Estoy despierto. No quiero abrir mis ojos. Ayer creo que caminé hasta que mis pies padecieron y la noche cayó lentamente. Ni siquiera me molesté en echar vistazo a la hora. Sólo llegué a mi piso y me tiré a la cama... Supongo que Demian me ha quitado los zapatos y cerró mi puerta. Idiota. Que entienda que no quiero nada de él.
Abro mis ojos lentamente mientras ellos se van acostumbrando a la iluminación del sol desde mi ventana.
-Mmh... -resongo mientras estiro mi cuerpo- Assssssco de noche -bostezo.
Me percato de una mirada fija desde el lado izquierdo de mi habitación.
-¡¿D-Demian?! -me sorprendo al verlo recargado en mi puerta clavando su mirada en mí.
No dice nada.
-¿Po-Por qué estás aquí? -pregunto nervioso pero no recibo respuesta alguna- ¿Acaso has estado parado allí por un tiempo?
No dice nada. Se limita a mirar al suelo, dar media vuelta y salir.
-¿Huh? De acuerdo... Idiota.
Salgo de mi habitación y me doy cuenta de que Demian no está en la cocina. Tampoco en su habitación, su puerta está abierta... Oh, bueno. Mejor empiezo a desayunar. Hoy sólo iré una hora a la biblioteca y quizá pasaré a saludar a Su.
<<Demian>>
No pude decir nada. ¿Qué se supone que se le dice a alguien cuando recién se levanta y se da cuenta que eres una clase de acosador personal?
-Tsk -no puedo seguir con esto. ¿Cuántas han sido las veces que entro en su habitación a escondidas sólo para observarlo dormir?
Nunca pretendo despertarlo. Y ahora estoy en la azotea sentado sobre una caja de madera, solo y con la vergüenza abrumándome.
Es que no pude ser más idiota. Ayer no quise decir nada de eso. ¿Qué me pasa? Yo no sé de estas cosas, joder...
-Oh, parece que se dirige a la biblioteca ya -lo observo caminar a lo lejos.
No sé cómo compensar lo de ayer... ¿Debería limpiar a fondo el departamento? Tal vez si le preparo una buena cena. Sonrío mientras pienso lo bien que quedaría el departamento de Leigh siendo realmente decente y su habitación... habitable.
Bien. Haré eso. Después se me ocurrirán más opciones. Estoy bastante entusiasmado... Sólo espero que llegue bien a la escuela... ¿Debería llamarle? Tal vez no sea muy buena idea. No creo que él quiera.
Ayer salí a buscarle inmediatamente después de que él se fuera. Al final lo vi dormido en su cama.
De acuerdo. Envío un mensaje a Leigh pidiendo que llegue temprano después de sus deberes. Sé que le gustan las Vatrushkas (empanadas redondas provenientes de Rusia... Leigh es mitad ruso por parte de su padre). Necesitaré conseguir distintos ingredien...
Mi móvil suena repentinamente mientras me levanto.
-Oh... -contesto- ¿Diga? Oh, buen día, Gemma... No, realmente no hago nada ahora, pero pensab-
"Ah, ya... Pero, verás, en unos momentos tengo que hacer algo sumamente importante para m-
"Ya veo... Bien, estaré allí en cuestión de minutos, no te preocupes. Sólo no se muevan del lugar. Bien. Adiós.
Al parecer la señorita Gemma ha sido algo torpe y chocó su auto con un poste... Suspiro mientras me dirijo hacia donde Gemma y su amiga se encuentran...
Parece que la compensación de Leigh tendrá que esperar.
<<Leigh>>
Acomodo libros mientras tarareo canciones al azar. No necesito nada más en este momento. Mi móvil suena.
-¿Demian me ha mandado un mensaje? -reviso sorprendido el contenido mientras me inmuto- O-Oh...
B-Bueno, lo que qui-quiera ese idiota s-seguramente no es muy importante... N-Ni modo. Tendré que ir. Sonrío ligeramente mientras acomodo más rápido los libros.
-Oye, esa canción ha estado un tanto buena... ¿Por qué has parado de tararear? -volteo y distingo un rostro familiar... Ah, qué suerte, es ese tal Andrew.
-Ah, eres tú -replico con un gesto de seriedad.
-¿Cómo está tu muñeca?
-No muy bien, gracias a ti... Ya no duele, descuida.
-Me alegro -responde sonriente.
Bajo las escaleras cuidadosamente mientras trato de no fijarme mucho en él. Me dispongo a proseguir mi camino cuando Andrew me toma del brazo.
-Oye, ¿quisieras acompañarme por un café? Muero de hambre y no traigo mucho dinero conmigo... -declara con una sonrisa avergonzada.
-¿Qué no puedes pedir a alguien más eso?
-No -responde aún sonriendo y abrazándome con un brazo mientras prácticamente me arrastra a la salida de la biblioteca.
Llegamos a una cafetería pequeña que está por la zona. Me siento mientras espero al botador con nuestros cafés y donas. Después de todo terminé invitándole de comer yo...
-Listo -se sienta y me pasa mi café y dona-. He pedido café con leche y azúcar para ti. Asumí que te gusta.
-G-Gracias... Sí -bebo un sorbo del café. Está sorpresivamente bueno. Aunque me gusta con más azúcar.
Nos quedamos callados un momento mientras observamos por la ventana a la gente pasar.
-Mi café es negro -menciona mientras, al mirarlo, me doy cuenta que Andrew "el bota libros" no trae las gafas de hace un rato en la biblioteca.
-Tus gafas... -siseo.
-¿Ah? -voltea sorprendido- ¿Mis gafas? Ah... No las uso cuando no leo. Siento que no me quedan del todo bien, así que me limito a usarlas más que nada en la biblioteca, ya que no hay mucha gente allí. Menos los fines de semana -sonríe de oreja a oreja.
-Y-Ya veo...
Pasamos una hora aproximadamente en aquel café hablando de lo que sea... Tiene un perro. Caminamos por la acera hablando de libros que conocemos y los que más nos gustan.
-Aunque también me gustan los videojuegos...
-¿Es así? ¿Cuáles?
-Bueno, dado que si te digo todos no terminaría... Final Fantasy y The Legend of Zelda son mis preferidos -dice sonriendo mientras a mí me da un ataque...
-Joder... No he jugado mucho de Final, pero Z-Zelda es mi vida.
-¡No juegues! -ríe y me abraza con un sólo brazo- Oye, deberíamos pasar por mi casa un rato a jugar, ¿te parece buena idea? Podríamos jugar un multijugador... Tengo Mortal Kombat X -sisea mientras me ve con ojos "seductores".
-Eh... No lo sé.
-Vamos, Leighy, que será divertido.
Supongo que no me mata estár con un tonto por un rato jugando... Accedo.
Su casa está mucho más limpia de lo que imaginé... Quiero decir, mi habitación es un desastre a comparación con esto... y con cualquier otra cosa.
-¿Vives solo?
-Síp. ¿Quieres algo de beber?
-No.
Nos dirigimos a su habitación. Pepara la consola mientras examino mi alrededor.
-Oh... ¡OHHH! ¿Así que te gusta el manga? -digo señalando un tomo de Owari no Seraph (*w*).
-Ah, sí. Me gusta coleccionar todos los que pueda. No tengo muchos, pero al menos los que tengo los cuido -declara mirando en mi dirección-. Entonces... ¿MikaYuu? -pregunta mirando seductoramente.
-¡¿Q-Qué?! -¿YAOI? ¿S-SHIPPING? ¿Es en serio?
-Nada -se apresura a responder-. Y, bueno, como verás tengo muchos tomos de muchos autores.
-E-Eh... Bueno, para ser un tonto botador-de-libros, salta-desayunos, no está nada mal... -respondo sonriendo.
-O-Oh... Sí -dice curiosamente sorprendido y da media vuelta rápidamente.
Jugamos durante no sé cuánto... De alguna manera este chico no me agrada del todo por su actitud, pero eso no quiere decir que no aprecie buenos videojuegos y mangas. No soy tan tonto.
Estoy sentado en su mesa mientras él busca algo para comer.
-Tengo pizza y pastel... ¿Qué prefieres?
-Pastel. Y de preferencia que sea una rebanada grande -respondo sin pensar dos veces.
-Bien, bien...
Me pasa el plato mientras él come pizza.
-Y, ¿dónde está tu perro? -pregunto con pastel en la boca.
-¿Meirin? Es hembra... Está en el patio. La traeré si quieres.
-Me da lo mismo. Si quieres tráela -me gustan los perros en realidad.
Andrew se levanta, y, al cabo de segundos, regresa con una pequeña perra color blanco, negro y café bronce. Rio al verla.
-¿Qué pasa? -pregunta confuso.
-E-Es que tiene los ojos graciosos...
-Ah... Sí -sonríe-. Este tipo de perros son así. Se llaman Shih Tzu.
Rio.
-Oye, no te rías. Vas a herir sus sentimientos -replica meintras sigo riendo a mandíbula suelta.
-¿Y qué pasa con su quijada? -sigo riendo.
-Así es ella, ya no te burles -declara bajando a la perrita y acercándose a mí.
-Es que no puedo, es muy gracio-
Paro de reir, hablar e inclusive de respirar al darme cuenta de lo que ocurre.
Andrew me besa los labios quedamente mientras me perfora con su mirada.
-Te dije que dejaras de reir -dice después de separarse de mis labios.
Enmudo. Sólo me puedo quedar tieso en mi lugar con mi rostro rojo y los ojos muy abiertos. Andrew lo nota y se acerca de nuevo.
-¿Mmh? Parece que de verdad te tomé por sorpresa -ríe y después enseria-. ¿Debería hacerlo de nuevo?
No espera respuesta. Me besa de nuevo pero, esta vez más rudamente mientras mete una mano debajo de mi camiseta.
-¿De verdad te quedarás quieto? -pregunta sonriente mientras me vuelve a besar y toca lentamente uno de mis pezones... ¿Qué mierda hago?
Me separo de él rápidamente mientras Andrew sigue con su sonrisa.
-Disculpa -dice.
-E-Eh... Sí.
-No vuelvas a reír así... No pude resistir.
-Ya... Mi culpa -siseo nervioso mientras me levanto de mi asiento-. Y-Ya me voy, Andrew...
-Andy. Todos los que considero amigos me llaman Andy.
-A-Andy. Nos vemos.
-Espero que sí -declara mientras me dirijo a la salida.
Camino rápidamente mientras froto mis labios con violencia.
-Joooooder, joder, joder, joder...
Entro al departamento para encontrármelo vacío.
-¿Demian?
Nada. Tal vez está en la tienda o algo... Llamaré a su móvil.
Nada. Entonces, ¿para qué me manda tal mensaje si no va a estar? Bueno, no importa. Ahora que lo pienso, no fui a saludar a Su... Agh.
Pasan un par de horas. Estoy en mi habitación escuchándo música cuando recibo una llamada de Demian. Bien.
-¿Demian?
-Ah, Leigh, hola. Disculpa que no haya podido llegar aún... Tengo unos asuntos pendientes que-
-Ohhh, Demian, ¿estás hablando con el tragalibros? Hola~-oigo a Gemma desde el teléfono.
-¿D-Demian?
-Lo siento, me ha pedido un favor y...
-No. Me da lo mismo. En realidad no estoy en casa, así que puedes tardar lo que quieras con quien quieras -espeto.
-¿No estás? ¿Y dónde estás?
-En casa de mi amigo Andy.
-¿Andy? No recuerdo haber escuchado antes su nombre...
-Ah, es porque lo acabo de conocer -expreso con malhumor-. Ayer tuvo que cargarme a enfermería por una lesión pequeña que me hice -mentira-. Y hoy me la he pasado en su casa haciendo muchas cosas -casi mentira.
-¿Lesión? Leigh, ¿estás bien? -hace una pausa-. ¿Qué muchas cosas?
-Eso no te concierne... Además, ayer, si hubieses sido un poco atento, te darías cuenta de mis vendajes... Pero eso ya da igual, ¿no, Demian?
-Leig-
-Regresaré en la noche, así que disfruta tu paseo.
-No es un pa-
-Te dejo. Que estoy muy ocupado con Andy.
Cuelgo la llamada... Agh, qué tonto me estoy comportando.
Bueno... Ahora a buscar qué hacer fuera hasta que se haga completamente de noche para salvar la historia que me he inventado...