-¡Esta vez no te perderé!-
Muchas eran las expectativas que rondaban en torno a aquella fiesta, todo estaba llegando a su punto definitivo. Todas las piezas estaban en su lugar, ahora solo faltaba moverlas. El escogido por Shikamaru había llegado y ahora la fiesta daría comienzo.
Itachi vio como Naruto se abalanzaba sobre el invitado, todo estaba resultando mejor de lo que imaginaba.
-¡HOLA KIBA! ¡Cuánto tiempo amigo!
-Así que se conocen- comento Itachi desde atrás.
-¡Claro! Nos conocemos de la secundaria. Éramos los eternos rivales, siempre peleando y compitiendo-ttebayo.
-Si, Naruto ha sido el único que me ha podido vencer… todavía recuerdo una llave que me hizo en último año- dijo colocando el brazo sobre el hombro de Naruto.
-¡Bien! Que se recuerden y sean antiguos amigos hará de esto más fácil- dijo Itachi colocando una mano en el hombro de los dos menores, continuo –Pero no se queden aquí en la entrada, pasemos a la sala… así le explicamos mejor a Kiba de lo que va todo esto.
Sin más explicaciones pasaron a la sala. Itachi se sentó en uno de los sofás individuales y Naruto en uno de los dobles, seguido de Kiba que sin dudarlo se sentó al lado suyo… bastante cerca la verdad. Naruto no podía sentirse más incomodo en aquella situación, el pantalón le quedaba demasiado ajustado para su gusto –¿Como era que los hombres usaban ese tipo de ropa?- pensaba mientras trataba de ocultar su incomodidad.
Lo único que lo confortaba era que la chaqueta era larga de la parte de atrás, por lo menos su trasero estaba a salvo de cualquier pervertido fisgón. Todo en aquel disfraz le parecía exagerado. Tenía un enorme pañuelo a la altura de su cuello, los mencionados pantalones ajustados a su cuerpo, largas botas que le llegaban a las rodillas, tenía dos camisas, un chaleco y la chaqueta…. Sentía que había ganado unas 5 libras de peso.
Mientras Naruto se hundía en su depresión, Itachi le contaba a Kiba de lo que trataba todo… sin saber que quizá… no sería necesaria tanta actuación por parte del joven.
-Así que…¿Lo que quieren es que pongo celoso a Sasuke?
-Si… todo fue idea de Shikamaru. Conocemos a mi hermano, nunca ha dejado que tomen lo que es suyo.
-Ni me lo digas… recuerdo su densa y asesina mirada cuando competía con Naruto en la secundaria.
-Mi hermano siempre ha sido egoísta con sus cosas.
-No se preocupe Itachi-san… Yo me encargare de que ese testarudo recupere la memoria.
-Porque siento que hablan de una cosa y no de mi-ttebayo- dijo Naruto cruzando los brazos mostrando cierta molestia ya que no lo tomaban en cuanta en la conversación.
Mientras tanto, bajo el mismo techo, pero en otra área de la casa…
Sasuke veía y veía la cosa que estaba sobre su cama, entre mas lo veía… más ganas le daban de matar a su hermano. Frente a él estaba la posible réplica exacta de uno de los trajes de los cuatro mosqueteros, hasta podría asegurar que era el que uso Aramis en su última pelea. Dio un pequeño suspiro. Sabia de las manías de su hermano por los disfraces y de lo detallista que era en todo lo que hacía –Pero ni crea que me pondré esa capa tan ridícula- refunfuñaba mientras se quitaba la ropa que llevaba puesta.
Le costó un poco colocarse aquella ropa tan complicada –Y porque demonios tiene que ser tan pesado… que acaso no les daba calor- renegaba mientras intentaba ponerse aquellas cosas.
Cuando por fin logro colocarse todo, resignado y preparado psicológicamente se coloco frente al espejo, frunció el seño al ver que se veía peor de lo que se sentía………. En ese momento tocaron a su puerta.
-¿Quién es?- dijo de mala gana tratando de acomodarse las botas.
-Señor Uchiha… el modelo 00 ha sufrido un pequeño daño mientras limpiaba el horno de la cocina- una suave voz sonó al otro lado de la puerta.
Sasuke la reconoció al instante, era una de sus maids. Sabía que tarde o temprano tenía que pasar, había estado mucho tiempo fuera de la casa, y más que otro el modelo 00 era el que necesitaba de mayor atención, ya que desde que lo hizo no había cambiado nada en el. Algo curioso le paso en ese momento… por más que intentaba no podía recordar el rostro de su prototipo –El es la copia exacta de la persona más importante en tu vida- las palabras de Itachi sonaron fuertes en su cabeza. Esa tenía que ser la solución a sus problemas, si veía el rostro de su prototipo, sabría quien era la persona más importante en su vida. Sin dudarlo ni un segundo salió del cuarto y se dirigió a su taller.
Tal fue su motivación por verlo que olvido lo que llevaba puesto. No fue hasta que paso por uno de los espejos del pasillo que se dio cuenta, pero ya que, tenía algo más importante que hacer en ese momento. Tenía que pasar por la sala para ir a su taller, entre más se acercaba, comenzaba a escuchar algunas voces. De inmediato reconoció una, y su instinto asesino creció rápidamente.
-…Así que tú le ganabas en las peleas cuerpo a cuerpo…- decía entretenido Itachi.
Disminuyo la velocidad de sus pasos al ir llegando a la puerta que daba a la sala.
-Itachi no te rías… este monstruo siempre me ganaba…. No sé de dónde sacaba tanta fuerza-ttebayo…. Si somos del mismo tamaño.
Sasuke llego al filo de la amplia puerta, asomo un poco la cabeza para ver quiénes eran los que acompañaban a su hermano. Una extraña felicidad invadió su cuerpo cuando vio que frente a su hermano estaba aquel chico rubio que lo había ido a ver en el hospital, aquel al que al parecer había olvidado.
Ahí estaba luciendo un traje que le recordó rápidamente a los vampiros elegantes de Anne Rice. Su cabello rubio sobresalía de los colores tierra y opacos de su ropa. No podía creer que había olvidado a ese chico… ¿Cómo se puede olvidar a alguien como él?...... Permaneció por algunos minutos mirándolo mientras se defendía de las indirectas de su hermano y de los toqueteos de otro chico que estaba a su lado -Un momento-…-¡Toqueteo!..... Pero qué demonios- grito su yo interno al percatarse de la otra persona que estaba en aquel cuarto.
Un dolor en su cabeza comenzó a atormentarlo, el mismo que iba y venía desde que despertó, tenía la sensación de conocer al otro chico. Comenzó a analizarlo. Su cabello era castaño algo claro y un poco despeinado. Su piel era algo morena. Al parecer todavía no le daban su disfraz, ya que vestía una chaqueta de cuero y una camisa negra, por lo que veía sobresalir de uno de sus pies, llevaba unos jeans azules.
Comenzó a incomodarle la forma en que el chico molestaba a Naruto, recordó que ese era el nombre del chico rubio. Vagos recuerdos comenzaron a formarse en su mente. Recuerdos que contenían la imagen de aquel molesto chico... En ese momento recordó a lo que iba… tenía que ir a reparar su robot. Dio un último vistazo a la sala, no le gustaba lo que veía, frunció el ceño y apretó sus puños…. se dirigió a su taller.
Mientras caminaba meditaba lo estúpido que era al fisgonear dentro de su propia casa, también de los extraños sentimientos que aquella escena le había causado, se sentí ansioso por algo. Llego a su taller y el modelo 00 estaba de espaldas recostado sobre la mesa. Tomo sus herramientas y se dispuso a trabajar. Se sentía demasiado bien regresar a su pequeño mundo, hacer lo que más le gustaba, amaba la electrónica.
Cuando era pequeño Itachi le había regalado un pequeño carrito electrónico, no era algo muy novedoso ya que el dinero no les alcanzaba para esa clase de lujos, en realidad él ni siquiera lo había pedido, Itachi se lo había llevado para su cumpleaños. No era el típico niño que jugaba con sus juguetes, pero de vez en cuando le gustaba salir al patio y dejar que el carrito hiciera su magia.
Un día mientras ordenaba su cuarto, no se percato que había dejado el juguete al borde de su mesa y en un descuido cayó al suelo haciendo que este se rompiera. Sabía lo que Itachi se había esforzado para regalárselo, un enorme cargo de conciencia cayó sobre él, era solo un niño de 6 años, pero a veces se comportaba más maduro que el propio Itachi.
Comenzó a estudiar aquel juguete, parte por parte, quería saber cómo funcionaba, pasó horas intentando conectar todo en su lugar, hasta que lo logro y un enorme sentimiento de satisfacción lleno su corazón. Desde ese día comenzó a estudiar los objetos de la casa, la cocina, el refrigerador, la radio.
Al llegar a la universidad el ya tenía muy definido lo que estudiaría. Quería cumplir un reto. Todo objeto electrónico, para él, era como si poseyera vida propia….. Vida….. Recordó que siempre había sido un alma solitaria, nunca había necesitado de nadie, pero eso no significaba que no necesitara a alguien. Todos necesitamos a alguien en algún momento, todos necesitamos sentirnos amados por alguien, necesitados por alguien, claro que el era demasiado orgulloso para aceptarlo.
Recordó que esa fue su motivación, aunque fuera para engañarse, aunque fuera un poco egoísta, quería tener a alguien solo para él. Recordó sus primeros planos, sus primeros bocetos, recordó que desde el principio él había trabajado muy detalladamente en cada aspecto físico de aquel robot….¿Porque me esforzaba tanto… que lo hacía tan especial?... pensó mientras seguía arreglando el robot frente a el…. La copia exacta de la persona más importante en mi vida…. Un rostro comenzó a formarse en sus recuerdos a medida que el dolor en su cabeza se hacía más fuerte, era como si su cerebro le iba a explotar.
Durante su niñez, su adolescencia, cuando iba a la universidad, cuando hizo sus primeros experimentos, cuando se sentía más solo que nunca. Había estado buscando a alguien desde siempre, alguien, alguien. Todos esos momentos estaban relacionados a la imagen borrosa de sus recuerdos. Frunció el ceño a causa del dolor, ya estaba cansado de que todos supieran más de su vida que el.
La fiesta, su hermano, ese chico… todos lo tenían bastante estresado. El dolor hizo que callera de rodillas contra el suelo dejando caer el destornillador que tenia en la mano. Sabía que estaba cerca de un recuerdo muy importante, no quería perderlo, quería saber de una buena vez quien era esa persona… junto sus manos alrededor de su cabeza, le dolía, pero no dejaría ir aquella vaga silueta, no ahora, no ahora que estaba tan cerca… una risa… estaban en el jardín de niños y alguien no dejaba de reírse a su alrededor… un par de destellos azules…. Aquello ojos que se llenaban de lagrimas frente a él…. Ahí estaba… -Solo un poco mas… un poco mas-… pensaba mientras todo a su alrededor daba vueltas. Un árbol de cerezo, una promesa… Te estaré esperando después de la ceremonia… el arrepentimiento, una locura… me gusta Sakura… un plan, un cuarto rosa… no me gusta el rosa, porque no lo hacemos en tonos azules… jugo de naranja, un beso… por muchos años he estado enamorado de ti, date prisa y ámame como yo lo hago… un abrazo, un roce, una oración…….. Sasuke me gustas mucho………. Una lagrima recorrió su mejilla cuando aquella silueta tomo forma… -En verdad que soy un idiota…- se dijo mientras lentamente se levantaba, termino de arreglar a su modelo 00. Lo sentó en la mesa y este le respondió con la sonrisa que el tanto amaba, ahora si lo recordaba, le dio un pequeño beso en la frente.
Termino de arreglar el modelo 00 –Regresa a tus labores- le dijo mientras limpiaba sus manos de aceite y grasa. Su cabeza dolía, pero ahora lo recordaba todo, absolutamente todo, una chispa ardiente se encendió en él, un nombre que desde hace muchos años no le causaba furia….. Uno que desde hace mucho no venía a atormentarlo……. Kiba……. Pensó mientras salía de su taller y se dirigía a la sala.
//:::*.*:::\
-No estoy de acuerdo- dijo decidido Naruto alejándose literalmente de los colmillos de Kiba.
-Tiene que parecer real Naruto- decía acercándose lentamente a su victima.
-Bien… entonces los dejo chicos, los invitados están a punto de llegar y tengo que ir a cambiarme- Itachi muy divertido salió de la sala.
-Itachi… esper…- demasiado tarde, el pelinegro mayor había salido de la habitación dejándolo a merced del vampiro frente a él…
(15 minutos antes)
La plática se había extendido, Itachi vio su reloj, ya era tarde.
-Bueno… si me disculpan iré por el traje del señor Kiba- dijo Itachi mientras se levantaba del sofá e iba hacia una de las mesitas al otro lado de la sala.
-Así que, Sasuke por fin tuvo el valor de confesarte sus sentimientos…- comento Kiba cuando estuvieron solos.
-Acaso tu ya sabias… que él hacia mi…
-¡Claro! Si solo hay que verle la mirada de borreguito que hace ese lobo cuando te ve- Esa frase hizo que Naruto se sonrojara.
-Al parecer todos lo sabían menos yo-ttebayo
-Eres muy distraído Naruto, pero eso es lo que te hace interesante…- se acerco un poco más al rubio.
-¡Bien! Acá está tu traje Kiba- dijo Itachi dándole un juego de ropa negro.
Prenda por prenda fue descubriendo de qué se trataba.
-¿Un……. vampiro?- dijo Naruto.
-Al fin podre usar mis colmillos- comento Kiba viendo el cuello de Naruto.
-Ni lo pienses- exclamo el rubio.
-Piénsalo un poco Naruto… si te dejo una vistosa marca de mordida en el cuello… Sasuke explotara de celos.
-¡NO!... no estoy de acuerdo con eso.
-Tiene que parecer real Naruto.
-Bien chicos, los invitados están a punto de llegar… Naruto, será algo pequeño… déjate morder…- dijo Itachi a modo malicioso al final.
-Itachi esper…- fue la última palabra que escucho antes de salir de aquel cuarto con una pequeña sonrisa en el rostro.
Al parecer Kiba estaba un poco atraído hacia Naruto, eso le daba un toque de realismo a todo su plan.
Mientras disfrutaba de sus pequeñas maldades, Itachi presintió una mala vibra que se acercaba peligrosamente hacia él. El ambiente comenzó a sentirse denso y frio, su corazón comenzó a palpitar cada vez más rápido. Levanto la vista y ahí estaba, cada vez más cerca de él. Conocía esa mirada, conocía esa aura negra… su hermano había regresado a la normalidad. No pensó que pasaría tan rápido, al parecer su diversión había terminado… o quizá solo había comenzado.
-¿Dónde está Naruto?- pregunto directo y decidido.
-¿Naruto?... ¿Cuál Naruto?- pregunto tratando de hacerse el desentendido, tentando su propia suerte.
-Itachi, estoy de muy mal humor como para soportar tu sarcasmo, mi cabeza esta a punto de explotar así que dime rápido ¿Dónde está Uzumaki Naruto?
-¡AH!..... El señor Uzumaki….. Así que ahora ya lo recuerdas… - dijo sizañoso, continuo -mmmmm déjame recordar donde lo vi por última vez…
-………………………..
-¡Ahhh! Ya recordé- dijo despreocupado mientras revisaba en su lista lo que hacia falta de preparar en la fiesta, continuo -El y el señor Kiba estaban en la sala, al parecer tenían tiempo de no verse. Se llevan tan bien, no paraban de reír y jugar y… Creo que Kiba estaba diciendo algo sobre dejar una huella en Naruto o de algo que tenía que ver con una mordida… no recuer….- Itachi levanto su rostro y vio hacia todos lados… Sasuke ya no estaba frente a él.
Al parecer ya había recuperado la memoria y tenía algunas cuentas pendientes con Naruto, unas que solo podían arreglar entre los dos… Itachi dio un pequeño suspiro, habían cumplido su misión, Shikamaru volvía a tener la razón como siempre…. Pero aun así, la fiesta debía continuar.
Sasuke no podía creerlo, de seguro todo eso era parte de algún plan de su hermano… ahhh como le gustaba molestarlo… llego a la sala listo para decirle un par de cosas a Kiba, pero ya no estaban ahí. Su furia solo empeoraba. Recordó la mirada de su ex compañero de clases, se le veía en su mirada el deseo por su dobe, ahora más que en el pasado. Era por eso que no le gustaba la amistad entre ellos. Desde un principio sabía que Kiba sentía algo por Naruto, solo que este como siempre no se daba cuenta.
Fue por el pasillo escudriñando con la mirada, cada rincón de su casa, cada cuarto, hasta que llego a la cocina y no los encontró precisamente a ellos. Al pasar por el marco de aquella puerta se encontró con un verdadero caos, era como si un huracán hubiera pasado por ahí –Mi cocina- pensó, si no fuera porque en ese momento tenía algo más importante que hacer, en ese momento sería el último de los Uchiha… su hermano tenia que rendirle muchas cuentas después de esto…
Luego de algunos minutos llego a su estudio y lo vio, ahí estaba de lo más relajado husmeando entre sus libros…
-¿Inuzuka… donde está Naruto?- dijo al ver que no estaba en el cuarto con el.
-Sasuke, tiempo sin verte… porque tanta formalidad…- dejo el libro que tenía en la mano y se dirigió con amplia sonrisa al pelinegro.
Sonó el timbre de la puerta principal. Al parecer los invitados comenzaban a llegar.
-Te preguntare una vez más. No sé que hayan planeado junto con Itachi, pero ya no es necesario. Ya recupere la memoria. Así que no tienes porque acercarte a Naruto. Así que aleja tus sucios colmillos lejos de él.
-Vaya… ahora si lo defiendes con firmeza.
-Ahora se mas que nunca que él me ama… no en la misma proporción que yo a él… por lo menos no ahora……- dudo por un segundo – Pero no me importa, me conformo con eso. Toda mi vida he esperado por este momento. Sé que soy un idiota por hacerlo sufrir de la manera en que lo hice -…no creas que no lo sé…- dijo en voz baja el pelinegro bajando un poco su rostro.
-Desde la secundaria se que estas enamorado de él. Me sentí furioso cuando me contaron que lo abandonaste luego de la graduación. Naruto desapareció por algún tiempo y fue en ese tiempo en el que le perdí la pista. Créeme que si hubiera estado en mis manos hubiera sido el amigo que el necesitaba en ese momento y luego quizá algo mas…
Esas ultimas palabras le habían hecho hervir la sangre -Yo se que tú estabas enamorado de él también… así que no vengas con la fachada de amigo comprensivo y de buen corazón porque nadie lo creerá y si cometí ese error, no pasara nuevamente, créeme.
-Jajaja al parecer no se te escapa ninguna Sasuke- lo enfrento con la mirada –Si tu no hubieras estado yo sería el que estuviera junto a Naruto… por lo menos yo no lo haría sufrir una y otra vez con mis acciones, así como tú lo has hecho desde siempre.
Esto último lo había herido en su orgullo, Kiba estaba buscándolo y si seguía presionando lo iba a encontrar. La verdad dolía. Pero, no era como si lo sucedido había sido su elección. No era como si el abandonarlo en la secundaria había sido lo mejor. No había día en el que no se maldijera a sí mismo por haber hecho aquella estupidez
-Estúpido perro… mide tus palabras, en estos momentos no estoy de humor para…
…. Se abre la puerta de un solo golpe…
-Te dije que el aura asesina que salía por debajo de la puerta era la de Sasuke- dijo Sai sin siquiera prestar atención a los que tenia frente.
Al cuarto llegaban dos nuevos invitados. Al parecer Itachi ya había hecho de las suyas, los dos estaban usando sus respectivos disfraces. Sai lucía un traje completamente negro con un antifaz y un sombrero de igual color. Botas que le llegaban hasta las rodillas y un pañuelo atado a su cintura, era todo un Sai de la Vega. Gaara por su parte, lucía una camisa de manta con largas mangas y con revuelos en las muñecas, un pantalón café oscuro un poco ajustado, un pañuelo rallado en tonos rojizos atado en su cintura y botas café, parecía un pirata sacado de alguna película.
Sasuke no vio venir lo que pasaría a continuación, solo sintió la fuerte presión sobre su estomago y segundo siguiente la falta de aire en sus pulmones. Un fuerte dolor comenzó a propagarse por su abdomen junto con una ondulante corriente eléctrica que navego por su cuerpo. Aquel golpe no hizo que callera, además de que su orgullo no se lo permitía, pero lo hizo inclinarse y colocar una de sus manos en su estomago.
-kof………. Kof….ko…. tu……. Tu idiota…. Qué crees... que haces….- alcanzo a balbucear Sasuke.
Sai rápidamente se puso en medio de aquellos dos –Gaara siempre de entusiasta en tus saludos…. Que no recuerdas que acaba de salir del hospital… lo vas a matar.
-No, no quiero matarlo… solo pido botarle uno o dos dientes…- dijo un pelirrojo con la mirada perdida en los del azabache –Le dije que no lo perdonaría si lastimaba a Naruto.
-Que no puedes pensar en algo que no sea pelearte… por lo menos espera hasta después de la comida.
-Vaya vaya…. Mas invitados- comento Kiba disfrutando de aquella escena, era la primera vez que veía que alguien golpeaba al pelinegro –Pero tanta violencia no es necesaria… de todas formas ya recupero la memoria- termino de decir el joven vampiro.
-Eso ya lo sé…. Itachi nos lo dijo cuando entramos- recalco Gaara.
-Y entonces… porque demonios me golpeas- pregunto Sasuke recuperando su postura.
-Solo era para sentirme un poco mejor… puedes llamarlo terapia de relajamiento.
-¿Relajamiento?... entonces ven acá que necesito quitarme todo el stress que tengo desde esta mañana….- dijo Sasuke parándose derecho y retándolo con la mirada.
Sasuke no tenía tiempo para estos juegos pero aquello era su infierno personal. Ahora no tenía solo a dos, ahora tenía a tres idiotas con los cuales lidiar……
Las voces comenzaron a escucharse más fuertes en aquel cuarto y un poco más hostiles, solo faltaba un pequeño detonante para que aquello fuera una pelea a sangre fría. Sai siempre había sido el mediador en cada pelea, se lo había prometido a Naruto y aunque todo aquello era demasiado divertido de ver… sabía que si no intervenía alguien saldría herido.
-Chicos… chicos…. Podríamos razonar todos como adultos que somos- hizo una pausa, continuo –Gaara, tu ya sabias a lo que veníamos, deja de andar golpeando a Sasuke, mira que si lo matas Naruto te mata a ti- el pelirrojo solamente se limito a perder su mirada en la ventana del cuarto. Pero Sai no terminaba –Sasuke, me alegra que ya estés mejor y que hayas recuperado todos tus recuerdos, pero ahora en vez de estar acá jugando ¿Porque no vas a buscar a Naruto?
-¿Jugando?- trato de manejar su temperamento – ¡Tu idiota! ¡Y qué crees que estaba haciendo cuando ustedes llegaron!
-Hablando con el…….- dijo Sai mientras levantaba su mano y señalaba a Kiba de lo mas despreocupado.
En ese momento el único sonido que se escucho en el cuarto fue la paciencia de Sasuke llegando a su límite.
En otra área de la casa…
Itachi vio sobre la mesa un pedazo de tela negra, cuando se acerco vio con resignación que era el parche del disfraz de pirata de Gaara, al parecer nada lo haría usar aquella pieza, a decir verdad si no fuera por Sai quien no paro de hablar llamándolo cobarde y otras cosas, Gaara ni siquiera se hubiera puesto el disfraz. No lo aparentaban, pero esos dos en realidad se llevaban muy bien.
-No están acá tampoco- dijo una voz tras el que inmediatamente reconoció.
-¿Tus amigos?...... ya llegaron Naruto, pero al parecer tenían cosas importantes que tratar con Sasuke- dijo Itachi acercándose al rubio que estaba en la puerta de la sala.
-Mmmm eso no me suena nada bien….. deberías haber visto el desorden que causaron dentro de mi empresa una vez… y eso que solo eran tres… ahora con Kiba…- una gotita de frustración asomo por la frente de Naruto, el sabia lo testarudo que era su amigo.
-Bueno, yo iré a buscarlos…- contesto el pelinegro.
-Oye Itachi- interrumpió el menor -Creo que todo esto no va a funcionar. Mejor me quito este traje y regreso a mi casa-ttebayo.
-Mira Naruto- dijo mientras lo tomaba por los hombros –Mi hermano es el ser mas caprichoso y orgulloso que puedas conocer. Tienes que golpearlo con la realidad, de frente y sin consentimientos. Tienes que obligarlo a recordar.
-Pero….
-Tienes que usar la fuerza de ser necesario... Naruto tienes que obligarlo a recordarte... – dijo finalmente dejando a Naruto con la mirada perdida meditando lo recién escuchado.
Dicho esto Itachi salió de la sala y comenzó a buscar a su hermano y compañía, sabía que donde estuviera su hermano estarían todos, al parecer Naruto tenía algo que cautivaba corazones, claro que con esa sonrisa, esos profundos ojos azules y esa personalidad tan carismática ¿Quién no se enamoraría de él?.... –Si mi corazón no tuviera dueño… creo que yo también me enamoraría de alguien así- pensó el mayor mientras caminaba por el pasillo con una pequeña curvatura en sus labios.
Mientras se acercaba al estudio, un ruido comenzaba a sonar más y más fuerte, pero no era cualquier ruido… era más bien gritos y maldiciones de más de uno. Itachi se imaginaba muy bien de quienes se trataba, se lo espero desde el momento en que vio al chico pelirrojo, en sus ojos verdes se veía la intención de matar a su hermano.
Tomo un pequeño sorbo de aire y abrió la puerta….
Frente a él una escena que no sabía si molestarle por el hecho de ver a sus preciados disfraces siendo despedazados o risa por la diversidad y colorido de todo aquello.
El zorro estaba sobre la espalda del pirata mientras este le aplicaba una llave con su brazo derecho al cuello del mosquetero mientras este había tomado la capa del vampiro que intentaba escapar lo más lejos posible de los golpes y patadas que había en todos lados. En ese momento de distracción el zorro se acerco al oído del pirata y luego de susurrarle algo le dio una no tan pequeña mordida en la oreja haciendo que automáticamente Gaara soltara a su persa y como resultado este se apoyara en el Kiba haciendo que los dos cayeran al suelo en una pose muy comprometedora donde Sasuke había quedado sobre el cuerpo de su viejo enemigo…
-Así que- comenzó Itachi –Todos acá divirtiéndose mientras Naruto esta de lo mas devastado por saber si tu mi tonto hermano recobrara la memoria y preocupado por evitar que tu pelirrojo mates a alguien.
Sasuke se paro rápidamente y se dirigió a su hermano -Si estos idiotas no me hubieran detenido ya lo hubiera encontrado…….. ¿Dónde está?
-Creo que iba a mi cuarto, al parecer no le gusta su disfraz y lo cambiaría por otro- una pequeña mentira que sabia le seria perdonada cuando todo esto acabara.
Sasuke no espero más y salió de aquel cuarto dejando a su hermano y compañía a su espalda. Escuchando solo una voz…… -Espero que esta vez no lo arruines barbie-….. Esto último a Sasuke le saco una pequeña sonrisa en los labios mientras corría por el pasillo.
Itachi vio como su hermano correr. Sabía que en cuanto se encontrara con Naruto todo llegaría a su fin, se amaban demasiado como para permanecer más tiempo separados… dio un pequeño suspiro…. Escucho el parloteo a sus espaldas y recordó que aunque todo el problema estaba a punto de solucionarse… él había organizado una fiesta… y no estaba dispuesto a cancelarla. Ya encontraría alguna mentira para ocultar la falta del festejado, de todas formas sabía que Sasuke disfrutaría mas la compañía de Naruto que la del resto de personas.
-Bien chicos… la fiesta debe continuar- dijo mientras esbozaba una pequeña sonrisa.
Mientras tanto Naruto…
-Tienes que usar la fuerza de ser necesario... Naruto tienes que obligarlo a recordarte...- una y otra vez aquellas palabras revoloteaban en su mente. Itachi tenía razón, todos estaban ayudando, el tenía que poner de su parte también y si eso significaba utilizar la fuerza…. Estaba dispuesto a usarla. Sasuke tenía que tomar responsabilidad de todo lo que le había hecho… tenía que tomar la responsabilidad de haberlo hecho enamorarse de él….. O más bien…. Aceptar el hecho que siempre le había gustado pero nunca se había dado cuenta de ello, era un distraído hasta para sus propios sentimientos.
Mientras caminaba pensando en mil y una forma de hacer que Sasuke lo recordara… lo vio pasar ante el corriendo buscaba algo con desesperación. Ni siquiera vio hacia donde él estaba… y eso había sido la gota que derramaba el vaso. Estaba cansado de la indiferencia con la que lo trataba y además ¿Qué era lo que buscaba tanto? ¿Qué parecía ser más importante que él? Naruto se sintió frustrado y decidió seguirlo.
Vio como llegaba al cuarto de Itachi y entraba rápidamente. Esta era su oportunidad, era ahora o nunca, acomodo su ridícula chaqueta y con mirada firme y muy decidido se dirigió al cuarto.
Sasuke corría por el pasillo con solo un pensamiento en su mente… Naruto… no sabía que le diría o como reaccionaria al verlo, pero necesitaba estar con él. Llego al cuarto de su hermano y sin dudarlo abrió la puerta y entro en el.
Busco desesperadamente en cada rincón, pero no había nadie ahí. Se acerco a la cama y se dejo caer frustrado en ella ¿Acaso no volvería a alcanzarlo?..... En ese momento alguien giro la perilla de la puerta y entro lentamente. Sasuke pensó que era su hermano que venía a burlarse, pero la voz que escucho hizo que su piel se erizara….
-Esto se termina aquí… Uchiha Sasuke- dijo Naruto mientras giraba la llave de la puerta para que nadie entrara al cuarto.
Sasuke se levanto rápidamente y giro su vista hacia la puerta… aquella ropa le quedaba perfecta, al parecer su hermano había hecho una gran elección, ahí estaba tan hermoso como siempre, su dobe, su uzuratonkachi…. Su Naruto… pero había algo en aquella mirada que aunque eran los azules que tan bien conocía, tenían un brillo que veía por primera vez.
-Naruto….- balbuceo, afuera del cuarto se comenzaba a escuchar música. La fiesta había comenzado. Estaba más que seguro que Itachi encontraría alguna forma de ocultar su ausencia, por el momento, esto era lo más importante para él.
-Se que el doctor dijo que no teníamos que presionarte- interrumpió….. –Pero no puedo quedarme con los brazos cruzados mientras todos hacen lo posible por ayudarme. No sé porque me borraste de tus recuerdos, quizá ni siquiera sea tu culpa, pero eso ahora ya no importa. Lo he decidido y cuando me propongo algo lo cumplo porque soy Uzumaki Naruto, y como tal hare que me recuerdes aunque tenga que usar la fuerza teme.
Sasuke veía la determinación en los ojos de su Naruto –Así que ese brillo…. Es por mi…- pensó mientras el rubio se acercaba a él. Sasuke también comenzó a acercarse. No sabía si llorar o reír. Este momento era el que siempre había soñado. Naruto en realidad lo amaba… lo amaba tanto como para luchar por sus recuerdos, no quería desaparecer de su vida.
-Naruto… yo…
-No me importa que creas que Sakura es tu vida ahora, no me importa lo que el doctor dijo, no me importa si vuelves al hospital luego de esto- estaba a escasos pasos de Sasuke, sus ojos se encontraron mutuamente, continuo –Lo único que quiero en estos momentos es que tomes responsabilidad por hacer que me enamorara de un idiota, molesto, egoísta y caprichoso como tú. El destino siempre logra separarnos, pero esta vez no lo dejare….
-Naruto tu no comprendes…. Yo….
-Sé lo que me dirás y no quiero escucharlo…… así que……… discúlpame teme…. Esta vez, el egoísta seré yo…. No puedo dejarte al lado de Sakura….. Esta vez no te perderé, Sasuke.
Al parecer no era el mejor día para Sasuke, sus reflejos lo traicionaban nuevamente, probablemente por haber pasado tanto tiempo inactivo, todo paso en un abrir y cerrar de ojos…
Naruto rápidamente se acerco a Sasuke y lo tomo por el brazo pasando por bajo de este y en un par de segundos dio la vuelta para tirar a Sasuke al suelo y así un estruendo hizo temblar las paredes de aquel cuarto. Sasuke quedo de espaldas contra el suelo algo aturdido por el golpe, al parecer su dobe había perfeccionado aquella llave que le enseño en la secundaria, el dicho “Nadie sabe para quién trabaja” le vino a la mente.
Sintió algo pesado sobre su pecho y su vista estaba algo borrosa pero sabía que era Naruto el que se había sentado sobre él. Su corazón comenzó a latir como loco al darse cuenta que lo tenía tan cerca. Ahí estaba con su disfraz tan elegante, ese pañuelo que resaltaba sus ojos, esos pantalones que le quedaban tan justos y ese cabello rubio rebelde que siempre lucia tan bien en el. Todo había pasado tan rápido, Naruto no lo dejaba ni siquiera hablar, quería decirle que ya lo recordaba, quería decirle lo feliz que se sentía por saber que él lo amaba también, pero cuando Naruto se proponía algo, no había nadie que lo detuviera.
Naruto bajo su rostro hasta estar a milímetros del de Sasuke.
-Esto siempre funciona en las películas…
Sasuke nunca había visto a Naruto tomar la iniciativa en nada, pero ahora parecía otra persona, nunca lo había visto tan dominante como ahora. Naruto tomo suavemente su rostro y con la gentileza de un primer beso, comenzó a rosar sus labios contra los suyos –No dejare que me olvides tan fácil- susurro mientras volvía a tomar sus labios entre los suyos y el beso se hacía más largo.
Sasuke comenzó a reaccionar, el que lo estaba besando era Naruto… su Naruto… no podía quedarse ahí tirado, cuantas veces había soñando con esto, tenerlo así junto a él. Levanto una de sus manos y la coloco en la cabeza de Naruto para atraerlo más a él y hacer de aquel beso algo más profundo, descargando toda la pasión reprimida que tenía desde hace muchos años. Sasuke poso su otra mano en la cadera del rubio para hacer que este bajara un poco mas, Naruto enredaba sus dedos en la negra cabellera de Sasuke dando por momentos suaves jalones.
Sasuke en un solo movimiento, tomo a Naruto y lo hizo girar para que este quedara bajo el y así devolverle con ferviente pasión el beso que su rubio le había dado antes. Separo su rostro y viajo sigilosamente hasta el oído del menor –Perdóname por todo lo que te he hecho sufrir Naruto… soy el más grande idiota por haberte olvidado siquiera por un momento. Eres lo mas importante en mi vida y jamás me lo perdonare… espero que por lo menos tu lo hagas- susurro al oído para luego regresar a posar sus ojos sobre aquellos bellos zafiros, continuo –Comprenderé si no puedes perdonarme…. Tu solo dime que me aleje de ti y lo hare…
-¿Ya recuperaste la memoria?........ ¡Y porque demonios no me lo dijiste teme!- dijo jaloneándole un mechón de su cabello negro.
-Tú no me dejabas hablar dobe……….. y después me gusto tanto lo que me decías que no quise interrumpirte…. Ya que quizá sea la última vez que quieras verme…. Es bueno por lo menos saber que por un momento fui especial para ti.
-Sasuke……. ¿Crees que estaría aquí con este traje tan ridículo si no quisiera que regresaras con migo?- dijo con un poco de nerviosismo ya que era primera vez que le decía este tipo de cosas.
Tú nunca estarás solo desde este momento en adelante.
Si tú en algún momento sientes que caes, yo no lo permitiré.
Tú nunca estarás solo, te sostendré hasta que el dolor desaparezca
Aquello saco una sonrisa en ambos… ya que sabían que se veían totalmente ridículos en aquellos disfraces. (En algún lugar de la casa, Itachi estornudaba)
-Te amo Naruto, siempre lo he hecho y siempre lo hare…- tomo la mano de Naruto y deposito un tierno beso en la palma.
Y ahora mientras pueda, te sostendré con ambas manos
Porque desde ahora se, que no hay nada que pueda necesitar más que a ti
Así que si todavía no lo he dicho, te lo hare saber ahora
-Yo también… te… te amo Sasuke…- sus mejillas se tornaban de un adorable color cereza mientras mencionaba esas palabras.
Tú nunca estarás solo desde este momento en adelante
Si sientes que caes, no lo permitiré
Cuando toda la esperanza se haya ido, se que saldrás adelante
Nosotros veremos en mundo, te sostendré hasta que el dolor desaparezca
Sasuke bajo su rostro para llegar a aquellos labios de los cuales jamás se cansaría de besar, mordió suavemente el labio inferior para luego atraparlos entre los suyos, ahora el estaba bajo control y mantenía el cuerpo de Naruto bajo el suyo. Le encantaba sentir el palpitar alocado del corazón de su dobe, su cuerpo era cálido y se amoldaba perfectamente bajo el suyo, bajo su mano hasta colocarla en la cadera del rubio. Dejo por un momento sus labios y sigilosamente comenzó a dar pequeños besos en la quijada haciendo un recorrido hasta el cuello donde profundizo el beso. Naruto pudo sentir el rose de los dientes de Sasuke sobre su piel, haciendo que se estremeciera…
-El único que puede morder tu cuello soy yo-… dijo en un pícaro susurro.
-¡Oye! Y tú como sab……- sus labios fueron callados por los de Sasuke.
-Eres mío y de nadie más, ahora más que nunca no dejare que te vayas de mi lado, Naruto.
La piel de Naruto se erizo al sentir como los dedos de Sasuke rozaban peligrosamente cerca de su ombligo y rondaban los límites de su bóxer. Al parecer su lado pervertido había regresado junto con sus recuerdos.
-¡OI TEME!
-No puedo escucharte Naruto- decía mientras seguía atormentando a su víctima con besos y caricias bastante sugestivas.
-Como me respondes si no me enti…. Ummmm….- nuevamente era callado.
Ya para que luchaba… simplemente se dejo llevar por los labios que lo besaban… la música seguía sonando en cada rincón de la casa mientras ellos se entregaban uno al otro como locos enamorados, dejando todas las dudas atrás y dejando que sus sentimientos hicieran el trabajo.
Tienes que vivir cada día
Como si fuera el último ¿Qué pasaría si el mañana nunca llegara?
No dejes que se te escape, podría ser el único….
En ese momento todo desapareció para ellos, la fiesta, sus amigos, todo. Solo existían ellos dos, solo se necesitaban ellos dos. Tendrían mucho tiempo por delante para aclarar lo que hiciera falta, ahora que se tenían uno al otro podían hacer lo que fuera, ya ninguno estaría triste, ya ninguno estaría solo ¿Acaso no es eso a lo que llamamos amor? Tener a alguien junto a ti. Saber que si extiendes tu mano hay otra lista para tomarla. Saber que hay alguien que siempre piensa en ti, expresarlo todo con una mirada, con una caricia ¿A caso no harías lo que fuera por no perder a ese amor?
Siempre estaré ahí
No me perderé ningún día más
Siempre estaré ahí
No me perderé ningún día más…
**FIN**