-[...] Tenemos los mejores maestros, hemos estado varios años consecutivos entre los mejores puestos del ranking en los últimos 10 años, sin duda será una buena institución para [...] - para Naruto toda la palabrería del director era totalmente inútil, no había razón para que el director le jurara que era una de las mejores escuelas, lo sabía de sobra, además de que incluso aunque a él no le gustara la escuela tenía que ir. Naruto dirigía su atención a todos los lugares a excepción del director.
El director era alto, con el cabello negro, largo como el de una mujer, sus ojos asemejaban los de un reptil, le daba mala espina a Naruto, no sólo era su aspecto sino también sus modos de acercarse mucho a él e invadir su espacio personal. No era algo que le causará precisamente seguridad pero no había nada que hacer.
El lujo era palpable, no cabía duda de que ese instituto era especialmente para los hijos de familias con gran renombre, el lugar estaba tan limpio que se podría comer incluso en el suelo, al rubio le parecía algo totalmente innecesario; las aulas pasaban esporádicamente frente a sus ojos en todas había una perfecta muestra de comportamiento, ni siquiera sonreían o hablaban entre ellos cuando estaba el profesor y todos perfectamente sentados con la espalda recta y tomando apuntes con clara muestra de saneamiento.
- Ha, veo que le interesa el comportamiento general del cuerpo estudiantil.
El rubio se sobresaltó un poco, cuando trato de girarse para encarar al director este estaba demasiado cerca, lo que hizo que volviera a su posición original observando a los estudiantes.
-Sí, es sorprendente el nivel de disciplina empleado. - cuando Naruto quería podía suprimir su muletilla y eso era útil en ocasiones como esta.
- Es simplemente el orden y las reglas impartidas en la escuela. - sin que el rubio lo notará el mayor se había acercado peligrosamente a él por la espalda, tomándolo de los hombros - Bien, aquí es tu clase, que te diviertas- dijo mientras se erguía y se alejaba.
Naruto sintió un escalofrío recorre su columna, no le gustaba ese tipo, para nada. Suspiro, levantó la mirada hacia un rótulo que anunciaba el aula 1-3, llamo a la puerta y esta no tardó en ser abierta por un profesor que tenía dos cicatrices cruzando su rostro, se podía notar a simple vista que era un profesor estricto.
- ¿Tu eres el alumno de transferencia? - su voz era grave, era el tipo de persona que te imaginas en un gimnasio, no impartiendo clases.
- Sí, lo soy.
- Bien, entra.
Naruto entró en el aula, pudo distinguir en uno de los asientos más alejados y junto a la ventana a cierto pelirrojo, este ni siquiera había notado su presencia todavía, estaba concentrado en un libro que tenía abierto encima de su pupitre, Naruto al principio se sintió un poco mal a causa de que aquel pelirrojo ni se dignara a verlo.
- Sólo di tu nombre y pasa a tomar asiento - le señaló el asiento enfrente del pelirrojo - no nos hagas perder más tiempo - Naruto se sintió levemente ofendido pero lo dejo pasar y dijo su nombre.
- Naruto Uzumaki, un gusto conocerlos a todos.- dijo mientras dirigía a sus compañeros de clase una cálida sonrisa. El pelirrojo levantó su mirada al instante de escuchar la voz del rubio.
Naruto pasó a tomar asiento después de eso, Gaara seguía cada uno de sus movimientos hasta que el rubio tomó asiento enfrente él, Naruto no pudo evitar sonrojarse por la sonrisa que le dirigía el Sabaku. Las clases pasaron con normalidad y a la hora del almuerzo sin previo aviso el pelirrojo lo tomo de la muñeca y lo guio hasta la terraza de la escuela, el rubio en ningún momento se resistió y dejo dócilmente que lo llevará hasta allí, en parte era la curiosidad del rubio por saber hacia dónde lo llevaría aquella extraña persona, no le tenía miedo, por alguna razón se sentía seguro, eso era algo que sólo había experimentado al lado de su Oni-chan. Gaara cerró la puerta una vez que salieron.
- ¿Qué pasa -ttebayo?
- Simplemente quería hablar contigo a solas Uzumaki - san.
- Puedes llamarme Naruto a secas.
- Hnm... ¿Qué te parece si te llamo Naru-chan?
- Creo que está bien - ttebayo.
- Bien, solo quería saber si querrías ir al cine el fin de semana próximo.
- ¿Por qué tan repentino? Apenas y nos conocemos - dattebayo.
- No creo que me vayas a violar ¿o sí? Naru - chan.
El rubio se sonrojó, era claro que él no haría algo así.
- Cl-claro que no voy a hacer algo como eso.
- Entonces no hay de que preocuparse, te veo en al final de clases para decirte los detalles.
El pelirrojo abrió la puerta y entró sin decir nada más, dejando al rubio muy confundido por su comportamiento, no era normal invitar a una persona al cine si tan sólo llevabas de conocerla unas horas y menos que dijera cosas como esas. No se sentía inseguro pero si muy extrañado con su comportamiento; suspiro y acto seguido entró a la escuela.
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Sasuke estaba en extremo aburrido, ciertamente sólo faltaban 10 minutos para salir de la universidad pero simplemente el ya no soportaba estar tanto tiempo rodeado de esas personas que no le quitaban ojo de encima y además se le ofrecían descaradamente, le sorprendía su propia repugnancia hacia tales comportamientos ya que era el quién hasta hace poco los recibía con total facilidad, no era normal.
El profesor se compadeció de sus estudiantes y los dejo salir, no sin antes dejarles un trabajo; Sasuke se levantó de su asiento y guardo sus cosas para partir en seguida, quería irse lo más pronto posible, salió disparado en cuanto tuvo todo en orden. Subió a su auto pero antes de poder poner el motor en marcha alguien llamó a la ventanilla.
-Sasuke -kun, ¿Hoy no nos vamos a divertir?
La chica era guapa, era pelirroja y tenía unos pechos enormes, solían frecuentarse; el Uchiha recordó de repente los planes que tenía antes de ir a tomar clases. Sonrió de medio lado.
- Casi lo había olvidado, súbete.
La chicha sonrió como una boba y subió al auto del azabache.
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Naruto estaba saliendo del edificio principal del instituto, no esperaba que Sasuke fuera por él, sintió un que alguien tiraba de su brazo, no tuvo tiempo de reaccionar antes que una voz familiar le susurrara en el oído.
- ¿Te olvidaste de que tenías que esperarme para darte los detalles?
- He... - Naruto se sonrojo al instante por la cercanía, podía sentir el calor corporal del otro a través de la ropa - sí, lo olvidé.
- Bien, no importa - dijo esto mientras rozaba levemente el lóbulo del rubio - ya no hay tiempo y te están esperando.
El pelirrojo soltó al rubio y este dirigió su mirada a la dirección en la que veía el pelirrojo, grande fue su sorpresa al ver a Sasuke recostado a un lado de su deportivo negro con una mirada de pocos amigos dirigida directamente a Gaara y este correspondía con una mirada de suficiencia que no hacía más que enfadar cada vez más al Uchiha, sin darse apenas cuenta todas las miradas de los alumnos estaban fijadas en aquel par, los murmuró no se hicieron esperar.
- Oye, ¿Qué estará pasando ahí?
- Parece que esos dos chicos están enojados el uno con el otro.
- Ese es Sabaku
- ¿"Ese" Sabaku?
- Sí, "ese" Sabaku
- ! ¡Vaya!, es la primera vez que lo veo.
- ¿Quién es el otro?
- No lo sé, es muy apuesto.
- Lo es.
La situación era demasiado tensa y los murmullos no ayudaban en mucho por no decir que lo hacían peor de lo que ya era; el rubio dirigió sus pasos hacia Sasuke y subió al auto, incitando en silencio a que el mayor hiciera lo mismo, Sasuke chasqueo la lengua y subió al auto.
Sasuke olía a perfume y tenía una ligera marca en el cuello que Naruto no supo identificar pero sabía que el olor a perfume era muestra de que el azabache había estado con alguien, sintió una punzada en el pecho, él había estado con alguien más un día después de que le hubiera besado y además era su primer beso. Naruto tenía ganas de llorar en ese instante pero no de tristeza sino de rabia, le parecía muy patético llorar de enojo, nunca le había gustado esa parte de él.
El azabache podía notar los ligeros temblores de rubio, no sabía que era lo que ocurría hasta que después de unos segundos en que por simple casualidad término viendo el chupetón y todo encajó, se sintió terrible por hacer tal cosa, el rubio está llorando por su culpa, no estaba seguro ya que este tenía la mirada puesta en la ventanilla pero lo podía notar por los temblores.
"Quizá ese haya sido su primer beso"
Sasuke odiaba ver a aquel rubio revoltoso en ese estado, le dolía pero esto lo resolvería en casa; piso el acelerador y en cuestión de minutos llegaron a la casa el rubio bajo rápidamente del auto querido escapar del azabache, este no hizo nada para detenerlo, quizá eso era lo mejor, que se alejarán.
El rubio ni siquiera salió en todo lo que quedaba del día de su habitación y el día siguiente cuando Sasuke despertó él ya se había ido al instituto.