Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Aquella Fragancia a Manzanas por Matsumoto_Moon

[Reviews - 19]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola! Lamento mucho haberme demorado pero no tenía cabeza para escribir, mi mama esta hospitalizada y eso me tiene muy preocupada todavía, pero bueno. Aqui les traigo un nuevo capitulo.

Entra un nuevo personaje en la historia, en realidad dos pero el segundo ya era obvio que tenía que estar ahí jejeje ustedes me dicen si quieren que se quede o no, porque en la historia va a participar si o si, pero si no les gusta (se que muchas personas casi odian a este personaje) puedo dejar su participacion mas indirecta y que no salga en el fic.

Eso, ahora disfruten :3

Yugi abría los ojos lentamente, todo estaba oscuro, no sabía dónde estaba pero pudo notar que estaba recostado en algo blando que supuso era una cama. Quiso moverse pero no lo logro, sus manos estaban atadas y también sus pies, su corazón comenzó a acelerarse y el miedo tomaba su cuerpo, recordó como aquella persona lo había llevado a la fuerza a un callejón, recordó el cosquilleo por todo su cuerpo y su mente llego a una horrible conclusión. Se negaba a creerlo. De pronto sintió unos pasos acercarse y una puerta abrirse, no pudo seguir pensando y todo su cuerpo se tensó, una luz inundo el lugar y Yugi tuvo que cerrar los ojos por el intenso brillo, al abrirlos pudo ver de pie junto a él a un hombre de unos penetrantes ojos azules.

-Hola Yugi veo que despertaste, déjame ayudarte  - Dijo mientras lo sentaba en la cama – Probablemente estés muy confundido ahora así que voy a explicarte la situación. – Yugi lo miraba atentamente pero con miedo, no dijo nada – Por favor no te asustes, realmente lamento haber sido tan brusco hace un rato pero si no lo hacía no hubieras venido conmigo. Veras Yugi, quizás no lo recuerdes pero tú y yo nos conocimos hace 6 meses en tu escuela, no fue nada especial, yo necesitaba indicaciones y tú me las diste, fueron unos pocos segundos que me hablaste pero desde ese día no he podido sacarte de mi mente Yugi, no he podido olvidarte y no pienso hacerlo tampoco, es por eso que te traje aquí, no pude obtener una solución a mi necesidad de ti, te seguía todos los días e investigue todo sobre ti pero no era suficiente, yo quería hacer las cosas correctamente, hablarte y que me conocieras, pero luego me entere de que te habías puesto de novio con una persona, ese maldito de Atem se había quedado contigo primero y mi corazón no pudo soportarlo Yugi, que estuvieras en los brazos de alguien más era imperdonable – La cara de Yugi era de total confusión, y tenía mucho miedo – Yugi, yo sé que ahora no lo entiendes pero no tuve otra opción. Con el tiempo olvidaras a Atem y te acostumbraras a la idea de estar aquí, conmigo. – El hombre tomo las manos de Yugi y las desato, y también los pies – Te puse esto por si despertabas antes de llegar, eso pudo haber sido peligroso pero no sucedió, ahora que estamos aquí quiero que estés cómodo. ¿Tienes alguna pregunta?

-¿Dónde estoy? – Dijo Yugi temeroso.

-En un sótano, quiero que te quedes aquí un tiempo porque arriba aún no está todo listo.

-Ya no… ¿Ya no me dejaras ir? – Yugi tenía miedo de la respuesta, en el fondo la sabía pero tenía que escucharlo de su captor para estar seguro.

-¿Dejarte ir? ¿No has estado nada y ya quieres irte? Lo lamento mucho Yugi pero no puedes irte, será doloroso al principio pero te acostumbraras, no es tan terrible vivir conmigo, además yo me asegurare de que no te falte nada, quiero que estés bien.

-¿Cuál es tu nombre? – Quizás sea raro interesarse por una persona que te secuestra y te retiene en contra de tu voluntad, sin embargo, Yugi quería que esos ojos azules tuvieran un nombre, si lograba salir de ahí tenía que saber el nombre de la persona que lo rapto para poder decírselo a la policía.

-Oh es cierto, no me he presentado aún. Mi nombre es…

Yugi abrió los ojos y lo primero que vio fue la cara de su amigo, luego de esa pequeña “visión” que tuvo y recordó como se lo llevaron no pudo hacer otra cosa más que llorar. Jonouchi lo llevo a un parque cerca y lo hizo sentarse en el pasto para calmarlo. Terminó durmiendo ahí. El sueño que tuvo fue como una “continuación” de su anterior recuerdo, sin embargo, quedo totalmente intrigado ya que no pudo escuchar el nombre de ese hombre, se despertó antes de poder hacerlo.

-Jonouchi, tuve un sueño y creo que era otro recuerdo.

-¿Y qué sucedía en el sueño?

-Un hombre me decía que tenía que quedarme con él, que me había conocido en la escuela y no se había podido olvidar de mí. Decía que tenía que acostumbrarme y que él se iba a asegurar de que no me faltara nada. – Jonouchi estaba sorprendido, la teoría del secuestro era cierta, y él estaba escuchando lo que Yugi tuvo que vivir. No podía creerlo.

-Era un maldito acosador. ¿Cómo era él Yugi? ¿Pudiste recordar su nombre? ¿Dónde estaban?

-Iba a decirme su nombre cuando desperté, no pude escucharlo, me dijo que estaba en un sótano, dijo que tenía que quedarme ahí porque arriba no estaba listo. Tenía ojos azules, su mirada era muy intimidante.

-Ya veo, no te preocupes Yugi, llegaremos al fondo de esto.

-A lo mejor yo puedo ayudarlos – Jonouchi y Yugi se sobresaltaron, la voz de una mujer fue escuchada justo detrás de ellos.

La mujer tenía el pelo castaño y ojos celestes, llevaba un vestido floreado hasta las rodillas y unos zapatos blancos con un taco semi alto. Se sentó detrás de ellos y los miro con una sonrisa en la cara.

-¿Quién eres tú? – Pregunto Jonouchi de manera desconfiada.

-Mi nombre es Mazaki Anzu, soy periodista.

-¿Periodista? – Repitió Yugi.

-Si, trabajo en el canal 11 actualmente.

-¡Yo te he visto! Si, en las noticias – Dijo Jonouchi - ¿Por qué dices que puedes ayudarnos? Un momento… ¿Ayudarnos? ¿Puedes ver a Yugi? ¿Entonces el realmente está aquí? ¿No es una alucinación mía?  ¡¿Escuchaste eso Yugi?!

-Pero Jonouchi, yo…

-Es verdad – Aunque Yugi no termino su frase Jonouchi pudo entenderla. –Entonces, ¿Qué es lo que quieres decir? – Preguntó mirando a Anzu.

-Verán, yo soy lo que ustedes llamarían una médium.

-¿Medium? – Dijeron ambos.

-Si, una médium. Significa que yo puedo contactarme con entidades de otras dimensiones o realidades. Sé que suena extraño, pero es un don que he tenido desde niña, las personas que han dejado este mundo muchas veces acuden a mí pero también soy yo la que se acerca para ayudarlos, como ahora. Reconocí tu presencia – Dijo mirando a Yugi – y de inmediato supe que necesitarías mi ayuda, por eso me he acercado.

-Personas que… ¿Han dejado este mundo? – Dijo Yugi mirando a la nada, como reflexionando esa posibilidad profundamente.

-Entonces Yugi esta… -Decía Jonouchi con miedo.

-Yugi, ¿verdad? – Dijo Anzu y Yugi asintió – No tienes que asustarte, noté algo extraño en ti, no tienes la misma energía que un espíritu, respóndeme algo para asegurarme, ¿Recuerdas lo que te sucedió? ¿Tienes conocimiento de haber muerto?

-¿Haber muerto? Yo… ¿Estoy muerto? No… Yo no recuerdo nada de eso.

-Entonces Yugi tú no estás muerto.

-¿No lo estoy?

-No Yugi, solo hay una condición humana en la que el alma de una persona se sale de su cuerpo sin haber muerto. Yugi, en algún lugar tu cuerpo está en un profundo sueño, tu estas en coma.

-¿Qué? ¿Yugi está en coma? Explícate mejor por favor – Dijo Jonouchi entrando en desesperación.

-Cuando una persona está en coma si no despierta en un par de semanas nunca es por una razón médica, es porque la persona no quiere despertar. Es ahí cuando el alma se desprende del cuerpo y sale en lo que yo llamo un “periodo de prueba”, deambulan por la tierra viendo como sus seres queridos viven sin ellos ahí, aprovechan ese tiempo para despedirse y para terminar de tomar la decisión de irse o quedarse.

Yugi estaba confundido, ¿Qué fue lo que vivió con ese hombre que ahora no quiere despertar? Si Anzu decía la verdad era él quien estaba tomando la decisión de abandonar todo, aunque en realidad no tenía nada más que perder, su abuelo que era su única familia directa había muerto, Jonouchi había seguido con su vida y lo veía bien, podía seguir viviendo sin él como hasta ahora y probablemente Atem también lo había hecho, quizás hasta había encontrado alguna novia y tenía una familia, el ya no tenía nada más que hacer ahí, si Anzu decía la verdad entonces el decidía irse, sin embargo, había algo que debía hacer. No podía morir sin antes ver a Yami por última vez.

 ----------------------------------------------------

La puerta de la casa de los Mutou fue abierta y un hombre entro en ella, dejo su bolso en el sillón y camino por ella, le pareció extraño sentir una ligera fragancia a manzanas en el aire. Aquello le trajo mucha nostalgia. El hombre fue a la cocina y sacó un incienso, lo encendió y lo llevo a la sala para ponerlo en el Butsudan.

-Ya llegue a casa familia Mutou – Dijo mirando las fotografías ahí – Hola Yugi, hoy ha sido un día algo aburrido, te extraño mucho.

Un par de lágrimas cayeron por las mejillas del hombre pero él las secó rápidamente.

-Hay olor a manzanas en la casa. Ese era el olor que siempre tenías Yugi, a manzanas. Aunque diga que ya estoy bien aquella fragancia no puedo soportarla, es como tenerte aquí pero no poder estar contigo. Aun me duele. Aun te amo Yugi…

Notas finales:

Y eso fue todo!

Nos leemos en el proximo capitulo :3

Cualquier sugerencia, duda o reclamo dejenme un review :3 los respondo todos <3

Saludos! :D


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).