-¡Hey!, te pregunte si estás bien.- Grito molesta. Vaya pero que mal genio tiene, además ¿siempre trae el entrecejo arrugado o qué?
-Lo estoy, gracias.- Conteste poniéndome de pie. Realmente me dolía como los mil infiernos la cabeza ¿Ella habrá pateado el balón?, si lo hizo… joder que fuerza tiene, Um… Fuerza.
-Imaginación de Amanda.-
-Ah… No tan fuerte… ¡Mejor más fuerte!
-Fin-
-¡Estas sangrando!- Grito molesta.
-¿Qué?, no eso fue la semana pasada.- Respondí roja hasta las orejas. ¡Qué atrevida! Rápidamente se saco la camisa, oie cy, ¡Espera! ¿Aquí frente a todos? Ah no espera, trae camiseta.
Se acerco aun mas poniendo su camisa en mi cabeza y logre ver como la antes azul tela poco a poco tomaba un color rojizo, ¿así que de eso hablaba?
-Sera mejor llevarte a la enfermería.- Resoplo molesta. ¿Por qué siempre usara ese tono de molestia?
-Claro.- Conteste algo aturdida antes de que tomara mi mano. ¡Es que es muy brusca! Mejor que me ate…
El camino a la facu transcurrió en total silencio, inclusive el camino a la enfermería fue igual. Supongo que yo no sabía cómo hablarle y aunque lo hiciera, ella no me pararía bola. Aun así me arriesgue; tome aire y proseguí.
-¿Cómo te llamas?- Pregunte tímidamente tanteando el terreno; pose fijamente mi mirada en ella más, mas aun así no había respuesta alguna. Después de unos segundos que parecieron eternos por fin volteo a verme y suspiro resignada.
-Alexis.- Su tono fue frio y cortante. ¡Qué carácter! Aunque creo a ver escuchado su nombre antes…
-Memoria de Amanda.-
Rosa, Mónica, Susana, Sandra, Nicole, Natalia… Um Natalia, Cristina, Andrea… Ño, aun no me acuesto con ella.
-Fin.-
Tome aire, estoy segura que de algún lugar la conocía así que con mas agallas que antes me atreví a abrir nuevamente la boca.- ¿Cuál es tu apellido?- Tenia que preguntarle, digo hay chicas que me llevo a la cama y apenas recuerdo sus apellidos… o se me olvidan…
-Asensi.- Contesto con el mismo tono frio de siempre, ese tono de cubito de hielo del oxxo. Um… Asensi… Alexis Asensi…
-Memoria de Amanda, flashback.-
-Y ¿Tu eres?- Le pregunte mientras acariciaba tiernamente sus omoplatos después de lo que amo llamar “Amanda’s especial”.
-Laura Asensi.- Contesto tímidamente al entrelazar sus piernas con las mías y posar su cara en mis pechos desnudos.
-30 minutos después-
-¡Y sabes tengo una hermana llamada Alexis!, es tan alta, guapa, deportiva, incluso es capitana del equipo de soccer.- ¡Dios cállala! Eso Amanda, asiente como si la estuvieras escuchando cada vez que sus pechos reboten.
-Fin flashback.-
-¿De casualidad tienes una hermana como de 1.68, ojos verdes, pelirroja y que jamás cierra la boca llamada Laura?- Pregunte pasando bilis, por lo visto acerté pues de inmediato volteo su vista molesta a mí. ¡Dios! Esa mirada fría como me pone…
-¿Cómo…- Estuvo a poco de preguntar cuando la puerta frente a nosotras se abrió dándole paso a una castaña que se me hacía muy conocida. Volteo su vista hacia nosotras y la reconocí de golpe ¡Ivonne! ¿Qué hace aquí mi ex? Y además… Se iba arreglando la camisa sport y la falda del equipo de tenis, cuando nos vio palideció lo cual se veía gracioso en contraste con el leve matiz rozado de sus mejillas. Alexis que seguí a mi lado de inmediato dio un paso atrás con el ceño fruncido.- Ya viene.- Susurro a la espera de algo. ¿Qué viene?, ¿Te vas a venir?- ¿Qué? ¡No!- Grito tan roja como su cabello volteándose a mí. Huis se enoju. De la nada una mancha blanca y negra se abalanzo sobre ella tirándolas a ambas en una posición no muy cómoda.
-¡Alexis!- Grito una despampanante pelinegra que acabo sentada a horcajadas sobre mi linda golpeadora.
-¡Cuánto tiempo! ¿Pero qué haces aquí? - sus ojos eran aún más azules que los de Alexis, parecía no notar la situación ya que tenía una muy tierna sonrisa.
-Quítate de encima Ferrer.- Gruño la pelirroja recostándose en sus codos. ¡Carajo mírame así baibi!
-um... que genio.- lentamente se levantó ofreciéndole la mano.- ¿A que debo el milagro de verte por aquí en mi humilde trabajo? - ¿Trabajo? No se ve mucho más grande que yo.
-Pues...- Alexis se puso de pie y me dirigió la mirada.- Se accidento.- um si accidentarse es que una pelirroja te desmadre el cráneo con un balón... pues si me accidente. La pelinegra se acercó a mí examinándome fijamente. Su olor era suave y a naranja, inundaba mis sentidos; su piel blanca, nivea; ojos azules como el cielo y labios seductoramente rosas y carnosos... ¡Aish! Me vengo en seco...
Tomo mi mano y me jalo dentro de la enfermería ¿¡Así tan de repente?! Por lo menos dame tu nombre y dime te amo... bueno no, ¡tómame! Voltee y Alexis estaba contra la puerta. Bueno violación no habrá a menos que sea trío.
De la nada la chica de cabellos negros se sentó como toda una secretaria y tomo unos lentes rojos de su escritorio. Poco a poco fue curándome, se veía tan diferente... sería... sinceramente me sorprendió su profesionalismo. Con la punta de los dedos toco mi frente y pude sentir que eran rasposos ¿para que usara esos dedos? -Soy guitarrista.- contesto como si me leyera la mente. Su voz era suave... como supo... ¡Mierda!
-¿hable en voz alta?- pregunte roja hasta las orejas. Me tengo que quitar esa maña.
-¿eh?, no. Solo, a veces me suelen decir que son rasposos, ya sabes mis dedos y como los veías mucho supuse que era eso.- O tal vez los quiero dentro~ aish ¡Amanda control pliz! Me dio una última checada y regresando a su actitud grito feliz.- !Listo! A todo esto ¿cómo te lastimaste?
-ah eso, pues veras estaba sentada pensando en el eterno ciclo de la vida del cangrejo y cuando me levante, de la nada...- Como kunai ninja un lápiz me dio en la cabeza haciéndome soltar una ligera mueca de molestia, algo así como.- ¡La puta madre! !duele!- y casi ni llore lo juro.
- se cayó de las escaleras.- contesto Alexis sin importarle que yo daba ligeros gemiditos como "!Moriré desangrada! Y a todo... ¿Cuáles putas escaleras?, ¿llegó Andrés? Si no, no entenderé jamás tu humor rojita.
La pelinegra rio un buen tiempo y cuando termino por fin se atrevió a preguntar.- vaya ¿y la linda Alexis se ofreció a traerte?- su mirada de incredulidad era divertida, algo raro hay con esas dos lo juro.- Creí que lo de ser caballero de brillante armadura no era lo tuyo Asensi.
-No lo es Ferrer.- Gruño por lo bajo mientras se cruzaba de brazos. Dios... ¡Tengo que preguntar!
-¿Qué quieres preguntar?- Mierda... ¡Volví a pensar en voz alta!
-Eh, yo...- pase saliva, estas dos algo tienen y mi sensor chismoso necesita saber que.- Ustedes... ¿de dónde se conocen?- Y ahí fue cuando todo se jodio, el ambiente quedo muerto. Alexis miraba perdida el piso, mientras que la pelinegra dio un gran suspiro y se sentó en el escritorio cruzando las piernas.
-Alexis y yo nos conocemos desde hace cinco años, yo era...- y se mordió el labio.
-Ella es una puta genio.- contesto Alexis por ella.- Mas lista y altanera que las demás, obviamente muchas querían patearle el trasero ¡Yo misma quería hacerlo! - Por fin una triste sonrisa se posó en sus labios y la pelinegra retomo la conversación.
-Un día unas chicas comenzaron a molestarme en la biblioteca, ¡tiraron mi libro! Y yo comencé a llorar... Alexis llego como si fuera un caballero karateka a soltar patadas y defenderme... fue genial. Desde entonces nos conocemos.- su sonrisa era como la de Alexis y hasta cierto punto se volvió incómodo.
-Después tu arruinaste todo...-Susurro Alexis lo suficientemente fuerte como para que yo escuchara.
Vaya... - saque mi celular, obviamente como estrategia para huir.- !Miren que tarde! Sera mejor que me vaya a clases. - tome la camiseta de Alexis y prometí lavarla antes de salir corriendo, esas dos tienen algo y será mejor no moverlo.
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-¿Por qué le contaste?- pregunte molesta en cuanto la extraña chica cerró la puerta.
-Era necesario. - me contesto con esa sonrisa tan característica de ella.
-¿Fue el balón de nuevo no es así? - ¡Joder! Se dio cuenta... Es ella después de todo.
-Lo fue...- conteste molesta- Aun lo recuerdas...
- Vamos si no fuera por mi edad sería doctora y esa chica tenía exactamente la misma contusión que yo hace cinco años.- rio algo desganada cuando por fin se hizo presente lo que sé muy bien se moría por preguntar.- Alexis... ¿Aún me odias?- sus azules ojos me veían fijamente.
Yo...- Di un fuerte suspiro. Imágenes de esa noche eran convocadas a mi mente como un conjuro de mil espinas que solo deseaban lastimarme.- No.- Y no mentía ¿cómo odiarla? jamás podría, pero también jamás sería lo mismo.- deje de odiarte hace tanto tiempo…-Se acercó inspeccionándome, sé que quería la verdad y yo se la ofrecía.
-¿Sabes? jamás quise lastimarte...- las lágrimas amenazaban tras sus ojos y tenía ese tierno puchero que mostraba cuando aguantaba el llanto.- si pudiera volver el tiempo atrás, yo...- Un paso más y tomo mi mano. ¡No! no otra vez... Me aleje inmediatamente y negué con la cabeza.
-No se puede regresar el tiempo y no podemos evitar lo que paso.- Mis ojos picaban, quería llorar.- Sabemos...- trataba de controlar mi voz pero los sentimientos me traicionaban.- Que tú la amas... como jamás me amaras a mi.-Y ahí estaba, lo había dicho.
-No quería lastimarte... Admito que la amo y si, la habría escogido.. Pero no te habría causado tanto dolor.- Sus lágrimas comenzaron a brotar y nuevamente se acercó tomándome entre sus brazos; esos brazos que extrañaba tanto, ese suave olor a naranja... todo lo que fue mío y ya no más. La abrace como si la vida se fuera en ello y antes de que llorara la vida me recordó que ella no era mía y no lo volvería a ser.
"So, run, run, ruun.
And hate me if it feels good."
Su celular sonaba y después de años tenía el mismo tono para "ella", sus ojos se inyectaron en pánico y yo nuevamente negué con la cabeza.
-Adiós Ferrer.- Logre articular con la voz quebrada y corrí; corrí lejos de ella hasta los baños para por fin derrumbarme, para por fin decir adiós a este sentimiento dentro de mí.
Corrí y corrí hasta llegar a los baños y fue ahí donde por fin me desmorone, dejando salir el dolor de años atrás una vez más. Esa canción... esa canción que tú le otorgaste a ella, será la última que gaste en ti. Nana