Capítulo único. Te diré que…
Voy a decirle a todos qué pasó el año pasado, cuando las hojas de los árboles caían en otoño así como tu corazón por él. Yo sé cómo es el sentimiento, yo sé que pudiste darlo todo por él… aún puedes, pero primero necesitas dejarlo ir. Yo sé que dolerá, lo sé, ¡diablos! Pero necesitas hacerlo, ¿por qué? Porque es la única manera en la que puedes tenerlo.
Todo esto empezó cuando lo viste sentado en la banca.
“Lindo”, pensaste. Dejaste ir un pequeño suspiro; te enamoras muy rápido.
“Su cabello, su apariencia, todo de él”, reí leve y sonreí contigo.
“Él es lindo”, pensé, puedo hacer eso, ¿verdad?
Él lucía amistoso, con sus pantalones entallados y su cabello no tan corto ni tan largo, era de color café obscuro, ¿cierto? La verdad es que ya no lo recuerdo muy bien; él nos sonrió y tu pequeño corazón saltó, tan extraño. Tu mente se dejó llevar por la sensación, por el sentimiento del momento, y el sentido común tomó un segundo lugar.
Lo sé, estoy diciendo más de lo que prometí, pero necesito decirle esto a alguien porque no puedo quedarme con esto en mi pecho, no más. Lo amo, ¿está bien? Lo amo más de lo que tú puedes amarlo, y estoy avergonzado por eso. Se supone que soy tu amigo, tu mejor amigo, y te fallé de la peor manera posible.
El invierno llegó rápido, la nieve caía suave en nuestras cabezas y hombros. Y lo miraste de nuevo.
“Tan hermoso”, dijiste lo demasiado alto que te escuché. Suprimí un pequeño suspiro y metí las manos en los bolsillos de mi chaqueta. Yo sonreí contigo cuando lo viste. Perfecto, él nos sonrió y puso una de sus manos en el aire a modo de saludo. Tus mejillas se tornaron rojas, pensé que eso había pasado porque el frío estaba demasiado… frío. Tú te enamoras tan profundo, así como yo.
Lo sé, lo sé, estás enojado conmigo, pero necesito decirte la verdad, toda la verdad. Soy optimista; puedo ser honesto cuando me lo propongo. Sólo… déjame terminar, ¿está bien? Gracias. Si puedes ser paciente, estaré muy agradecido contigo.
Era primavera; yo estaba a lado tuyo como los otros días. Lo vimos de nuevo.
“¿Acaso es el destino?”, su cabello estaba perfecto, su rostro sorprendido, y sus labios nunca se vieron tan provocadores como en esa ocasión. Se levantó y caminó hacia nosotros llevando consigo unas cuantas flores en sus manos.
“Son para ti”, dijo tan lento que podías tomar sus palabras del aire.
“Generoso”, dejé ir un pequeño suspiro. ¿Por qué esto se volvió tan difícil para mí?
No, no, por favor, no te vayas… Necesito terminar. Te digo esto porque eres mi amigo; la única persona que me ama verdaderamente. Así que déjame terminar, ¿sí? Después, puedes correr tan rápido como quieras, y puedes parar cuando ya no des para más.
Verano, qué días, ¿no crees? Era tan divertido, comiendo helado en cantidades exageradas y siendo como super stars con los lentes de sol. Pero esos días pueden ser los más dolorosos. Él se volvió tu novio, pero tan sólo por 3 semanas. Te enamoraste desde otoño; esperaste 3 estaciones por él. Lloraste toda la noche, yo estaba contigo; tu corazón se rompió en mil pedazos. Podría repararlo por ti, pero no me dejas.
Y sí, eso es todo. Yo me enamoré de él y pensé que tendría la mejor oportunidad de mi vida cuando rompiste con él, pero me di cuenta de que… me enamoré de ti.