Capítulo 25: Regreso
Ritsu pov
-Mierda - musite adolorido. Me levante del incómodo suelo frío como la mierda, confundido mire a los lados y estaba en mi habitación de hotel, ¿Por qué rayos estaba en el suelo? Y fue allí cuando los recuerdos aparecieron
Primero recuerdo esa pelea tan divertida que se formó al final del torneo, me rei a lo bajo, los gritos, golpes, discusiones, el público vuelto loco, todo eso fue la más entretenido que me ha pasado en la vida pero no el hecho de que la policía apareciera. Todos nos esparcimos como cucarachas, me sentí como si estuviera en Rápido y Furioso, obviando los carros y esa adrenalina, obviamente. No regrese al hotel y había perdido de vista a Takano, Usagi y Misaki, decidí buscarlos y fue la peor decisión que pude haber tomado, la policía era intensa así que me escondí en un contenedor de basura que estaba cerca de un restaurante en el cual me detuve a comer, cuando cayó la noche volví oliendo a huevos podridos, entre a la habitación para darme una ducha, fue lo mejor aparte de esas peleas pero, lo que me arruinó la noche fue no haber encontrado a Takano, llame a su móvil y trate de comunicarme telepaticamente pero fue en vano, luego de eso creo que me dormí
Asentí con mi cabeza y di un suspiro, moví mi cuello escuchando un sonido tan característico de él al ser forzado a moverse y fue cuando la cama rechino, mire hacia ella y vi la cara de Takano sobresalir observándome con sueño
-¿Por qué estás en el suelo? - me pregunto con los ojos entre abiertos - ¿Estas bien? Ese cuello tuyo da miedo- me burle ante ese comentario que lo escuchaba a diario, me levante y me pose sobre él, coloque mis piernas en sus costados mientras me afincada en su abdomen y acariciaba su pecho, estaba sin camisa
-¿Donde estuviste? - pregunte recostandome sobre él, pose mi cabeza en su cuello e inhale su aroma, olía a sudor y cigarrillos
-Huyendo de la policía - enrollo sus brazos en mi cintura atrayéndome más a su cuerpo y besando mi cabeza que desprendía un olor a shampoo - Tu celo desapareció muy rápido
-Con toda esa mierda que paso ayer, más bien no salí violado - sentí como se río bajo de mi
-Cierto
-Hueles a ¿hierba? - noto mi cambio de voz, si, era posesivo, ¿Y qué?- No es que me interese mucho, pero tienes la habitación impregnada - mentira, la curiosidad es enorme
-Casi me atrapan y, me escondí en una casa, resulta y acontece que esa casa es de unos hippies, cuando me vieron me interrogaron y al ver que me perseguía la policía me acogieron como a uno de ellos, fumaban demasiada hierba, no me sorprende que, aún después de haberme duchado siga oliendo a ella. En fin, no te conteste porque en ese momento la policía estaba a punto de atraparme y cuando al fin pude hablar caíste dormido
-Pero te persiguieron por mucho tiempo
-Si, creo que les guste - lo mire a los ojos mientras inflaba mis mejillas
-Pues me les adelante - me solté de su agarre y le di la espalda mirando hacia mi ventana que estaba abierta de par en par
-Vamos Amor, no te pongas celoso - me rodeo con sus brazos y beso mi cabeza - Deberíamos buscar a Akihiko y Misaki
-Ellos están bien - dije mirando hacia el edificio que estaba frente al de nosotros, elegí la habitación que quedaba justo enfrente de la de Misaki- Usagi es posesivo - Takano me miró con duda y señale la ventana. A través de ella se deslumbraba, desde esa distancia una espalda blanca siendo rodeada por unas piernas, ambos haciendo unos movimientos bastante placenteros
-Jajaja, creo que lo de ayer fue un buen incentivo
-Quiero llamar a Misaki
-No le cortes la inspiración
-Pero muchos fisgones pervertidos deben estar mirando
-¿Cómo nosotros? ¿O como tu que elegiste una habitación enfrente de la de Misaki?
-Es diferente, él es mio
-Y el posesivo luego es Akihiko- me reí ante las ocurrencias de mi novio
-Quiero conocer esa familia Hippie
-Ellos también - reaccione ante sus palabras y me gire quedando nuestros rostros muy cerca uno del otro
-¿Les contaste de mi? - pregunte impresionado
-Claro, debo presumir mi suerte de vez en cuando - mis mejillas se ruborizaron, antes de que cambiarán de color Takano ya me había envuelto en un abrazo y chocado nuestras frentes - Me encanta estar así contigo
-¿Cómo así? - beso mis mejillas, mi frente y por último mis labios, un beso rápido pero cargado de verdaderos sentimientos y amor, entrelazamos nuestras piernas y acercamos nuestros cuerpos sintiendo la respiración del otro junto a los latidos del corazón, ambos sonaban muy bien, a corde, una melodía que me hacía querer nunca separarme
-Así, escuchar tus hermosos latidos, ver tus llamativos ojos, sentir tu respiración contra la mía, que nuestros sentimientos estén correlacionados, que no sólo sea sexo, sino amor, un amor de verdad, sin restricciones de algún tipo, sentirte como en verdad eres, tu esencia, tu todo, y que todo eso sea mio y todo lo mio sea tuyo, sin mentiras, sin miedos, solo nosotros dos siendo uno mismo y afrontar la vida con la frente en alto, demostrar a los demás que nuestro amor es verdadero y no un simple cuento pasajero - me quede petrificado, ni siquiera me percaté cuando Takano entrelazo nuestras manos, mis ojos estaban posados sobre los suyos que me mostraban una sinceridad pura, esos ojos avellanas que me volvían loco brillaban, ¿Una sola mirada puede llegar a deslumbrar? La respuesta es un si, puede hacer eso y mucho más. No estoy seguro si él parpadeo mientras me decía todas esas palabras hermosas, esas palabras tan sinceras cargadas de un amor tan enorme, ¿Soy merecedor de todo eso? A veces lo pongo en duda. ¿Estoy respirando? Creo que si, sigo vivo, pero, el que no puede ser controlado es mi corazón que no deja de bombear sangre a mi entumecido cuerpo, no me imagino de cuanto colores se habrá puesto mi rostro pero, Takano no los paso desapercibidos, su risa es constante y ronca, sublime y hermosa como sus ojos- Ritsu, ¿Quieres que lo nuestro perdure?
Reaccione al escuchar sus palabras, sus ojos observaban los míos con intensidad
-¡Por supuesto que sí! - dije exaltado, casi gritándole sosteniendo sus manos con fuerzas, él solo río y beso mis nudillos
-Entonces, nunca te separes de mi, jamás me abandones
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Estuvimos así el resto de la mañana, no nos enteramos el momento que caímos dormidos, pero nos rendimos ante el cansancio en un momento dado de nuestra conversación, y lo mejor de todo fue que caímos en los brazos del otro, no nos movimos, no estuvimos incómodos, compartimos el calor corporal del otro sintiéndonos satisfechos sin la necesidad del agobiante cobertor, sin la necesidad de apagar el aire acondicionado que azotaba nuestro cuerpos, nada de eso fue necesario, fue un día increíble desde mi punto de vista, un día que nunca olvidaría pasase lo que pasase
El hambre como siempre nos hizo abandonar nuestro pequeño nido de amor, me quite la camisa de Takano y me coloque otra más adecuada, era blanca con un enorme 69 negro marcado en la espalda y enfrente, me sonroje al reconocer su significado pero lo ignore, unos shorts negros bastante cortos, y unos converse del mismo color, Takano en cambio optó por una sudadera negra, pantalones y zapatos negros para la ocasión, bajamos al comedor sintiendo mi estomago contraerse a cada paso
-Muero de hambre - musite sosteniendo la mano de Takano - Dios mio, ya casi es de noche y ayer ni cene, siento que mi estomago explotará - su risa no tardó en presentarse
-Vamos, no es para tanto
-¿Cómo que no? Bueno, no lo es mucho, pero la última vez que hice algo así me desmaye y no fue lindo
-Iremos a comer de una vez y si es necesario te comes todo lo que haya en la cocina - dijo serio observándome - ¿Te sientes bien? ¿Sientes que te desmayaras? - me acorralo contra la pared y me observaba de arriba a abajo sin perder algún detalle lo que provocó al nerviosismo aparecer, me sonroja ante su respiración recorrer mi cuerpo junto a sus ojos observarme, Dios bendito, si no tengo una erección es por milagro...
-O... Oye calma, fue hace mucho, cuando estaba de campamento en primaria - dije tratando de bajar la tensión en su rostro, tome sus hombros y lo aleje para no pasar más vergüenza de la que ya sentía
-Para evitar cualquier accidente - se agachó levemente ignorando mis brazos, desde mi punto de vista el mundo dio un giro rápido y quede en una posición bastante cómoda, ¿Cómo? Me habían tomado en brazos, enrolle mis brazos detrás de su cuello para que no me soltase - Te llevare así al comedor
-¿Qué haces? ¡Bajame ahora mismo, Takano - san! - salio del elevador y nos encontramos a una pareja la cual se apartó al vernos- Dios, que vergüenza - oculte mi rostro en su cuello al ver que no me soltaba, cerré los ojos y me deje llevar ante sus brazos cálidos, no pude evitar sonreír ante la escena que estaba formando, lo mejor de todo es que pude notar sus constantes latidos producidos por mi
- Llegamos - dijo esto pasándome en un silla, me queje sin soltarlo del cuello - Querías que te soltara y ahora no quieres que te deje, ¿Quien los entiende? - me rei y bese su nariz. Lo solté a regañadientes y se sentó frente a mi tomando la carta - ¿Qué quieres? Pide lo que quieras
-Obvio que lo haré, pero pagaré yo - bajo el menú y me miró
-No- le devolví la mirada desafiante y deje la carta sobre la mesa
-Entonces no comeré - me cruce de brazos y fue cuando mi estomago protestó de la manera más ruidosa posible, soltó un gruñido increíblemente alto que me dejo en el sitio, mi sonrojo no tardó en esparcirse por mi rostro al escuchar la carcajada de Takano, esto solo me pasaba a mi - Maldita sea, no me ayudes tanto - le recrimine a mi estomago quien se tomó enserio mi amenaza
-¡Ritsu! - escuche la voz de Misaki, gire mi rostro a todos lados buscándolo con la mirada y estaba en la entrada, con un suéter verde, parecido al color de sus ojos, unos shorts que hacían juego y zapatos deportivos, Usagi lo acompañaba con una camisa blanca deportiva que dejaba al descubierto sus brazos bien torneados, unos Jeans negros y zapatos Adidas blancos. Estaban tomados de la mano y, como era común en Usagi fulminaba con la mirada a cualquier que voltease a ver a mi hermano. Se acercaron a nosotros y no pude evitar levantarme y abrazarlo
-¡Me alegra que no te cojieran! Bueno, la policía - lo mire con picardia y recibí un golpe en la cabeza de su parte
-Casi nos atrapan, nos encontramos a los mismos policías que casi arrestan a Usagi y no nos querían dejar escapar. Para completar nos prohibieron la entrada al comedor del hotel- al decir esto último fulminó con la mirada al involucrado
-Vamos, hay muchos otros hoteles con comida aun mejor, la comida de allá era insípida - Misaki no pudo evitar reír
-En eso sí tienes razón - tomaron asiento con nosotros y, olvidando lo que acababa de suceder, ordene un Club House, Misaki igual junto a un batido de fresas, yo preferí uno de chocolate; Takano y Usagi pidieron una pizza enorme para ambos junto a dos coca colas, dude por un momento si nuestras ordenes caberian en esta mesa pero me equivoque, los meseros sabían lo que hacían y mi estomago fue saciado al poco tiempo de nuestra orden ser servida
-El presentador del torneo llevo el trofeo esta tarde a mi habitación - dijo Misaki luego de haber tomado el último sorbo a su batido y pidió otro
-¿Enserio? Yo crei que no les darían nada, luego de todo eso
-Es que no lo querían dar- dijo Usagi robandole del refresco a Takano - Misaki lo amenazó
-¿Lo amenazaste? - Takano se burló mientras le arrebataba a Usagi el vaso casi vacío - Animal sin fondo
-Si, conseguí su numero y le dije que si no tenia ese trofeo hoy mismo en mi habitación, lo iría a visitar con todo mi club, no tardó ni una hora en llegar - me rei ante ese hecho, bebí más de mi malteada hasta no dejar ni una gota
-Siento que deberé hacer ejercicios toda una semana para ponerme en forma - mire mi estomago el cual estaba inflado por todo lo que comi, aunque valió la pena
-¿Qué dices? Estas bien - me dijo Takano dándome una sonrisa torcida y me sonroje, la risa de Misaki no tardó en aparecer
-Me gusta cuando estamos los cuatro disfrutando de una tranquila cena - menciono Usagi de la nada, Takano asintió
-Ea bastante relajante, además verlos comer cuando tienen bastante hambre es divertido - esta vez me rei fui yo
-Tu nivel de acosador trasciende los límites - cuando fue a contestar un grito hizo que se detuviera
-¡Tu! - la voz de Haru retumbó en el comedor, Takano, Usagi y yo nos levantamos como un reflejo, listos para golpear a quien nos retara mientras que Misaki se ahogo con su bebida y empezó a toser
-Joder, y estaba tan buena - se quejo para luego levantarse y mirar al retador - Mierda, ¿Qué te paso? - pregunto Misaki a punto de romper en carcajadas. Haru estaba completamente golpeado, moretones en ambos ojos, brazos y quien sabe donde más, se veía más que agotado tanto mental como físicamente, su cabello estaba hecho un desastre junto a sus ropas, las cuales eran el uniforme de su club
-¿Cómo demonios escapaste de esa patrulla? ¡A la mayoría nos llevaron y nos tuvieron allí hasta ahora! ¡Mis padres están que me matan!
Oh mierda... Mama
Mire a Misaki quien me devolvió la mirada de culpabilidad, por lo visto tampoco había contactado a mama
-¡Ustedes...! ¿Cómo pueden tener tanta suerte? - dijo esto al borde de la histeria
-¿Lo golpeas tu o lo golpeó yo? - pregunte cansado de los berrinches de un idiota, apreté mis nudillos y los hice sonar fulminado con la mirada a Haru
-No quiero que me boten de otro restaurante, sería el colmo - dijo bostezando - ¡Seguridad! - grito, los guardias de apresuraron en venir ya que, al escuchar el escándalo estaban por hacer su aparición - Este chico no se hospeda en este hotel y esta perturbando mi paz y el de los demas clientes - generalizó la respuesta señalando a todos los presentes quienes, habían dejado de comer para disfrutar del espectáculo
-¡Tu tampoco te hospedas aquí! - grito mientras dos guardias lo tomaban de los brazos - ¡Sueltenme!
-Claro que si, estoy hospedado con mi novio, mi hermano y su pareja - se acercó a Usagi y lo beso - ¿Ven? - lo miro burlonamente, la cara de Haru en esos momentos era un poema y Misaki lo disfrutaba con solo observarlo
-¡Me Las pagarás! - fue lo último que escuchamos de él al desaparecer fuera del lugar obligado por esos dos Semes gorilas
-Nunca olvidaré este torneo - dije riendo
-Ni yo la cara de Haru - se burló Misaki tratando de apartarse de Usagi pero, este no permitió que se moviera, todo lo contrario, volvió a besarlo con mayor intensidad
-Absténganse por un momento, estamos en público - comento Takano con burla
-Mañana hay que volver - dijo Misaki tratando de normalizar su respiración y cambiando el tema
-Sí, aunque me alegra volver, no quiero ir a clases - me estire en el asiento y recorde algo desagradable - ¿Y Todo? - Usagi frunció el ceño
-Se fue luego de la paliza que le di, espero que no le hayan quedado ganas de acercarse - empecé a reír por la cara de Usagi, los celos lo cegaban, después de esa paliza paso mi prueba de valor y fuerza, prueba...
-Mierda, tengo examen de Química, lo había olvidado
-¿¡Qué!? - grito Takano y asentí con la cabeza - Mierda...
Misaki se burló y me reprochó que era culpa nuestra por haber venido y descuidado las estúpidas obligaciones, ya eso no me interesa, quiero es graduarme y acabar con todo esto, ingresar a la Universidad y tomar el mando de alguna de las empresas o abrir otra ramificación para aumentar los ingresos y el prestigio de nuestro nombre, y más con Takano junto a mi, no estoy seguro si Misaki piense igual que yo, pero veo que se quiere superar y aumentar el prestigio de la familia
-Casi lo olvido - Usagi acerco su mano al bolsillo del suéter de mi hermano quien blanqueo los ojos, sacó un sobre amarillo y nos miro con ojos brillosos - Acabo de publicar mi primer Libro
-¡Felicidades! - dije entusiasmado, fui el único, Takano arqueo una ceja y analizó los movimientos de su primo, esa mirada inocente mientras sostenía ese sobre no Encajaba con él, mire a Misaki quién estaba sonrojado
-Y... ¿De que se trata querido primo? - Takano se cruzó de brazos y Usagi sonrió, no se si Usagi esperaba esa reacción o solo espero al momento justo
-Se llama "Coincidencias en el Amor" se trata de cuatro adolescentes que unieron sus vidas por sus padres quienes se enamoraron y a causa de eso empezaron a vivir juntos provocando el inevitable contacto entre los hijos, ante este hecho los hijos del Seme quedaron cautivado ante los Ukes que se presentaba frente a ellos, y allí comienza un romance extraño entre estos cuatro - un silencio incómodo se formó en la mesa, Misaki tapaba su sonrojado rostro mientras yo me quedaba con la boca abierta
-No si, te falto poner nuestros nombres- dije algo molesto
-Es que lo protagonistas tienen nuestros nombres- respondió Misaki a lo bajo
-¿¡Qué tu que!? - y tras esto, nos echaron del restaurante por perturbar la paz ya que, ambos primos empezaron una pelea
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-Esta vez no fue mi culpa- decía Usagi quien tenía un morado en la mejilla, Misaki estaba en el asiento de copiloto con el ceño fruncido - Takano empezó
-¡Calla! Aun no puedo creer que nos hayas usado para tu novela
-Fueron mi inspiración y Misaki mi Musa. Además yo especifique que, cualquier parecido a la realidad es solo coincidencia
-¿Y crees que los lectores se tragaran esa? - bufo Takano mientras me acercaba a él y abrazaba, a veces creo que esto ya es una costumbre de su parte
-Puede que si, puede que no, son muchas las posibilidades. Además tu querías ser famoso- vi por el espejo como Usagi sonreía maliciosamente
-¡Eso fue cuando era niño! - mi novio se defendió mientras sus mejillas se enrojecian, no pude evitar soltar una carcajada
-Parecen niños- dijo Misaki mientras de estiraba, observaba el autobús donde, sus subordinados celebraban y, planeaban el castigo para el más golpeado, que resultó ser Nikijima
-¿No te molesta? - pregunto Takano mientras me obligó a que me recortará en el asiento y él poderse acostar sobre mi, me siento como un peluche
- Por supuesto que si, pero ya el daño esta hecho. Me molesta más el hecho de haber sido expulsado de un restaurante y de un hotel, joder que vergüenza, mi madre nos matará al volver
-¿Lo dices porque nunca le avisamos donde estábamos y nos busco toda la noche comisaría por comisaría? - dije mientras acariciaba los cabellos de Takano y el mismo se relajaba como un gato, empecé a darle masajes con mi cola y estaba a punto de caer dormido
-Si, nunca la había escuchado tan enojada- un escalofrío paso por todo mi cuerpo al recordar el grito que nos dio a través del teléfono, me sentí como Ron Weasley al recibir el Vociferador de parte de su madre
- En fin, de seguro tu libro no será tan famoso - comento Takano
Y dos meses después se comió sus palabras, el libro de Usagi fue un éxito y no paraban de hacernos pregunta de nuestro vida privada... Y cuando no quería recibir atención la recibía por culpa de mi cuñado y su fascinación por escribir sexo, maldita sea