El sonido del agua cayendo por la cascada retumbaba terminando el silencio del ambiente tranquilo de las montañas. Pero aun así los pájaros cantaban, el sonido de la suave brisa del viento llenaba la pequeña cabaña de paz y quietud. Pero como bien dicen, nada es perfecto, siempre aparece algo que interrumpe.
Shiryu se encontraba tomando una taza de té junto a su esposa, disfrutaba de la calma y de un momento a solas con su ser más amado, aunque faltaba un integrante a la foto familiar, su hijo. Tomo en un sorbo mirando a su esposa, durante trece años el no pudo verla, no pudo escucharla ni mucho menos tocarla debido a las marcas de oscuridad, se veía tan distinta como igual, los años no le pesaban y mucho menos habían hecho cambiar esa agradable sonrisa por la que se enamoró cuando aún era un adolecente.
-Shunrei…
-Al fin quieres ir a buscar a Ryuho- exclamo la pelinegra mirando emocionada.
-No, eso no…
-Shiryu, han pasado dos semanas- exclamo indignada- ¿No te preocupa en lo más mínimo?
-De haber pasado algo ya habría vuelto, se está divirtiendo seguramente intercambiando anécdotas de guerras con Shura, además esta con Koga.
-Sé que tienes razón, pero no puedo evitar sentirme preocupada por mi pequeño…
-Si Ryuho no me ha contactado es que en verdad la está pasando bien, nunca tuvo la oportunidad de ser un niño normal y Shura se la está brindado- intento hacerla recapacitar- por una vez Ryuho no tiene que entrenar como santo, no hay una batalla cercana y esta con alguien que es ajeno a todo… ¿No te parece que nuestro hijo tiene que tener una oportunidad para probar otra vida?
-Tienes razón, pero no puedo evitar preocuparme por mi niño.
-Shunrei…tranquila, sabe cuidarse…
-Shiryu- exclamo una voz que pronto se materializo, en un par de segundos aquel muchacho de sonrisa socarrona entro a la habitación y levanto polvo por doquier. Los dos adultos miraron expectantes como por la tele-trasportación aparecía el santo de Aries.
-¿Qué pasa Kiki?- pregunto cuando lo vio aparecer.
-Tu maestro Dohko, el antiguo patriarca Shion y mi maestro Mu quieren vernos hoy, a todos, eso incluye a Shunrei y a Ryuho- exclamo dejándole ver la nota que Shion había dejado en el libro.
-¿Los viste?
-Yo no, fue Raki quien vio a tu maestro y al maestro de mi maestro…no invitaron a un almuerzo… ¿Dónde está Ryuho?- pregunto buscando con la mirada al santo de dragón.
-En España, con Shura de Capricornio…tendré que irlo a buscar- dio un largo suspiro- regreso en un momento.
-Preparare los trajes de gala que nunca usamos- sonrió la pelinegra mirando complacida.
Shiryu fue a buscar un papel donde tenía la dirección de la casa de Shura, estaba seguro que aun viviría ahí y muy probablemente Ryuho no estaría contento de tener que volver a china. Le dio la fotografía con la dirección a Kiki quien solo sonrió y en un parpadeo se tele-trasporto al techo de la casa de empeño, luego en un callejón que vieron para no asustar a los transeúntes.
-Cerrado- exclamo el santo de libra al leer un cartel en la puerta- es fin de semana.
-¿Nadie quiere vender cosas en fin de semana?
-Debe tener un horario, creo que hay una puerta al costado- respondió y fue a donde había una puerta que estaba junto al gran ventanal, toco el timbre y luego vio a un hombre ya añejado que recordaba como el padre de Shura.
-Dígame…la tienda está cerrada, vuelva en una hora.
-Busco a Alejandro de los Monteros- exclamo Shiryu mirando un poco triste al hombre mayor, parecía que los años que llevaba sobre si fueron un gran golpe, por lo que pensó que Shura aún era autista- ¿Se encuentra?
-No se encuentra- esbozo una gran sonrisa- pero se donde encontrarlo.
-Dígame… ¿Vio a un niño con él?- pregunto preocupado, si Shura aún era autista era posible que Ryuho no estuviera con él, o todo lo contrario le hubiera hecho daño, y su hijo al no querer lastimarlo no hubiera hecho nada- Tiene trece años, es bajo para su edad, delgado…
-¿Ryuho? Oh si, ese niño y su amigo vienen seguido, gracias a ellos he vendido muchas cosas a jóvenes, cosas que me costaba vender…deben estar en el muelle…los llevare- exclamo dándose la vuelta y busco un par de llaves- de paso buscare al despreocupado de hijo que tengo.
Kiki y Shiryu se miraron sin comprender, subieron a un auto viejo que estaba justo frente a la puerta del local y que el señor de los Monteros abrió con la llave. Muy amablemente el hombre se encamino hasta un muelle no muy lejano donde había ciertos de barcos, al parecer estaban en épocas de mucha actividad turística.
Fernando de los Monteros se encamino a uno que se veía a simple vista pertenecer a algún hombre adinerado, era blanco y tenía una puerta de vidrio que impedía ver hacia adentro. El anciano toco la puerta y espero ser atendido.
Kiki y Shiryu miraron con sorpresa a quien abrió aquella puerta corrediza, era un hombre bastante bien fornido, de cabellos castaños alborotados, sonreía con picardía y al parecer era conocido del señor de los Monteros.
-Aioros ¿Dónde está mi hijo y el muchacho?
-No llega en buen momento señor de los Monteros…Shura esta…
-¿Entonces vencieron a Loki?- pregunto la voz emocionada de Ryuho, Kiki y Shiryu se adentraron, ya que Aioros provecho para darles paso.
Ryuho, Koga y Shura estaban sentados en un amplio sillón que daba la vuelta, el español parecía contar con lujo de detalles una anécdota de hace bastantes años mientras los dos adolescentes escuchaban. Ryuho se veía entusiasmado escuchando pero Koga parecía aburrido.
-No, el temible Loki a pesar de nuestro fuerte ataque seguía con vida…
-Pero no tiene sentido, tenían las armaduras divinas.
-Loki era un dios Koga… ¿En que estaba? Oh si, comenzamos a atacarlo, Aioria volaba a la velocidad de la luz.
-Al final Leo hizo todo… ¿Qué hizo Aioros?
-Darle ánimos a mi hermano- sonrió interrumpiendo- todos animamos a Aioria sobre el final y de un solo ataque, después de mucho perseguir a Loki, logramos vencerlo…cuando logramos acabar con el…comenzamos a desvanecernos en el viento…
-Primero hablamos con Poseidón para que enviara las armaduras a los campos Elíseos…ayudando a nuestros chicos de bronce, nuestras esperanzas de que salvaran el mundo estaban en ello- exclamo Shura- finalmente, nos dimos media vuelta, camino hacia el atardecer…desvaneciéndonos como si fuéramos polvo…Aioros camino con Saga…tenían unas cosas que arreglar, que si bien se habían perdonado no todo estaba dicho, aún tenían que cruzar palabras…yo me fui con Aldebarán, no tenía cara para ver a Aioros…
-¿Y los demás?- pregunto Ryuho conmovido.
-Uno a uno nos fuimos disipando- conto Aioros- Camus y Milo se fueron juntos, tenían cosas que arreglar…creo… ¿Ahora viven juntos no?
-Oh si…y el santo de piscis tomo del cuello al de cáncer y se desvanecieron en el aire…
-¿Y mi abuelo?
-Se fue con Shaka…Mu se fue solo- respondió Aioros- ¿Cómo sabes que me fui con Saga si tú te fuiste primero?
- Un pajarito me dijo que solo quedaron Aioria, Saga y tú…y Aioria tenía que hablar con su amiga.
-Contando otra vez esas cosas que escribiste…he hijo….esos cuentos de guerras santas y dioses…No puedo creer que lo apoyes Aioros- negó Fernando de los Monteros.
-Es bueno para los chicos escuchar ese tipo de cosas, los hace creer en los milagros- acoto- volviendo a eso… ¿En qué quedamos?
-Ya había terminado.
-Hay algo que no entiendo- interrumpió Ryuho- Mi abuelo no uso su mayor técnica al final, los cien dragones de rozan son mucho más poderosos que el dragón naciente…ni tampoco Mu de Aries…es decir…La Revolución de Polvo estelar no puede compararse con la técnica que el creo, la extinción de luz estelar y además…
-Eso pregúntale a ellos- exclamaron Aioros y Shura a la vez.
-Tampoco entiendo….el muro de cristal es la mayor defensa, pero los escudos de libra también lo son, porque las armas de libra son capaces de destruir estrellas…y la defensa de Shaka de Virgo es invencible…fueron separados los tres.
-Loki era un dios.
-Además…padrino… ¿Su única técnica es Excalibur?- pregunto Ryuho- todos tienen un abanico de técnicas, ofensivas o defensivas…hasta el santo de cáncer tiene más de una y el de tauro pero…
-Mi espada de justicia podía cortarlo todo, no necesitaba más- exclamo orgulloso- excalibur hace honor al dicho, los santos de Athena pueden partir la tierra de una patada y cortar el viento con su puño.
-A mí no me cortaste- rio orgulloso Aioros.
-Demasiada imaginación por un día- exclamo el señor de los Monteros- Hay que abrir la tienda Alejandro…Aioros ya lo has tenido por mucho tiempo…también este hombre te busca hijo.
-¿Qué?- pregunto alzando la mirada y noto a Shiryu y un hombre a su lado de cabellos castaños, casi anaranjados- Shiryu…
-Papá- exclamo Ryuho emocionado- te has perdido la mejor historia de todas las que me conto mi padrino… ¿sabías de la guerra contra Loki que se llevó en Asgard mientras ocurría la pelea en los Elíseos?
-Una pregunta y me voy… ¿La armadura de sagitario puede volar?- pregunto Koga sin darle real importancia.
-No, puede planear si cae desde un acantilado para detener la caída, pero no volar, las alas son estéticas, pero por su tamaño pueden usarse para planear…si la armadura está completa y el portador consiente- respondió Aioros.
-Ya está- sonrió Koga levantándose- Ya era hora que nos vinieran a buscar.
-Yo quería quedarme un tiempo más…quiero saber del antes de las revuelta del santuario.
-Otro día, Ryuho, tu papá te vino a buscar- le interrumpió Shura- seguramente nos volveremos a ver muy pronto.
-Nada de eso jovencito, hace días que no atiendes la tienda por estar con Aioros… ¿Tu no trabajas?- exclamo Fernando mirando indignado.
-Soy arquitecto de una empresa española, todavía me quedan unos meses de contrato.
-Un gusto verte Shiryu, aunque fue solo un momento- interrumpió el español acercándose a darle la mano al pelinegro, el cual aún estaba estupefacto por lo que sus ojos veían.
-Gracias por cuidar de Ryuho- asintió con la mirada- bueno, es hora de irnos ¿La pasaste bien?
-Sí, mucho, mi padrino ha vivido tantas cosas antes y ahora- exclamo con emoción- ¿No me puedo quedar un poco más?-pregunto un poco desanimado, mientras veía como detrás Koga se acercaba junto a Kiki.
-Lo siento hijo, puedes regresar después, ahora tu abuelo quiere verte.
-¿Mi abuelo?
-¿El viejo santo de libra?- pregunto Koga acercándose- es que nos contó muchas historias…Ryuho no tiene límite.
-Los llevare a la cascada para que se alisten- sonrió Kiki- y a Koga a donde esta Athena, prepárense que nos quieren reconocer…no puedo esperar a ver a mi maestro Mu.
-Genial, voy a conocer a mi abuelo, el legendario santo de libra- acoto con emoción.
-Y Shion de Aries, y a Mu de Aries- continúo Kiki.
- Conoceré a los santos legendarios sobrevivientes de la guerra santa del siglo XVIII.
-Ya le dieron ánimos…Ryuho, ven un segundo, tengo que decirte un secreto- exclamo Koga mirando con una sonrisa pícara, le dijo algo al oído al santo de dragón, el cual lo miro sin comprender, y luego se alejó dónde Kiki.
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En las lejanas montañas de Jamir, en aquella vieja torre se podía respirar un aire más alegre y familiar, la antigua sala que había sido cubierta por el polvo se encontraba ya iluminada por la luz del sol, las cortinas eran nuevas, el polvo de los antiguos muebles haba desaparecido por completo y un mantel bellamente bordado estaba en la mesa.
En el comedor dos hombres se encontraban sentados, ninguno cruzaba miradas y no era porque no quisieran hacerlo o se sintieran alguna clase de remordimiento, el mayor estaba sentado en la mesa esperando impaciente que la comida llegara o hubiera noticias de ella, mientras el otro estaba sentado en un viejo sofá leyendo lo que parecía un periódico de las tierras de donde venía. Dohko miraba con disimulo sin comprender que hacia Saga ahí, el día anterior Shion le dijo a Mu sobre la reunión familiar entre los regentes de Aries y Libra, que se iba a reencontrar después de tantos años por el fortuito encuentro entre la discípula del ahora santo de Aries y el anterior patriarca, pero Mu había insistido en llevar a Saga, porque, según él, cada fin de semana la pasaba con el heleno.
-Esto es aburrido- bufo Dohko sentando en la mesa- ¿Por qué debo esperar a que esos dos terminen de cocinar?
-Es comida típica del continente de Mu…aunque también vienen chinos, no estaría mal comer algo de comida china- susurro Saga sin dejar de ver el diario.
-Saga ¿Es tan importante que leas el diario?
-Cuando lleguen las visitas no poder hacerlo y mañana tengo trabajo, la economía argentina no es estable desde hace varias décadas por lo que prefiero informarme para no perder mi trabajo.
-Escuche algo de unos fondos que llaman buitres…
-No son buitres, aunque se los nombre así- interrumpió guardando el diario- vera, cuando asumió el primer gobierno estable después de las grandes crisis económicas, se pidió un préstamo, el préstamo no se pagó en tiempo, por lo que mientras más pase el tiempo más intereses se suman a la deuda, el gobierno los llama buitres por las grandes sumas de dinero que se piden pagar y se niegan a hacer los pagos correspondientes
-Ya veo- susurro mirando- sabes de economía.
-Tengo título para ejercer en base a la economía.
-¿No has pensando en irte del país?
-Lo he pensado, pero Kanon no ha recuperado sus memorias pasadas, tampoco puedo darme el lujo de dejar a mi madre con el ruin padre que me toco, tampoco la situación económica mundial me asegura trabajo si emigro- respondió.
-Ya veo, ya veo…deja de tratarme de usted, tenemos casi la misma edad.
-Usted tiene treinta años- sonrió mirándolo detenidamente.
-Ni que sea tan viejo, Shion tiene treinta y dos.
-Me alegra tener veintisiete años…anciano maestro, es decir Dohko, tengo una teoría acerca de la recuperación de nuestras memorias…
Una gran polvareda se levantó de repente interrumpiendo la charla, ante los ojos de los únicos dos hombres en la sala aparecieron, con una sonrisa de oreja a oreja las visitas que tanto esperaban. A pesar de los años ni Shiryu y Shunrei habían cambiado, se veían igual que como los dejo hacía más de veinte años, en cambio Kiki ahora era un hombre, y ni hablar de quienes los venían acompañado, la pequeña Raki a quien Dohko ya conocía y un niño de cabellos negros que el anciano maestro de cinco picos estaba muy intrigado en conocer.
Dohko se paró en seco y fue a saludar muy amenamente mientras Saga observaba con intriga, intentando reconocer al grupo, de los cuales solo reconoció a uno, Shiryu estaba igual que la última vez que lo vio.
-Hola ¿Cómo están?- pregunto el chino acercándose, siendo abrazado por su antiguo discípulo, hoy su sucesor.
-Maestro.
- Shunrei, mírate, eres toda una mujer- sonrió mirando a su hija.
-Roshi- susurro.
-Puedes llamarme así, pero solo tú, para todos yo soy Dohko, no tengo una sola cana- sonrió en burla y se acercó al par de descendientes de Mu- veamos, tú debes ser el niño inquieto…Kiki- sonrió antes de darle un coscorrón- escucha muchacho la espada de Athena jamás debe estar sola, debe ser guarecida, al igual que las armaduras, no puedes abandonarlas…
-Lo siento…con la guerra contra marte yo…lo siento- sonrió avergonzado- lo siento.
Dohko asintió y se agacho a ver a la pequeña Raki quien sonrió- Dime pequeña ¿Te gusto tu aventura de ayer?
-Fue divertida, me gustaría tener otra pronto.
-La tendrás, hay muchas cosas que rescatar que seguramente tu maestro olvido guarecer- sonrió antes de mirar a Ryuho- ¿Y tú eres?
-Soy Ryuho de Dragón, santo de bronce e hijo del santo legendario Shiryu de dragón, hoy santo dorado de libra- exclamo serio, intentando eludir que se sentía emocionado.
-Eres muy chico para ser tan serio- le interrumpió revolviéndole el cabello- te saldrán canas verdes de pequeño si continuas así.
-Yo era serio a su edad… ¿Cuántos años tiene? ¿Quince, dieciséis?- pregunto Saga parándose a mirarlo- Shiryu es un gusto verte con bien y lo mismo para ti Kiki.
-Saga de Géminis.
-¿Ustedes es Saga de Géminis?- pregunto Ryuho- Uno de los santos dorados más poderosos del siglo veinte, quien asesino al anterior patriarca Shion, se hizo con el cargo durante trece años, intento asesinar a Athena, le dio su armadura a Seiya de Pegaso, comenzó la rebelión del santuario donde murió, fue revivido por Hades para ir por la cabeza de Athena y uso la exclamación de Athena para asesinar a Shaka de virgo…
-Él lo pidió- interrumpió- sí, soy yo.
-¿Qué tenía que hablar con Aioros de Sagitario después de la batalla de Asgard contra Loki?- pregunto intrigado- mi padrino dice que tenían que hablar algo y bueno…
-Cosas- susurro- niño, no vayas a mencionar eso a cuando este Mu presente.
-¿Dónde está mi maestro?- pregunto Kiki sonriendo amablemente.
-En la cocina, con Shion, no los molesten, mientras los descendientes de Mu cocinan es mejor no molestarlos- respondió Dohko- siéntense por favor, cuéntenos todo y con lujo de detalles, Ryuho, me llego una carta de España, dice Shura que tuvieron una guerra hace poco contra la diosa Palas, quiero saberlo todo pero que tú me lo cuentes-
-Es una larga historia…
-Hay mucho tiempo- sonrió Dohko.
-Saga…disculpa que suene irrespetuoso ¿Qué haces aquí?
-Los fines de semana Mu y yo intentamos descubrir el sentido a lo que vivimos- respondió la duda del ahora santo de libra- ya que no tenemos uso de nuestros cosmos intentamos averiguar quién, porque o bajo cual misión fuimos revividos.
-¿Acaso no habían rencarnado?- pregunto Ryuho- mi padrino no me hablo mucho al respecto de su situación.
-No es rencarnación- respondió Dohko mirando serio- somos exactamente idénticos a quienes fuimos antes de morir, poseemos nuestras memorias pasadas, lo único que cambio ahora es que todos tenemos familias, rencarnar es nacer de nuevo, Ryuho, es comenzar desde cero, sin recueros pasados, si bien al principio no los teníamos pero luego estos regresaron, los santos de Athena rencarnan cada doscientos años, no dan los tiempos ¿No lo crees? No se cumplieron ni diez años desde nuestra última muerte y comenzamos a nacer.
-Entiendo- miro pensativo a Saga- ¿Y a que llegaron reuniéndose?
-Es algo que me gustaría discutir con Shion, quizás el vea desde otro punto de vista.
-El almuerzo- llamo Shion entrando con varios platos- Dohko, debiste decir que llegaron.
- Lo ayudo maestro- exclamo Kiki mirando con emoción como Mu salía de la cocina repleto de platos.
-Me hubiera gustado recibirte distinto, Kiki.
-Ya abra tiempo para los abrazos- sonrió Dohko.
El almuerzo trascurrió entre charlas y risas, Mu y Shion se pusieron al día con Kiki sobre aquellas ultimas guerras que habían tenido al discípulo de Mu alejado de la vieja torre donde había crecido, Ryuho comento sobre la existencia de Palaestra, como una escuela donde se fortalecían las habilidades de los santos una vez que lograban obtener sus armaduras, además de las guerras donde había participado, Shiryu también hablo sobre la guerra de Marte y sus consecuencias que lo tuvieron en cinco picos, aislado del mundo por completo y del entrenamiento que tuvo que hacer con Ryuho para poder desarrollar su potencial. Después del almuerzo Shion comenzó a preparar café para después de la comida mientras buscaban hablar de temas más serios por el momento, Saga saco de su maletín una computadora personal y abrió un archivo para dejar ver sus recientes hallazgos.
-¿Sabes manejar una computadora?- pregunto Ryuho mirando con detenimiento-como me han entrenado desde pequeño para ser santo nunca pude comprender la tecnología, ni siquiera tengo celular.
-Te comprare uno, es importante hacer su uso en este tiempo, más cuando eres un santo de Athena que siempre está por entrar en batalla- acoto Saga- hice una línea del tiempo en base a lo que nos ha ocurrido, y gracias a los testimonios de los demás con Mu tenemos una teoría de lo que ha pasado con nosotros, Shura me ayudo con los gráficos.
-Te escuchamos- exclamo Shion.
-Muy buen, hace treinta años el monolito donde nuestras almas se encontraban siendo castigadas por atentar contra los dioses fueron destruidos ¿No es así?- el monolito solo podía ser destruido por uno de los doce olímpicos, sabemos que Athena, Hades o Poseidón no pudieron ser, Hades fue muerto en batalla por Seiya y sus amigos, Poseidón fue sellado y Athena estaba en la tierra.
-Los gráficos están geniales- exclamo el santo de dragón.
-Shura los hizo- sonrió pasando a la siguiente imagen-sabemos que Zeus desapareció, Artemisa fue vencida junto a Apolo, pero el panteón griego es más extenso de lo que creíamos, dioses con la capacidad de revivir no hay solo uno, por ejemplo, el hijo de Apolo, Asclepios tenía la capacidad de sanar tan desarrollada al punto de revivir, y quien lo había enseñado fue Quirón.
-¿Ese centauro?- señalo Raki a la pantalla.
-Así es, continuando con la explicación, con el tiempo fue pasando uno a un fuimos naciendo, pero luego hubo variaciones- señalo- cuando yo nací, ese mismo año, mi familia emigro a europea, siente años después las familias de Aioros y Milo hicieron lo mismo, a pesar de tener hijos mayores, curiosamente todos fuimos a parar al mismo país, Argentina, aunque separados por regiones geográficas diversas, Milo y yo fuimos a vivir al norte Argentina, rodeados de llanuras y montañas, Aioros y Aioria estaban al este, en zonas cercanas al nivel del mar…
-No veo a donde va todo esto- bufo Dohko mirando aburrido.
-Nuestros entrenamientos, Milo y yo nos entrenamos en áreas altas, Aioros y Aioria en áreas más cercanas al mar- respondió mirando al grafico- aunque no creo sea la única coincidencia, Shaka nació en la india y jamás salió de su país, pero paso gran parte de su vida visitando el templo donde él se entrenó, al punto que, en algún momento de su niñez logro la comunicación con sus almas pasadas pero no con aquellos recuerdos como santo, Shaka puso hablar en diferentes lenguas sin el darse cuenta…Mu nació aquí en Jamir, pero con los años se mantuvo en áreas altas…cercanas a lo que es la torre donde se entrenó, también a temprana edad ya hacia manipulación de habilidades como la psicoquinesia.
-Sea quien sea ha querido que desarrollaran sus habilidades, pero algunas se encuentran selladas por su cosmos- interrumpió Shiryu.
-En efecto, además las formas en las que fuimos recordando nuestro pasado fueron llamativas, Shura y Aioros recobraron su pasado cuando se dijeron la frase que ambos se prometieron cuando se conocieron, Milo y Camus cuando se vieron, Aioria y Shaka…DeathMask y Aphrodite…todos coincidieron con encuentros pasados…la forma en que se sucinto es compleja, pero no predecible, todos se encontraron con un amigo o persona cercana significativa…su mejor amigo en ese entonces, un especie de héroe o, el amor de su vida- susurro sonrojado- de todas maneras, todos tuvimos contactos con los antiguos santos dorados, salvo Kanon.
-¿Qué? –preguntaron todos a la vez.
-Decidnos con Saga no hablar con Kanon sobre los hechos de las guerras santas, Kanon no tiene la menor idea y en estos años no recupero sus memorias por más que vive con Saga y me ha visto a mí, por lo que la persona de gran significación para el no somos ninguno de los dos- respondió Mu- sabemos que quienes fueron recuperando sus memorias fueron haciéndolos en los momentos exactos, yo conocí a Saga y lo vi como un santo que admirar en aquella época, cuando tenía siete años y él estaba por cumplir los quince, cuando nos volvimos a encontrar y pasamos por la misma situación de conocernos, recuperamos nuestras memorias…Milo y Camus dijeron que cuando se reencontraron tenían la misma edad de cuando se conocieron, y fue casi en el mismo periodo de tiempo, al igual que Aioros y Shura, todo se repitió…lo curioso es que Kanon si tiene interés por las cosas divinas, pero…no hemos podido recuperar sus memorias, necesitamos encontrar a alguien que allá sido de significancia para él.
-Creemos que cuando todos tengamos nuestras memorias abra un indicio del porque fuimos traídos, y quizás, solo quizás recuperemos nuestro cosmos.
-Sin embargo, a pesar de lo que ha pasado, no hemos podido encontrar la forma de que Kanon recupere su memoria, quizás él sea la clave.
-Es una teoría absurda, todo lo que paso fue coincidencias- interrumpió Shion levantándose- no hay motivo para creer que Canon de Géminis sea la clave tras ser revividos, admito que su teoría sobre la recuperación de memorias suena interesante, pero no me parece correcta, cuando conocí a Dohko nos hicimos amigos, ninguno de nosotros fue de gran significancia para el desarrollo del poder del otro.
-Maestro Shion- susurro Mu cohibido.
-En todo caso, Mu tendría que haber recuperado su memoria cuando me encontró y no lo hizo hasta un año después, cuando se encontró con Saga, yo fui su maestro y lo guie por el camino a ser santo dorado.
-Milo de Escorpión- susurro Ryuho- según los cuentos de Athena, Milo de Escorpión fue quien lo recibió en el santuario y probo ante el su redención como santo…pero…
Continuara…