Capítulo 14.
De tal palo, tal astilla.
Detuvo el auto cuando dio luz roja. Miró a su lado a Seungri. Venía durmiendo desde que subió en el auto. Se había levantado muy temprano por la mañana para ir a clases en la universidad, y cuando lo pasó a recoger venía cansado. Se subió y luego de hablar cinco minutos sin parar ni tomar tiempo para respirar, cayó dormido. No podía evitar reírse al pensar en el menor. Es que había estado hablando cinco minutos de corrido, ni siquiera pudo decirle hola porque parecía que explotaba información. Nunca se cansaría de Seungri, ni se sus historias locas que tenía. Estacionó el auto miró a su lado, él seguía con sus ojos cerrados. Quizás, él debía entrar y dejarle durmiendo hasta que despertara y bajara por sí solo, realmente no quería molestarlo. Además, él sólo venía aquí a hablar con Ji Yong. Ya estaba cansado de ignorar sus llamadas todo el día y de los miles de mensajes de voz de su amigo mientras decía lo siento muchas veces mientras lloraba. Ya era demasiado castigo para Ji. Así que venía a buscarlo donde sabía que debía estar, en YG. En su estudio seguramente.
Miró unos minutos a Seungri y se agachó un poco. Acarició su mejilla levemente. Se recargó levemente y le besó. Siempre los labios de Seungri eran tan cálidos. Sonrió y entonces se separó un poco para bajarse, pero sintió la mano del menor tomar su cabeza y tirar de él. Seungri le atrapó en otro beso. Young Bae no pudo evitar sonreír al sentirlo y le respondió de igual manera. Luego de unos minutos se separaron.
-¿Me despierta de esta forma y me quieres dejar como si nada? –Seungri se refregó los ojos y le miró. –Que malo eres.
-No quería molestar.
-Tú nunca me molestas, Bae –le guiñó un ojo. El moreno se rió y bajó del auto rápidamente y lo rodeó hasta llegar a la puerta del menor y abrirla para él. -¡Tan atento!
Bajó rápidamente y se colgó al cuello del mayor mientras acariciaba su cabello. Le dio un corto beso y luego tomó su mano mientras cerraba la puerta y se disponía a caminar con él dentro del edificio. Entraron tranquilamente. Después de unos momentos Seungri se soltó y se quedó conversando con algunas personas. Young Bae simplemente sonrió mientras seguía su camino al estudio de su amigo.
Miró la puerta delante de él unos minutos y luego entró sin más. Ji Yong estaba con su rostro recostado en el escritorio con los ojos cerrados, se veía terrible. Sonrió y cerró la puerta mientras carraspeaba un poco. Ji Yong abrió sus ojos lentamente y le miró, luego volvió a recostar su rostro. Unos minutos de silencio pasaron y entonces Ji saltó de su silla y le miró con sus ojos muy abiertos.
-¡Young Bae! –Ji parecía querer ponerse a llorar. -¡Casi un mes de que no he sabido nada de ti! ¡¿Sabes lo preocupado que estaba?! ¡No me hagas esto de nuevo! Por favor, Bae… yo… perdón… de verdad que-
-Ya está bien, Ji… -Bae le miró unos momentos y abrió sus brazos. –Ven aquí, Bro.
Ji Yong se colgó como loco al moreno y se lanzó a llorar nuevamente. Este mes había sido el más horrible. No había día que no pensara en su mejor amigo y que lo llamara, pero él no contestaba a sus llamadas, ni a sus mensajes. Había intentado ir a la casa de su madre, pero Seung Hyun le aseguró que no estaría ahí. Él se enojó con el mayor porque no quiso decirle, y fue cuando él le dijo que debía darle tiempo, y lo hizo.
-Ji Yong –Young Bae lo separó luego de unos minutos. –Tú eres como mi hermano, no puedo odiarte ni estar enojado contigo toda la vida… pero por favor, no vuelvas a mentirme ni hacerme algo así de nuevo, realmente me dolió.
-Lo sé, y lo siento mucho, de verdad –El moreno sonrió. –No volveré a hacerlo, no hay día que no me arrepienta de haberlo hecho.
-Está bien.
Ji Yong sonrió y volvió a abrazarlo. En ese momento entraron Daesung y TOP riéndose. Se separaron unos momentos.
-¿Vienen juntos? –Ji Yong los miró.
-Nos encontramos aquí afuera –Seung Hyun aseguró.
-¡Hyung! –Daesung abrazó al moreno. -¡Qué bueno que se arreglaran!
-Es bueno esto, por fin Ji dejará de andar llorando por la casa y me pondrá atención –Seung Hyun suspiró y Ji le dio un golpe en el hombro.
-Así que están juntos, ¿eh? –Young Bae asintió mientras elevaba las cejas.
-Pues… sí –Ji Yong sonrió.
-Gracias a mí estás con Hyung.
-¡Ya te pedí perdón!
-¡Es bueno verlos así de nuevo! –Daesung sonreía gigantemente.
-Entonces, ¿vuelves hoy mismo a casa? –Ji Yong sonrió grandemente.
-¡NADA DE ESOOOOOOOO!
Seungri entró escandalosamente mientras se reía. Típico en él. Ji Yong le miró con el ceño fruncido. Seungri le abrazó fuertemente apenas lo vio. Seung Hyun rodó los ojos.
-¡Seungri! –Daesung se colgó a él. Por unos momentos Young Bae se puso serio mientras observaba, como si estuviera a atento a todo lo que estaba sucediendo en esos momentos.
-¡Dae, te extrañé! –Seungri se abrazó a su amigo también. Bae seguía observando, no le estaba gustando mucho esto.
-¿Y yo? ¿Ya no me quieres sólo porque cometí un error? ¡Soy tu Hyung favorito! –Ji Yong parecía enojado.
-Ay Hyung, qué envidioso –Seungri le miró y se acercó para abrazarlo, pero Seung Hyun se interpuso.
-Ya entendimos que se quieren –explicó.
-¡Oye! –Ji Yong le dio un golpe. -¡Es mi Maknae!
-¡Yo puedo ser tu Maknae!
-Ay, por Dios –Daesung se echó a reír.
-Pero ya bueno –Ji Yong miró a Bae de nuevo. –Hay que ir a celebrar y luego buscar tus cosas para que vayamos a casa.
-¡No, no, no, Ji Yong Hyung! –Seungri le apuntó con un dedo. -¡Tú lo perdiste, yo lo gané!
-¿Ah? ¿De qué hablas? –Ji Yong frunció el ceño.
-Que no lo voy a dejar irse con ustedes, ya es completamente mío. I’m sorry.
-Seungri, mira,… -Ji Yong miró a Bae al darse cuenta y luego a Seungri, y luego de nuevo al moreno y así por casi dos minutos consecutivos. –No me digan que… ¿Bae, te estás quedando con el Maknae?
-Sí –el moreno asintió.
-Y no sólo eso. Dormimos juntos –Seungri asintió. –Supéralo, Hyung.
El moreno se puso morado. Daesung se echó a reír. Ji Yong seguía mirándolos y entonces se acercó al moreno.
-Entonces, realmente… realmente, ¿te gusta Ri? –Cuando se presentaba esa opción Ji Yong la descartaba porque no creía que fuera cierto.
-Ji Yong, con Seungri estamos saliendo.
-¡¿QUÉ?! –Seungri asintió rápidamente.
-¡Aleluya! –Daesung sonrió grandemente y abrazó al menor. -¡Hasta que lo agarraste!
-Te dije que lo haría –Seungri sonrió satisfecho.
-Seungri –Ji Yong le miró serio. -¿Tú quieres a Bae, cierto?
-¿Qué pregunta es esa?
-Sólo quiero asegurarme de que no lo hagas sufrir.
-Ay, Hyung, quién habla. Yo lo le di mi amor cuando su mejor amigo lo traicionó.
-¡Sí serás maldito! –Ji Yong le iba a dar un golpe en el hombro, pero el moreno le paro.
-Ji, déjalo.
-Claro, ahora todo es Seungri, todo gira en torno a él. –Ji Yong retrocedió. -¡¿Nos vas a dejar por irte con él?! ¡¿Te quedarás con él?! ¡¿En serio?!
-Anda, pero que Hyung más celoso –Seungri se cruzó de brazos. –Tiene novio, casa, casi 29 años y no quiere dejar ser a su mejor amigo. Así no se puede.
-¡Seungri! –Daesung le tapó la boca. Cuando Ji se enojaba era otra cosa.
-¡Respóndeme!
El moreno miró al menor, este se soltó de Daesung.
-¡Respóndele!
-Yo… Esto…
-¡Young Bae tiene cosas que hacer! –Seung Hyun habló de repente. –Debe arreglar cosas sobre su disco en solitario ahora mismo, así que debe irse.
-Sí –el moreno asintió. –Bueno, Ji, nos vemos más tarde.
Young Bae escapó antes de más exigencias de los dos. Seungri salió corriendo tras él hasta el estacionamiento. El moreno subió rápidamente, pero antes de poder escapar el menor subió y le miró.
-¿Vas a volver a casa?
-Ah… Yo…
-Young Bae, ¿me vas a dejar solito en el departamento? –El menor hizo un puchero. –Y encima si te vas, Homie también, entonces quedaré tirado solo…
-Seungri…
-¿Quieres irte?
-Ri…
-Dímelo –El menor se cruzó de brazos en su asiento. -¿Es porque te abrazo mucho por las noches? ¿O porque no te dejo descansar? ¿Es porque no sé cocinar mucho? ¿O es porque no te dejo dormir? ¿O es porque hablo demasiado?
-Seungri-
-Pero, dime, Bae. Puedo cambiarlo, en serio.
-¡Seungri, cállate! –El moreno se rió.
-Vale, me callo, me callo.
-No me quiero ir.
El menor le miró con sus ojos brillando.
-Pero Ji Yong no dejará de molestarme.
-Pero yo soy importante.
-Lo eres –el moreno tomó su mentón y le besó levemente en los labios. –Y por eso pensaré en algo para que Ji deje de molestarme con eso.
-Sólo dile que no lo quieres.
-¿Estás loco? ¿Quieres que llore otros diez meses?
-Está bien, está bien –Seungri hizo un puchero. –Pero dame otro beso.
El moreno sonrió y acarició su mejilla para luego besarle. Seungri respondió inmediatamente. Se separaron unos minutos y el moreno puso en marcha el auto nuevamente.
Entraron en el departamento rápidamente. Seungri abrió la puerta como pudo. Había atacado a besos a Young Bae en el ascensor y ahora iba deseoso de hacer de todo con él. El moreno le abrazaba fuertemente desde la cintura para que no cayera. Seungri abrió y entraron entre tropezones, sin separar sus bocas ni un solo segundo. Young Bae cerró la puerta y dejó al menor contra esta mientras seguían en su beso apasionado. Se giraron intentando caminar a la habitación.
-Bae…
-Uhm…
-¡Qué bonito, Lee Seung Hyun!
Se separaron de un salto de susto al sentir otra voz.
-¡Oh, mierda! –Seungri dio un salto y luego miró al frente y rápidamente se acomodó la ropa. -¡Mamá!
-Cuida esa boca –Ella le reprendió.
Young Bae volvió a ponerse morado por segunda vez en el día. Esa justamente no era la manera en que quería conocer a la madre de Seungri. Ella le miró de pies a cabeza con un rostro de pocos amigos.
-¿Y bien? –Ella alzó sus cejas.
-Mamá… -Seungri se acercó lentamente. –Él es Dong Young Bae. Bae, ella es mi madre.
-Un gusto en conocerle –Bae le dio la mano e hizo una reverencia. Ella carraspeó.
-No sé si es un gusto.
-¡Mamá!
-Soy sincera –ella le dio un golpe al menor.
-Sé que probablemente tiene una horrible primera impresión de mí, pero prometo hacer que cambie de opinión –el moreno sonrió. Ella simplemente le miró.
-Siéntense –ambos se sentaron en el sofá. Ella se sentó en el individual.
-Dime, ¿qué estudias? –Seungri rodó los ojos.
-Yo terminé mis estudios de Arte y Música.
-¿Arte y música? –Ella frunció el ceño. –Podría haber sido doctor, cirujano, arquitecto o…
-¡Mamá!
-Sí, Arte y música –Bae sonrió mirándola.
-Un momento, pero si ya terminaste tus estudios… ¿cuántos años tienes?
-28.
-¿28? –Ella frunció el ceño. -¡Seungri apenas tiene 25!
-Mamá, soy grande.
-¿Sabes eso?
-Lo sé –Bae asintió.
-Aigooooo
-¿No estás exagerando? –Seungri le miró, pero ella le reprendió con la mirada.
-¿Y qué se supone que harás con eso que estudiaste?
-Pues, cantar y bailar.
-Oh, por Dios –ella negó con la cabeza.
-Mamá, ¡Young Bae es cantante! Y muy famoso, y ha ganado muchos premios, es conocido.
-¿Es conocido? –Ella miró a su hijo.
-Sí, es uno de los favoritos del tío Yang.
-¿Está en YG? –Ella abrió mucho sus ojos.
-Sí, es vocalista principal de BIGBANG.
-¡Aigoo! –Ella se puso de pie y se sentó entre los dos y le sonrió al moreno. -¿Por qué no me dijiste antes? –Ella regaño a Ri y luego miró al moreno. –Siento mi comportamiento.
Young Bae quiso reír, Seungri era igual a su madre. Exactamente igual. Él miró a la señora y le sonrió.
-Espero poder invitarle a cenar uno de estos días.
-Omo –ella sonrió grandemente. -¡Tan lindo!
Seungri rodó los ojos.
-¡Tú deja de descansar, ve a buscar algo de beber para él! –Seungri se paró disgustado mientras iba a buscar lo que su mamá pedía.
La madre de Seungri comenzó a hablar, y una vez que lo hizo no se detuvo más. Ahora entendía de dónde sacaba Seungri tanta facilidad a la hora de conversar. Ella en diez minutos habló de Seungri y de cuán desordenado y loco era cuando niño. Habló de ella y lo hermosa que era cuando joven y que todavía era. Y luego habló de lo mucho que le gustaba que él fuera novio de Seungri. Sí que había sido fácil hacerla cambiar de opinión. Quizás, cuando su madre conociera a la mamá de Seungri se llevaran tan bien como Bae y Ri. Su madre era como él, así que no tendría problemas en escuchar todo el tiempo del mundo a la señora Lee.
Luego de unas horas que se hicieron eternas para Seungri su madre suspiro.
-¡Tan lindo!
-Mamá, se lo has dicho más de cinco veces. –Seungri suspiró. Ahora hablaban más ellos dos que él. Se sentía desplazado por su madre.
-¡Déjame! –Ella le regañó nuevamente. –Ya se está haciendo tarde, supongo que debería irme ya.
-¡Oh, yes! –Seungri susurró.
-Seungri, no vayas a pervertir a Young Bae.
-¿Qué? ¿Yo?
Ella volvió su vista al moreno.
-Este chiquillo tenía una colección de películas porno cuando tenía quince, yo creo que todavía-
-¡MAMÁ! –Seungri se puso de pie y le tapó la boca. -¡No es cierto! ¡No es cierto!
Young Bae se echó a reír. Su madre soltó y le dio otro golpe.
-Como sea. Young Bae te estoy confiando a mi bebé. –Seungri se puso rojo y rodó los ojos.
-No se preocupe. También es el mío.
Seungri le miró. Su corazón latía con fuerza y su rostro estaba caliente.
-Me alegra escuchar eso. –Ella se puso de pie y salió tranquilamente.
Seungri cerró la puerta y miró hacia el suelo. Bae se acercó y le abrazó por la cintura.
-¿Por qué le has dicho eso? Me haces poner nervioso.
-Eres mi bebé, no dije ninguna mentira.
-Tonto –Seungri le dio un golpe.
-Te amo.
-Te amo más.