Capítulo: 23 Confrontación.
Misaki pov
Esto es horrible, sinceramente horrible es muchos sentidos, al fin, al fin había comenzado a olvidarlo, había dejado atrás su sombra por Usagi, él me había sacado de esa tristeza que me embargaba cada día con sus palabras melosas y hermosas acciones, lo admito, si no fuese por él no hubiese podido ni tomar mi maleta en ese momento, creo que me fuese hasta desmayado por su repentina aparición, ¿No podía ser menos inoportuno?
¿Qué sucedió luego de ese encuentro? Simple
Algunos de mis subordinados quienes llegaron a estar bajo de su mandato y otros que escucharon historias de su fuerza, bondad, destreza, hermosura, etcétera; se abalanzaron sobre él como animales llenos de "admiración" por tenerlo ante ellos. En medio de eso Usagi tomo mi mano y fuimos por mi equipaje, su ceño estaba fruncido se notaba la rabia que sentía. Mientras caminamos voltee con curiosidad y note como Todo intento apartar a los demás Semes para seguirme pero, Ritsu se interpuso entre él y yo alzando una mano con la palma abierta, luego Takano se pasó a su izquierda cruzándose de brazos, solo pude ver sus espaldas y la cara de sorpresa de Todo antes de entrar a la edificación
Usagi me dejo en mi habitación y beso mi frente, me prohibió abrir la puerta a cualquiera que no fuera él y me burle por eso, su sobre protección había hecho que, de cierta manera logrará calmarme y llevar eso con calma, no caer derrotado ante esa persona que no merecía la pena, el hecho de que Takano y Ritsu me ayudarán a escapar me hacía sentir feliz de cierta manera, ese dúo en verdad son increíbles
Aunque a decir verdad note a Todo extraño, si, extraño. Su mirada había cambiado, antes me mostraba un rostro algo... Rígido, con una expresión de felicidad fingida, ahora me ve con... ¿Nostalgia? ¿Arrepentimiento? No creo que sea alguna pero el hecho que se haya ido ha hecho de cambiar, he podido notarlo más que algunos
MI celular empezó a sonar, estaba a punto de caer rendido sobre la cama, era una llamada de Shinobu
-Hey
-¡Misaki estamos preocupados ¿Dónde te metiste? - aunque no lo crean... Ellos no conocen mi historia con Todo - El Sempai estuvo buscándote, Ritsu lo trato algo grosero, ¿Qué le pasara?
-¿Enserio? ¿Qué le dijo?
- Que no se acercará o tendría todos los huesos Rotos, o algo así - esta vez hablo Hiroki y de fondo distinguí los quejidos de Shinobu - ¿Estás en tu habitación? Iremos para allá
-Vale - Tranque la llamada y lance el teléfono nuevamente sobre la cama y me deje caer a espaldas, no pasaron ni dos segundos y ya estaban a punto de tumbar la puerta por los golpes, me levante y observe la ventana que estaba junto a mi cama, había más edificios de hoteles frente a este, nota mental, cerrar las persianas por la noche
Abrí la puerta y ambos Ukes saltaron a abrazarme, caminamos a la cama y empezaron a hablar de lo hermoso, divino, espectacular, bello, glamuroso, violable que estaba Todo, obviamente ellos eran los únicos que opinaban, yo solo escuchaba, he de admitir que los años le sentaron bien a ese individuo pero, prefiero a mi peli plata ante todo
-Que lastima que tenga a Miyagi si no ese Seme seria mío- dijo Shinobu y abrí la boca, impactado
-Pareces una gata en celo - dijo Hiroki y en eso se encendió mi foco, demonios la pastilla
-Chicos, supuestamente a los 18 ya el celo cambia a que sea mensualmente - mi corazón empezó a latir
-Sí y más rápido cuando tienes relaciones - a la Puta...
-Exacto, hay unas pastillas creo que se llaman Inhibidores, es una droga para eso, y les soy sincero, ya el otro mes me empezó el celo y duro una semana
-¿Y este mes? - pregunte hiperventilando
-La otra semana me vino, casualmente acabo hoy y agradezco a Dios porque imagínense, en medio torneo con el celo, saldría violado por más de uno
-¿Por qué lo dices? Los profesores no lo permitirían - Hiroki saco una bolsa de papas y nos dio a cada uno
-No amigo, creo que ellos serían los primeros en meternos manos, entiende, sudaremos y mientras más sudemos más feromonas expulsaremos
Golpe bajo... Tenía entendido que puede suceder pero no renunciaría a la competencia por esto, es natural, además tengo estas estúpidas pastillas conmigo, más dos frascos que le robe a mi mama
-Recuerda que tanto tú, y yo faltamos al club cuando nos aparecía cada seis meses, como Misaki estaba oculto con esa estúpida gorra siempre creyeron que éramos nosotros cuando a él le aparecía el celo- continuo Shinobu
-Bueno a mí no me ha pasado eso, menos mal o Nowaki no me dejaría en paz
-Admítelo, te gusta que te de duro contra el muro - Shinobu se colocó de rodillas en la cama y simuló dar embestidas, mordiéndose el labio y colocando sus manos detrás de su cabeza - Así, Baby
-En realidad, no lo hemos vuelta a hacer, luego del incidente en la oficina de Misaki - Shinobu se detuvo y lo miro extrañado
-¿Enserio? ¿Por qué? - pregunte, esa vez ambos estaban... Bastante felices juntos
-Porque... Ni yo mismo lo sé, no ha surgido, solo llegamos a los besos con lenguas y a tocarnos pero sobre la ropa
Y así pasamos dos horas seguidas, hablando de cosas triviales, mayormente sexuales y de esta no me salve, hablando con Shinobu ahora me siento un Santo frente a él y su pareja, no volveré a ver al profesor Miyagi de la misma manera
-¡Shinobu! Por Dios... - dijo enrojecido Hiroki
-¡Vamos amigos! Les estoy dando unos buenos tips, dejen de quejarse - y tras decir eso empecé a reír con fuerzas, Shinobu con los desconocidos era la persona más seria, asocial y amargada pero, si te tiene confianza y están solos, te aseguro que mínimo sales orinándote de la risa
Los teléfonos de los tres empezaron a sonar, tome el mío y era el grupo de whatsapp del club, eran muchos mensajes y hasta ahora los había escuchado
Preguntaban por las prácticas, ciertamente debíamos practicar hoy para estar frescos mañana, me asqueaba tener que hacerlo pero unas palabras de aliento nos vendrían bien. Busque el contacto del Sensei Lee preguntando a qué hora nos tocaba practicar, recibí respuesta al instante, es más, me llamo
-Sensei – salude
-Takahashi, lo había olvidado - fruncí el ceño, ¿Cómo se le va a olvidar? - Bueno, les toca entrenar en quince minutos en el salón del estadio número 15, es una enorme edificación, tienes habitaciones inmensas y allí podrán entrenar más tienen rotundamente prohibido observar a los otros equipos o serán expulsados de la competencia, ¿Esta claro?
-Sí, señor - bueno, por lo menos hizo bien su trabajo
-Bien, nos vemos mañana
-¿Qué? ¿No irá a vigilarnos?
-¿Acaso son niños pequeños? Vayan ustedes, confío en que no dejarás que se maten unos a otros o salgan a buscar un Uke o que se yo - retiro lo dicho, es un completo idiota - Tienen una hora exactamente, mañana a las 10 los quiero listos y entrando al estadio, ¿Quedo claro?
-Si, señor
-Bien, nos vemos entonces - y tranco la llamada, suspiré y vi a mis dos amigos discutiendo por el grupo la típica situación de cada torneo, cada año se Apostaba a ver quien salía más dañado, el que mayor heridas tuviera tenía una penitencia la cual se asignaba al llegar a casa, la última vez se obligó al pobre de Nigasaki comer un plato de lombrices vivas con salsa de tomate, no volví a ver la pasta igual, lo más traumante fue cuando dijo que sabían a pollo, más de uno devolvió su almuerzo luego de escuchar esas palabras
Envié una nota de voz breve pero completa
-Nos vemos en la entrada del Estadio en diez minutos, si no llegan los castigaré - y mis castigos no son para nada divertidos
-Mejor vamonos, no quiero ser castigado- dijo Hiroki con burla y Shinobu se le unió, yo solo les sonreí y deje mis cosas sobre la cama pero, lo que no espere fue ver como el frasco de Inhibridores se quedo sobre la misma captando las miradas de esos dos
-Un momento... - Hiroki miro el frasco y lo tome en mis manos alarmadas con la esperanza que no hubiese leído la etiqueta alguno de los dos, algo verdaderamente imposibles
-Tu... - dijo Shinobu frunciendo el ceño
-¡Tienes el...! - y salí corriendo de la habitación ignorando los gritos de mis amigos quienes no tardaron en correr detrás de mí. Salimos del hotel y el enfrentamiento que tendría con ellos era inevitable apenas llegáramos a la puerta, solo rogaba que los chicos estuvieran allí para que ninguno de esos dos dijera algo, pero tenía una suerte de perros
Apenas llegamos me acorralaron contra la pared
-Misaki, esto es peligroso
-No lo es, tengo las pastillas
-Aunque las bebas, cuando sudas las feromonas saldrán y eso es peligroso - "Hiroki se escuchaba preocupado
-Enserio, Misaki
-Chicos, soy el Líder, no puedo renunciar al último campeonato que asistiré, no puedo y no quiero, es mi equipo, no los abandonaré - tras decir esto nos quedamos en silencio, era cierto, ellos mismo sabían el cariño que le tenía al club y sus integrantes, no podía abandonarlos de la nada
-Solamente... - Shinobu se cayó y llevo sus manos a su nariz al igual que Hiroki. Reconocí muy bien ese aroma
-¡Misaki-nii! - Ritsu venía corriendo hacia nosotros y el hedor a dulce incremento
-¡Dios Santo! Que todos los ángeles te bendigan amigo, con ese olor hasta los muertes revivirán solo para cogerte - Hiroki como siempre exagerando
-Ritsu, deberías beber un Inhibidor - dije sacando el frasco
-No usaré droga para frenar la naturaleza - lo mire sin expresión, teniendo el conocimiento de sus verdaderas palabras ocultas
-Solamente quieres que Takano te coja toda la noche, ¿no? - empezó a reír y asintió llevándose un golpe de Shinobu en la cabeza
-Está bien, dame esa cosa - la metió en su boca y trago
-¡Estamos aquí! - mire hacia la calle y todos los chicos venían corriendo con rapidez, desvíe la vista a mi reloj y llegaron justo a tiempo pero quería molestarlos
-¡Llegan tarde! - grite y todos se detuvieron en seco, juro que empezaron a sudar frío en ese momento- Era broma, vamos
Nos adentramos a la edificación, Ritsu estaba junto a mi caminando de manera graciosa, ya su olor había disminuido pero aún había rastro de él, creo que deberé darle otro. La habitación numero 14 estaba abierta y pude ver al equipo de Todo practicando con ambos hermanos encabezando la práctica. Abrí la puerta de nuestra habitación y todos ingresaron, di un último vistazo a la habitación 14 y Todo - Sempai me observaba de pies a cabeza. Un escalofrío se esparció por mi cuerpo e hice una mueca de miedo, ¿Cómo es posible que me siga intimidando a estas alturas?
Él observó esto y sonrió, mi corazón empezó a latir y un extraño hormigueo se hizo presente en mi estómago, mi corazón no ayudaba para nada, juro que él podía escucharlo. No dejaba de mirar mis ojos y yo los de él, era una laguna llena de controversias mientras que los míos solo mostraban duda y miedo, duda del porque volvió y su repentina desaparición de un año a otro y miedo porque volvió. Mi mirada captó otro cuerpo detrás de él y me sorprendí al verlo, era el Presidente del Concejo Estudiantil, estaba allí con él sentado observando la práctica, por un momento olvide a Todo y la ira se esparció por mi cuerpo desechando el miedo y la intriga. Fruncí el ceño hacia Todo y me adentré a mi habitación donde todos estaban sentados en el suelo esperándome. Me coloque frente a ellos y sonreí
-Como todos los años, no practicaremos como los demás equipos, para asi tener la mente limpia y el cuerpo descansado, siempre he empleado esa táctica desde que se me fue confiado el mando más nunca revele el porqué de mis actos y espero que me comprendan. Eso sí, mañana a las 6 de la mañana trataremos como todos los años - todos asintieron, los nuevos estaban nerviosos, lo notaba y era normal pero, confío en la victoria porque todos, además de haber practicado tienen una gran habilidad - Cálmense, están preparados aunque no lo crean, confío en sus habilidades más de lo que debería
Todos rieron, una corta risa pero llena de felicidad
-Bien, ¿Trajeron algún juego? - todos negaron y los mire de mala manera
-¡Sensei! - uno de los nuevo, Takeshi levanto la mano, le concedí el habla - ¿Podemos hacerle preguntas? Así hablar entre todos, este es su último año y no sabemos si volveremos a estar así - le sonreí
-Muy bien, pregunta
-¿Por qué oculto ser Uke? - ¡Plash! Esa pregunta me cayó como un balde de agua fría por todo el cuerpo, los demás lo miraron con irá, obviamente era algo privado y más de uno lo sabía, pero el chico era un crió, ni se ha percatado de las miradas de los demás, solo me observa esperando una respuesta y reí ante su curiosidad
-Porque mi familia ha tenido descendientes Semes por años, sentía que era un error y trate de tapar el sol con el dedo, es decir, huir de mi realidad - él asintió
-¿Ritsu-san pensaba lo mismo? - asentí- Déjeme decirle, Sempai. Aunque sea Uke siempre tendrá mis respetos, es un excelente entrenador y persona, aunque a veces muy malhumorado
-¡Basta! - todos empezaron a reír al escuchar el grito de Nigasaki al pobre chico que dio un brinco
-¿Por qué? ¿Dije algo malo? - me miró asustado y no pude evitar reír recordando a Ritsu cuando era más joven
-Para nada. ¿Alguna otra pregunta?
Otro chico de fondo levanto la mano, era de primer año, ¿Acaso los menores tienen más cojones que los mayores?
-¿A qué Universidad asistirá?
Respondí más preguntas y todos reían por mis respuestas, la mayoría era preguntándome por la relación que Tenía con Ritsu, a simple vista no era normal, luego preguntaron por Shinobu y Hiroki, ellos intervenían y recordamos momento de cuando éramos niños
-Hiroki siempre ha sido un amargado- pensé en voz alta y todos estallaron en rísa porque tenía razón
-¡Oye! - grito
-Ay, pero así te quiero - dije tratando de no estallar en risas
-¡Mierda! - escuche como Ritsu entraba a la habitación y azotaba la puerta a sus espaldas, luego giro a vernos atemorizado y más aún cuando se topó con mi mirada - ¡La Cague! - grito y se acercó a mí - ¡Lo siento muchísimo, Misaki! - se posó frente a mi enredando mi cola con la suya y abrazándome, arquee una ceja confundido y mi cuerpo se estremeció al sentir la repentina tensión, mire a mi equipo quienes, estaban pálidos, menos los de primer año. Mire a Shinobu y Hiroki pero ellos estaban igual de desconcertados que yo, no entendía nada, ¿Qué había hecho Ritsu para venir de esta manera?
Empezaron a golpear la puerta con insistencia, pareciera a simple vista que la quisieran romper con cada golpe. Intenté levantarme enojado por como tocaban la puerta pero, por alguna razón, me sentía asustado. Trate de levantarme pero Ritsu no me dejaba, lo mire de mala manera y, pude notar miedo en su rostro
-¿Qué mierda hiciste? - fue lo que pude decir y sus orejas descendieron de golpe, ¿Así de grave será? - Ritsu, suéltame - dije autoritariamente y él se apartó y me miró con arrepentimiento, me acerque a la puerta y la abrí con fuerzas mirando a la persona que menos deseaba encontrar - ¿Qué te pasa? ¿Por qué demonios tocas así? - Todo tenía el ceño fruncido pero, al verme suavizó un poco su mirada pero, luego la dirigió al fondo de la habitación y esta recobró su semblante inicial
-¿¡Qué!? ¿Qué me pasa? ¡¿Tienes los huevos par decir eso?! - me grito en la cara haciendo que retrocediera, pocas veces llego a gritarme pero esta vez estaba cargado de un enojo puro, los latidos de mi corazón aumentaron y la mirada de todos estaba posada en mi nuca enviando un escalofrío por mi espalda
-No... No entiendo - fue lo que pude articular luego de un rato, el miedo había hecho que me paralizará. La mirada de Todo se fue apaciguando progresivamente y, por un momento vi que se quiso acercar a mí para estrecharme contra su cuerpo, sus brazos... Sus brazos se fueron acercando, no sé si era intencional lo que hacía porque su mirada estaba pérdida en mis ojos, mi cuerpo no reaccionaba, ¡Demonios Misaki! ¿Qué te sucede?
-¡Él no sabe nada! - grito Ritsu interponiéndose entre ambos haciéndome retroceder por su empujón dejándome caer en la realidad, mis manos temblaban, que patético, los malditos recuerdos emergían con rapidez y me hacía querer... Huir - ¡Y no lo toques, maldito!
-¿Cómo que no sabe nada?
-¡Yo fui quien decidió espiarlos! - la neblina que había aparecido en mi mente desapareció al escuchar esas palabras provenientes de Ritsu y fue cuando note que mi mirada estaba posada en el suelo. La ira inundó mis sentidos y tome el hombre de Ritsu para hacer que girará y poder encararlo
-¡¿Qué tu qué?! - grite histérico en su rostro - ¿Sabes qué significa? ¡Estamos vetados, imbécil! - su rostro palideció de nuevo ante mi grito
-Takahashi - dirigí mi mirada a duras penas a Todo quien estaba cruzado de brazos mirándome - ¿De verdad no sabías nada? - lo mire con seriedad, por un momento olvide quien era
-Lo juro
-Si quieres arreglar esto ve a hablar con mi hermano, pueden llegar a un acuerdo. En 10 minutos, en los baños, si no lo haces, no dudes que te acusaremos - y tras decir esto desapareció de mi vista yéndose por los pasillos
-Misaki- su voz, su voz me saco de mis casillas. Lo tome del cuello de la camisa y lance al suelo
-¡Tú! ¡Maldición, Ritsu! ¡De todas las estupideces que has cometido esta es la mayor de todas! ¿¡Cómo se te ocurre siquiera!? - olvide donde estábamos, la ira me controlo por completo algo que nunca permitía. Ritsu estaba impresionado - ¡Responde, maldición! - si no fuera él, si no fuera mi hermano, en estos momentos estaría golpeándolo de muchas maneras
-Yo... Solo quería ayudarlos a ganar
-¿¡Haciendo trampa!? - grite indignado - ¿Subestimas mis enseñanzas?
-¡No! Por supuesto que no, eres un muy bien Sempai - me arrodille a su altura y él se encogió en su sitio
-¿Entonces?
-Quería... Ver... Verte sonreír... Cuando ganarán... Que... Quería garantizar su triun...triunfo - mordí mi labio tratando de no golpearlo, maldición aunque él quisiera eso, no podía hacerlo de esta manera. Lo tome de los hombros y suspiré
-Esto lo hago para que no hagas otra estupidez. ¡Chicos! - grite, todos se levantaron y me miraron esperando alguna orden, menos Shinobu y Hiroki quienes no salían de su impresión - ¡Sostengan a Ritsu! ¡No dejen que salga de la habitación hasta que yo vuelva! - tome a Ritsu de la camisa e hice que se levantará junto a mí, lo lance a los brazos de los demás Semes - es una Orden - recalque las últimas palabras y todos gritaron un si- Prometo que mañana estaremos concursando para ganar, aunque tenga que... - me mordí el labio por lo que estaba a punto de decir, ninguno se percató de lo que podría suceder a continuación, pero Ritsu si
-¡No! - grito tratando de acercarse a mí, obviamente queriéndome detener pero los brazos de los demás le impidieron seguir - ¡No vayas! ¡Yo hire! ¡Fue mi culpa! ¡No quiero te haga daño de nuevo! ¡No de nuevo y por mi culpa! - grito más fuerte con sus lágrimas a punto de deslizarse por sus mejillas
-¡Calla! Soy el mayor- él me miró con lágrimas saliendo de sus ojos, aunque haya hecho esta locura, no puedo estar enojado con él por mucho tiempo, lo amo a fin de cuentas - Resolveré esto - y tras decir esto salí de la habitación escuchando los gritos de Ritsu tras mi espalda
-¡Misaki! - Hiroki y Shinobu salieron algo asustados - ¿De qué habla Ritsu?
-¿Como que te lastimera? - pregunto Shinobu acercándose
-Tranquilos, no sucederá nada
-Misaki-nii, ¡No confíes en ese desgraciado! ¡Te hará lo mismo! - me estremecí por sus palabras
-¡Misaki, iremos contigo! - dijo Hiroki alarmado por los gritos ensordecedores y constantes de Ritsu
-¡No! lo Resolveré solo, detengan a Ritsu, es demasiado exagerado- dude por un momento, y se me ocurrió algo que podría ser entre buena y mala idea - Solo háganme un favor...
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Y allí me encontraba, frente a la puerta de los baños de Seme, a decir verdad Ritsu tenía razón, si esta Todo involucrado en esto él solo querrá una cosa, pero había algo que me dejaba a la deriva, ¿Sería capaz de cumplir con alguna de sus peticiones? Y más si está el idiota de su hermano de por medio, temo por mi seguridad, tengo miedo, no lo negaré, mis piernas parecen gelatinas, El sudor se escapaba en grandes cantidades por mi frente y cuello, el hormigueo en mi estómago era increíblemente grande y la sola idea de que, dentro de ese lugar se encuentre el causante de mis pesadillas me deja un mal sabor de boca. Esto no saldrá nada bien, lo se de antemano pero, ¿Tengo opción?
Dirigí mi mano a la puerta y la abrí encarando mis Temores... Complemente solo...