cuando vi a estos pequeños en mi huerto como si buscaran algo y creo que lo hicieron
La mujer se los mostro y las chicas quedaron sorprendidas, en especial al ver que los niños la querían
- Lo sentimos -reverenciando- se la pagaremos
- Esta bien -sonriendo- esta mas que claro que la quieren para un regalo, ¿no es asi?- los bebés sonríen- pero es hora que vuelvan a casa o sus padres se preocuparan
- Con su permiso
- Adiós mis queridos
Por primera vez, Indra y Ashura movieron la mano en señal de despedida. En la casa Uchiha Namikaze, todos estaban reunidos
- Lo siento, madam, pero no los encontramos -respondio B
- Esta bien, chicos -sollozaba Minato- gracias
- Tranquilo amor -lo abrazaba Madara
- No puedo, mis bebés
- Ya llegamos
- Ellen, Haydee, ¿se puede saber donde…
Todos vieron como Tsunade callo, cuando
- ¡Indra!
- ¡Ashura!
Deidara y Naruto corrieron a abrazar a sus hermanos, quienes solo sonrieron y mas al ver a sus padres acercarse
- Indra, Ashura -lloro Minato- no me asusten asi
Los bebés miraban sorprendidos a su papi y mas al sentir que su papá los abrazaba con fuerza, cuando
- ¿Dónde los encontraron?
- A dos casas de aquí -respondio Haydee- tenían esto consigo
La joven entonces mostro lo que Indra y Ashura estaban buscando
- ¿Una sandia? -hablo Naruto- ¿nos preocuparon por ir por una fruta?
En eso, Indra de nuevo imito los movimientos de Jiraiya, en eso el anciano sonrio
- Ya veo, Indra y Ashura pensaron que quería una de esas, ¿verdad? -Ashura asintió- mis nietos, no era eso lo que quería, lo que yo quería era…
- YA BASTA
De nuevo Jiraiya yacia en el suelo con un gigantesco chichón cortesía de su esposa, sus nietos mayores y su yerno. Minato solo respiro aliviado, para abrazar a los pequeños quienes se acurrucaron en su regazo. Esa noche, en el patio de la casa que rentaron Tsunade y Jiraiya, había una gran fiesta.
Incluso sus chicos compartían y disfrutaban de la fiesta como de la sandía que los bebés habían llevado. En un pequeño descuido
- Indra, Ashura -se inclinó Jiraiya- les agradezco su intención, se ve que son los únicos que me ponen atención, pero aquí entre nosotros tres -acercándose al azabache- Ashura, esas medidas que mencione, recuérdalas bien para cuando encuentres una linda chi…
- ¿Qué usted no aprende? - Madara tenía a su suegro en el suelo con su pie en la espalda- vaya a pervertir a otros, pero no a mis hijos.
Madara, Fugaku e Izuna
El azabache mayor no quitaba su vista de la carretera, de vez en cuando miraba a su esposo y a sus hijos quienes dormían por un momento, el resto de los ocupantes, iba distraído con otras cosas
- ¿Seguro que no quieres que maneje, hermano?
- Estoy bien Fugaku
- De acuerdo
El mediano decidio no insistir mas, en otro vehiculo
- En serio, si no querias venir
- Solo lo hago por ti y nuestros hijos -respondio Tobirama- no por el idiota de tu hermano
Izuna solo suspiro para ver a Tobi y Riku quienes dormían en el asiento trasero, solo sonrio para ver de nuevo al frente. Finalmente llegaron a la villa Uchiha, donde llegaron a la que una vez fue la casa de su padre
- Pense que llegaríamos con el abuelo -comento Itachi
- Si, pero decidimos descansar -respondio Fugaku- mas por Indra, Ashura y Riku
- Ahora que somos mas, ¿Cómo nos repartimos? -pregunto Tobirama
- Los hijos se quedan conmigo -aparecio Naori
- ¿Cómo estas? -sonrio Izuna
- Bien, Madara me llamo y me pidió mi casa
- ¿A que se refiere con que los hijos nos quedamos con usted?
- Que tu Deidara, Naruto, Indra, Ashura, Itachi, Sasuke, Riku y tu, se quedaran con Naori, nosotros…
- ¡Perfecto! -sonrio Deidara
- Quédense una semana si quieren -lloro Naruto
- ¿Pero que les pasa, dobe?
- Creenos, no querras saberlo -respondio Deidara
- Creo que lo sé
Tobirama sonrio al darse cuenta de lo que querían decir, los hermanos Uchiha Namikaze. Esa noche
- ¿Qué raro?
- ¿Qué raro que Dei?
- Pensé que Indra lloraría por oto-san, pero, míralo
- Creo que ellos también los escuchan -sonrio Naruto- lo se, bueno, a dormir
Con Itachi y Sasuke
- Vaya, asi que Madara-ojisan aun
- Y no es el único –sonrio Itachi- te aseguro que papá también
- Olvidas a Izuna-ojisan
- Lo se Sasuke, pero te aseguro que la pasión de ellos dos, es mas suave que la nuestros padres y tios
Con Tobi y Riku, el azabache se acomodaba junto al peli plata, quien estaba atento a los movimientos del mayor. Una vez que este se acomodo en la cama
- Bien hermanito, a dormir
Riku solo bostezo para acomodarse en el pecho de su hermano, quien sonreía. En casa de Tajima, Itachi no se había equivocado. Madara y Minato, Fugaku y Mikoto, tenían sus noches de pasión. En cambio con Izuna y Tobirama
- Ahora entiendo a Deidara y Naruto
- No empieces amor -sonrio Izuna
- ¿Crees que nosotros somos asi?
- No -sonrio Izuna- o Tobi y Riku no dormirían
El peli gris solo sonrio para besar a su esposo, una vez que se coloco encima de él
- Pues, no me quedare atrás
- Tobirama
Al dia siguiente, Tobi por encargo de Naori acudió a una tienda a comprar leche, por su puesto, Riku iba con él.
- ¿No es bello este dia, hermanito?
Riku solo sonrio, su trayecto iba en calma, cuando
- Vaya, tu padre pudriéndose en prisión y tu paseándote con un bastardo
- A… Tomoe-san
- ¿Qué ya no me llamas abuela?
- No, si nos disculpas
- Asi que ese es el bastardo de Izuna, es una vergüenza junto con Lars
- No te permitiré que le hables asi a mi hermano
- ¿Hermano?, ¿vez a ese niño como tu hermano?, no me hagas reir Tobi. Ese niño solo tiene la sangre en común contigo, pero tu…
- También eres un Senju
La voz de Tobirama asusto a la mujer, quien solo sonrio
- Y el padre aparece
- Tobi, ¿ya fuiste por eso?
- No, papá
- Bien, vamos, Izuna y Minato necesitan algo para el dolor corporal
- Picaron, ¿que hicieron anoche?
- Callate y vamonos
Los tres se fueron ignorando a la mujer quien prácticamente tuvo que contener sus ganas. Horas después, en el cementerio familiar, todos rezaban por Tajima y Asami, contrario a lo que habian pensado, los pequeños estaban tranquilos. Aunque veian a los adultos con curiosidad, en especial la tumba, la cual tenia la foto de sus abuelos
- Ba
- ¿Que pasá Indra? - hablo Minato- él es tu abuelo Tajima, padre de tu papá
Riku y Ashura comenzaron a ver alternadamente a Madara e Izuna
- ¿Qué les pasa?
- Creo que les encontraron parecido con el abuelo -hablo Mikoto- y vienolos bien, si se parece, solo Fugaku se parece a Asami-sama
Eso hizo sonreir a los mayores a la vez que sintieron melancolía. Los tres hermanos se abrazaron por la espalda, era obvio que los extrañaban, pero sabían que nunca los habían dejado solos. En especial su padre.