No abrió los ojos del todo cuando despertó. Los dejó a la mitad. Con la vista borrosa. De lo adormilado que estaba no pudo entender dónde estaba. Pero sentía algo de frío en donde estaba apoyado. El fondo estaba de blanco. ¿Se había caído mientras dormía? Si eso debía ser. Eso solía pasar. Muy a menudo a decir verdad. Volvió a cerrar los ojos. No tenía fuerzas. Se sentía débil. Necesita más descanso. Uso sus brazos para apoyar su cabeza y se acurruco más en sí mismo. Ahora si se sentía mucho más a gusto. Unos golpes estaban entrando en sus oídos. No les hizo caso. Debían de ser los pájaros de nuevo. Quería dormir. Nada se lo evitaría. Pero ese sonido se repetía y repetía sin parar. Generalmente ellos no insistían tanto. Se aburrían a los pocos minutos. Al final término por hartarse. Desde su posición trató de reunir energías y abrió los ojos. Un poco más consiente de todo, sintió por primera vez el frío emergente del lugar de donde estaba acostado. Sus ojos lo vieron. Vieron el color blanco extendiéndose por toda la vista. No eran baldosas. Era un recto plano completamente en blanco. No tenía sombras por ninguna parte. No había objetos. No había diferencia entre el piso y la pared. Estaba solo. No había nada más. El sonido de los golpes cesó por un momento. Pero era tarde, ya estaba despierto. Nada lo haría dormir de nuevo. Se dispuso a levantarse para ver que ocurría. Con dificultad y pereza puso sus dos manos en el suelo para poder apoyarse. Se sentía extrañamente tranquilo. Y sus oídos oyeron ese sonido. Fue mucho más fuerte y estrepitoso que todos los anteriores juntos. Cuando estaba en posición de "seis patas", se volteó a ver dónde provenía el ruido. Lo hizo lentamente. Corto y perezoso. Cuando sus ojos se posaron en el lugar, se podría decir que se pusieron más pequeños por un instante. Su boca se abrió ligeramente y empezó a temblar. Al igual que la mayoría de su cuerpo. De una manera peculiar se logró sentar. Y otro golpe abrupto y fuerte se oyó. Pero ahora sabía la razón, Yami. Yami estaba golpeado a algo en su dirección. Estaba temblado algo aturdido. Se sobó la cabeza y negó. Retrocedió un poco más y empezó a correr no muy bien y de repente alzó la vista. Se detuvo en seco. Sus labios se movieron formando una pequeña "o" y luego esta se alargó tan sólo un poco. Sus rojizos orbes parecían que se iban a salir se sus espacios. Después parpadeó y se dispuso a correr de nuevo. Chocó otra vez. Se incorporó de una manera rápida y volvió a tirarse contra "La Pared Invisible". Y otra vez. Y otra. Y otra. Sólo paró cuando estaba más que exhausto, pero se negó a sentarse. Negaba y negaba. Estaba perdido. No la podía atravesar. No la podía romper. Parecía que lo único que quería era pasar al otro lado donde estaba Yugi. A este último simplemente se quedó quieto. No se movía siquiera. Tenía miedo, mucho miedo. Pero lo que sintió después fue un poco más allá. Le hizo tener pavor. Casi horror de toda la situación.
-Jaden...-Dijo apenas lo vio tirado el suelo. Por un momento dudo y creyó que era Haou. Pero por alguna razón sentía que era Jaden. No sabía por qué. Pero lo sentía. Abrió los ojos a tope. Pero no podía gritar. Quería pedir ayuda. Pero lo único que pudo salir de su boca fue: -Yami...
El sonido de una mano retumbando sobre la pared invisible hizo que su atención volviera sobre el de los ojos rojos. Se asustó más, un líquido rojizo espeso se deslizaba por la mano que no estaba apoyada en la "pared". Sus ojos, parecían completamente perdidos. No tenía expresión. Sólo estaba allí apoyado en esa posición. Con la mirada baja. Sin ningún otro movimiento aparte de su respiración agitada y exagerada. Hasta qué un ruido de una puerta abriendo le hizo subir su mirada y fruncir el ceño. Casi se podía decir que gruño.
Si lo que Yugi había sentido antes era miedo o pavor, ahora, el verdadero Horror se posó en su cuerpo. Haou. Él estaba detrás de esa puerta. Tenía dos acompañantes un hombre y una mujer con ojos azules cubiertos con una capucha.
-¿De qué te sorprendes tanto?-preguntó la chica con voz complemente neutral, mirándolo desde arriba sin casi expresión. No respondía, estaba paralizado. Completamente paralizado. Apenas si podía mover su cabeza. -Sabías que esto pasaría, ¿no? Híbrido.
-¿Q-Qu...?-intentó decir Yugi, pero fue interrumpido abruptamente.
-No te hagas el tonto, tú sabes de que hablamos. Pero si quieres seguir en esas por nosotros no hay problema, pero eso no te salvara la vida.-Siguió el chico. Seguía allí, mirándole, esperando a ver cómo sería su próximo movimiento.
-Y-Yo... N-No...-Intentaba hablar por todos los medios, pero el insistente golpeteo de Yami no le dejaba pensar con claridad, era como si quisiera que él se fuera de allí. Le inspiraba desesperación, miedo, impotencia. Era más que obvio de que algo malo pasaría...
-Basta ya de charlas. Mátenlo.-Dijo simple y llanamente Haou. Los ojos de Yugi se contrajeron del horror. No podía pensar en nada. Tenía la respiración agitada, el corazón acelerado y sus piernas latiendo.
-¡NO! ¡Yugi!-Gritó Yami mientras ponía una mano sobre la "pared". Se fue para atrás y se chocó. Hizo este proceso repudias veces hasta que un golpe simplemente lo mando para atrás tambaleante, allí calló. Negaba y negaba diciendo algo. Pero no podía entender que pasaba, pero algo le decía que tenía que ver con él.
-Todo esta listo. Procedan.-se oyó la voz de Haou. Yugi volteó a mirarlo. Vio que tenían un gran balde con un contenido aparentemente lácteo. Todo su cuerpo le rogaba a gritos que corriera. Pero no se movía en lo absoluto. Y entonces por un momento lo sintió, tenía esposas. No le dejaban reaccionar. No se movería de allí jamás. Su destino estaba sellado. No había nada más que hacer. Jaden estaba ría otro lado de la "pared" aparentemente inconsciente, Yami intento romper el vidrio dándose varios golpes en el proceso. No había nadie más. Estaba solo. Tal y como siempre lo había estado. La sustancia estaba a punto de caer encima de él. Los gritos de Yami se lograron oír pero a la lejanía, se volteó a verlo. Estaba llorando. Golpeando vanamente el vidrio. Negaba. Negaba. Y negaba. Aunque fuera lo más extraño del mundo, en ese momento se sintió feliz. Feliz porque sentía que al menos a alguien le agradaba. Al menos alguien se había hecho daño por él. Sería el final. Pero al menos sabía que había a alguien que le importaba. -Feliz ejecución.
-¡No!
-.-.-
Y despertó. Se súbito. En la cama. Tal y como había sido en la noche anterior. Se revisó todo el cuerpo. Estaba entero. No comprendió que fue lo que pasó. Todo pasó tan rápido. Todo pasó tal real. Todo se sintió. Fue algo muy confuso y difícil de creer. Negó. Eso no podía haber sido cierto. Era un... Sueño. Sí, eso... Un sueño. Una representación deformada de la realidad creada por su cerebro. O al menos eso era lo que entendía por "sueño". Suspiro. Necesitaba calmarse. Tal vez si iba al baño. Se mojaba. Tal vez, tan sólo tal vez, las cosas combinaran un poco. Después preguntaría de qué iba todo eso. Suspiro.
Se sentó con algo de torpeza en la cama. Se sobó un poco los ojos por puro instinto. Con un poco más de cuidado se levantó de la cama dirigiéndose al baño. Sin darse cuenta, dejó a un durmiente y calmado Yugi en la cama. Tuvo unos problemas con la perilla del baño por estar algo adormilado todavía. Sintió ganas de estirar se y así lo hizo, de pura intuición, pero lo hizo. Se estiró sintiéndose más alto de lo normal y como si fuera la cosa más normal del mundo se rasco por detrás de la nuca. Acto seguido abrió por fin la perilla y entro al baño. Desde un principio ignoro al espejo. Tal vez por lo cansado que aún estaba. Abrió el grifo y puso sus manos para recibir el agua del lava manos. [Espera un momento... ¿Cómo es que el...? (¡Shhhhhhh! ¡Calla! Ya se explicará) Pero... (¡Sh! >3<) *suspiro* Bien...] Cuando creyó que era momento se restregó el agua de las manos en la cara. Importándole poco que se mojará un poco la pijama. Ese dejó las manos en su cara. Como si no quisiera ver lo que sería en el espejo. Al final las quito de allí.
-¡Ah!-Chilló.
Estaba sorprendió y atemorizado. Pues claro, como no estarlo si estas en el cuerpo del alíen que conociste hace tan sólo unas horas.
[¡¿Qué?! No, espera... ¿Pero por qué...? (Jeje, te dije que te lo explicaría más adelante :3) Pero... Pero... Yo... ¡Cómo es posible que esto pase! Si apenas hace poco me dijiste que ellos iban a ir junto con Joey a un parque... Y que luego Yami se caía en... *le tapan la boca* (Shhh... >.<Uuu no reveles próximas tramas) *se quita la manos de la boca* pos como no decirlas, las tienes todas en esta libreta, *con una libreta en la mano* (Espera, ¡¿qué haces?! ¡No! *Se lanza a por la libreta) *leyendo* "Yugi debate en su cabeza sobre Yami"... Amm... "El planeta decide..." *se la arrebatan* ¡Oye! ¡Estaba leyéndola! (¡No puedes dar spoilers! Sería como decirles a todos que al final de la serie original Yami se va y Yugi llora por e... Ya dije el spoiler, ¿verdad?...*como la malo tapando su cara*) Jeje a mí no me afecta... (Pero a los que leen esto sí...) pos se joden :P (Tu te jodes porque no hay fruta hoy *se va caminado medio rápido*) Jaja si... Espera, ¡¿qué?! ¡Mi paga! ¡No te puedes ir sin haberme dado mi paga! *Corre detrás de ella*]