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como te digo que te amo por atavaka

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Notas del capitulo:

holis disculpen la demora yo se que me tarde demasiado pero en verdad estaba ocupadicima y aqui esta

se que es tarde para poner un prólogo pero bueno, lo tenia en otra parte asi que decidi subirlo despues esta el eílogo, lo que todos deseaban es despues

por lo pronto el antes

Ejmp, esto debió ir antes de todos los cap pero bueno me tarde y aquí está como un prólogo

PRÓLOGO

Un niño de doce años aproximadamente se encontraba en medio del campo de entrenamiento, no había nadie a su alrededor solamente la soledad y el frio que congelaba todo a su alrededor, su cabeza se mantenía en alto su mirada bastante decidida observa las nubes que se encontraban oscuras, una vez más desobedeció la orden de ir a sus templos para descansar o estudiar, el muchacho decidió no seguir aquellas ordenes, desde que había llegado a ese lugar ninguno de los niños de su edad se acercaba a él debido a su personalidad y por su extraña enfermedad que amenazaba con arrancarle la vida, apretó fuertemente los puños y decidió entrenar, daba golpes a la nada imaginando enfrentarse con un enemigo poderosos, estaba preparado para quemar su vida en ello.

Pasaron un par de horas y la lluvia se hizo presente, el muchacho no se amilano ante la fuerte lluvia ni al frio aterrador continuo como como si su vida dependiera de ello. Mucho de sus compañeros pensaba que aquel muchacho era un desobediente y rebelde que no tenía sentimientos por su manera de actuar, temían a su mirada ya que decían que se rebelaba odio y rencor, otros decían que era un muchacho sádico, a pesar de todas las cosas que hablaban de él nunca se limitó a responderles, dejo que todos ellos saquen sus propias conclusiones.

Estaba tan entretenido con su entrenamiento que no se dio cuenta que una persona se acercaba a él

_Kardia!...

_eh?_ el chico volteo ante la voz que lo llamaba, pudo divisar a lo lejos al patriarca_ ash…ya voy.._ musito con pereza, al llegar a su lado, hablo_ que quieres

El patriarca Sage le comento que lo llevaría a conocer a su nuevo compañero de entrenamientos ya que los demás se quejaban mucho de Kardia, no le importó estar todo sucio y dar una mala impresión, nunca le importo lo que pensaran de su persona

Ambos subían hasta la sala del patriarca, cundo ya estaban cerca divisaron a un muchacho de cabello castaño, un poco más alto que Kardia vestía una ropa extraña al parecer recién había llegado, se veía fuerte, bien ejercitado, los ojos de Kardia al verlo se iluminaron de emoción

Kardia creyó que aquel muchacho seria su compañero sin embargo el hombre se encargó de decirle que no era ese muchacho

_que!!, creí que él era…

_tranquilo enseguida te presentare a tu compañero_ cuando estuvieron dentro, vieron a alguien esperando en la sala

Kardia vio que delante había una linda joven de cabellos verdes, largos, al acercarse más la joven volteo hacia ellos, sus ojos eran de color violáceo, su piel blanca y delicada eso se notaba sin necesidad de tocarla, su cuerpo delgado, todo eso impresiono al muchacho de cabellos azules.

_bien, Kardia…él es Degel

Kardia había confundido a aquel niño con una niña, como siempre hizo un berrinche para negarse a entrenar con el muchacho de cabellera verde

_!pero es una muñequita de porcelana, se va a romper si la golpeo!!_ refutaba el peli azul

_no me llames de esa forma tengo un nombre y no me gustan los apodos_ hablo el chico, que se encontraba callado hasta ese momento

_eh?... y encima habla como niña!!...no es cierto debe ser una broma

Por más que el patriarca intento calmarlo el prosiguió con sus quejas, no le importaba quien sea simplemente se negaba a tratar con el nuevo, se quejó en voz baja del peli verde tratando que no escuchara, pero como Kardia es demasiado ruidoso no pudo evitar aquello.

Sage decidió que era mejor dejarlos solos para que se conocieran, no sin antes decirle al peli azul que el muchacho de cabellos verdes se encargaría de su corazón futuramente

_ Bueno, mi nombre es Degel, y seré tu compañero de entrenamiento_ hablo seriamente el chico

_fuuuf, bueno ya que,… peor es nada

_bien, me retiro_ el peliverde empezó a caminar hacia la salida

_¿cómo una niña va a pelear con alguien como yo?

_no soy una niña

_pues pa-re-ces

_mejor me voy, nos vemos mañana..

_si voy contigo pensaran que eres mi novia

_..............._ no hubo respuesta solo siguió caminando

_adiós muñequita…jajajaja

_no soy muñequita…!!_ Degel volteo y como un experto en lanzador de discos, le lanzo en la cara el libro que llevaba en brazos

_waaaaaa!!...que rayos te pasa… me quieres matar o que!!

_cállate tonto!!

_qué miedo!!_ Kardia se espantó, en serio ese era el mismo chico tranquilo de hace rato, o acaso era bipolar

_no me molestes_ sin más salió de ahí como si nada hubiera pasado

La presentación entre ellos no había sido buena, sin embargo nada podían hacer para evitar cruzarse, ya que era una obligación todo eso, Sage se dio cuenta que Degel era muy inteligente, por un momento creyó que al muchacho le costaría adaptarse, tenía que admitir que se equivocó, resulto ser más inteligente y astuto que Kardia y eso que este llevaba más tiempo en el santuario.

Sage ordeno a Kardia a que vaya al templo de acuario y estudie con Degel, al peli azul no le quedó más remedio que aceptar, con toda la furia del mundo se dirigió hasta el onceavo templo.

Se introdujo en el templo ajeno sin pedir ningún permiso, sintió la presencia del peli verde en uno de los cuartos, al abrir la puerta despacio pudo notar que aquel lugar era una biblioteca, levantó la vista dirigiéndola hasta el muchacho peli verde, quien leía un libro muy pesado, sonrió ampliamente y empujo la puerta de golpe alarmando a Degel quien se levantó por el susto.

_jajajaja te asusté, eso te pasa por distraído_ musito con burla, Degel lo observo retadoramente para luego levantar el libro que había tirado al suelo al levantarse

_se puede saber qué haces aquí, como te atreves a irrumpir un lugar sin pedir permiso

_ay no hagas drama, vine porque el viejo ese me obligo a venir aquí disque para estudiar contigo_ bufo de cansancio

_..._suspiró_ si es solo eso toma un libro y lee tranquilo_ murmuro para luego volver a lo que estaba haciendo, el peli azul se acercó hasta él

_también aprovechare para devolverte el libro que me lanzaste hoy en la tarde_ colocándolo sobre el libro que estaba leyendo Degel

_gracias, pero prefiero que lo dejes en un lugar en donde no interrumpa mi lectura

_te devuelvo tu estúpido libro y encima me gritas

_no te estoy gritando solo te informo para que no lo vuelvas a hacer

_nunca más te devolveré algo, le prenderé fuego sea lo que sea_ hablo con fastidio, tomo el libro que el peli verde se encontraba leyendo

_oye, que crees que haces, estoy leyendo…

_yo también quiero leer este libro

_pero aun no termino de leer_ murmuró con algo de desespero

_y a mí que me importa, puedes leerlo otro día.

En ese tiempo Degel no tuvo otra opción que tomar otro libro, no tenía ganas de discutir con ese mocoso ni mucho menos perder la paciencia el primer día en ese lugar, su molestia fue más grande cuando ya anocheció y Kardia se retiró diciéndole que no había leído nada del libro y solo lo hizo para que no pudiera terminarlo.

Dos días después ambos fueron al campo de entrenamiento ya que la lluvia ya había cesado, la relación que estaban construyendo no sería buena, ya que todo el tiempo Kardia hacia lo posible para que se hartara y decida no continuar, sin embargo estaba resistiendo.

En el transcurso del entrenamiento Kardia se la paso llamándolo por sobrenombres, hacia trampa ya que en una de esas le lanzo tierra a los ojos haciendo que el peli verde se distrajera, el peli azul aprovecho para empujarlo hacia el barro.

Degel se retiró del lugar muy molesto sin decir nada solo trataba de quitarse el barro del cabello. Kardia sonreía ampliamente sin embargo algo dentro de él se sentía culpable, por un momento estuvo a punto de decir lo siento, respiro profundo y empezó a reír a carcajadas, en eso se le ocurrió jugarle una broma al peli verde, mañana ejecutaría su plan, seguro y eso lograría espantarlo.

En la noche Kardia se encontraba en el pasillos del templo de acuario, mientras Degel investigaba en los libros, el peli azul estaba decidido a interrumpir la lectura de su compañero, nunca le había tomado tanto tiempo en deshacerse de sus compañeros de entrenamiento por ningún motivo iba a permitir que el peli verde se quede más tiempo.

_ la!! La la la laaaa!!_ cantaba los más fuerte que pudo, pasaron diez minutos y no recibía respuesta del otro_ ¡! LA, LA, LA!! “porque no sale este maldito enano”_ pensó

Estuvo ahí un buen tiempo pero al ver que el peli verde no hacía caso a su bullicio decidió retirarse a su templo muy molesto jurando vengarse el día de mañana.

Cuando el día llegó el cielo estaba despejado, ambos muchachos se dirigieron al campo de entrenamiento para continuar practicando, era obvio que el peli azul estaba decidido a jugarle una broma, ya luego se disculparía si se le pasaba la mano.

En medio del entrenamiento Kardia realizaba muchas de sus mañas, entre ellas hacer trampa, le lanzo arena a los ojos a su compañero, el peli verde cayó al suelo por el dolor en sus ojos

_hiciste trampa_ reclamo el de ojos violáceos, el peli azul se burlaba del otro

Degel se levantó muy molesto por la actitud tan infantil del peli azul, se dispuso a irse pero el otro lo tomo del brazo asustándolo

_¿qué haces?, ¡suéltame!_ gritaba mientras era arrastrado hasta las gradas por el peli azul

_estoy harto de tus lloriqueos de niña, te enseñaré a ser bien hombrecito_ amenazo con un rostro lleno de furia y sadismo, semblante que espanto el peli verde

_!déjame!,_ gritaba el chico, sin embargo su compañero lo lanzo con fuerza hasta que cayó en una de las gradas, intento levantarse pero fue tomado por los hombro

_¡eres un cobarde!_ hablaba con mucha firmeza,_ ¡te destrozare la cara de niña que tienes!_ lo que el peli azul no espero fue la reacción del peli verde

Kardia vio como el muchacho temblaba y empezaba a sollozar, el peli verde intento zafarse y lo logro como pudo, salió corriendo dejando a Kardia desconcertado.

Kardia aún se mantenía mirando al lugar en donde antes estaba el peli verde, cuando se dio cuenta ya era tarde, su intención no había sido lastimar a su compañero solo quería jugarle una broma, nunca imagino aquella reacción por parte de su compañero, tenía planeado asustarlo un poco y luego decir “caíste” o algo así, a pesar que Kardia parecía ser un joven sin corazón, era todo lo contrario, en su interior guardaba una gran calidez, que guardaba para entregarla a una persona especial.

Se dirigió hasta donde el peli verde había corrido, lo encontró sentado cerca de un árbol mientras abrazaba sus piernas, lentamente se acercó a él, no sabía que decirle, lo correcto era disculparse con él y decirle que solo era una broma.

Kardia se disculpó con él, le fue muy difícil aceptar que se le paso la mano, pero realmente estaba arrepentido, el muchacho de cabellos verdes levanto la cabeza y también se disculpó por la actitud que había mostrado,  el peli azul le explico que no era su intención asustarlo, solo era un juego. Kardia decidió que la mejor manera de disculparse era llevándolo a un lugar agradable.

_y para que veas que no soy malo, te llevare al lugar más hermoso que hay aquí_ hablo levantándose_ bueno eso es lo que dicen

_eh?...eres bipolar?_ murmuro el peli verde, Kardia adopto un rostro de frustración

_¡tú eres el bipolar, yo soy normal mocoso

_tengo la misma edad que tú, por si no lo sabias

_a sí, y que, yo soy más alto y más fuerte_ grito eufórico, el peli verde suspiro, no tenía ganas de escuchar las tonterías de aquel chico_ anda levántate, vamos que no tengo todo el tiempo

Ambos se encontraban de pie, Kardia sin decir palabra alguna se dirigió hacia donde habían árboles, parecía un pequeño bosque, el peli verde dudo un poco si debía seguirlo pero la voz de Kardia llamándolo lo obligo a continuar, cuando de pronto se toparon con una arbustos que impedían el camino, el peli azul los hizo a un lado dejando pasar al peli verde.

La imagen de aquel lugar era perfecta, un hermoso rio cristalino, la briza fresca, las hermosas flores, el verde del pasto y los arboles moviéndose con la brisa que los envolvía.

Degel cerró los ojos, ese lugar realmente era hermoso, ya hasta había olvidado el enojo que sentía hace un momento, camino hasta el rio y abrió los ojos, pudo notar su reflejo en el agua decidió sentarse frente a él. Kardia  lo observo desde atrás, por minutos se perdió en  el  cabello verdoso que se ondeaba con el viento, al reaccionar se dirigió junto al otro chico quien observaba el hermoso lugar

_los que están en el santuario dicen que está prohibido venir hasta esta parte del bosque_ murmuro el peli azul, Degel se giró espantado

_¿qué? ¿Cómo que está prohibido?_ pregunto con temor_ debemos irnos

_espera, tranquilo_ hablo Kardia intentando tranquilizar al peli verde quien se levantó muy asustado por temor a recibir un regaño_ nadie se dio cuenta que vinimos, además una escapada no hace daño

_no digas tonterías, nos regañaran si se enteran_ murmuro, decidió que lo mejor era irse, en eso Kardia le toma del brazo y lo empuja muy despacio para que se siente de nuevo

_solo será un minuto más, cierra los ojos y disfruta de este maravilloso lugar_ murmuro el peli azul, Degel frunció el ceño  y luego se dejó convencer

Sin darse cuenta el peli verde se quedó  dormido, ya había pasado más de una hora, Kardia simplemente se  limitó a observar al chico que dormía a su lado, estaba impresionado de las hermosas facciones que tenía el peli verde , ni el mismo se dio cuenta que estaba observando maravillado como aquel chico descansaba con tranquilidad.

Cuando Degel abrió los ojos el cielo estaba oscuro, se levantó de golpe mirando hacia todos lados, la voz de Kardia quien estaba detrás suyo lo asusto más

_al fin despiertas bello durmiente_ dijo con gracia, el peli verde se levantó de su lugar

_porque no me despertaste_ angustiado_ nos llamarán la atención a los dos, el patriarca estará muy molesto con nosotros

_no te preocupes, es solo una salidita_ sentándose al lado del chico_ seguramente tienes miedo, no eres más que un niño miedoso

_deja de burlarte de mí, solo sigo las normas de este lugar, y tú solo eres un malcriado

_si, si lo que digas, pero este lugar vale la pena no crees_ murmuro, el verde desvió la mirada hacia el rio

Afortunadamente nadie del santuario se enteró que ambos habían desobedecido una orden, desde aquel día la relación de ambos cambio, no demasiado pero había mejorado, Kardia ya no era tan grosero con el peli verde, Sage se mostró satisfecho al ver la mejoría que presentaban ambos en tan solo dos semanas.

En aquel tiempo Degel descubrió que Kardia no era como los demás niños de su edad lo describían, lo que él había oído era que el peli azul odiaba a las personas y carecía del sentido de la amistad, muchos pensaban que el sería un traidor ya que  no parecía mostrar respeto ante nadie del santuario hasta crearon rumores que el chico estaba maldito o algo así.

Era muy notorio que Kardia era un muchacho muy diferente a todos los demás, sin embargo lo que no sabían era la verdadera razón por la cual se comportaba de esa manera, el trataba de ocultar sus verdaderos sentimientos en su corazón enfermo.

En la mañana Kardia se encontraba en el coliseo esperando a su compañero de entrenamiento, más le extrañaba él porque estaba tardando tanto ya que Degel era muy puntual entonces decidió buscarlo en su templo, al llegar al onceavo templo se molestó al encontrar a Degel leyendo un libro de gran volumen, se acercó hacía en donde se encontraba el chico peli verde cerrando e libro de este de un golpe

_¿Qué te pasa?, ¿Qué crees que haces?_ interrogo con molestia el peli azul frunció el ceño

_se supone que deberíamos estar entrenando, pero claro, tú prefieres leer esos estúpidos libros

_¿qué te pasa?, no entiendo porque te fastidias, es más deberías estar feliz por no verme en el día

_mejor cállate y vámonos_ hablo con la mirada hacia la ventana, Degel noto que Kardia no vestía la ropa de entrenamiento, y en su lugar llevaba puesta una camisa blanca con unos pantalones azules y lucia arreglado.

_se puede saber a dónde vas tan arreglado_ pregunto curioso, Kardia parpadeo varias veces al sentirse nervioso

_no…no es tu asunto_ desviando la mirada_ mejor date prisa_ saliendo del lugar, el peli verde suspiro resignado, dejo de leer para acompañar a Kardia con e entrenamiento

Cuando ambos estuvieron cerca del coliseo escucharon los bullicios del entrenamiento, cuando estuvieron más cerca pudieron divisar que el lugar estaba repleto de personas, la mayoría practicantes mucho mayores que ellos, Degel estuvo a punto de decir algo pero fue interrumpido por el peli azul.

_que mala suerte, parece que o podemos entrenar lo mejor será buscar otro lugar- hablo el peli azul despreocupadamente, Degel aun observaba al resto entrenar cuando noto que Kardia caminaba hacia otro lugar

_creo que continuare con mi lectura_ murmuro, el peli azul se giró y con una sonrisa le dijo

_creo que se dónde podemos entrenar con mucha tranquilidad_ Degel arqueo una ceja

En eso Kardia se acerca a Degel  le arrancha de las manos un libro ligero, Degel persiguió a Kardia sin darse cuenta que lo conducía a un lugar que estaba prohibido, esa parte interna del bosque

Cuando el peli verde alcanzo a Kardia este le devolvió el libro, se o quito de las manos y al darse cuente que cerca de ellos había un hermoso rio se dio cuenta que cayó en la trampa del peli azul

_ya que estamos aquí porque no descansamos un poco_ sonrió el peli azul, Degel l miro desaprobatoriamente

_ lo hiciste al propósito verdad_ acercándose amenazante al peli azul, este retrocedió al verse en peligro

_no te enojes, solo es una escapadita_ moviendo las manos tratando de relajar la situación

Degel iba a darle un golpe en la cara pero el peli azul lo sostuvo de la mano y en seguida tomo su otra mano libre, en el forcejeo Kardia condujo a Degel cerca del rio y ambos cayeron al agua

_¡qué crees que haces!_ reclamó el peli verde_ ¿Por qué hiciste esto?_ enfurecido le lanzó agua al otro, y este respondió de igual forma _ que haces… no hagas eso- reclamaba al recibir el agua en su rostro

Sin darse cuenta ambos estaban jugando  en aquel rio, entre jalones e insultos pasaron gran parte de la mañana, cuando ambos salieron del rio se encontraban cansados.

_jajajajajaja estas todo mojado_ burlándose_ pero aun así estas muy bonito_ aquel comentario avergonzó un poco al peli verde.

_porque siempre dices tonterías_ recostándose en el pasto, Kardia imito esta acción recostándose muy cerca de él

Estuvieron así por varios minutos, observando el hermoso cielo, y sintiendo la brisa cálida que recorría sus cuerpos, Degel decidió romper aquel silenció que empezaba a envolverlos

_no creo que seas una persona sin corazón_ murmuró aun con los ojos cerrados, el peli azul giro el rostro para mirarlo

_no entiendo

_no creo lo que dicen los demás

_entonces que es lo que crees

_creo…_ se levantó para quedar sentado y giro el rostro hacia el peli azul_ creo que eres una persona que necesita algo de comprensión y amor_ Kardia abrió los ojos de par en par, por un momento sintió dejarse vencer por aquella mirada de color violáceos

_lo mejor será irnos_ murmuro, sin embargo Degel se volvió recostar sobre el pasto

_¿porque tratas de mala forma  a las demás personas?_ susurro, el peli azul cerro los ojos, no supo porque decidió hablar con el peli verde_ creo que… todos tenemos razones para actuar de diferentes maneras, cuál es tu razón_ Degel sintió el silencio sin embargo se sorprendió al escuchar hablar al otro

_cuando era más pequeño…_ se detuvo y empezó a recordar_ mis padres me abandonaron por mi enfermedad_ el peli verde abrió los ojos al escuchar_ me dejaron a i suerte porque no querían hacerse cargo de un enfermo como yo que solo tenía un año de vida

_como es que…

_¿sobreviví?, Krest de acuario fue quien me trajo al santuario permitiéndome extender mi tiempo de vida

_quieres vivir para siempre…

_no, te equivocas, yo solo quiero vivir al máximo el tiempo de vida que me quede, es todo

_¿no crees en las personas?, porque temes a que te traicionen como lo hicieron tus padres_ el silencio del griego fue un sí para el peli verde

_nadie desea cargar con un enfermo como yo, prefiero estar solo y no hacer la vida infeliz a otros

_sabes, yo pienso que eres muy agradable

_eh?...

_pienso que tienes mucho valor y agallas, admiro tu forma de ver la vida, es diferente a la mía pero aun así, es admirable

_hum, gracias por eso… aun así eres muy diferente a mi

_creo que nos parecemos más de lo que crees, creo que si fueras más amable, todos podrían ver que puedes ser una maravillosa persona

Kardia sintió aquellas palabras del peli verde, al conocerlo se comprometió a alejarlo lo más pronto posible, sin embargo ya no estaba segura de querer aquello, aquel chico de hermosa mirada violácea fue capaz de hacerle confesar uno de  los secretos más guardados que tenía. Ahora lo que más deseaba era estar cerca de él, todo el tiempo posible.

Aquella relación comenzó a florecer, convirtiéndose en una hermosa amistad, ambos siempre estaban juntos como los mejores amigos, El patriarca Sage estaba muy contento al ver el cambio de Kardia, ya no era el mismo muchacho huraño que llego al santuario, seguía siendo irrespetuoso y alegre, lo diferente estaba en que ya era más sociable, por lo que empezó a tener más amigos.

Había un lugar en especial al que ambos disfrutaban ir, estaba prohibido pero ese era su secreto, todas las tardes iban a jugar en el rio o a descansar o comer alguna cosa, Degel descubrió a un joven alegre y de gran corazón y valor capaz de hacerlo reír y dejar de estar siempre con aquellos libros, mientras que Kardia descubrió a un ángel que le mostro lo hermoso de la amistad, y también descubrió que era a Degel a quien quería darle esa calidez que guardaba en su interior.

Un día el patriarca mando a llamar a Degel informándole que tendría que viajar a Blue Gard para comenzar su entrenamiento con Krest de acuario, el peli verde acepto lo que le ordeno Sage, al salir de la sala encontró a Kardia apoyado en un lado de la puerta.

_así que te vas a ir con tu maestro

_escuchaste la conversación_ murmuro Degel_ Kardia yo…

_regresaras verdad?

_claro que volveré,  entrenare para convertirme en el santo de acuario y luchar por nuestra diosa Athena

Ambos caminaron hacia el templo de Acuario en donde Degel se detuvo en medio del pasillo para luego dirigirse a la biblioteca del templo, Kardia lo siguió y se quedó en frente de él, el peli verde hablo para terminar con el silencio.

_Kardia, el día que yo vuelva me encontraras en este lugar, estoy seguro que ese día ambos estaremos convertidos en santos de Athena

_no demores mucho, yo me esforzare para convertirme en santo de escorpio_ el peli azul tomo las manos de Degel_ te extrañare demasiado

_también te extrañare, pero sé que nos veremos después.

_siempre seremos amigos, lo prometimos en el rio y en nuestros corazones_ el peli azul abrazo a Degel y este le correspondió el abrazo.

Kardia quería mucho a Degel, demasiado, en tan sólo unos meses y ya eran más que solo simples amigos, ambos construyeron un lazo muy fuerte, lazo que en un futuro daría frutos, que jamás pensaron

Degel partió a Blue Gard al día siguiente, ambos acordaron no despedirse ya que esperaban volver a verse pronto, en ese tiempo pasaron más de tres años, tiempo en el que ambos ansiaban volverse a ver, tiempo en el que crecieron y maduraron, al menos Degel maduró, un poco.

Degel era un hermoso muchacho de largo cabello verdoso y hermosos ojos violáceos, ahora ya portaba la armadura de acuario.

Kardia se encontraba entrenando junto a Asgard, en esos momentos llega Manigoldo quien se une a ambos santos

_adivinen quien volvió al santuario_ comento el de cáncer, Kardia mostro desinterés_ volvió un peli verde muy hermoso de ojos violáceos y piel blanca_ los ojos de Kardia se abrieron y salió corriendo dejando a los dos santos con una sonrisa.

Su corazón latía fuertemente al estar cada vez más cerca del onceavo templo, cuando estuvo en aquel lugar que visitaba siempre, su corazón parecía iba a salirse de su pecho. Se detuvo frente a la puerta de aquella biblioteca en donde prometieron encontrarse, abrió la puerta lentamente dejando ver una larga melena verdosa y una figura esbelta.

_Degel…_ el mencionado se giró hacia el dedicándole una hermosa sonrisa, mientras Kardia se acercó y lo abrazó fuertemente_ volviste…

_siempre estaremos unidos por un lazo de amistad…Kardia de escorpio_ el peli azul sonrió

_estas más hermoso

_porque siempre  dices que soy hermoso, me lo decías desde que éramos niños

_porque lo eres, te extrañe demasiado_ murmuro con una sonrisa, el peli verde soltó una risilla

_ me parece que estas más sentimental

_no te burles, mejor vamos a entrenar

_ay Kardia, acabo de llegar, no seas malo, mejor demos un paseo quieres.

Ambos estaban felices de volverse a encontrar y continuar esa hermosa amistad que tenían que en un futuro no muy lejano daría sus frutos.

Para aquellas personas que se esfuerzan tanto en conseguir un futuro lleno de felicidad, para las que luchan con todas sus fuerzas por una vida, para todos los que sueñan y desean con todas sus fuerzas, para ellas el destino les prepara un futuro brillante, un futuro construido a base de amor y amistad.

 

Holis lean el Epílogo, para que conozcan que fue de sus vidas

 

Notas finales:

luego sigue el epílogo


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