AMOR ANIMAL por lunayaoi

CAP. 10: LA PROPUESTA.

Cuando llegamos a la casa de Madara, el ya estaba en la puerta esperándonos en un sastre plateado, camisa negra y una extravagante corbata roja sangre. Su cabello cuidadosamente peinado y un par de lentes.

Sasuke me tomó del brazo, y cuando lo observé, sus labios estaban presionados fuertemente, sabe Dios, haciendo su mejor esfuerzo para no reír.

• -Pasen, pasen!!- dijo mientras nos saludaba con besos y abrazos como el protocolo lo exigía.

• -Me siento inapropiadamente vestido para la ocasión- dijo Sasuke apuntando su mirada a nosotros. Yo había decidido ponerme una blusa de seda azul y unos pantalones de lino negros ajustados, mis zapatos negros formales y mi cabello recogido. Estaba en mi ropa profesional, y el en sus cómodos jeans y camisa de cuadros. Sasuke había pasado a recogerme después de mi cita con un nuevo cliente.

• Bah- comento Madar restándole importancia al comentario de Sasuke- Tengo una propuesta de negocio para Naru, aquí presente y quería lucir profesional, como antes de retirarme.

Sasuke soltó una risa cálida y contenta. Aquella risa cómplice como si Madara y Sasuke estuvieran en un chiste de contexto.- Bueno luces como un empresario… supongo que tu juramento perdió validez.

Madara sonrió igual y le apretó los cachetes a Sasuke.   

Al entrar a la sala de te, me di cuenta que los cafés y una serie de postres ya estaban dispuestos en la mesa. Luego observe dos carpetas, una roja y otra azul. Mire interrogante a ambos, Madara solo me señalo donde debía sentarme y el también lo hizo.

Su postura era recta pero relajada, cruzo su pierna y poso sus manos en el regazo observándome directamente.

• -Bien- dijo mientras tomaba una de las carpetas y me la pasaba. Sonrió cálidamente, recordándome las sonrisas de Sasuke- Tu y Charlie deberían vivir aquí.

• -Eh?!!- Que rayos estaba pensando Sasuke al creer que venir a vivir con Madara era algo bueno?!!- Wow, no se que decir- y sinceramente no se que decir. Respire profundo- Bueno, saben, Yo necesito mi espacio, una casa propia urgente, y pues gracias, pero no debe de ser nada fácil el vivir con… aquí bueno…

• -No, No!!- Madara exclamó entendiendo lo que quería decirle- Solo tú y Charlie, aunque quieras incluirme en el trato no podría, me iré a vivir a Florida.

• -Mi abuelo Izuna vive en Florida- dijo Sasuke- el ha estado hablando desde hace meses sobre irse a vivir a Florida para siempre.

• -Extrañaré a este joven- dijo Madara sonriéndole a Sasuke- pero las bajas temperaturas en invierno son malas para la vejez- dijo mientras me mostraba sus manos- Tu necesitas una casa. Yo necesito mudarme. Problema resuelto.

Sasuke se aclaró la garganta como en tono de advertencia.

• -Esta bien, esta bien.-Madara dijo -No tienes que responderme ahora. Pero es hora de ver la casa!- se levantó de su asiento y con un gesto empezó a mostrarme la casa- Cocina para un chef, la sala-comedor para grandes y medianas recepciones- hizo un gesto con su manos para que lo siguiera a la sala- además de la hermosa chimenea estilo escocés del siglo trece- tomó mi muñeca y prácticamente me arrastro al garaje para mostrarme como se operaban las puerta automáticas- Puedes pasear a Charlie sin sacar llaves… muy ingenioso eh??- luego fuimos al jardín trasero y a la puerta principal- bueno tiene cuatro baños, tres habitaciones, un estudio, altillo y sótano, porche y te incluyo el asador de cinco puestos que viste en el jardín.  Te gusta?

• -Es bastante hermosa- dije, tratando de no dar una respuesta directa bajo presión como lo sugirió Sasuke. Pero la verdad, debo confesar que la casa es un encanto. Además de grande y espaciosa, es realmente acogedora y se siente como un hogar. La idea de comprar un casa, mía, sin el riesgo de que se desmoronara o que tengas vecinos insoportables que escuchar todas las noches. Bueno, con excepción claro del color de algunas paredes y los horribles tapetes de pájaros en la sala, siento que esto seria un perfecto hogar.

Cuando estuvimos de regreso en la cocina, Sasuke estaba recargado en el marco de la puerta entre la cocina y el pasillo que da a la sala, comiendo una pieza de torta mientras usaba una de sus manos como plato para evitar que las migajas cayeran al piso. Es tan alto y atlético. Su cabeza estaba a pocos centímetros del marco de la puerta. Su negro cabello caía gracílmente por su rostro y anchos hombros, hoy lo había dejado suelto y rebelde para mi deleite. Su camisa entallaba sus fornidos brazos, algo de su pecho al igual que sus capri enmarcaban sus muslos y dejaban ver sus marcadas pantorrillas- es ridículamente irreal y hermoso. El me atrapo contemplándolo y solo me guiñó el ojo mientras sonreía cínicamente.

• -Ahora dejame mostrarte el baño- me tomó delicadamente para llamar mi atención y dijo dramáticamente- te sentirás en el cielo en este baño. Será tu reino personal.

Cuando llegue a las escaleras Sasuke me tomo del brazo y se acerco a mi oído- te ayudaré a pintar- pude sentir su suave y tibio aliento en mi oreja y cuello.

• -phew- dije para ver su sonrisa nuevamente. Amo que se haya comprometido a una futura cita de albañiles. El me quiera ver de nuevo. Desear pintar conmigo, estaba casi seguro que el quería que yo supiera que el quería.

El baño, un inmaculado blanco mezclado con azulejos azules y turquesa que me gustaba bastante. Una gran y amplia tina, ducha y grandes cabinetes de madera para poner todas las cremas que no uso.

• -Este cuarto representa a Miyuu, la perfecta combinacion de color y blanco.-su voz se quebro por un instante-  y combina con tus ojos.

Yo solo atiné a sonreír y observar. Sasuke se había retirado con la excusa de ir por agua, al parecer estaba casi atorado.

• -Naruto- Sentí la fría mano de Madara de nuevo y aquella seria y penetrante mirada en mi alma- te pido que no le rompas el corazón a este chico- me dijo- yo lo merecía. En cambio el… ohh!! El es un gran chico. El es un buen hombre.

En el espejo vi como mis mejillas se colorearon al instante.

• -Supongo que el mío es el que necesita repararse- comente en un susurro que el escuchó- además, no creo que el me este ofreciendo el suyo.

• -Naru- el tomó mis manos y las apretó- tus heridas cicatrizarán, volverás a estar bien, pero te pido que no lo lastimes dada la hora… no tengas miedo y déjalo entrar.

La verdad no supe como responder a eso, no quiero saber a que se refiere. Luego con mis manos hizo una especie de hueco, como si estuviese sosteniendo un pollito o algo así

• -Aquí esta- dijo mientras sentía el calor de sus manos en las mías- Tal vez no puedas verlo, pero ahí esta. Es frágil, pero resistente y  se fortalecerá cada día

Nuestras miradas se encontraron, y pude al fin entender de que hablaba. Luego ambos soltamos la carcajada por el momento sentimental.

Madara y yo seguimos de tour por la casa, los cuartos, otros baños y un pequeño cuarto con papel tapiz de barcos.

• -Este es perfecto para el cuarto de costura.

• -Yo no se coser- dije apenado- Bueno, si se pero lo básico, medias y eso.

• -Sasuke sabe.

• -de veras?

• -Oh si! Cuando estaba en la escuela, tenia que practicar cuando estaba en sus días libres.

• -practicar?

• Si, practicaba mis puntadas- dijo Sasuke desde el cuarto aledaño- Tuve que practicar incontables puntadas.

• Sasuke y Miyuu se sentaban aqui horas mientras cosian. -dijo Madara nostálgico.

• Ella bordaba y yo cosía cascaras de banano- Sasuke dijo- Lo hacía durante las vacaciones de invierno. No era algo que tuviera que hacer todos los años.

Aquellos ojos tristes se humedecieron y la mirada de añoranza de Madara rompió mi corazón. Supongo que aun podía ver el recuerdo de su querida ex esposa y Sasuke tejiendo juntos.

Después de ver el resto de habitaciones, y los rincones. Pude ver que la casa estaba en excelentes condiciones además de sentirse cálida y acogedora. -Así que- que piensas?- dijo Madara guardando compostura mientras evitaba la mirada de Sasuke- Si te decides, botaré las revistas viejas y guías de televisión. Es un buen trato no te parece?

• Estoy seguro que a Naru le encanta- Sasuke intervino salvándome de tener que responderle- pero debemos darle tiempo para que piense sobre todo este asunto.

• Si, si, si. Paciencia- dijo Madara en tono de adolescente fastidiado.

Volvimos a aparecer en la cocina. Más de medio postre estaba desaparecido y Sasuke iba por más. Madara y yo nos sentamos a la mesa y el me pasó un sobre blanco por sobre la misma.

• No, no, no!- dijo mientras su mano tomo la mía deteniéndome de poder abrirla-  ábrela después, me sentiría avergonzado si lo haces aquí.

Sasuke me sirvió una taza de café, Madara me pasó un pedazo de pie y yo simplemente guardé el sobre en mi bolso. Pude sentir que ese sentimiento volvía a mi, y comprobé con gran sorpresa que ese sentimiento no era imaginario. Realmente pertenezco aquí.

***

No puedo negar que me divertí mucho hablando con Madara y Sasuke hasta el punto de casi olvidar el dichoso sobre, pero tan pronto como subí al carro, Sasuke me incitó a abrirlo- Ábrelo, que esperas.

Fuí a buscar el sobre dentro de mi mochila.

• -Que tanto sabes de esto?

• -A qué te refieres?- respondió Sasuke bastante sorprendido- solo ábrelo!

Al abrirlo lentamente, pude percatarme de como Sasuke se sentaba al borde del asiento y posaba toda su atención en mis reacciones. Al abrirlo y leerlo, vi que era un borrador del contrato de compraventa y en la cantidad vi un 40K escrito con lápiz

• -Es broma, verdad?

• -No mía al menos. Es de Madara.-Sasuke dijo mientras fruncía en ceño un poco y negaba con su cabeza.

• -Pero en qué está pensando?-dije casi hiperventilando.

• -Qué hay de malo?-dijo algo angustiado Sasuke

• -El precio!!- Sasuke estaba desconcertado, no entendía de que hablaba.- Lo que quiero decir es- suspire profundo, no quería que sonara así de rudo- Sabe el que la casa vale mas que el doble de esa cantidad?

• -Lo sabe- dijo con una sonrisa mientras entendía el porqué de mi reacción- Madara tiene una compañía que vende bienes raíces.

• -Entonces porqué?

• -El compró la casa a mediados de los cincuenta, si mal no recuerdo la compró por 20 mil, así que dobló el precio.

• -Pero… -sigo sin entender el porqué Madara me deja semejante casa por tan poco- pero después y la inflación? y valoración del terreno?

• -Madara es así. No te sientas como si debieras de comprarle la casa. Clientes es lo que tiene, y que claramente estarían interesados en adquirirla.

• -Entonces?

• -Bueno, digamos que quiere dejar sus recuerdos en buenas manos.-yo me sorprendí por lo dicho. La sinceridad de Sasuke me hace pensar que tal vez tenga razón.-Charlie necesita un espacio donde correr. Además el cuarto con las repisas puede ser tu oficina.

• -Cierto.

• -Y hablando de oficinas. Eres empleado independiente verdad?

• -Como sabes eso?- de todas las cosas que hablamos estoy casi seguro que mi trabajo no salió en la conversación.

• -Leí el expediente.- dijo en un susurro casi apenado.

• -Que expediente?

• -Los papeles que llenaste cuando trajiste a Charlie al consultorio.

• -Me has estado investigando?- dije bastante sorprendido.

• -Si.-susurró de nuevo mientras se sonrojaba y adoptaba una postura realmente incómoda, tal vez esperando una reprimenda o algo así.

• -Injusto- sus ojos negros me admiraron con sorpresa- Cuando podré entonces leer sus expedientes?

• -Sr. Uzumaki, alguna vez responde preguntas sobre su persona?

• -Dr. Uchiha, soy Escritor de Subvención y Licenciado en Literatura.

• -Un escritor de Subvención?

• -Si -sonreí al ver su sorpresa.

• -Que es eso?- preguntó en su mejor voz de reportero.

• -Escribo Subvenciones.-Sonreí mientras intentaba darle mis mejores respuestas de entrevista.

• -Bueno, si. Pero como funciona eso dobe?

• -Básicamente me pagan por investigar y escribir propuestas, para ciertas personas u organizaciones.

• -Así que la gente te paga para recibir dinero.

• -Así es teme.-luego recordé algo- De hecho, creo que tu cerebro me serviría para algo en lo que trabajo.

• -Algo?

• -Estoy trabajando en una propuesta para la expansión de un refugio y clínica de rehabilitación de animales en Carolina del Norte. Puedo usar tus conocimientos con algunos términos médicos. Es como aprender otro idioma, debo saber de todo.

• -Tengo algo de tiempo para servirte de traductor.

• -En serio?

• -Por supuesto.- Y sacó a relucir su sonrisa del millón.

Sasuke siguió manejando. Puse de vuelta el sobre en mi mochila y me aventuré a imaginar la familia de este hombre.

• -Asi que, quién es Madara?

• -Pues… -Sasuke me dio su mejor cara de impresión- Pero si- el tipo con el traje?

• -No, lo que quiero decir es- sonreí al ver su confusa mirada- Porque son tan unidos?

• -Me asustaste por un segundo- sonrió tontamente- creí que te había interesado de más- yo solo reí- Mi abuelo y el -como sabes son hermanos. Ambos fueron a la guerra de Corea e hicieron un pacto entre ellos. Si alguno de ellos no lograba salir, el otro se encargaría de todo…

• -Ya veo.

• -Ambos regresaron. Compraron casas en la misma calle y todo- carcajeó- Eran un gran par, o es lo que mi abuela solía decir. Siempre jugándose bromas entre ellos. Dos años después mi abuela murió de cáncer y mi abuelo se sentía incapaz de criar a mi padre y mis tíos solo.  Madara en vista de las circunstancias, ayudó a mi abuelo pagando las cuentas, ayudando con las reparaciones de la casa y sosteniendo la escuela de todos. Cuando mi papa se casó con mamá, el abuelo había sido diagnosticado con artritis reumatoidea. Así que cuando cumplí los seis años, él finalmente se mudó a Florida y Madara se convirtió en el abuelo de todos.

• -Debe ser increíble tenerlo en la familia.

***

Charlie ladró cuando abrimos la puerta principal. El estaba acostumbrado a verme entrar por el garaje y solo. El pelaje al rededor de su cara estaba desordenado y revuelto, además sus ojos estaban apenas abiertos.

• -Al parecer le despertamos, Dr. Charlie.-Sasuke se arrodilló y acarició sus suaves orejas. Yo solo atiné a acariciar su cabeza y ponerme cómodo.

• -A si que Charlie es un pastor alemán?-pregunté

• -Si.

• -Entonces por qué su pelaje es tan largo?

• -Genética. Hay unos que tienen el pelaje corto y otros casos como él, que lo tienen largo.- Cuando se levantó, hizo que mi sala pareciera más pequeña de lo que es. Él es tan alto que pareciera que mis muebles y mi casa parecieran de juguete, algo así como un muñeco de acción dentro una casa de muñecas.

Al colgar mis llaves y mi mochila, me di cuenta que Sasuke estaba cerca -demasiado cerca- y eso me puso nervioso. En serio, este pedazo de semental siente atracción por mi persona. Este increíble, dulce, serio y divertido chico gustaba de mi (Madara me lo confirmó). Bueno, la parte incomoda de la situación es que ahora y por primera vez -que me haya dado cuenta- soy el objetivo amoroso de alguien y no al revés. Y la verdad no se como actuar ni que hacer conmigo. -Iré por la propuesta- y prácticamente casi salgo corriendo.

Pero minutos después sentí su presencia en el estudio. Volteé a verlo y su arrogante sonrisa estaba allí.

• -Está algo… desordenado.-Papeles en la mesa y en el piso, Post-its en todas las paredes, mi computadora en el suelo con libros y carpetas abiertos.

• -No me importa.

• -Pero, que vergüenza… -dije cubriéndome el rostro rojo con las manos.

• -No deberías- colocó sus manos en mi cintura y las apretó levemente. Pude sentir de nuevo sus grandes y frías manos, intenté no pensar en las lonjas y gorditos en mi cintura. Metí un poco de barriga, asi estaría preparado para la siguiente vez que el decidiera tomarme por la cintura- Qué es eso?

• -Mi tablero de diagramas- dije cuando vi que señalaba el tablero acrílico. Vi su mirada curiosa incitándome a que hablara más- aquí coloco los pasos y resultados de mis investigaciones, gente que puedo contactar y el diagrama de trabajo.

Sasuke se acercó aún mas de lo que estábamos, observó con detenimiento las letras y flechas y círculos del tablero. Estaba intentando entenderme, no solo por cortesía, sino que realmente quería saber sobre lo que hago. Sasori, Haku y Tsunade solo pasaban de mí y me trataban como si estuviera desempleado, solo porque no tenía una oficina, ni horarios y trabajaba en mi casa en pijama. Es bueno que me tomen en serio para variar.

Luego levanté la mirada y lo ví, el bajó la suya y la posó sobre mí. Creí que él iba a besarme-estábamos tan cerca que sentía su aliento- pero su cara entera se volvió roja y giró hacia otro lado para inspeccionar el resto de la oficina.

• -Creo que es muy aburrido para ti- dije mientras organizaba ciertos papeles en mi mesa y trataba de disminuir las pulsaciones.

• Para nada- Sasuke tomó algo sobre mi otro escritorio, mientras yo seguía de pie frente al tablero. Luego sentí su pecho en mi espalda. Se sentía increíblemente cálida, su pausada respiración y aquel suave olor a suavizante me encantaba. Mis fantasías con Sasori eran siempre bastante extravagantes, pero estar aquí con Sasuke hablando sobre trabajo de pronto me pareció la cosa más romántica en el mundo. Él se interesaba en mi. En lo que hago. Algo mucho más valioso que un viaje por el Mediterráneo viendo el atardecer.  

• -Hay máquinas que se acercan mucho más a ser encubadoras- dijo mientras dibujaba un asterisco con el marcador en el tablero. Respiré profundamente al sentir sus brazos rodeándome mientras escribía. Este alto, y buen mozo veterinario estaba en mi oficina escribiendo en mi tablero- Y no cuestan tanto, como una encubadora real.- Hizo un gesto gracioso con su nariz mientras trataba de concentrarse. Este hombre es realmente sexi.- Así que si compran eso, pueden usar el dinero que sobre en los equipos de transporte- hizo otro asterisco en la línea de transporte.

• -Gracias- dije, mientras intentaba aparentar que le había puesto atención a todo lo que decía en vez de estar fantaseando con él.- esto es genial.

• -Igual que tu- aquello me tomó por sorpresa. Sus grandes y sinceros ojos negros se quedaron viéndome antes de cubrir su cara con una mano y sonreír nervioso- L-lo siento. Soy bastante lamentable eh?

Yo solo atiné a sonreírle al darme cuenta que no era el único que estaba nervioso. Y eso hacía que me gustara aún más. -funciona para mi.- dije casi susurrando.

Levantó su mirada bastante sorprendido, nos admiramos por un minuto y Sasuke se acercó lentamente sin romper el contacto visual, me rodeó con sus fornidos brazos y pausadamente posó sus labios sobre los míos. Sentí que una de sus manos tomaba mi cuello y parte de mi mejilla, acariciándola con parsimoniosa suavidad, mientras yo sentía la suavidad y calidez de su boca sobre la mía. Todas esas estúpideces sobre mariposas en el estómago, y electricidad y el mundo rosa, pude sentirlo en cada rincón de mi cuerpo. Nos separamos y me miró fijamente.

• -Wow- atinó a decir con una gran sonrisa.

• -S-si- dije mientras intentaba reiniciar mis neuronas, porque en estos momentos no era capaz de formar una oración coherente.

• Oh rayos!!- los ojos de Sasuke lucían algo angustiados cuando apuntó detrás de mi.

Volteé y me dí cuenta que había borrado más de medio tablero con mi espalda.

• -Lo siento- Sasuke lucía algo angustiado- No quería, yo… perdóname.

• -Siempre y cuando no lamentes el haberme besado- dije casi rojo como un tomate por semejante declaración tan atrevida.

• -NO!! para nada!!- dijo mientras tomaba mi rostro y retiraba mis cabellos de la frente- pero, y tu trabajo?

• -No te angusties, tengo copias de todo.-Tomé un paquete de hojas y se las pasé- la lista de definiciones que consulto está en la última página.

• -Las reescribiré para ti.-dijo mientras pasaba las paginas.

• -Gracias, me ahorrarás mucho tiempo.

• -Encantado- tomo el paquete y lo enrolló en un tubo para meterlo en uno de los bolsillos traseros de sus capri.- y dadas las afortunadas circunstancias que te rodean dado el tiempo libre del que dispones, dobe. Me dejaría llevarlo a comer mañana en la noche a un lindo y acogedor restaurante?

• -Claro que si- dije sonriendo.

Sasuke se encontraba en la puerta de espaldas mientras yo levantaba algunas cosas del suelo y le daba su chaqueta. Inesperadamente me vi atrapado nuevamente entre sus brazos, escuchando en su pecho el rápido palpitar de su corazón, mientras sentía su respiración en mi cuello. Tomé una de sus mejillas para encarar su mirada, aquella mirada que tanto me gustaba. Sentí como tomaba mi mano y me volvía a besar con renovada pasión.   

Tan pronto como Sasuke se fue, corrí rápidamernte a mi armario para encontrar algo decente que ponerme para la cita. Básicamente ir desnudo sería la opción menos descabellada al ver que no tenía absolutamente nada que ponerme, absolutamente nada!.

En aquel desolado rincón veo algo negro y azul, lo saco y veo que es aquella camisola de seda que me compró mamá, alegando que todo doncel debía tener una de estas para salir de noche -además que estaba en promoción- salí de la tienda con eso. Nunca tuve la oportunidad de estrenarlo, además no me sentía cómodo usando eso. Sigue teniendo la etiqueta del precio. Sin embargo nada de lo que tengo es apropiado para esta ocasión, así que voy al baño y me lo pruebo.

Mientras camino hacia el baño, me voy introduciendo en la camisola, la prenda me queda a la perfección. Me estudio desde todos los ángulos posibles viendo posibles defectos, luego pongo mi cabello en una moña alta y me doy la vuelta para ver la retaguardia. Veo que Charlie bota a mis pies su juguete y me observa. -que tal?

Desearía poder llamar a mamá y decirle que finalmente tengo una razón para usar esa camisola.