Diecisieteavo capitulo: promesas……
-mmm…- Zakary despertó y se trató de mover y sintió que todo su cuerpo dolía- ¿Dónde estoy?- se tallo los ojos y miro veía borroso y una cara se asomó, la vista se empezó a aclarar y no le dio tiempo de identificar cuando unos labios asaltaron los suyos, perdiendo el aliento se separaron.
-estás conmigo peque- Zakary vio como el de pelo rubio lo abrazaba, con mucha fuerza sin llegar a lastimarlo.
-¿Jarred?- el de cabellos rubios asintió sin dejar de abrazarlo- te extrañe- Zakary rompió en llanto, todo el tiempo que recuerda estar atrapado, lo único que pensaba era salir de allí y ver a su rubio.
-yo también, te extrañe tanto que no sabes- dejo de abrazarlo, se acercó y le dio un beso en los labios.
-te ves cansado, duerme, ya me cuidaste demasiado-Zakary vio las ojeras de Jarred y el otro negó- es en serio, además si eres bueno tendrás una recompensa-Zakary se relamió los labios, Jarred después de negar mucho y decir que quería estar con él todo el tiempo, se rindió y le tomo por las manos.
-te prometo que vendré para quedarme contigo en la noche- se sonrieron y Zakary acepto con gusto esa promesa.
-que te vaya bien, te amo- dijo mientras Jarred iba a la puerta.
-te amo- susurro antes de irse, sino se iba ahorita nunca se iría, no sin Zakary.
Mientras tanto………..
-gatito… Omari- llego Lane entrando por la puerta del hospital.
-pasa Lane- dijo Carlo con una preciosa sonrisa y un leve sonrojo, su pelo estaba suelto.
-¡Lane!- Omari alzo sus bracitos para que Lane lo abrazara, desde que supo que era bombero, Omari se emocionó y decía que él quería ser bombero.
-pequeñito ¿Cómo estás?- dijo Lane abrazándolo y después pellizcando su cachete.
-muy bien… el doctor dice que mañana mismo puedo Irene del hospital- dijo con una sonrisa
-¡en serio! Estupendo, cuando te mejores vamos por un helado- Omari asintió con una enorme sonrisa.
-es un hecho, Lane me acompañas- dijo Carlo parándose con Lane, dejando a Omari viendo la tele.
-¿Qué paso gatito?- Lane lo miro dudando.
-pues… creo que ese plan no se podrá cumplir, hoy hablare con una tía si nos podemos quedar con ella en lo que soy mayor de edad- dijo Carlo desviando su mirada.
-pero…- Carlo vio que Lane entristecía- a fuerzas tienes que ir- Lane lo miro a los ojos.
-no, la verdad es nuestra tía más cercana y se enteró de la noticia… me hablo pero le dije que hoy le daba respuesta- Carlo desvió su mirada, esa penetrante mirada le ponía nervioso.
- era a lo que venía, rechaza de inmediato su propuesta, quiero cuidarlos, por favor.- Lane no podía mentir, se había encariñado con los gatitos.
-mmm…. Pero seriamos un gasto extra- el de pupilentes no quería ser una carga.
-no te preocupes, ser un bombero, hoy en día es de lujo- le sonrió
-gracias- Carlo estaba muy sentimental últimamente, todo iba tan rápido y todo su mundo estaba cambiando, empezó a llorar
-¿Qué pasa?- Lane se asustó, ahora que había hecho.
-solo que eres una gran persona y te quiero- Carlo lo abrazo por el cuello, en reacción Lane le agarro esa pequeña cadera.
-yo también- Lane no era de los que se expresaran pero por SU gatito haría cualquier cosa.
-qué bueno…- dijo con una sonrisa, sus labios acorazonados, rellenitos y muy lindos, le daban tentación a Lane sabía que no debía hacerlo pero esa tentación. Lane lo agarro más fuerte y lo empujo contra la pared, puso una pierna entre las piernas de Carlo y le lamio esas labios tentadores, con cuidado pero a la vez con pasión, le mordió el labio inferior y después lo beso lentamente, no le importaba que estuviera en medio de un pasillo que en cualquier momento pudiera pasar alguien; sus pensamientos solo eran tener esas labios contra los suyos, con cuidado fue metiéndose en la pequeña boca inexperta de SU gatito quien con dificultad seguía el ritmo, Lane se separó al ver como sus respiraciones se agitaron.
Su vista fue de un pequeño chico, con pocas lágrimas, que se habían detenido por el beso, en los ojos; sus labios un poco hinchados y con su respiración agitada, sonrojado…. Era una presa perfecta para violadores. Después de estarse mirando sin saber que decir, Lane reacciono.
-bueno, ¿entonces si te quedas?- pregunto con una sonrisa traviesa.
-eso sería genial- dijo Carlo sonrió y se puso de puntas para darle un beso en los labios- sería estupendo- susurro yéndose. ¿Qué había pasado? Ninguno de los dos sabía pero era algo que con el tiempo descubrirían.
Mientras tanto………
-Evolet, preciosa- decía Mark con un mandil, saliendo de la cocina- el pastel está listo, nunca había hecho uno pero se ve presentable- se dijo así mismo- que tal si llamamos a Brett para que lo pruebe y que nos diga cómo está el pastel de papa- le dijo a Evolet aunque esta no le entendía mucho solo reía con su sonaja.
: Tiii: tiii: tiii: tiii: tiiii: tiiiiiiii
-<bueno>- contesto desde la otra línea, con voz desinteresada
-<Brett, que bueno que respondes… Evolet y yo te invitamos a que pruebes…. A que comas con nosotros un pastel>- Mark escucho un ruido, juraría que sería como si se hubiera levantado rápido y hasta su voz mejoro.
-< ¿a…ahorita?>- pregunto sorprendido y con felicidad.
-<claro, te esperamos, no tardes>- dijo feliz.
-<tonto, ¿Cómo sabes que iré?>- pregunto como no queriendo
-<no lo sé, lo presiento y quiero que vengas>- Mark le dijo con voz sensual la última parte
-< lo pensare>- dijo mientras se le ponían los pelos de gallina.
-<sí o no>- dijo firme Mark
-<bien iré pero por Evolet, ¿queda claro?>- si no estuviera al teléfono seguro saldría huyendo.
-<clarísimo>- dijo y colgaron.
Mientras tanto….
-Zakary- dijo Jarred asomándose por la puerta y allí estaba su pequeño, dormido con la boca abierta, tan tierno, el sol ocultándose haciendo que la habitación del hospital se viera naranja, un tono que lo relajaba, se sentía tan bien, había dormido como bebe aunque le faltara su “osito” para dormir. Se acercó y le beso el cabello
-hola- Zakary había descansado y ya se veía mejor, se sentía mejor.
-peque, ya vine- dijo con una sonrisa.
-bienvenido- le sonrió – sabes, acaba de venir el doctor y una enfermera, me dijeron que estaba bien, que mis heridas estaban sanando. Ya quiero estar junto a ti, poder ser libre de estas 4 paredes- hizo un puchero adorable, uno que solo haría frente a Jarred.
-yo también, te extraño tanto. Mucho en alma y en cuerpo- le susurró al oído la última frase.
Los dos se miraron y sus caras quedaron casi juntas, sus narices se rozaban.
-mmm… en serio- empezaron a reír, en verdad se extrañaban y lo sabían.
-juro que nunca, nunca me separare de ti- le dijo besándolo lentamente…. Primero su cabello, bajando por su frente y ojos, su nariz y sus cachetes, luego sus labios lentamente, bajo por su barbilla y llego a su cuello besándolo lentamente…. Lo mordió despacio y después subió a su oreja para morderla sin lastimar, empezó a bajar suavemente y…
- disculpen, lo….siento- se disculpó una enfermera que había entrado.
-no, pase- dijo Zakary rojo de vergüenza, mientras que Jarred se sentaba en un sofá que había al lado de la camilla y se quedó mirando al horizonte.
-solo le traigo la cena, pique el botón y vendré por la charola o solo déjela a un lado y mañana pasan por ella- la enfermera salió.
-nos descubrieron- rio Zakary.
-nos interrumpieron- Jarred se hizo el indignado pero también soltó una risita.
-no te enojes, tenemos todos los días y las noches de toda la vida- Zakary mordió el sándwich que le había traído y Jarred espero a que acabara, viendo como comía y como se ponía nervioso cuando lo miraban directamente. Jarred espero al fin y al cabo él ya había cenado.
Zakary dejo la bandeja a un lado y pensó que había tardado, era mejor dejar descansar a la enfermera.
-Jarred, ven acuéstate a un lado- dijo el pelinegro, alzando la sabana de hospital para que allí se acostara.
-no voy a caber- no solo eso, no quería lastimarlo.
-claro que si ven- dijo con una sonrisa y Jarred suspiro, se quitó los zapatos y se acostó a un lado, pasando su brazo por detrás de la cabeza de Zakary y a su vez el ojimarron le agarro la mano y se pegó más a su pareja- porque suspiraste- Jarred le sonrió.
-porque no me puedo resistir a esa sonrisa- los dos sabían que estaban llegando a ser muy cursis.
Así estuvieron viendo la tele más de una hora y Zakary se voltio dejando ver su redondo trasero, que salvo la bata no tenía nada más. Jarred estaba siendo tentado, era como una deliciosa manzana que lo incitaba a pecar.
Lo abrazo por la cintura y mientras él se pegaba más a su pareja, la cual ya estaba dormida.
-“por dios Jarred esta lastimado y además es un hospital, aunque no sería mala idea, nunca lo hemos hecho en un hospital”- pensaba Jarred mientras lo imaginaba.
Sin pensarlo, sus manos empezaron a subir por encima de la bata del hospital y subieron a la altura de sus pezones, donde primero empezó a hacer círculos, haciendo unas cuantas cosquillas al cuerpo de Zakary quien se movió entre sueños. Después los pellizco mientras se mordía el labio inferior para después bajar solamente una mano y pasarla por debajo de la ligera tela, agarrando el miembro ajeno y lo empezó a acariciar.
-mmm…. Ah- se empezaron a escuchar leves gemidos de una linda boquita- ahh… ahh…. ¿Qué ahh… haces?- Zakary pregunto adormilado
-te consiento, mi lindo enfermito- dijo mientras pellizcaba un pezón y a la vez sus movimientos sobre el miembro ajeno aumentaban de intensidad.
-pero…ah… no se vale…. que yo solo…..mmm… disfrute- decía Zakary entre cortadamente.
-por hoy déjame consentirte, me debes una…. Además yo también disfruto viendo como gimes solamente para mí- lamio la oreja sensible del pequeño, su mano bajo por su caderas pasándose por sus nalgas donde busco su pequeña entrada, con cuidado metió un dedo haciendo gemir a Zakary, lo empezó a mover, estaba tan estrecha que se moría por meterse allí pero no podía, no quería lastimarlo más de lo que ya estaba….
Después de un rato metió otro dedo que lo movía en forma de tijeras, le mordió el cuello sin llegar hacer una marca aunque lo quisiera, Zakary se estaba retorciendo del placer y cuando llego al límite se corrió en la mano de Jarred quien se inclinó hacia él y le beso los labios. Y por fin se durmieron agarrados de la mano