-Tus padres no llegan temprano a casa?- Preguntó Jongin ayudando al castaño a lavar los platos, en donde habían comido minutos antes. Kyungsoo negó. - Estás todo el día solo?
- Digamos que sí.- Colocó los trastes en el escurridor.-Pero está bien, nadie me molesta.
- Ya veo, Kyunggie...- El menor lo miró brevemente, extrañamente ya no le era tan difícil mirarlo. - Salgamos mañana.- Se armó de valor aunque temía por la respuesta, que lo más seguro era que iba a escuchar un rotundo no. Ya que él menor le había dicho que sería lento. Pero no definió bien esa palabra.
- Claro.- Dijo sin pensarlo. - A dónde?
- Entiendo si dices que no... ¿Qué? - Se sorprendió. Kyungsoo rodó los ojos divertido y sacudió sus manos cerca del rostro del mayor salpicando agua.- Hey!- Se quejó divertido.- A dónde te gustaría ir? Yo soy malo escogiendo lugares.
- Eso lo sé.- Estaba totalmente de acuerdo con eso.- Ven por mi a las 10.- Jongin lo siguió a la sala. Quizás debería irse pero no quería. Pero ¿y si estaba siendo una molestia para el menor? Un mohín se formó en sus labios mientras debatía en sus pensamientos seriamente.- Quieres ver una película?
- Eh, estás seguro? No estoy siendo una molestia para ti? Dijiste que querías leer ese libro nuevo que recién compraste y yo aquí quitándote el...
- Shtt, hablas mucho.-Sonrió descubriendo los labios del mayor quien hizo un puchero. - No me eres una molestia. Así que está bien pero, si quieres irte lo entien...
- No, si quiero ver la película. - Dijo tomando asiento infantilmente.
*****
Chanyeol terminaba de hablar con su madre, diciéndole que se quedaría en casa de su amigo. Una pequeña mentirita piadosa. Baekhyun se había equivocado al decir que su hyung no era un mentiroso pero bueno era para estar con él, así que no cuenta.
El menor le miraba desde el sillón de la sala donde se encontraban. Recordaba esa cabaña. Cuando eran más pequeños iban ahí seguido. Claro eso antes de que el castaño se fuera a New York. El rubio tenía una toalla blanca sobre la cabeza y vestía una bata de baño, recién se había duchado por tercera vez en el día. Chanyeol lo miró y se acercó a él dejando su móvil en la pequeña mesa en el centro de la sala.
- Te ayudo. - Dijo secando el cabello del menor lentamente. Baekhyun lo miraba silenciosamente hasta que el mayor centro su mirada en él.
Llevó una de sus manos hacia el rostro del más alto acariciando suavemente su mejilla mientras que con su dedo delineada los suaves labios del mayor.
- Dijiste que tenías algo que decirme. - Le recordó susurrando dejando caer su mano. Chanyeol asintió.- Qué es?
- Papá quiere que me case... Me pidió que hoy le acompañara a una junta con unos inversionistas. Pero no fue así, sino que fui a una cita a ciegas sin saberlo.
- Casarte?- Repitió, Chanyeol asintió.- Con...
- No sabía quién era la chica hasta que la vi. Ella es Dara mi ex novia y...
- Aún la quieres? - Fue lo único que preguntó. El silencio se hizo presente. Baekhyun bajó la mirada y apretó los puños con fuerza.- Entiendo.- su voz tembló.
- No voy a mentirte. No a ti. Baek mírame. - Levantó su mentón encontrándose con esos hermosos ojos del menor a punto del llanto.- Escucha atentamente lo que voy a decir por favor... Dara fue una persona muy especial para mí, con quien compartí momentos únicos y verla me hizo recordarlos y también...
- No lo digas.- Hipeó no pudiendo retener más esas lagrimas que se habían acumulado en sus orbes. No quería escuchar. Chanyeol acunó el rostro del menor entre sus manos mirando ese rostro triste bañado en lágrimas y se sintió miserable.
- Tú y tu mala costumbre de no dejarme terminar.- Sonrió. - Me hizo recordarlos y comprender que prefiero mil veces los momentos que paso contigo, fue por eso que salí de esa casa. Sabiendo que eso molestaría a papá. Por eso te busqué y me dolió verte así en la casa de Yifan. Los celos no son buenos compañeros. Lo siento.- Acarició su delicado rostro tan perfecto limpiando esas lagrimas que casi siempre le adornaban y las cuales Chanyeol creía que no iban con ese rostro.
- Hyungnim. - Sollozó. - No quiero que me dejes.
- Y yo no quiero hacerlo.- Se acercó más al cuerpo del menor abrazándolo por la cintura. Baekhyun apoyó su cabeza en el pecho del más alto. Escuchaba perfectamente el latir de su corazón y era cálido. - Así que no te preocupes por eso.
- Lo prometes? - Lo miró desde abajo. Chanyeol sonrió y asintió entrelazando sus manos.- Odio a appa.- Dijo Baekhyun puchereando. Chanyeol se sorprendió, no por lo que había dicho sino porque parecía que no hubiese llorado o que hubiese estado triste. Se veía realmente molesto.
- Por qué? - El ceño del menor se frunció aún más. - Baek?
- Porque por su culpa no tuvimos nuestra cita. Además te llevó a esa casa y quiere casarte y tú eres mío, de nadie más.- Lo abrazó fuertemente como si alguien justo en ese momento quisiera arrebatárselo. Chanyeol sonrió divertido. Amaba esa faceta del menor, era una de las que más le gustaba. Porque sí, por más estresante que sea, Chanyeol amaba ese lado tan infantil del menor como cuando imagina que es el príncipe de los ponicornios. Ese lado tan inocente que muestra cuando pregunta las cosas. Aunque sólo lo haga para provocarlo. Su lado caprichoso, de que siempre tiene que ser lo que él diga. Y por supuesto, ese lado posesivo y celoso, que siempre sale a relucir. Sí, amaba cada faceta de su pequeño rubio. Sus berrinches, sus risas, sus enojos. Amaba todo de él. Amaba a su pequeño hermano. Esa era la duda más grande que le había estado rondando las últimas semanas. Cuando no comprendía, el porqué le dolía verlo con alguien más, el porqué le molestaba que alguien más se fijará en el, el porqué le era tan indispensable aunque sea mirarlo, el porqué ocupaba cada pensamiento de su mente, el porqué sólo quería tenerlo a su lado. Eran tantas cosas que le confundían y complicaba la vida. Pero ya había encontrado respuesta a esas preguntas. Y sí, se había enamorado de su pequeño y rubio hermano.
- Y te voy a poner un cartel que diga "Propiedad de Baekhyun. No lo mires porque te sacaré los ojos" Sí eso haré y...
Chanyeol tomo su rostro entre sus manos repentinamente sorprendiendo al menor.
- Yeollie. ..?
- Te amo.-Besó sus labios suavemente...
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- Helado?- Lo miró incrédulo. Jongdae sólo sonrió. - Estás local, está haciendo frío. -- Dijo en tono divertido. El mayor asintió metiéndose en la cama junto al cobrizo quien cogió el pote de helado napolitano.
- Es más delicioso.- Dijo clavando la cuchara para ofrecerle al menor quien le miró raro. Y sí que lo era. Pero bueno era Chen, no se podía esperar otra cosa. Xiumin aceptó el bocado del helado sintiendo ese frío intenso helar su boca, lo que le causó un leve dolor de cabeza.- Es delicioso como tu baozi.- Lo miró insinuante.
- Realmente estás loco.- Se escondió entre las sábanas.- Tengo frío.
- No te preocupes, yo puedo calentarte. - Susurró en su oído. Minseok se sonrojó al sentir la mano del mayor colándose bajo su ropa mientras sonreía descaradamente. - Qué dices?
- C-Chennie ba-basta. Tu omma está en la casa.- Se estremeció avergonzándose porque estaba disfrutando de las caricias que el mayor le regalaba. Jongdae dejó el pote de helado a un lado y se subió encima de su novio.- Chennie qué haces... tu omm. ..
Fue callado violentamente por un beso salvaje al cual no se negó a corresponder de la misma forma...
*****
Las mejillas del menor se tiñeron de un hermoso color carmín al momento en que sus labios se separaron ¿qué había dicho? "te amo" ¿había escuchado mal? Chanyeol al ver el rostro confundido del menor sonrió.
- Vayamos arriba, comienza a hacer más frio. - Dijo cargando al menor como princesa. Baekhyun seguía algo confundido. No comprendía bien el significado de esa palabra, pero el haberla escuchado de labios del castaño hacia estremecer su interior y sentirse feliz de ello. Miró tranquilo al más alto mientras este le depositaba en la cama.- Ocurre algo Baek?
- Ya no me quieres?-Preguntó temeroso. Chanyeol se sorprendió por la pregunta. - Hyungnim?
- Por qué piensas eso Baek?-Se sentó a su costado mirándolo. - Baekhyunnie?
- Tú, tú dijiste "te amo "- Dijo sintiéndose un poco avergonzado. Chanyeol frunció los labios sintiendo se de la misma forma. No lo había pensado. Lo dijo porque lo sintió al momento, solo salió de sus labios al verlo a él, a su pequeño hermano.- Ya no me quieres?
- No es eso baekkie. - Acomodo el mechón rebelde de tras la oreja del menor.- A ti, a ti yo puedo quererte y amarte a la misma vez. No cambia lo que por ti siento, al contrario, lo hace más fuerte.- Regalo una caricia sobre su mejilla. Baekhyun cerró los ojos disfrutando del tacto.
- Y yo... yo te amo?- Ló miro a los ojos con ese signo de interrogación. Chanyeol no podía con eso, su hermano era tan lindo siendo él.- Yo puedo amarte?
- Solo si tu corazón lo siente. No es algo que puedas decidir hacer o no, es algo que simplemente se siente.- Explicó pacientemente acariciando el cabello sedoso y suave del rubio quien sentía sus ojos más pesados. – Duerme, mañana será un largo día.- Dijo poniéndose de pie para ir a la siguiente habitación. Baekhyun tomó su mano.
- Duerme conmigo. .. está lloviendo y los truenos me dan miedo, hyungnim. - Hizo un mohín, siempre lograba convencerlo de esa forma. El castaño asintió acostándose a su lado.
...
....
Baekhyun se removió entre las sabanas de esa amplia cama. Era grande y espaciosa. Abrió los ojos encontrándose solo en esa gran habitación. Un inmenso vacío se sintió en su interior. Bajó corriendo de la cama saliendo de la misma forma de la habitación. Frente a él se encontraba una inmensa escalera, la cual no parecía tener fin alguno. Empezó a descender por ella sintiendo que realmente no llegaría ningún lado. Estaba por rendirse pero justo pudo ver una puerta la cual se abría dando paso a su hermano.
- Hyung!- Corrió con todas sus fuerzas hacia él y cuando estuvo a punto de llegar a él se paró en seco al ver a quien el mayor tomaba de la mano y sonreía felizmente. Ese vacío en su interior se sentía cada vez más grande y el dolor crecía abrumándolo. - Yeollie? - Habló pero no parecía ser escuchado.
El castaño tomo a la peliplata de la cintura y unió sus labios con los ajenos. Los ojos del pequeño rubio se abrieron a más no poder al ver esa imagen. Sus padres entraron a la habitación, ellos también sonreían. Se veían felices. Se acercaron a su hermano y a esa chica de cabello plateado abrazando a ambos uno por uno.
- Felicidades has hecho una buena elección.- Dijo Leeteuk sonriente.- Dara será una buena esposa, espero sean muy felices
- Qué?- De pronto se vio rodeado de demasiada gente, las cuales vestían elegantes y sonreían felices. Miró por todos lados buscando a su hermano, pero no lograba ubicarlo. Vio a sus amigos de infancia, y los que recién había conocido. Taehyung estaba ahí, al lado del pelinegro que siempre le miraba con desdén. Intentó acercarse a ellos pero chocó con alguien, al ver de quién se trataba intentó sonreír. Yifan lo miró y sonrió.
- Por qué esa cara Baekhyunnie? Deberías de estar feliz, tu hermano por fin se casa.- Dijo emocionado.
- Qué?- Miró al frente cuando Yifan se hizo a un lado. Ahí estaba él. Sí, ahí estaba su hermano con una amplia sonrisa mirándolo a él. Lo esperaba con los brazos abiertos, corrió hacia él con todas sus fuerzas. Pero al intentar tocarlo Chanyeol corrió hacia otra dirección. Miró desconcertado a su hermano sintiendo un fuerte dolor en su pecho al ver a quien abrazaba, a quien miraba con amor, era ella, esa chica peliplata. Esto no podía estar pasando, no.
Todo era tan difícil de asimilar. Chanyeol estaba a metros de él parado frente a un altar junto a esa chica tomados de las manos mirándose con amor, y eso dolía.
Intentó acercarse nuevamente pero le era imposible. Sus piernas pesaban y no le respondían, dolían tanto como su pecho. Sus ojos se aguaron al ver lo que pasaba. Por qué Kyungsoo parecía feliz? Por qué Xiumin lo miraba como si no lo conociera?
- Acepto, ella es la única persona a la que he amado siempre.- Escuchó la voz de su hermano y fue ahí que no pudo más, sus labios uniéndose con los de la peliplata reafirmando esas dolorosas palabras. Todo se derrumbaba ante él. Todo se iba volviendo oscuro. Los rostros desaparecían, los aplausos y felicitaciones resonaban en sus oídos, causándole mas dolor, y de pronto estaba el parado frente suyo.
- Hyungnim!?- Lo miró con los ojos llenos de lágrimas. Chanyeol lo miró y sonrió hincándose frente a él, quien estaba de rodillas derrumbado en el frio piso. Sintió esa fría caricia, la cual parecía cortarle la piel, no era cálida como siempre.- Yeollie?
- Tengo que irme Baekhyunnie. - Dijo en apenas un susurro, Baekhyun se alarmó. - Esto nunca estuvo bien, solo fue algo que no debió pasar. Me voy.
- No lo.- Su lengua se había congelado, No podía moverse. Esa horrible sensación de vacío lo inundaba.
- Hasta nunca Baekhyunnie. - Besó sus labios cortamente. Eso era doloroso, sentir sus labios frios, no eran los de siempre. Las lágrimas salieron de sus ojos al verlo levantarse y alejarse de él lentamente, quería levantarse y correr tras de él y detenerlo pero simplemente no podía. No podía mover su boca, ni siquiera se había dado cuenta de que no parecía poder respirar. No podía, no podía hacer nada.
Todo en él estaba paralizado y la imagen del mayor se iba desvaneciendo poco a poco a la distancia.
-No, no...- Las lágrimas corrían por sus frías mejillas.- No te vayas!- Gritó con todas sus fuerzas.