Las mejillas de Baekhyun se tiñeron de un color carmín intenso al escuchar esas palabras escurriéndose por la puerta hasta quedar sentado en el suelo, su corazón latía muy deprisa, ¿Qué había dicho?, si, el lo había dicho, que Baekhyunnie le gustaba y sus palabras habían sido sinceras, porque si, si de algo Chanyeol estaba seguro era de que su hermano le gustaba, aunque eso no estuviera bien, pero por ahora no le importaba, mientras no mordiera ese fruto prohibido, porque de ser así, ardería en lo más profundo de las fosas de hades, si ya lo presentía por el simple hecho de solo tocarlo.
Porque quizás para otros no estuviera prohibido, pero para el sí, cruelmente Baekhyun es aquello que él jamás debió mirar, aquello que jamás debió tocar y mucho menos desear.
¿Qué hacer? Dicen que las reglas fueron hechas para romperse, y si las reglas fueran esas, el ya la había roto.
- Baek por favor abre.- dijo una vez más el castaño girando la perilla, Baek solo quito el seguro dándole paso, la puerta se abrió lentamente como si se tratara de una película dramática de terror.
Chanyeol busco al pequeño de cabello rubio pero no consiguió verlo hasta que escucho un sollozo y miro hacia la puerta, ahí estaba, el bajito estaba con la espalda pegada a la pared abrazando sus piernas mientras seguía sollozando, el castaño se acerco a él poniéndose a su altura, quedando en cuclillas, tomo su rostro delicadamente limpiando aquellas lagrimillas que rodaban por esas lindas y hermosas mejillas sonrojadas, mientras le mostraba una sonrisa.
- ¿Por qué lloras?- le susurró, el menor solo sorbió la nariz haciendo un lindo mohín.- no tienes motivo para hacerlo, tu eres mi Baekhyunnie, y yo soy tu yeollie.
- Tu eres mi yeollie?- su voz sonó chillona pero linda, algo que en cierto punto gusto a Chanyeol, el castaño asintió.- seguro?
- Seguro, soy tu yeollie.- dijo sincero en sus palabras, de hecho le gustaba ese término.
- Me das un beso?- pregunto el rubio de hermoso ojos avellana bajando la mirada sintiéndose avergonzado pero feliz a la vez, le gustaba saber que su querido hyung decía ser suyo.
Chanyeol sonrió avergonzado ¿Cómo podía ocasionarle esos sentimientos?, tomo delicadamente la barbilla del menor alzando su rostro, encontrándose con esos ojitos cristalinos, los amaba, esos ojitos eran los más bonitos que pudo haber visto y mas por que estaban en ese pequeño rostro, el cual tenía un hermoso rubor, se fue acercando lentamente a su rostro uniendo sus labios en apenas un rose, sintiendo miles de sensaciones en su interior, Baek se alzo un poco pasando sus brazos alrededor del cuello del mayor quien paso sus manos por la cintura del bajito juntando mas sus cuerpos, sus labios comenzaron a moverse convirtiendo ese rose en un beso lento y tierno, se abrían y cerraban contorno a los contrarios haciendo de sus respiraciones un poco más agitadas, Chanyeol se sentía extraño, pero ese sentimiento no era malo, se sentía tranquilo, como si en el hubiera una paz inmensa, era tan diferente a otras experiencias, este sentimiento era único,¿ pero que era ese sentimiento?, los pequeños labios del pequeño rubio eran tan perfectos y a pesar de no ser experto en la materia lo hacía tan bien, no siquiera se habían dado cuenta de en qué momento habían aumentado la velocidad e intensidad del beso, el pequeño cuerpo del bajito se iba subiendo encima de su hyung haciendo que este acabara sentado sobre el suelo, sus manos casi adultas del castaño acariciaban suavemente su delegada cintura, tan delgada y suave, subían y bajaban contorno a ella, las piernas delgadas del rubio se posaron al redor de su cadera, una en cada lado quedando el sentado sobre su pelvis completamente mientras se iba inclinando hasta que Chanyeol termino acostado sobre el suelo y el menor sentado sobre su pelvis mientras su labios se besaban frenéticamente.
Baekhyun sonrió tiernamente levantándose un poco hasta erguir su espalda mirando los hermoso ojos de su hyung, porque para él lo eran, eran los ojos más hermosos que jamás había visto, Chanyeol no pudo evitar sentirse avergonzado, recordaba esa posición, a no ser de que el Baekhyunnie de ahora tenía ropa puesta seria igual, porque estaba sobre él con las mejillas sonrojadas, ok debía de tranquilizarse, su corazón había comenzado a ir más deprisa, y sentía un hormigueo en su entrepierna, eso no estaba bien, los pequeños y suaves labios de Baek se posaron una vez más sobre los suyos a los cuales no se pudo negar, busco tener contacto con esa pequeña lengüita inquita en la boca de su rubio quien no se lo negó, sus lenguas se rosaban una contra otra, esos soniditos al chocarlas eran tan excitantes y exquisitos, fue lentamente yendo subiendo la camisa del menor hasta despojarlo de ella, sabía bien que no debía, pero su subconsciente no le respondía muy bien , sus acciones iban mas allá de lo que su cuerda mente podía controlar, el pecho blanco y erizado del menor por los cambios de temperatura, se encontraron expuesto ante él, Baek lo miro sorprendido, avergonzado y tanto más, pero no dijo nada, le gustaba ser observado de esa forma por su hermano * eres tan lindo*susurro Chanyeol sin emitir sonido, Baekhyun solo se dejo hacer por su hermano.
Quien ahora había comenzado repartir besitos cortos y húmedos por su cuello y parte de su hombro, a Baekhyunnie le gustaba sentir su piel siendo succionada levemente por esos suaves labios, que siguieron por un camino de besos húmedos y tronadores hacia su pecho ¿ qué estaba haciendo? Eso se preguntaba Chanyeol en su foro interno pero la respuesta era la misma, no lo sabía y no le importaba justo en ese momento…