Kuroko permanecía en lo alto de uno de los tejados, oculto por las sombras y su falta de presencia pero atento y con una visión casi completa de lo que pasaba en la ciudad. Confiaba en que tanto Kise como Takao tomaran la decisión correcta. A Ryouta lo vio abandonar la capital, sabia sobre sus encuentros y aunque desconocía de quien se trataba, si sabía que era un miembro del ejercito de Akashi.
Como si de niebla se tratara los vio entrar silenciosos y muy lentamente. Apretó ligeramente los puños, jamás imagino que permitiría una invasión, mucho menos que la contemplaría y no movería un solos dedo. Aun estaban entrando cuando Mayuzumi apareció a su lado y contemplo el progreso de las fuerzas enemigas y después a Kuroko, que tenia ligeramente tensos los hombros. Una media sonrisa se dibujo en el rostro del doble agente.
-sabes que es lo más sensato, aunque supongo que ver como poco a poco toman tu ciudad es algo difícil
-no es mi ciudad pero como dijiste es lo mejor. Nijimura dejo que todo esto se le fuera de las manos
-mmm si supongo, por eso estamos en esta situación
-¿qué paso con el plan?
-ya esta completado, esa si que fue una jugada maestra. Solo de esa manera no va a encontrar oposición
-sí, mandar un grupo de soldados del ejército de Akashi a evacuar a todos los civiles fue una buena idea. Cuando tome completo control no lo verán como un invasor sino como un salvador y si después expone los movimientos incorrectos de Nijimura...
-…el golpe letal
El crepitar de las llamas comenzó a llegar hasta ellos, regresaron su atención a la ciudad y las llamas comenzaban a asomarse, no faltaba mucho para que los guardias del interior lo notaran y sonaran la alarma. Kuroko había mandado la orden de un cambio de guardia en la entrada pero a nadie le había asignado el siguiente turno, por eso no habían encontrado resistencia a la entrada; la prioridad se mantenía, entre menos bajas mucho mejor. Tal como lo imaginaba la alarma comenzó a sonar y el sonido de movimientos no tardo en hacerse presente. Chihiro le puso una mano en el hombro
-bien, ya esta todo en movimiento, ahora solo depende de ti la última fase del plan. Si los capitanes se ponen de nuestro lado prácticamente la guerra habrá terminado
Aquello sonaba perfecto pero Kuroko no estaba tan seguro de que fuera tan fácil. No solo se trataba de los capitanes, también tenia que atraer a la guardia. Aun así asintió con la cabeza
-bien es tiempo de que me mueva. Esperemos que esto no dure demasiado
Sin más Kuroko se movió una vez más entre las sombras mientras el paisaje comenzaba a teñirse de naranja…
...
Miyuki ya estaba levantado antes de que la alarma comenzara a sonar. Ver a Kise salir al amparo de la noche lo había inquietado. Cuando escucho la alarma tuvo la certeza de que ese sería el último movimiento de esa guerra.
No se sorprendió al ver a sus compañeros listos y esperando órdenes, Kuramochi y Ryo-san encabezaban las filas. No estaba muy seguro de cual era la situación pero en ese momento ellos solo tenían una prioridad.
-no sabemos a cuantos enemigos nos enfrentamos pero saben cuál es su trabajo, hay que asegurar el palacio y poner al rey a resguardo. Necesitamos dividirnos en patrullas e ir asegurando cada uno de los niveles. El rey debe de estar en sus habitaciones con su guardia en turno, Kuramochi, Kominato y yo reforzaremos a esa división -Kanemaru y Toujo se removieron incómodos, esa era una mala señal -¿qué pasa Kanemaru?
-señor, Toujo y yo deberíamos ser su guardia esta noche pero el rey personalmente nos dijo que no necesitaba de nuestros servicios -Miyuki volteo a ver a Youichi y Ryo, definitivamente algo estaba pasando. Sin embargo el tendría que resolverlo sin alterar al resto de la guardia
-con mayor razón tendremos que movernos, refuercen las entradas y los pasillos. Nosotros nos encargamos de proteger y sacar al rey. No tengo que mencionarles que en una invasión tan directa el principal objetivo es el rey, al cual juraron proteger.
Todo mundo se puso en movimiento y los tres tomaron rumbo a las habitaciones principales. La mente de Miyuki trabajaba a mil por hora, sabía que la salida de Kise y el misterio de Kuroko tenían algo que ver con el repentino ataque incluso que el rey no tuviera a su guardia era extraño.
Kuramochi vio por una de las ventanas mientras corría y se detuvo en seco mientras fruncía el seño, Ryo venía detrás y choco con el
-Youichi no es el momento para contemplar la ciudad
-es que... No hay gritos -Miyuki y Ryo intercambiaron miradas pero se asomaron y comprendieron a lo que se refería. No había personas en las calles y nadie huía a pesar de las llamas
-hay un traidor... ¡Muévanse! Esto es peor de lo que esperaba
Los tres retomaron la marcha hacia las alcobas. Nadie había llegado a esa parte pero se oían voces en el interior de la habitación. Con la mano les indico que esperaran afuera y resguardaran la puerta hasta que el les diera alguna otra orden. Con suma cautela abrió la puerta y se quedo helado ante lo que veía.
...
Shintaro y Takao salieron para ver a todo mundo corriendo y gritando órdenes. Miyagi se les acerco con toda la unidad lista para recibir instrucciones. Takao le dedico una sonrisa a Midorima que este supo interpretar.
-no estamos al tanto de cuál es la situación pero busquen civiles y sáquenlos de la ciudad hasta alguna zona segura. Eviten el enfrentamiento y una vez registrada la ciudad, hagan lo mismo con la zona externa y manténganse en los limites.
Aquello parecía extraño pero todo mundo asintió, Miyagi fue el único que le dedico una mirada de duda, se acerco a su general.
-¿qué está pasando?
-no tienen la intensión de pelear y yo no voy a desperdiciar vidas
-pero están quemando la ciudad, ¡¿cómo eso no es una provocación?!
-lo sé, lo sé pero aun así no somos su objetivo
-¿qué van a hacer ustedes? Porque está claro que tienen algo en mente-Midorima levanto una ceja
-vamos a comprobar cuál es ese objetivo
La división se movilizo, Shintaro y Kazunari se movieron hacia el palacio. Usaron pasadizos y caminos ocultos, mientras avanzaban pudieron ver algunos enfrentamientos pero se notaba que el ejercito de Akashi no estaba buscando acabar con los soldados de la capital.
Cuando llegaron al palacio la primera línea de defensa ya había entrado en combate y ahí las cosas si estaban más en serio. Aquello significaba que Miyuki estaba con el rey y que seguramente no sabía nada. No tardaron en llegar a la parte de las habitaciones principales, los guardias los habían dejado pasar al creer que se trataban de refuerzos. Llegaron a las puertas donde Kuramochi y Kominato estaban apostados pero seguían sin ver a Miyuki. Los dos vieron extrañados a los recién llegado, no entendían que hacían ahí. Kazunari fue quien se adelanto
-¿Dónde está Miyuki?
-adentro, con el rey pero ¿Que hacen ustedes aquí?
-evitando que se cometan más errores. Ustedes dos tienen que salir de la Ciudad y ponerse a salvo
-¿qué? ¿Estás loco Takao? Estamos bajo ataque
-eso ya lo sé pero ustedes son su principal objetivo. Además tienes un hermano al cual encontrar - los guardias abrieron hasta el límite los ojos. Kazunari no sabía nada del encuentro con Haruichi pero había dado en el clavo. Aun así Youichi volvió a contestar
-sabes que no podemos dejar nuestra posición eso seria traición
-abre esa puerta y veremos si sigue siendo traición
Kuramochi y Kominato se voltearon a ver, todo aquello no tenía sentido pero con la mención de Haruichi las cosas parecían tomar otra perspectiva. El estruendo en los pisos inferiores los llevo a tomar una decisión.
...
Cuando Miyuki abrió la puerta, no pudo evitar pararse en seco y parpadear sin dar crédito a lo que veía. Era obvio porque el rey no quería a sus guardias rondando esa noche. Nijimura estaba en tremendo beso con Haizaki... Tardaron un poco en darse cuenta que tenían un espectador mientras la ira comenzaba a hervir en las venas de Miyuki. No había estado en el relato de Takao pero se había enterado de toda la verdad. Sabía que Haizaki fue el responsable del ataque a Kazunari. Ahora las cosas comenzaban a tener sentido… sabía que era un mercenario pero con tanta intimidad entre ellos estaba más que claro que solo seguía ordenes del mismísimo rey.
Nijimura adopto una postura digna y molesta por ser interrumpido mientras Haizaki le dedicaba una sonrisa burlona haciendo que Kazuya enfureciera aun más.
-Miyuki, si prescindí de mis guardias fue por un motivo –Kazuya apretó los puños y las palabras salieron de su boca producto del coraje
-¿para revolcarte con sucios mercenarios? –Nijimura no esperaba ese comentario y mucho menos que Haizaki desenfundara su espada y apuntara al cuello de Miyuki; el cual leyó el movimiento y saco a tiempo su espada para evitar que se acercara y amenazarlo al mismo tiempo
-¿se te olvida con quien estás hablando? Es tu rey
-¡ja! ¿tú vas a darme lecciones de lealtad? No me hagas reír
-Miyuki Kazuya mide tus palabras que tu actitud puede ser tomado como desacato y traición
-y esto que estás haciendo ¿cómo se llama? ¿Cómo se le llama a lo que le hiciste a Takao? Eso también puede que se llame traición. Porque entérate que ese idiota no hizo bien el trabajo y todos los capitanes y algunos de tus generales están al tanto de lo que este no pudo terminar. La próxima vez elige mejor a quien mandas a hacer el trabajo sucio. –Nijimura altero un poco su expresión al saber que alguien más sabía lo que paso, pero se recompuso por una expresión completamente dura –si puede que esto sea exactamente eso… traición
Justo en ese momento la puerta volvió a abrirse...