Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Casi perdido. por Shieru Fantomuhaivu

[Reviews - 30]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Holaaaaa~ Supongo que merezco castigo por no haber subido capítulo en dos semanas T^T. Gomeeeen! Pasé por una situación un tanto desagradable, así que no me ha dado tiempo. Pero ya, el cuarto capítulo fue escrito :'D. Espero que disfruten de este. Prometo esforzarme~

=> Ah, por cierto, mientras escribía el capítulo me deleité con un poco de música :3. Me ha gustado mucho escribirlo con ella. Así que recomiendo que escuchen mientras leen, jeje.

He escuchado un OST de Zankyou no Terror <3. Se llama "Von". De verdad, te hace sentir diferente mientras lees. Dejaré el link n-n.

https://www.youtube.com/watch?v=ZxnqSTzq6-w

(No sé cuántas veces repetí el OST, pero es que está genial xD)

Kissuuuuuu~ -Ciel.

Tengo que hacer un ensayo sobre un libro bastante inusual. Supongo que es una oportunidad para hacer algo nuevo, que me refresque y haga que me demuestre a mí mismo que puedo con esta carrera. Estoy en la biblioteca de la escuela con el libro que me asignaron.

-Donde los árboles cantan... -leo el título del libro- Pues bien. A empezar.



No sé cuántas horas han pasado. Cuando leo el tiempo parece detenerse... Es hermoso. Este libro es diferente a los que he leído.

-Bi-blio-ra-ton-cín~

No... Maldición. ¿Por qué narices no puedo tener un momento de paz para mí solo?

-Hola, Liegh -saluda Gemma detrás de mi asiento.

-Já. Ahora soy Leigh... ¿Qué quieres?

-Dan dará una fiesta muy mona el viernes por la noche. Me preguntaba si Demian quisiera ir conmigo.

-Oh, tú sí vas directamente al grano -respondo.

-Sólo dícelo -declara Gemma y se va como si no hubiese hablado conmigo... Maldita zorra.

Jo... Desde hace días esa niñata se la ha pasado rondando por mi departamento como si fuese la cosa más normal del mundo. Es tan odiosa. No ha parado de hablar de Demian con sus molestas y estúpidas (cuando digo estúpidas es porque realmente están huecas de la cabeza -.-) amigas. Todo es superficial para ese tipo de personas.

Qué basura.



-Hola, Leigh -me saluda Demian al ver que he llegado.

-Hola.

Me dirijo a mi habitación. No hemos tenido mucha plática desde hace un par de días, o más. No sé, no me importa.

Creo que cada vez me gusta más este libro. La protagonista es bastante normal, a pesar de que es de carácter fuerte, testaruda, etc. Pero creo que de alguna manera me enamoré del chico del que se enamora la protagonista igual. Pero es normal. Todo el maldito tiempo me pasa esto cuando leo algún libro de romanticismo o juvenil. Con esto sólo puedo pensar que mi vida es una mierda comparado con la trama del libro.

-Mi cabello está más largo -digo.

-Creo que te ves excepcionalmente bien con ese estilo -oigo decir a Demian de repente.

-¡WAAAAAAH! ¡DEMIAN, JODER! -exclamo al ver a Demian parado al lado de mi cama.

-P-parece que te asust-te... -responde conteniendo la risa.

-Maldito... ¿Qué pasa? ¿Por qué entras así sin más?

-No hay razón. Sólo quise hacerlo. Estoy un tanto aburrido y he notado que parece que estás distante.

-¿Distante? Pero si eres tú el que no me ha dirigido palabra -respondo.

-¿Es así? -dice Demian con rostro confuso.

Joder con éste. Y yo pensando que era él el que no quería hablarme.

-Da igual, da igual... -concluyo.

Demian aparta unos libros y sábanas de mi cama para poder sentarse en la esquina cercana a mi almohada.

No hago nada. Honestamente estoy hasta aliviado. Pensé que el ambiente con tensión seguiría. Cada vez Demian se deslizaba un poco a mi cama, para al final quedar un tanto recostado a mi lado.

-¿Cuánto tiempo llevas viviendo aquí? -pregunta Demian de repente.

-¿Ah? Eh... No mucho. Dos años y medio, me parec- no termino la oración al sentir la mano de Demian tocar la mía. ¿Q-Qué diablos?

-Ya veo... -responde serenamente mientras entrelaza nuestras manos y suavemente toca mis nudillos.

-¿D-Demian?

-¿Sí? -pregunta mientras cierra los ojos a mi lado.

Nos quedamos en silencio. ¿Qué debo hacer? Su mano es tan... No diré cálida. Eso es ya muy usado.

Su mano es tan... suave. Sí...

No sé cuánto tiempo llevamos así. Mi mano ha empezado a sudar... Rayos. Necesito desenlazarlas, no quiero que sienta mi sudor.

Está dormido. Bien. Trato de quitar con mucho cuidado mi mano para no despertarlo. Creo que... no quiero. No quiero. Lo que quiero es quedarme así lo que más se pueda.

Pero el sudor TTvTT... De acuerdo, lo haré rápido sin moverme demasiado. Casi...

-No -dice repentinamente Demian haciendo que me de el susto del año-. Unos minutos. Sólo pido eso.

-E-Eh, d-de acuerdo.

Wow, eso sí que me ha sorprendido. No sé qué pensar. Pero..., creo que por el momento no quiero pensar en nada.



-¿Qué hay para el desayuno? -pregunto a Demian mientras bostezo.

-Buenos días -saluda Demian desde la estufa.

Demian y yo nos dormimos hasta el amanecer con las manos entrelazadas. Síp: estoy que muero de la puta vergüenza, pero trato de disimularlo lo mejor que se me permite. Hasta ahora voy bien...

-Sí que me duele el cuello. Tu cama no es la más cómoda, Leigh -dice Demian riendo un poco incómodo.

-...

Gracias, Demian. Has hecho que mi cara se vuelva un tomate rojo por completo.

-Oh -Demian contesta su móvil- Gemma, hola.

-Tsk.

-Ya veo... Bien, haré lo posible. Te agradezco mucho la invitación -dice antes de colgar.

-¿Qué pasa? -pregunto.

-Al parecer un amigo de Gemma organizará una reunión en su casa el viernes por la noche -responde Demian.

-No, no creo que sea una reunión.

-Bueno, es es lo de menos importancia. Estoy pensando que nos vendría bien salir. Mucho más a ti, Leigh.

-No, gracias.

Salto del banco en donde estaba sentado y entro a mi habitación cerrando la puerta.



Viernes. No he preguntado a Demian sobre su asistencia a la fiesta de esos. Pero no tengo tiempo para pensar en ello. Hoy entrego mi ensayo, y estoy orgulloso de decir que me ha quedado excelente. Terminé de leer el libro el miércoles. Me gustó tanto que lo he puesto en mi estante de "los que más molan por ahora". Ah, qué felicidad.

Me encamino hacia la biblioteca cuando distingo a Demian a lo lejos hablando con un para de chicas.

-¿Demian? -le hablo.

-Ah, Leigh -responde Demian encaminándose hacia donde yo estoy.

-¿Qué? ¿Otra vez estás aburrido? -pregunto burlonamente.

-No, he venido a ver a Gemma -dice con una pequeña sonrisa.

-Oh. Ya veo.

-Justamente estaba preguntando a esas señoritas de por allá si la habían visto. Al parecer está por el área de comida.

-Bueno, suerte con encontrarle -digo en modo de despedida dirigiéndome hacia la entrada de la biblioteca.

-Oh, Leigh. ¿No te importaría ayudarme a buscarla? Honestamente creo que puedo extraviarme aquí.

-Agh... Eres muy molesto, ¿lo sabes? -exclamo en voz baja mientras doy la vuelta y camino junto a Demian.

-Gracias -responde con una pequeña sonrisa acariciando mi cabeza levemente.

Gemma sí estaba en el área de comida. Estoy sentado con los idiotas que me han molestado durante un año, mientras Demian y Gemma conversan sobre la ridícula fiesta.

-Ah, el ratoncito también puede ir si gustas, Demian -señala Gemma mirando fijamente a Demian con cara de tonta.

-No. Te lo agradezco, gremlin -respondo.

-¡¿Grem-Qué?!

-Leigh, ¿no irás? -pregunta un desconcertado Demian.

-Te lo había dicho ya.

-No te preocupes, libritos, no harás falta -suelta Dan, el idiota.

-Lo sé -respondo con una sonrisa seria (wut?) y sarcástica.



-Leigh, no iré si tú no lo haces -repite Demian por décima vez mientras entramos al departamento.

-No quiero ir. Demian, no sabes cuánto me desagradan esas personas. Y las fiestas y yo no nos llevamos de maravilla.

-Hoy es tu día libre. Creo que queda perfecto para que salgas a relajarte.

-Por eso mismo me quedaré aquí. Hay un anime, un tal K Project, que me encantaría comenzar a ver.

-Leigh...

-Puedes ir tú solo, ya lo sabes. Tu noviecita está anciosa por verte -digo empezando a estar irritante.

Demian se queda callado unos segundos. Da media vuelta y sale del departamento sin decir palabra.

-Puedes irte... Me da igual. Idiota.



-Ese idiota... Tendrá que hacerme mil desayunos deliciosos por esto -me quejo mientras camino hacia la casa de Dan. Afortunada o desafortunadamente tenía la dirección en la barra de la cocina.

Finalmente llego. Joder, pero qué ambiente más asqueroso... Hay borrachos por doquier y son las 22:34 hrs.

Bien. Estaré una o dos horas, acompañando al idiota, y después me largo. Con él, claro. Aunque, primero tengo que encontrarlo. Hay mucha gente.

Creo que llevo media hora buscándole. Estoy realmente incómodo. No soporto este tipo de ambiente, desde más joven que no soy de los que salen de fiesta. Y no es como si me invitaran a muchas... O alguna.

Me sentaré un rato. No creo que Demian esté muy lejos.


Creo que veinte minutos he estado sentado esperando ver a Demian por aquí. Maaaaaaaaaaldición. Que lo mato. En serio.

Me levanto de mi asiento y sigo buscando. Subo las escaleras y, sin importame, abro las habitaciones de la casa de Dan.

No, no está. Maldito... No pensé en la posibilidad de que en realidad no viniera. Puede que sólo diese una vuelta por ahí mientras que yo vengo a buscarle como un perro... Lo mato.

-¡Hola, Leighy! -saluda alguien a mi espalda.

-Oh, Dave, ¿qué cojones haces aquí? -saludo a mi despreocupado amigo.

-Pasándola bien -responde borracho.

-¿Y Su?

-¿Su? No lo sé. La he llamado pero creo que se molestó conmigo... Otra vez.

-Sí, es Su -respondo con risa.

Durante la corta plática con Dave me parece ver a Demian en un sofá sentado con Gemma. Le digo un ligero "adiós" a Dave, el cual a duras penas lo nota, y me dispongo a ir hacia donde distinguí a Demian.

Es él. Gemma... Esa zorra está sobre sus piernas muy cómodamente...

Está besando a Demian muy cómodamente.

E-Esta situación es molesta. Supongo que sólo quería saber si él se encontraba aquí. Y lo está.

Doy un último vistazo antes de irme. Los ojos de Demian y los míos se encuentran fugazmente. Mierda, tengo que irme rápido.

-¡LEIGH!

Mierda. Mierda. Mierda.

Volteo un poco veo a Demian encaminándose entre la gente hacia donde yo estoy. Subo las escaleras rápidamente. Enseguida entro al baño y cierro la puerta. Espero que no haya alcanzado a verme entrar aquí.

Pasan un par de minutos y no escucho nada más que música y cotilleo. Aquí arriba no hay muchas personas. Esperaré unos minutos más antes de salir de aquí.

-J-Joder -me quejo mientras me deslizo por la pared hasta sentarme en el suelo.

JODER. Unas dos o tres lágrimas caen a mi rostro. No llores, Leigh. En realidad no había nada entre ustedes. Y no pasó mucho como para ilusionarte. No te entiendo, Leigh.

Tocan la puerta suavemente. Me incorporo.

-¿Leigh? -escucho a Demian al otro lado. Sólo guardo silencio.

No pienso abrir. Seguramente está borracho...

-Leigh, abre. No sé por qué estás aquí, pero me alegra -no respondo-. Supongo que has venido por mí. Eso me alegra más.

-¡V-Vete! -exclamo.

-Leigh... -susurra- Sí eres tú. Estaba preocupado.

-Tsk.

Abro la puerta de golpe y veo a un Demian sonrojado y recargado en el marco de puerta.

-Eres un bastardo borracho -le digo con una risa irónica.

-Lo sé -responde en el mismo tono mientras se acerca a mí y cierra la puerta.

-¿Qué quieres?

-A Leigh...

-¿Q-Qu-Qué? -pregunto asombrado mientras retrocedo al mismo tiempo que él se acerca a mí.

-Oye, Leigh... ¿Por qué haces eso? Te sonrojas tan fácilmente. Haces que pierda mis cabales -replica mientras acerca su rostro al mío.

-Dem-mian, estás b-borracho.

-No... No tanto.

Acaricia mi mano y sube hacia mi brazo para llegar a mi cuello. De ahí sólo sostiene mi cabeza y deja su rostro a pocos centímetros del mío.

-Leigh... Lamento haberme ido así del departamento -susurra haciendo que me estremezca con su aliento pegando a mi rostro... Es gracioso, ha masticado goma sabor menta antes. Pero ese antes no soy yo.

-Me alegro que lo lamentes.

-Oye, tus ojos son grandes... Me gustan.

-¿A-Ah? Pues... Gr-gracias. Tus ojos son... S-Son hermosos, Demian -termino diciendo avergonzado a muerte.

-Los ojos no son nada si el que ve, mira y observa no sabe apreciar lo importante de la vida y las situaciones que se le prestenten.

-Gracias, señor filósofo -respondo con una sonrisa tímida e incómoda.

Demian roza mis labios con la yema de sus dedos. Mi pulso se agita con cada mirada que atrapo de él.

-Det-tente. ¿Qué pasa c-con Gemma?

-¿Gemma?

-S-Sí, idiota. La besabas hace un rato... ¿Por qué? -pregunto molesto.

-No lo sé. No estoy en mis cinco sentidos en este momento... Pero, aun sobrio, haría exactamente lo mismo contigo -dice mirándome fijamente a los ojos.

-Demian... Creo que lo me-mejor sería que nos f-fuéramos de aquí, ¿n-no lo crees? -pregunto evitando mirar sus ojos.

Demian no responde. Está muy ensimismado tocando mi rostro.

-D-Demia-

Lentamente acerca nuestros rostros a tal punto en que nuestros labios se rozan entre sí. Esto es demasiado. Trato de luchar contra su agarre, pero simplemente no quiero. Quizá podría, pero no es como si fuera a voluntad.

-Sólo... Déjame -susurra Demian a mis labios.

Hago caso y me relajo. Nuestros labios se unen.

Demian abre la boca un poco y comienza a besarme lentamente. Yo sólo lo sigo como puedo.

Paso mis dedos por su cabello. Él sigue tomando mi rostro con sus manos. El beso se vuelve cada vez más rápido.

Demian mete ligeramente su lengua a mi boca, provocando que mi lengua haga lo mismo.

Esta vez él pasa sus dedos a través de mi cabello. Nuestras lenguas se "acarician" mutuamente.

Pueden haber pasado minutos u horas. Honestamente no lo sentiría. Nos separamos un poco para poder recobrar el aliento.

Él me mira fijamente por unos segundos antes de volverme a besar ligeramente en los labios.

-Labios... -dice Demian en un tenue susurro.

Notas finales:

Recomiendo muuuucho el libro que mi Leighy leía. Es de Laura Gallego, "Donde los Árboles Cantan".

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).