Intento de Huida.
Misaki pov
Cinco días, cinco largos y tediosos días soportando la mirada de Usagi y Takano sobre mi nuca cada vez que pasaba junto a ellos, era insoportable cargar con esas miradas todo el día todos los días y para completar mi martiriosa semana, Ritsu aparecía en la ventana lleno de moretones por las peleas que tenía con esas bandas de otra escuela ganándose "seguidores " que hasta a mí me molestan, una vez para cerciorarse de mis intenciones con Ritsu me siguieron e interrogaron ganándose no respuestas, si no puños, hasta dudaron que era Seme... Bueno mi olor me delataba, hasta en la escuela tuve que repartir puños para desmentir esos rumores... Que no eran tan falsos al fin y al cabo
Takano me observaba con melancolía y era contagioso, ya estaba acostumbrado a su compañía en la casa y cocina, sus chistes doble sentido y como al mencionar a mi hermano se sonrojada levemente, ¿En qué momento cambio? ¿Por qué lo engaño? Sinceramente no encuentro las respuestas para justificarlo, cuando lo golpee me sentí mal y fue mucho peor cuando vi el rostro de Usagi por mi actitud...
Usagi san... Es una historia aparte, me sentía sumamente triste no tenerlo entre mis brazos, no tener ese roce descarado que me daba, esas nalgadas que me enviaban corrientes eléctricas por el cuerpo, su aliento en mi cuello, sus frías manos, como posaba sus manos en mi cintura... Ay me dará un derrame nasal. La diferencia de ellos dos es que Usagi me buscaba y hallaba mientras que Ritsu si sabía cómo esconderse de Takano quien veía por el instituto buscarlo como perro a su dueño, era una escena graciosa pero todo ese show de comedia desapareció al quinto día donde esos dos atacaron sin remordimiento
Al levantarme, como siempre Ritsu se iba por la ventana para no toparse con mis reprimendas, llegaba tan tarde en las noches provocando mi despertar junto a mi ansiedad por ver sus múltiples golpes que aumentaban progresivamente, lo curaba y dormía como un muerto, un sueño completamente profundo. Yo encontraba el mio y trataba de levantarme antes que él, me era imposible. Esa ansiedad se posaba en mi cada vez más y el deseo de abofetearlo para que cayera en la realidad iba aumentando pero tampoco daba un buen ejemplo al ocultarme de Usagi en casa y clases, aunque era imposible que no me encontrase en el club, allí era mi punto débil a la hora de jugar a las escondidas. Mis chicos los corrían del lugar y no le permitían acercarse por mr ordenes mientras que Shinobu y Hiroki no apoyaban mi actitud
-Misaki, ¿No te da lástima Usami? - pregunto Shinobu recargado de la pared, Hiroki se encontraba mirando hacia fuera a través de la ventana
-No- respondí escribiendo unas notas de los posibles nuevos aspirantes
-Vamos Misaki, ese idiota lleva una semana detrás de ti- abrí una lata de Coca Cola ignorando las palabras de Hiroki quien frunció el ceño más hacia mi
-Si quieren Coca Cola hay en el refrigera
-¡Misaki! - el grito de Usagi me interrumpió e hizo que me atragantara con la bebida - Voy a moler a golpes a tus gorilas si no me dejas pasar
-Vaya, Suena muy serio - Shinobu fue junto a Hiroki quienes esperaban que se cumpliera la amenaza
-Amigo, Usami es endemoniadamente fuerte, va a Joder a los chicos- masajee mis sienes, estaba agotado, las clases habían finalizado dando paso a las vacaciones de primavera. El rumor de la pelea de Ritsu llego a mis oídos, aunque no creo que salga mal herido, ese Yokosawa tiene influencias, tengo un mal presentimiento
Un silbido me saco de mis pensamientos, provenía de Shinobu quien no despegaba su rostro del vidrio
-Misaki, esos chicos van a acabar muy mal
-¡Ahhhhh! Está bien- me levante de un salto empujando la silla violentamente, los chicos me miraron con una sonrisa y me sonroje levemente, tome mi mochila y coloque mi gorra mientras guardaba mi cola. Baje las escalera rápidamente logrando escuchar los golpes y quejidos de mis subordinados, abrí la puerta y la pelea paro en seco
-Qué vergüenza - Usagi soltó a uno de los chicos, lo tenía bien sujeto del cuello de la camisa pero al verme no tenía motivos para seguir con esto. Pase en medio de todos ellos. Usagi apenas tenía unos rasguños y el cabello alborotado, la mayoría de mis chicos estaban en el suelo y, cada paso que daban me olfateaban provocando la ira en Usagi la cual disimulo pero lo conocía tanto que hasta esos pequeños gestos los descifraba excepto sus ojos, de vez en cuando sus ojos eran un mar de misterios los cuales me volvían loco por no saber la verdad. Ahora ellos me mostraban la alegría que sintió al verme, por un momento abrió los brazos esperando que corriera hacia ellos y me reí ante esa absurda idea. Al estar lo suficientemente cerca tome su corbata y, con una sonrisa petulante lo jale
-Vamonos - susurre en su oído viendo cómo se estremecía - Espero verlos el primer día de clases aquí a primera hora. Felices fiestas- dije con voz firme volteando, todos estaban en el suelo golpeados y conmocionados por lo que acababa de hacer. Me lleve a Usagi aún sosteniéndolo de la corbata, al ser más bajo que él, Usagi venía agachado sin quejarse. Llegamos a la salida trasera del instituto y lo solté para encararlo, no había ni un alma por los alrededores haciendo esto más sencillo
Nos miramos en silencio, notaba la tensión que tenía al tenerlo frente a mí después de todo lo que ocurrió, nos encontrábamos en clases y me buscaba en el club pero lograba escabullirme antes que me detectará, mi olor no era de ayuda, el hecho que oliera a fresas me enojaba porque es una fragancia extraña y más empalagosas que los demás y, no sólo el mio invadía el instituto, también un olor a frutas que opacaba el mio pero ese Uke lo hacía a propósito, lanzaba ese aroma para que todos los Semes cayeran a sus pies, asqueroso
Notando como Usagi me miraba intensamente y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, la sensación de culpabilidad que apenas me dejaba dormir volvía a mí y en un momento así, trate de serenarme para no mostrar la tristeza que carcomía mi alma en muchos sentidos. Alce mi mirada, no había notado que miraba el suelo en vez de sus ojos
-¿Qué pasa, Usami?
-¿Qué hice? - contraatacó mi pregunta tomándome desprevenido - ¿Qué hice para que te enojaras así conmigo?
Ni yo mismo sabía porque lo evitaba... No era por la situación de Ritsu y Takano, es su relación, no es nuestro problema que hagan ellos ni que pase con ellos, es su problema la verdad no sé lo que sucede. A la vez quiero estar junto a él, lo deseo y necesito pero me da temor entregarme 100% a él, le estaría entregando todo el poder para destruirme desde adentro lo cual es peor, admito que siento cierta atracción hacia Usagi, una muy fuerte y si esto continúa mis temores se cumplirán
-Nada- logre decir luego de un intercambio de miradas - Es solo cosa mía
No espere la reacción de Usagi, empezó a reír sonoramente ante mi respuesta y poco a poco se fue acercando a mi esperando que no lo notará, retrocedí algunos paso pero fue un error, la pared me tomo desprevenido y choque mi espalda contra ella, Usagi al notarlo paro de reir y se enderezó
-Bueno, es cosa mía si quiero abrazarte- me abrazo antes que me moviera, su olor invadió mis fosas nasales y me estremecí al sentirlo nuevamente cerca de mi después de tanto tiempo, su calor era reconfortante junto a su olor, sus brazos me brindaban esa protección que siempre desee desde la muerte de mi padre, no es que lo compare con mi padre, pero Usagi emana ese calor lleno de cariño, amor, protección y otras cosas difíciles de decir
-Suéltame - logre articular luego de percatarme como le correspondía al abrazo
-¿Por qué? Si ambos deseamos estar así, en los brazos del otro- Dios mío este hombre me va a matar. Mis latidos se intensificaron junto a mi gradual sonrojo
-¿Es que no lo entiendes? - dije alterado notando como mi olor a fresas aumentaba pero Usagi no se inmutó
-No, no lo entiendo- dijo esta vez colocando sus manos en mis hombros colocándome contra la pared, su mirada seria, su porte de prepotencia y enojo emergieron y, por un momento las lágrimas amenazaron con salir de mis ojos pero los cerré para despejarlas y funcionó - Estoy esperando la respuesta - me derrumbó, derrumbó todas mis barreras con su sola presencia, no podía seguir huyendo como un tonto, debía enfrentarlo con la cabeza en algo aunque, es difícil con este hombre con una personalidad tan fuerte pero amable conmigo
-Siento... Siento que si te entrego todo mi ser, tendrás todas las armas para destruirme...
Él suspiro, fue un suspiro largo y a la vez lleno de compresión
-¿Aún ni te has dado cuenta? - me soltó y me mostró una gran sonrisa con sus ojos llenos de humor ante mis palabras, ¿Le parecía gracioso? ¿Le parecía gracioso mis temores? Me costó demasiado contárselo como para que su respuesta sea de burla, Maldición. Me cruce de brazos y fruncí el ceño en su dirección, el noto mi cambio de humor y trato de arreglarlo todo- No me estoy burlando, solamente me da gracia que no te hayas dando cuenta- baje mis brazos y alce una ceja confundido - Yo te entregue todo de mi, tu puedes destruirme con facilidad y eso es lo que haces ahora
MI rostro se enrojecio, yo estaba haciendo lo que no quería que él me hiciera, verdaderamente puedo llegar a ser un idiota cuando me lo propongo. Entonces si él me entrega su corazón, ¿Por qué yo no entregarle el mío? Mordí mi labio inferior tratando de calmar mi orgullo ante su mirada llena de ternura, extendió sus brazos sin tocarme, sonreí por su acción y salte hacia ellos posándolos detrás de su cuello mientras pose mi cabeza en su hombro
-Lo siento - susurre sonrojado por nuestras cercanía, no sabía muy bien si los latidos que se escuchaban eran suyos o míos
-Tranquilo, solamente, no te vuelvas a apartar de mi - tomo mi mentón y lo elevó para que lo mirara a los ojos y, nuevamente me perdí en ese mar de color lila. Acercó sus labios a los míos sintiéndome bien nuevamente, es como si hubiese perdido algo importante y lo recuperará con solo esa acción llena de amor, acaricie sus cabellos con mis dedos mientras profundizaba el beso, con sus manos viajo hasta mi espalda y comenzó a acariciarla y me estremecí al sentirlas sobre mi pecho, ahora su boca viajo a mi garganta enviando un escalofrío por mi cuerpo
-U... Usagi-san... Para- mordió mi cuello y me imagine que tendría un moretón, bajo sus manos nuevamente y saco mi camisa del pantalón para luego introducir sus manos
-No puedo- dijo y empezó a besarme nuevamente - Hueles... Muy bien - oh mierda, lo sabía. Me elevó tomándome de los muslos e hizo que enrollara mis piernas en su cintura sintiendo su notable erección enviando un escalofrío por todo mi cuerpo - Misaki... - soltó un ronco gemido en mi oído - Te necesito
Solté un pequeño gemido, hasta sus palabras me calentaban y volvían loco, me acerque a su oído y con mucha vergüenza admití mi deseo hacia él
-Esta bien pero, aquí no- de la nada me bajo y tomó mi mano sin mirarme, su flequillo no me dejaba ver sus ojos- ¿Usagi-san? - corrimos al estacionamiento de la escuela el cual estaba desierto, solo un Convertible Rojo se asomaba bajo la sombra de un árbol, me llevo hasta él y saco unas llaves encendiendo el vehículo- ¿¡Es tuyo?! - pregunte impresionado, volteo a verme y esbozo una sonrisa risueña, sus ojos brillaban con emoción, parecía un niño recibiendo su dulce favorito
-Es de ambos, todo lo mío es tuyo - me beso nuevamente y abrió la puerta del coche, me sentó con delicadeza separando nuestros labios, relamí los míos inconscientemente provocando un sonrojo de su parte. Tomo una palanca y la movió hacia atrás enviándome de golpe hacia atrás quedando recostado en el asiento, Usagi entro sentándose sobre mí y cerró la puerta tras él se quitó la corbata y lanzó a un lado del coche, desabrocho algunos botones mientras buscaba unos condones sacando tres de ellos provocando que mi piel se tornará pálida
-Usagi... San... Solo usarás uno, ¿Verdad?
Esbozo una sonrisa de satisfacción mientras besaba mi frente
-Nop
Usagi pov (nota de la autora: ya le tocaba xD)
El rostro escarlata de Misaki me lleno de satisfacción con solo verlo, mis palabras lo habían dejado aturdida pero es el momento de desquitarme, ha pasado mucho tiempo desde que quiero tocarlo, apenas le apareció su celo quería tenerlo bajo mí, poseerlo, amarlo, dejar mi marca en él y que todos se dieran cuenta que ya tiene dueño, alguien que lo amara, respetará, protegerá y querrá desde ahora y por siempre. Le quite esa gorra estorbosa y pude apreciar sus hermosas orejas, eran grandes y hermosas, abrí su camisa y se la arrebate. Con un dedo lo deslice desde su cuello hasta sus pantalones, se estremeció por mi acción y cerró los ojos, lami mis labios por su acción tan hermosa. Baje mi rostro hasta su cuello y deje algunos chupetones recibiendo gratas respuestas, colocó sus manos en mi nuca y me reí ante eso, empecé a bajar dejando un rastro de saliva por pasar mi lengua a través de su tersa piel hasta llegar a su tetilla la cual mordí y succione, esa misma acción la efectúe en su otra tetilla
Retome mi camino hasta llegar a su pantalón el cual empecé a bajar junto a su ropa interior, Misaki al notar mis intenciones me miró impresionado y negó con la cabeza, yo me reí y coloque sus piernas en mis hombros para luego besar sus muslos sin apartar mi mirada de sus ojos conmocionados. Estaba duro y eso me alegro
-Usagi-san- introduje su intimidad en mi boca mientras empezaba a succionarla y lamerla, Misaki soltó varios gemidos mientras arqueaba la espalda por mi arrebato y caricias - U... Usagi-san pa... Para- soltó otro gemido y sonreí de satisfacción, aumente las secciones a otro nivel sintiendo como sudaba, como se derretía ante mis caricias, mis provocaciones, mi tacto, mi amor. Se corrió en mi boca y lo trague todo, él me miró impresionado y, como pudo se sentó, tomó su camisa y limpio mis labios - Enserio, estas loco
-Si, estoy loco por ti- tome su muñeca deteniendo su acción y bese sus labios para que él mismo probará su sabor a fresas dulces. Lo tome de la cintura y eleve un poco para que no golpeara la cabeza con el techo del coche, me senté y pose sobre mi sin despegar mis labios de los suyos. Empecé a bajar mi pantalón junto al bóxer algo incómodo por la posición y el reducido espacio en el coche dejando al descubierto mi erecto pene. Misaki tenía los ojos cerrados sonrojados mientras me besaba, su rostro era hermoso cuando estaba avergonzado y tenía esa hermosa imagen frente a mis ojos, me volvía loco
Introduje dos dedos de golpes y Misaki detuvo el beso por mi acción, abrió los ojos donde pude notar como estaban llenos de pasión y lujuria junto a un toque lleno de picardía. Volví a profanar sus labios mientras introducía otro dedo, arqueo su espalda y abrazo con más fuerzas sintiendo su pena acercarse al mio provocando un escalofrío, no lo soporte más, me coloque el condón y lo penetre con fuerzas de golpe provocando un grito ahogado de parte de mi novio
-¡Espera! ¡Espera! - dijo pero lo ignore moviéndome con más rapidez, Misaki tenía la espalda recta junto a unas hermosas lágrimas asomarse por sus ojos, arañó con fuerzas mi espalda mientras trataba de suprimir sus gemidos pero era difícil
Limpie sus lágrimas y él abrió los ojos con pesar
-Usagi... San
-Misaki- bese su cuello y sentí como se vino empapando nuestros vientres. Lo penetre unas veces más hasta que me vine dentro de él y repartía varios besos por su rostro y cuello. Su respiración era agitada, estaba agotado pero yo no. Lo recosté nuevamente en el asiento y me pose sobre él, tome otro paquete de condón y lo desgarre para sacarlo. Misaki me miró sin creerlo y esboce otra sonrisa
-Esto aún no ha acabado
Misaki pov
Después de hacerlo 3 veces más me llevo a casa, me sentía agotado y un poco enojado con Usagi pero necesite esto, necesite tenerlo entre mis brazos y sentir su calor impregnar mi cuerpo junto a su olor tan varonil que extasiada todos mis sentidos, lo único bueno de todo esto es que deje varios rasguños en su espalda y uno que otro chupetón en si cuello y pecho. Me dejo en mi habitación y lo despedí con un beso prometiéndole que bajaría a cenar con ellos pero antes necesitaba un baño. Me dirigí al mismo con mucho dolor el cual logre soportar
Lave mi cabellos y el resto de mi cuerpo sintiéndolo vacío al no tenerlo al redor, solté un suspiro y sonreí al recordar esas expresiones tan hermosas de su parte. Llegue a imaginar que reventaríamos las llantas por los constantes brincos del coche, apenas podíamos ver afuera por lo empañado que quedaron los vidrios
Espere a Ritsu pero nunca apareció, cene con los chicos como prometí y Takano preparan un banquete sacándome una sonrisa, trataba se sacarme conversación y lo logro, este chico era divertido pero le deje en claro que no lo perdonaba
Regrese a mi habitación agotado y me recosté en mi cama pero no logre dormir al no tener a Ritsu en la habitación, me sente en la cama y tome un libro de cálculo. Hoy fue el último día de clases pero debía despejar mi mente con algo, el cálculo era mi peor materia, debía mejorar porque mis notas fueron patéticas esta vez
Escuche la ventana y lo ignore pero no pude seguir porque se lanzó a mis brazos y lanzó mi libro con descaro, me enoje pero ansiaba un abrazo y se lo concedí pero sus palabras me tomaron por sorpresa
-Misaki-nii, ¡Vámonos! - lo mire con duda y él lo noto aclarando mis dudas- Vámonos a Estados Unidos
-¿Qué? - dije mirándolo a los ojos - ¿Estás loco? ¿Cómo nos vamos a ir?
-En avión, reuní mucho dinero y al fin tengo tarjeta de crédito, Vámonos todas las vacaciones, por favor- ese viaje lo hubiese deseado antes de haber arreglado las cosas con Usagi, deseaba pasar navidad y año nuevo con mi novio
-¿Qué sucedió entre Takano y tú? - pregunte y él negó con rapidez
-! NADA!- suspiro al notar que grito- por favor, Misaki-nii, eres el único con el que puedo confiar, no me dejes solo, por favor- dijo esto con lágrimas en los ojos cayendo de rodillas frente a mí - Por favor- un escalofrío recorrió mi cuerpo al verlo así de débil. Me levante y ayude a levantarlo, tome dos mochilas y guarde en una nuestros pasaportes
-Compraremos ropa al llegar- guarde lo esencial y tome las llaves del coche que mi madre me regalo hace un año, pocas veces lo usaba y esta era la ocasión. Ritsu tomo mi mano y bajamos las escaleras en silencio para que esos dos no nos escuchen. Llegamos al garaje donde abordamos mi auto y suspire. Saque mi teléfono e ignore los whatsapp de mis amigos. Busque el contacto de Usagi y le escribí un mensaje
"Te Amo"
Lo coloque en silencio e indique a Ritsu que hiciera lo mismo. Arranque el auto y salí de la casa, al estar frente de la misma mire al segundo piso notando como ambos miraban con duda nuestra salida y arranque con fuerzas. No deseaba ir pero no lo dejaría abandonado a Ritsu cuando más me necesitaba, es mi hermano y él haría lo mismo que yo
-Hey, ¿No pelearas con Yokosawa? - lo observe y vi como expandía los ojos pero volvieron a la normalidad rápidamente, su rostro se tornó sombrío mientras suspiraba
-No me interesa- el camino al aeropuerto fue en un silencio sepulcral, deseaba que se arrepintiera, que me dijera que diera media vuelta y fue allí cuando estaba sumido en mis pensamientos, en el deseo de estar de vuelta en los brazos de Usagi que todo sucedió
-¡Cuidado! - Ritsu grito y mire al frente encontrando una silueta negra la cual desvíe saliendo de la carretera y golpeando un arbol, todo se volvió negro luego de eso