-Kisa-san, ya paso una semana, ¿hasta cuándo piensas seguir sin hablarme? -suspiro decepcionado, dispuesto a marcharse pues ya tenía casi veinte minutos tocando la puerta sin recibir respuesta y ya era más de lo que su orgullo y dignidad podían soportar considerando que los últimos días había sido lo mismo -diablos -susurro dando la vuelta dispuesto a marcharse cuando la puerta se abrió
Chiaki y Ritsu tenían razón no podía seguir molesto para siempre y mucho menos si vivían juntos, la última semana había sido incómoda entre las lindas miradas de cachorro abandonado que le dirigía su primo y las de sospecha de su madre; y cuando la señora Kisa preguntó la patética excusa que tuvo que inventar, aun no comprendía como es que le había creído...en fin, tarde o temprano tendría que hablarle ¿cierto?
-¿qué es lo que quieres Yukina? -preguntó sin aparente interés recargado en la puerta y con los brazos cruzados, aún seguía sin mirarlo
Kou no disimulo la traviesa sonrisa que asomo en sus labios, su pequeño primo era muy lindo sobre todo cuando tomaba actitudes infantiles como esa, sintió el impulso de apretar sus mejillas sólo para mirar su reacción
-¡oye!!! -se quejó el menor y golpeo a Kou en la cabeza, el artista no resistió el impulso -ashh, si eso es todo lo que querías
-¡no espera! -lo detuvo del brazo antes de que entrara de nuevo al cuarto -lo siento es sólo que no pude evitarlo, te veías muy lindo y adorable -sonrió disculpándose
-no parece que te arrepientas en serio -reprocho de una manera aún más infantil
-porque no lo hago -explico honestamente
-¿siempre eres tan sincero?
-creó que sólo digo lo que pienso -comenzó a acercarse con sutileza -y pienso que ahora te ves incluso más lindo, nervioso y sonrojado
Shouta por fin noto que su primo estaba demasiado cerca, comenzó a retroceder por instinto
-¿quién esta...nervioso? -sus palabras no eran lo suficientemente convincentes, no cuando sus mejillas ardían y seguía retrocediendo a cada paso que daba Yukina hasta que ambos estuvieron dentro del cuarto, Kou cerró la puerta tras de si
-¿Yukina? -su voz insegura fue a penas un susurro
-tranquilo Kisa-san, solo quiero hablar contigo -ambos estaban sentados en la cama, Kou tomo las manos del menor entre las suyas -yo sé que ahora no te caigo muy bien Kisa-san y como ya no quieres ser mi musa, me gustaría…. -se sonrojo aún más, ¿que era ese aire cálido?, claro el aliento de Yukina chocando contra sus labios -que fuéramos amigos
Fue extraño, ¿cómo es que por un segundo imagino otra cosa? Tal vez por la cercanía de sus cuerpos o porque el ambiente extraño que se había tornado desde que le dijo que era lindo, sin embargo lo que más lo confundía era que con el alivio sintió una especie de decepción, diminuta, si la comparaba con lo que sintió cuando él y senpai fueron interrumpidos pero aun así ahí estaba, como una leve punzada ¿solo amigos?. Aunque claro eran solo tonterías de su imaginación, es decir su madre tan religiosa desde que murió su padre ni si quiera sabía que sentía atracción por un chico, no podía imaginar el escándalo que supondría el que ese chico fuera su primo, aunque claro eso era algo imposible.
-está bien -respondió aun perdido en sus pensamientos
-¡gracias musa! -se abalanzo hacia él abrazándolo y provocando que ambos cayeran en la cama, Yukina encima de Shouta, sonrió con ternura y comenzó a acariciar sus cabellos en silencio
Kisa permanecía quieto, sin decir nada, nunca habían estado tan cerca el calor que emitía el cuerpo de Kou, era agradable y pudo notar al fin lo atractivo que era su primo, no es que no se haya dado cuenta antes es solo que no le había prestado la suficiente atención, siempre pensando en senpai, siempre sumergido en la ilusión de su primer amor no correspondido; el más pequeño dio un ligero salto al escuchar el sonido del timbre y empujo levemente al mayor para quitarlo de encima.
-jajajaja, parece que nos interrumpieron, bueno Kisa-san no te preocupes yo abro
-¿esperas a alguien? -pregunto aun aturdido
-de hecho si, quede hoy con Ritsu -Kisa le dirigió una mirada extraña -como tú no me hablabas y aun no conozco bien la ciudad le pedí que fuera mi guía -como respuesta solo obtuvo un asentimiento antes de salir de la habitación
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-pensé que no vendrías -fue lo primero que dijo al abrir la puerta
-¿Por qué? -pregunto el castaño después de saludar a Kou
-tienes un hermano muy sobreprotector
-yo jamás digo nada cuando sale con una de sus amigas -Yukina cerro la puerta y comenzaron a caminar sin rumbo fijo -además ahora son buenos amigo, ¿no? -en sus labios había una sonrisa juguetona
-jajajajja si, debiste haber visto ayer su cara cuando el profesor de Literatura nos puso en el mismo equipo, fue divertido hasta que también incluyeron a Hatori, uno más de mis admiradores
-¿no te agrada Hatori-san?
-a él no le agrada que hable con Chiaki -sonrió
Ambos siguieron caminando hasta llegar a una cafetería donde, el artista le invito un postre a Ritsu el cual aceptó gustoso, amaba el chocolate.
-me gustaría que tocaras para mi algún día -comento Yukina sonriente al mirar como el castaño hablaba de violín
-tal vez, pero primero debo encontrar un nuevo compañero para practicar
-perdiste l tuyo
-algo así, era un chico del club de música de la escuela, se llama Ryo pero se mudó hace un mes -explico
-¿Por qué no alguien más del club?
-no…pertenezco a el -dijo algo avergonzado -casi no me gusta tocar en público antes no solía ponerme tan nervioso pero ahora no se…
-¿y es necesario que sea otro violinista?
-¿Quién?
-tu nuevo compañero para ensayar, tengo un amigo que toca el piano asiste a la misma escuela que nosotros y también busca alguien con quien tocar, su nombre es Yurei
-no creo que sea una muy buena idea -dijo un poco inseguro
-vamos ¿Qué puedes perder?
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-al fin llegas -esa frase y una mirada seria fue lo uno con lo que lo recibió -pareces muy cómodo en compañía de ese sujeto
-Yukina es mi amigo, Nii-san ya habíamos quedado en que por eso y ser el primo de Kisa, no lo ibas a molestar
Ya había arreglado lo sucedido en el parque de diversiones con su hermano, ambos aceptaron parte de la culpa y llagaron a la conclusión de que todos habían actuado como idiotas, un fuerte abrazo y un ligero, tan imperceptible rose de sus labios con los del mayor(tan fugaz que aun duba si era o no un producto de su imaginación ) habían dado por olvidado el asunto, las cosas parecían relajarse y volver poco a poco a la normalidad, excepto por el hecho de que a Masamune no le agradaba Yukina y, el sentimiento era mutuo, pero es que a veces su hermano podía ser tan infantil.
-¿y ahora lo defiendes? -como en estos momentos. ¿Quién era el que se comportaba como un niño?
-no defiendo a nadie Nii-san, es solo que Yukina me agrada es mi amigo, no voy a dejar de hablarle solo porque a ti no te cae bien, ¡ni siquiera lo conoces!
-y no me interesa hacerlo, espera -sintió la vibración del celular que indicaba una llamada que se apresuró en contestar -hola…si…¿ya estás aquí?, salgo enseguida…descuida yo sé que luces tan hermosa como siempre -colgó -era Akane, voy a salir con ella
-¿es tu novia? -pregunto indiferente
-aun no -fue lo único que obtuvo como respuesta antes de que su hermano saliera
Ritsu apretó los puños y subió a su cuarto enojado ¿Por qué él no podía reclamar?, ¿Por qué no podía decirle a Masamune que no lo quería cerca de esa zorra ni de ninguna otra?, su hermano era injusto, bien otra batalla perdida Nii-san no dijo ‘’no’’, si no; ‘’aun no’’, y eso solo significaba una cosa.
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Al día siguiente en la escuela, durante el descanso:
Frustrado era la palabra perfecta para describir como se sentía en ese momento, Chinatsu ya había logrado rebasar el límite de su paciencia, él había intentado explicarle de forma lógica incluso amable a la chica que su relación era algo que solo existía en su imanación, pero esta simplemente no lo comprendía o más bien no le daba la gana hacerlo, y el ya no podía tolerar mas esta situación, se había esforzado por no ser cruel y evitar lastimar sus sentimientos pero, al diablo con ellos ¿acaso la chica pensó en los de él cuándo técnicamente lo obligo a ser su novio?, ¡No!, y el también dejaría de hacerlo estaba decidido, terminaría con esa tontería de ser el novio imaginario de Chinatsu en cuanto antes, ni siquiera podía tener conversaciones agradables con Chiaki y eso era culpa de la castaña, estaba seguro pues lo único que últimamente conversaba con él era de Chinatsu, de la bella pareja que hacían y bla, bla, bla, no era difícil saber quién era la responsable de esa actitud en Chiaki, así como tampoco era difícil saber por qué el pequeño ojiazul había rechazado todas sus invitaciones al principio.
-Chinatsu -casi le grito cuando por fin la encontró la chica sabía que estaba por terminarla y se había estado ocultando todo el día, pero ya era suficiente basta de juegos
-¿si cariño? -sonrió con nerviosismo al notar que no podía seguir huyendo
-basta de tonterías, puedes pedirles a tus amigas que se marchen -su tono frio, serio, no significaba nada bueno
-amor no veo porque tengan que irse ellas ya saben que somos novios -utilizo es excusa como último recurso, eso era lo que la había salvado hasta ahora
-bien si así lo prefieres -suspiro resignado, la verdad es que él no quería público, prefería la discreción como si realmente hubieran tenido una relación y simplemente esto terminara pero Chinatsu no se lo estaba poniendo fácil -quiero que te dejes de esa tontería de que tú y yo somos novios
-amor, ¿de qué…
-¡basta ya Chinatsu! -el tono de su voz subió más de lo necesario pero ya estaba harto, sin darse cuenta atrajo varias miradas hacia ellos, en especial una azul que lo miraba con cierta tristeza y sorpresa -lo lamento pero, entiende no soy tu novio, yo no te quiero así -bajo su tono e intento abrazarla pero ella lo detuvo colocando los brazos en su pecho
-esto no se quedara así….
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Cuando Yukina le dijo que hoy le presentaría a su amigo que tocaba el piano Ritsu no estaba muy seguro, era tímido para tocar en frente de los demás y no quería hacerlo frente a un desconocido, estuvo a punto de rechazar la propuesta de Kou pero no lo hizo porque pensándolo bien debía ensayar si quería ganar el primer premio del concurso en el cual se había inscrito y eso también significaba tocar ante extraños, después de todo ensayar con alguien mas no era tan mala idea. Pero definitivamente nunca se imaginó que Yurei fuera el chico que ahora se encontraba frente a él sonriendo de manera amable, su cabello era negro y brillante como el ala de un cuervo, ligeramente largo algunos mechones caían rebeldemente por su frente, vestido completamente de negro, su blanca piel parecía más pálida de lo normal, pero lo que más llamo la atención de Ritsu fueron sus ojos, de un profundo azul eléctrico que le miraban de forma coqueta.
-mucho gusto soy Yurei -el mayor hizo una reverencia para después tomar las manos de Ritsu entre las suyas -eres más lindo de lo que Yukina dijo -no pudo evitar sonrojarse, sobre todo cuando Yurei se había acercado tanto a su rostro
-¡Takano Ritsu! -correspondió el saludo algo apenado y apartándose del mayor
-Muy bien Rii-chan veo que traes tu violín, ¿Qué te parece si ensayamos en mi casa? -fue tan rápido el castaño solo asintió sin poner atención realmente más concentrado en la forma en la que lo había llamado.
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Estaba recargado en la pared, justo al lado de la entrada del dojo, no lo había visto últimamente y estaba más que claro que lo evitaba. Dejo salir el humo de cigarro que se concentraba en sus pulmones sin apartar la mirada de la calle, el llegaría en cualquier momento, esta vez cambiaría su estrategia, no esperaría hasta el final del entrenamiento, no le daría el tiempo para huir de nuevo; Esta vez Masamune se había anticipado a sus movimientos, sabía que hoy llegaría más temprano que sus otros compañeros porque quería tiempo para entrenar solo. Sonrió tirando el cigarrillo y pisándolo para apagarlo, lo vio acercarse a lo lejos y se metió al dojo antes de que Kisa lo viera, si el pequeño quería entrenar durante esa media hora podía irse olvidando de esa idea.
-esta vez no te iras sin hablar conmigo -tan pronto entro un par de brazos fuertes lo sujetaron por la cintura pegando su cuerpo al pecho de quien se encontraba de espaldas, el aliento cálido de este susurro tan cerca de su cuello que le estremeció, reconoció su voz de inmediato.
-¿senpai? -apenas pronuncio, tímidamente intento apartarse del mayor pero este no se lo permitió
-¿de qué huyes Kisa?, ¿de mí?
-yo…no…yo no me oculto de nadie senpai -bajo su rostro dejando de luchar por apartarse del cálido pecho de Takano
-¿y se puede saber porque corres cada vez que estoy cerca? -lo soltó solo para tomarlo de los hombros y girarlo para estar de frente
-deben ser ideas tuyas senpai, yo solo me voy rápido porque quiero entrar tanto como pueda los torneos están cerc…
-Shouta por favor, ¿realmente tú crees que es eso? -acorralo al menor contra la pared poniendo sus manos a cada lado de su cabeza -tenemos algo de qué hablar
-¿quieres que sigamos entrenando juntos? -fue lo único que se le ocurrió decir, sabía que su senpai no se refería a eso, pero…
-también pero, quería hablar de lo que paso en el parque de diversiones antes de que llegara tu primo a arruinarlo todo
-no sé a qué te… -sentía sus mejillas arder, sabía lo que probablemente venia pero su cerebro no le daba ideas para salir de esa situación, tal vez porque, el de verdad quería que pasara
-¡Takano Masamune, aquí estas! -el ojimiel rodo sus ojos en clara señal de fastidio, creyó que había sido claro con esa chica, solo acepto salir con ella porque quería dejarle en claro que solo podían ser amigos, pero al parecer no había comprendido bien el mensaje
-hablaremos luego Kisa -acaricio su mejilla antes de irse.
Shouta se quedó mirando por unos minutos la puerta por donde se había ido el pelinegro, aún tenía su mano donde anteriormente había estado la de Takano, no era justo. Durante el resto del día Kisa no logro concentrarse en su entrenamiento hacia las cosas más por costumbre que otra cosa, ganando así varias reprimendas por parte de su sensei.
-Kisa-kun -la amable voz del sensei lo saco de sus pensamientos -últimamente estas muy distraído, así que pensé que lo mejor sería cambiarte de compañero con alguien con quien te acoples más así que, Takano-san desde mañana serás el nuevo compañero de entrenamiento de Kisa
Masamune solo asintió divertido ante las palabras de su profesor de artes marciales y la roja cara de incredulidad de Shouta, que por su parte solo acepto con breve movimiento de cabeza, ¿Cómo se supone que se iba a concentrar más si entrenaba con Takano senpai, cuando él era la causa de su distracción?
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-Chiaki, ¿de verdad no piensas hablarme? -el pequeño ojiazul siguió caminando sin responder, ni siquiera se giraba para verlo y eso comenzaba exasperar a Hatori -de acuerdo, no me dejas otra opción -lo tomo de la mano y lo halo hacia abrazándolo fuertemente de forma que Chiaki no podía zafarse por más que lo intentara
-¿Qué es lo que quieres Hatori-san? -el mayor sintió algo extraño, tristeza, no sabía que había dolido más, el que le llamara tan seriamente, su voz fría y molesta, oh el hecho de que había caminada casi por 10 minutos detrás de él siendo ignorando por completo
-¿ya no soy Tori? -intento sonreír levanto el rostro de Chiaki para verlo a los ojos, pero este solo desvió su mirada azul con indiferencia -realmente me la pase bien contigo estos días, ¿no significaron nada para ti?
Yoshino suspiro y cerró los ojos por unos segundos recordando que en los últimos días la (antes de que terminara con Chinatsu) había pasado mucho tiempo con Tori dentro y fuera de la escuela bajo el pretexto de que el mayor quería compensarlo por la vieja promesa que no había podido cumplir, recordó que se sentía bien estar a su lado, era extraño se sentía protegido y al mismo tiempo tenia miedo, pues se sentía realmente cómodo a su lado incluso a veces se perdía en su mirada tan azul como la propia y es cuando sentía ese calor crecer dentro de él, lo asustaba, Chiaki tenía miedo de lastimar a Chinatsu.
-me divertí mucho pero, Tori me decepciono -aun sin mirarlo, su voz se tornó melancólica
-si hice algo que te incomodara, lo lamento -estaba sinceramente apenado, pues durante esos días había aprovechado cada oportunidad que tenia para acercarse más de lo necesario a Chiaki, y acariciar su pelo o sus mejilla ‘’sin darse cuenta``
-no se trata de eso tu -se separó de él y viéndolo directamente a los ojos le reclamo con renovado enfado -¡lastimaste a Onee-san!
-así que solo se trata de eso -le restó importancia y sonrió con cierta tranquilidad, grave erro
-no lo digas como si no importara, Chinatsu te quiere mucho y tú solo jugaste con ella, eres muy cruel Tori, dejarla así enfrente de todos
-escucha Chiaki hay muchas cosas que tú no sabes -se sobo la cien, tratando de explicarse sin hacerlo enojar más -a mi tu hermana no me gusta de esa manera, hay otra persona que….
-lo sé, Onee-san me lo dijo, hay alguien que quiere apartarte de su lado -se cruzó de brazos y continuo caminando hacia su casa con el mayor detrás de el -no se quien sea esa persona, Chinatsu no me quiso decir, pero estoy seguro que no es tan linda como Chinatsu y no te quiere tanto como ella
-¿Cómo lo sabes tal vez conoces a esa persona mejor de lo que crees?
-no, y tampoco me interesa hacerlo, quien quiera que sea no es mejor para ti que mi hermana -sintió algo raro al decir eso pero decidió no darle importancia -lo siento Hatori-san, pero yo no puedo ser amigo de alguien que jugo así con los sentimientos de mi hermana -sin decir más se apartó del mayor y hecho a correr rápidamente a su casa que ya estaba cerca, esta vez Hatori no lo pudo detener.
Ciertamente le sorprendió esa actitud en Yoshino, jamás lo había visto tan serio ni molesto, ¿Dónde había quedado el pequeño y lindo despistado que no se había dado cuenta de lo que pasaba a su alrededor?, seguía estando ahí claro, solo que no se daba cuenta de lo que era de verdad importante, como del hecho de que conocía a la persona en cuestión y era muchos más cercana a él de lo que Chiaki creía.
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-gracias por traerme Yurei, me gustó mucho tocar contigo, espero que podamos volver a practicar juntos -se despedía Ritsu que estaba en la entrada de su casa con su nuevo amigo
-gracias a ti la verdad es que nunca había escuchado a una persona tocar tan apasionadamente como tú -se acercó demasiado de nuevo según el criterio de Ritsu y más aún para el criterio de Masamune que observaba molesto por la ventana, siendo cuidadoso de no ser visto -si te parece podemos tocar juntos mañana y el resto de la semana en mi casa, como hoy no habrá nadie que no moleste y así podemos estar mas cómodos -acaricio su mejilla
-te….te veo mañana -se encontraba sumamente nervioso, y no sabía porque así como tampoco sabía la razón de que sus mejillas ardieran en un rojo intenso
-¿debo tomar eso como un sí? -lo detuvo sujetando su mano antes de que pudiera entrar, el castaño solo asintió -te veré mañana después de clases, estoy ansioso por escucharte de nuevo -se acercó él e hizo algo que en definitiva el castaño no esperaba, y que enfado de sobremanera a Masamune -buenas noches Ritsu -deposito un suave beso en su mejilla, para después marcharse mientras sonreía y le dedicaba la misma mirada coqueta con que lo observaba después de que lo conoció
-buenas noches Yurei -el castaño toco su mejilla y sonrió inconscientemente, eso había sido tan…tierno
En cuanto entro a su casa se topó con un molesto Masamune que lo miraba de manera extraña.
-¿sucede algo Nii-san? -pregunto sin comprender la actitud del mayor
-¿Quién era el tipo que te trajo? -era tan directo, que a veces Ritsu pensaba que eran celos, nunca había tenido novia o novio, porque estaba enamorado de Masamune eso es algo que sabía desde que tenía 13, pero también había otra razón aunque pequeña (nuca lo había pensado con la seriedad suficiente), a su hermano siempre le caían mal las personas que se acercaban a Ritsu de una manera romántica, chico o chica, y tomaba actitudes frías y se distanciaba de él algo que Ritsu no quería por eso terminaba siempre rechazándolos a todos, no importaba ya estaba enamorado
-¿Yurei?, es solo un amigo, como Ryo se fue, el será mi nuevo compañero para ensayar
-un segundo -Le indico Masamune al sentir su celular vibrar, ¿es que es chica no entendía?
-¿Quién es?
-una amiga
-¿Qué amiga, con la que saliste anteriormente? -Se atrevió a preguntar tímidamente
-descuida, no tiene importancia -esa respuesta hizo enojar por completo al castaño, ¿porque su hermano si podía pedir explicaciones y el no?, ¿Por qué se comportaba así y solo lo confundía?
Subió a su cuarto azotando la puerta para cerrarla, estaba tan enojado pero prefirió pensar en otra cosa, como en lo bien que se la había pasado en la tarde con Yurei o en que pieza tocaría para Yukina, hasta que sin notarlo se quedó dormido.
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15 días después en la escuela:
-por eso no le hablo a Tori -finalizo Chiaki con su explicación cruzado de brazos
-así que por eso lo ignorante por completo en la entrada -señalo Kisa, a lo que el otro solo asintió
-¿Cuál es el momento para rendirse? -pregunto Ritsu de la nada, sus amigos solo lo miraron extrañados -¿si tan solo lo dejas y buscas a alguien más?
-¿hablas de Takano-san? -Chiaki hizo la pregunta casi en un susurro
-creo que solo debes rendirte cuando ya lo has intentado todo, cuando te das cuenta de que él no te va a corresponder, aunque en este caso realmente no has hecho nada por estar a su lado -esa frase iba más para sí mismo, que para Ritsu, pero Kisa no pudo evitar decirla en voz alta
-tal vez pero, Nii-san y yo podríamos ser felices con alguien más -finalizo Ritsu
En otra parte del patio de la escuela:
-¿y si solo estas confundido?, dices que Kisa salvo tu arte, pero ¿y si solo es eso?, lo único que has hecho estos días Yukina es deprimirte y llorar porque Kisa prácticamente te ignora, porque no buscas a alguien más, un chico lindo y tierno que te inspire y que te alegre cada vez que lo vez
-no lo sé Yurei, mi musa es…
-parece que estas obsesionado amigo, en fin piensa en lo que te dije, te veo más tarde tengo algo que hacer -sin más se levantó y se fue a donde se encontraban Ritsu y sus amigos.
Pero sin notarlo dejo a Yukina muy pensativo, la verdad es que si había pensado en alguien estos últimos días además de su musa, cuando Yurei dijo un chico lindo y tierno, de inmediato pensó en Ritsu, Chiaki también le agradaba, incluso le parecía lindo, pero Ritsu era…diferente…
-hola chicos, ¿interrumpo? -pregunto amablemente
-claro que no -al instante Ritsu cambio su expresión melancólica de antes y sonrió ante la presencia del chico, algo que Kisa noto de inmediato -te presento a mis amigos Chiaki Yoshino y Kisa Shouta -señalo a cada uno
-es un placer, soy Akuma Yurei -hizo una breve reverencia -así que tú eres la musa de Yukina, el habla mucho de ti -Kisa se sonrojó de vergüenza mientras sus amigos solo rieron sin disimular -Kisa, ¿puedo hablar contigo?, tengo un mensaje importante de tu primo
Al principio Kisa se negó pero acepto después más que nada por curiosidad, ¿algo que Yukina no quisiera pedirle en persona?, si ese chico aprovechaba cada oportunidad que tenia de estar con él, acepto y luego tomo la mano que Yurei le ofrecía, poniéndose de pie y yéndose con él, despertando aún más su curiosidad, ¿Qué era tan importante que debía ser en privado?
-lo siento pero te mentí -comenzó Yurei
-¿de qué hablas? -pregunto Kisa intrigado
-a mí me gusta Ritsu, y tú eres su mejor amigo así que pensé que podrías ayudarme Kisa; sé que eres muy cercano a él y que entrenas con su hermano, sé que es algo sobreprotector; se enoja cada vez que nos ve juntos y no le gusta que lo lleve hasta su casa, pensé que también podrías ayudarme con Takano
-Ritsu está enamorado de alguien más y… -se interrumpió a sí mismo, recordando las palabras del castaño, y si Ritsu de verdad quería darse por vencido, entonces el…
-ya lo había pensado antes, sé que tú quieres mucho a tu amigo, yo puedo hacerlo feliz, hacer que olvide a esa persona, mis sentimientos no son superficiales, la verdad es que ya llevaba tiempo observando a Ritsu al principio solo me parecía muy lindo, después no dejaba de pensar en el por eso le pedí a Yukina que me lo presentara, aunque él no sabe con exactitud la razón, y ahora que lo conozco más…lo quiero -eso fue difícil para él, le costó trabajo ser sincero con Kisa sobretodo porque jamás había sido del tipo cursi, pero el castaño tenía algo que le fascinaba, simplemente lo fascinaba
Kisa guardo silencio por unos segundos asimilando lo dicho por Yurei, él no quería ser un egoísta pero aun así…debía ser una señal, quería creerlo hacia solo unos instante su amigo estaba hablando de rendirse y buscara a alguien mas y ahora ese alguien aparecía, ¿era una señal, no?, sobre todo porque senpai había estado muy cerca del últimamente, no habían vuelto a hablar de lo del parque de diversiones pero aun así… Shouta sentía que en serio tenía una oportunidad, ¿sería una buen idea?, ayudar a Yurei, Ritsu podría olvidarse de Takano-senpai y ser feliz con Yurei que era muy guapo y le gustaba la música tanto como a su amigo, él podría tener una oportunidad con senpai sin sentirse culpable….de nuevo esa pregunta que parecía no tener respuesta ¿qué era lo correcto?
-no, no lo sé Ritsu es mi mejor amigo así que debo pensarlo -el otro chico sonrió, sabía que al final Shouta accedería.
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Ya era parte de su rutina, desde que conoció a Yurei, Ritsu iba casi todos los días a ensayar con él en su casa, principalmente porque ahí había un gran piano de cola el cual Yurei tocaba magníficamente desde su punto de vista, y porque estaba vacía en las tardes, nadie los molestaba y tampoco los oían lo cual resultaba muy cómodo, sin embargo ese día no contaban con que a pocas calles de llegar a casa de Yurei comenzaría a llover tan fuerte que a pesar de que corrieron tanto como pudieron ambos terminaron empapados.
-eso sí que fue inesperado -comentó el mayor tan pronto entraron a la casa -¿está bien tu violín? -de inmediato Ritsu se secó las manos y saco el instrumento de su estuche para revisarlo
-sí, parece que el estuche lo protegió bien, aunque no puedo meterlo aquí de nuevo la humedad lo arruinaría
-puedes dejarlo aquí si gustas, hasta que compres un estuche nuevo -Ritsu sonrió agradecido y acepto encantado la propuesta, después de todo iba casi todos los días a casa de Yurei -deberíamos quitarnos esta ropa empapada, ¿no crees?, podríamos enfermarnos -comento atento a las reacciones del menor, quien palideció de vergüenza ante la idea
-creo que estaré bien -aunque eso no sirvió de nada tomando en cuenta que después de decir eso comenzó a estornudar
-¿ves?, yo podría prestarte algo de ropa, aunque te quedara muy grande, puedes ducharte y dormir aquí si quieres -propuso tan casual como pudo
Al principio no quería aceptar pero algo en la mirada de Yurei l hizo cambiar de opinión, era cierto podría enfermarse si permanecía con esa ropa mojada y un baño caliente no sonaba mal, pero no se quedaría a dormir, inventaría una excusa o algo, para empezar le avergonzaba y mucho el simple hecho de usa r la ropa de su amigo y ducharse en su casa, además de que hoy sus padres saldrían, no quiera dejar a Nii-san solo, y tampoco quería volver a discutir con él, y si se quedaba a dormir en casa de Yurei definitivamente terminaría peleando con su hermano.
El primero en ducharse fue Ritsu lo hizo tan rápido como pudo y se cambió en el baño, se miró en el espejo, esa ropa realmente le quedaba grande, casi como una pijama, pero era muy cómoda y tenía el aroma de Yurei por todas partes, aunque rápidamente aparto ese extraño pensamiento por unos instantes sintió como si fuera el propio Yurei quien lo cubría, sacudió su cabeza y salió del baño para que su amigo pudiera entrar.
-te queda mejor de lo que esperaba -sonrió y sin decir más entro a ducharse.
Ritsu permanecía sentado en la cama observando el cuarto con atención, no era la primera vez que estaba ahí sin embargo por alguna razón se sentía diferente, estaba sentado en la cama donde dormía Yurei, tenía su ropa puesta, de nuevo sintió su aroma, sacudió su cabeza y escucho el sonido de la ducha, el agua caliente cayendo por todo sus cuerpo…Nii-san…dejo salir un suspiro entrecortado y recordó que había pasado algo similar con su hermano, ¿Cuántas veces no se había contenido de entrar discretamente al baño y mirar a Masamune?, ¿Cuántas veces no había imaginado hacer el con sus manos el recorrido que hacían las gotas de agua al caer por el cuerpo de Nii-san?, divaga en sus pensamientos y no noto que ceso el sonido de la regadera, así como tampoco noto el sonido de la puerta al abrirse, solo volteo por inercia.
-lo siento, pensé que estabas abajo -sí, se encontró con una piel pálida y un cabello de un negro brillante, pero la mirada que se clavaba en la suya no era la miel con la que soñaba si no un bello azul, que le hipnotizaba -¿Ritsu?
-¡perdón! -reacciono por fin y se giró hacia otro lado furiosamente sonrojado. Cuando se dio cuenta de que el chico solo había salido con una pequeña toalla que tapaba únicamente lo necesario y su cuerpo aun mojado escurría igual que su cabello, al verlo se dio cuenta de que era más guapo de lo que creyó en un principio, no fue solo vergüenza lo que sintió.
Yurei sonrió para sus adentros, no había sido exactamente la reacción que esperaba, pero igual le gusto, entro del nuevo al baño y salido casi al instante solo con una playera y unos ajustados boxers, su cabello aun húmedo goteaba en sus hombros dándole una apariencia demasiado sensual, se acercó sigilosamente a la cama y se sentó al lado del castaño, por inercia Ritsu volteo topándose de frente con los zafiros de Yurei, apartando en el acto su verde mirada avergonzada.
-¿sabías que… -lo tomo del mentón e hizo que lo mirara de nuevo -tienes unos ojos hermosos?