ALICE!!! …. –me sorprendí al principio dejando una leve sonrisa en mis labios- Se puede saber por qué no respondes tu celular! … te he estado llamando por media hora y no respondes…- una alterada pelirroja no me dejaba responder - creí que algo te había pasado – su voz dejo de ser de molestia para abrir paso a la preocupación-
Angelique – murmure con un nudo en la garganta al escuchar su voz-
Aquí estoy Ali… dime como te encuentras – esa voz que parece la de un ángel con un tono tranquilizador fue lo que acabo con mis fuerzas haciéndome sollozar-
No… no estoy bien Angelique… - murmure volteándome para ver a mi pequeña pero sin que me diera cuenta ya se había marchado-
Ali… estaré ahí en un par de horas… solo espera ¿sí?... ya mande preparar el Jet privado – sonreí levemente ante sus palabras-
¿Cómo te enteraste? –Pregunte en un susurro-
Stefan no es muy bueno guardando secretos cuando la tranquilidad de su hermana está en juego – su voz parecía más calmada como si tratara de hacerme sentir tranquila… si ese era su objetivo lo estaba logrando… sin darme cuenta deje de sollozar para comenzar a sonreír-
Mi gemelo es un idiota – respondí con una leve risa-
Se preocupa por ti… como yo lo hago – murmuro lo último haciendo que sonriera más –
Hace más de un año que no nos vemos ni hablamos Angelique… - despacio tome asiento para tranquilizarme un poco más-
Pueden pasar 50 años sin que hablemos pero seguiré preocupándome como si no hubiera pasado ni un solo día o minuto… -mi sollozo regreso ahora con más fuerza que el anterior haciendo que con mi mano cubriera mi boca ahogando mi dolor por lo ocurrido con Yuri y mi emoción por lo que dijo Angelique- siempre estaré para ti Alice – murmuro de forma tranquila-
Lo sé – murmure-
Ahora me toca cuidarte como tú me has cuidado siempre – sonreí entre sollozos –
Angelique – murmure-
Dime – suave… esa es la palabra para su tono de voz en este momento–
Gracias – murmure antes de romper en llanto-
Alice… tendrás que contarme que paso exactamente… Stefan solo me dijo que Yuri se fue y tu podrías necesitarme – la preocupación regreso a su voz sin dejar de sonar suave-
Está bien – murmure limpiando mi rostro-
Me despido por un rato Alice… nos vemos en unas horas – asentí aun sabiendo que ella no me veía- conociéndote solo moviste la cabeza en afirmación a lo que dije… verdad – reí un poco –
Podría ser – sonreí leve-
Nos vemos Alice… - sin decir más colgó la llamada, por mi parte respire profundamente varias veces hasta calmar mi sensación de llanto…. Después de un rato logre regresar a la normalidad o lo más normal que podría estar decidí buscar a mi pequeña , me dirigí hasta la sala pero no la encontré… recogí los juguetes que se encontraban tirados ahí , pareciera como si un pequeño huracán hubiera entrado a la mansión exactamente a tirar por todos lados los juguetes de mi pequeña-
Alissa – mencione en un tono alto para que me escuchara- donde estará esa pequeña traviesa – murmure al terminar de recoger los juguetes esparcidos por la sala-
Señorita Alice –por la puerta principal apareció el jefe de mis custodios-
Dime – le mire seria por un momento-
Lo que pasa es que… - me miro con preocupación- la pequeña Alissa… se subió a uno de los arboles más altos del jardín y no quiere bajar – murmuro apenado y notablemente preocupado… suspire levemente y asentí-
Vamos – camine delante de él digiriéndome al jardín encontrándome con un círculo de hombres alrededor del árbol-
Señorita Alice –menciona uno de ellos- estamos aquí preparados por si la pequeña pierde el equilibrio y cae… nosotros serviremos para detener su caída – me miro con decisión y yo le mire un momento para después reír levemente-
Papi – escuche a mi pequeña, al momento de mirar hacia arriba para verla, no te como ella se paraba en la rama del árbol emocionada por verme mientras los custodios estaban abajo mirando preocupados a mi pequeña-
Alissa amor, baja de ahí – me cruce de brazos-
No –un puchero apareció en sus labios haciéndome reír levemente-
¿Por qué no? – Con una mano se sostuvo del tronco del árbol mientras con la otra acariciaba su mentón-
Hmm soy un monito –sonrió mirándome mientras yo reía ante sus palabras-
¿Un monito? - asintió-
Si – dijo con decisión-
Bien, pero los monitos obedecen a sus mamis – sonreí-
Pero tú no eres mi mami – por un momento me hizo borrar mi sonrisa para después sorprenderme con lo siguiente que diría- eres mi papi – me enseño la lengua en forma de juego haciéndome reír más que antes-
Señorita Alice – me habla Oscar –
Dime – dije sin dejar de reír-
¿Qué hacemos ahora? - lo mire un momento encontrándome con su expresión de preocupación-
Pues nada por ahora… nuestro pequeño monito no quiere bajar para ayudar a su papa a hornear unas galletas –siguiendo con mi plan improvisado me gire aparentando que regresaría a la mansión, mire a Oscar un momento guiñándole el ojo en señal que siguiera mi plan-
Oh –murmuro bajo asintiendo leve- entonces este pequeño monito travieso no quiere ayudar… Hmm – coloco su mano en la mejilla y con su dedo índice la rasco levemente – entonces quien le pondrá las chispas de chocolate – suspiro resignado y de manera sutil guiño un ojo al mirarme-
Pues creo que tendremos que hacerlo nosotros, pero entonces las galletas no tendrán tantas chispas ni sabrán tan deliciosas como cuando somos ayudados por un monito travieso – el asintió- bueno chicos, cada quien regrese a sus actividades o no recibirán galletas caseras – mis custodios asintieron siguiéndome el juego mientras comenzaban a dispersarse un poco del árbol, sin alejarse tanto por si sucedía alguna emergencia, por su parte Alissa nos miraba sorprendida-
Papi!!... no es justo… quiero ayudarte – me gire encontrándome con mi pequeña haciendo un puchero muy tierno y abrazada al tronco del árbol sin dejar de mirarme-
¿Por qué no es justo amor? – me hice la desentendida cruzándome de brazos-
Porque quiero ayudarte – me enseño la lengua en forma de juego nuevamente para después bajar rápido pero cuidadosa de árbol-
Entonces vamos – corrió hasta donde me encontraba y la tome entre mis brazos alzándola mientras daba vueltas con ella para después abrazarla un momento ante la mirada de todos los hombres a mi cargo quienes me miraban sonrientes-
Siii… vamos – beso mi nariz para después moverse rápido entre mis brazos buscando bajarse-
Unas carreritas papi – me sonrió y yo asentí-
A la 1… a las 2… y a las… - antes que pudiera decir el número tres ella ya se encontraba corriendo en dirección a la mansión, por mi parte reí levemente para después darle las gracias a mis custodios… después de eso corrí hasta la cocina encontrándome con mi princesa quien ya tenía un delantal que Yuri le compro para que le ayudara en la cocina-
Eres una pequeña tramposa –me cruce de brazos haciendo un puchero mientras mi pequeña princesa negaba riendo-
No –con su pequeño dedito negó para después acercarse a mi extendiendo sus brazos para que la cargara- pero te doy un beso como premio por intentarlo – beso mi nariz- quiero galletas – aplasto mis mejillas haciendo que formara con mis labios una especie de boca de pato… después las jalo logrando que hiciera una cara graciosa causando que riera y yo me sintiera feliz de que mi hija estuviera alegre, siguió haciendo caras graciosas conmigo un rato más hasta que se aburrió dejando como consecuencia que mis mejillas dolieran y estuvieran notablemente rojas- papi parece que tienes Hmm – hizo un puchero tratando de recordar la palabra-
¿Fiebre? – Feliz asintió para después bajarse de mis brazos-
Veo que ya quieres hacer las galletas – asintió acercándose a la mesa-
Tenemos que hacer muchas , hay que darle a mis amigos también – se refería a los hombres que custodian la mansión , asentí ante su petición para después buscar los ingredientes suficientes para hacer esa cantidad de galletas … hace un tiempo había aprendido a hacer galletas debido a que Yuri a veces no quería porque decía que se sentía cansada después de hacerlas… ya que según ella era mucho trabajo hacer galletas para todos, lo cual no entendí ya que si lo hacías de manera de juego lograbas hacer muchas y sin cansarte tanto… suspire ante ese recuerdo y después que encontré todos los ingredientes decidí comenzar a hacerlas con ayuda de mi pequeña-
2 Horas más tarde
Mire el reloj notando que habían pasado dos horas, no me había tardado tanto en hacer las galletas… pero con la ayuda de mi pequeña fue imposible acabar antes, mire a mi hija quien estaba con el cabello cubierto por la harina y su cara otro poco, mientras su ropa tenia chocolate…sonreí levemente para después reír haciendo sonrojar a mi pequeña
No te rías –se cruzó de brazos haciendo un puchero-
Bueno – me aguanto un momento la risa para poder cargarla- vamos a que te bañe – ella asintió recostando su cabecita en mi hombro-
Papi… ¿Cuándo volverá mami? – murmuro entre un bostezo-
No lo sé – murmure con un nudo en la garganta debido al recuerdo de las palabras de Yuri el día que se fue-
Tú no te vayas jamás… por favor papi – se aferró a mí en un brazos mientras yo me detenía antes de subir las escaleras abrazándola fuerte sin lastimarla-
No me iré jamás princesa – bese su cabecita antes de comenzar a sollozar a la vez que mi pequeña sollozaba-
¿Por qué se fue mami?... ¿no nos quería?... la extraño – murmuraba entre sollozos mientras seguía aferrada a mí y yo a ella-
Ella… quería otras cosas amor – murmure tratando de no hacer quedar mal a Yuri… al final es su madre y lo último que quiero es que Alissa la odie cuando sea mayor- ella…esta confundida amor … cuando lo piense mejor volverá con nosotras – dije tratando de sonar segura entre mis sollozos-
¿Lo prometes? – Levemente se separó de mí para mirarme a los ojos… la misma costumbre de su madre cuando quería saber si decía la verdad de algo-
No... No puedo mentirte – murmure sollozando más- no sé si volverá tu mami… pero de lo único que estoy segura es que jamás te dejare amor – ella solo asintió dándome un beso en la nariz y sonrió leve-
Te amo papi –comencé a llorar después de escucharla, la abrace y bese su cabecita aferrándome cada vez más a su pequeño cuerpo tratando de protegerla de todo-
Te amo tanto Alissa – la mire detenidamente… realmente mi pequeña es la viva imagen de ambas… mis ojos azules y el cabello castaño de Yuri… la sonrisa de su madre…la astucia la saco de mi parte… los berrinches de Yuri y su forma ser combinada con la mía… es la perfecta combinación de ambas mi pequeño ángel-
Papi –moví levemente mi cabeza para despejar mi mente de los recuerdos –
Dime - me miro un momento para después acariciar mi mejilla-
Quiero bañarme… me siento Hmm – la mire detenidamente a los ojos… la tristeza fue lo primero que note-
¿Sucia? –Negó mordiendo su labio… otra costumbre heredada de su madre- Hmm ¿pegajosa? – asintió volviendo a abrazarme-
Vamos amor – seguí mi camino hasta el baño de mi habitación donde llene la tina, al ver que tenía la cantidad necesaria de agua para que mi pequeña no corriera peligro en caso de un accidente decidí cerrar la llave para después quitarle la ropa llena de chocolate a mi pequeña, le hice cosquillas tratando de relajar su mente … aún es demasiado pequeña para estas cosas … suspire levemente para seguir después con las cosquillas antes de meterla a la tina… seguido de eso comencé a bañarla con cuidado y atención de que no le fuera a pasar nada malo… desde que nació me volví muy paranoica con esto de cuidarla, por todo quiero cuidarla, incluso recuerdo cuando me quede a dormir en su habitación una semana entera cuando tenía 2 años por que tenía miedo a algo que había fuera de su habitación, coloque más vigilancia en la noche debido a eso… después descubrí que lo que ella miraba era una rama de árbol que estaba muy grande así que decidí solo rebajarla un poco para que no siguiera haciendo “figuras aterradoras” en la pared de mi hija… sonreí ante ese recuerdo-
Papi… ¿Por qué ríes? – Salí de mis pensamientos al escuchar su voz, bese su frente y negué-
Por nada – sonreí para después terminar de bañarla, tome la toalla y la envolví en esta la cargue con cuidado entre mis brazos y la lleve hasta la cama… al llegar la coloque con cuidado, mire hacia un lado y hacia otro buscando su ropa hasta que recordé que no había llevado su ropa… un golpe mental fue lo que me di cuando me percate de eso-
¿Mi ropa? – Di un beso a su frente-
Quédate aquí, no te muevas… iré corriendo por tu ropa y regreso, en serio no te muevas – la mire seriamente-
Si, papi – se acostó en la cama mirando al techo… Salí rápido de la habitación directo hasta la de mi pequeña, busque rápidamente su ropa… regrese en menos de un minuto a mi habitación encontrándome con mi pequeña dormida… sonreí con ternura decidiendo vestirla cuidadosamente, le coloque la ropa y antes de que se me olvidara le puse un pañal… tendrá tres años y sería muy inteligente pero aún tiene accidentes al dormir, termine de vestirla y me levante , lleve la toalla al baño para tenderla y que se secara , regrese para tomar un libro de un pequeño librero que se encuentra en la habitación … al abrir el libro me encontré con una carta que le había hecho a Yuri hace un año, junto a una foto besándonos y otra en la que estábamos abrazadas sonriendo felices…tome la carta comenzando a leerla-
Amor ya tenemos dos años de casadas, dos años de muchos espero… no sabes lo feliz que soy a tu lado a pesar de las discusiones que tenemos, pero siempre logramos recordarnos lo mucho que nos amamos… sé que este amor será para siempre, por siempre serás mi caperucita y yo tu lobito… el regalo más especial que me has dado es el de tener a nuestra pequeña Alissa, quien es la luz de nuestras vidas, es la combinación perfecta de ambas amor… gracias a ella siempre podremos recordar que de nuestro amor nació una hermosa angelita… Yuri eres la persona que he amado por tantos años, que no sabría que hacer sin ti… espero jamás averiguarlo… tu Lobito por siempre estará a tu lado… por siempre te amara más cada día de su vida…
TE AMA ALICE…. TU LOBITO
Comencé a llorar al leer cada palabra, cada oración... abrace la carta junto a las fotos para después abrazar a nuestra hija… cerrando los ojos me quede dormida…
Papi – sentí como jalaban mis mejillas- papi despierta – trate de ahuyentar lo que me estaba jalando las mejillas- papi malo – Alissa tomo mi mano y la mordió fuerte haciéndome gritar un poco por el dolor –
Alissa! – Retire mi mano de su pequeña boca encontrándome con las marcas de sus dientes y pequeñas heridas causadas por la mordida… mi hija por su parte hacia un puchero-
No despertabas –murmuro-
Estaba cansada amor – acaricie su cabello mientras me miraba-
Lloraste – se acercó a mí para acariciar mis mejillas-
Solo un poco – murmure y ella negó tomando el libro con la carta y fotos-
Mami y papi –señalo a cada una en la foto, asentí tratando de no llorar-
Te quiero papi – se acercó más a mi abrazándome sin soltar las fotos mientras yo la abrazaba tratando de no llorar de nuevo-
Te amo Alissa – murmure dando un beso en su mejilla… estuvimos así un rato hasta que escuche como rugía su estómago… reí levemente al escucharlo mientras mi pequeña se sonrojaba por eso-
Tengo hambre –murmuro escondiéndose en mi cuello-
Vamos, te hare algo rico de comer – asintió y la cargue hasta la cocina, al llegar la puse en su silla especial, después de eso prepare la comida para ambas… después de un rato de comer ambas decidimos ir a la sala a tener un maratón de películas, antes de irnos de la cocina prepare unas palomitas al terminar cargue a mi pequeña junto a las palomitas dirigiéndonos hasta la sala donde la deje sentada en el sofá dejando las palomitas al lado de ella, me acerque al mueble que teníamos lleno de películas las cuales se encontraban ordenadas por genero… busque en la fila de películas infantiles y tome unas … las puse en la mesita en medio de la sala para después dejar que mi princesa decidiera cual veríamos primero-
Quiero Hmm esta – señalo la de Shrek- y todas las de esta película – me sonrió mientras comía unas palomitas-
Está bien mi princesa – coloque la película en el reproductor DVD y después me senté junto a mi hija… estuvimos viendo todas las películas de Shrek, incluso los especiales de Navidad y Halloween… al darme cuenta ya era tarde para que estuviera despierta mi princesa … exactamente las 11:30 pm … después que terminara el especial apague la TV y el DVD mientras Alissa bostezaba comenzando a acurrucarse en el sofá, antes que se quedara dormida la tome en brazos llevándola hasta mi habitación donde la deje acostada haciendo una barrera de almohadas alrededor de ella, estaba por regresar a recoger todo el desorden de la sala cuando Oscar apareció por la puerta-
Señorita Alice – sonrió al ver dormir a Alissa – los chicos y yo estamos ordenando todo, usted puede descansar junto a la pequeña – asentí agradecida-
Muchas gracias Oscar, dile a los chicos que muchas gracias – negó levemente-
No hay de que señorita, usted y su familia han sido muy buenos con cada uno de nosotros… y queremos retribuir cuidando más de ustedes ahora que… bueno… no sabemos exactamente que ocurrió con la señorita Yuri y usted, pero tampoco queremos meternos en eso… solo queremos demostrarle que estamos aquí para lo que necesite… que no está sola señorita – sonreí levemente asintiendo-
Gracias Oscar – el asintió y salió, cerré con cuidado la puerta para no hacer ruido y despertarla… tome mi ropa y me dirigí al baño, después de un rato termine de bañarme… más relajada y lista para dormir tome el libro que planeaba leer en la tarde antes de encontrarme con la carta y las fotos las cuales tome y deje en el mueble junto a la cama, comencé mi lectura donde la había dejado… recordando cuando leía junto a Yuri, ella se encontraba justo donde se encuentra dormida nuestra hija… Yuri estaba con su libro leyendo detenidamente con sus lentes que la hacían ver más hermosa de lo que ya es…cuando me encontraba mirándola solo me sonreía y me preguntaba que pasaba… yo le respondía que nada, solo que me encantaba mirarla… después de eso ella bajaba su libro para mirarme detenidamente seguido de eso me preguntaba si se veía sexy a lo que yo respondía que sí... que se veía sexy… se acercaba más colocándose encima de mis piernas para después besarme mientras retiraba mi libro con lentitud dejándolo en el mueble donde deje la carta y las fotos… después de eso le acariciaba la espalda mientras ella seguía besándome hasta que se cansaba y seguía con mi cuello… hundida en mis pensamientos es como me encontraba acompañada de mis ojos cerrados era la manera perfecta que sentir como si fuese real eso … hasta que sentí como alguien se sentaba encima mío de la misma manera que Yuri lo hacía… mi imaginación realmente es muy buena porque se siente muy real… espera … así no es como ella se sentaba, este tipo de sentado… el aroma… es de… abrí mis ojos encontrándome con unos hermosos ojos que ya había visto anteriormente y que podría distinguir entre cualquier par de ojos que amenazaran con ser iguales o parecidos… esos ojos color ámbar-
Angelique –murmure sorprendida a lo que mi ángel pelirrojo sonrió como es su costumbre hacer-
Buenas noches Alice – murmuro muy cerca de mi rostro haciéndome sonrojar… al mirarla detenidamente logre notar que se volvió más hermosa de lo que ya era… Angelique seguía siendo la misma que antes… pero algo en ella la hacía ver más hermosa-