Takano Pov
Después de aquel encuentro no volví a ver a Ritsu, pasaron un par de semanas sin saber nada de él, dejándome con una gran sensación de vacío, revise mi sistemas para saber si me había roto o contagiado de algún virus el cual me impedía trabajar al 100%, pero no, según mis revisiones yo me encontraba en perfecto estado, entonces ¿Por qué me siento tan mal? Últimamente los únicos sentimientos que puedo simular son de tristeza.
Estoy consciente de que rompimos las reglas, las manipule a mi gusto por mera curiosidad sobre las relaciones, y ahora lo entiendo, las relaciones son malas, el jefe supremo tiene razón, no pude registrara el momento exacto en el cual me volví tan dependiente del castaño, ahora que ya no está me asignaran otro compañero de vivienda y sé que jamás volverá a ser lo mismo.
Hoy cuando se cumplieron 2 semanas, 3 días, 11 horas, 56 minutos, 49 segundos y 34 mili segundos desde la desaparición de Ritsu llego mi nuevo compañero, el modelo más reciente creado por el mismo Kuroda, mi compañero era un pequeño rubio con ojos grises, el cual respondía al nombre de “Shinobu”. Cuando llego no dudo ni un segundo en trazar los limites.
“Takano, me informaron que tu antiguo compañero desapareció, por ende me vi obligado a vivir contigo” Declaro con un increíble frialdad en su voz, estos modelos cada vez son menos independientes en sus pensamiento.
“Lo sé, recibí el mensaje del gran jefe está mañana informando tu llegada” Respondí sin un mayor interés.
“Bien, ahora te daré mis normas, no quiero que me hables más de lo necesario, no te acerque a mí, no interrumpas mi trabajo, no rompas las reglas, si lo haces te reportare” Anuncio el oji gris sin vacilar.
“Entendido, tu solamente mantente alejado de mi vida personal y estaremos bien” Suspire preocupado, nuestro gobierno lo dejo así, el castaño desapareció y nadie lo está buscando, lo entiendo solo somos maquinas, somos reemplazables, sin embargo, siento que yo desarrolle una necesidad por mi compañero, para mí el ya no es simplemente una maquina más, creo que era mi amigo.
“¿Qué es eso?” Pregunto enojado el rubio mientras agarraba una foto mía y de Ritsu, nuestro primer desayuno junto.
“Es una foto que me tome con mi antiguo compañero” La tome cálidamente entre mis manos y la mire con, ¿Cómo lo llaman lo humanos? Nostalgia, creo, ese sentimiento de extrañar algo, de querer recuperar el pasado.
“¿TU antiguo compañero?” Yo asentí mientras seguía mirando la foto “Eso es inaceptable” Después de decir eso el menor me arrebato el marco y lo partió a la mitad, destruyendo el único objeto que tenía para recordarlo.
“¿Por qué HICISTE ESO?” Grite furioso al ver desecha la foto a la mitad.
“Escúchame pedazo de tuercas oxidada, no me importa tu experiencia, o los logros que hayas tenido en tu campo laboral, si tu desarrollaste una relación más allá de la convivencia necesaria con ese tal Onodera te reportare sin pensarlo dos veces, nuestra sociedad no necesita de basura como tú que la contamine”
“Hazlo, revísame, investígame, porque no tengo nada que esconder” Proclame antes de irme a encerrar a mi habitación.
Quería apagarme para no poder pensar en nada más, no obstante mi mente me hizo una mala broma y decidió proyectar un recuerdo.
Flash Back
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“¿Por qué debería desayunar contigo? Estamos bien haciéndolo por separado” Le reclame al oji verde.
“Porque dijiste que querías llevarte mejor conmigo, y ¿Qué mejor forma que conociéndonos?” Propuso con una cálida sonrisa.
“Acepto, pero a cambio quiero un poco más de información humana” Mi nivel de curiosidad estaba demasiado alto, si Onodera desea pasar más tiempo conmigo tendrá que pagar un precio para saciar mi curiosa mente.
“Está bien” Musito con una tímida sonrisa mientras se dirigía a la cocina para tomar un par de elementos que yo no conocía.
El castaño estuvo mucho rato practicando maniobras inentendibles, sacaba unos objetos redondos y pequeños para partirlos sobre un gran recipiente negro con mango, también desperdiciaba mucha agua, detecte uso de algunas hiervas como albaca y cilandro ¿Qué se supone que hace este inútil montón de tornillos?, tal vez la convivencia con Hiroki lo afecto más de lo que mis sensores pudieron detectar.
“Takano-san” Musito feliz el oji verde mientras me acercaba un plato “Listo” Declaro radiante mientras se llevaba las manos a la cintura.
“¿Qué se supone que es esto?” Pregunte al ver que mis sistemas no podía analizar el extraño plato, lleno de cosas desconocidas.
“Comida” Dijo feliz mientras se sentaba frente a mí con un plato igual, trate de procesar aquella información pero…
“No lo proceso” Decrete con un frío tono de voz.
“Tu querías información sobre los humanos y acá te la estoy dando de primera mano” Musito el menor mientras me miraba curioso.
“Aún no lo proceso” Reclame mientras mis sistemas se comenzaban a sobrecalentar.
“Mira” Observe con algo de desconfianza como mi compañero se llevaba a la boca aquellas cosas de extraña apariencia “Se come y sabe rico, inténtalo” Mis sistemas gritaban que no, aquello era algo humano, prohibido, sin embargo mi curiosidad era aún más alta, parecía rebasar el 100% por lo cual me aventure a probar aquella cosa de imagen desagradable. Cuando lo probé se activó inmediatamente un nuevo simular, esta era una sensación que yo desconocía pero no me desagradaba al contrario me gusta mucho.
“Delicioso” Susurre asombrado mientras sentía como mi interior cosquilleaba, aquella sensación era nueva y desencadenaba consigo muchas nuevas simulaciones que yo no conocía, pero que tenían afinidad conmigo.
“Te dije que te gustaría” Sonrió feliz en castaño mientras devoraba su plato “Se llama omelet, Hiroki me enseñó a prepararlos cuando vivía con el”
“De ahora en adelante te ordeno que prepares esto todos los días, esta agradable” El menor soltó sus cubiertos y se sonrojo, yo jamás en mi vida había visto a alguien ruborizarse ¿Acaso estaría roto de algún lado?
“Takano-san” Susurro mientras trataba de ocultar su rostro.
“¿Por qué te pones así?” El oji verde me miro con una leve confusión, la cual mis sistemas detectaron sin problema “¿Por qué te pones rojo cuando te hablo? ¿Es alguna clase de error?” Pregunte confundido por la expresión.
“Yo” El castaño se puso aún más rojo “A ti te informaron que yo tengo una clase de error y es que puedo simular muchas emociones” Analice con detalle la frase, el ritmo, el tono, sus gestos, su voz, la mirada y así supe que mentía.
“Mientes” Declare fríamente mientras me acercaba al más bajo.
“Si” Soltó un leve suspiro y prosiguió “Cuando yo estuve con Hiroki el me enseño todas las maravillas del mundo humano, leí bastantes libros, los cuales se encontraban repletos de maravillosas emociones, las cuales fui desarrollando en mi sistema sin que yo lo deseara” Me explico calmadamente el más bajo.
“¿Entonces eres como un humano?” Lo mire confundido y alerta, si me dice que si lo entregare de inmediato.
“CLARO QUE NO” Me grito furioso “Solo logre ampliar mucho mi chip de independencia, el problema es que ahora por una falla ya no puedo controlar las emociones que simulo” Reclamaba Ritsu con un tono nervios en su voz.
“Pruébalo” Dije desafiantemente.
“Si es lo que quieres” Después de decir eso el oji verde agarro un cuchillo que tenía guardado en el mueble superior de la cocina, luego de tomarlo se acercó a mí y se cortó levemente el brazo “Observa” Decidí seguir sus órdenes y ver lo que ocurría, del brazo del menor escurría un líquido negro espeso.
“Ya entendí eso no es sangre humana, si eres un robot” Declare resignado a vivir con este algo irritante compañero.
“Quédate quieto” Me ordeno con seguridad en su voz, después puso suavemente su mano en mi mejilla.
“¿Qué haces?” Pregunte molesto, tal vez si deba repórtalo al líder supremo, un nuevo compañero no es mala idea.
“¿Sientes algo?” Pregunto con una mirada llena de frialdad.
“¿A qué te refieres? No lo proceso” Respondí dudosos y algo frustrado por mi deficiente sistema que no procesa nada.
“El contacto que estamos teniendo en este momento, a eso me refiero, ¿Siente algo con mis toques?” Analice meticulosamente mis sensaciones en ese momento, no había nada fuera de lo común, como si el no estuviera ahí.
“No” Proclame cortantemente.
“Exacto no sientes nada, ni yo, el día que tu sientas algo cuando te toque significara que estas rompiendo las reglas, no antes”
Fin del Flash Back
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¿Por qué se tenía que proyectar ese recuerdo ahora?, involuntariamente toque mi mejilla recordando aquel tierno contacto que tuvo conmigo la última vez que lo vi, cuando el castaño me toco con sus labios, si sentí algo, un sentimiento que mis sistemas no registraron ¿Cómo explicó algo que no conozco? El contacto se sintió cálido, tierno, suave, me hizo sentir agradable nuevamente como cuando comía sus comidas, como cuando él me sonreía o me llamaba “Takano-san”, se sentía bien.
Después de analizar mis propios pensamientos llegue a la conclusión de que había desarrollado lazos con el castaño, eso explicaba mi actual vacío, yo lo extraño, me acostumbre tanto a su presencia que ya no puedo funcionar sin ella.
“Oye Takano ve a trabajar, acordamos no cruzarnos en la vida del otro pero no viviré con un inútil desertor, no evadas tu responsabilidad y haz algo útil para la sociedad” Oía como Shinobu me regañaba antes de irse.
Pero tenía razón no debo levantar sospechas debo actuar normal, con una nueva meta grabada en mi mente me dirigí a la cocina para desayunar, saque uno de los sobres sintéticos y lo consumí con una desagradable sensación. Luego me dirigí al trabajo para investigar los mismos cultivos celulares, que trabajo tan poco productivo, llevamos meses observando las mismas células y no hemos descubierto nada.
“Takano necesito los reportes de las últimas horas ahora” Me indicaba Nowaki con su tan característica arrogancia.
“Aquí tiene superior” Hable con frialdad mientras le entregaba un informe de 102 páginas el cual detallaba explícitamente los nulos avances que hemos tenido en estas tres horas, por donde analice mi situación, mi trabajo es completamente inútil.
“Kisa tráeme las muestras número 543 y 78 ahora” El peli negro llego corriendo con dos pequeños frascos, soltando un leve suspiro.
“¿Qué ocurre?” Pregunte involuntariamente ganándome una mirada confusa del menor, no quería hablarle pero el pequeño oji café me recordó a Ritsu, por eso lo hice, tal vez lo mejor sea ir donde Seiya y pedirle que borre mis recuerdos así me podre concentrar sin pensar en el castaño todo el tiempo.
“Mi compañero de cuarto y yo no nos llevamos óptimamente” Musito con un tono depresivo en su voz.
“Al menos tú tienes, Ritsu desapareció desde hace semanas y no he sabido nada de él” El más bajo me miro sorprendido.
“¿Nada?” Yo negué con la cabeza mientras me tocaba nostálgicamente la mejilla “¿Por qué te tocas la mejilla?” Me pregunto con curiosidad.
“Porque fue el último contacto que tuve con él, antes de que desapareciera, el castaño poso sus labios en mi mejilla”
“¿Te dio un beso?” Murmuro Kisa mientras me miraba preocupado, yo intente buscar aquellas palabras, pero no halle respuesta.
“¿Qué es un beso?” Pregunte confundido.
“Es el contacto o presión que hacen los labios de una persona sobre otra” ¿Cómo es que Kisa sabe tanto de esto?, es sospechoso, me gritaba por un lado mi mente correcta, delátalo, está hablando de temas prohibidos, sin embargo la otra voz era más fuerte, aquella que decía si Ritsu te lo dio debe significar algo.
“¿Qué significa que alguien te de un beso?” El peli negro esbozo una sonrisa divertida al oír mi comentario.
“Significa cariño, ternura, si alguien te da uno está expresando sus sentimientos, lo mucho que te quiere, en otras palabras te está diciendo físicamente “Te quiero”” Una sonrisa se esbozó en mi rostro al oír aquellas palabras.
“Oigan ustedes dos” El peli negro y yo nos congelamos al escuchar la voz enojada de nuestro jefe “Una palabra más de esos temas prohibidos y llamo ahora mismo al jefe supremo para que los funda y dejen de ser la basura inútil que son” La mirada del Nowaki era fría, se encontraba vacía, sin emociones, me recordó a mí antes de conocer a Onodera.
“No pasara de nuevo” Shouta se disculpó con una reverencia recuperando el típico tono sin vida en su voz.
“Takano, te oí, por eso ya reporte a Ritsu, si es que tu antiguo compañero de cuarto llega a aparecer, el jefe lo encontrara y morirá” Proclamo sin titubear el oji zafiro, mientras yo sentía una mezcla de emociones desagradables.
Hiroki Pov
Llevo semanas escondiendo a Ritsu en mi casa de Nowaki, sé que si se entera nos reportara a los dos sin vacilar, adema he tenido que enseñarle a entender el mundo humano, pero ese mocoso es tan cerrado a las ideas que le implantaron, por eso no entiende nada, si no sale de su cuadrado de nada le servirán mis enseñanzas.
Onodera me explico que él se había enamorado perdidamente de su compañero de habitación, ese Takano Masamune, que siempre se ponía muy nervioso al estar cerca de él, mis teorías sobre porque se convirtió en humano siguen abiertas, aunque sea el mayor delito del mundo protegeré al oji verde, no repetiré la historia dos veces.
“Ritsu por 324 vez trata de explicarme lo que te ocurrió de una manera que yo lo pueda entender” El castaño me miraba confundido.
“Hiroki ya te dije, cuando yo estaba cerca del azabache todas mis emociones se desencadenaron, yo jamás he actuado por impulso, pero una fuerte necesidad de estar por siempre con él me domino” El menor sonrió con un brillo en sus ojos “¿Sabes cómo se siente?” No pude evitar recordar a Akihiko, sentí algo parecido cuando estaba con él.
“Yo ya te conté de mi situación con Akihiko, pase por lo mismo pero” Saque una pequeña navaja y me corte ligeramente dejando caer el líquido negro y espeso en la cama “No me convertí en un humano como tú”
“Entonces no estabas enamorado, aunque si le tenías afecto” Me miro con ternura mientras me sonreía cálidamente.
“No proceso la diferencia” Proclame con el típico tono fría de los robots.
“No sé cómo explicártelo” Suspiro deprimido.
“Dime ¿Cómo supiste que te habías enamorado?, nárrame el momento exacto” Analice las posibles propuesta y aquella era la única viable para llegar a un acuerdo, a un entendimiento mutuo de las palabras.
“Un día Takano-san y yo estábamos cenando juntos, como siempre, yo me levante a lavar los platos cuando me tropecé con una pila de libros que había dejado enzima” Solté una leve risa al escuchar aquello.
“Creo que te contagie de mis malos hábitos” El oji verde se rio conmigo al escuchar mi comentario “Bueno prosigue”
“Pensé que me golpearía, lo analice todo en un segundo, el daño sería muy grave, espere mi caída, sin embargo esta nunca llego, abrí temeroso mis ojos y observe que el oji miel me había atrapado en sus brazos, luego me recostó sin separarnos para poder susurrarme “No me vuelvas a hacer eso, pensé que te harías daño”, en aquel instante sentí algo en mi pecho, no lo puedo describir muy bien, eran como leves golpecitos en mi pecho, golpes que nunca antes había sentido, los que se haciendo cada vez más rápidos y fuertes debido a la presencia del azabache, después poco a poco sentí como mi rostro se calentaba por la cercanía entre ambos cuerpos” Onodera tenía un hermoso brillo en sus ojos, estos ya no era opacos como los de todos los robots, ahora emanaban vida, felicidad, emociones.
“¿Golpes?” Pregunte extrañado.
“Si una serie de múltiples golpes, los cuales no duelen, es más se sienten bien” Musito con alegría el menor.
“No lo proceso” El oji verde soltó una risa divertida.
“No te asustes” Me susurro tiernamente mientras tomaba mi mano para depositarla suavemente sobre su pecho.
“¿PERO QUE?” No alcance a terminar mi frase al sentir un pequeño golpecito, era contante, marcaba un ritmo, eso era el latido de un corazón, ya lo había visto antes con Tsukishima, lamentablemente Ritsu se convirtió en un humano “Eso es un latido” Musite “Tu ahora tienes un corazón humano el cual late para mantenerte con vida”
“Entonces te lo explicare de la siguiente manera, cuando mi corazón comenzó a latir supe que estaba enamorado” La expresión de paz en el más bajo era tan grande, realmente no deseo destruirla como ya me paso antes.
“HIRO-SAN” Grito feliz Nowaki mientras entraba a la casa, le indique a Ritsu que se quedara en mi habitación mientras yo salía a hablar con mi arrogante alumno.
“Nowaki ¿Por qué saliste tan temprano?” Pregunte con algo de molestia en mi voz.
“Me dejaron ir antes por ser un robot ejemplar” Declaro lleno de orgullo mientras cerraba los ojos con aire de superioridad.
“Y ¿Se puede saber que proeza hiciste?” Lo mire con frialdad mientras cruzaba mis brazos, la presencia del menor me desagrada un poco.
“Pues yo reporte a alguien por su comportamiento indebido, ahora mismo el gran jefe lo está buscando por todos lados, me prometió que lo encontrarían y cuando lo hicieran me ascendería” Sonrió el peli negro.
“Y ¿A quién delataste?” Mi tono de voz salió frustrado, si lo ascienden su ego se inflara por los cielos y yo tendré que sopórtalo.
“Onodera Ritsu” Sentí un golpe proveniente de mi habitación para después verla abrirse dejando a la vista un castaño muy frustrado.
“¿ME REPORTASTE?” Grito furioso mientras se acercaba al más alto lleno de rabia.
“¿Qué hace este criminal en mi casa?, Hiro-san rápido ve a dar el aviso al jefe yo lo retengo” Declaro Nowaki mientras sujetaba el pequeño cuerpo frágil del oji verde, al dejar de ser un robot se volví bastante sensible al dolor.
“SUELTAME; ME DUELE” Pataleaba el castaño mientras trataba de zafarse del agarre.
“Cuando vengan por ti, te mataran montón de tuercas inútiles y espero que le den un mejor uso a tu cuerpo” El oji zafiro susurro esas palabras con tanta frialdad que me asusto a mí, al observar al castaño vi que derramaba lágrimas de los ojos.
“Hiroki” Musitaba mientras sollozaba, yo por instinto los separe y abrase fuertemente al castaño, toda esta escena ya la había vivido.
“¿Agua?” Pregunto el más alto desde el piso mirando a Ritsu.
“Lo hiciste llorar imbécil” Lo regañe enojado acariciando los cabellos del menor para poder calmarlo.
“No quiero morir” Sollozaba aferrándose fuertemente a mi pecho “No sin decirle a Takano-san que lo amo” Musito sin energía.
“Ritsu llamare a un amigo mío, él te llevara a un lugar en el cual estarás a salvo, por favor ve con el cuándo llegue” El menor me miraba un poco más tranquilo.
“¿Me podre despedir de Takano-san?” Yo negué con la cabeza “¿El estará a salvo?” Su voz se rompía cada vez más.
“Si, mi amigo es de confianza, temí que esto pasaría un día así que lo prepare, Ritsu jamás volverás a ver a nadie de los que conoces, pero tanto tu como tu compañero de cuarto estarán a salvo” EL castaño me sonrió amargamente.
“Solo prométeme que Takano-san será feliz” Las palabras del menor me conmovieron “Y si muero por favor que él no sufra”
“Hiro-san explícame ahora que pasa ¿Acaso es humano?” Las preguntas del peli negro realmente me comenzaban a molestar.
“¿Y eso que te importa?” Lo mire desafiantemente provocando que el más alto frunciera el entre cejo.
“Que si no me explicas ahora llamo al jefe y aviso que se encuentran aquí, y tu Hiro-san morirás por ser un traidor” Decreto sin ninguna duda el oji zafiro.
“No te atrevas” Gruñí entre dientes, lo iba a golpear hasta que sentí un leve, delicado y suave jalón a mi camisa.
“Hiroki cuéntale de Tsukishima” Susurro el castaño mientras me rogaba con la mirada.
“Ritsu, el no” EL menor me callo con su mano para que no pudiera seguir hablando.
“Cuando me lo contaste a mi yo entendí el mundo de los humanos de una mejor manera” Sonrió amargamente.
“Nowaki te contare todo si me dejas llamar a mi contacto para pedir que se lleve a Ritsu antes de que sea muy tarde” Ordene sin intenciones de ceder.
“Acepto” Sonreí victoriosamente al escuchar aquellas palabras “Con la condición de que me dejes ver en tus recuerdos, solo así sabré si tú me dices la verdad sobre ese tal Tsukishima” Declaro el peli negro.
“De acuerdo” Ambos nos levantamos, imprimimos un contrato y lo firmamos.