Las llamas ardían devorando todo frente a sus ojos, en definitiva le gustaba el olor que desprendía la madera quemada, pero lo que más le fascinaba era ver como lo que antes era un bello paisaje pasaba a ser un montón de cenizas, monótono y sin valor aparente, tenía envidia puesto que las aquel blanquecino polvo era libre de volar en cuanto el viento soplara. Dio un último vistazo atrás sintiéndose sumamente atado al horrible mundo en el que él mismo se había metido.
- Que lamentable es la vida de algunos - soplo al aire montándose al carro en el que había llegado a ese apartado lugar. Tomo su teléfono marcando un número sin quitar la vista del camino - Sasuke, la evidencia a sido eliminada.
- Excelente Shikamaru, ya puedes regresar - ordenó colgando inmediatamente la llamada.
El Nara suspiro acelerando entre la oscuridad de la noche, tenía cierto remordimiento de lo que acababa de hacer pero ya no había vuelta atrás, después de todo el trabajaba para "Cuervo".
- Me pregunto si algún día seré perdonado - lanzó esta pregunta al aire desapareciendo entre la oscuridad de la noche. Aun tenia algo de humanidad, tenía la ilusión de que todo aquello que había cometido fuera perdonado.
*
*
Un timbre, dos, tres, cuatro. No importaba que tantas veces el Uzumaki llamara al Inuzuka este nunca le contestaba, se estaba volviendo desesperante tener que esperar alguna señal de vida de Kiba, al parecer la Tierra se había tragado a su castaño amigo.
Desde hacía dos horas que se encontraba despierto llamando una y otra vez a aquel que se hacía llamar "su mejor amigo", pero, si en verdad fueran tan buenos amigos, ¿Por qué no le dijo a donde iba?. Su humor era de los mil demonios, no había dormido casi nada en toda la noche, además de que dormir en un sillón no era lo que él definiría como "confortable".
- ¡Naruto! - ese grito lo conocía a la perfección no era necesario abrir su puerta para saber quien era.
- ¡Me tenías muy preocupado! - gritó abriendo la puerta encontrándose con la completa soledad vio a todas las direcciones que sus ojos le permitían pero por más que buscaba a Kiba este no estaba, cerró la puerta desconcertado.
¿Cómo era esto posible?, ¿Se estaba volviendo loco?, estaba completamente seguro de que esa voz le pertenecía a Kiba pero al abrir la puerta no había nadie, tenía miedo, muchas veces había escuchado que cuando escuchas la voz de alguien y ese alguien no esta ahí significa que a esa persona paso a "mejor vida".
Agitó su cabeza en un intento por sacar esos pensamientos de su mente, culpo a la falta de sueño y que no había ingerido ningún alimento en todo este tiempo. Se encamino a la cocina donde tomo un plato y una caja de cereal, pero al tomar la caja una bolsa cayo detrás de la mesa.
- ¿Qué es esto? - se preguntó observando detenidamente el contenido de aquella bolsa. De repente su mano comenzó a temblar recordando de que se trataba.
/Flash Back/
- Naruto toma - Sasuke le había entregado al rubio una bolsa con un poco de droga.
El blondo sonrió forzosamente colocando la aquella bolsa arriba de su mesa, no tenía intención alguna en volver a drogarse, pero la conservaría solo por que así se lo había pedido el azabache.
/End Flash Back/
Tuvo un fuerte impulso por volver a probar aquella sensación que le proporcionaba ese blanquecino polvo, una vez más y eso sería todo, sólo una línea, después de todo el no era adicto a esa sustancia, simplemente quería quitase la tensión que le había ocasionado el Inuzuka.
- "¿Realmente lo vas a hacer?" - su mente daba vueltas intentando encontrar una razón coherente para inhalar esa sustancia - "Lo puedes dejar cuando quieras".
Convencido por esa ultima idea abrió cuidadosamente la bolsa haciendo todo lo que había hecho Sasuke aquella vez, aun que no recordaba mucho. Hizo solo una línea, bastante larga, de aquel elixir, enrollo un billete y por último inhaló lentamente. Podía ver como el polvo desaparecía dejando la madera de su mesa al descubierto.
- "No fue tan malo después de todo" - pensó fijando la vista en la ventana que se encontraba abierta dejando pasar el aire. Sentía sus piernas fallarle, se sentó cuidadosamente en el suelo pegando su cabeza a la pared - "Solo una vez más" - era bastante tentador, el era humano no era inmune a tales encantos...
*
*
Intentó no llamarlo pero fallo, tal vez solo le gustaba el cuerpo que poseía ese hermoso rubio, no le vendría nada mal un buen polvo, luego de eso lo podría dejar después de todo, no era adicto ¿o si?
- "Maldición, ¿Por qué no contestas Naruto?" - por más que marcara el número del blondo este no se dignaba a contestar, como si hubiera desaparecido.
- ¿Con que enamorado? - la voz de Neji siempre molestaba al azabache. No tenía idea de porque pero así era.
- No, solo quiero un buen polvo - rió por lo bajo arrojando su teléfono al suelo.
- Luces un poco molesto - insistió - Creo que te salió mal esta jugada.
Neji sonrió triunfante al ver la reacción del mayor, se notaba que Naruto lo traía vuelto loco y el aprovecharía esta oportunidad para molestar un poco a su jefe.
- ¡Cállate Neji! - gritó haciendo que el castaño se sobresaltara.
- Bueno, bueno, entonces no le gusta - su juego iba a funcionar, tal vez hasta mejor de lo que el creía.
Sasuke rodó los ojos en señal de molestia, el no sentía absolutamente nada por Uzumaki, si es acaso un poco de lástima, aun quería hacer que todo aquel bello blondo se desmoronara pero quería hacerlo lenta y tortuosamente. Sabía el juego que el castaño planeaba y no le gustaba, no se debería de meter con alguien tan peligroso como el.
- Neji - el aludido volteo a ver al Uchiha - ¿Crees que no se que planeas?.
- No se a que te refieres Uchiha - que rápido lo había descubierto, era cierto que no esperaba engañar a alguien tan inteligente como "Cuervo" pero mínimo esperaba tener alguna oportunidad de poseer al chico rubio.
- ¿Quieres a Naruto? - preguntó apretando sus puños.
- Mira Sasuke, tu sabes mi capacidad de sentir, es decir, sólo lo quiero como tu, solamente un buen polvo - la sinceridad en las palabras del castaño hicieron que el azabache riera.
El moreno se levanto de su asiento quedando de frente con su querido amigo, Sasuke conocía a la perfección las capacidades de Neji y entre ellas estaba mentir a la perfección, sus mentiras siempre sonaban convincentes, pero para alguien como él no eran más que estupideces.
-Escúchame bien - tomo la larga cabellera castaña halándola fuertemente - No te acerques a Naruto aun no termino con él - endureció la mirada - Si te acercas a el date por muerto - sonrío sádicamente soltando el agarre.
Camino tranquilamente saliendo por la puerta, era momento de buscar al rubio, era extraño que este no le contestara las llamadas, ¿En verdad se había enamorado de Naruto? O ¿sólo estaba enamorado de la fragilidad del blondo? Odiaba sentir cosas por otras personas que no fuera deseo.
Subió a su auto por el lado del piloto, lo encendió y manejo hasta la salida de su mansión, el departamento de Naruto no estaba lejos de su casa por lo que le tomaría alrededor de 10 minutos. Al llegar a la puerta principal sus ojos se agrandaron, se bajo del auto asombrado.
- ¿Sasuke? - esa voz era tan familiar pero a la vez tan distante.
- Itachi - alcanzo a articular quedando frente a frente con su reflejo...
- No haz cambiado mucho hermanito, nos divertiremos juntos ¿no?
Maldición, sus planes acababan de ser arruinados, su odiado hermano mayor había regresado después de 4 años de no verlo, no le alegraba para nada tener que compartir aire con alguien tan deplorable.