Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Cazando el amor por Juvia Loxar

[Reviews - 46]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Aquí queda plasmado mi vago intento de escribir humor (no estoy hecha para eso u.u). Pero la intención es lo que cuenta, ¿no? (?)

Estaba decidido, sí, lo estaba. Tenía que ignorar a Laxus.

Llegó al gremio y se reunió con el Raijinshuu, el rubio no estaba. Bickslow lo vio llegar.

-¿Dónde estabas? No me digas que estabas caminando por la ciudad pensando en alguna forma de ligarte a Laxus.

-No, para nada.

-Claro que lo estabas, y, ¿bien? ¿En qué pensaste?

-En nada.

-Que hayas regresado significa que tienes algo en mente. Dímelo antes de que lo hagas para que no salgas con una tontería.

-No seas así, Bickslow- intervino Evergreen-. ¿Qué tiene de malo que lo intente?

-No me entiendes, Ever. Laxus nunca le hará caso.

-¿Qué te hace pensar eso?

-Es Laxus y él es Freed.

-¿Y…?

-Olvídalo, no me entiendes.

-Pues no.

-¿Ya podrían dejar de hablar sobre eso? Me hace sentir incómodo.

-No te preocupes Freed, yo no soy como Bickslow, yo te apoyo.

-Gracias, Ever.

Su charla continuó, y por extraño que fuera para los otros dos del Raijinshuu, esta vez Freed no se quedó en algún tema que tuviera que ver con el rubio, siguió la plática como cualquier otra persona tal y como le había dicho la adivina.

Justine se sentía extraño, ¡estaba hablando con alguien y no era sobre Laxus! Este día era memorable para él, tenía que registrarlo en su diario-calendario apenas llegara a casa: “querido calendario, hoy sólo pensé en Laxus el ochenta y ocho por cierto del día en lugar del noventa, eso es un avance. Algo me dice que el plan de la adivina será todo un éxito, ¡qué emoción!”… No es como si siempre hablara de Laxus, pensara en Laxus, viera a Laxus, Laxus, Laxus, Laxus, no, sólo en noventa por ciento del tiempo lo hacía, lo normal, ¿no?

Cuando creyó que ya tenía una maestría y un doctorado  en dejar de hablar de Laxus, de un momento a otro se le complicó todo el asunto, el mismísimo Laxus apareció, no junto a Bickslow o Evergreen, si no, junto a él. Oh, sí, lo había preferido sobre ellos dos, las cosas iban bien.

-¿Qué hacen aquí holgazaneando? Vamos, salgamos un rato.

Esa voz hizo que el peliverde se derritiera y si no fuera porque estaba acompañado podría haber gritado de emoción como el orgulloso capitán del club de admiradores de Laxus que era, club que sólo contaba con un único miembro: él. Al final triunfó sobre sus ganas de gritar como fanboy, tenía que esforzarse, “control, Freed, control, ignóralo, ya podrás gritar luego”.

Los otros dos integrantes del Raijinshuu apenas vieron al Dragonslayer del Rayo se alegraron y comenzaron a saludarlo efusivamente, sí, sólo ellos dos, Freed no dijo nada.

-¡Laxus! ¿Qué tal? Tardaste, ¿qué estuviste haciendo?

-Sólo me retrasé un poco, Ever, no es nada del otro mundo.

-Pero eso es raro, tú nunca te retrasas.

-Siempre hay una primera vez para todo.

Bickslow se unió a la conversación.

-¿Andabas con la novia?

-No Bickslow, no tengo novia.

-¿Cómo qué no? ¡Eres Laxus! Hay muchas personas que morirían por estar contigo.

-Sí, claro.

-Es verdad –dijo Evergreen- yo conozco una.

El peliverde se exaltó cuando su compañera dijo eso, no estaba hablando de él, ¿cierto? No quería que sea él, pero, si no era él entonces eso significaría que tiene competencia, y eso tampoco era exactamente bueno,

-¿Ah, sí? ¿Quién?

-Lo único que te diré es que lo conoces.

-¿Lo conozco?

-Sí, lo conoces.

-Entonces es hombre.

-Sí, ¿tienes algún problema con eso? O ¿prefieres a las mujeres?

-Me da igual si es hombre o mujer. Bueno, ya hemos perdido mucho tiempo, vamos.

Se pusieron en marcha y el peliverde se quedó detrás de todos, así sería más difícil sucumbir al deseo de hablarle. Por otra parte, luego eso se lo tendría que agradecer a Evergreen, ella le había resuelto el misterio, al menos ahora sabía que tenía una oportunidad sin importar que fuera hombre, bien. Por otro lado, Dreyar no se percató de que él ni habló, ¿qué debía hacer? Ojalá aquella adivina esté con él para decirle, ¿debería de hablarle para que lo notara? ¿Seguiría ignorándolo? No estaba seguro, después de todo eso no había surtido efecto, “cálmate, apenas lo acabas de ver, apenas estás empezando, ya lo notará, no hables”.

Con un decidido y callado peliverde en la retaguardia y dos parlanchines compañeros a cada lado, Laxus se sentía extraño. Para él lo usual era que Freed esté sobre él todo el tiempo y era molestoso, pero ahora estaba tan tranquilo que igualmente lo molestaba, ¿qué hacía el mago rúnico ahí atrás como antisocial? Para que su empalagoso compañero esté sin hacer nada debe de pasarle algo, y algo grueso, tal vez debería de preguntar.

-Ustedes dos, adelántense.

Ambos integrantes del Raijinshuu se sorprendieron, ninguno pensó que Dreyar realmente caería por la pequeña actuación del peliverde, en especial Bickslow, a él ni siquiera se le pasó por la  cabeza que eso pudiera ocurrir. Pero bueno, si Laxus lo decía no tenía de otra, ambos se adelantaron y los dejaron solos.

El Dragonslayer de la segunda generación alentó su paso hasta quedar al lado de Justine.

-¿Qué rayos te pasa? Estás actuando raro, ¿algo te picó o qué?

-No- está bien, Freed, lo conseguiste, que te pregunte esto significa que se preocupar por ti. Ahora, actúa normal, actúa como si fueras una persona normal-, estaba pensando.

-Eso es algo obvio.

-Sí, cierto- diablos, ¿es que no puedo tener una conversación normal con él sin decir algo mal? Recuerda, ignóralo. Ochenta y ocho por ciento, ¡ochenta y ocho por ciento!

-¿No me dirás qué es lo que te pasa?

Vamos, Freed, dispara- ¿te preocupas por mí?

-Claro, eres mi compañero, sería ilógico que no lo haga.

-¿Sólo te preocupas por mí como compañero?

-¿Cómo más? No me digas que lo que Ever dijo…

-¡Laxus! ¿Qué haces ahí solo con Freed? Ven con nosotros.

Freed sintió como si el corazón y todo su demás rellenito se le fuera a salir por la boca. ¿Qué era lo que iba a decir Dreyar? ¿Evergreen qué? Esperaba con todas sus fuerzas que no se refiriera a lo que Ever que acababa de decir, porque efectivamente, él era de quien ella estaba hablando, él era el que moría por estar con Laxus.

-Te diré una cosa Freed- Laxus llamó su atención antes de irse con sus otros compañeros-. Me preocupo por ti como compañero, pero cabe la posibilidad de que sea algo más.

-¿”Algo más”? ¿A qué te refieres?

Freed estaba que se moría, como si le estuvieran sacando el alma aquellos ojos verdosos que lo miraban fijamente.

-Piénsalo, tú eres el genio aquí.

De acuerdo, Freed tenía que correr a donde la adivina pero ya. Le podría dar un infarto, su corazón no estaba preparado para este tipo de cosas.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).