Iba a ser un hermoso viaje sin preocupaciones, todo estaba normal, le había levantado temprano para ir al colegio, para su primer viaje con Decimo ahí y también con el friki de Beisball... pero eso era luego, luego de llegar al colegio se vio que ya había gente, y todavía no aparecía ellos,
- Que todavía no llegan?- mira dando por todos lados
- Oee Gokudera-san -llegando corriendo a donde estaba el peli plata -Hola- sonriendo de oreja a oreja
-tsk... hola - viendo que lo abrazaba-suéltame - zafándose del agarre
-que cruel- haciendo un puchero
a veces era demasiado antes que soltara una grosería o lo golpear aprecio el castaño, un poco agitado era de seguro que se había quedado dormido o Reborn le estaría molestando todavía, sin decir más subieron a los buses, para luego ir a los trenes que se dirigirán a Kyoto, los tres se sentaron, juntos y se pusieron a jugar cartas... todo normal, pero algo le inquietaba al el, pues su friki de beisball estaba más alegre de lo normal, pues desde que había recibido algo de ese maniaco de las peleas, estaba feliz y le lo averiguaría, primero intento preguntarle directamente pero no dijo nada, después al décimo y lo mismo él también quería saber, pues se quedaría con la duda... después de llegar a Kyoto, todos se formaron en grupos, se fueron al hotel, que era totalmente genial, y ellos tenía la exclusividad, y valía la pena por después de ese gran trauma, antes de entrarse encontraron con el moreno con cara los MORDERE A TODOS HASTA LA MUERTE... después de una rápida explicación sobre seguridad y de los ganadores, desapareció, aun se preguntaba que había visto decimo en el.... solo suspiro y se fueron a sus habitaciones que era magnifica como para ellos, después de arreglar sus cosas, descansaron tranquilamente para el día siguiente seguir con sus recorridos, pasando unos momento alegres entre risas, y otras cosa, viendo como el castaño hacia lo imposible para no olvidar lo que su tutor le dijo, también viendo como el pelinegro compraba cosa y el tampoco se quedaría atrás, así que fue de compras también, después de esos largos días y un poco agotadores, después de eso se fueron al último de las visitas que era el santuario fushimi inari-taishe, era un lugar magnifico, había un lugar donde poner tus deseos, sin esperar fueron a coger una pequeña tablas donde escribieron sus deseos, sin duda estaba algo indeciso que escribir en ese
-Gokudera que escribiste -acercándose con un poco de curiosidad
-aléjate...- separándose
-hmm.. y tu tsuna que escribiste -viendo como el menor se ponía rojo
- ... yo no se todavía - desviando su vista
- tan obvio ... nee Gokudera .. Déjame ver - acercándose peligrosamente
- déjame en paz- saliendo casi corriendo-
Y seguido del pelinegro dejando al castaño solo, lo persiguió hasta una capilla, donde no sabía dónde escapar de verdad que era insistente
- mierda - viendo su tabla
- nee Hayato, no corras tan rápido- cogiendo del brazo-a ver - volteándole para que lo vea de frente
- idiota, no me llames por mi nombre - desviando la vista... tapando su sonrojo son su flequillo- como sea tenemos que ir a ver al décimo- intentando zafarse
- hmmm... yo creo que no - volviendo abrazar,- porque no dejamos un poco de tiempo- llevando donde nadie pueda verlos, y lo apoyo en uno de los arbole, dejando sin forma de escapar
- mierda, idiota deja- no pudo terminar ya que unos labio estaba sobre ellos, intentando resistir, pero no pudo es como si estuvieran quitando el aire que necesita para respirar, dejando poco a poco dejando llevar, recibiendo un leve mordida haciendo que deje una pequeña abertura, sin esperar más el pelinegro ataco esa boca que lo hace enloquecer, saboreando poco a poco, subiendo de nivel, haciendo que el peli plata se aferra a su polo arrugándole un poco, hasta que el que el aire les falto, dejando un pequeño hilo de saliva uniéndose, el peli plata estaba totalmente agitado, sin decir más, empujo al azabache,
-será mejor buscar al décimo- saliendo corriendo
sin decir nada mas, siguió al peli plata encontrándose con el menor, un poco rojo, también dejando su tabla en un lugar totalmente apartado, el peli plata también hizo lo mismo, el también, después se reunieron todos, para regresar al hotel, sin antes pasar por el lugar de los recordatorios, viendo como el castaño y el pelinegro, ponía su vida en riesgo para conseguir sus cosas, ya dejando a ellos y regresar con vida, se dirigieron al hotel, ya después de la cena, decidieron ir a sus habitación a jugar, para luego ir a tomar un baño,
Todo estaba yendo bien con el juego hasta que dos persona aparecieron, de la nada haciendo que el décimo tirara sus cartas
-Hi..Hibari-san...- sorprendido al castaño
-ustedes Herbívoros son los último... -mirándoles -
- Kyo-san, con ellos todos están completos- marcándole en la lista
-hmm.. Que hacen?-mirando la atento el juego
- estamos jugando UNO... te gustaría unirte, estamos poniendo dulces como apuesta? –viendo que el pelinegro estaba ganando, el otro tenía solo uno y el castaño estaba sin nada
- ... esta bien, no me gusta perder- sentándose a lado de Tsuna
- tu también Kusakabe-san - el peinado raro también se sentó a lado de Yamamoto
-entonces comenzaremos de nuevo-
- ni crean que les dejare ganar - viendo a los recién llegados
volviendo a barajear y repartir, luego de una explicación rápida del juego, todos comenzaron a jugar, todo normal , hasta que el ambiente se volvió tenso, se podía ver que nadie quería perder, se ponía ver desde afuera la tensa aura, luego se enteraron que le perfecto estaba jugando, asi que nadie se metió, dejando pasar eso, el juego ya estaba por terminar los únicos que quedaban eran Hibari y Yamamoto, se podía ver la tensión, los dos tenían, la misma cantidad de dulces, nadie quería perder eso, hasta que ..
- mierda perdí y decimo también - viendo que ya había salido del juego - espero que ganes idiota- viendo el juego,
-mierda... mas 4 - mira dando el numero en la mesa
- gane....UNO- mostrando la última carta sonriendo con descaro-entonces dame lo que me pertenece -viendo que el pelinegro entregaba su bolsa de sus dulces-los cogió y los guardo en una sola bolsa
- mierda perdió
Pero se quedó sorprendí cuando vio que el dio lo recién llegado y ganador le daba al décimo, los dulces ganados y viendo que los recibía sin decir nada, solo ocultando su rostros, y saliendo dejando todos sorprendidos por lo que sucedió, sin decir más, el quería saber porque se portaba así, quería preguntar, pero el pelinegro le gano
- vamos Gokudera-san, vamos al osen... dicen que son divertidos - sacando a rastra de ahí
- Espera idiota - sacándole de la habitación- espero, - saliendo de su agarre - se puede saber qué te pasa?
- como te dije quiero ir al osen, dicen que son bonitos y relajantes por eso quería saber-sonriendo de lo más natural
- muérete, no quiero- intentando regresar a la habitación
- nee, no te pongas así, vamos- cogiendo del brazo y llevándole
así llegaron al osen, será bonito con vista al exterior, se podía ver el vapor saliendo, eso le sorprendió al peli plata que era la primera vez, que vía eso, sin decir más, se fueron a cambiarse, para su suerte era personal, es decir quien llega primero gana, y lo ocuparon, dejando sus yakutas en los almacenes, salieron afuera cada uno con su toallas en sus cintura sin esperar más Gokudera se metió dejando su toalla a lado, se podía sentir realmente bien, el agua caliente estaba relajando se sentía bien
- ves te dije que te haria bien- sonriéndole sentándose en frente de el- te dije que te relajaría
- hmmm... tenías razón friki- cerrando los ojos y dejando llevar por ese momento de tranquilidad, hasta que sintió como sus labios eran tocados y abriendo de golpe sus ojos viendo un pelinegro frente el - Que haces idi-no pudo terminar, sus labios se unieron, dejando al peli plata sonrojado e intentando terminar el beso,-idiota-
pero fue en vano fue perdiendo sus fuerzas, dejando llevar poco a poco, en busca de decir algo , pero en ese momento el aprovecho introduciendo sus lengua dentro de ese pequeña cavidad , saboreando poco a poco, después una de sus manos va descendían hasta su entrepierna, haciendo retorcerse y sacar más gemidos,
-Idi...idiota que haces?-ante los espasmos que tenia y apoyándose en la pared
-solo hacerte sentir bien - lamiendo su cuello seductoramente
-Idi ahh~-contrayéndose y sujetándose de sus hombros
el peli plata no podía aguantar mas, el placer que le estaba dando el pelinegro, masajeando de arriba y abajo, a veces deteniéndose en la punta masajeándolo, sus contracciones se hacía más presente, el azabache sin perder tiempo acelero, sacándole gemidos cada vez más sonoros, pero se detuvo, cogiendo la manos de peli plata acercándole a sus miembro ya duro
-Hazlo - susurrándole en sus oído- Hayato – lamiendo
-ah ?- más rojo que un tomate ,
el pelinegro, vio que el peli plata estaba rojo que lo vio adorable, pero se sorprendió que comenzara a masturbarlo, el pensaba que no iba hacerlo, y el también comenzó a masturbarlo lentamente, sacando gemidos de ambas partes, poco a poco casi llegando al orgasmo, el moreno sin más se acercó y beso con demanda saboreando y acallando algunos gemidos dentro de sus bocas
- ahhh hmmm ahhh~~- corriéndose los dos, apoyandose uno en la pared y encima de el con sus respiraciones entrecortadas, y el moreno no espero mas y volvio a besarlo, tenia algo en mente y lo iba hacer hasta el final, sin decir mas, acorralo al peliplata poniéndose entre sus piernas
- que ? haces idiota- intentando alejarse ya sabía lo que tenía en mente- jodete imbécil friki de beisbol
-shhh hayato- sonriéndole lujuriosamente
sin decir mas el moreno introdujo un dedo dentro de esa pequeño agujero, haciendo que se contraiga, sacándole un gran gemido de inconformidad, después fueron dos haciendo movientes en forma de circulo y de tijera, y finalmente los tres dedos, simulando pequeña embestidas, llegando a tu punto orégano, sacándole un sonoro gemido, haciendo que sonría lujuriosamente y relamiéndose los labios, la imagen, delante de el era solo para el, y únicamente de él, lo dejara que nadie lo viera, un peli plata totalmente sonrojado, respiración entre cortada y un poco de saliva saliendo de su boca, ya viendo que este bien lubricado, sacando sus dedos, después acomodándose entre sus pierna, sujetando fuertemente sus pierna levantándolas un poco, viendo el pequeña entrada, relamiéndose los labios, dirige su miembro necesitado a ese lugar y de una solo embestida entra dentro del peli plata sacándole un sonoro gemido, haciendo que se contraiga, apretando, haciendo gruñir de placer
- mie..erda... se siente bien
- tu.. idi ah ah - un poco lloroso, no iba aceptar que también sentía lujuria en ese momento
- shh ... no quieres que nos escuchen verdad - susurrándole cerca y después morder su oído ,
- tu idio ah, lo tenías plateado - sujetándose de sus hombros y dejando una pequeñas marcas de sus uñas
-... sin comentarios - volviendo a besar, comenzando pequeñas embestidas, después comenzó a ser más rápidas, sacando gemidos cada vez más fuertes hasta que toco ese punto que hizo que se volviera estrecho, y mas placentero al moreno que sin falta comenzó a ser más rudo y sacando varios espasmos y contracciones, el peli plata sujeto fuertemente de la espalda del moreno, sin decir más, se volvieron a unir un beso lujurioso y hambriento, viendo como el agua del osen se movía y salpicaba, demostrando el amor que solo ellos podían darse
- ahh hmm... yo no - ya no podía aguantar mas
-ahh Hayato.. hmmm- volviéndose a besar
-ahhh ~~ me veng ahh ~-
Corriendo al mismo tiempo, hayato entre los dos y el moreno se corrió dentro de él, intentando regular su respiración, se dio cuenta que el peliplata, se había quedado más tranquilo de lo normal, levantando su mirada, encontrándose con un inconsciente y sonrojado peli plata,
-Hayato-chan~, está bien-sacándole del Osen
-idi...idiota - quedando inconsciente en los brazos del alto
-mierda, cuando se levante me matara- pues solo le quedaba sonreír
sin decir más, cargo en forma de princesa, llevándole a sus habitación, encontrando un peli marrón, perdido en sus pensamientos, de verdad se podía ver en todo su cara escrita AMOR, se rio internamente, se dio cuenta que el menor, había regresado a la normalidad preguntando qué había pasado, diciendo que por mucho tiempo estaba en el agua le había hecho daño.
Después de ese accidente, todos fue normal, el peli plata no se levantó hasta muy tarde, y sin encontrase al menor, casi sale a su búsqueda pero fue detenido por el moreno, y diciendo que lo deje y volvieron a dormir, pero esta vez juntos, dejando todo el problema olvidado, al día siguiente todos se alistaron para volver, sin decir nada lo que había pasado en la última noche, todo fue normal en el regreso, después de todo había sido un hermoso viaje...