7 años habían pasado en la vida del rubio y su familia, y en la casa del uzumaki/namikaze la alarme de un despertador se escuchaba en toda la casa, naruto estaba en la cocina preparando el desayuno, mientras su pequeña bajaba las escaleras tapándose los oídos por el ruido de ese despertador, naruto sonrió al verla aun en pijama mientras tomaba asiento frente a la mesa
-otochan, dile a sora que no ponga el despertador tan alto, él ni siquiera lo escucha – se quejó su pequeña, a naruto solo le dio un poco de gracia, puso unas tostadas frente a ella, quien estuvo por agarrar una pero la mano de su otochan se lo impidió
-ve primero a lavarte los dientes y la cara, yo iré a despertar a tu hermano – la pequeña sin protestar bajo de la silla para encaminarse al baño, mientras que naruto se encaminaba al cuarto de su hijo mayor, toco la puerta, pero como todas las mañanas, no obtuvo respuesta, si, sora al ser más grande se había sacado la maña de dormir con él, pero había agarrado su mala costumbre de no poder levantarse temprano, aunque pusiera el despertador a todo volumen, y él lo tuviera a su lado, era más probable que todos los vecinos se despertaran antes que él, abrió la puerta como de costumbre, y apago el despertador en primer lugar, vio el cabello rubio de su hijo bajo la manta, aun no creía que si pequeño ya tuviera 16 años, pero el aun lo seguía viendo como su bebe, aunque a sora no le gustara –sora…sora despierta… - sacudió a su hijo del hombro, consiguiendo que este solo se moviera un poco
-déjame dormir unos minutos más… - escucho la vos de su hijo
-shiro llamo… dijo que si vuelves a llegar tarde, le dirá a kei que lo pase a buscar
-¿ya es tan tarde? – Naruto no pudo reprimir una risa ante la reacción de su hijo, y aunque fuera mentira, siempre funcionaba – otochan… - dijo con cansancio sora mientras miraba la hora en su celular, mientras se volvía a echar en la cama
-anda sora, tienes que llevar a yuki contigo
-sí, sí, lo que digas – naruto salió algo resignado, aunque a su hijo le costara despertar, sabía que no se quedaría dormido de nueva cuenta, y estaba seguro de que alistaría enseguida, bajo de nueva cuenta a desayunar con su hija, quien era bastante tranquila
-¿hoy no viene otosan a desayunar? – le pregunto la pequeña, algo ansiosa, naruto comprendía que yuki fuera muy pegada a su padre, ya que aunque venia lo más seguido que podía, su trabajo no le deja verla tanto, ya que ella había comenzado ese año su primer grado en la primaria, y la únicas veces que veía a su padre era durante el desayuno, y en algunas cenas, y claro días que los días que tenia libre eran los que más pasaban con ella, aunque a veces se ponía algo celoso de que yuki no lo tuviera como su papi preferido, entendía muy que la niña fue más a pegada a él, como suelen decir, el varón es más apegado a la “madre” en este caso naruto, y la niña al padre, o era o que siempre se repetía para no sentirse remplazado
-no cielo, hoy tenia trabajo, pero dijo que seguro te vería en la exhibición de tu tío deidara, así que apresúrate que sora te llevara – la pequeña asintió mientras terminaba su desayuno, y corría a su cuarto a terminar de alistarse, chocando con un adormilado rubio que se encaminaba a la mesa, y se sirvió una taza de café – aun eres chico para estar tomando café, ¿no lo crees?
-y tu hija es muy chica para dejarla ir por ahí ¿no lo crees? – respondió burlón sora, naruto solo rodo los ojos
-no la estoy dejando ir por ahí, tú la llevaras con deidara, aparte satoshi y sasome también estarán ahí, prometieron cuidarla
-ha claro, y yo la tirare a un pozo ¿no? – dijo sora algo ofendido por el comentario de su otochan, el sabia cuidar bien de su hermana, no entendía porque su falta de confianza
-sora, te conozco, sacaste las mismas mañas de tu padre, y no se me aria raro que se te perdiera en algún momento, sin decir que no le tienes mucha paciencia- se justificó naruto
-fue una sola vez, y tan solo fueron 15 minutos, no podía dejar que esas chicas se perdieran en direcciones que no conocían – naruto no pudo evitar reír por comentario, si no fuera porque shiro lo mantenía vigilado, estaba seguro de que su hijo sería un tiro al aire – sin decir que tu hija, solo es una “señorita” en tu presencia y claro en frente de el también, pero cuando no están ustedes, es una…
-no digas eso, tu hermana es un ángel, hasta tus tíos dicen eso
-es una buena actriz – dijo sora cruzándose de brazo, naruto suspiro, no podía creer que su hijo se pusiera a pelear con una niña de 7, decidió dejarlo ahí, tomo las tazas que habían ensuciado para llevarlas a la cocina y poder lavarlas, mientras que yuki, bajaba las escaleras mientras tenia puesto un short color negro, y una remera manga corta color rosa y detalles negros, y traía en su mano una pequeña carterita y una bincha para su cabello –buenos días enana – saludo sora a su hermanita
-ten péiname el cabello –le ordeno yuki a su hermano, dándole la espalda
-no me molestes – sora la ignoro mientras seguía comiendo las tostadas, pero no espero que su hermana comenzaba a llorar
-¡otochan…sora no quiere peinarme el cabello! –grito en llanto la pequeña, o que solo le sacaba un tic en su ojo al rubio
-¡sora! ¡Ayuda a tu hermana con su cabello! – y su padre luego se preguntaba porque no le tenía mucha paciencia, resignado se dio vuelta para comenzar a peinar a la pequeña
-malcriada – le susurro a su pequeña hermana
-viejo
-consentida
-baka – sora estaba por contestarle, pero vio cómo su otochan salía de la cocina, así que decidió quedarse callado, “porque no puede ser como zusu-chan, ella están tranquilita, no sé cómo satoshi y sasome pueden quejarse” pensaba sora mientras terminaba de acomodar la bincha en el cabello de yuki
-bueno, yo me voy, ve a buscar tu casco o te dejo – la pequeña fue corriendo a su cuarto, a buscar el casco de la moto que su hermano le había comprado
-¿irán en la moto? – a naruto aún no le agradaba de todo esa motocicleta que su hijo tenía, si bien este les callo con la sorpresa de que se la había comprado, a sasuke y a él, no le agradaba del todo que la tuviera
-tu andabas en moto antes
-no la manejaba yo
-es lo mismo – sora tomo su casco - ¿iras en la tarde?
-si, en cuanto me desocupe – sora asintió, beso la mejilla de su otochan y se encamino hacia la puerta, donde su hermana lo esperaba con su casco color rojo puesto – tengan cuidado
-si…
-adiós otochan, nos vemos más tarde – dijo yuki sonriendo, mientras sora la subía en la moto delante de él, así sus hijos se fueron, aun no podía creer que ya fueran tan grandes, y aunque se estuvieran peleando todo el tiempo, sabía que se adoraban mutuamente, toda esta tranquilidad había sido demasiado, no podía creer que después de todo lo que habían sufrido en ese tiempo, ahora podían decir que por lo menos ellos eran felices, con sasuke todo iba bastante bien, si bien habían decidido que sasuke no vendría tan seguido , para no confundir la cabecita de yuki, pero a ella no parecía gustarle eso, ya que era tan apegada con sasuke como a sai, se volvió a meter a su casa, aún tenía mucho que limpiar
*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&&*
En el estudio de deidara, este se encontraba preparando todo, aun cuando había contratado un asistente, no podía evitar estar presente supervisando que todo estuviera bien, aunque sus hijos también estaban con el ayudándole, deidara seguía algo alterado
-deidara, cálmate un poco – deidara se dio vuelta, viendo a sai, quien estaba a su espalda dándole un refresco – todo está muy bien, naruto ayer se encargó de tenerlo todo listo, tu deja que ellos se encarguen de acomodarlo
-sí, sé que tienes razón, pero no puedo quedarme quieto sin hacer nada
-sai-san tiene razón otochan, cálmate un poco, no falta mucho después de todo - deidara vio cómo su hijos se acercaba a ellos, satoshi, quien ya no tenía 18 años, su pelo negro ya estaba algo largo, y casi se lo podía acomodar como a su padre, era una copia exacta de este, solo le faltaba las ojeras para parecerse, atrás de este venia sasome, quien a diferencia de su hermano, había decidido tener el cabello un poco más corto, y se había hecho una mechas azules en su cabello, cosa que no le hacía mucha gracia a itachi, pero el respetaba bastante los gustos de su hijo, quien traía a su pequeña en brazos, que al parecer estaba cansada de estar toda la mañana ahí, su hija tenía el cabello tan rojo como la sangre, y eso le hacía acordar a su difunta madre, mientras que sus ojos eran tan negros como los de itachi, era la pequeña consentida de la familia
-¿no estas nervioso satoshi-kun?- le pregunto sai al mayor al tenerlo parado frente a el
-no es la primera vez que ayudo a otochan a organizar su exposición
-pero si la primera en la que expones algo de tu trabajo – satoshi asintió, no era que no estuviera nervioso, pero a diferencia de su otochan, el si podía permanecer en calma, o por lo menos fingir que lo estaba
-otosan… ¡otosan!... – escucharon la vos de la pequeña yuki, quien venía corriendo hacia donde estaban ellos, mientras que sora, shiro y kei, estaban caminando detrás de ella, junto con el pequeño aoi -¡otosan, llegaste antes! – la pequeña había llegado a espaldas de sai, para agarrarle del brazo
-hola pequeña – le saludo sai, mientras la tomaba en brazos
-oh, sai, disculpa te confundí con mi otosan – dijo la pequeña y la risa de deidara se escucho
-te lo dije sai, córtate el cabello, ya te estas pareciendo a sasuke jajaja – sai asintió, ya le habían dicho eso en muchas ocasiones, así que se lo iría a cortar más adelante
-sí, me lo cortare antes de viajar
-buenos días sai-san – escucho como lo saludaban, y vio a sora detrás de él, junto con shiro, mientras que kei y aoi estaban con su hermano saludando a satoshi y sasome
-hola sora, shiro-kun, han venido temprano
-es que la enana no quería esperar – sai vio con gracia como shiro le golpeaba un codazo en el estómago, para su vista, aunque no lo había tratado mucho, sora había crecido bastante, su pelo rubio ya estaba algo largo, como el cabello de sasuke, pero aun así, no dejaba de ser una copia de naruto
-yuki-chan – se escuchó el grito de la pequeña zusume, y como yuki bajaba de los brazos de sai para irse con su prima a jugar
-¿pero tú no estabas cansada?- le cuestiono sasome
-no, solo no quería caminar – rio la pequeña antes de irse a correr con su prima, deidara solo rio por los gestos de su segundo hijo, y decidió irse por donde estaban las pequeñas para que ellos pudieran estar más tranquilos, sai lo siguió, para poder cuidar de la pequeña yuki, sabía bien lo traviesa que podía ser
-esa enana…me vuelve loco- se quejó sasome
-vamos no creo que sea tan terrible, tú la cambio por yuki cuando quieras
-no bromees sora, que te puedes llegar a arrepentir – le dijo satoshi – por primera vez, estoy de acuerdo con sasome, zusume puede ser algo… especial, mis padres la consienten mucho
-sí, los míos también, no recuerdo que eso fuera así antes – se quejó sora, y miro a kei, quien aún tenía de la mano a aoi, su pequeño “hermanito”, aun recordaba como todo había sido algo confuso al principio, cuando le dijeron que su supuesto hermano ya no era su hermano, pero debía tratarlo como si lo fuera, en ese momento no entendía muy bien, solo sabía que ese bebe seria trabado como su hermano y nada más, aunque este pasara más tiempo con kei – aoi ¿Por qué no vas a jugar con yuki y suzume? – el pequeño de cabello castaño solo bajo algo la mirada, para luego mirar a kei
-¿puedo? – pregunto con la vos baja, aoi tenía la misma edad que yuki, era un doncel tranquilo y algo tímido, su cabello era castaño y corto, y sus ojos de un lindo color verde claro, a sora le parecía sumamente adorable, era todo lo contrario a yuki, si bien su hermana no era mala, sino algo consentida, aoi aun cuando también era consentido no solo por sus padres, ya que naruto le llego a agarrar aprecio, sino también por el padre de kei e ino , él era sumamente respetuoso , educado, y algo tímido, no es que su hermana no fuera respetuosa , pero era educada cuando quería, y de tímida no tenía nada
-no puedes correr, lo sabes – fue la respuesta de kei, lo cual aoi solo bajo la cabeza, sora solo rodo los ojos
-aoi… ¿trajiste tu inhalador? – El pequeño asintió – entonces ve a jugar con las niñas
-pero onisan dijo…
-oye, yo también soy tu onichan, así que hazme caso y ve a jugar – el pequeño asintió, y se soltó de la mano de kei para irse a jugar, sora sintió la mirada de enojo de kei en el – vamos, es un niño, para que vino si no es a jugar…tu eres muy sobreprotector
-y tu muy confiado - sora solo rio, si discutía algo con kei, era solo sobre aoi, no había otra por la que peleases, ya que aoi a tan corta edad tenia asma, kei era por así decirlo el hermano sobreprotector, mientras que sora el más permisivo
-vamos, vamos, no discutan, mejor vengan, aún hay cosas que arreglar antes de que empiece la exhibición – shiro tomo a ambos chicos de a mano para encaminarlos hacia donde deidara y sai estaban acomodando la decoración, satoshi y sasome solo os siguieron de atrás, sabían que sora y kei no cambiarían mas, aun se peleaban como cuando era niños
*&*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*
Mientras, en la casa de naruto…
-e-espera… sasuke… - este estaba en la puerta de su cuarto, con un azabache que no dejaba de besarlo, movía sus labios con desesperación sobre los del contrario
-tu empezaste …en primer lugar – y era verdad, había terminado temprano su trabajo, y le mando un mensaje naruto para venir a recoger a yuki, pero este le había dicho que ya se habían ido, para luego decirle que lo pasara a recoger, eso a sasuke le pareció una invitación, ya que la única oportunidad donde podían estar juntos, eran cuando sus hijos salían juntos…al llegar a la casa de naruto, toco el timbre, pero este no había salido, se dio cuenta de que la puerta no tenía seguro, si no supiera que naruto de verdad quería ir a la exhibición de satoshi, tomaría eso como una invitación de quedarse todo el día en su casa, se adentro en ella, pero no encontró al rubio, no hasta encaminarse al cuarto de este, pero vio como la puerta del baño estaba abierta, y dentro de este, su rubio estaba con solo una toalla, mientras se secaba el cabello, no tardaron mucho para estar en la posición en la que se encontraban, sasuke acorralando a naruto contra la pared de su cuarto, mientras devoraba los labios de este – ¿a qué hora…es la exhibición?
-a… las tres - a sasuke solo le sirvió esa respuesta, para apegarse e naruto, aún eran las doce, así que tenían tiempo, cerró la puerta del cuarto de naruto, con ellos adentro, no vaya a ser que a sus hijos se les ocurriera regresar por algo –sasuke… - por los movimientos bruscos contra la pared, la toalla que cubría al rubio, había caído al suelo, dejando que lo único que cubriera al rubio fuera el cuerpo de sasuke, que se pegaba más a el –haa…- sasuke había comenzado a morder el cuello del rubio, mientras sus manos paseaban por toda la espalda desnuda del rubio, sus manos fueron descendiendo, hasta tocar su trasero, el cual comenzó a masajear con movimientos lentos – haa…haa… sasuke… llegaremos tarde…
-aun ahí tiempo… siguió con la tarea de morder el cuello del rubio, mientras colocaba una de sus rodillas entre las piernas del kitsune, haciendo algo de presión
-haa…haaa…- naruto pudo comenzar a sentir como la erección de sasuke chocaba contra su bajo vientre –sasuke… - naruto coloco sus manos en la espalda de este, mientras tomaba sus labios, ya no podía resistirse, así que decidió apresurar las cosas, si volvía a llegar tarde a una exhibición, y más si también era de satoshi, deidara si lo mataría, aunque deidara era lo último que se le pasaba por la cabeza en esos momentos, sintió como la mano de sasuke separaba sus nalgas, y como algo frio comenzaba a rozar por ahí, sasuke comenzó a jugar con su entrada mientras ambos se estaban besando, sintió como sasuke lo preparaba, entrando poco a poco en él, estaba cansado de decir lo mismo, no necesitaba preparación, después de tener a sus dos hijos ya no lo necesitaba, sintió como la otra mano de pelinegro se colocaba en su muslo derecho, y lo subía a su cadera, para poder tener más contacto entre ellos, sintió como la erección de sasuke crecía sobre su vientre, también como el segundo dedo se introducía en él, él ya estaba bastante duro, y sasuke podía sentirlo, ya que no tenía ninguna prenda para cubrirse, con una mano libre, se dirigió al vientre de sasuke, conde levanto su remera, y comenzó a recorrerlo, tocando cada parte de su vientre, sus labios se separaron, y sasuke volvió a besar su cuello, su mano temblaba, no era por los nervios, ya que no era la primera vez que se acostaban, pero su cuerpo temblaba de todos modos, tomo entre sus dedos el borde del pantalón de sasuke, peleando con el estúpido botón, los odiaba, su vida sexual con sasuke sería más fácil si él no se pusiera ese pantalones –e…espera… - pero sasuke no le escucho, siguió con su tarea de preparar al rubio, aunque para el rubio ya comenzaba a ser algo brusco, no dejándole desabrochar el pantalón –sasuke… - el rubio como pudo desabrocho el primer botón, pero sin darse cuenta, había roto los otros dos
-oye…es nuevo – dijo entre suspiros sasuke
-es tu cul…- pero su boca fue devorada de nueva cuenta por sasuke, este tomo al rubio de ambos muslos, y lo levanto a la altura de su cadera, chocando la espalda de este contra la pared, pudo sentir la erección de naruto contra su vientre –haa – sasuke había acomodado su erección, en la entrada del rubio, dejando que lo único que impidiera la penetración sea la tela delgada de su bóxer- haa…haa…- pero eso no evitaba que naruto sintiera las pequeñas envestidas que sasuke daba a su entraba, naruto enredo sus piernas en la cintura de sasuke, tomo la remera de sasuke en sus manos, para sacársela, volvieron a juntar sus labios, sin dejar de frotarse entre ellos – sasuke…deja…de jugar, joder – el uchiha no pudo evitar poner una sonrisa, era eso lo que él quería, asiendo equilibrio con el peso de naruto, sasuke sacarse los pantalones junto con los bóxer, para seguir frotando su miembro sobre la entrada rosada del rubio, comenzó a entrar despacio, como siempre lo hacía, no importaba lo apurado que estuvieran, él siempre era gentil, o por lo menos al principio, -haa, sasuke… mételo ya… - naruto no tuvo que repetirlo, sasuke se adentró en el completamente -¡haa! Haa, haa, haa - sasuke comenzó a penetrarlo, despacio, y poco a poco aumentando la velocidad, naruto enredo con más fuerza sus piernas alrededor de sasuke, y sus manos fueron intuitivamente a sus hombros, intentado evitar caer
-haa, haa, haa, naruto… naruto… - sasuke comenzó a envestirlo con fuerza, le encantaba sentir como el rubio o apretaba
-sasuke... la cama – sasuke miro a naruto, y vio, que aunque a e le gustaba estar a así, no era lo más cómodo para el rubio, así que despacio, mientras seguía penetrando al rubio, se encamino a la cama, para recortar al rubio con el encima de el –haa… haa… - sasuke aprovechó esa posición, para acomodar al rubio y colocar sus piernas en sus hombros, para seguir penetrándolo –haa…haaa. Sasuke…sasuke…- sasuke se agacho, para besas los labios del rubio, las envestidas comenzaron a ir más deprisa, sasuke comenzaba a envestir con más fuerza, y llegando para profundo en el interior de naruto –haa…haa, HAA, HAA...HAA... AHÍ, JUSTO AHÍ… SASUKE…SASUKE – sasuke siguió envistiendo él también estaba por correrse, sentía el cosquilleo en sus piernas, aun mientras lo envestía, tomo la cintura de naruto, levantándolo junto con él, mientras se sentaba en el borde de la cama
-haa…haa… - sasuke penetro con más fuerza a naruto, y este comenzó a dar grandes brincos sobre su hombría, haciendo que las envestidas fueran más profundas – ya casi…naruto, haa, haa
-SI…HAA, HAA, NO PARES…SASUKE… ¡HAAA! – Naruto se había corrido, manchando ambos vientres, mientras sasuke seguía envistiendo –haa, haa – el interior de naruto le apretaba cada vez más, ya no aguantaría mas
-haa…haa…- dos estocadas más, tan fuertes y tan profundas, hicieron que se corriera en el interior del rubio -¡HAA! – ambos quedaron en esas posiciones, queriendo regular su respiración, sasuke salió lentamente del rubio, mientras tiraba ambos cuerpos a la cama, estuvo por serrar sus ojos, para poder descansar, pero el grito del rubio, lo asusto
-SASUKE-TEME, YA SON LAS DOS… VAMOS A LLEGAR TARDE- el rubio se levantó rápidamente de la cama, para dirigirse al baño
*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&&*&*&*&*
Ya la exhibición había comenzado, y la gente aumentaba cada vez más, los tres pequeños dejaron de correr para estar cerca de sus hermanos, aunque zusume como satoshi, tuvieron que irse con deidara, mientras ellos estaban atentos a los demás
-¿a qué hora vendrá otosan, y otochan? – pregunto yuki, en los brazos de su hermano
-no deben tardar en llegar – contesto este, mientras comenzaba a recorrer junto con shiro y kei las pinturas que no había visto, mientras deidara, aun cuando esta con esa sonrisa, no las fotos que le tomaban, miraba a cada rato la puerta, temari y kankuro ya habían llegado y felicitado a satoshi, igual que nagato y rasa, pero no había señales de naruto ni de sasuke
-espero que no se le ocurra faltar hoy, porque entonces si lo mato- susurro deidara a itachi y sai quienes estaban a su lado
-no es como su no supieras lo que están haciendo deidara – se burló sai
-es por eso mismo que lo mato
-parece que naruto como mi ototo tomaron muy enserio eso de empezar de nuevo, se comportan como adolecentes, creyendo que tienen un “secreto”
-eso no es malo, o mal es si se quedaron 5 años aun en la fase de adolecente caliente, aun no sé cómo mi hermano no se quedó embarazado otra vez – sai tapo disimulada mente su boca, no quedaba bien que se escuchara su risa en ese lugar
-bueno…después de tenerlo en abstinencia dos año, creo que es comprensible – dijo sai, deidara solo bufo, para seguir caminando junto a su hijo, y seguir con las siguientes pinturas, mientras ellos se quedaron ahí, vieron entrar una cabellera rubia, que corría en su dirección – hasta que llegas naruto – el rubio había llegado corriendo, mientras que detrás suyo venia sasuke caminando
-creí que habías salido temprano de la oficina para recoger a yuki – le cuestiono itachi a su hermano cuando llego frente a él, naruto se había ido a buscar a su hermano y felicitar a su sobrino - ¿acaso pensabas faltar?
-no exactamente – itachi solo suspiro, si no tenía que lidiar con su hijo menor, con todo eso que se hacía en su cabello, y más ahora que quería hacerse un tatuaje, también tenía que lidiar para que deidara no matara a su hermano por siempre hacer lo mismo – bueno, ya que llegaste vamos, satoshi ya está por presentar
*&*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*
Había sido un día muy largo, no solo por recibir una reprimenda de deidara, si no que se había enterado de que sora se había perforado las orejas, no es que fuera un viejo que vivía a la antigua, sino que se había enterado de que ya los tenía hace mucho y él ni enterado, naruto se justificó diciendo de que se había olvidado, y que con el cabello de sora no se notaba, pero ese no era el punto, había soportado que su hijo se hubiera comprado la moto a su corta edad, pero eso no le gustaba del todo, le había echado la culpa a itachi, ya que él era el que le permitía a sasome teñirse el cabello del color que quisiera, y ahora su hijo le salía con las perforaciones, aun recordaba cuando sora aún era pequeño, y lloraba porque lo quería tener a su lado, o por las pesadillas de la noche
-ahora entiendo a kiba cuando dijo que lo disfrutara mientras fuera chico – sasuke suspiro, “bueno aún tengo a este par” y si, yuki como aoi se habían querido ir a su casa junto con él, aoi ya lo tenía decidido, ya que ino se había ido hace dos días fuera del país para ver a sakura, y a takeshi le había salido un viaje de negocios a último momento, así que él se lo quedaría por un par de semanas, le había sorprendido que el castaño, como era, le hubiera pedido hacerse cargo de aoi también, habían decidido que al ser hermano de kei, aoi viviría con takeshi, pero a la vez tendría ciertas visitas con él, sabía que seguro era sobre la influencia de ino sobre él, pero sabía que era lo mejor, cuando se había enterado lo que sai dijo en la entrevista, no lo podía creer, creyó que naruto tenía que ver, pero este lo negaba, se sintió tan agradecido con sai, aunque este le dijera que se lo debía, sabía que no era así, él era el que le debía todo eso a sai, había vuelto a la empresa como vicepresidente, y sus horarios no eran los mejores para el cuidado del bebe, así que decidió aceitar la ayuda de takeshi, pero lo que más le alegraba, era que sus hijos, tanto sora como yuki, querían tanto a aoi, como si fuera de verdad su hermano.
Tenía a un dormido aoi en sus brazos, y yuki caminaba a su lado, mientras entraban a su departamento, y se dirigió primero al cuarto de los pequeños, aun tenia e cuarto que sora usaba cuando era pequeño, aun lo usaba cuando venía a quedarse a dormir algunos días, había pensado arreglar un cuarto para yuki y otro para aoi, pero al parecer ellos no querían, ya que si yuki no se iba al cuarto de aoi, era aoi e que iba al cuarto de yuki, así que decidió temporalmente ponerlos en el mismo cuarto, por lo menos hasta que yuki creciera un poco más, recostó con cuidado a aoi en su cama, con ayuda de yuki quien destendio la cama, para taparlo bien
-mama… - escucho que aoi susurraba en sueños, beso su frente para luego ir a recostar a yuki, sabía que aoi debía extrañar a sakura, pero en eso él no podía ayudarlo en nada
-papa… ¿Dónde está la mama de aoi? – le pregunto su pequeña, mientras la arropaba
-veras, tu no la conociste, pero por problemas de salud este de viaje
-aoi dice...haa – bostezo la pequeña – que su mama vendrá pronto
-eso no lo sé- ahora duerme que mañana tienen escuela – sasuke apago la luz del cuarto, para dejar la puerta un poco abierta, para que la luz del pasillo iluminara levemente el cuarto, fue a su cuarto a recostarse, pensando en que quizás la presencia de sakura sería buena para alguien, o por lo menos para aoi, no sabía mucho de sakura desde que hiso los papeles de la custodia de aoi, naruto le había convencido de dejar que sakura viera al bebe, pero él nunca era el que se lo llevaba, era ino la que venía buscarlo para llevárselo a sakura, después de la boda de ella con takeshi, ino comenzó a acercarse más por él bebe, y poco a poco a sakura, se había enterado por ino, que shisune estaba en estados unidos, y que le había encontrado un tratamiento que le podría ayudar a sakura, eso ya fue hace dos años, no sabía cómo iba, ni si ya caminaba, lo único que le interesaba era que llamara 1 vez por semana para hablar con aoi, que el único que preguntaba por ella, miro su mesita de luz, donde tenía la última foto que se había tomado, donde está el junto con sus tres hijos, mientras naruto estaba a un lado de ellos, en ese entonces sora tenía 14 , y los pequeños 5, ya venía siendo hora de que cambiara la foto por una nueva, poco a poco fue quedándose dormido, queriendo recordar todo lo que había hecho, todo lo que había peleado para volver a estar tan tranquilamente en compañía de su rubio ex esposo
*&*&*&&*&*&*6*&*&*&&*&*&*&&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&
Ya habían pasado unos días, era un jueves en la mañana, y sai se encontraba en el aeropuerto, esperando que su vuelo fuera anunciado, estar en ese lugar le traía muchos recuerdos, y más al recordar que estaban cerca de las escaleras donde le ofreció su corazón a su pelirrojo, porque si, el aún seguía siendo su pelirrojo, se había cortado el cabello, y lo tenía más corto, aun recordaba las veces que acompaño a gaara a ese lugar, porque si, el gaara había vuelto, había regresado después de un año, cuando él está en una entrevista, al volver quiso pasara a saludar a yuki, pero se llevó la sorpresa de que el pelirrojo había vuelto, recordaba haber llorado en su regreso, porque de verdad lo había extrañado, recordaba haberle dicho la verdad con respecto yuki, él había respetado su decisión, le había costado no tomar un avión en ese momento e ir a buscarlo, pero no lo hiso, porque sabía que gaara necesitaba tiempo, y que el regresaría cuando estuviera listo, y por primera vez no quiso presionarlo, no como hizo con naruto, esta vez quiso que el pelirrojo tuviera el tiempo que necesitara, habían hablado de todo, y de nada a la vez, porque en ningún momento, gaara pronuncio la palabra te amo, jamás le dijo que le devolvía su corazón, y aunque sentía un rechazo, sai aún tenía ese sentimiento por él, creyó que se quedaría , pero no fue así, gaara se volvió a ir, diciendo que aún le faltaban lugares que conocer, el pelirrojo había tomado la idea de seguir conociendo lugares diferentes, y aunque siempre volvía, siempre terminaba yéndose ni una semana de haber vuelto, sai quería decirle que se quedara, que lo amaba, pero no sentía que fuera el momento, así que decidió dejarlo ir, o por lo menos por ahora, había entendido bien las palabras de gaara, él siempre fue de amar a las personas de una manera exagerada, dejando todo por esa persona, pero gaara no quería eso, gaara quería que él tuviera sus prioridades, y así lo aria, no quería depender 100% de una persona, no es que no amara a gaara, pero comenzó a creer que lo mejor por el momento seria concentrarse en su carrera la cual estaba empezando, y quería seguirla, y cuando gaara volviera podría moldearla a él, así como había hecho deidara, en su momento había malinterpretados sus palabras, el siempre creyó que tenía que vivir para el arte, como una vez le dijo ino, pero no era así, deidara se lo aclaro, él no tenía que vivir para el arte, él tenía que vivir su vida como si fuera una arte, y así lo aria, ahora se encontraba viajando al extranjero, sasori había encontrado a alguien interesado en sus pinturas y quería conocerlo, eso podría ser bueno para su carrera.
-bueno creo que es hora de irme – dijo al escuchar como llamaban para su vuelo
-cuídate sai, y dile a sasori que tiene una ahijada que pregunta por el – dijo deidara para abrazarlo
-sí, se lo diré
-adiós sai-san – sai se agacho para despedirse de la pequeña yuki, y del pequeño aoi, quienes habían faltado a la escuela
-cuídate sai – le dijo naruto, y sasuke solo asintió con la cabeza
-vamos, no es como si fuera mi primer viaje
- pero es el primero en el extranjero, y tú no hablas muy bien inglés para ser preciso
-yes...yes… - los 4 rieron, sasuke mas disimulado que los otros
-sora te manda saludos, y que tenga un buen viaje, no pudo venir ya que tenía un examen temprano – sai asintió
-bueno, nos vemos adiós – sai se encamino, se sentía alegre, porque aunque no lo dijera, le alegraba viajar al extranjero, no solo por lo que le podría beneficiar a su carrera, sino que quería sentir lo que seguro el pelirrojo sentía en esos momentos, el conocer otro lugar, porque aunque lo suyo fuera un viaje por el trabajo, se encargaría de hacerlo como si fueran una vacaciones, porque quería comprender lo que gaara sentía, al conocer un lugar nuevo – ¡oh, por cierto! ¡Felicidades chicos!- dijo antes de perderse de vista
-¿eh? ¿Por qué dijo eso? – deidara miro extrañado a naruto, pero tampoco lo comprendió
-será idiota – susurro sasuke
-¿acaso estas embarazado de nuevo naruto? – dijo asombrado deidara
-¿Qué? ¡No! – aclaro de inmediato este
-¿tendremos un hermanito? – pregunto yuki
-¡no!
-¿entonces?
-¡y yo como voy a saberlo! – reclamo naruto
-bueno, yo tengo que irme a trabajar ¿podrás llevarte a aoi contigo naruto?
-claro, vamos niños, nos vemos deidara – dijo naruto para encaminarse con os niños a la salida
-no seas idiota, vamos a la misma salida tonto
*&*&*&*&&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&**&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*
Habían pasado dos días desde la partida de sai, y naruto como sasuke estaban en la casa del primero, sora estaba en el instituto, mientras que yuki y aoi habían ido a casa de deidara a jugar con zusume, el rubio había comenzado a preparar algo para comer, ya que hoy sora llegaba tarde, y deidara también vendría tarde a almorzar, aunque no esperaba la visita de sasuke ese día
-¿no tendrías que estar trabajando? – dijo naruto a sasuke, quien estaba detrás de e abrazándolo, mientras le daba besos en el cuello – déjame hacer sasuke
-oh vamos naruto, os niños no están, ¿no podríamos aprovechar? – dijo con vos sugerente sasuke
-ahora no sasuke, aún tengo que revisar unos papeles, tengo un nuevo trabajo por el otro fin de semana y aun no lo he revisado, sin decir que para el miércoles tengo otro trabajo
- por eso te dije que no trabajaras, no tienes tiempo para nada – naruto sintió como sasuke comenzaba a repartir besos por todo su cuello, inclino la cabeza a un costado, dándole más facilidad al trabajo de sasuke
-eso no es cierto, es solo que es la primera vez que se me junto tanto trabajo, veras que luego estaré libre, ha le he prometido a aoi que iríamos al parque de diversiones, tal vez podamos ir todos juntos
-naruto, sabes que es imposible eso
-oh vamos sasuke, el pequeño tiene asma, no ataques cardiacos, estará bien
-no lose, hablare bien con shino ya que insistes tanto – naruto solo rodo los ojos, sasuke no cambiaría, siguió con su tarea de seguir cocinando, pero le extraño que sasuke dejara de besar su cuello, para sentarse en la mesa –oye naruto ¿podemos hablar? – eso le pareció extraño, extraño que sasuke pidiera permiso para hablarle, si él tenía que decirle algo, se lo diría, vio la cara seria del pelinegro, así que pensó que sería algo serio, bajo el fuego de la hornalla, para lavarse las manos, y sentarse junto a sasuke
-¿ha pasado algo? – pregunto por la seriedad de sasuke
-naruto, veras, vine aquí temprano por un motivo, no pensaba encontrarte cocinando, pero si no te lo digo ahora se hará tarde – naruto miraba extrañado a sasuke, pero le dejo continuar – naruto, desde que nos divorciamos, comenzamos desde cero, comenzamos a salir, comenzamos como cuando éramos chicos – naruto asintió – ya de eso son 7 años , sora ya no es un niño, y yuki, nuestra hija, ya está bastante grande – naruto no entendía a que se refería “¿acaso me está diciendo que quiere tener otro hijo?” naruto se mordió el labio, no era que no quisiera otro hijo, es más la idea le fascinaba, pero no en esos momentos, yuki aún era chica, y el no más de unos años que volvió a trabajar, pero tampoco quería herir a sasuke si le decía que no – creo que, sería bueno que sigamos avanzando…juntos… - sasuke miro la cara de naruto, y los gentos que hacia inconscientemente no le gustaban, no le daba mucha seguridad, pero decidió seguir, si no sus planes se arruinarían -¿quieres…casarte conmigo…naruto?
-veras sasuke un hijo no es… - pero callo en cuanto se dio cuenta cual fue la frase del azabache “¿me acaba…de pedir matrimonio?” la mente del rubio se quedó en blanco, ¿sasuke le acaba de pedir matrimonio? Vio como sasuke sacaba una pequeña cajita de su bolsillo, y se la dejaba frente suyo, la tomo en sus manos, estas le temblaban, no entendía porque, no es como que jamás se hubiera imaginado volver a casarse con el azabache, pero no se le ocurrió que él quisiera hacerlo ahora, o que se lo propusiera en ese momento, vio la sortija que estaba ahí, y no pudo evitar sonreír, si, era vieja, no era un modelo moderno, pero era la de su antiguo compromiso, la misma con la cual sasuke le había pedido matrimonio la primera vez, ni siquiera él sabía que aún estaban, y que sasuke las tuviera significaba mucho para el
-¿y…que me dices naruto?
-si… una y mil veces si – dijo el rubio para tirarse a abrazar a su ahora prometido, estaba feliz, sasuke lo hacia tan feliz que no creía que lloraría en cualquier momento, si, sasuke no era tan romántico, pero si sabía cómo hacerlo feliz, sasuke lo tomo de la cintura, no importaba que la comida se estuviera quemando, o que la olla estuviera rebalsando, ellos juntaron sus labios, se besaron durante un largo tiempo, solo querían sentir al otro cerca suyo
*&*&*&*&&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&**&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*
En el instituto konoha, ya había sonado el timbre del receso, y shiro estaba sacando su almuerzo, no faltaba mucho para que los demás lo pasaran a buscar e irse a la azote como era su costumbre, los primero años siempre le habían tocado tener de compañero a sora o kei, incluso a sasome, pero los últimos tres años los tres habían sido repartidos por tres aulas distintas, por eso en el almuerzo siempre se juntaban los tres para almorzar en la azotea, estuvo por dirigirse a la puerta para ver si ya venían pero una voz a su espalda lo llamo, era una de sus compañeras, castaña de ojos negros, acompañada de un doncel y otra chica más que era de color rojo
-¿qué ocurre? –pregunto, no entendía porque se le acercaban, no era que fuera un antisocial, pero los amigos que siempre tenía en el aula eran varones, las chicas y donceles no se le acercaban mucho, y se le hacia extraño que lo llamaran
-¿ya te vas con tus amigos? – pregunto la castaña con algo de burla
-eh, si…
-dime shiro-chan, ¿no te da vergüenza lo que estas asiendo? – shiro miro algo confundido a la pelirroja
-¿de qué hablas?
-lo que haru-chan dice, es que le estas dando mala fama a nuestro aula, no solo coqueteas con los varones de aquí, sino que también con los de otros grados
-¿Qué? – shiro abrió los ojos sorprendido, no entendía de que hablaba la castaña
- lo que aun no entiendo es que ve sora, y los demás en ti… ¿es que ya te acostaste con los cuatro?
-eso no es verdad, yo no he hecho eso – quiso defenderse shiro, pero no le gustaba que pensaran eso de el
-¿sabes lo que toda el aula piensa de ti inuzuka?- shiro negó, no lo sabía, jamás pensó que se había hecho una reputación en el aula – que no eres más que una puta, zorra, o como lo quieras llamar, por eso todos los varones de aquí se te aceran – la castaña se acercó muy cerca de su rostro – así que te pediré dos cosas, deja de ensuciar el aula con tu reputación y compórtate como se debe – a shiro comenzó a temblarle el labio, le dolían esas palabras, mas porque era todo mentira, pero no dejaría que ella se diera cuenta – y lo segundo, deja de acosar a sora-sempai y los demás, no quiero que por tu culpa tengan la misma reputación – la castaña paso de él, yéndose con sus amigas, shiro quedo en el aula, miro a su alrededor, sus compañeros, los que se quedaron en el aula a comer, habían escuchado todo, y ninguno dijo nada “será…¿qué es verdad?”
-shiro, vamos a comer – escucho la vos de sora en la puerta del aula, y se dio vuelta, y aunque no estaba llorando, no quería que viera su cara en ese momento, sin decir, que no quería que los demás pensaran lo mismo de el
-vallan ustedes, yo comeré aquí hoy – sora frunció el ceño, tomo la muñeca de shiro antes de que caminara a su silla, y lo saco del aula -¿pero que crees que haces? – se soltó bruscamente, y vio como en el pasillo estaban los demás, sasome, satoshi y kei, los tres con el ceño fruncido
-si podías gritas así, ¿Por qué no lo hiciste así un rato?- shiro miro sorprendido a satoshi, y comprendió, los chicos habían escuchado todo
-si ya lo escucharon, ¿Por qué siguen aquí?
-oh vamos shiro, no es como si eso fuera verdad, sin decir que nos importa muy poco lo que piensen – shiro miro a kei, quien era el que le había dicho eso
-es verdad shiro-chan, y aunque fuera verdad, a mí no me molestaría si me seduces – sasome dijo con una sonrisa, para luego ser callado por el golpe que le dieron sora y satoshi, shiro sonrío, era verdad, ellos eran sus amigos, se conocían desde pequeños, no debía preocuparse por comentarios de otros – que bueno que sonríes shiro, ahora vamos a comer, me muero de hambre
*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&&*&*
-¡haa! ¡Haa! ¡Haa! – En la casa de naruto, específicamente en su cuarto, se encontraban el rubio junto con el azabache, “celebrando” su actual compromiso, naruto estaba de rodillas frente a la cama, mientras sasuke lo penetraba salvajemente - ¡haa! ¡Haa! ¡Sasuke! – naruto ya no aguantaría mucho, sentía a sasuke golpear muy fuerte en su interior, sentía que en cualquier momento se correría
-¡naruto! – Sasuke volteo su cuerpo, para poder acomodarlo en la cama - ¡naruto…ya casi…!
-¡haa! ¡Haa! ¡Ahí, justo ahí sasuke! ¡Dale ahí! – sasuke siguió penetrándolo no faltaba mucho para que se corra, recostó su cuerpo sobre él, mientras tomaba sus labios
-¡HAA! ¡NARUTO! – Dijo al momento de correrse sasuke en su interior, provocando que el rubio también se corriera entre sus vientres- ambos se quedaron así, regulando su respiración, sasuke salió de naruto despacio, se inclinó para tomar de nueva cuenta los labios de su rubio prometido, pero antes de tomaros, el grito del otro lado de la puerta los paralizo
- PODRIAN CONPORTARSE COMO GENTE NORMAL, Y HACERLO EN LA NOCHE CUANDO NO AHÍ NADIE… O POR LO MENOS NO NOS INVITEN PARA ESCUCHARLOS – la vos de deidara se escuchó bien claro, y como los pasos se alejaban de su cuarto, naruto sudo frio, miro el reloj de su cuarto, no pensó que su hermano llegara tan temprano, miro a sasuke avergonzado, pero este solo le sonreía como burlándose de el
-creo…que hay que bajar – dijo en un susurro, naruto esperaba que el único en oírlos fuera deidara, se moriría de vergüenza si su hija o el pequeño aoi lo hubieran escuchado
-creo que no ahí de otra – dijo sasuke mientras se dirigía al baño de naruto, sin descaro de estar desnudo en frente de él, mientras que naruto se dirigió a su armario y saco dos mudas de ropa una para él, y otra de sasuke, ya que este había dejado en varias ocasiones algo de su ropa, tomo su ropa, y vio por el pasillo no había nadie, seguro deidara había vuelto a bajar, así que cubriéndose con una sábana, se dirigió al baño del pasillo, así no tener que esperar a que sasuke saliera del baño, no paso mucho cuando salió, vio a sasuke esperarlo del otro lado de la puerta - ¿te ocurre algo?
- es que… me da algo de vergüenza, el que deidara nos escuchara
-no te preocupes, no es como si hicieras algo malo – dijo sasuke para besarlo en los labios , ambos bajaron la escalera, y naruto no pudo evitar sonrojarse cuando vio a su hermano cerca de la puerta que daba al living, esta estaba abierta y vio cómo su hija y la pequeña zusume jugaban en el living
- no han escuchado nada, solo se escuchó cuando subí las escaleras – le dijo deidara algo molesto
-deidara…veras – naruto intento explicarle, pero la vos de kiba lo llamaba desde la cocina, los tres se encaminaron ahí, vieron como kiba se encontraba terminando la comida que naruto había dejado por la mitad, junto a un aoi que lo miraba atento
-oh naruto, espero no te moleste que irrumpiéramos en tu casa, venía a verte y me encontré con deidara en el camino, y como tenía una llave, entramos –explicó el castaño
-no kiba, para nada, me alegra que pudieras venir – naruto recorrió la vista por la cocina, pero no vio al pequeño hijo de kiba por ningún lado -¿no ha venido yue contigo? – yue era el pequeño hijo de iba, el cual tenía 3 años de edad, era un varón de cabellos negros, que a diferencia de sora que se parecía a su otochan, yue había salido igual a shino, bastante en lo serio que era
-no, shino se lo ha llevado, dijo que irían a casa de sus padres, ya sabes como son, preferí venir a visitarte – no era que kiba no se llevara bien con ellos, recordaba haber visitado a la familia de shino una vez, había sido el día más aburrido de su vida, todos eran muy serios y muy callados, si no fuera por kiba, se hubiera muerto de aburrimiento –quería darte una sorpresa
- creo que la sorpresa no las hemos llevado nosotros – dijo deidara, eso hiso que kiba notara la presencia de sasuke en la cocina
-bueno, verán, iba a decírselos – deidara enarco una ceja, igual que kiba, ambos notaron a naruto nervioso, y no entendían porque – verán, sasuke y yo, hemos mantenido una relación hace unos años ya
-¿y? – naruto esperaba ver la cara de sorpresa de deidara o de su amigo kiba, ya que había decidido no contarles nada más, ya que no quería que los demás estuvieran enterados de que sasuke y el querían volver, prefería tenerlo en secreto pero la cara de tranquilidad de su hermano, y que no le reclamara por haberle contado, lo desconcertó un poco – eso ya lo sabíamos
-¿Qué?
-vamos naruto – dijo kiba – no es como si no fuera obvio, hace mucho que ya lo sabíamos, es más, creo que todos lo saben – dijo kiba rascándose la mejilla , naruto se quedó de piedra, el intento por todo mantenerlo en secreto, y queriendo justificar siempre la presencia de sasuke en su casa, con la presencia de yuki, y ahora kiba le decía que todos lo saben , miro a sasuke, pero este negó con la cabeza sabiendo lo que el intuía que le preguntaría
-bueno…verán
-bueno, ya que lo saben, creo que es buen momento para que lo sepan – hablo sasuke – naruto y yo nos casaremos – y por fin tuvieron la reacción que buscaban, ambos donceles abrieron los ojos sorprendidos, vieron a naruto, y este asintió sonrojado, él no pensaba decírselos ahí, pensaba decírselo más adelante, cuando toda la familia este reunida
-¡naruto, felicidades! – kiba fue el primero en reaccionar, y felicitar a su amigo con un abrazo, seguido de deidara, quien tomaron a naruto y le hacían un muchas preguntas, que ni el mismo entendía, sasuke rio, sabía que junto con eso, no solo deidara sino que naruto se olvidarían de la vergüenza que no hace mucho pasaron, vio a aoi seguía sentado, mirando a los tres donceles desde su asiento, camino hacia él y lo tomo en brazos para ir al living, mirando la mirada de súplica que le lanzaba naruto, el solo rio, para irse al living, con sus hijos y su sobrina
*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*&*
Ya eran las 5 y recién salían del instituto konoha, shiro estaba más animado que antes, no le presto más atención a lo que sus compañeras le dijeran, él sabía que no era verdad, y sus amigos también, y lo que en verdad le importaba era la opinión de sus amigos, y no dejaría que le arruinaran el día, no por tonterías, ahora se encontraban caminando a la salida del instituto, los caminaban tranquilos conversando tranquilo, deteniéndose cada rato ya que venía cada uno que otro varón a hablar con shiro sobre el incidente del salón, para decirle que no era verdad eso, o que por lo menos ellos no lo pensaban, si shiro siempre fue muy amigable con los varones, ya que no era el típico doncel delicado, como todos los demás, eso le daba más facilidad de hacer amigos varones siempre, eso solo hacía que tres de los varones presentes fruncieran el ceño, mientras sasome solo veía con gracia como shiro repetía una y otra ves que no había problema, y como su cara enrojecía por la vergüenza, ya que el aron que se marchaba había sido el sexto en interrumpir su camino hacia la salida
-oh shiro-chan, no sabía que fueras tan popular – se burló sasome una vez estuvo a su lado
-no digas eso, ya me estoy comenzando a cansar
-si yo también – susurro sora despacio sin que nadie o escuchara
-pero si bien a hablar contigo es porque en verdad te consideran su amigo y no querían que creyeras esas cosas
-si tienes razón – dijo shiro con una sonrisa
-ahora que lo pienso, siempre estas rodeados de varones ¿Por qué no tienes novio?
-¿eh? – shiro no pudo evitar sonrojarse por eso, miro a sus amigos y su sonrojo aumento, ya que estos le quedaron mirando, esperando su respuesta, miro a satoshi primero, quien desvió la mirada
- te has puesto colorado ¿es que te gusta alguien? – Siguió sasome, haciendo que todos se detuvieran dejando de caminar, haciendo que shiro quedara en frente de los cuatros -¿Quién es?
-bueno…es que… - shiro desvió la mirada, y sasome le hacía cada vez más gracia eso, en cambio a los otros tres solo los puso algo nervioso, ellos ya tenían un nombre en sus mente,
-será… ¿qué te gusto yo? – dijo con una sonrisa sasome
-¡no seas idiota sasome! ¡A shiro le gusta kei! – le regaño satoshi por la tontería que decía su hermano, sin darse cuenta de lo que había gritado, se habían quedado en silencio unos minutos
- ¿en verdad? –le pregunto sasome a shiro
-no… a él no le gusto yo – dijo kei – a él le gusta sora
-¡no es cierto, a shiro le gusta satoshi! – y shiro se quedó de piedra, no sabía cómo habían llegado a eso, sus tres amigos discutían y sacaban argumentos de porque creían que le gustaba el otro, lo peor es que los alumnos que pasaban los quedaban viendo y eso le daba algo de vergüenza ajena
-¡que malos que son, porque ninguno cree que shiro pudiera fijarse en mí!- se unió a la discusión sasome
-¡porque eres un baka! – grito el hermano de este
-vamos shiro, dinos la verdad ¿Quién te gusta? – pregunto sora, él tenía la idea de que shiro gustaba de satoshi, pero estos ya o estaban haciendo dudar
-si shiro ¿Quién te gusta? – exigió kei, satoshi solo se quedó callado mirándolo esperando su respuesta, shiro no sabía dónde meterse, los cuatros lo habían acorralado, esperando su respuesta, pero este no sabía que decir
-no creen que no es nada caballeroso acorralar a un doncel y exigirle tal respuesta – una voz seria se escuchó a espaldas de los muchachos, haciendo sentir un escalofrió a cuatro de ellos
-otosan ¿Qué haces aquí? – le pregunto shiro a su padre, no sabía que pasaría por el
- estoy volviendo de la casa de tus abuelos, y pensé pasar a recogerte…vamos – shino se encamino a la salida, seguido de su hijo, mientras que los otros cuatros se quedaron ahí, viendo a shiro irse con su padre
-abúrame-san sí que da miedo – dijo kei, cuando ya se habían perdido de su vista
-creí que se me saldría el corazón – dijo sora
-¡todo es por tu estúpida pregunta sasome! – Regaño satoshi – shino-san pensara mal de nosotros ahora
-yo no tengo la culpa, fueron ustedes quien comenzaron a decir que shiro gustaba de alguno de ustedes
-a todo esto, aún no sabemos de quien gusta sora
-tienes razón sora, pero tampoco negó que fuera alguno de nosotros –dijo satoshi
-uff… tendremos que esperar a que nos lo diga – se dio por vencido kei, sabía que no podrían saberlo a menos que shiro se los dijera, aunque él estaba seguro que sería sora, él también estaba dudando, los cuatros suspiraron, lo mejor hubiese ido dejar el tema ahí, y no seguir con la preguntas
*&*&*&*&&*&*&*&*&**&&*&**&&*&*&*&*&**&&*&**&&*&**&&*&*&*&*
Gaara estaba de viaje, desde la primera vez que viajo, había dicho que fue una experiencia maravillosa para él, le había fascinado, tanto que quiso volver a irse, quiso seguir conociendo lugares, su casa era alquilada, y esa misma plata le ayudaba, a costearse sus gastos, no gastaba mucho, había encontrado a un grupo de personas, que al igual que el viajan a conocer lugares, le habían enseñado tantas cosas, de que aunque gasta más tiempos u viaje, podía buscar formas de viajas sin gastar muchos, en vez de pagarse un hotel por unos días, entre todos alquilaban en pequeñas casas baratas con solo habitaciones para pasar la noche, y recorrer varios lugares, no sabía con exactitud cuando llegaba a un lugar o cuando se iría de él, pero eso era lo que le gustaba, su grupo no era grande, aparte de él habían dos donceles y una mujer que lo acompañaban, al principio gaara era algo antisocial, ya que no estaba acostumbrado a convivir con un grupo grande de personas, pero como el conocer lugares era lo que le gustaba, poco a poco se fue adaptando…todo eso le había contado a sai, pero se había salteado varias cosas, una de ellas, era que en ese mismo grupo, habían un par de varones, y otra era que no solo salían a conocer lugares de día, sino que también de noche, y ahí estaba sai, luego de hablar con sasori y comprometerse a pintar una pinturas para el hombre que lo había citado a ese lugar, sai había decidido relajarse, sasori le había dicho que en la playa, harían una fiesta, no necesitaban invitación, eso era obvio, así que en vez de divertirse en un bar o baile, decidió irse con sasori a la dichosa fiesta, al principio se divirtió, sasori baila con un doncel algo lejos de él, estuvo por bailar con una chica, pero sus ojos se encontraron con una cabellera roja, creyó confundiré al principio, no creía encontrarse a gaara en ese lugar, pero al acercarse no solo lo confirmo, pero no le gusto o que vio… si gaara estaba ahí, estaba bailando con un doncel y una chica, al parecer en ronda, eso no fue lo que le molesto, si no el hecho de que un varón, había tomado su mano para sacarlo a bailar, sai pensando que o rechazaría no se acercó, pero ver a gaara seguir bailando, como si estuviera en confianza con ese muchacho, y más al ver que gaara le sonreía, le hiso sentir un malestar en el estómago, si, gaara le sonreía, le sonreía cálidamente, pero ahora no era así, gaara le sonreía a ese chico, le sonreía divertido, una sonrisa que no veía casi nunca en gaara, estuvo por darse media vuelta y marcharse, pero detuvo sus pasos
“¿acaso me voy a ir?, yo no soy así…” – apretó un poco sus puños “sabaku no gaara, no te dejare así” – decidido se acercó a la pareja que estaba bailando entretenía con la música, si bien no estaban bailando nada sensual, si sus cuerpos estaban tan juntos a sai no le gustó nada como ese chico tocaba la cintura de gaara, o sus manos, el simple hecho de que lo mirara ya le molestaba, aprovechando que lo había hecho girar a gaara, tomo su mano libre de gaara para que terminara chocando con el
-¡¿pero qué…?!¡¿Sai?!– gaara estaba sorprendido, no esperaba encontrarse con el ahí, ni mucho menos en la misma fiesta
-hola rojito –saludo este pegándolo mas cerca a lo que gaara se soltó
-¡¿gaara?!¡¿Está todo bien?! – pregunto el chico con el cual el pelirrojo estaba bailando hace unos minutos, tomándolo del brazo
-oh, sí, sí, ¡es un… viejo amigo, ahora voy! – El chico se marchó, para seguir bailando con los demás chicos- ¿Qué haces aquí sai?
-¡así que soy solo soy un viejo amigo! – dijo algo dolido sai, no le gusto que gaara lo presentara de esa manera
-¿eh?, ¡no puedo oírte bien sai, la música esta fuerte! – sai y apenas lo escuchaba, así que decidió tomar la mano de gaara para salir de ese lugar, su hotel no estaba muy lejos, solo dos cuadras – espera sai ¿a dónde me llevas? – dijo gaara cuando ya estaban lo bastante lejos dela música
-a mí también me da gusto verte gaara – dijo sai, gaara se quedó callado, sai lo siguió arrastrando, gaara pudo ver el hotel, y supo que sai lo aria entrar, no era que no quisiera hacerlo, pero no sabía si estaría bien dejar a sus amigos en la fiesta sin decirle nada – subamos, luego te acompaño de regreso
-de acuerdo – ambos entraron, habían subido al tercer piso, y entraron a la habitación de sai, al entrar lo primero que hiso sai fue regular el aire, ya que la habitación estaba algo fría, y le dio su campera a gaara –gracias
-póntela hasta que se regularice la temperatura, nunca te había visto vestido así – dijo viendo, como gaara tenía puesto un pequeño short para el gusto de sai, y una camisa algo trasparente que le quedaba un poco arriba de ombligo
- fue idea de rin
-¿siempre te hace salir así? –cuestiono sai, mientras gaara tomaba asiento en uno de los sillones y sai aun permanecía de pie
-¿Qué haces aquí sai? – a gaara no le gustaba como sai hacia las preguntas, sentía que lo estaba regañando, y eso no le agradaba
-vine por trabajo, no pensaba encontrarte aquí
-oh, ya veo- sai noto cierta decepción en la voz de gaara
-te estuve esperando – gaara miro extrañado a sai, no entendía a que se refería, si él no sabía ni siquiera que sai estaría ahí, como era que él lo estaba esperando – me dijiste que esperara tu regreso a konoha
-pero si he vuelto, no seguido pero he vuelto varias veces
-¡pero nunca has regresado gaara, me dijiste que cuando llegaras retomaríamos lo nuestro, pero aunque has vuelto no ha sido así, en vez de eso te has marchado varias veces!
- no me reclames como si hubieras venido a buscarme, e que nos hallamos encontrado aquí fue pura casualidad, y si vas a estar gritándome me voy – gaara se levantó para salir de ese hotel
-¿el que te encontrara bailando con ese joven también fue casualidad? Porque para mí vista estas bastante cómodo y alegre – gaara se detuvo, mirando a sai extrañado
-¿ese es el problema? El que me hayas visto con otro chico ¿te molesto?
-me dijiste que me amabas, y que te esperara… si no ibas a volver porque no fuiste de frente y me dijiste que ya no me querías a tu lado – sai estaba sacando todo, nunca le había reclamado nada a gaara por esos 7 años en los que él no volvió, y ahora sentía que quería decirlo todo, no quería guardarse nada – si ya no querías mi corazón era mejor que me lo devolvieras, así yo no me quedaba esperándote como un idiota
-estas exagerando todas las cosas sai – dijo tranquilo gaara – jamás dije que no te quería a mi lado, aún sigo queriendo tu corazón
-¿entonces porque no has vuelto? ¿Gaara? – sai vio que gaara desviaba la mirada, como si su sillón fuera más interesante que el- ¿podrías decirme?
-quería…quería que tú me vinieras a buscar, quería que tú me pidieras volver y quedarme contigo - sai miro a gaara, estaba sonrojado sabía que le daba vergüenza decirle eso, pero no entendía, si hubiera sido por él hubiera ido tras desde la primera vez que gaara piso un aeropuerto, pero gaara fue el que le dijo que lo esperara, y que no lo siguiera
-pero fuiste tú el que me pidió que lo esperara – vio a gaara mirarlo, como si hubiese recordado algo, mientras una pequeña sonrisa paso por sus labios
- ¿tú no viniste por eso? ¿Por qué te lo pedí la primera vez?
-creí que era eso lo que tu querías, por eso fue que no te busque porque yo seguía esperándote en konoha
-pero eso fue a primera vez que me fui, creí que al volver, e irme otra vez, tú te vendrías conmigo, pero como no me acompañaste, no te dije nada, y tu carrera estaba creciendo, no creí fuera bueno pedirte que me acompañaras a viajar
-gaara… ¿me dices que si te lo pido, tú te vendrías conmigo? – sai se había acercado a gaara, para abrazarlo como antes, este aun tenia puesto su abrigo, pero se notaba que ya comenzaba a hacerle calor
-no es como si no pensara volver, tengo un boleto a konoha para la próxima semana
-pero te quedaras en konoha
-no lose, ¿tú quieres eso? – sai sonrió feliz, se sintió idiota, el creyendo que gaara ya no lo quería como antes, y su rojito estaba esperándolo como a él, tomo sus labios se besaron, tomo sus labios, y metió sus manos dentro de abrigo que tenía puesto el pelirrojo sin cerrar, comenzaba a gustarle la ropa que tenía puesto gaara, solo si la tenía dentro de cuatro paredes, y él estaba presente, comenzó a besar su cuello, gaara no se lo impidió, puso sus manos en sus caderas, apegándolo mas a el
-¿aun eres virgen? ¿No? – dijo sai con burla, al notar como gaara suspiraba con pequeños toques, y más cuando puso una de sus manos en su trasero
-claro que si…idiota – respondió gaara, el abrigo había caído al suelo y su camisa estaba desabotonada completamente, dejando ver su abdomen , sai comenzó a guiar a gaara a su habitación, sin dejar besar esos labios que tanto había extrañado, gaara iba a dejar de ser virgen…o eso creía, si no fuera por el grito detrás de la puerta
-SAI, SAI PORQUE ME DEJASTE EN LA PLAYA, SAI – sasori estaba del otro lado de la puerta golpeándola, sai pensaba ignorarla pero al parecer gaara no pensaba así ya que el pelirrojo comenzó a abrocharse su camisa rápidamente
-idiota, porque no me dijiste que mi hermano también estaba aquí –sai suspiro, sasori se las pagaría después, resignado se acomodó la ropa, mientras aún se escuchaban os gritos de sasori, y el intentando que no se notara el problema que tenía entre sus piernas
-¡que ya te escuche! ¡Espera un momento!
*&*&&*&**&&*&*&*&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&&*&*&*&*&*&*&*&
Ya era de noche, sora había llamado diciendo que se quedaría en la casa de kei a dormir junto con sus primos, deidara se había marchado junto con kiba hace unas horas, dejando a ambos junto con aoi y yuki, que jugaban en el cuarto de la pequeña, ambos estaban sentados en el sillón viendo una película
-¿te molesta que aoi se quede? Es que no creo que quiera irse ahora que está jugando con yuki
-claro que no sasuke, ¿Por qué no te quedas tú también? – dijo naruto, sasuke sonrió, volvió a tomar los labios de naruto, le gustaba tanto, y se alegraba tanto volver a estar así con él, como era antes, le encantaba volver a ser feliz con su rubio, junto con sus hijos
-te amo tanto naruto
-yo también sasuke – volvieron a besarse, pero se separaron al escuchar la pequeña voz del aoi detrás de ellos, naruto se acomodó mejor -¿qué ocurre aoi? – pero el pequeño no le contesto, eso le pareció raro el pequeño miraba a sasuke, y camino hasta estar cerca de el
-¿Qué pasa hijo? – fue sasuke quien le pregunto mientras lo tomaba en sus brazos
-¿yuki volvió a pelear contigo? – le pregunto naruto pero el pequeño solo lo miraba, este miro a sasuke, el cual se encogió de hombros, aoi nunca lo ignoraba, siempre había sido muy alegre cuando estaba con él, no entendía porque no le hablaba
-¿ocurre algo aoi?
-¿es verdad…que se van a casar? – la pregunta sorprendió a ambos, más porque no tenían en claro si su pequeño sabía lo que significaba eso
-¿Por qué preguntas eso aoi?
-lo escuche cuando estaban en la cocina, kei me dijo que cuando ino se casó con otosan, ella se convirtió en su madre, pero yo solo le digo ino yo tengo dos otosan, pero solo una madre ¿naruto se convertirá en mi madre ahora? –sasuke miro a su hijo, para luego mirar a naruto, si ambos se dieron cuenta que talvez a aoi e confunda algo esto, no solo por el hecho de que aún no entendía porque tenía dos padres, y su madre no la recordaba muy bien ya que era chico cuando se había ido, aunque la llamaba, si no fuera por la foto que le hubiera dado ino el no sabría cómo era sakura, naruto se sintió algo culpable no quería que aoi pensara que él quisiera remplazar a su madre
-si tu no quieres eso, no lo seré, pero porque no lo ponemos así tu tendrás dos otosan, una madre, y un otochan ¿Qué te parece? – le dijo naruto, esperando que le gustara esa idea
-¿eso se puede otosan? –sasuke asintió, para luego besar la cabeza de su hijo
-¡te lo dije! ¡Te dije que si se podía!- naruto volteo su rostro y vio a su hija escondida detrás del sillón la tomo en brazos para sentarla en sus piernas
-¿y tú que haces ahí escondida? – le regaño naruto
-es que aoi no me creía que podía tener una madre y un otochan también… ¿entonces al fin viviremos todos juntos?
-sí, volveremos a vivir todos juntos – dijo sasuke abrazando también a su hija
Si su vida no había sido fácil, habían pasado por tantas cosas, se habían lastimado no solo a ellos, sino a mucha gente también, pero se esforzaron, esforzaron para volver a ser felices, volver a ser felices juntos con sus tres hijos, había costado que la confianza volviera a crecer, pero ahora podían decir que eran felices, junto son sus amigos y sus familia podían decir que eran felices.
Nunca hay que dejar que las dudas manejen tus actos porque si no compruebas con tu pareja, si no hablan de sus problemas, y se dejan manipular por los rumores de terceros, solo se perjudicaran, la confianza y comunicación es la mejor forma de mejorar tus inseguridades, si, ahí problemas, en toda pareja los ahí, discusiones, malos entendidos, decisiones, pero hablarlos es la mejor solución, cuando hay problemas, cuando uno cometió un error, no hay que darle la espalda, no ahí que juzgarlo sin tener toda información, y más importante, no hay que negarle una segunda oportunidad, porque las segundas oportunidades pueden ser mejores que las primeras